You are on page 1of 17
Vv HISTORIA GENERAL Y NATURAL DE LAS INDIAS por Gonzalo Fernindez de Oviedo. [Libro 16: Capitulos 3, 4, 5, 16, 18. Libro 5: Capitulo 1.] Capitulo 3 Que tracta del primero pueblo de chripstianos que ovo en la isla de Borinquen o Sanct Johan, y por qué se mud6 a donde se hizo después. En el tiempo que Johan Ponce gobernaba la isla de Sanct Johan, hizo el primer pueblo que los chripstianos tuvieron en aquella isla a la vanda del Norte, y pasole nombre Caparra, En el qual pueblo hizo una casa de tapias, y andando el tiempo hizo otra de piedra : porque en la verdad, era hombre inclinado a poblar y edificar. Mas este pueblo, por la indisposicién del assiento, fue mal sano y trabajoso, porque estaba entre montes yy cignagas, y las aguas eran acejosas, y no se criaban los nifios. ‘Antes en dexando la leche, adolescian y se tornaban de la color del acije, y hasta la muerte siempre yban de mal en peor, y toda la gente de los chripstianos andaban descoloridos y en- fermos. Estaba este pueblo una legua de la mar, el qual inter valo era todo de ciénagas, y muy trabajoso de traer los basti- ‘mentos a la villa, el fundamento de la qual 0 su principio fue el afio de mill quinientos y nueve. Y estuvo aquella repiiblica 0 villa en pie doce afios poco més o menos, hasta que después se mudé a donde al presente esta, que es una villeta puesta en la mesma bahia donde las naos solfan descargar; pero a (29) cone Tota (lot se oro} (vila de Some Sort emico nie. Capitulo 4° Del pueblo de Guanica, y por qué se despoblé y se hizo otro que se llamé Sotomayor, y del levantamiento y rebelién de los indios, y como mataron la mitad de los chrips- tianos que avia en Ja isla de Sanct Johan, y del esfuerzo y cosas hazaftosas del capitan Diego de Salacar. Entrants el abo de mil y quinientos y diez aos fe a gente que Don Chripstébal de Sotomayor Ilev6 y otros que passaron desta aquesta isla Espafiola a la de Sanct Johan, e hicieron a posblo que se dine Guauica gus ex quand al‘ cabo ds la isla, donde est una bahfa que se cree que es una de las me- Jores que hay en el mundo: y desde alli descubrieron cinco tos de oro a cinco leguas del pueblo de Guanica, llamados Duyey, Horomico, Icau, In y Quintinen. Pero en este pueblo ‘ovo tantos mosquitos que fueron parte muy bastante para lo despoblar, y passose aquella gente y vecinos al Aguada que se dice al huesnorueste, y lamaron a este otro nuevo pucblo ‘© assiento Sotomayor. Y estando en este pueblo, se alzaron los indios de Ia isla un viernes quassi al principio del afio mill y uinientos y once estando los indios y los chripstianos en mu ‘cha paz, y tuvieron 2 ‘para su rebelién. Ellos vieron que los ' derramados por Ia isla, y-assi cada cacique maté los que dellos estaban en su casa 0 tierra; por manera que en un mesmo tiempo mataron ochenta chripstianos © mas. Y el cacique Agtieybana, que también se decia Don Chripstobal, como mas principal de todos, mandé a otro cacique dicho Guarionex, que fuesse por capitin y re- ccogiesse los caciques todos y fuessen a quemar el pueblo nuevo Mamado Sotomayor. Y para esto se juntaron mas de tres mill indios; y como todo lo de alrededor del pueblo hasta él eran arcabucos y montes cerrados de arboledas, no fueron sentidos hhasta que dieron en la villa, puesto que un indio nifio los ‘vido y lo dixo, pero no fue ‘ereydo. Y assi como dieron de (301 ANTOLOGIA DE LECTURAS DE HISTORIA DE PUERTO RICO sibto qvieron lugar de pega foego al pueblo, ymataron ab gunos chripstianos, y no quedara ninguno con la vida, si no fuera por un hidalgo que en aquella villa vivia lamado Diego de Salagar: el qual demas de ser muy devoto de la Madre de Dios y de honesta vida, era muy animoso hombre y de grande esfuerzo. Y como vido la cosa en tal mal estado y a punto de se perder todos los chripstianos que quedaban alli, los acau- dill y puso tan buen corazén en los que estaban ya quassi vencidos, que por su denuedo y buenas palabras los esforcs Y persuadié a que con gran fmpetu y osadia, como varones, se Pussiesen a la resistencia; y assi lo hicieron, y pelearon él y ellos contra la moltitud de los enemigos, de tal manera que los esistié, y como valeroso capitin a vista de los contrarios, recogié toda la gente de los chripstianos que avian quedado ¥ los lev6 a la villa de Caparra, donde estaba el capitan Johan Ponce de Len, que como he dicho ya era Gobernador de la Isla: y todos los que allf fueron, dixeron que después de Dios, Diego de Salagar les avia dado las vidas. ‘Quedé desto tanto espanto en todos los indios, y en tanta reputacién con ellos la persona de Diego de Salacar, que le te- mian como al fuego, porque en ninguna manera podian creer que oviesse hombre en el mundo tan digno de ser temido. Ver- dad es que antes desto ya el mesmo Diego de Salacar avia hhecho otra experiencia de su persona con los indios, y tan grande que si ellos pensaran hallarle en la villa de Sotomayor, no osaran yr all aunque como he dicho eran més de tres mill, Pero porque passemos a lo dems, pues se ha tocado del esfuerco y persona deste hidalgo, diré otro caso muy sefialado él, donde ovo principio la reputacién y concepto en que los indios le tenfan y porque le temian, y fue ésta la causa. Un ‘eacique que se decia del Aymanio tomé a un mancebo chrips- tiano, hijo de un Pero Xuarez de la Cémara, natural de Medina del Campo, y at6lo, y mandé que su gente lo jugasen al batey (que es el juego de ia pelota de los indios), y que jugado, los vencedores lo matassen. Esto seria hasta tres meses antes de Jo que tengo dicho que hicieron en Ia poblacién de la villa de Sotomayor; y en tanto que comian los indios, para después ‘en la tarde hacer su juego de pelota, como lo tenfan acordado sobre la vida del pobre mancebo, escapése un muchacho indio naboria del preso, Pero Xuarez, y fuesse huyendo a la tiers " (1) (Berta te, ie

You might also like