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2009

INSTITUTO LATINOAMERICANO DE LA COMUNICACIÓN EDUCATIVA


ILCE
CENTRO DE ESTUDIOS EN COMUNICACIÓN Y TECNOLOGÍAS EDUCATIVAS
CECTE

Clara León Ríos, Karen Montano Castillo, Gerardo Cuatepotzo Cruz

[EDUCACIÓN EN LÍNEA: LOS OBJETOS DE


APRENDIZAJE COMO RECURSOS DE APOYO A LA

FORMACIÓN]
El presente trabajo es una breve reflexión sobre la modalidad educativa en línea, la importancia de
su diseño instruccional y el abordaje de una de las herramientas consideradas como características
de ésta: Los Objetos De Aprendizaje (ODA’s). Para ello , se discute sobre las siguientes preguntas
¿Qué relación existe entre las diferentes variables de la educación en línea y sus diversos soportes
pedagógicos? ¿Es indispensable llegar a una modalidad de autoinstrucción? ¿Consti tuyen los
Objetos de Aprendizaje un retroceso potencial o un avance formidable? ¿En dónde radica su
fuerza y en dónde su debilidad?
“El plantear un proyecto educativo apoyado en las nuevas tecnologías de la
información y la comunicación, nos proporciona un espacio para reinterpretar y
repensar la educación desde su enfoque, metodología, didáctica, evaluación, tipo de
comunicación, características de los estudiantes, académicos, entre otros
elementos…” (Angulo, 2009)

En la Educación en Línea (E-L) es importante tener claro que en cualquiera de


sus modalidades de aprendizaje: virtuales, semipresenciales, a distancia,
abiertas, mixtas, entre otras, están orientadas por el diseño instruccional, pues
cada modalidad requiere una estrategia psicopedagógica conforme al perfil de
los usuarios, sus objetivos educativos y contenidos específicos.

Dichos elementos son parte de un modelo educativo, que orienta la toma de


decisiones con respecto a los soportes pedagógicos más adecuados para el
logro de los aprendizajes, como los manuales, tutoriales, presentaciones,
textos, vídeos, simuladores, entre otros.

Es decir, en el diseño instruccional se debe denotar una relación coherente


entre la tecnología y los aspectos pedagógicos, en la que además convergen
los aspectos comunicativos y de interacción que se requieren en un proceso de
enseñanza-aprendizaje.

Por consiguiente, para que esta labor sea efectiva, se requiere de un trabajo
multidisciplinario de los involucrados en el diseño de estrategias con las que se
pretenden construir diversas competencias académicas y profesionales . Por lo
tanto, cada modalidad educativa debe adecuarse a las necesidades de su
entorno, y a un modelo pedagógico que permita brindar cierta flexibilidad al
estudiante en su aprendizaje.

De acuerdo a lo anterior, y considerando que el ideal de la educación en línea


es la promoción de un actuar autónomo y autogestivo, de pensamiento crítico y
la adquisición de competencias colaborativas en las que se involucren diversas
estrategias didácticas conforme a las metas que se persiguen en el proceso
formativo, entonces una modalidad de autoinstrucción es sólo una
manifestación de la Educación en Línea.

De acuerdo a consideraciones hechas por algunos autores, la autoinstrucción


es de carácter individual y se clasifica como lo señala el Análisis de
Destinatarios de la Educación a Distancia (s/f): “De acuerdo con su carácter
individual o participativo, la educación a distancia suele subclasificarse en:
Autoestudio basada en tecnologías de estudio dirigido o instrucción
programada, en las que el estudiante interactúa individualmente con material
que sustituye al docente.”

Los materiales de este tipo, pueden ser de utilidad dependiendo de los


aprendizajes que se pretende alcanzar. De tal manera que son elaborados para
tal fin, con características particulares de acuerdo al nivel al que va dirigido.

Pero la E-L ofrece también una amplia variedad de posibilidades para la


formación y capacitación, más tendientes al trabajo de cooperación y
colaboración, como lo son las Wikis, los Blogs, las WebQuest y MiniQuest,
BigSix, Objetos De Aprendizajes (ODAS), entre otros.

En cuanto a las ODAS, estás pueden quedarse a nivel de autointrucción o


como facilitadoras de aprendizajes significativos, ya que si partimos de una
definición general: “cualquier entidad digital o no digital, que pueda ser usada
para el aprendizaje, educación o capacitación” (Gándara, 2009), no se abren ni
se cierran alternativas educativas, pues algunos podrían solo convertir en
formato digital los textos y apuntes que el docente daba en formas impresa a
los alumnos, sin cambiar las tradicionales estrategias educativas.

A pesar de ello en la actualidad existen un sin número de empresas que


brindan el servicio de repositorio de ODAS, sin ninguna restricción pedagógica,
tal como es el caso de los siguientes sitios: wwwaquainteractive.com,
www.merlot.org, www.mcli.maricopa.edu, entre otros.
En cambio, si partimos de conceptualizaciones más concretas, como la
siguiente: “una entidad digital, autocontenible, reutilizable, con un propósito
educativo, constituidos por al menos tres componentes internos editables:
contenidos, actividades de aprendizaje y elementos de contextualización…
deben tener estructura externa de información, que facilite su identificación,
almacenamiento y recuperación: Los metadatos…” (Chiappe, Segovia&
Rincón, 2007, p.675). Entonces sí se pueden generar cambios, por lo menos
en la forma de enseñar y aprender, sobre todo sí se logra que estas
herramientas partan de una necesidad educativa, se seleccionen los
contenidos y estrategias adecuadas, y se construyan bajo la idea de que
puedan ser adaptadas por otros docentes.

Además, si se considera que pueden ser diseñados como multimedios, tal


como las ODAS mostradas en aulatelemática.com.mx, las posibilidades para
explotar estas herramientas son muchas, pues no sólo promueven el trabajo
colaborativo, y su uso en diversas situaciones de aprendizaje, sino que además
son altamente atractivas para los estudiantes. Sin embargo, su principal
desventaja sigue siendo el costo, pues se requiere personal capacitado para su
diseño instruccional: un programador, diseñador visual, el especialista en el
tema, un pedagogo, etc.

Se puede concluir que la educación en línea requiere ser conceptualizada más


allá de repositorios o contenedores de información como algunas ODA’s, según
se pudo observar en las visitas hechas a los sitios disponibles en Internet.

Dado que el potencial de las diferentes modalidades de la Educación en Línea,


se ha demostrado en los ámbitos de formación y capacitación. Por lo que se
hace de ella algo más que un simple depositario de material “didáctico” en
algún sitio de Internet, cuando no se considera el diseño que debería seguir la
construcción de materiales digitales para un curso de formación o capacitación,
y eso podría llegar a pasar a los Objetos de Aprendizaje si se dejan a un nivel
simple de autoinstrucción.
Referencias:

Análisis de Destinatarios de la Educación a Distancia (s/f). Recuperado el 24 de


septiembre de 2009, de
http://biblioteca.itson.mx/oa/formacion_profesores/oa2/analisis_destinata
rios/ad3.htm

Angulo, L (2009). Proyecto: Educación en Línea. EDUCAR. 1(13)125.


Recuperado el 24 de septiembre 2009, de
http://www.una.ac.cr/educare/vol13n109_angulo_proyecto.html

Chiappe, Segovia & Rincón (2007). Toward an instructional design model


based on learning Objects. Recuperado el 21 de septiembre de 2009, de
http://www.springerlink.com/content/u84w63873vq77h2h/

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