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Notas de Estudio
República de Colombia
Departamento de Nariño
Municipio de pasto
Solución de Problemas 2 Luis Hernando Mutis Ibarra
SOLUCIÓN DE PROBLEMAS
CONTENIDO
1. De los problemas
2. Estrategias solucionadoras de problemas
2.1. La actuación de los expertos
2.2. Programación de ordenadores para resolver problemas.
3. Algunos heurísticos solucionadores de problemas
3.1. Enfoque de Polya.
3.1.1. Heurísticos para representar o comprender el problema.
3.1.2. Heurísticos para idear un plan
3.1.3. Heurísticos para verificar los resultados
3.2. Enfoque de Newell y Simón
3.2.1. Heurísticos para representar un problema
3.2.2. Heurísticos para idear un plan
3.3. Algunas observaciones generales sobre los heurísticos
3.4. Implicaciones para enseñar los heurísticos
3.5. La enseñanza heurística de schoenfeld en la solución de problemas matemáticos
3.5.1. Enseñanza de heurísticos
3.5.2. El enfoque heurístico en general
4. Estrategias para mejorar el pensamiento inventivo y solucionador
4.1. Las búsquedas largas
4.2. La analogía
4.3. El torbellino de ideas
4.4. Implicaciones en la enseñanza
5. Patrones de solución de problemas
6. El solucionador de problemas completo
7. Uso del conocimiento en la resolución de problemas de la vida cotidiana
7.1. Una filosofía práctica
7.2. El proceso PEARCE, cinco pasos para enfrentarse a los problemas con filosofía
8. Ejercicios de efectividad general
8.1. Descripciones
8.2. Otros problemas
8.3. El dibujo
9. El pensamiento lateral, básico en la solución de problemas
10. Planteamiento de problemas
11. Retos para la solución creativa de problemas
11.1. Guías para la solución creativa de problemas
11.2. Alimentar con impresiones sensoriales
11.3. Desbloqueo interno y externo
12. Ámbitos del conflicto social y personal
12.1. Lógicas del nuevo orden social
12.1.1. La moralidad
12.1.2. El hedonismo
12.1.3. El cuerpo
Solución de Problemas 3 Luis Hernando Mutis Ibarra
12.1.4. Eros
12.1.5. Narcisismo
12.1.6. El ocio, la indiferencia
12.1.7. La igualdad
12.1.8. El modernismo
12.1.9. La violencia
12.1.10. Honor y/o respeto
12.1.11. Violencia generalizada: efecto hard
12.1.12. Las relaciones interpersonales
12.1.13. Lo legal y lo moral
12.2. Dualidades y/o
12.2.1. Trastorno y/o malestar
12.2.2. Dolor y/o sufrimiento
12.2.3. Necesidad y/o deseo
12.2.4. Abordar el sufrimiento
12.2.5. Identidad individual frente a identidad grupal
12.3. Llevarse bien
12.3.1. Llevarse bien con uno mismo
12.3.2. Competitividad y cooperación: como las capas de una cebolla.
12.4. Género, distorsión de las diferencias
12.5. Lo real y lo virtual, ¿el comando tecnológico?
12.6. Manejo del cambio
12.6.1. El cambio como problema
12.6.2. Impulsos negativos
12.7. Del conflicto
Referencias bibliográficas
Solución de Problemas 4 Luis Hernando Mutis Ibarra
1. DE LOS PROBLEMAS
1. Sustituir las diez letras diferentes de las tres palabras siguientes por los diez
dígitos decimales, de modo que la suma resulte correcta. Siendo: D - 5
DÓNALO
+ GERALD__
ROBERT
2. Imaginar un tablero de damas corriente de sesenta y cuatro cuadros del que se
han cortado dos cuadrados, uno de cada una de las esquinas diagonalmente opuestas.
Suponga que tiene treinta y una fichas de dominó, cada una de las cuales cubre
exactamente dos cuadros del tablero. Averigüe si es posible colocar las fichas de tal manera
que queden tapados los sesenta y dos cuadros existentes.
3. Considere dos recipientes. A y P. Suponga, que el A contiene 10 litros de agua
del océano Atlántico, mientras el P contiene una cantidad igual de agua del Pacifico.
Suponga que quitamos 2 litros de agua del Atlántico del recipiente A y los echamos en el P.
Una vez mezclado concienzudamente el líquido de P, extraemos 2 litros de esa agua y los
añadimos a la que contiene el recipiente A. ¿Qué recipiente tiene ahora más cantidad de
agua forastera, siendo la del Atlántico forastera en el P y la del Pacifico en el A?
Cabe preguntarse si estos problemas son representativos de los que tenemos que
afrontar en nuestra vida cotidiana y si las técnicas que dan resultado en el primero lo darán
también en los siguientes. ¿Tiene sentido suponer que los métodos que sirven para
resolver problemas como los que aparecen en los ejemplos van a ser aplicables a
problemas tales como diagnosticar por qué un automóvil no arranca, hallar el camino a
seguir para un nuevo destino, distribuir el tiempo y los recursos económicos, organizar las
propias ideas para escribir un artículo o pronunciar una conferencia, hallar un empleo,
escribir un programa de ordenador o conservarse sano? Hay aquí espacio disponible para
toda una gama de opiniones. Lo que interesa en el contexto de este capítulo, es que estos
problemas son representativos de los que se emplean para estudiar la solución de
problemas en el laboratorio. Se supone que esos problemas tienen algunas propiedades
en común con los que surgen fuera del laboratorio, y que los planteamientos que funcionan
bien en un contexto es probable que sirvan también de algo en el otro.
Solución de Problemas 5 Luis Hernando Mutis Ibarra
Estos problemas se diferencian tanto por su dificultad como por el carácter de las
habilidades requeridas para resolverlos. Tanto los rompecabezas como los crucigramas
pueden hacerse a voluntad sencilla o complicada; sin embargo, se diferencian
considerablemente en cuanto a las demandas intelectuales que le plantean al que tiene
que resolverlos. El rompecabezas consiste primariamente en una tarea visual que exige
capacidad para recordar y comparar patrones visuales. La buena memoria visual y la
capacidad para comparar patrones no le sirven de mucho, en cambio, al que resuelve
crucigramas; lo que necesita es un buen almacén de conceptos verbales vinculados
asociativamente y una buena ortografía.
Los problemas que se presentan se diferencian también en lo que respecta a lo
evidente que puede sernos el enfoque adecuado de su solución. Pensemos, por ejemplo,
en los dos primeros problemas. Ambos son lo suficientemente difíciles para que el lector
pueda tardar unos minutos en resolverlos. Sin embargo, la mayoría de los lectores sabrán
inmediatamente cómo acometer el primero, mientras que muchos no tendrán tal vez una
idea muy clara de cómo enfocar el segundo. En el primer caso, uno empieza haciendo una
serie de inferencias de este tipo: si D es igual a 5, T tiene que ser igual a 0; y como se lleva
uno de las unidades a la columna de las decenas, R tiene que ser un número impar;
además, salta a la vista en la columna de la extrema izquierda que B tiene que ser superior
a 5 (puesto que D es 5), por lo que tiene que ser 7 o 9… Suponemos que la persistencia en
este tipo de conducta acabará por revelar el valor de cada una de las letras. El enfoque del
problema es evidente y para la mayoría de la gente no implicará probablemente ni siquiera
una opción consciente1.
En cambio, no es evidente en absoluto el posible enfoque eficaz del segundo
problema. Uno puede tratar de imaginarse visualmente diferentes disposiciones de fichas
de dominó sobre el tablero, pero es probable que termine rindiéndose lleno de frustración,
sin ser capaz de hallar una disposición correcta, ni tampoco de demostrar que no existe
semejante disposición. De hecho no es posible cubrir el tablero resultante de un modo
exacto con treinta y una fichas de dominó, siendo más breve y fácil seguir la demostración
de esa imposibilidad que la solución del problema de DONALD + GERALD. Contemplar el
método empleado para resolver este problema es casi equivalente a resolverlo. Toda la
intuición que hace falta consiste en captar que dos ángulos diagonalmente opuestos son
del mismo color. Por lo tanto, al eliminarlos, le quedan al tablero dos cuadros más de un
color que del otro. Y, teniendo en cuenta que no hay manera de cubrir dos cuadros del
mismo color con una sola ficha de dominó, no la hay tampoco de cubrir el tablero entero
con treinta y una fichas.
El problema 3, A y P, descrito arriba, sirve para poner de relieve que un problema se
puede resolver a veces de maneras radicalmente diferentes. Las dos soluciones que se
dieron de él eran correctas, pero se diferencian en algunos aspectos importantes. El primer
enfoque, el analítico, es un tanto laborioso, y nos da una solución que basta para dar
respuesta a la pregunta específica que se formuló, pero no es fácil de generalizar en casos
afines. Es más, la respuesta obtenida da la impresión de carecer de fuerza intuitiva;
nuestra creencia en su exactitud descansa en nuestra confianza en que la secuencia de
cálculo es correcta. El atractivo de su enfoque es su evidencia; el seguimiento de los
resultados de las transacciones individuales parece ser un método lógico para calcular el
último resultado de cualquier serie de transacciones.
1
Este problema está tomado de BARTLETT. 1958, y ha sido muy empleado en el trabajo de NEWEL. y SIMON,
1972; ambas fuentes contienen relatos paso a paso de diferentes intentos de resolverlo, unos con éxito y otros sin él.
Solución de Problemas 6 Luis Hernando Mutis Ibarra
Larkin sugiere que hay pruebas de que esas estrategias no sólo son útiles en tareas
tan bien definidas como la solución de problemas y el dominio de juegos sino cambien
para resolver problemas del tipo que hallamos en las matemáticas y ciencias de la
enseñanza.
Normalmente se puede representar un problema de varias maneras, pero algunas
de ellas son más sugerentes que otras en cuanto a vías de solución. La representación
concreta que uno elija influirá mucho en el modo de pensar sobre un problema dado y en
la estrategia empleada para intentar resolverlo. Según se han observado algunos autores,
al escribir sobre la solución de problemas, cuando uno tiene una dificultad mayor de lo
normal con un problema, lo mejor que se puede hacer a veces es tratar de hallar un modo
radicalmente distinto de representárselo.
Una manera útil de representar algunos problemas es la denominada
«representación de los estados». Es un tipo de representación de problemas y para
emplearla, hay que especificar tres cosas: a) la forma de la descripción de los estados y,
en particular, la descripción del estado inicial; b) el conjunto de operadores y sus efectos
sobre las descripciones de los estados; y c) las propiedades de la descripción del estado
final.
La representación de los estados puede ayudar con frecuencia a quien desea
resolver un problema. Pero tiene otra trascendencia además de ésa: tiene interés para los
teóricos como método general para formular en qué consiste un problema. Problemas
radicalmente diferentes de éste pueden ser analizados a través de una representación de
los estados. Tomemos, por ejemplo el problema, sumamente imprevisible, que supone
escribir un poema. Podemos considerar que los estados son diferentes disposiciones de
palabras en la página y que el estado inicial es la página en blanco. Las operaciones
consisten en añadir o borrar palabras. Los estados finales están determinados por el juicio
del poeta. La tarea de éste consiste en generar una serie de operaciones que lo llevan a
un estado final.
En muchos tipos de problemas tiene importancia la sobriedad: se busca una vía de
solución corta. Un modo de garantizar el hallazgo de la vía de solución más corta
consistiría en explorar todas las vías posibles y elegir la más corta de las que van a
conducir a un estado final. Esa estrategia se llama búsqueda exhaustiva. Podemos
desarrollar un árbol de soluciones exhaustivas empezando por un nudo que representa el
estado inicial y ramificándolo hacia cada uno de los estados que pudieran resultar de la
aplicación de uno de los cuatro operadores posibles. Cada uno de esos nudos podría
ramificarse a su vez, cambien mediante la aplicación de cada uno de los operadores, y se
podría continuar este proceso hasta alcanzar uno o más estados finales. Nilsson distingue
entre el método de extensión prioritaria y el de profundidad prioritaria: el primero va
ramificando los nudos siguiendo su orden de aparición, el segundo sigue algunas ramas
hasta el final antes de empezar siquiera a extender otras ramas.
En todos los problemas, salvo los muy simples, la búsqueda exhaustiva sólo es
posible en teoría; el número de vías que se pueden generar es demasiado grande para
que ese enfoque sea practicable. En cambio, tiene sentido llevar a cabo una búsqueda que
está limitada de una o más maneras. Por ejemplo, se podría extender sólo una fracción de
los nudos de un árbol, o se podría continuar la extensión hacia adelante en un número
limitado de pasos. Por supuesto que unos métodos semejantes de búsqueda limitada y de
extensión limitada hacia adelante no darán mejor resultado que las reglas que se emplean
Solución de Problemas 10 Luis Hernando Mutis Ibarra
Comprender el problema
Idear un plan. Esto incluye la formulación de una estrategia, general, no de una
prueba detallada. La formulación de una estrategia de ese tipo constituye un
proceso inductivo, no deductivo. Esto tiene importancia debido a que en contra de
las apariencias, incluso las matemáticas constituyen en parte un proceso inductivo.
Ejecutar ese plan. He aquí dónde está la prueba detallada y dónde se lleva a cabo
el razonamiento deductivo.
Mirar hacia atrás, es decir, verificar los resultados.
Haga el problema más general y observe si asi puede resolverlo. Podemos utilizar
el ejemplo conocido problema del A y P para ilustrar este heurístico. Recordemos que la
solución implicaba un toque de intuición sobre el hecho de que el líquido que faltaba de un
recipiente tenía que haber sido sustituido por una cantidad igual de líquido del otro
recipiente. Esa solución era más general que la solución más convencional, porque era
independiente de la cantidad de líquido intercambiado, la minuciosidad de la mezcla y el
número de cambios efectuados. Sin embargo, habría sido posible invertir el proceso y
empezar la búsqueda de una solución generalizando intencionalmente el problema desde
un principio. En otras palabras, podríamos haber empezado por decirnos: supongamos
que se hubiera pasado desde el principio la mitad del contenido del recipiente A al P, y se
le hubiese devuelto al A a continuación una cantidad igual, o supongamos que todo el
contenido del A se hubiese echado en el P y se hubiese devuelto al A la mitad de la
mezcla resultante. O supongamos que el contenido total hubiese pasado de un recipiente
a otro varias veces. Se supone que la generalización del problema en una u otra de estas
maneras puede suscitar una solución. Cuando se descubre una solución correspondiente
a un caso más general, esa solución debe ser aplicable, por supuesto, al caso especial,
salvo que al tratar de generalizar el problema lo hubiésemos cambiado cualitativamente.
En cualquier caso, uno puede y debe verificar cualquier solución general contra el
problema específico para estar seguro de que es aplicable con seguridad.
Descomponga el problema en partes. Si no puede manejar esas partes,
descompóngalas a su vez en partes más pequeñas, y siga de ese modo hasta conseguir
problemas de tamaño manejable. Este heurístico puede tener una doble utilidad: tras
haber resuelto un problema componente, uno puede emplear a veces tanto el método
como el resultado del problema más sencillo para resolver el más difícil.
Defina una función de evaluación para todos los estados, incluyendo el estado final;
a continuación, elija, en cualquiera de los estados, una operación que permita llegar a un
estado ulterior con una evaluación que se acerque a la del estado final. Recordemos que
una función de evaluación evalúa esencialmente la semejanza que tiene un estado
intermedio con el estado final. De ahí que podamos parafrasear este heurístico diciendo
que a partir de cualquier punto de opción debería uno elegir el estado intermedio que
parezca, más semejante al estado final. Esta estrategia recibe a veces el nombre de subir
la cuesta.
Este heurístico de subir la cuesta puede aplicarse al problema de las seis flechas
que se describió, así como a un gran número de problemas. Estas aplicaciones ilustran
dos aspectos interesantes. EÍ primero es que el éxito en el empleo del heurístico depende
de la aplicación de una buena función de evaluación, cosa que implica a menudo a todas
luces el cambio de nuestra representación inicial del problema. Por ese motivo puede ser
difícil a veces apegarse a la distinción establecida por Polya entre el estadio de
representación del problema y el de idear un plan. El segundo es que, incluso con una
función de evaluación viable, algunos problemas le exigen al solucionador que aplique por
lo menos un operador que disminuya temporalmente la semejanza entre el estado
intermedio existente y el estado final. Esto recibe el nombre de rodeo y existe la impresión
de que su presencia constituye una capital fuente de dificultades en la solución humana de
problemas.
Trabaje hacia atrás desde el estado final hasta el inicial . Esto es especialmente útil
cuando existen muchos operadores posibles que se podrían aplicar al estado inicial (lo que
obligaría a tener en cuenta muchas vías de solución), y muy pocos que podrían llevarnos
del último estado intermedio al estado final. En este caso, la búsqueda del espacio de
problema es más limitada cuando empezamos a partir del estado final.
Suponga que el estado final es falso y demuestre que eso nos lleva a una
contradicción. En matemáticas esto se llama método de prueba indirecta. A veces, la
consideración de cuáles serían las implicaciones si el objetivo fuera falso nos sugiere la
aplicación de algunas operaciones productivas.
Los heurísticos desarrollados por Newell y Simón, junto con los de Polya, cuentan
entre los mejores ejemplos que se tienen de habilidades del pensamiento de uso general,
es decir, de procesos o enfoques aparentemente aplicables a muchos campos.
idea de lo que constituye un subproblema en ese terreno. Aunque estas dos dificultades
son reales, se cree que se las puede superar mediante técnicas de enseñanza específicas
y que los heurísticos de solución de problemas deben estar situados muy arriba de
cualquier lista de aspectos de la enseñanza que se puedan enseñar.
• Cuando los estudiantes conocen y saben aplicar los heurísticos, éstos los ayudan
a resolver problemas.
• Los estudiantes carecen de un buen conjunto de heurísticos.
• Los estudiantes no aprenden los heurísticos de modo espontáneo a través de los
ejemplos; los heurísticos deben enseñarse de modo explícito.
• Los estudiantes no aplican de modo fiable los heurísticos que conocen; resulta
necesario proporcionarles algún tipo de guía o ayuda.
• Una «estrategia directiva» para enfocar los problemas, utilizada junto con los
heurísticos, puede ayudar a los estudiantes a aplicarlos y puede mejorar mucho el
desempeño en la solución de problemas de matemáticas.
en cierta medida; aquellos que fueron expuestos a las aplicaciones implícitas de los
heurísticos no aprendieron a utilizarlos. Los estudiantes que aplicaron los heurísticos
resolvieron más problemas que los que no lo hicieron.
realmente una tarea en una serie organizada de subtareas, así como tampoco desarrolla
acciones heurísticas específicas de la tarea. Creemos que, para muchas tareas, resulta útil
disponer de un plan de ataque y heurísticos específicos de la tarea. Este es, sobre codo, el
caso de las tareas claramente complicadas cuya estructura invita al análisis heurístico.
impresión de que las personas menos creativas desdeñan esta fase del trabajo para
emprender en seguida una dirección abiertamente convencional y concentrar sus
esfuerzos en proseguir apegadas a ella.
4.2. LA ANALOGÍA
La importancia del razonamiento analógico es importante tanto en las ciencias como
en las artes. La capacidad de ver semejanzas que se nos escapan a la mayoría de
nosotros constituye el sello de la persona verdaderamente creativa. Perkins dice que «toda
ciencia es la búsqueda de una unidad existente entre semejanzas ocultas». «La poesía, la
pintura, las artes, constituyen, esa misma búsqueda de una unidad existente dentro de la
variedad», y agrega: «He hallado que el acto de creación reside en el descubrimiento de
una semejanza oculta. El científico, o el artista, toma dos hechos o experiencias diferentes,
halla entre ellos una semejanza que nadie había visto antes y crea una unidad que
muestra esa semejanza».
Muchos descubrimientos científicos han incluido analogías, que en ocasiones
vinculaban asuntos muy distanciados entre sí, como en el caso del conocido
descubrimiento del anillo bencénico por Kekule debido a un sueño que tuvo de unas
serpientes que danzaban y se enroscaban entre sí para morderse la cola (Koestler, 1964).
Gordon acuñó la palabra sinéctica para bautizar a ese tipo de establecimiento de contacto
y diseñó un método general de resolver problemas en grupo mediante la generación de
distintos tipos de analogías.
Está menos claro, en cambio, la frecuencia con que ese tipo de pensamiento
analógico rinde frutos. Perkins (1981) sacó en conclusión que las analogías «novedosas,
remotas» rara, vez daban origen a intuiciones. Entendía por «novedosa» una analogía
creada para la ocasión en sí, en contraposición a una analogía común y corriente. Por
«remota» Perkins entendía una analogía que, como la de Kekule, tiende un puente sobre
terrenos que intuitivamente consideraríamos remotos entre sí. Perkins revisó una serie de
casos en los que los sujetos habían informado de secuencias de pensamientos que dieron
origen a una intuición, incluyendo episodios de la historia de la ciencia, entrevistas
psiquiátricas, exámenes de estudiantes que resolvían problemas de física y otros de
estudiantes que resolvían problemas de intuición. En esa revisión, rara vez aparecieron
analogías novedosas ni remotas, sino que los sujetos lograron sus intuiciones por medios
más directos: la deducción, el reconocimiento de patrones, el ensayo y error –todas
analogías más bien cercanas que remotas— y de otras maneras.
Perkins nos indica que, de hecho, rara vez observó en su revisión analogías
novedosas o remotas eficaces, por inteligente que fuese el sujeto. Esas analogías
equivaldrían a unos paralelos fundamentales profundos que uniesen superficies diferentes,
sin que exista al parecer ningún motivo intrínseco de que semejantes paralelos sean
frecuentes. Las analogías cercanas constituyen probablemente para el sujeto pensante un
instrumento más útil que las analogías remotas, aunque las analogías remotas tienen
atractivas cualidades que han llamado la atención.
efectiva del trabajo creativo, ese objetivo parece asequible a juzgar por el análisis
precedente. La enseñanza en particular, debería fomentar el perfil de actitudes
característico de la creatividad. Mediante la exhortación, la suministración de buenos
modelos de desempeño, el llamar la atención sobre los atributos de figuras creativas bien
conocidas y el refuerzo de los indicios de actitudes creativas cuando se produzcan, los
programas en cuestión deberían ser capaces de suscitar una actitud investigadora e
inquisitiva. La enseñanza debería fomentar además los estilos cognitivos pertinentes. Una
enseñanza de ese tipo, por ejemplo, deberá dar preferencia a la detección de problemas
antes que a la terminación de tareas predefinidas, y proporcionar al mismo tiempo estímulo
y asesoramiento para detectar el problema. Y se pueden enseñar además aquellas
estrategias selectas que aparentemente ofrezcan buenos resultados.
Ese enfoque educacional se diferencia tanto de la educación convencional como de
muchos esfuerzos contemporáneos encaminados a enseñar la creatividad. La educación
convencional no hace gran cosa por alentar las actitudes creativas, e incluso puede actuar
contra ellas. Muchos esfuerzos dedicados a enseñar la creatividad han propugnado
estrategias de dudosa eficacia o capacidades del tipo de la fluidez ideacional. Es de
desear que se produzca un desplazamiento del interés que lleve a una mayor atención a
las actitudes y los estilos cognitivos, así como a una selección más cuidadosa de las
estrategias y a la elaboración de pruebas más eficaces sobre dichas estrategias.
Reunir a estudiantes de diversos entornos para que puedan observar las diferentes
actitudes y estilos de solución de problema» y para que puedan aprender el uno del
otro.
Además del contenido del curso, Rubenstein considera que las actitudes de los
profesores y sus interacciones con los alumnos son sumamente importantes. Los
siguientes, constituyen algunos de los principios que según Rubenstein le sirvieron de
ayuda en sus esfuerzos para producir el aprendizaje y el desarrollo:
Rubenstein considera que el curso ha sido un éxito y las razones de este éxito son el
contenido del curso; la preparación y el entrenamiento del personal de enseñanza; las
oportunidades variadas para el aprendizaje; la disponibilidad y ayuda del personal; los
laboratorios de aprendizaje; y el entusiasmo, dedicación y compromiso de los instructores
y los profesores.
Solución de Problemas 27 Luis Hernando Mutis Ibarra
Rubenstein identifica dos dificultades que impiden una solución de problemas eficaz: 1)
la incapacidad para utilizar la información conocida y 2) la introducción de limitaciones
innecesarias. Rubenstein considera la primera dificultad como una consecuencia de modo
en que funciona el cerebro y, en particular, el hecho de que, si bien gran parte de la
información es almacenada en la memoria, tan sólo una pequeña parte de ésta es
accesible en cualquier momento. El autor atribuye la limitada accesibilidad de la
información a las restricciones de la «unidad de procesamiento humano». Su respuesta a
esta dificultad consiste en no depender de la memoria, y utilizar técnicas que hagan
innecesaria, esta dependencia; por ejemplo, escribir el problema de forma muy simple,
utilizando una notación matemática, diagramas, cuadros, etc.
Con respecto a la segunda dificultad, Rubenstein indica que a menudo las personas
buscan la solución de un problema en un espacio demasiado reducido; es decir, parten del
supuesto de que existen límites que en realidad no existen. Por ejemplo, al intentar
solucionar un problema de arreglo de palos, es posible que se compongan como si
supusiesen que la solución debe manejarse en dos dimensiones, sin lograr considerar la
posibilidad de resolver el problema utilizando una tercera dimensión.
A fin de ayudar a solucionar estas y otras dificultades, Rubenstein ofrece las siguientes
líneas directrices generales (parafraseadas) para la solución de problemas: a) procure
adquirir una imagen total del problema antes de intentar resolverlo; b) evite
comprometerse demasiado deprisa con un determinado curso de acción; considere, varios
enfoques antes de elegir uno; c) intente representar el problema, con un modelo (verbal,
matemático, pictórico); d) una vez encontrada una representación, busque modos de
transformarla en otras representaciones que puedan indicar otros enfoques; e) intente
repetir la pregunta, que se plantea; una repetición puede mostrar una nueva perspectiva y
nuevas ideas acerca de los enfoques. f) esté dispuesto a recusar las premisas y los
supuestos relacionados con el problema.
Otras sugerencias con respecto a las maneras de facilitar la solución de problemas
incluyen: trabaje hacia atrás; generalice el problema o particularice el problema cuando
ello pueda resultarle útil; tómese la libertad de explorar varios enfoques; aprenda cómo
utilizar de modo eficaz las soluciones parciales; utilice analogías y metáforas; siga los
presentimientos y preste atención a cómo se siente sobre su progreso, hable del problema
con otras personas y escuche sus ideas.
Dentro de este conjunto se incluyen descripciones de los modelos probabilísticos y su
aplicación a la deducción estadística, los modelos de toma de decisiones, los modelos de
optimización que incluyen la programación lineal y toma de decisiones secuencial, los
modelos de sistemas dinámicos y los modelos que tienen que ver con la evaluación y la
aplicación de valores. El énfasis en el papel de los modelos en la solución de problemas es
central.
Se trata de un buen curso que cubre extensamente los enfoques formales de la
solución de problemas, mientras que al mismo tiempo investiga varias áreas con bastante
detenimiento. Sin embargo, está fuertemente orientado hacia los enfoques matemáticos de
la solución de problemas, y no es adecuado para su uso con alumnos de enseñanza
media o con personas que carecen de los conocimientos matemáticos necesarios.
Cabe cuestionarse si la enseñanza de materias con base matemática, como las teorías
de decisión estadística, la programación lineal y la teoría de la utilidad, permite que las
personas solucionen mejor los problemas cotidianos. Sin duda parece que este
entrenamiento debería surtir efecto. Evidentemente, los enfoques matemáticos formales
Solución de Problemas 28 Luis Hernando Mutis Ibarra
El autor indica que todos estos sistemas dependen de siete estrategias básicas de
aprendizaje: 1) estructuración: búsqueda activa de las relaciones; 2) contexto: relación del
material con lo que ya se sabe; 3) control: examen de uno mismo, observando el progreso
y aislando las partes difíciles para trabajar más en ellas; 4) inferencia: extraer inferencias,
buscar ejemplos contrarios, buscar material adicional; 5) ejemplificar: generar ejemplos; 6)
Solución de Problemas 30 Luis Hernando Mutis Ibarra
Ante la toma de decisiones divide los problemas en cuatro clases: decisiones bajo
certidumbre, riesgo, incertidumbre y conflicto. Las decisiones bajo certidumbre surgen
cuando la persona conoce todas las opciones y sus propiedades, pero puede tener
dificultades para separar los pros y los contras. Hayes discute varias estrategias. Por
ejemplo, la ordenación lexicográfica elige la dimensión más importante de variación y
calcula las ventajas y desventajas; a continuación trata la siguiente dimensión en
importancia y así sucesivamente. Las decisiones tomadas bajo riesgo surgen cuando los
sucesos se producen con una probabilidad conocida o estimable. Las conjeturas de todo
tipo son un ejemplo de ello. Las decisiones bajo incertidumbre se producen cuando no
existen medios fiables para estimar las probabilidades, y las decisiones bajo conflicto se
producen en situaciones competitivas, como los juegos o las guerras. Para los dos últimos
tipos de decisiones, Hayes considera las elaboraciones y variantes de la estrategia «mini-
maxi», que utiliza una matriz de los posibles resultados de todos los cursos de acción bajo
todas las condiciones a fin de minimizar la pérdida máxima. Hayes discute el análisis de
costos y beneficios, en el cual es necesario determinar todas las posibles consecuencias
de los cursos de acción y considerar los costos y los beneficios.
Otro aspecto del solucionador de problemas completo de Hayes se centra en la
creatividad, empezando por los procesos cognitivos implicados en ella. El pensamiento
creativo se define como el pensamiento que produce resultados originales y valiosos. Las
estrategias recomendadas para el pensamiento creativo incluyen la dirección del problema
para localizar y aceptar los que requieren una solución, la búsqueda de ejemplos
contrarios, la búsqueda de interpretaciones alternativas de los fenómenos, la generación
de ideas a través de de los «torbellinos de ideas» y el descubrimiento de analogías, y la
planificación de la dirección del esfuerzo considerando con cuidado muchas opciones. Se
sostiene que la aprobación por parte de los padres, el tiempo disponible, una tradición de
actividades escolares, además de otros factores, influyen sustancialmente sobre la
probabilidad de un logro creativo. Hayes presenta tabulaciones biográficas que
demuestran que Mozart necesitó muchos años antes de que sus composiciones
alcanzaran una calidad respetable.
Se puede afirmar que el solucionador de problemas completo de Hayes subraya la
importancia de una experiencia específica del dominio y cabría pensar que este principio
podría aplicarse también al empleo de las estrategias generales del pensamiento.
Aunque lo mejor sería que tuviéramos nuestro propio esquema filosófico para
expresarlo con más claridad. La guía filosófica actúa para sacar a la superficie e iluminar
las propias ideas y, posiblemente, para que surjan otras nuevas. Somos muy vulnerables
cuando andamos escasos de fe o confianza. No obstante, la otra cara de esta acertada
observación es que la filosofía puede sacar fuerzas de ambos bandos (la teología y la
ciencia) sin tener que absorber los dogmas y puntos flacos respectivos.
No todos los problemas tienen solución, pero aunque no logre encontrarla necesita
manejar el problema de tal modo que su vida siga adelante.
Aunque filosofía y práctica son dos palabras que la mayor parte de la gente no suele
relacionar, lo cierto es que la filosofía siempre ha proporcionado herramientas que las
personas podemos usar en la vida cotidiana. La gran verdad sobre la filosofía (y este es
un secreto bien guardado) es que todo el mundo puede ejercerla. La investigación
filosófica no es campo vedado de filósofos, licenciados o diplomados; basta con la
voluntad de enfocar el tema en cuestión de términos filosóficos. Es aprender la manera de
ser lo bastante radical como para considerar todas las opciones, pero con la suficiente
prudencia para elegir la correcta.
Sin duda, el pasado nos condiciona e informa el modo en que solemos ver las
cosas; de ahí que examinar el pasado puede que resulte provechoso. Es posible que la
2
tomado de: “Más platón y menos prozac”, filosofía para la vida cotidiana. Lou Marinoff. Traducción de Borja Folch.
Sine Qua Non, ediciones b, grupo z. Barcelona. 1ª edición, junio 2000, 9ª reimpresión: marzo 2001.
Solución de Problemas 32 Luis Hernando Mutis Ibarra
comprensión de su propia psicología sea una valiosa preparación para cultivar su propia
filosofía. Todos llevamos un equipaje psicológico, pero librarse del exceso quizá exija
ayuda y asesoramiento filosófico. Cualquiera con una mente inquieta está preparado para
ese examen de la vida que es el objetivo común de todos los filósofos.
Cuando Sócrates declaró que una vida sin reflexión no merecía la pena ser vivida,
abogaba por la evaluación personal constante y el esfuerzo por mejorarse así mismo como
la más alta de las vocaciones. Tener problemas es normal, y la congoja emocional no
constituye necesariamente una enfermedad. Las personas que luchan por hallar una
manera de comprender y manejarse en un mundo que cada día es más complejo no tienen
porqué verse rotuladas con un trastorno, cuando lo que en realidad están haciendo es
avanzar por caminos consagrados a la búsqueda de una vida más satisfactoria.
Nos encontramos con que ni la ciencia ni la religión pueden responder a todas
nuestras preguntas. El psicoterapeuta filosófico Víctor Frankl advirtió que este hecho
conducía a un vacío existencial y que la gente corriente necesitaba una nueva vía de
salida: ―Cada vez se agolpan más pacientes en nuestras clínicas y consultorios
quejándose de vacío interior, de la sensación de una absoluta y definitiva falta de sentido
en sus vidas. Podemos definir el vacío existencial como la frustración de lo que cabe
considerar la fuerza motivadora más elemental del hombre, a la que podríamos llamar la
voluntad de significar‖. Recuérdese que es mucho más saludable vivir la vida que cavar
constantemente en busca de sus raíces. La vida no es una enfermedad. Nosotros no
podemos cambiar el pasado.
La filosofía y la ciencia constituían antaño una sola ocupación. Aristóteles estudió
astronomía y zoología además de lógica y ética. Robert Boyle se habría definido a sí
mismo como filósofo experimental en su currículum. La filosofía de Freud a propósito de la
psiquiatría era que todos los trastornos mentales en última instancia se explicarían en
términos físicos. En otras palabras, pensaba que toda enfermedad mental era causada por
una enfermedad cerebral. Y ahí es hacia donde se ha dirigido la psiquiatría moderna.
En la mayor parte de los casos, la infelicidad personal, los conflictos de grupo, la
descortesía imperante, la promiscuidad descarada, las olas de crímenes y las orgías de
violencia no son producto de una sociedad mentalmente enferma, sino de un sistema ha
permitido e incluso fomentado que la sociedad terminara padeciendo de trastorno moral. El
orden moral no es un medicamento, pero tiene unos efectos secundarios maravillosos.
Filosofía y psicología siguieron siendo disciplinas gemelas hasta entrado el siglo
XX. Dichos campos se han ido separando a lo largo del último siglo, puesto que la
psicología se ha distanciado de la rama de humanidades de la academia para aproximarse
a las ciencias sociales. El divorcio se consumó con el surgimiento de la psicología
conductista. Cualquier filosofía de la humanidad estaría incompleta sin un punto de vista
psicológico, porque ambas se han dedicado exclusivamente a observar la naturaleza
humana. Pensar que un ser humano no es más que una criatura que responde de forma
controlable a unos estímulos concretos es menospreciar nuestra esencia humana. Es
pasar por alto la psique; somos más que nuestros condicionamientos; la vida va más allá
de una serie de respuestas establecidas.
Los conductistas convierten a las personas en unos seres demasiado superficiales y
omiten nuestros ricos universos mentales. Una de las facultades que poseemos los seres
humanos es la capacidad de provocar nuestros propios estímulos internos. En la
psicología, el conjunto de observables consiste en la psique. ¿Cómo se observa eso?
¿Qué es? La neuropsicología estudia el cerebro, que es mensurable, al menos hasta cierto
Solución de Problemas 33 Luis Hernando Mutis Ibarra
punto. Ahora bien, la psicología general se centra en la mente. Puesto que la mente, o la
psíque, no tiene características físicas, todas las observaciones son indirectas y todas las
conclusiones son más subjetivas y menos ciertas que en el terreno de las ciencias físicas.
Incluso en las ciencias físicas, que se benefician de la observación directa, nuestra
información resulta imperfecta.
La terapia psicológica tropieza con dos problemas: uno el de la Causa y efecto, que
significa que si un acontecimiento ha sucedido antes que otro, el primero fue causa del
segundo. Y El otro el modelo médico para diagnosticar y tratar las enfermedades físicas.
Un ejemplo: Los pacientes que acuden temprano a la consulta eran diagnosticados como
ansiosos; los pacientes que llegan tarde como hostiles, los que llegan a la hora prevista
como compulsivos. La declaración o suposición de que algo existe sin que haya modo de
probarlo es lo que los filósofos denominan ―cosificación‖. Los psiquiatras y los psicólogos
son expertos en la cosificación de síndromes y trastornos: primeo se los inventan y luego
buscan síntomas en las personas y sostienen que eso demuestra que la enfermedad
existe. La terapia, como el asesoramiento, es ante todo un arte. Si su problema está
relacionado con la identidad, los valores o la ética, lo peor que puede hacer es permitir que
alguien le endilgue una enfermedad mental y le extienda una receta. Ninguna pastilla hará
que se encuentre a sí mismo, que alcance sus metas o que obre como es debido.
Las respuestas fáciles no existen. La única manera de obtener una solución real y
duradera a un problema personal consiste en abordarlo, resolverlo, aprender de él y
aplicar lo que se aprenda en el futuro.
Trata las formas de usar la filosofía para ayudarse a sí mismo en los límites de la
autoayuda. Se presentarán los cinco pasos del proceso PEACE (Paz en inglés) para
enfrentarse a los problemas con actitud filosófica.
PEACE es un acrónimo de las iniciales de las cinco etapas que componen el
proceso: Problema, Emoción, Análisis, Contemplación y Equilibrio. Los dos primeros pasos
enmarcan el asunto. Las dos siguientes estudian el problema de manera progresiva. El
tercer paso le conduce más allá que casi toda la psicología y la psiquiatría, y el cuarto le
sitúa de pleno en la esfera filosófica. La última etapa incorpora a su vida lo que ha
aprendido en cada uno de los pasos anteriores, puesto que los planteamientos
meramente intelectuales no resultan prácticos a menos que se sepa cómo utilizarlos.
Lo primero que cabe hacer es identificar el problema. Normalmente cuando
tenemos un problema, lo sabemos, y la mayoría de nosotros cuenta con un mecanismo de
alarma interno que se dispara cuando necesitamos ayuda o recursos complementarios.
Muchas veces concretarlo es complicado, lo que requiere cierto esfuerzo. Cuando se
disponga a definir el problema al que se enfrenta, procure averiguar lo que ocurre sin emitir
juicios. Estará contemplando sucesos externos a usted, hechos que existen con
independencia de sus creencias, sentimientos o deseos al respecto. Tal como enseña el I
Ching, las cosas cambian sin cesar, de modo que siempre vamos encontrando situaciones
nuevas.
En segundo lugar, debe hacer acopio de las emociones que le provoca el problema.
Se trata de una contabilidad interna.
En el tercer paso, análisis, usted enumera y examina las opciones de que dispone
para resolver el problema. Cuando analice su situación, tiene que determinar qué es un
mero fenómeno y qué constituye el verdadero problema para usted. La solución ideal sería
la que normalizará tanto los aspectos externos (el problema) como los internos (las
emociones que ha despertado el problema), pero la solución ideal no siempre está a su
alcance.
3
Op. Cit Lou Marinoff.
Solución de Problemas 35 Luis Hernando Mutis Ibarra
8.1. DESCRIPCIONES
Las descripciones constituyen un medio especialmente adecuado para la práctica
del pensamiento problémico. Cualquier objeto o situación pueden ser descritos de
múltiples maneras, según el enfoque que se les dé. Esta diversidad de enfoques es
especialmente obvia cuando un número considerable de estudiantes describe un mismo
tema. Ello contribuye a estimular la búsqueda de enfoques alternativos. Cualquier tema
puede ser descrito en tantas formas como puntos de vista comporte. Una descripción
puede ser más completa que otra, pero ninguna excluye la acepción de otras versiones.
Las descripciones hacen que uno sea más consciente de su interpretación de las cosas, al
tener que atenerse a un punto de vista dado, es decir, hay que adoptar un punto de vista
definido en vez de limitarse a poseer una vaga conciencia del tema.
El objetivo de las descripciones es ilustrar la multiplicidad de enfoques y estimular
su concepción. Por ello, no importa tanto la calidad literaria o la exactitud de la descripción
como la diferencia entre una descripción y otra, y el uso de nuevos métodos descriptivos.
Solución de Problemas 36 Luis Hernando Mutis Ibarra
tijeras, una postal para obtener una forma dada, luego no puede reprocharse a otro
alumno que solucione el problema doblando la postal; no puede excusarse con «yo no dije
que pudiera plegarse» o «era de suponer que no se podía doblar, así no sería problema».
Es importante tener en cuenta este punto, porque si se exige a los alumnos que partan de
supuestos y restricciones implícitos, se va directamente contra los principios del
pensamiento lateral, que aboga por la supresión de todo efecto restrictivo en el acto de
pensar.
Muchos de estos problemas artificiales son evidentemente triviales; pero ello no
menoscaba su utilidad, ya que los procesos empleados en su solución pueden luego
aplicarse a problemas reales de la vida diaria. Hay que hacer que el alumno desarrolle
mecánicamente una serie de procesos de solución de problemas.
Existe un tercer tipo de problemas de fácil confección, aunque requieren cierto
trabajo por parte del maestro. Consiste en la búsqueda del planteamiento de problemas
que han sido ya solucionados. El problema ha de plantearse de manera definida, de ser
posible en los términos reales originales, pero su solución no ha de ser demasiado
conocida. Por ejemplo: « ¿Cómo fabricarían baldes, cubos y tuberías de plástico?» El
profesor que ha averiguado todo lo referente al uso de moldes, vacío, extrusión, etc.,
estimula las sugerencias y al final explica las soluciones. Después de plantear el problema
puede preguntar si alguien conoce la solución, para en caso afirmativo pedirle que aplace
su exposición hasta después de que el resto de la clase haya intentado adjudicarle
diferentes soluciones.
El ejercicio puede también hacerse por escrito, caso en el cual no hay inconveniente
en que alguien conozca la solución. Esta clase de problemas pueden encontrarse
consultando revistas técnicas y científicas, o bien visitando exposiciones. No existe
inconveniente para usar una solución que haya requerido un proceso complejo.
8.3. EL DIBUJO
El dibujo de dispositivos mecánicos o de otro tipo es un caso especial de solución
de problemas. A veces el objetivo del dibujo es superar algún defecto, pero con mayor
frecuencia reside en crear algo que no existe. Los problemas de dibujo suelen carecer de
solución definida y requieren considerable dosis de creatividad. No se basan en la
consecución de un objetivo claramente definido a partir de una situación igualmente
definida (como en la solución de problemas propiamente dichos), sino que se inician en
función de una situación general hacia un objetivo igualmente general.
No es necesario que el dibujo sea de gran calidad; tampoco el propio diseño precisa
mucha exactitud, basta con que se realice un intento genuino de expresar visualmente la
idea que se concibe. Puede recurrirse al uso de palabras o frases que expliquen alguna
parte o función del diseño, aunque debe reducirse el texto al mínimo indispensable. La
ventaja de la exposición visual radica en su mayor precisión, en el carácter más concreto
del concepto; las palabras pueden ser vagas o tener un significado general, pero las líneas
son perfectamente definidas. Por ejemplo, en el diseño de una máquina de pelar papas
sería muy fácil decir: «Aquí se introducen las papas», «cámara de lavado», etc.; en
cambio, han de definirse visualmente estas funciones, o sea si requieren dispositivos
auxiliares o complementarios.
Solución de Problemas 39 Luis Hernando Mutis Ibarra
Objetivos de los diseños: Un mismo diseño puede tener varios objetivos. Suelen
coexistir un objetivo principal y otros secundarios. A veces los alumnos intentan conciliar
objetivos opuestos desde un principio, lo que hace que su progreso sea muy lento y que
rechacen toda idea que no cumpla los requisitos implícitos en los objetivos. Otras veces
adoptan la actitud opuesta y progresan con rapidez en un intento de cumplir el principal
requisito; luego tratan de conciliar la solución obtenida con el resto de los objetivos. Es
preferible realizar la valoración al final que aplicarla en las distintas fases del trabajo, ya
que la reiterada formulación de opiniones tendría como consecuencia el que se rechazaran
diversas ideas que, aun siendo inadecuadas en sí mismas, pueden conducir a algún
enfoque eficaz.
se elogia en el punto donde existe, en vez de criticar su ausencia donde se ha omitido. Por
dichas razones es preferible que los alumnos no participen en la valoración de los trabajos
de otros.
Los diseños de dispositivos mecánicos simples suelen ser más útiles que los
proyectos de tipo más abstracto. Puede pedirse a los alumnos que dibujen una nueva
versión de cualquier objeto corriente: el teléfono, un lápiz, una bicicleta, una estufa,
zapatos, pupitres, etc.
4
DE BONO, Edgard. “El pensamiento Lateral”.
Solución de Problemas 42 Luis Hernando Mutis Ibarra
DIFERENCIA CARACTERÍSTICA
Las dos funciones básicas del pensamiento lateral son el uso de la información
como estímulo de nuevas ideas y la superación de los conceptos comúnmente aceptados
como absolutos. Ambas funciones sirven al mismo objetivo de reestructurar los modelos,
proceso necesario para proporcionar un uso más eficaz a la información disponible, y su
finalidad común es llegar a una visión perspicaz, o sea más aguda, del problema o
situación a que se aplican.
La mente es un sistema elaborador de modelos, que crea reflejando el mundo
exterior; luego identifica y actúa en operaciones subsiguientes. En ello reside la gran
efectividad del pensamiento lógico, pero también la razón de ciertas limitaciones que
derivan de la excesiva influencia que el orden de entrada de la información ejerce en la
forma que ésta adopta en los modelos, haciendo que los mismos no constituyan la
expresión óptima de la información disponible. Con el fin de poner los modelos al corriente
disponiendo la información en la mejor forma posible, se requiere un mecanismo de
reestructuración perspicaz, que no radica en el ámbito del pensamiento lógico, por ser su
misión relacionar los modelos entre sí, no reestructurarlos. El pensamiento lateral es una
exigencia del comportamiento de este tipo de sistema de proceso de información. Las
funciones estimuladora y reestructuradora del pensamiento lateral tienen, pues, ese
objetivo. En ambos casos la información se usa al margen de la razón, por ser ésta el
ámbito del pensamiento lógico. La efectividad del pensamiento lateral radica en el
funcionamiento de la mente como sistema de memoria optimizadora espontánea, en un
proceso similar al humor.
Solución de Problemas 43 Luis Hernando Mutis Ibarra
aislamiento y trato especial reside en el carácter específico del pensamiento lateral con
respecto a otros procesos intelectuales (su función es ya ser diferente). A menos que se
tenga siempre en cuenta esa clara diferenciación del pensamiento lateral, existe el riesgo
de generar la impresión de que su cultivo se realiza en detrimento de la enseñanza en
general. En cambio, con su desarrollo aislado se evita cualquier idea de contradicción y se
hace evidente la función complementaria entre el pensamiento lateral-y el pensamiento
lógico o vertical, ya que el primero no se basta a sí mismo y el segundo aumenta
extraordinariamente en efectividad con la adición de este nuevo proceso, que le brinda
ideas para su elaboración lógica.
Otra razón del porqué de esa distinción entre pensamiento lateral y pensamiento
lógico reside en la necesidad de combatir la creencia de que el pensamiento lateral se
cultiva ya en la enseñanza normal de otros temas, no requiriendo por tanto sesiones
especiales. En la práctica se ha demostrado el error de este supuesto. No hay duda de que
todo maestro cree que emplea el pensamiento lateral y que lo estimula en sus alumnos. Es
muy fácil estar convencido de ello; sin embargo, la naturaleza básica del pensamiento
lateral es tan diferente de la del pensamiento vertical que resulta imposible enseñar ambos
de modo simultáneo. No basta con introducir cierta noción del pensamiento lateral. Es
necesario desarrollar suficiente habilidad en su uso para poder aplicarlo voluntaria y
conscientemente, ya que de poco serviría reconocer sus manifestaciones y luego nada
más.
1. Una ojeada al periódico permite obtener problemas del tipo universal o bastante
inmediato (por ejemplo, las huelgas).
2. La vida cotidiana puede sugerir de ciertos tipos de problemas (por ejemplo, la
necesidad de un servicio de transporte más eficaz).
3. Los propios estudiantes pueden suministrar problemas, a petición del maestro,
que luego los acumula para utilizarlos en otras clases.
4. Los problemas de dibujo pueden girar en torno al diseño de un objeto cualquiera
(un coche, una mesa, un pupitre), formulando preguntas sobre cómo podría obtenerse una
versión más perfeccionada. Pueden también escogerse problemas más complejos, como
el diseño de alguna máquina que realice tareas hasta la fecha efectuadas manualmente, o
de un instrumento que facilite esta tarea, o, sin máquinas o aparatos, buscar una manera
para simplificar la tarea.
5. Los problemas cerrados son más difíciles de preparar. Han de tener una solución
definida lo bastante complicada como para que revistan interés, pero no tanto que no
pueda encontrarse. Hay algunos problemas clásicos que pueden utilizarse a este fin, pero
sería contraproducente recurrir al uso de un libro de problemas o puzzles, porque éstos
normalmente requieren sólo el dominio de simples trucos matemáticos que nada tienen en
común con el pensamiento creativo. Un método para conseguir elaborar problemas
cerrados consiste en elegir alguna tarea corriente y luego adecuar los medios para su
ejecución; por ejemplo, el trazado de una circunferencia sin disponer de un compás. Antes
de plantearlo en clase, se busca una solución aceptable.
Anécdotas y relatos: Las anécdotas y los relatos son quizás un medio eficaz pero
son extremadamente difíciles de componer. Como punto de partida pueden utilizarse:
Material de reserva: Crear el material que sirva de base a los problemas y los
ejercicios a desarrollar durante el curso de una clase es más difícil de lo que parece. Por
ello, hay que tener abundante material en reserva: recortes de periódicos, fotografías,
problemas, relatos, anécdotas, temas e ideas sugeridos por los propios estudiantes. De
ese modo se dispone de suficientes recursos para su uso cuando proceda. Ello tiene
además la ventaja de que con su uso repetido puede comprobarse qué material es eficaz;
se llega incluso a prever las respuestas y reacciones de los estudiantes ante ejercicios
dados. Las anécdotas, relatos y problemas han de explicar algún aspecto del pensamiento
Solución de Problemas 46 Luis Hernando Mutis Ibarra
lateral, Los temas deben ser neutros: suficientemente específicos para obtener ideas
concretas, pero lo bastante amplios para que estimulen una considerable variedad de
ideas. Las ilustraciones han de prestarse a diversas interpretaciones: un hombre con una
lata de conservas en la mano permite esa diversidad de significados; un bombero que esté
apagando un incendio permite sólo una interpretación; una mujer que se mira en un espejo
constituye un ejemplo de acción ambigua, como lo puede ser la acción de un policía al
detener a alguien, o bien un grupo de soldados que marchan marcando el paso. Basta con
que el maestro vea en la ilustración dos significados posibles.
Al contrario, el material verbal ha de ser lo más definido posible. Un artículo de un
periódico debe ofrecer un punto de vista perfectamente delimitado, de ser posible incluso
reflejar un punto de vista fanático. Un artículo de enjuiciamiento general vago carece de
utilidad, a menos que se busque información para componer un tema.
No hay duda de que la explicación del pensamiento (cualquier tipo de pensamiento)
podría realizarse a través de una exposición técnico-científica, utilizando términos
abstractos; pero lo que realmente explica las cosas, es vivirlas. Esa vivencia comienza con
el uso de figuras geométricas abstractas y luego el proceso se transfiere físicamente a
situaciones más reales. Conviene emplear las figuras simples geométricas para hacer
resaltar el proceso, ya que con el uso exclusivo de situaciones reales la naturaleza del
proceso puede llegar a ser muy confusa. También existe el peligro de que al considerar
situaciones reales se termine por buscar información acerca de ellas.
5
Tomado y adaptado de: GONZÁLES, Quitian Alberto. “Creatividad, educación y ambiente”. Maestría en Pedagogías
activas y desarrollo humano. Convenio Universidad de Manizales – Cinde, Manizales, febrero de 1998. Capítulo 4.2.
Creatividad total y solución de problemas.
Solución de Problemas 47 Luis Hernando Mutis Ibarra
No todas las técnicas Creativas encajan en este esquema, que aunque es muy
general, no puede por su naturaleza comprender aspectos específicos de la creatividad
desarrollada en otras Técnicas.
Las técnicas Creativas comprenden un gran panorama de confluencia de diversos
autores que especifican sus procedimientos y objetivos respecto a cada una de ellas,
conformando todo tipo de Técnicas Creativas para todo tipo de problemas o situaciones
posibles en este mundo de posibilidades.
Cada técnica encierra en sus diferencias con otra, el nivel de desarrollo específico al
cual va dirigido, ya sea, el cerebral, el de la conciencia o el de mando.
En el proceso de solución creativa de problemas existe un aspecto de crucial
importancia: la formulación de retos. Dependiendo de como se aborde y se formule el
planteamiento del problema dependerá el rumbo de su solución. Thomas Alva Edison,
físico, notable inventor norteamericano, plantea en sus escritos refiriéndose al proceso de
invención, que la formulación del problema fundamental para la resolución del mismo. Dice
el inventor que, un problema bien formulado es un problema medio resuelto. Albert
Einstein por su parte, expresa a este respecto que: "A menudo, el puro planteamiento de
un problema es mucho más esencial que la solución, que puede ser solamente una
cuestión de habilidad matemática o experimental. Plantear preguntas nuevas, suscitar
nuevas posibilidades, ver viejos problemas desde un ángulo nuevo, son cosas que exigen
imaginación y señalan verdaderos adelantos de la ciencia‖.
En esta misma dirección, Warren Bennis, destacado autor y líder organizacional
plantea que en la mayoría de las organizaciones, la mitad de las veces cuando se resuelve
un problema, se está resolviendo el problema que no es y cuando se está resolviendo el
problema que es, generalmente se resuelve como no debe ser, generando un círculo
vicioso en el proceso de resolución, del cual pocos se percatan dificultándose el logro en
su solución.
Por otra parte, nuestra cultura hacia la resolución de problemas es inmediatista y es
centrada en la respuesta, somos expertos resolutores, poco indagadores en la formulación
de problemas, generando las formulaciones más desacertadas; tendemos a equivocarnos
por falta de reflexión y conocimiento metodológico en la formulación del problema.
Dependiendo de la claridad y precisión con que se aborde un reto, la solución de
este, estará inspirada por el mismo planteamiento y dependerá de si mismo para la
aceleración del proceso creativo.
Solución de Problemas 48 Luis Hernando Mutis Ibarra
Por otra parte, y fuente primaria de la misma corriente teórica, Sidney J. Parnes,
profesor de la Universidad de Búfalo en New York, pionero de la Creatividad desde la
perspectiva de la solución de problemas establece tres criterios básicos para la
formulación de problemas:
8
De COCK, Christian Solución Creativa de Problemas. La Caja de herramientas MPIA Universidad de Santiago de
Compostela 1997.
Solución de Problemas 50 Luis Hernando Mutis Ibarra
PASOS TÉCNICAS
2 A) PRODUCCIÓN DE IDEAS
Relaciones
DETERMINACIÓN B) COMBINATORIA DE IDEAS
DE IDEAS
B) ADOPCIÓN E INCORPORACIÓN
Selección de soluciones
3 Confrontación, fortalecimiento Categorías de
DETERMINACIÓN acatamiento
DE LA SOLUCIÓN C) PUESTA EN MARCHA
Diseño y elaboración
Plan de acción
Introducción y posicionamiento Presentación y
Representación
Diagramación
TOMADO Y ADAPTADO DE: S. J. Parnes. Guía creativa para la solución de Problemas. Programa para
analistas de sistemas.
Solución de Problemas 53 Luis Hernando Mutis Ibarra
12.1.1. La moralidad
La figura más significativa de la cultura democrática moderna es precisamente
separar la moral de las concepciones religiosas para pensarla como un orden
independiente y universal que sólo se refiera a la condición humana, que sean valores
estrictamente laicos, pues sólo ellos emprenden la construcción de un orden social y
político a partir de principios no confesionales. ―La preponderancia inmemorial de las
obligaciones hacia Dios es sustituida por la de las prerrogativas del individuo soberano‖ 9.
La enterradora del deber fue la civilización del bienestar consumista, donde
prevalece el placer sobre la prohibición, la seducción sobre la obligación. ―A través de la
publicidad, el crédito, la inflación de los objetos y los ocios, el capitalismo de las
necesidades ha renunciado a la santificación de los ideales en beneficio de los placeres
renovados y de los sueños de la felicidad privada; los goces del presente, el templo del yo,
del cuerpo y de la comodidad se han convertido en la nueva Jerusalén de los tiempos
posmoralistas‖10.
12.1.2. El hedonismo
El ―si yo quiero‖ se ha generalizado, promoviendo la legitimidad del placer y a
alentar fuertemente la autonomía individual, deslegitimando al mismo tiempo las normas
autoritarias, las exhortaciones inflexibles y solemnes, en beneficio de la seducción, de la
tentación, de los mensajes eufóricos y sensualistas. Los supermercados, el marketing, el
paraíso de los ocios han sido la tumba de la religión del deber. ―El bienestar se ha
convertido en Dios y la publicidad en su profeta. La publicidad proclama: Olvidaos de
todo‖11.
Esta época no sólo está dominada por los objetos, el psicologismo, sino también por
la información que, en principio excluye el juicio moral en único beneficio de los hechos
concretos, de la imparcialidad y de la objetividad. ―No condenar, no juzgar, pero decirlo
todo, mostrarlo todo, exponer todos los puntos de vista, dejar al público libre de opiniones
multiplicando y acelerando las imágenes e información del mundo‖12.
12.1.3. El cuerpo
El capital ahora es el cuerpo, se glorifica entonces la cultura narcisista de la higiene
y el deporte, la estética y la dietética; ―la cultura de la felicidad desculpabiliza la absorción
subjetiva‖. Dos tendencias antagónicas modelan la sociedad nuestra: Una excita los
placeres inmediatos (porno, droga, sexo, bulimia de objetos y programas mediáticos,
9
LIPOVETSKY, Guilles. “El crepúsculo del deber”. Editorial Anagrama. Barcelona, quinta edición, mayo 2000. Pág.
23.
10
Ibíd. Pág. 50.
11
Ibíd. Pág. 53.
12
Ibid. Pág. 54.
Solución de Problemas 58 Luis Hernando Mutis Ibarra
12.1.4. Eros
En el posdeber Eros es la mayor expresión, el porno por su lado ya no tiene
mayores consecuencias y en la cama nada está mal si es consentido por los amantes.
Vigilar y reprimir no están justificados, debe expresarse sin limitaciones ni tabúes, con la
única condición de no perjudicar al otro. ―Cuanto más libre es la sexualidad, más
estrechamente vigila la ley penal los comportamientos irrespetuosos; cuanto menos se
asocia la sexualidad con el mal, más condena la justicia actos considerados en otras
épocas poco graves‖. ―El neoindividualismo trabaja por la civilización de Eros, por un
supercontrol de las conductas y palabras masculinas: en adelante, no sólo la categoría de
violación puede ser aplicada al ámbito de la pareja sino que las bromas subidas de tono,
las conversaciones escabrosas, las familiaridades con las mujeres deben desaparecer de
los lugares de trabajo‖14. Las relaciones entre los sexos, cada vez están regidas por la
lógica de los derechos individuales, la autonomía y la dignidad que por la tradición o la
fuerza. Lo que se valida no es la fidelidad en sí, sino la felicidad durante el tiempo que se
ama, cuando la atracción entre los seres se desvanece, la fidelidad deja de tener valor, la
fidelidad entonces, se coloca en la actualidad del lado de la búsqueda intensa de los
afectos, no de la solemnidad de los juramentos: el individualismo cualitativo ha
reemplazado al individualismo cualitativo. La fidelidad posmoralista conjuga con
conciencia de lo provisional, es la ética de la fidelidad sin deber.
12.1.5. Narcisismo
Se vive un peligroso papel de autosuficiencia y autoprotección, donde el otro es más
un peligro o una molestia que una potencia atractiva; la prioridad es la gestión con éxito de
uno mismo sin perjuicio del otro. Estamos en un proceso de personalización, que es la
base de una revolución del individuo y de su cotidianidad, donde el universo de los objetos,
las imágenes, la información y los valores hedonistas, permisivos y psicologistas han
generado una forma diferente de control del comportamiento. ―Negativamente, el proceso
de personalización remite a la fractura de la socialización disciplinaria; positivamente,
corresponde a la elaboración de una sociedad flexible basada en la información y en la
estimulación de las necesidades, el sexo y la asunción de los factores humanos, en el
culto a lo natural, a la cordialidad y el sentido del humor‖.15
Los nuevos valores apuntan al libre desarrollo de la personalidad particular, el
respeto a las diferencias, la legitimidad del placer, modelación de instituciones de acuerdo
a las aspiraciones particulares de los individuos, el humor y la sinceridad, la expresión
13
Ibid. Pág. 55-56,
14
Ibid. Pág. 64, 65.
15
LIPOVETSKY, Guilles. “La era del vacío”. Editorial Anagrama, Barcelona, duodécima edición, enero 2000. Pág. 6.
Solución de Problemas 59 Luis Hernando Mutis Ibarra
16
Ibíd. Pág. 14.
17
Ibíd. Págs. 38, 39.
Solución de Problemas 60 Luis Hernando Mutis Ibarra
En realidad un trabajo lleno de sentido es vital para una vida llena de sentido.
Trabajar en algo que no gusta no tiene por qué ser malo. A veces usted desempeña un
trabajo para descubrir que no está hecho para él. No puede saberlo todo a través de la
razón únicamente, como dirían los racionalistas. Algunas cosas necesita saberlas a través
de la experiencia. Aún así la experiencia no es la única maestra. También necesitamos la
razón en nuestras experiencias.
El modo más seguro de contrarrestar los sentimientos de vacío en su vida es
ayudando a otros. Sentir que la vida carece de sentido es, en cierto sentido modo, un lujo.
Si estuviera luchando por mantenerse con vida nunca se pararía a pensar en el significado
de sus acciones. De usted depende el poco o mucho consuelo que encuentre en la noción
de que, si puede armarse de paciencia y coraje (dos virtudes cardinales), se producirá un
cambio.
12.1.7. La igualdad
El principio fundamental que regula el poder y la justicia social es la igualdad; la
exigencia de igualdad no cesa de extenderse, ya no se refiere sólo a la igualdad de todos
ante la ley, al sufragio universal, a la igualdad de las libertades públicas, sino a la igualdad
de medios (reivindicación de de oportunidades, explosión de los derechos sociales que
afectan a la instrucción, a la salud, a la seguridad económica) e incluso a la igualdad de
resultados (exámenes especiales para las minorías para remediar la disparidad de
resultados, demanda de una participación igual de todos en las decisiones que conciernen
al funcionamiento de los hospitales, universidades, periódicos o barrios: es la edad de la
democracia de participación.
12.1.8. El modernismo
Es la sociedad basada en la soberanía del individuo, libre de jerarquías del poder
tradicional; por lo tanto, se ve obligada a inventarse a sí misma según la razón humana, no
según la herencia del pasado colectivo, sin modelo impuesto. Explora nuevos materiales,
nuevas significaciones y combinaciones. Emerge con fuerza el gusto por el deporte, la
esbeltez y las danzas modernas; emergencia en la moda de vestir, pero así mismo crece
también el suicidio y la disminución de la violencia interindividual. El modernismo es de
esencia democrática. Todo gana dignidad. "El arte y la vida están aquí y ahora. J. Cage
invitará a considerar como música cualquier ruido de un concierto, Ben llega a la idea de
arte total; "Escultura de arte total: levantad cualquier cosa -Música de arte total: escuchad
cualquier cosa- Pintura de arte total: mirad cualquier cosa"18. La ciencia y la técnica
suscitan nuevos valores privilegiados en la velocidad, el ritmo y el movimiento; el ideal es
crear sin Maestro y escapar al estaticismo al estancamiento repetitivo.
A más tiempo libre, a mayor personalización, más aumenta el riesgo de que el
trabajo resulte fastidioso, vacío de sentido. "Cuanto más la sociedad se humaniza, más se
extiende el sentimiento de anonimato; a mayor indulgencia y tolerancia, mayor es también
la falta de confianza personal; cuantos más años se viven, mayor es el miedo a envejecer;
cuanto menos se trabaja, menos se quiere trabajar; cuanto mayor es la libertad de
costumbres, mayor es el sentimiento de vacío; cuanto más se institucionalizan las
18
Ibíd., Pág. 90.
Solución de Problemas 61 Luis Hernando Mutis Ibarra
12.1.9. La violencia
19
Ibíd., Pág. 128
20
Ibíd., Pág. 174
21
Ibíd., Pág. 175
22
Ibíd., Pág. 178
Solución de Problemas 62 Luis Hernando Mutis Ibarra
23
Ibíd., Pág. 187
24
Ibíd., Pág. 190
Solución de Problemas 63 Luis Hernando Mutis Ibarra
25
Ibíd., Pág. 193
26
Ibíd., Pág. 196
27
Ibíd., Pág. 206-207
28
Ibíd., Pág. 213
Solución de Problemas 64 Luis Hernando Mutis Ibarra
29
MARINOFF, Lou. “MÁS PLATÓN Y MENOS PROZAC”, Filosofía para la vida cotidiana. Traducción de Borja
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140-144.
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MARINOFF, Lou. “Más platón y menos prozac” Op. Cit. Pág. 225
Solución de Problemas 65 Luis Hernando Mutis Ibarra
Sólo hay dos clases de cosas que pueden llevarle a pensar que algo está mal: un
trastorno o un malestar. El dolor y la incomodidad no son siempre ni forzosamente algo
malo. De la misma manera, el placer no es siempre bueno. El dolor es bueno cuando nos
advierte de que algo va mal y requiere atención, como en el caso de un dolor de muelas.
Asimismo, los placeres son malos cuando no nos advierte que algo anda mal y requiere
atención, como por ejemplo en el caso de una adicción. Tropezamos con infinidad de
placeres y dolores durante el viaje de nuestra vida: bienestar, trastorno y malestar.
Usemos las señales que recibimos de que algo está mal para enmendarlo. Ocultar
los síntomas sin corregir el problema subyacente que anuncian constituiría un desastre.
Debemos agradecer esas señales, aunque resulten incómodas. Sólo si afrontamos el
problema seremos libres de deleitarnos en el bienestar.
El trastorno y el malestar pueden dar lugar a dos clases de advertencias: El dolor y
el sufrimiento, respectivamente. No todos los trastornos nos causarán dolor de inmediato.
¿Qué pasa cuando lo que experimentamos es sufrimiento? Este surge tanto del malestar
como del trastorno. ¿Hay algo malo en su entorno, o en una relación, que sea la causa del
malestar? ¿Sufrimos porque alguien nos está haciendo sufrir o porque nosotros mismos
nos hacemos sufrir? Suponiendo que nada ni nadie nos está haciendo daño, esta
dicotomía es falsa. Nosotros podemos culpar a los demás del malestar, pero el sufrimiento
es sólo nuestro. Esto es algo positivo, pues si es nuestro, podemos repudiarlo.
A veces, el sufrimiento es el reflejo de un problema físico. Por ejemplo, es evidente
que las personas que padecen una depresión crónica sufren por culpa de su depresión, la
cual puede estar causada a su vez por un problema en su química cerebral, de modo que
no pueden eliminar el sufrimiento quizá se vea aliviado mediante voluntad. En este caso, el
sufrimiento quizá se vea aliviado mediante un medicamento.
Nuestra tarea principal, consiste en comprender las clases de sufrimiento que son
fruto de nuestras propias creencias, prejuicios y hábitos, y que, por consiguiente, cabe
aliviar modificando las creencias, desterrando los prejuicios y cambiando de hábitos. O lo
que viene a ser lo mismo, sirviéndose del conocimiento aplicado.
Si usted ya está sufriendo y lo que busca es comprender las verdaderas causas de
ese sufrimiento, quizá llegue a descubrir que la verdadera causa es usted mismo. Si tal es
el caso, y para muchos lo es, entonces es que usted ha decidido sufrir y, por lo tanto, usted
tiene la capacidad de reducir o eliminar su sufrimiento decidiendo no sufrir. La vida
siempre está dispuesta a cambiarle. ¿Cuándo estará usted dispuesto a cambiar su vida?
algo a nivel físico. El dolor sirve para advertir que existe algún problema físico que requiere
nuestra atención.
El sufrimiento es un estado mental. Al igual que ocurre con la ofensa, hay que ser
cómplice dispuesto para sentirlo. Las personas pueden causarnos dolor contra nuestra
voluntad, pero es muy poco probable que nos hagan sufrir sin nuestro consentimiento
tácito. Mientras el dolor lo puede causar otra persona (o uno mismo), el sufrimiento no
puede causarse del mismo modo. Si uno es dueño de su sufrimiento, también puede
despojarse de él. No es posible hacer lo mismo con el dolor.
A veces el dolor y el sufrimiento también están relacionados. En casos en los que la
enfermedad provoca dolor agudo y crónico, también provoca malestar (sufrimiento) agudo
o crónico por culpa de ese dolor. El dolor hace daño al cuerpo, el sufrimiento es el eco del
dolor en la mente. Del mismo modo, las personas que están deprimidas de forma crónica
debido a un trastorno mental también sufren de forma crónica del eco mental de tal
trastorno.
La filosofía es útil cuando se sufre, sobre todo cuando no existe un dolor agudo. Quienes
buscan orientación, o cualquier otro tipo de terapia por la palabra, suelen sufrir por algo.
En la Antigüedad, la filosofía se denominaba ―medicina para el alma‖ o ―curación de las
almas‖. Cumplía esta función de forma admirable. El dolor procede de la enfermedad, el
sufrimiento del malestar. Mientras que un ataque al corazón produce dolor físico, un
―corazón roto‖ produce angustia emocional y sufrimiento mental.
La tolerancia al dolor es algo que puede aprenderse, pero el nivel de tolerancia
inicial parece depender más de la naturaleza que de la educación.
Guardárselo para uno. Sufrir en silencio es algo noble, pero innecesario. Le priva
del disfrute y la satisfacción. O quizá se considere que el sufrimiento es una preparación
necesaria para la felicidad en la otra vida. O tal vez se alberguen ideas falsas sobre uno
mismo, que inculcadas por otras personas e impiden que florezca la auténtica
personalidad. Pero cada uno debe encargarse de encontrar las creencias que le resultan
positivas en ves de perjudiciales. Guardarse el sufrimiento para uno mismo, por noble que
sea, no es la solución. Erradicar sus causas, por mucho que se tarde, es la mejor opción.
Huir de él. Las personas, sin darse cuenta, inconscientemente o de modo certero,
crean sus propias prisiones y luego intentan escapar. Quienes son responsables de sus
sufrimientos personales no pueden huir si no se enfrentan a ellos, comprenden sus
verdaderas causas y las eliminan. Los intentos de huida del sufrimiento autoinducido no
solo fracasan, sino que suelen empeorar el sufrimiento. Sólo podemos luchar
enfrentándonos a él y no podemos huir de él. Las personas tienen la tendencia natural a
evadirse, a través del alcohol, las drogas, las relaciones, las sectas, por cualquier medio
que parezca apartarles de sí mismos, para poner tiempo o espacio o estados alterados de
la conciencia entre ellas y el sufrimiento.
pesar, dolor y pena de otros seres humanos. Diseminar el sufrimiento es, con diferencia, la
peor forma de tratarlo, para cada uno y para todos los demás.
Terminarlo en uno mismo. Parece mucho más difícil que las personas se apropien
de su malestar, porque tienen que reconocer su responsabilidad con respecto al contenido
mental para ponerle fin por ellas mismas. Es mucho más fácil, al menos a corto plazo,
echar la culpa a los demás:‖El me hace infeliz‖, o ―Ella no me aprecia‖, o ―la sociedad es
injusta conmigo‖. La única forma de poner fin a su sufrimiento es repudiarlo. Pero para ello
antes tiene que reconocer que es dueño del mismo. Si usted decide poner fin a su
sufrimiento interior, también puede. Tendrá que descubrir o inventar el medio para
conseguirlo, pero abundan las ideas filosóficas útiles
Existen múltiples formas como por ejemplo: Los narcisistas son seres
profundamente contradictorios, que enmascaran su conflicto con fachadas de perfección
que necesitan que otros reconozcan. Los solipsistas comparten un ensimismamiento
similar, pero, al mismo tiempo, niegan que haya otras personas en el mundo aparte de
ellos mismos. El universo gira en torno a la mente del solipsista porque él o ella no están
seguros de que los demás tengan mente. Es una postura sumamente escéptica, pero el
escepticismo nunca disuade a los filósofos, sino que los anima. Todo solipsista piensa que
está solo en el mundo; si no existen otras mentes, tampoco hay otros solipsistas.
dividido entre nosotros y ellos (nosotros y los otros; los elegidos y los condenados; los
creyentes y los infieles; el proletariado y la burguesía; los opresores y las víctimas; esta
tribu y aquella tribu. Y siempre, se considera que el nosotros es superior al ellos.
El reto de cada uno de nosotros es en última instancia poder estar solos, sin miedo
y felices de ser exactamente lo que somos. Entonces podríamos identificarnos con la
totalidad de la humanidad y vivir juntos en armonía. La costumbre del éxito del ser humano
se alcanza cuando uno encuentra su identidad como ser único, y no cuando uno la pierde
en una identificación autotrascendente con un grupo.
hechas por nosotros, no para nosotros. La visión es el principal medio que nos permite
obtener información de nosotros mismos y de los demás, y el principal medio a través del
cual establecemos y restablecemos conexión con nosotros y con los demás. Por
desgracia, nuestra percepción de los demás puede ser fácilmente distorsionada por ese
mismo sentido cuando confundimos lo que se ve superficialmente (la raza, la etnia, el sexo
o el atuendo) con la esencia.
La visión más elevada y noble de la humanidad no se obtiene a través de ninguno
de los cinco sentidos externos. Para ello poseemos otro sentido, interno, que conecta con
la razón, la emoción, la intuición y la memoria. Se trata de la intelección, este es el sentido
que permite ―entender‖ a través de la miríada de corrientes de información que llegan por
los demás sentidos. Es el intelecto el que realiza el juicio estético sobre esa imagen y la
juzga bella o fea. La belleza se encuentra en la mente de quien mira. El ojo por sí mismo
no establece diferencias entre un cuadro Rembrandt y un envoltorio de caramelos. Como
Berkeley dijo: ―los sentidos no hacen inferencias‖. En otras palabras, no emiten juicios. Ésa
es la misión del intelecto. Martín Luther King aconsejaba no juzgar a la gente por su
aspecto, sino por su carácter.
humanidad y la maquinidad, ocurre cuando en lugar que las personas hagan funcionar las
máquinas, las máquinas hacen funcionar a las personas. Uno ya no controla su propio
tiempo. Cuando dejamos que la maquinaria nos dirija, nuestra humanidad se encuentra en
peligro. Hay que decidir desconectarse de las máquinas, que en algunos casos más
parecen una ayuda para morir que una ayuda para vivir. Sentirse realizado es disfrutar con
lo que uno hace, no aborrecerlo.
Las personas que se encuentran en una aglomeración sienten una gran cantidad de
estrés; en cambio, las que tienen una gran cantidad de espacio vital se sienten más felices
y comunicativas. Aunque es posible experimentar la liberación en los limitados confines de
una celda. Nuestra idea de cuánto espacio es necesario para ser humano es algo muy
relativo. Si uno se queda sin espacio, siempre puede intentar obtener más (a no ser que
haya conquistado el mundo). Si uno necesita menos espacio, habitualmente puede
conseguirlo y, quizá, también prosperar.
El tiempo es un asunto totalmente distinto. Cuando uno se ha quedado sin tiempo,
se acabo todo. Uno puede intentar prolongar el tiempo que tiene, pero parece que también
hay muchas maneras de acortarlo, ya sea intencionalmente, sin darse cuenta o por
accidente. Es posible utilizar el tiempo para ganar más dinero, pero el dinero no se puede
utilizar para comprar más tiempo. El tiempo de una persona en concreto se puede alquilar,
pero no así el tiempo en sí mismo. Por ello el tiempo es nuestra posesión más valiosa, y
cómo decidamos utilizar nuestro tiempo es la decisión más importante que podemos
tomar. Tener y vivir el presente es la mejor forma de construir el tiempo, Henry David
Thoreau manifestaba acertadamente al enunciar su manejo: ―En cualquier clima y a
cualquier hora del día o de la noche, me he preocupado por aprovechar al máximo cada
momento y señalarlo en mi bastón; he tratado de situarme en ese punto de encuentro de
dos eternidades, el pasado y el futuro, que es el momento presente‖
Los ordenadores ofrecen una identidad virtual que complementa a la real. El yo real
nace, crece y experimenta todas las alegrías e incomodidades de la vida. Existen
innumerables lecciones que aprender y enseñar, infinitos asuntos que atender e incluso
más trabajos que se quedan inacabados. La vida ―real‖ puede resultar tan irreal a veces
que nos parece que no la estamos viviendo de verdad. La vida es organización que
emerge de la desorganización, y su esquema también es infinitamente profundo. Cuanto
más tiempo se vive, más profunda se vuelve la vida de uno. Cuanto más profunda es la
vida de uno, más difícil parece tocar fondo.
El rápido avance tecnológico nos ha hecho una trampa. Gran parte del ahorro de
tiempo que promete es una simple ilusión. Las máquinas nos desplazan cada vez con
mayor rapidez de un lugar a otro y nos ahorran tiempo de viaje, pero también posibilitan tal
cantidad de viajes que no tenemos tiempo de hacerlos todos. En ese sentido, las
máquinas pueden hacernos perder más tiempo del que nos ayudan a ganar. Mientras que
las máquinas físicas se ocupan de trasladar al ser real por todas partes (o hacen esperar al
ser real porque sufren retrasos), las máquinas lógicas (ordenadores y redes de
información) se ocupan de crear un ser virtual.
Mantener al ser virtual requiere tiempo real, y el tiempo real ya es suficientemente
escaso. Si uno se telecomunica o se involucra en el comercio por Internet de cualquier
tipo, necesitará ayuda técnica de forma continua para mantener la cabeza virtual por
encima del agua virtual y continuar siendo competitivo. El futuro está abierto, pero se gesta
en el presente.
Solución de Problemas 74 Luis Hernando Mutis Ibarra
Las situaciones de la vida cambian sin cesar. Como seres de carne y hueso,
cambiamos queramos o no. Podemos participar en la forma de nuestro cambio, eligiendo
bien nuestra alimentación, aprendiendo cosas mejores o peores, haciendo que nuestras
circunstancias sean mejores o peores, o adoptando principios mejores o peores para guiar
la conducta de nuestras vidas.
Cuando se produce un cambio devastador, o cuando el cambio conlleva una
situación devastadora que no parece cambiar, quienes están atrapados en tales
circunstancias pueden necesitar muchas clases de ayuda: médica, psicológica, teológica,
social, jurídica, etc. (por no mencionar el apoyo emocional de sus seres queridos). Al final,
sin embargo, es preciso entender las situaciones cambiantes (o inmutables) para
recuperar la armonía o el equilibrio interior que el cambio perturba tan a menudo. El
conocimiento puede resultar muy útil para ello. Si bien las ideas solas no pueden modificar
el cambio en sí, pueden modificar muchísimo la forma en que se reacciona al cambio. Las
buenas ideas pueden contribuir a interpretar los cambios actuales desde su perspectiva
más favorable.
Las decisiones tomadas en plena tempestad emocionales no suelen ser racionales.
La esperanza, al reducir el estrés, también pueden estimular la curación; la curación tiene
dimensiones emocional, mental y espiritual; quienes tienen esperanza se curan, o mueren
mejor. En ocasiones, las cosas positivas van acompañadas de aspectos negativos. Las
riquezas inmediatas pueden conllevar una serie de consecuencias indeseables.
Si bien el dinero no es origen del mal, no hay duda de que el ansia de dinero sí lo
es. La codicia o la riqueza repentinas pueden provocar extremos de mal comportamiento
en las personas, ya que las ganancias de un tipo suelen conllevar pérdidas de otro. Una
moraleja de la historia es que, aunque el dinero puede facilitar las transformaciones
personales, no resuelve las tensiones en las relaciones humanas. Eso exige siempre
humanidad.
El Tao también proporciona otra moraleja: las ganancias y las pérdidas son también
gemelas inseparables (aunque no idénticas); el Tao da un consejo: ―El sabio no acumula.
Cuanto más ayuda da a los demás, más se beneficia; cuanto más da a los demás, más
posee.‖ Hay muchas formas de transformar la pérdida que acompaña a la ganancia de uno
en un beneficio para los demás.
Solución de Problemas 76 Luis Hernando Mutis Ibarra
Las costumbres nos aíslan del cambio, nos permiten mantenernos anclados en
puerto seguro en medio de un mar de cambios continuos. Las malas costumbres son
fáciles de adquirir, pero difíciles de abandonar; las buenas costumbres son más difíciles de
adquirir, pero menos difíciles de abandonar. Las costumbres suelen estar respaldadas por
sus hábitos de pensamiento (o falta de pensamiento). Nuestras costumbres son en
realidad reflejo de nuestro pensamiento, porque representan una afirmación muy fuerte de
las cosas que deseamos mantener constantes. Así pues, las costumbres son una clave
para entender no sólo la personalidad de uno, sino también su filosofía de la vida.
Somos como animales que precisan mudar la piel o el cascarón para adaptarse al
crecimiento. Muchas veces deseamos dictar los cambios de nuestra vida, debemos admitir
que a menudo en realidad no sabemos exactamente lo que debemos hacer. Las
circunstancias son a veces más sabias que quienes se ven atrapados en ellas. Buscamos
el cambio y, después, nos resistimos, cuando descubrimos que éste no es exactamente lo
que habíamos imaginado. O intentamos evitar los cambios, incluidos los potencialmente
beneficiosos.
Gracias al cambio, el futuro no se parece por fuerza al pasado. El hecho de que el
pasado sea cerrado no significa que el futuro no sea abierto.
Los seres humanos pueden transformar las energías emocional, mental y espiritual
de varias formas, desde el uso de una fuerza letal hasta la creación artística, desde la
opresión de los demás hasta su propia elevación, desde la propagación de la toxina del
odio hasta la aplicación del bálsamo del amor.
Podemos transformar nuestro enfado y otras emociones negativas de dos formas
básicas: convirtiendo la energía negativa en energía neutra o en energía positiva. Por
energía neutra, se entiende a una actividad o distracción que nos permita disipar el enfado
sin dañar a nadie. El ejercicio físico –como cortar madera, golpear sacos de arena o correr-
es ideal en este sentido. También podemos efectuar la conversión a través del ejercicio
mental: ajedrez, cartas, juegos de mesa y actividades parecidas que no dañan a nadie y
que, sin embargo sirven para aplacar el enfado. El arte es el canal principal; escribir un
diario, poesías, historias cortas o novelas, interpretar o componer música; dedicarse a
artes como la pintura, la escultura, la fotografía o la cerámica, o participar en artes
dinámicas como el debate, el teatro, la danza o el cine.
Gran parte de nuestros sentimientos negativos surge debido a nuestros viejos y
conocidos enemigos: las expectativas y los vínculos o apegos. Si reducimos nuestras
expectativas y nuestros vínculos –pero no nuestros logros y nuestros disfrutes- la primera
consecuencia será que podremos disminuir la frecuencia y la intensidad de los
sentimientos negativos.
Al formular y elaborar un estilo de vida personal, estará en mejor posición para
valorar lo que es mejor y peor para usted, y para elegir y obrar de acuerdo con los
principios que aumenten su bienestar y reduzcan su malestar. La vida en sí no es un
malestar ni un trastorno: es una oportunidad para experimentar.
El modo en que se elija interpretar las experiencias depende en gran parte de
nosotros. Seamos tan sensatos o insensatos como se quiera, y transformémonos en
consecuencia. Se espera que su conocimiento y nuestro sentido de la vida se incline hacia
transformaciones positivas, en cuyo caso seremos dichosos en los mejores momentos y
no nos alejaremos demasiado del bienestar ni siquiera en los peores momentos.
Todo conflicto produce odio, destrucción y muerte. Los conflictos deben resolverse a
través del diálogo, de una manera creativa, democrática, lúdica y no violenta. Puede
producirse por: cosas materiales, por causas multidisciplinarias o por errores intelectuales.
En el conflicto real, hay choque de aspiraciones de ganancia (expectativas) y, el
conflicto se da por el modo de conseguir las expectativas. Se recomienda entonces,
despojarse de todas las expectativas, pues, cuantas más expectativas se tenga, más
interferirán en una filosofía constructiva de la vida. Por ejemplo, si el mal tiempo le arruinó
alguna vez las vacaciones. Lo que en realidad le echó a perder las vacaciones fueron sus
expectativas frustradas de buen tiempo, no el tiempo en sí. Tal vez el cónyuge le disguste
porque no siempre se comporta o reacciona como le gustaría; pero en realidad sólo le
disgustan sus propias expectativas frustradas sobre el comportamiento de su cónyuge, no
su cónyuge en sí.
Cada una de sus expectativas lo proyecta hacia un episodio de malestar.
Despréndase de ellas y se desprenderá también del malestar. Casi todo malestar obedece
a unas expectativas frustradas. El ejemplo más horrible suele guardar relación con la
muerte repentina de un ser querido. Todos somos perfectamente conscientes de que nadie
es inmortal, pero de algún modo esperamos que la muerte sólo afecte a otras personas, no
a nuestros familiares o amigos.
Unas expectativas realistas son mejores que unas poco realistas, porque preparan
para lo peor. Si lo peor ocurre, por lo menos no es ninguna sorpresa. Y si lo peor no llega a
suceder, es motivo de celebración. No tener expectativas es mejor aún, porque no puede
ocurrir nada que sea contrario a unas expectativas inexistentes. No tener expectativas nos
permite sacar el máximo partido de cualquier circunstancia, y no sólo de las circunstancias
que se ajustan a nuestras nociones de lo que debería ocurrir. Reducir nuestras
expectativas no significa abandonar nuestros esfuerzos ni dejar de prestar atención; todo
lo contrario: significa no dar nada por sentado. No tener expectativas sobre el final del día
cuando vamos a trabajar por la mañana, por ejemplo, nos permite vivir con mayor plenitud
el momento presente. Sin expectativas, simplemente estaría contento cuando la persona
llegara a su cita, y no disgustado en caso contrario. En lugar de echar pestes contra
alguien que no está ahí, intente relacionarse con alguien que sí lo está.
En el conflicto no realista nace por causa de impulsos agresivos que buscan salida y
es imposible un cambio de modo o se busca otra salida. Este, sólo busca expresar
sentimientos agresivos y generalmente busca una víctima expiatoria (el objetivo atacado
no tiene ninguna relación con la causa del problema).
La función del conflicto, es servir como válvula de escape o medio estabilizante.
Pero en una sociedad o grupo flexible, puede servir para que la sociedad cambie. En una
Solución de Problemas 79 Luis Hernando Mutis Ibarra
sociedad o grupo no flexible significa que los conflictos tienen un efecto disociador ya que
casi siempre hay violencia y conlleva a la destrucción, por lo que es mejor terminarlo.
Para medir el conflicto se utilizan grados en tres aspectos:
Una función positiva del conflicto: Los conflictos son inherentes a cualquier dinámica
social. Normalmente solemos atribuir a la palabra conflicto connotaciones negativas. Las
relacionamos con separación, ruptura, dificultades, falta de armonía, ausencia de paz. Sin
embargo, se defiende aquí, la visión positiva del conflicto, en el sentido de que un conflicto,
visto desde otro ángulo, puede provocar aspectos propositivos, ya que pueden ofrecer la
oportunidad de enriquecernos, y que podemos salir enormemente beneficiados por el
contacto con realidades, en las que tal vez no teníamos en cuenta. Pues, sin presencia de
lo diferente, de lo inesperado, de lo no previsto no puede haberse dado un posible
crecimiento y madurez de algún proceso.
No podemos crecer como sociedad, en valores como el respeto o el interés por
conocer otras realidades, sino nos ponemos en contacto con lo diferente. Los conflictos
son por lo tanto un motor del cambio que nos permiten crecer dialécticamente y caminar
constantemente hacia un mayor enriquecimiento mutuo.
Dado que la visión del conflicto es mirado desde un aspecto positivo, el planteamiento
no implica entonces, evitarlos o eludirlos, sino que se necesita afrontarlos directamente, e
incluso provocarlos, es decir sacarlos a la luz cuando son latentes.
Solución de Problemas 80 Luis Hernando Mutis Ibarra
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