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Jack W. Hayford
con
Mark Hayford
© 1994 EDITORIAL CARIBE 9200 S. Dadeland BIvd., Suite 209 Miami, FL 33156 Título
en inglés: Kingdom Warfare: Prayer, Spiritual Warfare, and the Ministry of Angels
©1993 por Jack W. Hayford con Mark Hayford Publicado por Thomas Nelson Publishers
CONTENIDO
Acerca del editor general/Acerca del autor Llaves que siempre liberan Lección 1:
Descubra la oración Lección 2: Intimidad con Dios Lección 3: Presente sus
necesidades Lección 4: El poder de la pureza Lección 5: Fieles en la oración
Lección 6: La intercesión Lección 7: La guerra espiritual Lección 8: La guerra
invisible Lección 9: Introdúzcase en la batalla Lección 10: Ayuno y oración
Lección 11: Acciones durante la lucha Lección 12: Ministros angelicales Lección
13: Ángeles y demonios Resumen y epílogo: El cuadro completo La guerra del Reino:
La oración, la guerra espiritual y el ministerio de los dngeles forman parte de
una serie de guías de estudio que se caracterizan por cubrir de manera atractiva y
esclarecedora un libro de la Biblia y los temas que se refieren al poder,
estimulando una vida dinámica y llena del Espíritu Santo. Acerca del editor
general JACK W. HAYFORD, destacado pastor, maestro, escritor y compositor, es el
editor general de la serie, además es quien trabaja junto al director de la
editorial en la propuesta y desarrollo de cada uno de los libros. Es pastor
principal de The Church Qn The Way [La iglesia del Camino], la Primera Iglesia
Cuadrangular de Van Nuys, California. Él y su esposa, Ana, tienen cuatro hijos
casados, todos activos en el ministerio pastoral en varios campos de la iglesia.
Como editor general de la Biblia Plenitud el pastor Hayford condujo un proyecto de
cuatro años, que ha dado como resultado una de las Biblias más útiles y populares
en la actualidad. Es autor de más de veinte libros, entre ellos: Anhelo de
plenitud, La belleza del lenguaje espiritual, La oración invade lo imposible y La
clave de toda bendición. Sus composiciones musicales abarcan más de cuatrocientos
cánticos, entre los que se incluye el muy conocido himno Majestad. Acerca del
autor MARK HAYFORD es pastor de la Iglesia Cuadrangular en Glendale, California,
Estados Unidos. Ejerce el pastorado desde que se graduó en LIFE Bible College en
1983. Además ha realizado actividades misioneras en toda Escandinavia.
Mark está casado con Diedre, tienen tres hijos: dos mellizas, Jennifer y Jessica
(9), y un varón, Mark (4). Acerca de este colaborador, el editor general ha
expresado: «Es un deleite muy especial ver cómo maduran espiritualmente los
propios vástagos, y llegar hasta el punto que se convierten en fuente de bendición
para muchos, muchos otros. Estimo que el que use esta guía podrá confirmar lo que
siento en cuanto al valor de lo que Mark Hayford aporta al estudio edificante de
la Palabra de Dios».
Jesús habló de llaves: «Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo
lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la
tierra será desatado en los cielos» (Mt 16.19). Aunque no hay una lista específica
de cuáles eran exactamente las llaves a las que Jesús se refería, está claro que
confirió a su iglesia—a todos los que creen—el acceso a una esfera de compañerismo
espiritual con El en el dominio de su Reino. Los estudiosos fieles de la Palabra
de Dios, que se mueven en la gracia práctica y la sabiduría bíblica de una vida y
un ministerio llenos del Espíritu Santo, han observado algunos de los temas
básicos que apuntalan esta clase de «compañerismo espiritual» que Cristo ofrece.
Las «llaves» son conceptos, temas bíblicos, que pueden rastrearse a lo largo de
las Escrituras y que son verificables cuando se los aplica con una fe bien
fundamentada bajo el señorío de Jesucristo. El «compañerismo» es el rasgo esencial
de esta descarga de gracia divina; (1) los creyentes buscan recibir la promesa de
Cristo en cuanto a «las
llaves del reino», (2) a la vez eligen creer en la disposición del Espíritu Santo
de poner en acción su liberador e ilimitado poder en nuestros días. Acompañadas
por la serie Guías de estudio para una vida llena del Espíritu, los estudios de
las Dinámicas del Reino ofrecen doce temas diferentes. Estos, como producto de la
sección del mismo nombre que se incluye en la Biblia Plenitud, proporcionan un
tesoro de percepciones desarrolladas por algunos de los más respetados líderes
cristianos de hoy. Desde el inicio, estos escritores han analizado con profundidad
los temas que usted podrá seguir aquí. El objetivo central de la temática
estudiada en esta serie de guías es relacionar las «claves de poder» de la vida
llena del Espíritu Santo. Para ayudarlo en sus descubrimientos habrá un número de
elementos auxiliares. Las guías de estudio tienen de doce a catorce lecciones,
cada una de las cuales ha sido preparada de modo que pueda sondear las
profundidades o rozar la superficie, según sus necesidades e intereses. Además,
contienen aspectos principales en cada lección, destacados por un símbolo y un
encabezamiento para su fácil identificación. RIQUEZA LITERARIA Esta sección
contiene importantes definiciones de palabras clave. ENTRE BASTIDORES Provee
información acerca de las creencias y las prácticas culturales, las disputas
doctrinales, las actividades comerciales y aspectos semejantes que aclaran los
pasajes bíblicos y sus enseñanzas. DE UN VISTAZO En esta sección se incluyen mapas
y gráficos para identificar los lugares, además de simplificar los temas o las
posiciones. INFORMACIÓN ADICIONAL Como esta guía enfoca un tema de la Biblia, esta
sección lo orientará hacia la consulta de recursos bíblicos como: diccionarios,
enciclopedias y otros, que le permitirán obtener más provecho de la riqueza que el
mismo ofrece, si así lo desea. SONDEO A PROFUNDIDAD Esta parte explicará asuntos
controversiales que plantean determinadas lecciones; se citarán pasajes bíblicos y
otras fuentes que le ayudarán a llegar a sus propias conclusiones. FE VIVA
Por último, cada lección contiene esta sección. Aquí la pregunta clave es: ¿Y
ahora qué? Una vez que he visto lo que dice la Biblia, ¿qué significa esto para mi
vida? ¿Cómo puede influir en mis necesidades cotidianas, mis heridas, mis
relaciones personales, mis preocupaciones y todo aquello que es importante para
mí? FE VIVA lo ayudará a percibir y aplicar los resultados prácticos de este
regalo literario que Dios nos ha dado. Como podrá observar, estas guías incluyen
espacio para que conteste las preguntas, haga los ejercicios correspondientes al
estudio y ponga en práctica lo aprendido. Quizás desee anotar todas sus respuestas
o el resultado de lo que ha obtenido mediante su estudio y aplicación en un
cuaderno separado o en un diario personal. Esto será adecuado sobre todo si piensa
aprovechar a fondo la sección INFORMACIÓN ADICIONAL. Como los ejercicios de esta
sección son opcionales y pueden extenderse sin límites, no hemos incluido espacio
para ellos en esta guía de estudio. De manera que quizás quiera tener un cuaderno
o un diario a mano, para registrar los descubrimientos que realice al abordar las
riquezas de esta sección. El método de estudio bíblico que se utiliza en esta
serie gira en torno a cuatro pasos básicos: la observación, la interpretación, la
correlación y la aplicación. La observación responde a la pregunta: ¿Qué es lo que
dice el texto? La interpretación se ocupa de lo que significa el mismo; no lo que
creamos usted o yo, sino lo que significaba para sus lectores originales. La etapa
de correlación responde a la pregunta: ¿Qué luz arrojan otros pasajes de la Biblia
sobre el que estoy estudiando? Y la aplicación, que es la meta del estudio
bíblico, plantea lo siguiente: ¿En qué aspectos debiera cambiar mi vida, como
respuesta a lo que el Espíritu Santo me enseña a través de este pasaje? Si está
familiarizado con la lectura de la Biblia, sabe que puede disponer de ella en una
variedad de traducciones y paráfrasis. Si bien cualquiera de ellas puede ser usada
con provecho para trabajar con las guías de estudio de esta serie, los versículos
y palabras que se citan en las lecciones han sido tomados de la traducción de
ReinaValera, revisión de 1960. El uso de dicha traducción en esta serie hará más
fácil su estudio, aunque no es un requisito. Los únicos recursos que necesita para
completar y aplicar estas guías de estudio son un corazón y una mente abiertos al
Espíritu Santo y una actitud de oración, además de una Biblia y un lápiz. Por
supuesto, puede recurrir a otras fuentes, tales como comentarios, diccionarios,
enciclopedias, atlas y concordancias; incluso, encontrará en la guía ejercicios
opcionales para orientarlo en el uso de dichas herramientas. Pero son opcionales,
no indispensables. Estas guías de estudio son tan amplias que le brindan todo lo
que necesita a fin de obtener una excelente comprensión del libro de la Biblia que
trata, como también la orientación necesaria para aplicar los temas y consejos a
su propia vida. Cabe, sin embargo, una palabra de advertencia. El estudio de la
Biblia, por sí mismo, no transformará su vida. No le dará poder, paz, gozo,
consuelo, esperanza, ni la variedad de regalos que Dios desea que usted abra y
disfrute. Pero a través de él adquirirá mayor conocimiento y comprensión del
Señor, de su Reino y de su posición en el mismo, todo lo cual es esencial. Pero
usted necesita algo más. Requiere depender del Espíritu Santo para que oriente su
estudio y aplique las verdades bíblicas a su vida. Jesús prometió que el Espíritu
Santo nos enseñaría «todas las cosas» (Jn 14.26; cf. 1 Co 2.13). De modo que
mientras use esta serie para guiarlo a través de las Escrituras, riegue
sus momentos de estudio con oración, pidiendo al Espíritu de Dios que ilumine el
texto, que aclare su mente, que someta su voluntad, que consuele su corazón. El
Señor nunca le va a fallar. Mi oración y mi meta es que, a medida que abra este
regalo de Dios, a fin de explorar su Palabra para vivir como El desea, el Espíritu
Santo llene cada fibra de su ser con el gozo y el poder que Dios anhela dar a
todos sus hijos. Adelante. Sea diligente. Manténgase receptivo y sumiso a Dios. No
saldrá defraudado. ¡El se lo promete!
Indica la persona que ofrece la oración la razón por la cual ora? Salmo 17.1–9
Salmo 28.1–7
Salmo 55.16–23
Salmo 61.1–8
Salmo 102.1–22
Salmo 141
Salmo 142
RIQUEZA LITERARIA
Ores, proseuchomai. Este es un vocablo aglutinante. El sustantivo euche es una
oración a Dios que también implica el hacer un voto; se añade el verbo euchomai,
el cual denota una invocación, una petición o ruego. Al agregarle pros, «en la
dirección de» (Dios), proseuchomai viene a ser el término que más frecuentemente
se emplea para oración.1 Oración, tefillah; oración, súplica, intercesión.
Tefillah aparece más de 75 veces en el Antiguo Testamento, 32 de ellas en los
Salmos. En esta referencia, se le adjudicó significado especial a las oraciones
ofrecidas desde el templo en Jerusalén, porque Dios protegía esa casa de oración
de día y de noche.2 Hoy la casa de oración ha de ser la casa espiritual edificada
en nuestros corazones (Jn 4.24). Hubo orado, palal. Orar, rogar, interceder,
suplicar. Este verbo aparece más de 80 veces. Palal nos habla de la oración como
intercesión, o sea, el pedirle a alguien con más poder y sabiduría que intervenga
a favor de la persona que ora. Por ejemplo, Ana oró por un hijo (1 S 1.12);
Ezequías oró porque se extendiera su vida (ls 38.2, 3); y Jonás oró desde el
vientre del pez (Jon 2.1–9). Además, palal se encuentra en la promesa de 2
Crónicas 7.14: «Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y
oraren… entonces yo oiré desde los cielos…» Véanse otros ejemplos del 1 «Riqueza
literaria: 6.6 orar», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 1195.
2 «Riqueza literaria: 6.20 oración», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL,
1994, p. 528.
uso de palal en relación con la súplica o intercesión en Génesis 20.7, 17; Números
11.2 y 1 Samuel 12.23.3
Lucas 21.36
Efesios 6.18
Santiago 4.3, 7, 8
1 Pedro 5.6, 7
FE VIVA
Todos sabemos que debemos orar, pero, ¿por qué? ¿Cuáles son las razones que nos
llevan a orar? ¿Se sorprendió alguna vez a sí mismo acercándose a Dios simplemente
con una «lista de pedidos» de las cosas que le gustaría que El hiciera? ¿Procura
que se cumpla la voluntad de Dios cuando ora? ¿Está aprendiendo a conocerlo mejor
durante su tiempo de oración? Piense acerca de estas cosas y sea sincero consigo
mismo. Tenga presentes estas preguntas durante los próximos días y pídale al
Espíritu Santo que le ayude a ver costumbres en su vida de oración que deberían
ser cambiadas. Luego vuelva y conteste las siguientes preguntas y pídale al Señor
que le ayude a orar por motivos dignos. 3 «Riqueza literaria: 42.10 hubo orado»,
Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 639.
ABRA LA PUERTA PARA QUE DIOS OBRE
La oración es la forma en que hemos de someter todas las cosas a Dios. Cuando
oramos, invitamos a Dios a que venga y obre en las cosas que nos preocupan. Al
obedecer su mandato y colocar nuestras preocupaciones sobre sus hombros, ponemos
esas cosas bajo su control en lugar del nuestro. Esto no es sólo sumisión, sino el
acto mismo de humillarnos ante Él como nos pide 1 Pedro 5.6–7. Al orar reconocemos
que Dios puede hacerse cargo de todo lo que nos preocupa y que nosotros no podemos
resolver. Este franco reconocimiento de nuestra condición ante Dios siempre es
necesario cuando nos acercamos a su trono. El resultado es que Dios nos exaltará a
su debido tiempo. El acudir humildemente en oración ante El no sólo produce la
exaltación de nuestra situación por medio de la oración contestada, sino también
la de nuestro espíritu en una comunión inmediata con nuestro Padre celestial.
¿Cuáles son las cosas por las que hemos de orar cuando someternos todo al Señor en
oración? ¿Por quiénes debemos orar? ¿Cuándo y cómo hemos de orar? ¿Qué otras
acciones deberían acompañar a nuestras oraciones? ¿Notarnos algún resultado de
ellas? ¿Cuáles son? Lea los siguientes pasajes y vea lo que nos dicen. 2 Crónicas
7.14
Salmo 32.5–7
1 Tesalonicenses 5.16–22
1 Timoteo 2.1–3
Santiago 5.13–16
INFORMACIÓN ADICIONAL
Con la ayuda de una concordancia o de una Biblia temática, trate de ver cómo eran
las oraciones de diversas personas en la Biblia. He aquí algunas cuyas oraciones
quizá quiera conocer: Abraham, Moisés, Salomón, Elías, Jesús, Pablo, Pedro, David,
Ana, Daniel, Josafat, así como muchos otros reyes, sacerdotes, profetas y
apóstoles en la Biblia. Considere qué actitudes se observan en sus oraciones y
cuáles fueron las respuestas que Dios les dio. ¿Cuáles son las principales
características de estas oraciones? ¿Cómo se advierte la naturaleza del corazón de
Dios a través de sus respuestas? ¿De qué manera se expresan por lo general las
oraciones? ¿Qué podemos aprender de estas oraciones?
FE VIVA
Ahora que hemos pasado un tiempo analizando el tema de la oración, ¿aprendió algo
nuevo acerca de ella? Escriba su definición de la oración. ¿Cómo se ajusta a su
vida de oración actual? ¿Cuál es su concepto de la oración? ¿Es una práctica sana
la oración? ¿Es aburrida? ¿Es difícil? ¿Es vibrante? ¿Qué le diría a alguien que
le preguntara: «¿Por qué ora?», «¿Por qué debería orar yo?» ¿Es válido hacer algo
simplemente porque Dios dijo que debíamos hacerlo? ¿De qué manera mi sumisión a
Dios le permite obrar en mi vida? Medite acerca de estas cosas y anote sus
sentimientos. Pídale al Señor que le ayude a captar su propia perspectiva sobre la
oración y el lugar de la misma en su vida. Permítale a Dios hacer que sus momentos
de oración sean algo realmente anhelado por usted.
ENTRE BASTIDORES
Ningún pueblo tuvo jamás un ideal tan alto sobre la oración como el judío, y
ninguna religión jamás colocó a la oración en una posición tan elevada en la
escala de prioridades como el judaísmo. Pero ciertas fallas se introdujeron
subrepticiamente en los hábitos de oración de los judíos. Es preciso comprender
que ellas pueden ocurrir, y en efecto ocurren, en cualquier parte. No son fallas
producidas por la negligencia, sino por una devoción mal orientada. Había dos
rituales que todo judío debía cumplir cada día: El shema (que consistía en citar
Dt 6.4–9; 11.13–21; Nm 15.37–41 en actitud de oración) el cual debía ser recitado
a la salida y a la puesta del sol; y el shemoneh ˓esreh (dieciocho oraciones fijas
que se debían citar en orden) para ser recitado en las horas destinadas a la
oración (a las nueve de la mañana, a medio día y a las tres de la tarde). Además,
la liturgia judía proporcionaba oraciones fijas para todas las ocasiones. No había
prácticamente nada en la vida para la que no existiera una fórmula de oración.
Había una para antes y otra para después de cada comida; las había vinculadas a la
lluvia y a los relámpagos, para entrar o salir de una ciudad, para el momento en
que aparecía la luna nueva, para el momento de usar muebles nuevos, etc., etc. La
intención de esta tradición era incorporar a Dios a cada momento del día. Y sin
embargo, a pesar de lo hermosas que son estas oraciones, con el tiempo los fieles
comenzaron a recitar las palabras sólo por obligación, sin ningún sentido real de
comunicación con Dios. Es esta manera mecánica de orar la que critica Jesús en
Mateo 6 al dirigirse a los que dicen sus oraciones para parecer buenos delante de
otros.4 4 William Barclay, The Gospel of Mark, The Daily Bible Study Series [El
Evangelio de Marcos, serie de estudios bíblicos diarios], The Westminster
SEÑOR, ENSÉÑANOS A ORAR
Atienda al pedido que hacen los discípulos de Jesús cuando observan su vida de
oración. Después de haber vivido diariamente con Jesús y haber aprendido tanto a
sus pies, acuden a El con el siguiente deseo: «Señor, enséñanos a orar» (Lc 11.1).
Esta petición no provenía de hombres que no supieran cómo orar. Este es el clamor
del corazón de quienes ven en Jesús la relación poderosa y portadora de vida que
siempre han anhelado tener. Cuando llegamos al punto en que la oración comienza a
hastiarnos y ni siquiera las respuestas a ella nos proporcionan satisfacción,
entonces tiene que haber algo más. Era este «algo» lo que los discípulos veían en
la vida de nuestro Señor. Veían a una Persona que encontraba plena satisfacción en
una relación diaria con el Padre celestial. Esto era lo que anhelaban los
discípulos y es lo que podemos encontrar si nos proponemos aprender a orar en base
al ejemplo de Jesús. Para comenzar a aprender cómo orar, observe la respuesta de
Jesús al pedido de sus discípulos. El «Padrenuestro», como se le ha llamado, se
encuentra en dos lugares de los Evangelios. Lea ambos textos, con los versículos
que le sirven de marco, y haga un bosquejo de lo que allí está escrito. Mateo 6.5–
15
Lucas 11.1–14
DE UN VISTAZO
PRINCIPIOS SOBRE LA ORACIÓN PADRENUESTRO5
«Santificado sea tu
Press, Philadelphia, PA, 1975, pp. 191–195. 5 «Dinámica del Reino: 6.9–13 El
Padrenuestro», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 1196.
nombre»
100.4). Usted tiene un acceso constante al trono de Dios por medio de la alabanza
y la adoración. Dondequiera que esté dispuesto a alabar a Dios, Él acudirá y
establecerá su Reino (Sal 22.3). «Venga tu reino. 3) Las prioridades de Dios:
Declare que las prioridades de Su Reino (Ro Hágase tu voluntad» 14.17) serán
establecidas en usted, sus seres amados, su Iglesia y su nación. Dios desea reinar
en todas las situaciones que nos conciernen. A medida que se disponga a buscar
primero su reinado, hallará todo lo que necesita y más (Mt 6.33). «Danos» 4) La
provisión de Dios: Jesús, el que suple nuestras necesidades, nos dijo que oráramos
diariamente, pidiéndole que provea para todo lo que nos haga falta. Dios ya ha
dado respuesta a nuestra más grande necesidad enviando a Jesús a morir por
nosotros. Cuánto más podremos esperar que satisfaga nuestras necesidades diarias
en base a tan vasta reserva de bendiciones (Flp 4.19). «Y perdónanos» 5) El perdón
de Dios: Necesitamos el perdón de Dios y nos hace falta perdonar a los demás.
Diariamente camine decidido a amar y perdonar. Afirme cada día su voluntad de
andar prodigando amor y espíritu de perdón. Este paso abre las puertas para una
mayor inundación de la gracia de Dios en nuestras vidas, el Señor utilizará esto
para proporcionar liberación a otros (Jn 20.23). «No nos metas en 6) Poder sobre
Satanás: Pida al Señor una cerca de protección alrededor de tentación[…] usted y
sus seres queridos (Job 1.9–10; Sal 91). Pídale que le vista con Su líbranos del
mal» armadura (Ef 6.14–18). Procure caminar en rectitud y el Señor lo guiará ( Sal
37.23–24). Resista las obras del enemigo y obtendrá la victoria (Stg 4.7). «Porque
tuyo es el 7) Participación en lo divino: Glorifique a Dios que le hizo
participante de reino» Su Reino, poder y gloria (2 Ti 4.18; Lc 10.19; Jn 17.22).
Dios nos llama cada día a participar en lo que está haciendo. Podemos unirnos a
sus planes caminando a diario en abierta comunicación y relación con Él.
FE VIVA
Ahora que ha completado esta visión inicial del concepto bíblico de la oración,
tómese un tiempo para anotar sus percepciones. ¿Cuáles son sus pensamientos
básicos acerca de la oración?
¿Hay interrogantes que este estudio le haya traído a la mente? Escríbalos para que
pueda considerarlos de nuevo en su estudio, a medida que encuentre respuestas a
los mismos.
¿En qué áreas de su vida (creencias, pautas y conducta morales, relaciones, dones
espirituales, etc.) cree que le ayudará este estudio?
¿Ha encontrado algo en su vida que necesita ser llevado ante Dios en oración?
Enumere esos puntos aquí para que recuerde ponerlos en oración. Tal vez desee
anotar algunos de sus sentimientos acerca de estas cosas, dándoles la forma de una
oración escrita destinada al Señor.
Salmo 9.10
Salmo 69.30–34
Isaías 65.10–15
Jeremías 29.11–13
RIQUEZA LITERARIA
Busquen, baqash. Indagar, buscar algo diligentemente, buscar algo ansiosamente,
hasta encontrarlo. Baqash puede aplicarse a buscar una persona, una cosa en
particular o proseguir una meta (como el intento de destruir una ciudad, 2 S
20.19). Baqash aparece más de 210 veces en la Biblia.1 He conocido, yada. Conocer,
percibir, distinguir, reconocer, estar familiarizado con; «conocer íntimamente»,
es decir, sexualmente; también, en algunas acepciones verbales quiere decir
reconocer, estimar y recomendar.2 Es la misma palabra que se usa en Proverbios
3.6: «Reconócelo en todos tus caminos». Se trata de un llamado a crecer
diariamente en una relación íntima y fecunda con Dios.
UN PENSAMIENTO TERRIBLE
De Oseas 5.6 proviene esta terrible frase: «Andarán buscando a Jehová, y no le
hallarán». Este texto es un cuadro de lo que puede suceder a las personas que no
se preparan para buscar al Señor, sino que se acercan a Dios «a su manera». Dios
nos llama a acercarnos a Él por el camino que ha preparado para nosotros. Él nunca
sale a encontrarnos bajo los términos que le fijamos, sino que deja en claro más
adelante, en
1 «Riqueza literaria: 5.15 Busquen», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL,
1994, p. 1063. 2 «Riqueza literaria: 3.7 he conocido», Biblia Plenitud, Editorial
Caribe, Miami, FL, 1994, p. 77.
ese mismo pasaje, que su alejamiento de esas personas es hasta que reconozcan su
pecado. Lea Oseas 5 y observe las cosas que suceden o van a suceder debido al
pecado del pueblo de Dios. Escriba además los pecados concretos que se mencionan y
lo que debe acontecer para que los pecadores encuentren a Dios.
FE VIVA
Jesús dice que debemos ser como niños para ver su Reino: con un corazón receptivo
y sincero, sin que nuestro orgullo nos lo impida. Es esto último lo que nos impide
perseguir plenamente las cosas de la manera en que Dios nos las muestra. ¿Acaso no
parece tonto decir: «Creo que mi manera de hacerlo es mejor que la de Dios»?
Sabemos que la sabiduría de Dios es muy superior a la nuestra, y sin embargo, cada
vez que dejamos de hacer las cosas como Él quiere e insistimos en seguir nuestros
propios métodos, estamos actuando tal como lo expresa dicha frase. Es a menudo
este orgullo el que nos impide vivir con todo lo que Él nos ha provisto. Dedique
un tiempo a hacerse las siguientes preguntas, luego escriba y ore por aquellas
cuestiones relacionadas con el orgullo en las que quizás necesite que el Señor
obre en su vida. ¿Siente a veces vergüenza por su fe? ¿O le enorgullece?
¿Le resulta difícil mostrar sus emociones a Dios en los momentos de alabanza o de
oración? ¿En público? ¿En privado?
Éxodo 3.1–22
1 Samuel 3.1–14
Salmo 138
Lucas 22.41–44
Proverbios 3.5, 6
Jeremías 9.23, 24
Mateo 11.27–30
FE VIVA
Ahora que ha podido dedicar un poco de tiempo para ver cómo se desarrolla una
relación íntima con el Padre celestial, medite en lo que ha aprendido. ¿Qué
conceptos han cobrado nueva vida en usted o le parecen nuevos? ¿Siente como que
los comprende? Tómese un tiempo para pedirle a Dios que le dé entendimiento.
¿Cómo planea incorporar estas verdades a su vida? ¿Qué cosas podría hacer para
contribuir al cultivo de su relación con Dios?
En los siguientes pasajes puede aprender más acerca del increíble poder que se
libera cuando oramos y vivimos en unidad en el cuerpo de Cristo. Explórelos y
registre lo que dicen acerca del poder, la presencia y el propósito de Dios en una
iglesia unida. 2 Corintios 5.13, 14
Salmo 133.1–3
Hechos 2.1–4
RIQUEZA LITERARIA
Una, ˒echad. Uno, una unidad. ˒Echad viene de la raíz ˒achad, «juntar, unificar;
reunir los pensamientos». ˒Echad significa lo mismo que «uno» en español, tanto en
sentido estrecho (uno y sólo uno como en Eclesiastés 9.18, «un pecador destruye
mucho bien») como en el más amplio de los sentidos (uno compuesto de muchos, como
en Génesis 2.24, donde una mujer y un hombre se convierten «en una sola carne»).3
˒Echad se considera una de las palabras más importantes en el Antiguo Testamento,
por cuanto se usa para describir a Dios como uno (Dt 6.4). Unánimes juntos,
homothumadon. Estar de acuerdo, de mutuo consentimiento, mantener la unidad de
grupo, ser todos de una sola mente y compartir un solo propósito. Los discípulos
tenían unanimidad intelectual, armonía emocional y una sola voluntad en
3 «Riqueza literaria: 6.4 uno», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL,
1994, p. 227.
la iglesia recientemente fundada. En cada uno de los casos en que se usa,
homothumadon indica armonía, la cual conduce a la acción.4
FE VIVA
Tómese un momento para revisar esta lección y concentrarse en relación a la
búsqueda de una íntima relación con Dios en la oración. ¿En qué consiste? Además
de la definición, enumere los atributos (Jn 12).
¿Cree que la unidad con el cuerpo de Cristo es importante para que pueda
desarrollar una intimidad personal con Dios? ¿Por qué?
Tómese un tiempo para orar acerca de las medidas que piensa tomar. Pídale al Señor
su sabiduría para desarrollar y llevar a cabo planes que lo hagan acercarse más a
Él y a su pueblo.
Juan 16.23–27
Santiago 1.5–8
Santiago 4.2, 3
1 Juan 3.18–23
1 Juan 5.14, 15
FE VIVA
Ahora que ha podido ver de qué manera el corazón de nuestro Padre está dispuesto a
responder y satisfacer nuestras necesidades, dedique un tiempo a reflexionar sobre
cómo ha concebido el corazón de Dios para con usted en el pasado. ¿Ha considerado
la oración como el medio para convencerlo de que obre? ¿Ha sido su meta el tratar
de convencerlo de sus propios méritos con el objeto de recibir respuestas? ¿Ha
pensado que El sólo contestaba las oraciones si usted hacía las cosas correctas
para «obligarlo a responder»? Defina abajo exactamente de qué manera se ha sentido
inclinado a ver el corazón de Dios en relación a usted.
Enumere áreas donde reconozca que necesita que el amor de Dios se vuelva algo más
real. Lleve esta lista a Dios en oración y permítale obrar en relación a esas
cosas en su vida.
2) Dios se interesa por mis necesidades y con toda seguridad que las resolverá, de
modo que se las presentaré humildemente.
3) Dios ama a este mundo, de modo que seré un instrumento suyo para alcanzar a
otros a través de mis oraciones.
Lea los siguientes pasajes para comprender mejor de qué manera humillarse delante
de Dios. Observe las cosas que han hecho otros, o las que se le aconseja hacer
para ser humilde ante Dios. ¿Qué cosas figuran en la lista? ¿Qué sucederá si hace
esas cosas? ¿Qué ejemplos de humildad ve? ¿Qué hicieron esas personas para
demostrar humildad o para humillarse a sí mismos? ¿Cuál fue el resultado final que
se vio en sus vidas? 2 Crónicas 32.24–26
2 Crónicas 12.1–9
Salmo 35.13, 14
Mateo 18.3, 4
Hechos 20.17–24
1 Pedro 5.1–7
RIQUEZA LITERARIA
Humildad, tapeinophrosune. Modestia, bajeza, un sentido de insignificancia moral,
y una actitud humilde de interés altruista por el bienestar de otros; total
ausencia de arrogancia, de engaño y de altivez. La palabra es una combinación de
tapeinos (véase más adelante), «humilde» y phren, «mente». La palabra era
desconocida en el griego clásico no bíblico. Únicamente renunciando a la
autosuficiencia, los miembros de la comunidad cristiana pueden mantener la unidad
y la armonía.1 Se humille, tapeinoo. Literalmente, «rebajar»; en Lucas 3.5 el
vocablo se aplica a un monte. Metafóricamente, la palabra significa envilecer,
humillar, rebajarse. Describe a una persona que está desprovista de toda
arrogancia y de auto-exaltación; alguien que somete su voluntad a la voluntad de
Dios.2 Humillaos, shafel. Rebajar, hundir, deprimir, bajar, abatir o descender.
Shaphel aparece 29 veces y generalmente se traduce como «humillar», «rebajar» o 1
«Riqueza literaria: 20.19 humildad», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL,
1994, p. 1427. 2 «Riqueza literaria: 18.4 se humille», Biblia Plenitud, Editorial
Caribe, Miami, FL, 1994, p. 1218.
«empequeñecer». El empleo de shaphel se ilustra en Isaías 2.11; 5.15. Nótese la
ironía de Proverbios 29.23: «La soberbia del hombre le abate; pero al humilde de
espíritu sustenta la honra».3
Hebreos 11.1–12.2
DE UN VISTAZO
Como obra la fe (Heb 11.1)4
JESÚS ENSEÑA LA FE
Ahora que ha podido ver lo que significa llegarse al Señor confiadamente, con fe y
con corazón humilde, lea lo que Jesús dijo acerca de ella mientras ministraba a
diario a las necesidades de la gente. Atienda a sus palabras dirigidas a los
discípulos cuando les enseñaba sobre el poder y la importancia de la fe. Al
estudiar las palabras de Jesús, conteste estas preguntas: ¿Para qué necesitamos
tener fe? ¿Por qué? ¿Cuánta fe necesitamos?
¿Cómo responde el corazón de Jesús a los que no tienen fe? Mateo 9.22–29
Marcos 10.27
8 «Riqueza literaria: 10.9 creyeres», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami,
FL, 1994, p. 1463.
Marcos 11.22–26
Marcos 16.17, 18
Lucas 7.1–10
Juan 12.44–47
FE VIVA
¿Qué actitudes o emociones nuevas han surgido en su corazón, por medio de esta
lección, que desea poner delante de Dios en oración? A medida que las anote,
mencione cada una, presentándolas verbalmente ante Dios y creyendo que contestará
su oración.
Proverbios 16.5–9
Juan 13.8
Hechos 2.42, 47
1 Corintios 6.9–11
Filipenses 4.8
Hebreos 9.11–15
FE VIVA
Lea de nuevo la lista que ha escrito de las cosas que le ayudan a mantener limpio
el corazón. ¿Cuáles cree que requieren ser puestas en práctica en su vida diaria?
RIQUEZA LITERARIA
Abogado, parakletos. De para, «junto a», y kaleo, «llamar»; de ahí surge el
concepto: Llamado a estar a nuestro lado. La palabra identifica a un intercesor,
confortador, ayudador, abogado, consejero. En la literatura no bíblica, parakletos
designaba a un abogado que acude a la corte en representación del otro.1 En 1 Juan
2.1 Jesús aparece de pie defendiéndonos y tomando nuestro lugar ante el trono de
Dios de modo que su sangre sea tomada como pago por nuestro pecado. Arrepentíos,
metanoeo. De meta, «después», y noeo, «pensar». El arrepentimiento es una decisión
que resulta en un cambio de mente, lo cual a su vez lleva a un cambio de propósito
y acción.2 Concupiscencia, epithumia. Un fuerte deseo y una intensa inclinación
por alguna cosa. Tres veces se aplica a buenos deseos. (Lc 22.15; Flp 1.23; 1 Ts
2.17). Sus otros usos son negativos, tales como gratificar los anhelos sensuales,
el deseo de las 1 «Riqueza literaria: 15.26 Consolador», Biblia Plenitud,
Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 1371. 2 «Riqueza literaria: 3.2
arrepentíos», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 1188.
cosas prohibidas, los gustos por lo malo, la codicia por las cosas que son de
otro, y querer cosas, personas, o experiencias que son contrarias a la voluntad de
Dios.3 Justicia, diakaiosune. Justo, la cualidad de actuar correctamente. La
palabra sugiere conformidad con la voluntad revelada de Dios en todos aspectos.
Dikaiosune posee ambos sentidos: judicial y benévolo. Dios declara justo al
creyente, en el sentido de absolverlo, y le dispensa justicia (2 Co 5.21).4 Fe,
pistis. Convicción, confianza, creencia, dependencia, integridad y persuasión. En
el marco del NT, pistis es el principio divinamente implantado de confianza
interior, seguridad y dependencia en Dios y en todo lo que Él dice.5 Amor, ágape.
Una palabra a la que el cristianismo le dio un nuevo significado. Fuera del NT,
raramente se usa en los manuscritos griegos existentes de la época. Ágape denota
una invencible benevolencia y una irreductible buena voluntad, que siempre busca
el bien de la otra persona, no importa lo que ésta haga. Es el amor sacrificial
que da libremente sin pedir nada a cambio y no se para a considerar el valor de su
objeto. Ágape es un amor que se ofrece conscientemente, mientras philos depende de
circunstancias involuntarias; tiene que ver con voluntad más que con la emoción.
Ágape describe el amor incondicional de Dios por el mundo.6 Paz, eirene. Un estado
de reposo, quietud y calma; una ausencia de lucha; tranquilidad. El término
generalmente de-nota un bienestar perfecto. Eirene incluye relaciones armoniosas
entre Dios y los seres humanos, entre las personas, naciones y familias. Jesús,
como el Príncipe de Paz, da paz a aquellos [que viven bajo su señorío].7
Tomando como base 1 Juan 1.5–10, explique cómo el vivir en la familia de Dios
—«unidos en comunión»—contribuye a exponer y limpiar nuestros pecados. ¿Qué dice
acerca de las personas que no confiesan su pecado? ¿Qué sucede cuando confesamos
nuestros pecados?
SONDEO A PROFUNDIDAD
Las cuestiones en torno al tema de la confesión son desconcertantes para muchos.
Entre los diferentes grupos eclesiásticos la doctrina concerniente a la confesión
varía ampliamente. Vea lo que puede aprender buscando la palabra «confesión» en un
diccionario bíblico o en una enciclopedia. Para un estudio más profundo, use una
concordancia o una Biblia temática, para encontrar todas las maneras en que se
hace confesión en la Biblia. Emplee este estudio para determinar el lugar, el
valor y el método de confesión que debería adoptar en su vida.
2. Arrepentimiento
3. Limpieza
4. Restauración
¿Cuáles son los verdaderos «sacrificios» para Dios, según el salmista?
ENTRE BASTIDORES
El Salmo 51 se escribió cuando David clamaba a Dios pidiendo misericordia después
de cometer adulterio, seguido de asesinato para esconder su pecado sexual (2 S
11.1–12.23). Esta historia muestra claramente el amor de Dios al enviar a Natán,
el profeta, a enfrentar y restaurar a David para volverlo a una recta relación con
Él. Al mismo tiempo, se recalca la justicia de Dios, por cuanto se rehúsa a
permitir que su siervo David siga viviendo sin confesar su pecado. En todo este
Salmo hay verdades acerca de la naturaleza y el carácter de Dios que rara vez son
comprendidas con claridad por los que no tienen una relación personal e íntima con
Él. La misericordia, la benignidad, la justicia y los anhelos verdaderos de Dios
son algunos de estos atributos.
Salmo 15.1–5
FE VIVA
¿Qué es lo más notable que ha aprendido en esta lección?
¿En qué aspecto de su vida piensa que esta lección ha de tener mayor impacto? ¿Por
qué? ¿Cuál cree que ha de ser el resultado?
¿Cómo ve la justicia de Dios en su vida? ¿Es algo que aumenta día a día? ¿Por qué
cree que es así?
¿Desea ver más pureza en su vida? Escríbale una carta a Dios expresando su deseo
de vivir en la pureza. lncluya cosas para las cuales cree que necesita la ayuda de
Dios, tales como hábitos, pensamientos, deseos malos, etc. Ore respecto a ellas,
pidiéndole al Señor que cree un corazón limpio en usted, del mismo modo que se lo
pidió David en el Salmo
Jeremías 33.3
Juan 14.12–14
Es curioso, pero años después de que mi padre hiciera esa afirmación sobre el
«alpinismo»—sincera, sin duda—, fue que comprendí que resultaba un tanto extraña
en ese momento, porque inmediatamente después de pronunciarlas, anunció que íbamos
a abandonar, a la mitad del camino, el ascenso del «cerro» que habíamos iniciado.
Pero se debía a una cuestión de perspectiva. Apenas tenía unos cinco años por
aquella época; estábamos parados sobre una meseta, después de haber trepado un
tramo bastante inclinado (lo cual, para un niño como yo, ya era en sí una
montaña). Pero enseguida nos trasladamos de allí y nos preparamos para escalar un
cerro cercano que era una montaña y un verdadero desafío. Me parecía que habíamos
abandonado una «montaña» y nos encaminábamos hacia otra, cuando, en realidad, el
cambio había ocurrido en el momento en que estábamos a mitad de camino de un
ascenso mayor. Esta cuestión de la perspectiva—el pensar que estamos en la cumbre
cuando en realidad apenas hemos empezado—puede impedir que alcancemos las alturas
del potencial que Dios tiene preparado para nuestra vida espiritual. No es que no
podamos llegar hasta la cumbre si siguiéramos trepando. Es que nos sentimos
demasiado propensos a detenernos pensando que ya hemos llegado. Como yo, que
siendo pequeño, pensaba que un pequeño tramo del ascenso era toda la montaña,
cualquiera de nosotros puede sentirse tentado a dejar de ascender cuando en
realidad estamos lejos de las alturas, sin haber visto nunca los paisajes que el
Señor nos tiene reservados. Así, igual que con el alpinismo, no dejemos de
dedicarnos a la oración hasta que alcancemos lo que nos proponemos lograr.
Tratándose de la oración, ese «proponerse» es un compromiso que equivale a
asegurarnos de que la voluntad de Dios penetre y prevalezca en situaciones
especificas dadas. Esa es la cumbre máxima. La fidelidad es más que simplemente
perseverar; requiere que la persona esté llena de fe de un modo que produzca vida
en lugar de manifestarse en una actividad inútil o muerta (Stg 2.14–26). Jesús
enseñó la fidelidad de varias maneras. Lea los siguientes pasajes y vea lo que
puede aprender de las características de la fidelidad. Las preguntas que se
formulan con cada pasaje son para ayudarlo a pensar y a responder.
Lucas 14.27–32: ¿Qué representa la preparación en relación con la fidelidad? ¿Es
posible la fidelidad sin ella? ¿Por qué?
Mateo 25.1–30: ¿De qué manera se comparan las enseñanzas de estas parábolas con
los pasajes antes mencionados? ¿Qué hicieron las vírgenes prudentes para que les
valiera el ser elegidas? ¿De qué modo fue infiel el siervo inútil?
Lucas 18
¿Qué dice Jesús que será la respuesta de Dios a la oración si perseveramos? Lucas
11
Lucas 18
SONDEO A PROFUNDIDAD
¿Contesta Dios nuestras peticiones porque seguimos pidiendo? ¿Se rehúsa a
contestamos porque nuestra insistencia refleja falta de fe? Ambas preguntas han
dado motivo a expresiones poco serias por parte de algunos estudiosos a lo largo
de los años, y algunos de ellos han tomado decididamente partido por uno u otro
lado, mientras que otros han insistido en que hay momentos para esperar con fe y
momentos para continuar la lucha. Más adelante encontrará una serie de pasajes
bíblicos que proporcionan enseñanza y ejemplos sobre este tema. Mientras los lea
pida al Espíritu Santo que le ayude a comprender lo que se está enseñando: Génesis
18.23–32; Josué 10.12–14; 1 Reyes 18.22–38, 41–44; 2 Reyes 13.15–19; Mateo 6.7–8;
Marcos 11.22–24; Lucas 7.2–10; 2 Corintios 12.8–10; Efesios 6.18; Santiago 1.5–8.
Debe comprender que la perspectiva que tenga sobre este tema no debe separarlo de
otros miembros del cuerpo de Cristo sino, más bien, debe fortalecerlo en su vida
personal de oración mediante una mejor comprensión de la Palabra de Dios.
FE VIVA
Describa las cualidades de su carácter que indican fidelidad.
¿En qué áreas de su vida demuestra mayor fidelidad (por ejemplo, en la amistad, la
profesión, las finanzas, el crecimiento espiritual, etc.)? ¿Qué hace que esa área
parezca ser más fuerte que otras?
¿En cuáles aspectos demuestra el menor grado de fidelidad? ¿Por qué cree que es
así?
¿Cómo cree que puede aumentar su grado de fidelidad? ¿Qué pasos dará para
lograrlo?
ENTRE BASTIDORES
Todo el curso de la civilización occidental ha sido influenciado por la antigua
Grecia. En particular con respecto al pensamiento y a la filosofía occidentales;
esto se puede ver con claridad en el contraste entre el concepto griego y el
hebreo del conocimiento. Para el modo de pensar griego, el conocimiento sólo tenía
que ver con el reconocimiento mental. Si una persona había estudiado un tema y
estaba en posesión de los datos, se consideraba que «sabía» el tema. La idea
hebrea del conocimiento incluía la aplicación práctica y la experiencia. El simple
estudio y el almacenamiento mental de información no era equivalente a «saber».
Para «conocer» o «saber» algo se requería de la práctica de la vida en relación
con las cosas aprendidas. Le será de ayuda a todo cristiano comprender que lo que
está por detrás de los escritos del Nuevo Testamento es el pensamiento
esencialmente hebreo, aunque fue escrito en griego, por ser esa la lengua común de
la época. El concepto bíblico de «saber» o «conocer» comprende la experiencia, no
simplemente estar expuesto a la verdad o a un conjunto de datos.
¿Quién recibirá las promesas que Dios ha hecho aquí? ¿Cuáles son las
características de aquellos que no recibirán tales promesas?
RIQUEZA LITERARIA
Fe, pistis. Convicción, confianza, creencia, dependencia, integridad y persuasión.
En el marco del NT, pistis es el principio divinamente implantado de confianza
interior, seguridad y dependencia en Dios y en todo lo que Él dice.1 Vivirá,
chayah. Existir, preservar, florecer, disfrutar de la vida, vivir felizmente,
respirar, estar animado, recuperar la salud, vivir ininterrumpidamente. La idea
fundamental es «vivir y respirar». En el pensamiento hebreo, la respiración
constituye una evidencia de la presencia de vida. De ahí que las palabras hebreas
para «ser viviente» o «animal» (chay) y «vida» (chayyim) sean derivados de chayah.
Este verbo aparece cerca de 250 veces en el Antiguo Testamento. Muchas referencias
sugieren que «vivir» es el resultado de hacer lo correcto (Dt 4.1; 30.19, 20; Pr
4.4; 9.6; Am 5.4).2 Justo, tsaddiq. Uno que es justo, correcto, claro, limpio,
apropiado. Una persona que se caracteriza por su integridad, equidad y espíritu
justiciero[…] tsadaq, que significa: «ser justo, estar justificado y limpio».
Tsadaq y sus derivados encierran la idea de justicia e integridad en la forma de
vivir.3 De verdad, ˒emunah. Firmeza, estabilidad, lealtad, conciencia,
consistencia, certeza; aquello que es permanente, firme y duradero. ˒Emunah viene
de la raíz ˒aman, «firme, seguro, establecido». La palabra «amén» deriva de esta
misma raíz y significa: «¡Seguro, así es verdaderamente!»[…] A menudo se traduce
como «fidelidad» o «verdad», ya que se considera la verdad como algo cierto,
estable e inmutable. Esta palabra aparece en Habacuc 2.4, ese gran versículo tan
influyente en el pensamiento del 1 «Riqueza literaria: 11.22 fe», Biblia Plenitud,
Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 1267. 2 «Riqueza literaria: 2.4 vivirá»,
Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 1129. 3 «Riqueza literaria:
1.18 justo», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 963.
Nuevo Testamento y la historia de la Reforma: «El justo vivirá por su ˒emunah», es
decir, gracias a su firme, inconmovible y sólida fe.4
BENDICIONES DE LA FIDELIDAD
Ser fiel no es simplemente el cumplimiento de un deber, sino la característica de
que nuestras vidas estén «llenas de fe», lo cual trae bendición consigo. Existen
las bendiciones de permitirle al Señor que se ocupe cada día de nuestras
necesidades (Sal 5.1–3), las que vemos cuando nuestras oraciones son contestadas
(Stg 5.15–16) y las bendiciones de vivir con sabiduría (Mt 7.24–27). Proverbios
28.20 dice que el hombre fiel «tendrá muchas bendiciones». Hay muchas de ellas que
aguardan a los que son fieles, pero la fidelidad es algo a lo que somos llamados.
Demanda que hagamos nuestra parte. Esto, a su vez, libera—por la acción de la fe—
la operación del poder de Dios, que trae la recompensa de la fe. En los siguientes
pasajes encontramos un cuadro donde el hombre hace su parte. No importa cuán
pequeña haya sido, cada cual tuvo que hacer lo necesario para que la voluntad de
Dios se cumpliera. Escriba todas las cosas que se logran por medio de los siervos
fieles de Dios en cada uno de los pasajes a continuación. ¿Qué se «libera» en cada
una de estas acciones poderosas de Dios por medio de la obediencia fiel? Hechos
12.5–10
La acción de Dios:
Hechos 2.40–47
Hechos 8.26–38
La acción de Dios:
FE VIVA
De su estudio, ¿qué es lo más importante en cuanto a la fidelidad en la oración?
¿Qué la hace tan importante?
¿Cómo describiría la diferencia entre los frutos de una fiel vida de oración y una
esporádica? ¿Por qué piensa eso?
Dedique un tiempo para revisar sus respuestas y ver qué cosas hay de las que le
gustaría conversar con el Señor. Es posible que necesite ayuda para algunas de
ellas o quizás quiera alabar al Señor por lo que le ha visto hacer.
FIDELIDAD EN ACCIÓN
En Josué 10 aparece un cuadro de fidelidad dramatizado para nuestro provecho.
Josué y las tropas de Israel estaban en guerra con los ejércitos de los amorreos.
Dios se había propuesto llevar a cabo una obra poderosa a favor de Su pueblo y, en
efecto, la batalla se libró a favor de Israel. Josué se dio cuenta que no
terminaría hasta caer la noche y que un remanente del ejército enemigo lograría
escapar.
Es en ese momento que Josué se detuvo, lleno de fe, y expresó las palabras que
aparecen en el capítulo 10.12–13. Ocurrió algo increíble al ordenar verbalmente al
sol y a la luna que se detuvieran hasta obtener la victoria final. Hizo esta
petición al Señor ante el pueblo y Dios contestó su oración. Esta historia es una
maravillosa figura de lo que significa la intercesión, ya que el ejército de
Israel salió a luchar a favor de un aliado. Es también una hermosa ilustración de
la guerra espiritual, por cuanto Josué actuó con autoridad sobre los dioses a los
que adoraban los amorreos (el sol y la luna). Pero ambos fueron efectivos por
medio del ejemplo de fidelidad de Josué. Lea el relato de este hecho en Josué
10.1–14 y utilice las preguntas que aparecen más adelante para que le sirva de
ayuda al estudiar esta figura de fidelidad. ¿Por qué los israelitas lucharon a
favor de los gabaonitas? (Véase el trasfondo en Josué 9.) ¿Cómo guiaba Josué a
Israel a ser fiel de esta manera?
¿Qué dijo Dios a Israel acerca de esta batalla? ¿Cómo la respuesta de Israel
demostraba su fe?
A la luz de la palabra de Dios dada a Israel, ¿cómo la oración de Josué para que
el día se prolongara muestra la fidelidad que completa lo que Dios le llamó a
hacer? ¿De qué modo fue una respuesta de fe a la palabra de Dios?
FE VIVA
Después de estudiar esta lección, ¿cómo describiría la fidelidad? ¿Cómo la
explicaría en relación con la oración? ¿Alcanza a ver de qué manera el compromiso
de fidelidad y la responsabilidad ante el deber abren la puerta a la audacia de
las posibilidades milagrosas de la oración? Deténgase ahora, pídale al Señor que
le haga más fiel y le muestre cómo desarrollar esa cualidad en su vida.
¿Qué busca?
¿Cómo se relaciona esta obra intercesora con el trabajo que, como puede ver,
realizan Jesús y el Espíritu Santo?
¿De qué manera interceden por nosotros?
RIQUEZA LITERARIA
Brecha, perets. Una abertura, fisura, grieta, especialmente una grieta en la
muralla. Perets viene del verbo parats, que quiere decir: «abrir, romper o
penetrar». Dos versículos (Is 58.12; Am 9.11) muestran que las brechas o las
grietas deben ser reparadas. El versículo anterior se refiere a las ruinas físicas
y espirituales de Sion, y el otro al tabernáculo de David. En Ezequiel 22.30,
«[ponerse] en la brecha» es una metáfora que ilustra una intercesión comprometida.
Esta se refiere a la brecha entre Dios y el hombre, que un intercesor trata de
reparar.1
Ezequiel 22.30, 31
RIQUEZA LITERARIA
Oren, paga˓. Alcanzar, encontrarse con alguien, presionar o persuadir a alguien;
encuentro; rogar, pedir urgentemente[…] En algunos pasajes tiene el sentido de
«encontrar», como en Josué 2.16. En Josué 19.27, paga˓ se refiere a la extensión
de las fronteras de una tribu. Algunas veces, el verbo se refiere a «caer» sobre
alguien en una batalla, es decir, encontrarse con el enemigo con intenciones
hostiles (1 R 2.29). Paga’también implica la idea de interceder, es decir, el
proceso mediante el cual un suplicante alcanza a un superior y le presenta una
petición urgente. Por lo tanto, la intercesión implica el alcanzar y encontrarse
con Dios para rogarle su favor.
Isaías 53.12
RIQUEZA LITERARIA
Para interceder, entunchano. Coincidr, tener un encuentro con alguien para
conversar. un encuentro casual, se pasa a la persona un servicio a favor de otra,
aun cuando en algunas ocasiones la petición pudiera estar dirigida en contra de
esa otra persona (Hch 25.24; Ro 11.2).3
Romanos 8.26–28
1 «Riqueza literaria: 22.30 brecha», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL,
1994, p. 998. 3 «Riqueza literaria: 7.25 para interceder», Biblia Plenitud,
Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 1630.
Hebreos 7.24, 25
1 Juan 2.1
FE VIVA
¿Puede describir claramente la diferencia entre «ayudar» a Dios y «asociarse» a
Él? Escriba lo que piensa o siente acerca de la idea de ser socio directo de lo
que el Señor hace. ¿De qué manera puede mejorar su participación?
2 Samuel 23.11, 12
Ezequiel 22.30
1 Juan 2.1, 2
FE VIVA
¿Cómo se adapta su definición de intercesión a su vida de oración? Piénselo y
exprese la diferencia entre su tiempo devocional diario con Cristo y sus momentos
de intercesión por otros. ¿Cuáles son las características de cada aspecto de la
oración, es decir, de las del devocional comparadas con las de la intercesión?
¿Qué cosas cree que necesita aprender a usar con el objeto de crecer en la
intercesión como lo desearía?
Tómese el tiempo necesario para orar acerca de estas cosas antes de continuar este
estudio. Luego, busque a alguien que sea su compañero de oración y que lo ayude a
responsabilizarse para que estas cosas se desarrollen en su vida.
¿Cuáles son las preocupaciones de Abraham? ¿En qué medida eran consecuentes con el
carácter de Dios? (vv. 24, 25)
¿Qué aprendemos sobre la naturaleza del andar de Moisés con el Señor? (33.9–11)
¿Cuál es el primer enfoque de la intercesión de Moisés y qué dice Dios? (vv. 12–
14)
¿Cómo se relacionan estas razones con el carácter de Dios? ¿De qué manera se
relacionan con el honor de Dios? (vv. 16b, 17)
EJEMPLO 4: Daniel intercede por Israel: Daniel 9.1–19 ¿Qué motiva a Daniel a orar?
¿De qué manera se basa su actitud en la oración en la Palabra de Dios? (vv. 1–4)
¿Qué actos de naturaleza física hace Daniel mientras ora? (y. 3) ¿Qué clase de
corazón muestra hacia Dios? (y. 4a)
Enumere las formas en que Daniel se identifica plenamente con los pecados y las
necesidades de Israel. ¿Se separa de ellos en su oración? (vv. 5–11)
¿Qué dice acerca de la justicia de Dios? ¿Qué merece el pueblo de Israel? (vv. 12–
14) ¿Qué pide? (vv. 15–19)
2. La noche antes de morir, Jesús hizo una gran oración de intercesión para todos
los tiempos: Juan 17. (a) Enumere las cosas claves por las que ora; (b) ¿Cuántas
veces ora por la unidad («que sean uno»)?
3. De acuerdo a Hebreos 7.25 y 8.1, ¿dónde está Jesús en este momento, qué está
haciendo y por qué? ¿Qué podríamos aprender acerca de: (a) las razones que nos
permiten sentir serenamente confiados; y (b) las acciones que sirven de modelo
para activar nuestra vida de oración?
FE VIVA
¿Qué aspectos sobre la intercesión ha visto que pueda utilizar ahora? Escriba las
maneras en que espera ponerlos en práctica.
Haga una lista de oración para sus momentos de intercesión. Incluya los nombres de
personas, naciones, iglesias, ministerios, cuestiones sociales y morales, etc. Es
posible que quiera remitirse al capítulo 3 y repasar la primera sección tocante a
temas por los cuales debemos orar.
Lección 7—La guerra espiritual
No cayeron bombas, no se dispararon salvas ni murió nadie. Sin embargo, hubo gran
violencia. La tierra tembló, las puertas de la prisión se abrieron, los guardias
fueron sometidos y, en efecto, hubo una batalla. Pero, aunque hubo resultados
físicos, esta no fue una lucha de un hombre contra otro en un enfrentamiento
corporal. Esta fue una batalla espiritual que se inició con la oración. Comenzó
cuando dos misioneros predicaban el evangelio y confrontaron de manera directa a
una mujer endemoniada. Procedieron a ordenar en nombre de Jesús que el espíritu la
dejara y el demonio huyó. Pero, como sucede en la mayoría de las batallas, hay
pocas victorias decisivas de inmediato. Sobrevinieron contraataques satánicos que
suscitaron disturbios callejeros por lo ocurrido y los misioneros fueron
encarcelados. A partir de eso siguió la lucha encarnizada, por lo que estos dos
hombres se propusieron continuarla por medio de la oración y la alabanza a Dios.
Al poco tiempo las cadenas que los tenían amarrados y las puertas que les cerraban
el paso se abrieron por efecto de un poderoso terremoto. Esta respuesta a la
oración no fue el final de la batalla. Esto hizo posible que se hablara del
evangelio al carcelero, y su familia en pleno recibió la salvación esa noche. Este
ejemplo poderoso de guerra espiritual está registrado en Hechos 16.16–34.
Deténgase ahora y lea todo el pasaje. Luego repase lo anterior y compruebe cómo se
ajusta cada frase. A continuación use el texto para responder a estas preguntas:
¿Qué clase de libertad recibió: (a) la esclava, (b) Pablo y Silas, y (c) el
carcelero gracias a la lucha espiritual?
¿De qué manera esta batalla le abrió las puertas a cada una de estas personas?
¿Puede suponer que el encarcelamiento de Pablo y Silas podría ser una venganza del
espíritu inmundo que habían echado, igual que la actitud vengativa de comerciantes
inescrupulosos? ¿Qué lección podemos aprender a la luz de esto? ¿Qué respuesta
tuvieron Pablo y Silas en su situación? ¿Qué herramientas usaron para la batalla?
FE VIVA
¿De qué manera lo afectan las historias bíblicas como esta? ¿Se sorprende a sí
mismo pensando que ese episodio es algo que se adapta a otra época y lugar? Piense
en esto un momento. Con frecuencia resulta muy fácil observar los grandes milagros
que Dios ha hecho como pensar que son cosas que nunca habrán de pasar aquí y
ahora. No es que pensemos que Dios no pueda hacer estas cosas hoy, ni siquiera que
creamos que no las hará. Simplemente parece que nos cuesta imaginar que puedan
suceder y que nosotros tengamos un papel clave en la situación. ¿En qué
situaciones le gustaría ver que Dios haga cosas poderosas y transformadoras? Sea
realista con el clamor de su corazón, el deseo de una visitación de la gracia de
Dios. Al menos, no titubee mientras escribe detalladamente cuál es esa «visión»
por la que ora, la que Él ha puesto en su corazón.
¿Por qué debe usar la armadura de Dios, y qué promesa contiene esta orden? (y. 13)
¿Cuál debe ser su posición permanente en la batalla? ¿De qué manera podría
lograrse? Use sus propias palabras. (y. 14a)
¿En qué sentido depende la armadura de que viva sujeto a lo que Dios provee, más
que de sus propios esfuerzos? (y. 14b)
DE UN VISTAZO
Observemos de manera cuidadosa la «armadura de Dios». A continuación hay seis de
las palabras clave que describen la significación espiritual de esta armadura que
debe usarse durante una batalla invisible, aunque mortalmente real. En primer
lugar, lea las descripciones completas y la siguiente sección «Riqueza literaria».
Luego, tome la idea clave de cada parte y transfórmela en una aplicación a la
conducta; es decir, si se va a poner esta armadura, ¿de qué manera va a afectar su
estilo de vida y sus hábitos de oración? Utilice el espacio señalado como
«Aplicación a la conducta» que sigue a cada parte del equipo que analizamos, y
describa su previsible respuesta a cada versículo al ir preparándose para la
batalla.
Aplicación a la conducta:
RIQUEZA LITERARIA
(Para analizarse antes de comenzar la «Aplicación a la conducta» de cada una de
las partes de la armadura. Capte la riqueza del significado de cada palabra, en
tanto se aplica a la idea de que cada cual se «arme».) Evangelio, euangeion.
Compare «evangelio», «evangelizar», «evangelístico». En la antigua Grecia,
euangelion designaba la recompensa que se daba por entregar algún mensaje o buenas
noticias. Más tarde, llegó a significar las mismas buenas noticias. En el NT, esta
palabra incluye, por un lado, la promesa de salvación y, por el otro, su
cumplimiento gracias a la vida, muerte, resurrección y ascensión de Cristo Jesús.
Euangelion designa también los primeros cuatro libros del NT: Mateo, Marcos, Lucas
y Juan.1
FE VIVA
Al ver la armadura que Dios proporciona, ¿qué seguridad siente cuando se encamina
a la batalla?
¿Qué ha aprendido acerca de esta armadura que lo ayudará a usarla con mayor
eficacia? 2 «Riqueza literaria: 11.22 fe», Biblia Plenitud, Editorial Caribe,
Miami, FL, 1994, p. 1267. 3 «Riqueza literaria: 1.79 paz», Biblia Plenitud,
Editorial Caribe, Miami, FL, p. 1285. 4 "«Riqueza literaria: 4.8 justicia», Biblia
Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 1607. 5 «Riqueza literaria: 4.24
verdad», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 1347. 6 «Riqueza
literaria: 28.28 salvación», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL, 1994,
p. 1441.
¿Qué parte de la armadura es la que más le llama la atención?
¿Qué partes de la armadura de Dios son con las que se siente más seguro al
usarlas? ¿Con cuáles se siente menos seguro? ¿Por qué cree que sucede esto?
ÚNASE A LA LUCHA
¿Cuántas veces hemos visto esas viejas películas de guerra en las que un joven
soldado, que acaba de terminar su preparación, anhela entusiasmado el momento en
que podrá entrar en combate? A ningún verdadero soldado jamás le gusta esperar,
porque eso pone el momento de la decisión estratégica en manos del enemigo.
Iniciar la ofensiva proporciona ciertos elementos de control. Comprendemos,
naturalmente, que lo decisivo en esta batalla espiritual no está bajo nuestro
control, sino en el del Señor. Sin embargo, después de una preparación básica, nos
sentiremos como esos soldados entusiastas que apenas pueden esperar el momento de
intervenir en el combate espiritual. Este deseo no nace del corazón de alguien que
está buscando la oportunidad de destruir a otros, sino del que sabe que en
realidad puede hacer algo para cambiar el resultado eterno de la batalla por las
almas humanas. Por medio del poder de la oración (Ef 6.18), cuando estamos
equipados con recursos espirituales (2 Co 10.3–5; Ef 6.12–17), se nos da todo el
armamento potencial que jamás hemos de necesitar. También se nos da la garantía de
la victoria final (Mt 16.18), avalada por la resurrección de Cristo de entre los
muertos (Ap 1.18). Con esta seguridad—de que Dios es «por nosotros», que está de
nuestro lado (Ro 8.31)—, estamos listos para anticipar la batalla; pero, ¿cómo
comenzamos? La guerra se desarrolla en forma continua a nuestro alrededor; ¿de qué
manera nos unimos a ella? Estudie los pasajes de las Escrituras dados a
continuación para encontrar la respuesta. ¿Qué nos dice que hagamos Efesios 6.18?
¿De qué manera debemos buscar el Reino de Dios según nos muestra Jesús en Lucas
11.2?
¿Cuál es el incienso que anuncia el establecimiento del Reino de Dios con poder? (
Ap 5.8; 8.3–4)
Después de leer estos pasajes, ¿cuál diría que es el primer paso para unirnos a la
batalla? (Recuerde 1 Ti 2.1–8.)
FE VIVA
Ahora que ha completado esta introducción a la guerra espiritual, dedique un
momento para anotar sus pensamientos. ¿Qué cosas básicas tiene en mente acerca de
esta lucha?
¿Es algo nuevo para usted considerarse como un soldado? ¿Cómo lo hace sentirse?
¿Descubre que es un soldado entusiasta o renuente? ¿Qué haría para lograr mayor
confianza y una actitud más positiva al emprender la lucha?
¿Piensa que hay algunas áreas en su vida que no se verán involucradas en esta
lucha? ¿Por qué?
¿Hay interrogantes que esta lección le haya traído a la mente? Anótelos para que
pueda volver a ellos a medida que encuentre las respuestas más adelante en este
estudio.
Para concluir: Transcriba estos versículos para confiar firmemente en que iSi
ingresa al servicio del Señor, vencerá! Romanos 8.37–39
2 Corintios 2.14
1 Juan 4.4
Lección 8—La guerra invisible
Ataque sorpresa: la habilidad de atacar la posición del enemigo cuando no está
preparado para hacerle frente o cuando no ha notado su presencia. Ya hace mucho
tiempo que esta estrategia resulta efectiva en la guerra—fue lo que llevó a los
Estados Unidos a entrar en la Segunda Guerra Mundial—y, para bien o para mal, se
considera siempre una ventaja en la lucha. El desarrollo de la tecnología del
siglo, que cuesta billones de dólares y años de trabajo a los gobiernos, es la
demanda más reciente en esta pugna por mantener el secreto y la sorpresa en el
afán por obtener la superioridad militar. Sin embargo, a pesar de todo lo que se
conoce y observa acerca de esta empresa en el ámbito político y material, cuán
pocos son los que advierten que en medio de la vida cotidiana hay una constante
cortina de fuego con armas invisibles que se esgrimen en un mundo invisible. Estas
armas no entran en las discusiones de la mesa de negociaciones de la diplomacia
internacional, pero están produciendo una verdadera catástrofe en medio de un
público que está ciego a la naturaleza de esta guerra. Muchos creen que esta
guerra es tan silenciosa como son invisibles sus armas, pero en realidad hay
explosiones diarias que sacuden a nuestro mundo: ¡El SIDA! ¡El cáncer! ¡Los
divorcios! ¡La violencia! Y así las bombas hacen blanco, destruyendo personas,
familias y sociedades en un holocausto interminable. Lo cierto es que soportamos
el ataque de un enemigo que procura esclavizar y matar a la población total, lo
cual es mucho peor que cualquier ataque de ciencia ficción por extraterrestres
empeñados en la destrucción de esta tierra. No se trata de La guerra de los mundos
de H.G. Wells, sino de una verdadera guerra, aunque invisible, que se lleva a cabo
para dominar este planeta. Esto puede empezar a parecer demasiado trágico, pero
recuerde que tenemos esta esperanza: ¡Disponemos de armas capaces de repeler esta
invasión! La artillería espiritual que poseemos puede liberar más poder que
cualquier arma jamás concebida por el hombre. Y sin embargo, aun cuando Dios nos
ha equipado con grandes recursos para la batalla, debemos tener presente que no
triunfaremos si constituimos un ejército dividido. Debemos unificar la resistencia
con el fin de ganar la batalla. Esta lección está preparada para ayudarle a
responder preguntas acerca del enemigo, y para entender mejor nuestro campo de
batalla, es decir, el mundo espiritual. En términos militares: esta es una «misión
del servicio de inteligencia». En la guerra, siempre es una ventaja estratégica
conocer al enemigo—tanto sus puntos fuertes como los débiles—y estar familiarizado
con el terreno donde se llevarán a cabo las batallas. Las siguientes preguntas le
ayudarán a establecer conceptos bíblicos en relación con el mundo espiritual, tal
como se aplican a cada uno de los pasajes de la lista que aparece abajo. ¿De qué
manera verifican las declaraciones de Jesús y de otros en la Biblia la realidad de
este ámbito? ¿Cómo podemos adquirir conciencia de las acciones que
ocurren en la esfera espiritual? ¿Qué alcance tiene el impacto que produce? ¿ De
qué manera puede usted influir en lo que ocurre en el mundo invisible? 2 Reyes
6.15–17
Daniel 10.1–21
Lucas 11.14–26
1 Juan 4.1–16
ENTRE BASTIDORES
En tiempos del NT la palabra demonio significaba «espíritu maligno». La Biblia
enseña que un diablo personal [Satanás], posee la ayuda de espíritus malignos en
oposición a la obra de Dios y contrario al bienestar de la gente (Mc 3.22–26; Ap
12.9). Algunos ejemplos bíblicos de ataques demoníacos son los siguientes: afligir
a las personas con intenciones malignas (1 Ti 4.1–2); trastornos mentales (Mt
8.28–29); y enfermedades físicas (Mc 9.17–27). Es importante aclarar que no todas
esas enfermedades y perturbaciones son el resultado de influencias demoníacas. La
atmósfera del mundo físico y la del espiritual pueden impactarse entre sí. De no
ser así, Dios no se ocuparía de los actos físicos de los humanos como lo hace; y
los demonios no podrían causar males físicos, como lo muestran las Escrituras (Mc
9.17– 27). Pero, aunque el efecto del pecado presente en nuestra raza le ha
introducido las dolencias y enfermedades corporales, mentales y espirituales, no
podemos vincularlas directamente a un pecado o cautiverio (Ro 5.12).
Algunos asumen erróneamente que las enfermedades mentales, o que determinadas
condiciones mentales, deben atribuirse siempre a ataques demoníacos. Sin embargo,
no deberíamos nunca dar por sentado que una situación física o mental es el
resultado directo de un pecado de esa persona o de un acto de opresión espiritual
que la misma sufre. Nuestro deber, cuando procuramos ministrar bien la vida de
Jesús a los que sufren, es la de prestar atención con sensibilidad a la
orientación del Espíritu Santo. Los malos espíritus sólo tienen acceso a la
personalidad humana (es decir, el control demoníaco) mediante un elemento de
consentimiento pecaminoso, si no de elección deliberada o de una sucesión de
elecciones, por individuos que darán cuentas de sus acciones. La idea de que esos
espíritus pueden controlar u oprimir a la gente a su antojo no es compatible con
las Escrituras, pues significa desconocer la responsabilidad por sus pecados. La
esclavitud demoníaca occurre cuando la gente deciden someterse activamente a la
voluntad del demonio que los tienta o lleva a pecar. No es, por lo general, el
resultado de un hecho aislado de fracaso en el andar del cristiano, sino el fruto
inmundo del andar en el pecado -yendo tras él en la carne—durante un tiempo.
Muchas veces, la realidad de la esclavitud demoníaca se ha entendido mal, hasta el
punto de provocar temor en algunas personas. Hay quienes malinterpretan el relato
acerca de los siete hijos de Esceva (Hch 19.1–16) y temen no tener la suficiente
madurez espiritual para guerrear contra las fuerzas demoníacas. Pero los hijos de
Esceva cometieron un doble error: 1) pensaron que podían exorcizar a los demonios
con una fórmula fija; y 2) intentaron ejercer poder en el nombre de Jesús, cosa
para la cual no tenían ninguna autoridad por cuanto no eran creyentes. Usted y yo,
al contrario, podemos aprender a actuar de manera diferente a la que produjo su
fracaso. Operar con el poder del nombre de Jesús requiere la sumisión personal a
su señorío. Más aún, nunca deberíamos confiar en fórmulas fijas para realizar la
obra de Dios, ya que siempre será su poder, su presencia y su intervención
oportuna lo que llevará a cabo sus propósitos. Jesús dijo de manera categórica que
los que creyeran en Él expulsarían demonios en su nombre (Mc 16.17). Incluso,
Efesios 6.10–18 nos recuerda que la guerra espiritual por medio de la oración es
responsabilidad de todos los creyentes. Es nuestro deber encontrar el lugar que
nos corresponde en este ministerio. Es lamentable, pero hay muchos en nuestro
mundo que están oprimidos por la esclavitud demoníaca. Jesús nos envía a
ministrarles su amor y poder. Debemos confiar al emprender esta misión, porque no
hay poder maléfico que supere al poder de Dios. Cristo tiene plena autoridad sobre
los propósitos malvados de Satanás, sobre las enfermedades físicas provocadas por
fuerzas demoníacas y sobre las mentes trastornadas por el infierno. Cristo quiere
usarnos para ofrecer auxilio a quienes se encuentran en esas situaciones
extremas.1
INFORMACIÓN ADICIONAL
En Lucas 11.24 Jesús explica que un espíritu que ha sido exorcizado busca lugares
«secos» donde descansar. A la luz de estas palabras, Él suministra agua que hace
que manen ríos de agua viva «para vida eterna» (Jn 4.13–14). Esos «lugares secos»
los podemos definir como «zonas que no han sido alcanzadas por el agua de vida».
1 «Enfoque sobre la posesión demoníaca (Lucas 4.33–36)», en The Wesley Bible [La
Biblia Wesley], Thomas Nelson Publishers, Nashville, TN, 1990, p. 1523.
Usando una concordancia o una Biblia temática, busque otras referencias en el
Nuevo Testamento que hablen acerca de la vida en el reino espiritual. Más adelante
hay una lista de palabras o temas que podría incluir en este estudio. Al ir
leyendo lo que dice cada uno de los pasajes bíblicos, anote sus observaciones.
Esto le servirá como bosquejo en el cual podrá intercalar todo lo que vaya
aprendiendo acerca de lo invisible en base a estudios y experiencias adicionales.
(Esto es para animarlo a realizar una investigación más amplia. Use hojas
separadas—podría ser una para cada palabra o frase—, y anote en ellas sus
observaciones sobre textos claves que vaya descubriendo.) ángel espíritu inmundo
lugares celestiales la sangre de Jesús el diablo, Satanás Esta lista podría dar
lugar a descubrimientos que lo lleven a agregar más palabras. Inclúyalas al
avanzar en su estudio. reino de los cielos, reino de Dios huestes celestiales
enemigo principados y potestades espíritu(s) demonio(s) adversario
FE VIVA
Aunque las Escrituras enseñan con claridad que estamos totalmente rodeados por un
mundo invisible de acción espiritual, hay quienes se dejan convencer por la noción
de que las alusiones bíblicas al mundo espiritual son sólo de la imaginación. No
obstante, esta perspectiva exige la creencia de que Jesús permitiría que la gente
siguiera creyendo en cosas que no eran reales, o que simplemente permitió que
siguieran sosteniendo supersticiones falsas, lo cual no es consecuente con su
carácter ni con sus enseñanzas. ¿Por qué cree que algunas personas optarían por
negar el mundo espiritual a pesar de que las Escrituras son tan claras al
respecto?
A veces nos sentimos intimidados por personas que no creen en el mundo espiritual
y no nos atrevemos a expresar con sinceridad nuestro punto de vista por temor a
que nos ridiculicen por «creer en cuentos de hadas». ¿Cómo podemos responder a sus
cuestionamientos con sensibilidad y sinceridad a la vez?
Compare esto con Apocalipsis 12.7, donde se nos dice que Miguel tiene ángeles a su
cargo. ¿Qué nos dice esto acerca de una jerarquía en el mundo espiritual?
Lea Mateo 12.25–30. ¿Por qué es tan importante que los creyentes se mantengan
unidos para la guerra? ¿Por qué actúan aliadas las fuerzas demoníacas?
Lea Lucas 10.17–24. ¿Qué descubrieron los discípulos, después de llevar a cabo la
misión asignada?
Considere Lucas 10.21. Observe cómo Jesús aprueba y a la vez advierte respecto a
esta esfera de ministerio sobrenatural. ¿Qué podríamos aprender a fin de
equilibrar tanto una acción firme y al mismo tiempo humilde, sensible y sabia?
FE VIVA
Quizás no sea fácil intentar relacionarse con algo invisible. A muchas personas
les resulta difícil entender u ocuparse de la realidad del mundo invisible.
LA INCESANTE LUCHA
Quizás nos sorprenda saber que durante la Primera Guerra Mundial se hizo una pausa
en la lucha para la celebración de la Navidad. Se ha registrado que en algunos
lugares hubo tropas de fuerzas opositoras que disfrutaron juntos la gozosa
ocasión, pero trágicamente retornaron a sus posiciones de combate al día siguiente
para disparar contra las mismas personas con las que habían reído y cantado la
noche anterior. Podríamos pensar que también hay pausas en el conflicto
espiritual, pero lo cierto es que el adversario es implacable. ¿Qué dice al
respecto 1 Pedro 5.6–9?
Filipenses 1.27–30
1 Timoteo 6.6–12
2 Timoteo 2.3–5
RIQUEZA LITERARIA
Sobrio, nefo. Estar sobrio, no haber consumido ningún producto embriagante; estar
alerta, ser discreto. Nuestra clave para la guerra espiritual es que no nos
permitamos embriagarnos con las cosas que hemos de ver, sino que más bien
concentrar nuestra atención en lo que Cristo ha hecho por nosotros (Lc 10.17–20).
Firmes, stereos. Sólido, estable, firme, fuerte, seguro. Esta palabra nos enseña
que nuestra posición consiste no sólo en estar firmes e inmóviles sino en ser
completos, en relación a todas las áreas de nuestra vida. Velad, gregoreuo. Hacer
guardia, no dormir. Se deriva de la palabra egeiro, «despertar». En el Nuevo
Testamento gregoreuo se usa tanto en sentido físico como espiritual. Esta es la
palabra que usó Jesús cuando dijo: «¿Así que no habéis podido velar conmigo una
hora?» y «Velad y orad, para que no entréis en tentación» (Mt 26.40–41).
FE VIVA
Repase esta lección. Al ordenar sus pensamientos reflexione en lo que ha
aprendido. Haga una lista de las cosas nuevas o de las que ha podido profundizar.
¿Cree que el conocimiento de estas cosas podría haber modificado alguna reacción
importante o algún curso de acción que haya adoptado antes? ¿Cómo? ¿De qué manera
imagina que estos descubrimientos van a influir en su vida en el futuro?
¿Qué conductas espirituales serán necesarias y qué decisiones tendrá que tomar
para aplicar estas nuevas percepciones?
Observe en los versículos 4–6, cuando dirige sus plegarias al Señor, los
fundamentos a que alude el salmista para pedir la derrota de los enemigos que debe
enfrentar.
Analice los versículos 7–12. Teniendo en cuenta que esta canción es una plegaria
dirigida al Señor en ocasión de tener que enfrentar al enemigo, observe las
siguientes formas: (a) el guerrero ora pidiendo protección y ayuda. (b) se
disciernen el carácter y la táctica del enemigo. (c) se solicita el modo
específico de derrotar al enemigo. Ahora, practique estas ideas en una situación
que conozca en el contexto actual de nuestra sociedad.
RIQUEZA LITERARIA
Guíame, ˓arak. Disponer, poner en orden (en una gran variedad de aplicaciones).
Colocar o ubicar (a uno mismo o a la tropa) en orden de batalla; ordenar,
comparar, dirigir, evaluar, estimar, calcular, acompañar (en la guerra), suplir,
manejar, reunir (en la lucha), constituir, preparar. La gama de traducciones
posibles de esta palabra resulta particularmente significativa en el contexto de
esta lección, ya que indica los muchos aspectos que requieren preparación para la
guerra espiritual. La palabra hebrea ˓arak, «dirigir», se usa en los siguientes
pasajes en relación con la lucha. En cada caso indicamos el término que se ha
usado para traducir de el hebreo ˓arak.Tomando en cuenta el contexto del Antiguo
Testamento, donde las batallas se libraban entre el pueblo de Dios y sus enemigos,
podemos deducir principios orientadores. Tome nota de las verdades que vaya
descubriendo a medida que observe esta palabra en otros contextos. Relacione
dichas verdades con lo que sus oraciones tienen que lograr en la esfera espiritual
cada día. (La frase después de cada cita es la manera en que se ha traducido en
cada caso la palabra ˓arak.)
FE VIVA
A la luz del análisis que acabamos de hacer de los términos, disponga su corazón
pata reflexionar sobre los siguientes asuntos con una actitud receptiva. 1.
Dedique un momento para identificar los aspectos relacionados con la preparación
en su propio estilo de vida. ¿Cómo se prepara espiritualmente para los
acontecimientos de cada día?
1 «Riqueza literaria: 9.8 Atalaya», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL,
1994, p. 1065.
5. ¿Cómo se prepararía para un tiempo determinado de oración intercesora, con un
enfoque concreto?
(b) Oración
(c) Resultados
(d) El «corazón» para Dios
(b) Oración
(c) Resultados
INFORMACIÓN ADICIONAL
Mediante un diccionario bíblico o una enciclopedia, busque información adicional
sobre la forma en que se encaraban casi siempre las batallas en tiempos antiguos
(por ejemplo, las tácticas guerreras en las campañas militares de Babilonia,
Persia, Grecia o Roma). Averigüe lo que nos pueden enseñar los principios de
estrategia militar si los aplicamos a la guerra espiritual. Esta puede ser una
investigación muy provechosa que le brindará herramientas útiles para contar estas
verdades a otros cristianos.
Hebreos 10.19–25
1 Juan 3.18–23
FE VIVA
¿Ha pensado alguna vez en la oración como una manera de «combatir» para realzar o
defender el honor de Dios? ¿Qué piensa y siente al respecto?
¿Anhela ver que Dios recibe la gloria por las cosas que usted hace? Dedique un
tiempo para confesar al Señor todo lo que Él traiga ahora mismo a su mente,
respecto a ocasiones en las que ha tratado de reservar la gloria para usted en
lugar de darle crédito a Él.
Describa lo que puede hacer para crecer o convertirse en una persona cuyo corazón
esté consagrado a dar la gloria a Dios en cada situación de la vida. Pida al
Espíritu Santo que le muestre formas nuevas de darle gloria al Padre.
Enumere algunas de las maneras concretas en que siente que el Señor lo está
llamando a ser más disciplinado.
Ore pidiendo al Espíritu Santo que afiance esas áreas disciplinadas en su vida. El
resultado debiera ser un estilo de vida más gozoso, liberador y victorioso.
VENCEDORES EN SU NOMBRE
Jesús lo ha llamado para que actúe en su nombre. Esto significa que el poder y la
autoridad de Jesucristo están a su disposición. No hay nada que pueda derrotarlo
cuando usted se desenvuelve en el poder de Jesús. Esta gran bendición y asombrosa
responsabilidad que Cristo nos ha conferido se fundamenta en el hecho de que ser
enviados «en su nombre» significa haber sido delegados:(a) como sus representantes
plenamente autorizados, (b) plenamente investidos de autoridad y poder para
actuar. Esta es una bendición poderosa. Tenemos todo el poder que pudiéramos
llegar a necesitar para vivir una vida cristiana victoriosa y para salir
triunfantes en la lucha. No hay nada que pueda detenernos definitivamente, no hay
poder que pueda derrotarnos cuando usamos el nombre de Jesús con autoridad. Esto
no significa que algunas batallas no van a ser largas, arduas y sacrificadas.
¡Pero vamos a triunfar! Entonces, se preguntará: ¿por qué hay creyentes que sus
vidas no manifiestan este poder? ¿Y qué falta cuando la gente invoca el nombre de
Jesús y no recibe ninguna respuesta? Es en este contexto que debemos entender qué
significa ser responsables en Su nombre. Si va a ejercer autoridad en el nombre de
Jesús, debe antes someterse a El. Cuando un embajador habla en nombre de su país,
expresa la voluntad de su nación, no la de él. Cuando usted habla en nombre de
Jesús, debe expresar Su voluntad. Si trata de actuar según su voluntad, no tiene
derecho a usar su nombre. Recuerde las palabras de Jesús cuando dijo: «No todo el
que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la
voluntad de mi Padre que está en los cielos» (Mt 7.21). La cuestión está en
quiénes realmente reconocen el señorío de Jesús en su vida. Estos son los que
viven en sumisión a El y pueden aplicar su nombre con autoridad y poder.
¿Cuáles son las formas en que la voluntad propia puede obstaculizar el poder en la
oración?
Lucas 9.1
1 Corintios 15.27–28
1 Pedro 3.22
FE VIVA
¿Qué significa para usted, en lo personal, que Jesús le haya dado derecho a usar
su nombre? Escriba aquí una carta con su respuesta a Jesús. Exprese sus
sentimientos por el hecho de habérsele confiado este privilegio. ¿Se siente más
cerca de Cristo porque se le ha otorgado autoridad en Su nombre? ¿Qué otro
descubrimiento en esta lección le ha acercado más a Jesús?
¿Qué ha aprendido en esta lección que puede ayudarle en las situaciones en las que
ya está involucrado? ¿Cómo cree que lo va a ayudar? ¿Cómo va a poner en práctica
estas cosas?
¿En qué aspectos de la disciplina preparatoria para la guerra espiritual necesita
que el Señor lo ayude a crecer? Escríbalas como un recordatorio de oración y
expóngalas cada día ante el Señor como preparación para la batalla.
¿Con qué palabras inicia Jesús su discurso sobre el ayuno en Mateo 6.16–18? ¿Qué
da esto por sentado con respecto a sus discípulos?
Lea el episodio en Marcos 9.14–19. ¿Qué podemos aprender, a partir de las palabras
finales de Jesús, acerca del poder que tiene el ayuno en determinadas situaciones?
PARA UNA MEDITACIÓN EXHAUSTIVA
Algunas traducciones omiten las palabras «y ayuno» en Marcos 9.29 y Mateo 17.21,
si bien hay mucha evidencia a favor y en contra, a partir de los manuscritos
disponibles, tanto para incluirlas como para considerarlas como un agregado
posterior. ¿Qué razones cree que habrán motivado a los entendidos que eligieron la
opción de omitir la mención del ayuno, cuando la inclusión es igualmente correcta
desde cualquier punto de vista académico?
RIQUEZA LITERARIA
Ayuno, tsom. Un día de ayuno; un tiempo separado para meditar y orar sin provisión
alguna que satisfaga las necesidades normales de alimentación. Este sustantivo
viene del verbo tsum, que significa «ayunar». En el Antiguo Testamento el verbo
aparece veintidós veces y el sustantivo veintiséis. El ayuno es la renuncia
voluntaria a ingerir alimentos. El verbo «ayunar» se asocia a veces con palabras
como «llorar», «lamentar» o andar «vestido de cilicio», todas expresan intensidad.
El ayunar es una acción contraria al primer acto pecaminoso de la humanidad, es
decir, el acto de comer del fruto prohibido. Ayunar es negarse a comer lo que es
permitido.1 Discipulos, mathetes. Del verbo manthano, «aprender», cuya raíz math
sugiere pensar con esfuerzo. Un discípulo es el que aprende, que sigue al maestro
y sus enseñanzas. La palabra se usó primero acerca de los doce, y luego constituyó
una referencia a todos los cristianos, como en Hechos 6.1. Por lo tanto,
entendemos que las directivas que Jesús dio a sus discípulos incluyen a todos los
creyentes.2
FE VIVA
Al comenzar a reflexionar sobre la relación entre el ayuno y la guerra espiritual,
dedique unos momentos a ordenar sus pensamientos. Repase sus experiencias pasadas
con el ayuno y sus sentimientos íntimos al respecto. Reflexione en tas siguientes
preguntas y anote sus puntos de vista actuales sobre el tema. ¿Ayuna alguna vez?
En caso afirmativo, ¿cuándo y por qué lo hace?
¿Qué es lo más difícil para usted cuando ayuna? ¿Cómo hace, cómo hizo o cómo
podría hacer para superar esto?
1 «Riqueza literaria: 3.5 ayuno», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL,
1994, p. 1105. 2 «Riqueza literaria: 10.1 discípulos», Biblia Plenitud, Editorial
Caribe, Miami, FL, 1994, p. 1202.
¿Cuál ha sido su punto de vista sobre el ayuno en el pasado? ¿Para qué se practica
el ayuno? Presente un caso bíblico a favor de la importancia y pertinencia del
ayuno en la actualidad.
¿Cuál cree que fue el motivo por el que Jesús dijo que sus discípulos ayunarían en
épocas como la nuestra?
Hechos 6.1–7
Hechos 14.23
Hechos 27.21–26
Decisión
Resultado
Decisión
Resultado
Decisión
Resultado
Nehemías 9.1–3: 10.28–29 Propósito
Decisión
Resultado
Decisión
Resultado
Decisión
Resultado
Lucas 2.36–38 Propósito
Decisión
Resultado
FE VIVA
¿Cómo se siente respecto al ayuno después de haber leído estos pasajes? ¿Ha visto
algo hasta aquí que le da mayores deseos de ayunar?
¿Hay situaciones que requieren del ayuno, en tanto otras no? ¿Por qué cree que
esto es así? ¿En qué situaciones cree que todo creyente debiera recurrir al ayuno?
Los cinco primeros versículos de Isaías 58 constituían un ataque directo a los que
seguían tradiciones muertas, que practicaban los ayunos como un rito y se
limitaban a las formas sin poner en ello su corazón. ¿Qué lecciones podríamos
enumerar en base a ese pasaje?
¿En qué forma coinciden las palabras de Jesús sobre el ayuno en Mateo 6.16–18 con
lo que usted acaba de leer?
1 Crónicas 10.11, 12
Ester 4.15–17
Daniel 10.2, 3
Mateo 4.1, 2
EL AYUNO: LA LLAVE MAESTRA
Si bien no hay ninguna regla fija para encontrar la solución a todos los
problemas, excepto la de hacer la voluntad de Dios, sin duda hay beneficios
concretos en la práctica del ayuno. Cuando el pueblo de Dios se consagra al ayuno
y la oración se libera poder y se abren brechas. Muchas personas han llegado a
amar la práctica del ayuno, no por la disciplina física, sino por los resultados
que comprueban en el reino espiritual cuando ayunan. En los versículos que siguen
hay referencias al ayuno y a los resultados que obtenía el pueblo de Dios cuando
ayunaba. Léalos y responda las preguntas a fin de aprender más acerca de este
poderoso instrumento para la guerra espiritual. Ester 4.3, 16: ¿Qué motivó al
pueblo judío a ayunar?
Ester 9.1, 2 registra los resultados del ayuno de los judíos. ¿De qué manera
contrasta esto con el decreto originalmente emitido en contra de los judíos en
Ester 3.13?
Marcos 9.17–29: ¿Qué declara aquí Jesús respecto al excepcional poder del ayuno?
FE VIVA
Ahora que ha completado esta lección sobre el ayuno, utilice esta sección como
ayuda para reflexionar sobre las cosas que ha aprendido. ¿Qué se destaca como el
aspecto más notable en cuanto al ayuno? ¿Puede ver el cumplimiento de esa realidad
en su propia vida? ¿Cómo?
¿Qué cambios o qué verdades van a influir en su manera de ayunar como resultado de
esta lección?
¿Por qué cree que Jesús estimuló la fe con tanto vigor en una situación que
requería ayuno y oración? ¿Sería porque la fe que se necesitaba en ese caso se
desarrollaba por medio del ayuno?
Al concluir, dedique unos minutos a orar por las respuestas que acaba de dar.
Pídale al Señor que le dé la fortaleza necesaria para que su vida crezca en esta
disciplina de la guerra.
¿Por qué fue vital la intervención de Aarón y Hur para obtener la victoria?
Jueces 6.24–40; 7.16–25: ¿Qué dos cosas hace Gedeón como expresión de su
compromiso de seguir a Dios? (6.24–27)
A la luz de la difícil época que le tocó vivir a Gedeón, ¿qué nos dice de su fe el
nombre que da al altar que construyó?
Describa los resultados de las acciones llevadas a cabo por los soldados.
FE VIVA
No siempre es fácil asimilar y llevar a la práctica los principios que encontramos
en las Escrituras. Repase los casos que acaba de estudiar y utilice esta sección
en su propia vida.
Cuando Moisés estaba observando a los hijos de Israel en la batalla, en Éxodo 17,
se había ubicado por encima del campo de lucha, en la cumbre de una montaña, desde
donde podía ver al ejército. Explique por qué es importante reconocer que su lugar
en Cristo, está por encima de las luchas de este mundo (Ef 2.1–6).
¿Por qué cree que podría ser importante para un intercesor tener la posición
ventajosa de una perspectiva global, como la tenía Moisés? ¿Por qué cree que sería
importante para la gente que participaba de la lucha poder ver a su intercesor,
como en el caso de Moisés?
INFORMACIÓN ADICIONAL
Establezca un «altar de recordación» en su habitación, para conmemorar algo que el
Señor haya hecho. Podría ser algo tan simple como una piedra colocada en una
repisa, un álbum de fotografías, un recuerdo de una ocasión de victoria, algo que
tenga especial significado para usted. Deje que ese objeto llegue a ser un
«testimonio» visible, un sitio de alabanza, de tal manera que cada vez que lo vea
recuerde la bendición especial, la provisión u orientación que Dios le dio para su
vida.
Ya sea como agradecimiento por lo que Dios ha hecho, o anticipando lo que habrá de
hacer, dé ahora mismo un paso de fe. Escriba una hoja y haga un sencillo
pergamino. Anote un aspecto de su vida en el que desee que Dios le ayude. Permita
que este recordatorio concreto sea otro punto de «conexión» entre lo que cree y es
todavía invisible, pero puede Ser anticipado por fe. (Advertencia): Estas acciones
no constituyen un sustituto supersticioso de la fe, sino expresiones vivas y
visibles de ella, orientadas a la alabanza.)
RIQUEZA LITERARIA
Trompeta, shophar. Una trompeta hecha de un cuerno curvado de animal, una corneta.
El shophar se menciona setenta y dos veces en el Antiguo Testamento, y se usa para
anunciar la presencia del Señor cuando entrega la Ley al pueblo. También se
usa para anunciar un peligro y para hacer un llamado a las armas. En Oseas 8.1
shophar se compara con la voz del profeta que proclama la palabra de Dios.1 Voz,
qol. Llamar a viva voz, exclamar, sea una palabra o un sonido. Proclamar, declarar
o tronar. El uso de qol en Isaías 58.1 es un claro llamado a proclamar a viva voz
la Palabra del Señor. Se trata de una acción física que nos exige un alto volumen
de voz. Aquietar, shaquat. Reposar, tranquilizarse, aquietarse, estar descansado.
Shaquat implica la idea de serenidad en la vida y las circunstancias. Después de
una batalla viene el tiempo de reposo y la superación del desorden y la lucha
(véase 2 Cr 20.30). Jubileo, júbilo, truwah. Clamor, aclamación gozosa, grito de
batalla, sonido de trompetas. Truwah también denota regocijo, celebración, gozo.
En Levítico 25.9 las trompetas se tocaban para indicar el tiempo de gran regocijo
y liberación en todo Israel. Esta celebración tenía lugar cada cincuenta años y se
dedicaba a devolver a sus dueños originales la herencia familiar que hubiera
tenido que empeñar. Esta es una figura de cómo la obra de Jesús en la cruz tiene
por meta restaurar lo que Dios se había propuesto darnos.
Sin perder de vista estas descripciones, lea los pasajes que siguen, anote el tipo
de situación que se ilustra y el resultado del uso de la trompeta en cada caso. A
medida que estudie, escriba cualquier hallazgo especial que le parezca pueda poner
en práctica en su vida espiritual actual. Números 10.1–10
Jueces 7.16–25
1 Samuel 13.3
1 Crónicas 15.25
2 Crónicas 20.27–30
1 «Riqueza literaria: 8.1 trompeta», Biblia Plenitud, Editorial Caribe, Miami, FL,
1994, p. 1064.
Isaías 58.1
Ezequiel 3.10, 11
FE VIVA
La trompeta se usaba en los tiempos bíblicos para dirigir el movimiento de las
tropas en la batalla. En la guerra espiritual, el Señor nos da una responsabilidad
similar de «sonar la trompeta» con nuestras propias voces y, por medio de su
Palabra, dirigir la batalla según sus planes. ¿Está listo para hacer sonar la
trompeta de esta manera? Indague en su corazón, mientras responde a las siguientes
preguntas. Permita que esta autoevaluación le ayude a crecer en su papel como
intercesor. Describa qué entiende cuando las Escrituras dicen «Alza tu voz como
trompeta» (Is 58.1).
¿De qué manera este estudio acerca del uso de la trompeta en la guerra le ayuda a
percibir cómo utilizar mejor su propia voz en la batalla de la oración?
¿Qué se propone hacer en el futuro para orar con más valentía y confianza?
Puesto que Dios nos ha creado como individuos únicos, cada uno nos desenvolvemos
de manera diferente. Algunas personas son por naturaleza más expresivas y hablan
más que otras, pero aun así el Señor nos llama a todos a elevar nuestras voces
ante Él en determinadas ocasiones. En otras oportunidades, nos indicará que
guardemos silencio en su presencia. La clave está, por lo tanto, en ser sensibles
a la dirección del Señor y a mantener el equilibrio adecuado. Deténgase ahora por
un momento para orar, para pedirle al Señor que lo llene nuevamente de su
Espíritu; hágalo con espontaneidad, con valentía, con palabras directas. Eleve su
alabanza acogiendo el poder que Él le otorga para andar en una vida vibrante,
equilibrada y victoriosa.
LAS ARMAS QUE TENDRÁ QUE USAR
A lo largo de la historia de la guerra se han usado numerosas armas y herramientas
para emprender los combates. Pero ni la mejor preparación, entrenamiento o
estrategia militar da la victoria en una batalla, a menos que el soldado opere con
eficiencia los elementos de combate. De la misma manera, los creyentes no pueden
pretender alcanzar victoria a menos que tomen parte en las acciones físicas del
combate. El Señor nos llama a ser soldados eficientes en la lucha en la que
participamos. Al aceptar nuestro lugar en la batalla, es importante que percibamos
las indicaciones de nuestro General para el desplazamiento de las tropas. Sus
directivas pueden ser específicas o pueden implicar una reacción natural a las
situaciones, como resultado de la relación que tenemos con El y de la comprensión
que tenemos de sus métodos. Es sabio que aprendamos más acerca de las acciones
físicas con que reaccionamos y participamos en la línea de combate. Las Escrituras
nos muestran muchos elementos físicos para usar en nuestras campañas espirituales.
Lea los siguientes textos y haga una lista de algunas de esas demostraciones,
describiendo el uso principal de cada una de las «armas» en relación a la guerra
espiritual. Josué 6.2–5 (Al comparar este pasaje con Romanos 4.12 y Génesis 13.14–
18, y especialmente el y. 17, ¿a qué conclusión es posible llegar respecto a la
acción espiritual adecuada a nuestros días?)
Josué 10.12, 13
LA GUERRA DE LA ADORACIÓN
La adoración es nuestro más efectivo recurso para avanzar en cualquier situación.
Por medio de ella invitamos a Dios y al señorío de Cristo a hacerse presentes en
nuestra circunstancia. No hay nada tan importante como asignar prioridad a la
adoración en la vida cotidiana.
La Biblia muestra que muchas de las acciones que se asocian a la adoración también
las vemos en la batalla. Este hecho apunta a la significación que ella tiene en la
guerra espiritual, a la vez que muestra todavía más acerca de cómo espera Dios que
nos desplacemos en el combate. Trabaje con los siguientes pasajes de la misma
manera que hizo en la sección anterior enumerando y describiendo las estrategias y
las armas de la guerra espiritual. Salmo 47.1–3
Salmo 100.1–5
Salmo 150.4
FE VIVA
Revise las notas que hizo de esta lección. ¡Hay tanto para aprender acerca de la
guerra espiritual y de las armas que debemos operar cuando participamos en el
combate! Ninguna lección en particular, ni siquiera una serie de ellas, podrá
enseñarle todo al respecto. Pero puede tener la confianza de que el Señor sabe lo
que usted necesita para estar preparado en cada situación que enfrente.
Hebreos 1.6
«Elecutáis su nalabra»
Mateo 13.41–42
Mateo 26.52–54
Lucas 1.26–38
Hebreos 1.13–14
Hechos 12.5–11
FE VIVA
Antes de seguir adelante con este estudio, deténgase y responda las siguientes
preguntas que le ayudarán a definir lo que cree sobre los ángeles. Ore y pídale a
Dios
que le ayude a ver toda la verdad acerca de estos seres que Él creó, y acerca de
cómo pueden impactar su vida. ¿Qué relatos o testimonios recuerda haber oído
acerca de los ángeles? ¿Eran historias reales o de ficción, sencillas o
complicadas, emocionantes o aburridas? Describalas en pocas palabras.
¿Cómo cree que esos relatos influyeron en el desarrollo de sus propios conceptos
acerca de los ángeles y de lo que realizan?
¿Cómo podría afectar su vida una comprensión biblica acerca de los ángeles?
¿Ha obtenido nociones nuevas acerca del mundo de los ángeles en lo que va de este
estudio? ¿Se ha modificado de alguna manera su punto de vista? ¿Qué aplicaciones
prácticas encuentra en este tema en lo que se refiere a la guerra espiritual?
Lucas 16.22
Lucas 22.43
Hechos 8.26
Gálatas 1.8
Hebreos 1.14
FE VIVA
Muy pocas cosas llegan a formar parte vital de nuestra vida a menos que podamos
definirlas con nuestras propias palabras y en base a nuestra experiencia. Dedique
un momento para repasar lo estudiado en la sección anterior y reflexione acerca de
cómo influyen en su persona. Use las preguntas de esta sección como ayuda para
poner en práctica las verdades que ha aprendido. ¿Qué aspecto del auxilio que
prestan los ángeles a los creyentes le parece más pertinente a su vida? ¿De qué
manera espera beneficiarse por este servicio?
¿Qué significa para usted que Dios asigne ángeles para que le sirvan? Describa lo
que este hecho le demuestra acerca del amor de Dios hacia usted.
Escriba con sus propias palabras una nota de agradecimiento a Dios por su cuidado.
Exprésele sus sentimientos respecto a los seres angelicales que ha designado para
que le sirvan. Agradézcale también por lo que anticipa en el futuro gracias a la
provisión que ha hecho por usted.
¿Cuáles son los medios utilizados para expulsar a Satanás del cielo?
Haga una lista de los nombres que se usan en este pasaje para referirse a Satanás.
Daniel 10.1–4, 12–13: ¿Qué lugar ocupaba Daniel en la guerra que se describe en
este pasaje?
¿Cómo cumplió Daniel su responsabilidad?
¿Qué le permitió a este ángel tener la libertad de seguir adelante con su misión a
favor de Daniel?
FE VIVA
Ahora que ha visto lo que dicen las Escrituras acerca de la obra y el ministerio
de los ángeles, reflexione en las verdades que ha descubierto. Con las preguntas
siguientes, medite en lo que la lección ha revelado y en cómo poner en práctica
estas verdades en su vida cotidiana. ¿De qué forma influye en su propia manera de
encarar la lucha espiritual lo que ahora sabe acerca de la intervención de los
ángeles en esa guerra?
A medida que discernimos más acerca de los propósitos y la obra del Señor en
nuestra vida, nos percatamos que Dios obró en situaciones pasadas de tal forma que
en ese momento no lo veíamos. ¿De qué maneras ha visto que las cosas aprendidas
aquí ya están obrando en su propia vida?
¿Qué cosas espera que sucedan en su vida como resultado de las nuevas ideas que ha
recibido por medio de este estudio?
Lección 13—Ángeles y demonios
Cuando entré en la habitación pude ver ángeles por doquier. Parecía que cada
espacio disponible tenía su propia representación angelical. No, no se trataba de
una visión sobrenatural, sino de los elementos que decoraban la habitación. Era
Navidad y, como es natural en esa época festiva, se había elegido a las figuras de
los ángeles como elemento decorativo de dicha habitación. No es poco común que en
la temporada Navideña se vean esas decoraciones típicas. Es, por cierto,
perfectamente apropiado que nosotros, los que hemos recibido tan maravillosa
salvación, celebremos con gozo el nacimiento de nuestro Salvador. Más aún, es
completamente aceptable que usemos los adornos de los que nos valemos para
expresar de muchas maneras la historia de la Navidad: las escenas de la Natividad
nos recuerdan el nacimiento de Cristo; las luces que adornan los edificios y las
casas de familia nos recuerdan que la «Luz del mundo» ha llegado. La belleza de su
don irradia en la magnificencia de lo que nos rodea cuando celebramos su
nacimiento. En medio de todo están los ángeles, de todo tipo, que ocupan su lugar
alrededor nuestro en memoria de las huestes angélicas que fueron las primeras en
proclamar a los pastores las buenas nuevas del nacimiento del Salvador, y que lo
protegieron de Herodes cuando el adversario utilizó al monarca como instrumento de
su ataque (Lc 2.8–14; Mt 2.13). La Navidad es uno de esos momentos en que pensamos
en los ángeles. Pero hay otras ocasiones en las que con frecuencia también se
expresa la opinión popular acerca de ellos: «¡Qué niño tan angelical!», se dice
frente a un pequeño dormido, cuyas facciones expresan profunda serenidad. Ante las
rellenas mejillas del rostro de un pequeño, otros dirán que «parece un querubín»,
y del mejor alumno de la Escuela Dominical se dice que «se porta como un
ángel».Estas son frases que la mayoría hemos escuchado o quizás hasta pronunciado.
Pero, ¿sabe alguien en realidad qué aspecto tienen los ángeles o cómo actúan?
¿Hay, acaso, una determinada apariencia «angelical» que corresponda con veracidad
a las huestes celestiales? ¿Será cierto que siempre están rodeados de un ambiente
de serenidad? A los ángeles se les ha caracterizado de las formas más diversas y
han llegado a simbolizar diferentes cosas para distintas personas. Algunas de
estas ideas están basadas en los relatos bíblicos y otras en creaciones artísticas
o en meras fantasías. El resultado ha sido una mezcolanza de mitos y
especulaciones que ha llegado a confundir a muchos cristianos respecto a la esfera
de lo angelical. Para empezar a investigar los datos bíblicos acerca de los
ángeles lea los siguientes versículos y haga una lista de los distintos tipos de
ángeles que se describen. Génesis 3.24
Jueces 13.3
Isaías 6.2
1 Tesalonicenses 4.16
1 Pedro 3.22
Apocalipsis 12.7–9
RIQUEZA LITERARIA
Ángel, malach. Mensajero, embajador; alguien enviado para desempeñar una tarea o
comunicar un mensaje; específicamente un «ángel» o mensajero celestial del Señor.
Malach se usa más de doscientas veces en el Antiguo Testamento y casi siempre se
traduce como «ángel». Esta palabra puede usarse con referencia a seres humanos, en
cuyo caso, por lo general, se traduce como «mensajero». Los ángeles, que se
mencionan muy a menudo en las Escrituras hebreas, fueron enviados para asistir o
informar a los patriarcas, Balaam, David, el profeta Zacarías y otros. No todos
los ángeles son del tipo «angelical» que creemos; véase Proverbios 16.14 (donde se
traduce como «mensajero de muerte»). Las cualidades sobrenaturales de los
mensajeros del Señor se describen en Salmos 78.49; 104.4 y Proverbios 17.11.1
Ángeles, angelos. De angello, «entregar un mensaje»; por lo tanto, un mensajero.
En el NT la palabra posee el sentido especial de un personaje espiritual, un
personaje celestial servidor de Dios que funciona como un mensajero del Señor
enviado a la tierra para ejecutar sus propósitos y darlos a conocer a los hombres.
Los ángeles están presentes de forma invisible en las asambleas de los cristianos
y son enviados por Dios para ministrar a los creyentes (Heb 1.14).2
¿Qué otros términos se usan para describir al Ángel de Jehová? Génesis 18.1–33
Génesis 48.15–16
Éxodo 3.2–8
Josué 5.13–15
Jueces 13.3–6
FE VIVA
Casi todos los eruditos evangélicos concuerdan en que el Ángel de Jehová que
aparece en el Antiguo Testamento es Jesús. Acabamos de estudiar algunas de las
numerosas razones que apoyan esta convicción, pero ninguna es tan convincente como
el hecho innegable de que Jesús es el centro de la Biblia. Ya que ha hecho su
propia investigación respecto al Ángel de Jehová, medite en lo que ha aprendido y
cómo afecta su vida. ¿Qué siente al pensar en que las figuras del Antiguo
Testamento hablaban cara a cara con Jesús? ¿Cómo influye esto en su conocimiento
de la manera en que Dios actuaba en medio de su pueblo en la antigüedad?
¿Hace que le resulte apropiado en alguna medida el hecho como un ejemplo viviente
para su vida hoy? ¿En qué forma?
Cuando se advierte con claridad que Jesús siempre estuvo involucrado en la obra de
Dios con los seres humanos, su presencia llega a ser más palpable y natural, en
lugar de parecernos lejana y esporádica. Sabiendo que Él está aquí mismo, y que
está comprometido con usted, pídale a Jesús que lo ayude a percibir su presencia
más claramente en su vida cotidiana.
Éxodo 37.7–9
Salmo 99.1
Ezequías 10.1–22
Isaías 6.6, 7
RIQUEZA LITERARIA
Querubines, keruvim. Un ser celestial que se representa mediante figuras
esculpidas en oro sobre el arca del pacto. La palabra Keruv podría estar
relacionada con un verbo acadio que significa «bendecir, alabar, adorar». Keruvim
se menciona noventa veces en el Antiguo Testamento, y más de treinta de esas
referencias se encuentran en Ezequiel. Los Keruvim fueron vistos desde Adán hasta
tiempos de Ezequiel. Véase su descripción en Ezequiel 10. La idea de que keruv
significa «ángel protector» persiste (Ez 28.14). Un keruv protege, como se afirma
en Éxodo 25.20. (Compárense los dos ángeles, uno frente al otro, que cubrían y
resguardaban al Señor de gloria mientras su cuerpo yacía en la sepultura, Jn
20.12.)3 Serafines, serafim, plural de seraf. Un ser angelical flamígero, fiero,
con la habilidad de moverse suave y velozmente; también se refiere a una criatura
del desierto, probablemente una serpiente, de color flamígero, y sumamente ágil.
La raíz del verbo es seraph, que significa «encender o quemar». Por ello, los
seraphim podrían ser ángeles de un color o apariencia flamígera, similar a una
llama en su movimiento o 3 «Riqueza literaria: 25.18 querubines», Biblia Plenitud,
Editorial Caribe, Miami, FL, 1994, p. 104.
transparencia. Sólo en Isaías 6.2, 6 la palabra se traduce «serafines»; el resto
de las referencias (Nm 21.6, 8; Dt 8.15; Is 14.29; 30.6) aluden a serpientes,
escorpiones y víboras. Quizá el color o el movimiento de las serpientes terrenales
se asemeja al de los ángeles.4
INFORMACIÓN ADICIONAL
Los ángeles se mencionan a lo largo de toda la Biblia. Llevan a cabo muy diversas
tareas, aparecen de distintas formas y llegan de distintas maneras. Usando una
concordancia o una Biblia con referencias temáticas, haga un informe comparativo
de las actividades características de los ángeles. Ello le ayudará a comprender
mejor el propósito y la obra de estos seres. Tal vez quiera incluir algunos, o
todos, de los siguientes detalles que las Escrituras proveen respecto a los
ángeles en cada caso. Apariencia Nombre Acciones Palabras que pronuncia Tipo de
ángel Ropa Modo de movimiento Propósito del ángel Presentación
Quizás haya otros aspectos en estas situaciones que desee mencionar. Siéntase en
libertad de agregarlos a esta lista y de escribir comentarios especiales a medida
que avanza.
Las Escrituras indican que hay una jerarquía definida entre las huestes
angelicales, aunque en la mayoría de los casos no se describe con claridad.
Estudiaremos los que se definen simplemente como ángeles, junto al más enaltecido
de estos seres conocido como «arcángel». La Biblia no dice nada que sugiera que la
apariencia y los deberes de los arcángeles difieran a los de ángeles de menor
jerarquía, excepto que se reconoce su liderazgo entre ellos. Con estas categorías
en mente, analice las descripciones que encontramos en las Escrituras. No olvide
anotar lo que se dice de su apariencia y de sus tareas específicas. Arcángeles
Daniel 10.12, 13, 20, 21
1 Tesalonicenses 4.16
Judas 9
Salmo 91.11
Salmo 104.4
Salmo 148.2
Lucas 1.11–20
Lucas 2.9–15
FE VIVA
Después de considerar los versículos anteriores, ¿cuál es su impresión respecto a
los diversos ángeles?
Anote algunas de las verdades aprendidas de las que cree afectarán perdurablemente
su vida. Ore respecto a ellas y pida al Señor que lo ayude a vivir de acuerdo a lo
que le está enseñando.
LOS ÁNGELES CAÍDOS
Isaías 14.12–14 relata la historia de Lucifer (Lucero), que en algún momento fue
un ángel del Señor, pero que fue expulsado del cielo a causa de su pecado. Ahora
conocemos a este ángel caído como Satanás, puesto que ha perdido el derecho de
llevar el nombre que Dios le dio originalmente, así como también el de ocupar su
lugar en el cielo. Cuando Satanás fue expulsado, también expulsaron con él muchos
otros ángeles que lo habían acompañado en su rebelión. Se entiende, por lo
general, que estos ángeles caídos son los que ahora se desempeñan como fuerzas
demoníacas del infierno, contra las cuales combatimos. Esta línea de pensamiento
se basa en el hecho de que Satanás es incapaz de crear y que, en consecuencia, los
demonios son indudablemente la expresión degradada de los seres divinamente
creados. Aunque no está expresada en forma directa, esta tesis tiene apoyo en las
Escrituras (Ap 12.9). La idea clave que se debe tener en cuenta al estudiar este
tema es que los creyentes tenemos autoridad sobre ellos en el nombre de Jesús.
Remitiéndose a las siguientes referencias bíblicas, observe qué se dice acerca de
los ángeles caídos y su posición actual en relación a nosotros. Isaías 14.12–15
Mateo 25.41
Marcos 16.17, 18
Romanos 8.38, 39
Efesios 1.20–22
Apocalipsis 12.7–10
FE VIVA
Hablar acerca del reino demoníaco puede asustar a las personas que no han llegado
a comprender la posición que tenemos en Cristo. Explique cuál es la autoridad que
Jesús nos ha dado sobre los demonios.
Al estudiar esta lección, ¿ha aprendido cosas que antes no sabía? ¿Cuáles?
¿Qué pasos dará durante la próxima semana para afianzar esas verdades en su vida?
Al finalizar este estudio, dedique un tiempo para escribir una carta de gratitud
al Señor por las cosas que le ha mostrado su majestad. También por los ángeles que
ha asignado para ministrarle y por la autoridad de la que goza, por medio de
Jesús, sobre las obras de las tinieblas.
Versículos 13–17: Por otra parte, se nos instruye a tomar lo que el Señor ha
provisto para nuestra lucha. No sólo es de El la fortaleza, sino también las
armas. Nuestras armas y nuestras tácticas fallan, pero el Señor ha provisto todo
lo que necesitamos. Tome todo lo que El le ha dado para que pueda mantenerse firme
hasta que concluya la batalla. Esto requiere nuestra disposición a adoptar (de
manera agresiva) y a recibir (voluntariamente) la armadura (vestimenta apropiada
para la lucha) que el Señor provee. Si lo hacemos, nos encontrarán en pie cuando
la batalla haya terminado.