PRONUNCIAMIENTO SOBRE LA CENSURA AL MEDIO DE COMUNICACIÓN

“EL ESTÁNDAR SOCIAL”

Luego de manifestar la preocupación como de la MD de CCSS por las irregularidades durante los procesos
disciplinarios que se llevan a cabo en la facultad y que están a cargo del Consejo de Facultad y tras haber hecho
una petición para que se respeten los derechos los alumnos que están involucrados en dichas investigaciones; nos
vemos en la obligación, luego de contar con la autorización respectiva del alumno involucrado, de hacer de
conocimiento a la Comunidad Universitaria lo siguiente:

El alumno Javier Martell, responsable del panel “El Estándar Social”, acudió a los miembros de la Mesa Directiva
del Centro Federado para solicitar orientación luego de que se le notificara que el Consejo de Facultad de Ciencias
Sociales ha visto por conveniente iniciar las investigaciones del caso y abrir el proceso correspondiente, después
de recibir una carta de la facultad de EEGGCC. Se le acusa de lo siguiente:

Desde hace más de tres años el panel “El Estándar Social” se ha ubicado en la Facultad de CCS, frente al CF de
CCSS asimismo, a partir de este año se encuentra un panel con los mismos contenidos y del mismo nombre en la
facultad de Estudios Generales Letras. Ambos paneles contaban con la autorización de las autoridades
correspondientes a cada facultad; sin embargo, cabe mencionar que a pesar de que el permiso fue solicitado por
escrito, la Facultad de CCSS nunca respondió ni afirmativa, indicando el periodo de tiempo por el que se otorgaba
el permiso, ni negativamente por escrito. Es menester mencionar además que el secretario académico de CCSS
citó al alumno Martell y de manera oral le indicó que el permiso estaba otorgado y acto seguido se decidió la
ubicación que éste tendría; pese a que se siguió pidiendo la autorización escrita por escrito nunca se ha recibido
respuesta por el mismo medio.

Esta misma modalidad de otorgar permisos se repite en la facultad de Estudios Generales Ciencias, donde el
alumno pidió permiso en el mes de abril para colocar un panel; cuya respuesta es obtenida a finales del mes de
mayo, por lo que se colocó el panel el lunes 25 de mayo del presente año. La coyuntura de esa fecha era de
elecciones de los REAs y Consejos de Facultad; es por eso que en los tres paneles (EEGGCC, EEGGLL y CCSS)
los contenidos eran relacionados a las elecciones, específicamente con entrevistas (las preguntas eran las mismas
para todos los entrevistados) hechas a un miembro de cada uno de los grupos o alianzas electorales, por lo que no
constituían propaganda electoral, ya que la calidad de las entrevistas eran hecha por un medio imparcial; sin
embargo, las autoridades de la facultad de EEGGCC desconocen esto, por lo que procedieron a retirar, cuando se
inició el silencio electoral, hacia un depósito el panel “El Estándar Social” sin haber intentado previamente
contactarse con el dueño de este, Javier Martell, a pesar de contar tanto con su correo electrónico, número de
celular, número de casa y dirección. El alumno Martell no tuvo conocimiento de que habían retirado su panel, por
lo que fue a modificar los contenidos el lunes 01 de junio y al no ubicarlo, procedió a preguntar por la ubicación
de este, a lo cual respondieron que estaba en el depósito por haber violado la norma del silencio electoral y que ya
no contaría con el permiso para tener su panel el dicha facultad; fue así que se dirigió al depósito donde estaba su
panel y, grabó un video en un área no señalada como restringida en el que constaba que habían retirado
arbitrariamente su panel hacia un depósito, frente a lo cual recibió un empujón por parte de un señor de limpieza;
es decir, lo agredieron cuando estaba haciendo uso de su derecho de recoger una prueba para demostrar la forma
arbitraria en la que habían actuado con él.

Estamos aquí frente ante unidades académicas que no entregan los permisos por escrito indicando el tiempo por el
que rige el mismo (tal vez para posteriormente poder vulnerar los derechos de los alumnos), ante una facultad
(EEGGCC) que no conoce qué es y que no es propaganda electoral (algo grave considerando que estamos en una
universidad con personas adultas y se supone con algún grado de preparación que les permita conocer eso), que
hace lo que consideran pertinente con las pertenencias de los alumnos. Además, estamos ante una facultad que no
permite que los alumnos hagan uso de su derecho a recoger los medios probatorios para demostrar que se está
cometiendo un abuso contra su persona ya que cuando un alumno lo intenta, tiene que estar sujeto a la agresión
física por parte de un trabajador de limpieza; y que, aprovechándose de no haber entregado un permiso por escrito,
simplemente lo da por revocado cuando se les da la gana. Finalmente y lo más indignante, por cierto, que las
autoridades remitan a la facultad de Ciencias Sociales una carta en la que denuncian al alumno Javier Martell de
haber incurrido en “hechos incompatibles con su condición de estudiante universitario” generando una probable
agresión al Sr. Jorge Gómez Barrientos. Es decir, ¿estamos ante una facultad que señala como posible agresor al
que en realidad fue agredido, como consta en el video grabado por el mismo?
Pasamos aquí a preguntarnos, ¿el Consejo de Facultad de Ciencias Sociales es capaz de iniciar un proceso
disciplinario con la sola carta que recibieron por parte de EEGGCC, la cual sólo se puede basar en el testimonio
oral del Sr. Gómez Barrientos? Esto faculta a cualquier persona a que elabore un informe contra uno de nosotros,
sin prueba alguna, y lo envíe al Consejo de Facultad, lo cual daría pie a que se nos inicie un proceso, cuyas
sanciones pueden ser hasta de 2 años de suspensión o de expulsión de la universidad. Por otro lado, ¿es correcto
que la facultad reciba una carta informando sobre unos supuestos hechos y automáticamente decida iniciar un
proceso disciplinario y pase a informarle al alumno que ya se le abrió un proceso? No es correcto. La facultad esta
en la obligación de citar al alumno y pedirle su versión de los hechos, de lo contrario se esta iniciando una
investigación con una sola versión, es decir, de manera unilateral. Esto demuestra la situación de vulnerabilidad en
la que nos encontramos los alumnos por poder vernos inmersos en investigaciones por la sola palabra de alguien
que actúa con encono hacia nosotros. Al no pedirle su versión de los hechos, se está violando su derecho a la
defensa, el cual esta contemplado tanto en normas nacionales como internacionales.

Además de lamentar la forma en que proceden nuestras autoridades, nos sentimos profundamente contrariados por
el evidente intento de intimidación; dado que, el alumno Martell ha recibido un carta, después de que la facultad
de Ciencias Sociales haya recibido la carta proveniente de EEGGCC, en la que el secretario académico Luis
Mujica le pide que retire en un plazo máximo de veinticuatro horas el panel que tenía en la facultad de Sociales
hasta que “se regularicen los permisos” cuando en los tres años que tiene el panel en la facultad, jamás se tuvieron
que regularizar los permisos y es que la frase “regularizar permisos” parece una burla y no es más que una patraña
que tiene como único fin censurar al medio de comunicación El Estándar Social. Esto es una clara intimidación y
constituye además una violación a la libertad de expresión.

Tenemos que destacar maneras de proceder que pondrían en tela de juicio la transparencia con la que
supuestamente actúa la universidad, y es que si la facultad de Ciencias Sociales recibió la queja por parte de
EEGGCC a comienzos del mes de junio, ¿por qué esperaron que llegue el fin de ciclo para notificarlo del asunto?
Como se señalo anteriormente, la facultad estaba en la obligación de pedirle su versión de los hechos antes de
iniciarle una investigación que podría derivar en una sanción y el hecho de que hayan esperado a que acabe el
semestre para informarle que tiene un proceso abierto da claros indicios de la intención de que la censura pase
desapercibida.

Queremos manifestar nuestro apoyo y solidaridad a nuestro compañero Javier Martell, quien en el transcurso de 3
años ha contado con el apoyo de más de cien estudiantes de la facultad de Sociales, entre artículos y fotos. Es una
vergüenza que en la PUCP se censure a un medio de comunicación que transmite la voz y opinión de los alumnos
de la universidad, en lugar de brindar el apoyo que el alumno solicitaba desde el inicio; el cual jamás recibió y por
el contrario, lo único que recibe son los obstáculos que le pone la facultad.

Estaremos atentos y denunciaremos lo que se tenga que denunciar en las instancias en las que sea necesario e
invocamos, en primer lugar a nuestros representantes estudiantiles en los Consejos de Facultad de toda la
universidad, especialmente a los de Ciencias Sociales, a no dejar que los intentos de censura a la libertad de
expresión sean prósperos y a trabajar para que en los procesos disciplinarios en la PUCP no se violen los derechos
de los estudiantes; y en segundo lugar, a la comunidad universitaria a no permitir más abusos y a exigir que se
respeten nuestros derechos.

Mesa Directiva de la Federación de Estudiantes – FEPUC 2009

Mesa Directiva del Centro Federado de Ciencias Sociales 2009

Mesa Directiva del Centro Federado de Estudios Generales Letras 2009

San Miguel, 20 de Julio de 2009