EDWARD JENNER MÁS QUE UNA CONTROVERSIA SOCIAL UN GRAN AVANCE MUNDIAL

EDWARD JENNER: MÁS QUE UNA CONTROVERSIA SOCIAL

UN GRAN AVANCE MUNDIAL

Yo soy Edward Jenner relativamente una persona igual a las demás pero a diferencia de ellas di
paso a un gran avance en la historia de la medicina, durante toda la trayectoria de mi existencia
me dedique a prestarle ayuda a los demás por medio de la medicina, donde se refleja mi principal
contribución que fue el descubrimiento de la primera vacuna contra la viruela a partir de
diferentes observaciones que previamente había realizado, lo que marco un nuevo inicio para el
tratamiento de algunas afecciones o noxas generadas en el cuerpo humano.

Todo comenzó desde el día de mi nacimiento el 17 de mayo de 1749, donde iniciaron un cúmulo
de sueños e ilusiones que más adelante se iban a ir forjando para lograr mi gran cometido, a pesar
de ello un hecho trascendental fue la muerte de mi padre en 1754, cuando tan solo tenía 5 años,
quedando bajo la protección de mi hermano mayor, sin embargo sentía un gusto muy fuerte por
los fenómenos que rodean la naturaleza, por eso en 1762 empecé a colaborarle a un médico
cirujano de Sodbury, para así ir obteniendo más conocimiento y más experiencia acerca de lo que
verdaderamente me apasionaba, pero este sueño o pasión fue tomando forma principalmente
desde 1770 cuando inicie mis estudios en el Hospital San Jorge, el cual se encuentra ubicado en
Londres; a partir de esto, más adelante me dedique al estudio de la anatomía con mi gran amigo,
cirujano y naturista John Hunter con quien compartí muchas experiencias, lo que hizo que en
1773 volviera a Berkeley tras rechazar una propuesta de trabajo donde tenía la oportunidad de
viajar al Océano Pacifico a realizar una serie de investigaciones, por eso al crear mi consultorio
local trate de hacer lo mejor posible en cada uno de mis actos para poder satisfacer las
necesidades de todos mi pacientes, lo que me genero un gran prestigio dentro de la población.

Pero mi gran experiencia como anatomista, biólogo, etc. me permitió analizar más la realidad
social donde tenía que curar la vacuna, que era una infección que se transmitía desde la vaca
hasta las manos del ordeñador lo que, generaba una serie de pústulas que se sanaban de forma
muy rápida, a pesar de eso en 1775 empecé a investigar acerca de la relación que tenía la vacuna
con la viruela, y al final obtuve como conclusión que la vacuna era un medio para obtener la
inmunidad contra la viruela lo que hizo que me sintiera muy satisfecho por haber realizado ese
descubrimiento sin saber que me faltaba aún la mitad del camino por recorrer.
Lina Marcela Castro Leiva
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Código: 10
Al llegar 1778 sufrí una gran decepción amorosa, sin embargo 10 años después pude contraer
matrimonio, en este mismo año di mi publicación al cuerpo médico de Londres de cómo al
propagar la vacuna de un cuerpo a otro, este servía como medida de protección contra la viruela,
pero al final no causo ninguna impresión, por esta razón en 1796 inicie prácticas médicas con
James Phipps de 8 años al cual le inocule con la secreción que había recogido de una pústula
vacuna (viruela de vacas)1 en la mano de una mujer que ordeñaba vacas, 20 días después lo volví
a inocular con pus de una persona que sufría de viruela, donde pude comprobar que con este acto
el niño quedó indemne contra la viruela; a pesar de todo lo que había realizado gran parte de
médicos no tuvieron confianza en mi experiencia, pero eso poco a poco se iba a ir dilatando o
desvaneciendo.

En efecto más adelante pude comprobar mi descubrimiento con mayor seguridad gracias a la
ayuda de Napoleón en 1805, cuando el dio la orden de vacunar a todos sus soldados contra la
viruela, lo cual, a consideración propia resulto ser un éxito completo, más adelante la condesa de
Berkeley y Lady Duce vacunaron a sus hijos contra la viruela, lo que hizo que todo el cuerpo de
médicos y científicos que habían dudado de la certeza de mi descubrimiento se retractaran, sin
embargo y a pesar de todas las dificultades en 1798 publiqué un artículo titulado: “Investigación
acerca de las causas y efectos de la viruela de la vacuna”, lo que me generó más prestigio a nivel
social.

Pero un factor que me produjo gran satisfacción espiritual es que pude reducir el índice de
mortalidad a causa de esta enfermedad, ya que vacune a 12000 personas, donde finalizando mi
largo camino aún me dedicaba a la poesía puesto que siempre sentí un profundo amor a la
naturaleza y a mi vida, lo cual término con una hemorragia cerebral que dio fin a mi vida el 26
de enero de 1823 cuando tenía 73 años en el mismo lugar que un día me vio nacer.

1. López, José. El descubrimiento de la vacuna antivariolosa por Edward Jenner .Vedado

2. La viruela. [En línea], disponible en http://www.portalplanetasedna.com.ar/viruela.htm, HTML. Recuperado el 23 de septiembre de

2009
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BIBLIOGRAFÍA

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http://bvs.sld.cu/revistas/abr/vol41_1_02/abr07102.htm, HTML. Recuperado el 23 de septiembre
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Lina Marcela Castro Leiva

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