LEYENDA DEL CERRO PINCHANGO

Nos cuentan los señores de la tercera edad

de Río Grande que el Cerro Pinchango es un
volcán de agua que nos brinda su agua para
regar diversas chacras, nos cuentan también
que en el centro de ese cerro misterioso vive
el diablo en un palacio de oro y plata con
rubíes, esmeraldas y perlas preciosas
disfrutando de todo lo que tenga; nuestros
queridos viejitos también nos dicen que
hace muchos años cuando recién el valle de
Río Grande tenía pocos habitantes el diablo
iba suelto montando en un caballo blanco apareciéndole a cualquiera y ofreciendole
el oro y el moro a cambio de su alma, también andaban sueltas personas malas
como brujas y diablillos que en las noches de luna llena subían a la punta del cerro
Pinchango a formar una gran fiesta en honor al diablo su gran líder, dicen también
que toda persona que pasara por ese lugar después de las 6 de la tarde no vivía para
contarlo; afortunadamente todo eso ya pasó.
Hablan también que el Cerro Pinchango es un cerro macho y que está muy
enamorado del cerro que le queda de frente llamado El Colorado y que en las
noches de luna llena los dos se transforman: el Pinchango en un apuesto joven y El
Colorado en una escultural mujer. Los dos a la media noche se encuentran a las
orillas del río Grande donde se entregan a su pasión, los dos rodando cruzan el
caudal del río y llegan hasta los naranjales palpeños donde siguen amándose con
pasión.
Luego de que la noche se va, vuelven a su forma natural y esperan con ansias otra
noche de luna llena.
Bueno; y así va tejiendo más historias sobre todo Río Grande y esto irá pasando de
generación en generación porque este pueblo perdurará para siempre.

¡Viva Río Grande!

Recopilado por Leidy Condori Machaca

2003