El cuento de los prefijos

Erase una vez una estrella feliz llamado supernova, donde las palabras eran mams. Tenan muchos hijos formando hileras infinitas de palabras. Para dar cabida a tantas familias, construyeron aldeas Erase una vez una estrella feliz llamado supernova, donde las palabras eran mams. Tenan muchos hijos formando hileras infinitas de palabras. Para dar cabida a tantas familias, construyeron aldeas subterrneas donde vivan. Desde el planeta tierra, se contemplaba la empresa cuyo nombre es superestrella subrayada por filas de palabras, que le daban un aspecto peculiar. Los humanos al conocer semejante acontecimiento exclamaron: -Es increble que esto suceda! Un subdelegado de una empresa cuyo nombre es incomprensible, estaba predispuesto a resolver este misterio. Tom un taxi aeroespacial incontaminante y fue a investigar lo que ocurra. Descubri algo inusual. En el subsuelo de esta estrella, la tierra era superfina y contena una cantidad innumerable de elementos llamados prefijos. Las palabras que pretendan ser mams, presuntuosamente se pegaban los prefijos Consigo trajo una muestra pequea de prefijos: sub-, sper-, in-, pre-, y propuso a los nios del mundo que crearan su propia lista de palabras nuevas. in-, pre-, y propuso a los nios del mundo que crearan su propia lista de palabras nuevas. delante a modo de delantal. Inmediatamente, de esa misma palabra naca otra. Este hecho le pareci insuperable y volvi a la tierra para contarlo. Consigo trajo una muestra pequea de prefijos: sub-, sper-, subterrneas donde vivan. Desde el planeta tierra, se contemplaba la superestrella subrayada por filas de palabras, que le daban un aspecto peculiar. Los humanos al conocer semejante acontecimiento exclamaron: -Es increble que esto suceda! Un subdelegado de una incomprensible, estaba predispuesto a resolver este misterio. Tom un taxi aeroespacial incontaminante y fue a investigar lo que ocurra. Descubri algo inusual. En el subsuelo de esta estrella, la tierra era superfina y contena una cantidad innumerable de elementos llamados prefijos. Las palabras que pretendan ser mams, presuntuosamente se pegaban los prefijos delante a modo de delantal. Inmediatamente, de esa misma palabra naca otra. Este hecho le pareci insuperable y volvi a la tierra para contarlo.

El cuento de los prefijos