Coro 1º

De los libres la voz que resuene,

Porque saben sin tregua luchar,
Es su lema en la unión perdurar,
México así, enemigos no tiene

Coro 2º

Pueblos hermanos todos de aquende

La Europa venid, y celebrad
Con nosotros la gran libertad,
Timbre es de gloria, luz que sorprende.

ESTROFAS

Cien años ha que Hidalgo en Dolores

Las cadenas de esclavos rompió,
Hiriendo verdugos y señores
Feudales que Cortés nos legó.
Tres siglos ¡oh patria! Fueron
Los que la Iberia te hizo llorar;
Todos sus hijos se estremecieron
Al eco sonoro de tu cantar.

Pueblo guerrero fue el mexicano

Por los impulsos de bravos mil;
Cien y más veces batió al tirano,
E independiente surgió viril.
Ante el Orbe camina mostrando
El sol gallardo de libertad,
Que irradia en los libres, ostentando
En sus frentes, valor, igualdad.

Incansables, luchando en la guerra,

Patria juremos sin vacilar,
Y palmo a palmo, intacta su tierra,
La debemos por siempre cuidar;
Más si acaso mañana llegare
Un extraño a quererla invadir,
Y el clarín con alarmas sonare…
¡volemos, y por ella morir!
Inclinados debemos hablarte,
Con genuino y grandísimo amor;
Sean nuestros pechos firma baluarte
Do incólume, se anide el honor.
Levantemos la vista a los cielos,
Mirando atentos lo que hay allí:
El Cura Hidalgo y el gran Morelos,
Que nos bendicen con frenesí.

Saben que veneramos sus nombres

Como caudillos de guerra y paz;
Porque lucharon
Con pocos hombres,
Son admirados, aún más y más.
Con regocijo los mexicanos
Dicen en tono galano y vario:
¡tuvimos héroes cual espartanos!
¡tenemos patria y un centenario!

Tacubaya, 1910.

CORO

Radiante, bello, maravilloso,

Con cauda de arreboles a diario,
El cometa de Halley vistoso
Procedió con luz al Centenario.
 ESTROFAS

Himno sin par, bizarro deseamos

Al Centenario ¡oh independencia
Mexicana! Cuán poca es la ciencia,
Pocos los vates gran libertad,
Que ardientes, bastante inspirados,
Con rítmicos galanos concentos,
Puedan en tan augustos momentos
Decir cómo es la santa igualdad.

Cruzada heróica en once años de guerra

Hidalgo inició a la hora del grito;
No más callar meditó me agito;
A las armas, y ven libertad,
Ven risueña y contenta a mi Patria;
Pase el oprobio, el duro letargo,
Que tres siglos de cáliz amargo
Te han hecho llorar en verdad.

Salve Patria; cuna de hidalgos

Tuviste, si, linaje de bravos,
Rompieron las cadenas de esclavos,
Que las garras de un león sujeto.
De Cuauhtémoc al espíritu fuerte,
Dice un ángel de allá de los cielos,
Lo tuvo en la tierra el invicto Morelos,
Genio viril que tanto luchó.

Palabras no hay, es muda la lengua,

No están escritas en diccionario,
Las que, en el primer Centenario
Se deben con luz y gala escribir,
Narrando tantas, tantas proezas:
Mártires muchos, caudillos tantos,
A México libre reclaman cantos,
Ellos por él supieron morir.

Tacubaya, 1910

EL MIRADOR DEL MUNDO.

* Es copia fiel del original.