You are on page 1of 41

¿QUE ES LA FOTOGRAFÍA?

Si comparásemos a un fotógrafo con un pintor, diríamos que fotografiar es pintar con la luz: Luz que usaríamos como
pintura, y una Cámara que usaríamos como pincel.
La luz es nuestra materia prima, puesto que sin ella nuestros ojos no verían ninguna imagen, así pues, como materia
prima que es, podremos y debemos manejarla a nuestra conveniencia: dirigiéndola, alterándole el color, la dirección etc.
Algo que siempre hemos de tener en cuenta, es la relación entre lo que perciben nuestros ojos y la percepción de la
cámara. Es decir, deberemos componer la imagen y controlar la luz par fotografiar exactamente aquello que vemos,
teniendo en cuenta la diferencia de contraste, de perspectiva, de ángulo de visión, al profundidad de campo, la lectura
de tonos en blanco y negro, etc.
‘’ Fotografiar es por lo tanto, realizar un ejercicio de abstracción. ‘’
Con todo esto, llegamos a un punto en que es nos hace imprescindible conocer la materia prima que queremos usar: La
Luz.
La luz es una energía electromagnética a la cual el ojo es sensible. Dentro del espectro electromagnético, ocupa un
segmento de radiaciones cuya longitud de onda está comprendida entre los 400 y los 700 nanómetros (1 nanómetro =
1/1.000.000 milímetros).
La luz que recibimos del sol, es de color blanco. Esta luz descompuesta a través de un prisma, forma un espectro visual
de colores que van del azul al rojo, pasando por el verde y otros intermedios, por lo tanto, la suma da la luz de color
azul, con la luz verde, más la luz roja, nos dará como resultado luz blanca.
PELÍCULAS
La película está formada por un soporte de plástico transparente sobre el que se ha extendido una capa de emulsión
sensible a la luz. Esta emulsión se fabrica disolviendo en gelatina caliente una cierta cantidad de haluros de plata
(bromuro, cloruro o cloro-bromuro de plata) compuestos éstos fotosensibles, es decir, que la luz los altera en su
composición química convirtiéndolos en Cloro-bromato. Esta alteración no es visible hasta el momento del revelado, esto
se denomina Imagen Latente, y tan solo cuando pongamos en contacto la emulsión con el baño revelador, éste
reaccionará únicamente con la imagen expuesta (cloro-bromato) y la transformará en plata metálica negra, tanto más
cuanto mayor haya sido la exposición. Por lo tanto, las grandes luces del objeto fotografiado quedarán reproducidas en
la película como zonas oscuras, y las partes oscuras del objeto quedarán claras en la película, de ahí que se le
denomine Negativo.
Tipos de Emulsiones y Películas: Las emulsiones en B/N se pueden dividir en dos tipos principales:
1. Películas Ortocromáticas: Fueron las primeras películas de tipo moderno, y sus principales características
son la baja sensibilidad, alto contraste e insensibilidad al rojo. Actualmente su utilidad queda reducida a
trabajos de laboratorio y fotomecánica.
2. Películas Pancromáticas: Son las más universalmente utilizadas. Sus características son la amplia gama
de sensibilidades, mínimo grano, sensibilidad a todos los colores (por lo que deben procesarse en absoluta
oscuridad) y contraste medio. Las películas en color están fabricadas con éste método en sistema Tripack,
es decir, con tres capas de emulsión y colores, separadas entre sí por filtros coloreados.
Otra clasificación de las películas puede hacerse en función de la propia denominación de los fabricantes:
1. Películas de Aficionado: Su característica principal es una gran latitud de exposición, es decir, la
capacidad de corregir errores de exposición; compensada por mucho más grano y pérdida de nitidez,
traducción de tonos y colores, y pérdida de calidad general.
2. Películas Profesionales: Películas con poquísima latitud de exposición, es decir, mucho más exigentes
para el fotógrafo, pero de gran calidad en todos los sentidos.
La Sensibilidad de la Película: Es la capacidad que tiene una película para ser impresionada. Es decir, como ya
hemos comentado, la emulsión contiene unos productos fotosensibles que cuando son expuestos a la luz se alteran
químicamente, la cuestión es conocer la cantidad necesaria para que esto se produzca, puesto que no todas las
películas precisan la misma cantidad de luz.
Se denominan películas muy sensibles, aquellas que necesitan poca luz para ser impresionadas, lo que nos permite la
toma de fotografías en condiciones de luz muy deficientes; por otro lado, las películas poco sensibles, no nos
permiten hacer fotografías con poca luz.
La Gradación: La sensibilidad de una película se mide en grados ISO, que han acabado imponiéndose a las antiguas
gradaciones en grados Din, Schneider etc., que corresponden exactamente a los grados ASA.
En esta gradación, cada doble cantidad de grados corresponde al doble de sensibilidad, es decir, una película de 200
ASA es el doble sensible que otra de 100 ASA, y por lo tanto, necesitará la mitad de luz para ser expuesta.
Digamos que una película de sensibilidad media, razonablemente sensible y con un grano medio, sería la de 100 ASA,
si bien es cierto que con las nuevas tecnologías en fabricación de películas, puede decirse que ésta gradación
media ha pasado a ser 400 ASA (B/N). Todas las películas con sensibilidades menores a ésta se consideran de baja
sensibilidad, con un mínimo para película de toma con cámara de 25 ASA. Y aquellas superiores a 100 ASA se
denominan de alta sensibilidad, con un máximo de 5.000 ASA (revelado forzado).
A simple vista puede parecer carente de sentido la utilización de películas poco sensibles, ya que limitan el trabajo
fotográfico. Lo que sucede realmente, es que no solo debe valorarse una película atendiendo a su sensibilidad, sino que
existen también otros factores que determinan la calidad de las películas, entre ellos y por su importancia destacamos:
El Grano: Cuando la película es virgen, los haluros de plata son partículas cristalizadas, perfectamente distribuidas y de
un tamaño tan pequeño que no serían en absoluto visibles para el trabajo fotográfico. Pero cuando son
reveladas, tienden a arracimarse formando grumos de tamaño muy superior a los mencionados cristales, que al ser
ampliados para realizar la copia se hacen perfectamente visibles, llegando a estropear en ocasiones el resultado final.
Pues bien, el grano es tanto más evidente atendiendo a éstos factores:
• Calidad deficiente de la película.
• Mayor sensibilidad de la película.
• Tamaño de la película. Cuanto más pequeña es, más grano aparece al ampliar la copia.
• Reveladores más activos. A mayor actividad, más grano.
• Condiciones del revelado. Mayor temperatura, agitación constante etc., contribuyen a la aparición del
grano.
• Tipo de ampliadora. A mayor definición, más grano.
• Tipo de papel. Cuanto más contrastado más grano se aprecia.
Como vemos, para evitar este problema, en lo que se refiere a la película, es necesario usarla de gran calidad, y de la
menor sensibilidad posible a tenor de las tomas que queramos realizar.

Pasemos ahora al aspecto de la elección de la película. Es importantísimo usar siempre la misma película, de la mayor
calidad posible, y de sensibilidad adecuada al trabajo que vayamos a realizar. Pero también hay que tener en cuenta
otro factor, hay que usar película de la misma marca para cada un de los tipos diferentes de película (B/N, color,
diapositiva y fotolito). Para ello es importante que nuestra elección recaiga sobre alguna de las películas existentes en el
mercado que podamos conseguir fácilmente. La razón es fácil de entender, y aplicable a todo el material fotográfico. Son
muchos los factores que intervienen en la creación fotográfica, por lo tanto, al usar siempre la misma película
acabaremos por conocer sus características a la perfección, y habremos eliminado un factor de riesgo importantísimo.
El Código DX.
Si compramos un carrete cualquiera y nos fijamos un poco, veremos que junto a la ranura por dónde sale la película,
está el código de barras, y junto a éste aparece otro, el Código Dx, que nos sirve para que la cámara, si es electrónica,
lea automáticamente su sensibilidad.
Cuando elijamos una cámara, deberemos tener en cuenta un pequeño detalle muy importante. Si es una cámara
electrónica, nos ha de permitir la cancelación del código Dx, de lo contrario no podremos introducir películas que no
tengan dicho código.
El Forzado
Cuando hablamos de forzar la película, nos referimos a engañar al fotómetro diciéndole que la película es más sensible
de lo que es en realidad, con el fin de disponer de velocidades más rápidas. Pero debemos tener en cuenta esto a la
hora de revelar el carrete, dándole unos tiempos de revelados superiores en un 50% más por cada paso ASA que
hayamos engañado al fotómetro.
El Negativo y la Diapositiva
Cuando hablamos de película, debemos tener en cuenta varios aspectos además de los ya mencionados, como por
ejemplo, si trabajamos con negativo o diapositiva.
En B/N no hay películas reversibles (diapositivas). En color sí. Este factor depende de los químicos que utilicemos para
revelar. En el negativo el resultado tendrá una máscara color naranja, y la diapositiva no.
Ya hemos comentado anteriormente la conveniencia de serle fiel a una marca.
A continuación, pasemos a un listado de películas de buena calidad y profesionales para cámara de paso universal:
PELÍCULAS EN B/N
• Kodak Tri-X Pan 400 ASA: Poco contraste, grano medio, buena gradación. Muy recomendable, aunque
difícil de encontrar.
• Kodak Plus-X Pan 125 ASA: Poco contraste, grano fino, buena gradación. Recomendable aunque difícil
de encontrar.
• Kodak T-Max: Grano finísimo, muy contrastada. Desde 100 a 3.600 ASA.
• Agfa Pan: Grano medio, poco contraste y buena gradación. De 25 a 1.600 ASA. La de 25 ASA se utiliza
para reproducciones.
• Fuji Neopan: Similar a la T-Max.
• Ilford FP-4 125 ASA/ HP-5 Plus 400 ASA: Grano medio, buena gradación, contraste medio. Muy
recomendable.
• Ilford Delta: Película revolucionaria con tres capas de emulsión. Buen contraste, buena gradación, grano
fino. Bastante cara, de 100 y 400 ASA.
• Ilford X-P2: Se procesa como las de color (C41).

PELÍCULAS NEGATIVAS EN COLOR


• Kodak Vericolor: Las Vericolor III son las más usadas, y están calibradas al tono de la piel. Las Vericolor
II o HC son de alto contraste.
• Kodak Ektapress: Con tecnología T-Max de grano en tabletas.
• Kodak Ektar: Película de aficionado de muy buena calidad para su uso profesional.
• Agfa Color: De colores pastel.
• Fuji Color: De dominante verdosa.
• Kodak Color: Colores saturados.
PELÍCULAS DE DIAPOSITIVA EN COLOR
• Kodak Ektachrome: Es la más utilizada. Buena calidad.
• Agfachrome: Colores suaves y naturales.
• Fujichrome: Con ligera dominante verdosa.
• Kodakchrome: Ha de mandarse a revelar a Madrid, puesto que requiere un proceso muy específico. En el
precio del carrete va incluido el procesado.
LOS PAPELES FOTOGRAFICOS
El papel fotográfico, al igual que los negativos, se compone de un soporte sobre el que se extiende una emulsión
fotosensible. Esta emulsión es Ortocromática, es decir, no es sensible al rojo ni a cierto tipo de amarillo, de ahí que se
pueda procesar el papel con luces de seguridad de éste tipo, que se denominan Inactínicas.
La emulsión fotográfica en el caso del papel es una gelatina en la que se han disuelto unos haluros de plata
fotosensibles (Bromuro y Cloruro). La superficie sobre la que extendamos esa gelatina, es decir, el soporte, es de vital
importancia, puesto que es quien nos dará el blanco final de la copia.
Clasificaremos el papel fotográfico en función del soporte en dos tipos:
Papeles Baritados: El soporte de este tipo es de papel o cartón blanqueado con barita, que es uno de los minerales
más blancos de la naturaleza. Por otra parte, dado que el papel tiene una gran capacidad de absorción, la emulsión
fotográfica que puede soportar es de mayor grosor que los otros tipos de papel, por lo tanto, los negros que
obtendremos son muy profundos, y su gama de grises es mucho más amplia que la de los otros.
Papeles RC: También denominados Politenizados o de resina. El soporte no es de papel propiamente dicho, sino de
fibra de material sintético, con lo que el blanco es el propio colorante de la fibra. Debido a esta particularidad, con este
papel no se consiguen blancos tan puros: Por otra parte, su capacidad de absorción es poca, ya que tratamos con un
soporte plástico, y por lo tanto la gama de grises es menor que la del baritado, y el negro no es tan profundo.
Actualmente se fabrican papeles politenizados de gran calidad, y al ser éste más fácil de manejar, especialmente en
cuanto al fijado y lavado del mismo, va imponiéndose. Los papeles para ampliación no tienen grados de sensibilidad,
variando ésta de forma considerable entre los diversos tipos, clases y marcas. Por lo tanto, deberemos hacer pruebas
para conocer la gama de grises que nos ofrece, conociendo así la facilidad para llegar al negro, el tiempo de revelado, y
otras muchas cuestiones relacionadas con el papel. Una vez hechas estas pruebas, nos servirán de guía para todas las
ocasiones en las que trabajemos con el mismo papel. Solamente deberemos volver a hacerlas al cambiar de tipo de
papel, marca o clase.
Lo que sí tienen los papeles fotográficos es la gradación de contraste, numerada generalmente del 1 al 5, siendo el 1 el
más suave y contrastándose progresivamente hasta llegar al 5 como grado máximo. Entendemos por papel suave el
que nos ofrece una gran gama de grises, y por contrastado el que convierte lo que en el primero son grises claros en
blancos, y en negro los grises oscuros. Las pruebas que mencionábamos en el apartado anterior nos indicarán
perfectamente al gradación del papel con el que trabajamos, puesto que el grado de contraste varía de una marca a otra
aun siendo del mismo número.
Algunas marcas tienen también el papel 0, muy indicado para la realización de contactos, en los que necesitamos la
máxima calidad de tonalidades, no siendo indicado para las copias puesto que «empasta los tonos» y cuesta conseguir
el negro.
Además de esta diferenciación del papel en función de su soporte, podemos diferenciarlos atendiendo a otras razones
de una importancia decisiva para el resultado estético y el carácter de la fotografía.
A/Por Tono: Existen en el mercado infinidad de tonos de papel: Papel de tonos calientes (de tonalidad marronosa), de
tonos fríos (de un negro más profundo y en el que los grises son exclusivamente mezcla de blanco y negro), y una
amplia gama de tonos intermedios.
B/Por Brillo: Hay en el mercado papeles cuya superficie una vez seca es brillante, otros en los que esta es mate, y
otros intermedios.
C/Por Textura: Puede ser lisa o rugosa en diferentes grados. Actualmente, las corrientes estéticas se decantan por los
lisos.
Cada una de estas características puede combinarse con las otras, es decir, podemos encontrar papel baritado, frío, de
grano fino y brillante, u otro caliente, de grano grueso y mate.
Cabe tener en cuenta que estas características se verán reforzadas por el tipo de revelador de copias que usemos,
existiendo uno adecuado a cada tipo.
La elección de uno u otro papel realzará el resultado final de la fotografía, por lo que es de suma importancia conocer los
distintos tipos de papel y conocer las connotaciones estéticas de cada uno de ellos.
Entre la gran variedad de papeles existentes en el mercado fotográfico actual, destacan por su calidad los siguientes:
• Kodak: Kodakbrome (de tonalidades suaves), Polimax (de gradación variable), Elite (baritado de gran
calidad).
• Ilford: Ilfordspeed (contrastado), Multigrade (de gradación variable), Galerie (baritado).
• Agfa: Brovira-Speed (Tonalidades suaves), Record Rapid (baritado regular).
• Oriental, Tura, Foma, Tetenal, etc.
LAS CÁMARAS FOTOGRÁFICAS Clasificación Atendiendo al tamaño de la película
Denominación Película Características
Pocket 110 Cámara aficionado.
Pocket G 126 Cámara aficionado. Mínima calidad. Muy económicas.
Paso Universal 135 Cámaras polivalentes. Eje de la actividad fotográfica
Formato medio 120 Uso profesional.
Advanced Photo Sistem 135 Nuevo standard para aficionado.

¿Qué es un Sistema?
Es importante al adquirir una cámara, que tengamos en cuenta que al comprarla, lo que estamos haciendo es elegir un
sistema.
Entendemos por sistema la gama de accesorios que nos ofrece una marca determinada para la cámara en concreto
que queramos adquirir: Objetivos, filtros, flashes, parasoles, fotómetros, chasis, tubos de aproximación, y en general
aquellos elementos que nos permitirán realizar nuestras fotografías del modo que deseemos. Es ilógico pensar que
llegaremos a usar todo el sistema, pero aun así, debemos escoger la marca que nos ofrezca una mayor amplitud de
posibilidades, puesto que con el paso del tiempo podríamos precisar elementos que jamás creímos necesarios.
CÁMARAS COMPACTAS
Son cámaras que se caracterizan por el sistema de visión por vidrio óptico, que no pasa a través del objetivo, y por la
imposibilidad, en la mayoría de casos, de adaptarles objetivos intercambiables. Las de calidad, son muy silenciosas,
gracias a su obturador central. Son de tamaño reducido, sincronizables con el flash a cualquier velocidad, y con una ca-
lidad de objetivos comparable a los de cualquier cámara Réflex. Sus obturadores son muy fiables, si bien no alcanzan
velocidades muy altas. Algunas cámaras antiguas de este tipo son técnicamente perfectas, y muy valoradas (Yashica,
Minister D y semejantes Canon, Minolta, Voigtlander, Vito etc.), pero la cámara Leica merece especial atención.
Leica: Representa un caso insólito en el mundo de la fotografía. En 1.914 el ingeniero
Oscar Bernak diseñó para la empresa Ernst Leitz el prototipo de la primera Leica, que se
comercializó en 1.924. Este hecho supuso una verdadera revolución, ya que supuso el
origen de la fotografía moderna. Las actuales Leica, siguen siendo en parte fieles a los
fundamentos de las primeras: Es una cámara compacta de objetivos intercambiables,con
modificador del visor al efectuar la operación, y obturador de cortinillas. Ha mantenido a
través de los años la estética que la hace inconfundible.
Posee una colección de accesorios absolutamente genuinos, y una óptica que la sitúa como la mejor con diferencia, de
todas las de el mercado.
Su elevado precio, y su aspecto un tanto arcaico, reducen su uso a un pequeño número de usuarios, si bien goza de
fanáticos que la consideran casi una pieza susceptible de adoración.
Minox: Estas cámaras cimentaron su fama con la comercialización de las llamadas «espías», subminiaturas técnicas
que emplean película tipo microfilm. En los últimos años, han sacado al mercado una cámara de este tipo que aúna un
tamaño reducido, aproximadamente el de un
paquete de tabaco, con unas buenas
prestaciones y una óptica excelente. Para
terminar, hay que tener en cuenta los modelos
que últimamente comercializan varias marcas
como Pentax, Canon, Nikon o Fuji, de modelos multiprogramación, sofisticadas, con zoom incorporado, autofocus, y
algunas de ellas resistentes al agua, lo que las hace ideales para la toma en condiciones climáticas o geográficas
adversas.
CÁMARAS RÉFLEX
Las cámaras Réflex son aquellas cuyo visor mediante un pentaprisma, permite ver a través del objetivo de la propia
cámara.
Desde el inicio de su comercialización, se han convertido en las cámaras preferidas por la mayorías de reporteros
gráficos de todo el mundo. Permiten en todos los casos el cambio de ópticas, es decir, de objetivos, hecho que no es
posible de realizar en las cámaras compactas, a excepción de la Leica. La razón es bien sencilla, si nosotros
cambiásemos el objetivo de una cámara compacta, al cambiar también el ángulo de visión y la perspectiva de los
objetos, nosotros por el visor seguiríamos viendo la misma imagen, que no se correspondería con la que estaríamos
fotografiando.
Por lo demás, estas cámaras en su práctica totalidad, llevan incorporado un obturador de plano focal o de cortinillas.
Este, si bien no es tan exacto como el obturador central que llevan instalado las cámaras compactas, puede llegar a ve-
locidades muy superiores (hasta 8.000 en los modelos sofisticados). A las cámaras Réflex, dada su gran utilidad
profesional, se les puede adaptar prácticamente todos los accesorios que puede necesitar el fotógrafo, o un aficionado
exigente.
Clasificación de las Réflex
Mecánicas: Tiene un funcionamiento totalmente mecánico, es decir, no necesitan pilas para funcionar. Las pilas que
llevan son únicamente para el fotómetro. Estas cámaras son resistentes, poco sofisticadas, e indiscutiblemente son las
favoritas de los profesionales en cuestión de rapidez, duración, fiabilidad y funcionamiento garantizado en todas las
condiciones. Por supuesto, son las más caras, motivo por el cual están dejando de fabricarse.
Electromecánicas: Son cámaras de accionamiento eléctrico pero funcionamiento mecánico. Son muy fiables y de gran
utilidad, puesto que aúnan dos características que las hacen rápidas y sofisticadas.
Electrónicas: Cámaras de funcionamiento absolutamente electrónico. Muy sofisticadas (autofocus, multiprograma etc.),
y con unas características que las hacen muy llamativas. En un principio se dirigieron a aficionados, puesto que
permitían suplir con tecnología los pocos conocimientos del usuario, pero actualmente gozan de gran aceptación entre
los profesionales, especialmente para los reporteros, para quién se han convertido en imprescindibles.
No funcionan en temperaturas extremas. Hay que tener en cuenta que todos los automatismos de éstas máquinas en
ningún caso influyen en la calidad del resultado plástico de la fotografía, solamente lo hacen en comodidad para el usua-
rio.
CÁMARAS DE MEDIO FORMATO
Utilizan negativos de 120 o 220 mm. Son exclusivamente profesionales, dado el gran tamaño de sus negativos (4,5x6,
6x6 o 6x9 según modelos), los cuales permiten la realización de ampliaciones a tamaños realmente considerables sin
por ello perder calidad del trabajo.
Estas cámaras tienen unas notables posibilidades de transformación, e infinidad de accesorios que añadir.
La primera clasificación que vamos a hacer de ellas es atendiendo a su óptica:
Cámaras de dos objetivos: Se las define así porque llevan incorporados dos objetivos, vista la cámara frontalmente
uno encima del otro.
El de la parte superior actúa como visor, mientras que el de la parte inferior actúa como objetivo propiamente dicho.
Estas cámaras proporcionan una gran calidad a un precio módico.
• Rolleiflex: Es quizás la más cara de esta gama, unos 1.200 €, aproximadamente, pero su
calidad es inmejorable. No obstante, Mamiya o Yashica ofrecen una calidad muy similar a
un precio muy inferior, que las hace más asequibles.

• Lubitel: Es un modelo ruso, muy económico (sobre los 100 €), y


aunque su calidad no es excesivamente buena, dan las mismas
prestaciones que las de un solo objetivo y resultan más
económicas, pero tienen algunas dificultades técnicas como el
defecto de paralelaje.

Cámaras de un objetivo: Poseen un sistema de visión igual al de las cámaras Réflex de paso universal.
Son las cámaras con mayores posibilidades de configuración. Las usan principalmente profesionales en el estudio, dado
que su peso y dificultad de manejo no las hace prácticas para el reportaje, aunque poco a poco
se va superando este inconveniente.
Cuando precisamos de una gran calidad de imagen, como en la fotografía arquitectónica o de
ilustración, se emplean con gran ventaja sobre las de 135 mm.
Su precio oscila entre los 2.500 € y los 6.000 €.
• Hasselblad: Dentro de su gama es la más cara, sin que su calidad sea especialmente
superior a la de otras marcas.
• Mamiya: Es la más económica, y de muy buena calidad.
• Bronica y Rolleiflex: Su precio está entre el de las dos anteriores, y su calidad es semejante a la de la
Hasselblad.
CÁMARAS DE GRAN FORMATO O DE PLACAS
Son aquellas que utilizan las placas como película, es decir, que no
utilizan carrete. Por tanto, el disparo es foto a foto. El tamaño de estas
placas suele oscilar entre 9x12 cm. la más pequeña y 30x40 la más
grande.
Son cámaras profesionales, imprescindibles en la realización de trabajos
en los que se precisa de una gran ampliación del fotograma. Una
característica propia de este tipo de cámaras, es que llevan el objetivo
instalado en el fuelle, permitiendo así corregir las líneas de fuga, lo que
las hace muy útiles en la fotografía arquitectónica.

COMPONENTES Y MANEJO DE LA CÁMARA RÉFLEX


Definida de forma esquemática, una cámara es una caja rectangular
estanca a la luz y provista de una serie de mandos que nos posibilitan
sus funciones y de un orificio en el que integraremos el Objetivo.
En uno de los lados internos de la máquina se coloca la película, y en su
opuesto el Obturador. En la parte externa se halla la Palanca de Arranque, el Visor, el Mando del Rebobinado y el Botón
Disparador.
Disponemos además de otros mandos de control que enumeraremos más adelante.
El Visor: Ventanilla a través de la cual recibimos la imagen que
vamos a fotografiar directamente a través del objetivo,
mediante un sistema de espejos. Se halla alojado en el
pentaprisma, en la parte superior de la cámara.
El Botón disparador: Es el mando que presionamos cuando
tenemos la imagen encuadrada y enfocada tal y como
queremos que sea el resultado final. Acciona el Obturador y el
Diafragma.
La Palanca de arrastre: Cada vez que presionamos el disparador
abrimos el obturador, y con ello dejamos pasar la luz a la película, y
ésta se impresiona. Así queda formado el fotograma que
posteriormente procesaremos en el laboratorio. Para poder seguir
realizando fotografías deberemos disponer cada vez de fotogramas
vírgenes, trabajo del que se encarga la palanca de arrastre que
debemos accionar después de presionar el disparador.
El Mando de Rebobinado: Una vez expuesta toda la película, esta se nos queda dentro de la cámara, pero fuera del
chasis en el que se encontraba inicialmente, y dónde debemos volverla a guardar accionando el mando de
rebobinado.
Muchas de éstas funciones en las cámaras electrónicas o con motor, se realizan automáticamente sin necesidad de la
intervención del usuario. En cualquier caso, ello no nos dará nunca más calidad, si acaso más
comodidad de manejo en determinadas ocasiones. El único elemento que intervendrá en la calidad de la fotografía será
el objetivo.
LOS OBJETIVOS
Definición: Sistema de lentes cuya función básica consiste en formar nítidamente la imagen, haciendo converger sobre
el plano focal (plano en el que se encuentra la película) los rayos lumínicos emitidos sobre el objeto a fotografiar. Dicho
sistema de lentes está compuesto por lentes fijas y móviles, estas últimas son las que empleamos para Enfoque
(formación nítida de la imagen), o variación del focal con los objetivos zoom.
Lentes Móviles: Son las que se encargan concretamente de hacer converger los rayos lumínicos, al objeto de formar
nítidamente la imagen mediante el movimiento al que las obligamos al girar el aro de enfoque, alojado en la parte
externa del objetivo. Otras lentes móviles nos darán también las distintas longitudes focales en los objetivos zoom.
Lentes Fijas: Son propiamente el sistema óptico que nos da las características del objetivo. Forman la imagen,
concentran la luz y corrigen aberraciones ópticas derivadas de la función de las lentes móviles. Siendo más necesarias
cuanto más complejo sea el sistema óptico del objetivo.
Podemos dividir los objetivos en tres grupos fundamentales, teniendo en cuenta que:
a) Entendemos por distancia focal, la distancia que hay entre la primera lente óptica del objetivo y el plano
focal.
b) Cuando hablamos de luminosidad del objetivo, nos referimos a la capacidad que tiene para dejar pasar
durante el tiempo que sea necesario, una cantidad de luz mayor o menor; entendiendo por objetivo
luminoso aquel que permite el paso de una gran cantidad de luz a la película, es decir, que permite trabajar
con un diafragma de gran diámetro de apertura.
Objetivo Normal
El objetivo que consideramos normal para cada tipo de cámara determinado, es aquel
cuya distancia focal corresponde a la diagonal del fotograma que se utiliza. La película
que usamos en las cámaras réflex monoculares de 35 mm. es la de paso universal o de
formato 135, cuyo fotograma mide 24 x 36 cm., siendo su diagonal 50 mm.
aproximadamente. Por tanto, el objetivo normal para estas cámaras será el de 50 mm.
El objetivo normal para película de 6 x 4,5 es el de 75 mm., para el de 6 x 6 es el de 80
mm., para el de 6 x 9 es el de 90 mm. etc.
El objetivo normal, es el de menor complejidad técnica, puesto que el ángulo de visión
que nos proporciona es el más semejante al del propio ojo humano, tanto por las dimensiones del objeto que vemos a
través del mismo, como por las proporciones que mantiene entre los distintos objetos a fotografiar. Es decir, si
fotografiamos una persona a 2 metros de un edificio, con un objetivo de 50 mm., con una cámara de paso universal, el
resultado fotográfico permitirá adivinar a un observador la distancia entre el sujeto y el edificio, aún cuando no la
conozca.
Esta poca complejidad técnica, permite que este sea el objetivo más luminoso.
El Objetivo Gran Angular
Entendemos por Gran Angular, aquel objetivo cuya distancia focal sea inferior a 50 mm.
Entendiendo por Angular mínimo para poder apreciar sus efectos el de 35 mm., y por
máximo los Angulares extremos, como el Ojo de pez (con distancias focales entre 6 y 18
mm.).
Estos objetivos alteran la perspectiva y la imagen de la siguiente forma:
1º Alejamiento de los distintos planos de la imagen entre sí. En el mismo
ejemplo del hombre y el edificio, con éste el observador creería que la
distancia es mayor.
2º Distorsión del tamaño de los distintos planos de la imagen: Aquellos situados en un primer plano de la
imagen nos aparecerán mayores de lo que son en realidad, mientras que los planos posteriores se
empequeñecen exagerada y progresivamente a medida que se alejan del primer plano.
3º Mayor ángulo de visión que el objetivo normal: Así como el objetivo normal nos da un ángulo de visión
comparable al del ojo humano, el gran angular nos aumenta este ángulo considerablemente,
permitiéndonos realizar fotografías de grupos numerosos en espacios pequeños (además de otras
posibilidades de ésta característica). dado dicho mayor ángulo de cobertura visual, se produce una ligera
curvatura de los extremos de la imagen hacia el centro de la misma.
4º Mayor profundidad de campo: Los objetivos gran angular tienen una profundidad de campo superior a los
normales; De hecho, son los que nos dan mayor profundidad de campo.
El Objetivo Teleobjetivo
Son aquellos cuya distancia focal es superior a 50 mm. Dentro de éstos podemos
diferenciar dos grupos:
Medio-Tele: De 50 a 200 mm. aproximadamente.
Super-Tele: De más de 200 mm. Precisan del uso del trípode o monopode. Son de uso
casi exclusivo profesional (naturaleza, deporte, «paparazzi»...). No son nada cómodos de
usar.
Las características principales de los Teleobjetivos son las siguientes:
1º Acercamiento de los distintos planos de la imagen entre sí. Así como el
angular los alejaba, este los acerca. Con lo cual, y recurriendo de nuevo al
mismo ejemplo, nos daría la impresión de que el sujeto está mucho más cerca
del edificio de lo que está en realidad. Este efecto es visible incluso en los
medio-teles más cortos.
2º Acercamiento de planos lejanos a la cámara: Los teleobjetivos parten de
planos semejantes a los telescopios, lo que nos permite acercar a un primer
plano de la imagen sujetos u objetos alejados de la cámara en dimensiones
mayores a las que apreciamos con el ojo.
3º Menor ángulo de visión que con el objetivo normal: El campo de visión es
inferior al del objetivo normal, y mucho menor al de los angulares,
precisamente debido al efecto de acercamiento comentado anteriormente.
4º Menor profundidad de campo.
Como hemos podido observar, las características de los angulares y los teleobjetivos son completamente antagónicas,
lo que hace imprescindible la presencia de ambos en el equipo básico de un fotógrafo.
Objetivos Zoom
Hasta ahora nos hemos referido a distancias focales fijas, pero existen otro tipo de objetivos
denominados Zoom, que se definen como Objetivos de focal variable.
Los más recomendables son los que oscilan entre un angular de 28 a 35 mm. y un tele corto de
70 a 105 mm., y aquellos con una focal entre 70 y 210 mm. Con estos dos tendremos una
cobertura focal más que suficiente para cualquier trabajo aficionado o profesional (excepto
especialidades muy concretas).
Hay Zooms muy exagerados, de 28 a 300 mm. aproximadamente, que no son nada
convenientes, puesto que las distancias mínima y máxima reales no corresponden a las
señaladas por el fabricante, y por otro lado, su complejidad técnica es tan grande, que son
poco luminosos y con muchos defectos ópticos, como falta de nitidez, deformaciones en la
imagen, traducción incorrecta de los colores etc.
Estos objetivos son siempre menos luminosos que los de focal fija, pero su facilidad de manejo,
transporte y ahorro los hace muy recomendables.
EL DIAFRAGMA Y EL OBTURADOR
Las funciones técnicas de la cámara son dos: Controlar
la formación de la imagen (enfoque), y suministrar al
fotograma la cantidad de luz necesaria para que se
impresione o registre dicha luz. Atendiendo a la
información dada por el fotómetro, los controles
esenciales para esta última función son el Diafragma y
el Obturador.
El Obturador
Es el mecanismo que abre y cierra el paso de la luz
hacia la película. Cuando está cerrado la película
permanece en total oscuridad, y cuando lo abrimos se
produce la ‘’exposición’’ de la misma.
En los inicios de la fotografía, el obturador era la tapa
del objetivo, dada la larga duración de los tiempos de
exposición. Actualmente, es un mecanismo de
precisión, de metal o tela, en forma de dos cortinillas,
situado en el plano focal, y que permite elegir entre una
gran gama de tiempos de exposición.
En el caso de las cámaras réflex, lo denominamos
Obturador de Cortinillas o de Plano Focal, y está
integrado en el cuerpo de la cámara. Se acciona
mediante el aro de velocidades situado en la parte externa de la cámara, aunque en algunas puede estar en el mismo
objetivo.
Tiempos de exposición equivale a decir Velocidades de Obturación. Las velocidades de obturación de todas las cámaras
son fracciones de segundo elegidas de forma que cada una de ellas proporciona un tiempo de exposición que dobla el
de la velocidad que la antecede, y que es el doble de la velocidad que la sigue. La gama de velocidades suele ser:
1/1.000 de segundo, 1/500, 1/250, 1/ 125, 1/60, 1/30, 1/15, 1/8, 1/4, 1/2, 1, y tiempos superiores accesibles en la posi-
ción «B» (en la que el obturador permanece abierto tanto tiempo como estemos presionando el obturador). Los tiempos
suelen venir expresados en al cámara sin el numerador, es decir, 1.000, 500, 250, etc. Con todo ello tenemos, por
ejemplo, que una velocidad de 60 proporciona un tiempo de exposición que es el doble de largo que 125, la mitad de 30,
cuatro veces superior a 250 y cuatro veces inferior que 15. Consideramos 30 como la velocidad más lenta a la que
podemos trabajar a pulso, puesto que a velocidades inferiores la imagen resultaría movida, y por lo tanto se hace
necesario el uso de trípode.
El Diafragma
Nos permite regular el diámetro de haz de luz que pasa por el objetivo hacia la película.
Los primeros diafragmas eran discos metálicos con un orificio en el centro que el fotógrafo colocaba en la parte frontal
del objetivo. Actualmente, es un mecanismo de abertura variable que va alojado dentro del objetivo. Está compuesto por
laminillas metálicas, que dependiendo de la posición seleccionada, estrechan más o menos la «abertura del diafragma»
mediante el «anillo selector».
En la escala de aberturas, cada una de ellas está identificada con un número «f». Aunque la escala de aberturas suele
variar de un objetivo a otro, suele ser la siguiente: 1, 1’4, 2, 2’8, 4, 5’6, 8, 11, 16, 22, 32 ....Estos números son el
resultado de dividir la distancia focal por el diámetro de la abertura en cuestión.
Por lo tanto, cuanto mayor es el número «f», menor es el orificio o abertura del diafragma, y por el contrario cuanto
menor es el número, mayor es la abertura.
Cada uno de los pasos de diafragma, trasmite una cantidad de luz que es la mitad de la anterior y el doble de la que la
sigue. Es decir, f11 deja pasar la mitad de luz que f8, y el doble que f16, estableciéndose exactamente la misma
proporción en todos los pasos del diafragma.
Llegados a éste punto, debemos tener en cuenta un concepto fundamental en fotografía, la Profundidad de campo.
La Profundidad de Campo
Es la distancia por detrás y por delante que nos quedará enfocada además, y desde el objeto sobre el que
enfocábamos. Es decir, cuando nos referimos a una imagen fotográfica diciendo que tiene mucha Profundidad de
campo, estamos diciendo que además del objeto enfocado hay un gran espacio por detrás y por delante del mismo que
aparece enfocado. Por el contrario al hablar de poca, habrá poco o ningún espacio enfocado. La Profundidad de campo
varía fundamentalmente por tres factores decisivos:
1º. La Distancia de enfoque: La profundidad de campo es tanto más estrecha cuanto menor es la distancia de
enfoque. Es decir, la posibilidad de enfocar nítidamente una escena de cierta profundidad será tanto mayor
cuanto más lejos estemos de ella, y por el contrario, el emborronamiento de los distintos planos es tanto mayor
cuanto más cerca estamos de la escena fotográfica.
2º. La Longitud focal del objetivo: La profundidad de campo será tanto mayor cuanto menor sea la longitud focal
del objetivo, con lo que, en cualquier formato, un angular tendrá siempre más profundidad de campo que uno
normal, y mucha más que un teleobjetivo, por cada distancia de enfoque y apertura.
En algunos objetivos puede leerse en una escala numérica situada junto al anillo de números «f», un intervalo
alrededor de la distancia de enfoque seleccionada. Para cualquier posición del anillo, esas marcas están
alineadas con determinadas distancias de la escala, y nos indican que «todo lo que se encuentre comprendido
entre esos dos valores aparecerá enfocado».
3º. La Abertura del Diafragma: La profundidad de campo será tanto mayor cuanto menor sea la abertura del
diafragma. Proporcionándonos el máximo de profundidad de campo la abertura mínima (el número mayor), y el
mínimo la abertura máxima (el número menor).
4º. Los valores de exposición: Los dos elementos con los que regularemos la exposición de la película son el
diafragma y al velocidad, teniendo en cuenta las características de cada uno de ellos, vemos que si por un lado
ampliamos la variable de la velocidad y disminuimos otra en el diafragma, el nivel de exposición no habrá
cambiado.
Velocidades: 1, 2, 4, 8, 15, 30, 60, 125, 250, 500, 1000, 2000...
Diafragmas: 32, 22, 16, 11, 8, 5’6, 4, 2’8, 2...
Con cada una de éstas combinaciones el nivel de exposición es el mismo, por lo que la elección de una u otra opción
dependerá de la profundidad de campo que deseemos obtener, o bien del grado de congelación del movimiento que
queramos.
Por lo tanto, el carácter final de toda fotografía será el resultante de la combinación de diafragma y velocidad. Teniendo
en cuenta siempre la distancia focal del objetivo y la distancia de enfoque.
La Distancia Hiperfocal
Es la distancia más allá de la cual todos los objetos tienen una nitidez aceptable. Por ejemplo, si un objetivo de 35 mm.
se ajusta a f/11 y se enfoca a infinito, todos los objetos a partir de 3,3 metros de distancia hasta el infinito aparecerán
enfocados. En estas condiciones la Distancia Hiperfocal será de 3,3. Si ese objeto es enfocado de nuevo a la distancia
hiperfocal, es decir, a 3,3 metros, los objetos situados desde la mitad de esa distancia (1’63 m.) hasta el infinito
aparecerán nítidos. Esto da la máxima profundidad de campo posible con esta abertura.
El Movimiento
Gracias al obturador, podremos conseguir imágenes realmente espectaculares, como son imágenes movidas,
congeladas completa o parcialmente etc. Todo dependerá de la velocidad de obturación que usemos. Por ejemplo, un
chico en bicicleta que pase perpendicularmente a nosotros, a una velocidad de 15 saldría completamente movido, a una
velocidad de 60 la figura del chico saldría completamente congelada pero los radios de las ruedas movidos, y a 500,
toda la imagen saldría completamente congelada.
Pero todo esto es relativo, puesto que debemos tener en cuenta la distancia a la que estamos del sujeto. Por ejemplo,
un avión se desplaza a unos 1.000 Km./hora, y sin embargo nos da la sensación de que va muy despacio, debido a la
gran distancia que hay entre nosotros y él, y sin embargo por el contrario, un niño corriendo, que difícilmente pase de los
7 Km./hora, pasando a una distancia de 2 metros de nosotros, nos resultará muy difícil de fotografiar.
Otra imagen movida que se considera creativa es el Barrido, que consiste en seguir con la cámara (y esta con el
obturador abierto), un objeto en movimiento. Con esto se consigue una imagen con el sujeto congelado parcialmente, y
un fondo totalmente movido, lo cual nos da una enorme sensación de velocidad.
Otro aspecto a tener en cuenta son los puntos muertos del movimiento, por ejemplo, si fotografiamos un niño en un
columpio, el punto muerto será el momento justo en el que el columpio deja de subir para comenzar a descender.
Ahora ya sabemos lo que podemos conseguir jugando con las velocidades de obturación, pero nos falta saber porqué
sucede esto.
La imagen fotográfica se debe a la proyección de luz de los objetos hacia una película emulsionada. Si un objeto está en
movimiento, esta proyección de luz vendrá de diferentes puntos, sin llegar a impresionar suficientemente la película, con
lo que obtendremos una imagen repetida de un objeto, sin llegar a verla nítidamente.
La Velocidad del Flash
Cuando queramos hacer una fotografía con flash, habremos de tener en cuenta la velocidad de obturación que
usaremos. En las cámaras réflex, el fabricante recomienda siempre una determinada velocidad, que dependiendo de la
marca oscilará entre los 30, 60 o 125. Siempre podemos usar una velocidad inferior a las mencionadas, pero nunca
superior, ya que el destello del flash se ha de producir justo en el momento en que las cortinillas estén abiertas, de lo
contrario la fotografía quedaría cortada, bien por un extremo, por arriba o por abajo, dependiendo de como sea el
obturador.

LOS ACCESORIOS DE TOMA


Trípode
Es un soporte de tres patas utilizado para sostener las cámaras. Proporciona un medio robusto y portátil para mantener
firme la cámara durante la exposición. Se usa cuando hemos de hacer una fotografía con una velocidad de exposición
de 1/30 segundos o inferior , ya que de no utilizarlo, nos arriesgaríamos a obtener una imagen movida. Un trípode debe
ser robusto, pero no por ello ha de ser grande ni aparatoso, por lo tanto, antes de comprarlo hemos de probarlo
meticulosamente.
Los Filtros
• Skylight: Su única función es la de proteger la primera lente del objetivo de posibles arañazos y roturas.
• Polarizador: Es el encargado de polarizar la luz que recibimos, por tanto reducimos e incluso hacemos
desaparecer los reflejos en vidrios y cristales. Cuando lo usamos en color, produce una saturación de los
tonos.
• Filtros de Colores para B/N: En película de B/N se usan para conseguir efectos especiales, es decir, para
crear contrastes entre diferentes gamas de grises. Usando estos filtros, se aclara todo lo que sea del
mismo color que el filtro utilizado, por ejemplo, con un filtro amarillo, todo lo que sea o contenga el amarillo
se aclara, y todo lo que sea o contenga azul se oscurecerá. Esto pasa con todos los filtros de un solo color.
• Filtro Ultravioleta UV: Tiene como tarea la de no dejar pasar los rayos ultra-violetas, que son invisibles
para nuestros ojos pero no para la película. Es recomendable su uso en lugares como en la playa o en la
montaña, puesto que en la ciudad estos rayos tienen muchas dificultades para llegar hasta nosotros.
La Bolsa
La bolsa en la que transportamos el equipo ha de tener ciertas cualidades, algunas de ellas muy importantes, como por
ejemplo que sea fácil acceder a todos los elementos, que sea cómoda de llevar durante mucho tiempo, y por supuesto
es imprescindible que sea muy discreta, a fin de que los amigos de lo ajeno no sepan lo que contiene.
LA COMPOSICIÓN ARTÍSTICA
El resultado de una fotografía, el propio motivo de su existencia, depende de la capacidad técnica del fotógrafo; pero el
efecto que produce en el espectador depende casi por completo del modo en que ha sido compuesta la imagen.
La composición influye directamente en la inmediatabilidad de captación de la fotografía. Una fuga de columnas o un
motivo geométrico llevan la vista del espectador al centro de interés, favoreciendo así la inmediata comprensión de la
imagen.
La misión de la composición es: Crear los ritmos o juegos de masas que valoricen el tema hasta el grado máximo.
La fotografía siempre debe decir algo, debe ser comprensible sin comentarios. Para llevar a esto se precisa de una
habilidad particular, porque casi es forzoso aislar al sujeto o situarlo en un ambiente sin que el fondo lo esconda o
empequeñezca.
Es imprescindible elegir un centro de atención, y que este lo sea claramente para el espectador.
La forma más elemental de hacer esto sería eliminando todo aquello que no sea el centro de atención, como por
ejemplo:
• Iluminación: Iluminar el centro de atención y dejar el resto en penumbra.
• Desenfoque: Enfocar el centro de atención y desenfocar el resto total o parcialmente.
• Encuadre: Encuadrar el centro de atención y dejar fuera el resto.

Iluminación Desenfoque

Pero esto no es siempre posible ni recomendable, en muchas


ocasiones es necesario colocar el centro de atención en un
contexto determinado, para lo cual utilizaremos otros métodos: Por
contraste, por composición...

Encuadre
1º Por contraste:
• De tamaño: Realizando una imagen en la que el centro de atención sea mucho más grande que el resto de
objetos fotografiados.
• De posición: Una serie de objetos alineados y el centro de atención quebrando la monotonía.
• De carácter: Un grupo de ancianos y un viejo entre ellos.
• De color: Un color dominante y otro completamente diferente.

2º Por Composición:
Conseguir mediante técnicas compositivas basadas en aspectos psicológicos y culturales, que el espectador de una
forma inconsciente reconozca el centro de atención como tal.
Existen varios tipos de composición, los cuales están agrupados en dos grandes categorías:
• La Composición Simétrica: La simetría en general, es un efecto poco atractivo que tiende a transformar en tri-
viales temas generalmente interesantes. Pero como en todo, su aplicación inteligente da efectos estupendos.
Se da valor a formas geométricas que con una realización más dinámica quedarían en un segundo plano. Este
tipo de composición se presta pues a las imágenes en que cada objeto ocupa un puesto lineal y geométrico.
• La Composición Asimétrica: En este tipo de composición, una línea imaginaria divida la imagen en dos
partes. Ambas son distintas, y una de ellas contiene el centro de interés. Con esta composición se obtienen
imágenes llenas de movimiento.
Es el tipo más utilizado, y el que requiere una mayor preparación por parte del fotógrafo, con el objeto de situar
las líneas fuertes y las masas para su mejor incorporación en cualquier imagen fotográfica.
Las líneas dominantes o fuertes, deben centrar la atención, no desviarla. Se puede hallar una línea en casi
cualquier cosa, la cuestión estriba en elegir un ángulo correcto para que la línea influya en la fotografía. Incluso
sirve como línea fuerte la dirección de los objetos, o la de una mirada.
La Regla de Compensación
Imaginemos el visor de nuestra cámara dividido en tres partes iguales, tanto a lo ancho como a lo largo, de forma que la
imagen quede dividida en 9 rectángulos iguales. Basta con evitar colocar al sujeto principal en el rectángulo central, para
crear así una imagen asimétrica. Si además de esto disponemos los elementos que constituyen las líneas compositivas
«fuertes» en una de las verticales y en una de las horizontales en línea con el sujeto, tendremos una composición
elemental pero correcta.
Es importante también no colocar nunca el horizonte en el centro, sino en una de las dos líneas que dividen el
rectángulo horizontalmente.
Tan importante como la composición de las líneas fuertes es el Peso Compositivo de las Masas:
Como en física, también en fotografía las masa tienen un peso, que viene dado por el volumen, y en el que influyen
tanto el color como el tono de la masa. El problema de las masas es aún más delicado, porque con frecuencia basta con
mover ligeramente cierto núcleo para alterar el equilibrio de toda la fotografía. Una ley física explica que para mantener
en equilibrio dos cuerpos en un eje móvil fijado por el centro, no es necesario que estos tengan la misma masa. Es
suficiente con que el de menor masa esté más alejado del punto de apoyo que el de mayor masa.
Para mantener el equilibrio de la imagen es preciso que las masa pequeñas tiendan hacia el margen, y las masas
grandes se aproximen al centro. No importa que las masas mayor o menor estén en primer plano, ya que esto no influye
en el equilibrio. Solo influye en la importancia que las masa tienen para la vista del espectador, teniendo en cuenta que
para el ojo humano tienen mayor peso las masas cercanas al margen derecho.
Una Nueva Posibilidad: La Composición en Diagonal
Representa una vía intermedia entre la composición simétrica y la asimétrica. Se trata de un modo muy dinámico y muy
rápido de construir las imágenes, en el cual el desarrollo de las líneas fuertes o el conjunto de las masas está dispuesto
o tiende a disponerse en diagonal sobre el rectángulo del visor de la cámara. Es un tipo de composición muy indicada
para imágenes en perspectiva.
En general, las composiciones en diagonal resultan más inmediatas, dado que conducen con rapidez la mirada del
espectador hacia el centro de interés, el cual debe encontrarse en posición asimétrica para compensar la simetría en
diagonal.
Antes de extendernos más, debemos hacer hincapié en que todas las reglas enunciadas no son más que indicaciones
generales.
Cada tema requiere un minucioso estudio particular. Con frecuencia ocurre que sus características estéticas son tales
que necesiten aplicaciones o modificaciones especiales de las reglas descritas.
A veces podemos incluso ir contra la regla y de este modo crear espléndidas fotografías. Más para conseguirlo es
necesario conocer a fondo las reglas, tan a fondo que incluso nos atrevemos a quebrantarlas en casos muy especiales,
ya que por lo general, lo que lleva a la perfección es el respeto a estas normas fundamentales.
Como antes comentamos, las reglas que hemos visto son generales, aunque no por ello las composiciones han de ser
en forma de «L», ni las masas han de compensarse siempre, ser simétricas o diagonales... Todas y cada una de estas
reglas se confunden y se complementan de toda imagen bien compuesta.
Lo importante en fotografía, es transformar en instinto todas estas normas y reglas que los críticos, analistas y artistas
preocupados por el porqué de las cosas dictan después de ver la obra de los grandes artistas.
En definitiva, nunca se ha hecho una obra de arte a partir de unas normas. Lo que sucede es que estas normas
aparecen posteriormente, tras contemplar, gozar y estudiar la obra genial. De lo que se deduce que debemos
impregnarnos de normas y reglas, pero nunca dejarnos condicionar por ellas.
Podríamos decir, al menos por lo que a fotografía se requiere, que las reglas están hechas para ser transgredidas. Es
decir, que el máximo grado de conocimiento de las reglas se da en el momento en que somos capaces de prescindir de
ellas sin perdernos en la incertidumbre creativa.
Como última recomendación, diremos que aquel que está iniciándose en la fotografía debería comenzar realizando
composiciones «perfectas» según las reglas. Con el paso del tiempo, la práctica y la experiencia, encontrará su propia
norma creativa y compositiva.
Casi tan necesario como una buena composición, es un buen punto de vista, puesto que dependiendo de la altura a la
que hagamos la fotografía, obtendremos diferentes sensaciones. Si el punto de vista es alto, el objeto fotografiado se
empequeñece, si es bajo se engrandece y si es paralelo causa sensación de realidad.
Tipos de Composición en líneas generales
• Simétrica: Es aquella en la que si una línea imaginaria divide la imagen en dos, ambas partes coinciden
perfectamente.
• Simétrica Incompleta: Es aquella composición simétrica en la que un detalle rompe con la simetría. Existen
varios tipos:
a) Concéntrica: Es aquella cuyas líneas fuertes encuadran el punto de atención dirigiendo la mirada del
espectador hacia él.
b) Radial: Es aquella cuyas líneas fuertes están todas en dirección hacia el punto de atención,
concentrando en el mismo todo el peso de la imagen.
c) Sinuosa: Es aquella en que las líneas fuertes se dirigen en forma de zig-zag hacia el punto de
atención, produciendo así una gran sensación de profundidad.
d) En «L»: Las líneas fuertes de la fotografía forman una imagen en «L», produciendo así una fuerte
sensación de equilibrio.
e) Diagonal: Las líneas fuertes son el propio punto de atención, y nos llevan siempre hacia un punto en
el infinito en el que convergen en línea recta, produciendo así sensación de movimiento y dinamismo.
f) Horizontal: Las líneas fuertes reposan horizontalmente en la imagen, produciendo así sensación de
sosiego, continuidad y amplitud.
g) Vertical: Las líneas fuertes parten verticalmente la imagen creando sensación de limitación, estatismo
y repetición.
Una característica fundamental de la fotografía es la imagen bidimensional. Puesto que nosotros vemos en tres
dimensiones, esta carencia debe ser tenida en consideración para corregirla mediante técnicas compositivas como
pueden ser composiciones sinuosas, diferencias de tamaño en objetos conocidos, líneas de fuga, etc.
LA ILUMINACIÓN BÁSICA
La cámara se sitúa delante del objeto a fotografiar, y a la posición de la luz nos referimos dependiendo del efecto que
produzca desde la cámara.
Posiciones de la Luz Principal:
a) Frontal: Elimina toda sombra sobre el propio objeto. No se utiliza excepto en casos en que se trabajen
efectos especiales. No está indicada para el retrato.
b) Frontal-Lateral: Es la más indicada para trabajar como luz principal. Crea volúmenes sobre el propio
objeto permitiéndonos apreciar la figura por completo.
c) Lateral: Es una luz contrastada si no se utilizan luces complementarias. Crea las máximas sombras sobre
el objeto.
d) Semi-Contraluz: Nos ilumina por transparencia parte del objeto a fotografiar.
e) Contraluz: Nos ilumina por transparencia la totalidad del objeto a fotografiar.
f) Cenital: Desde un ángulo superior al objeto a fotografiar. Se usa como luz especial exclusivamente.
g) Cenital Invertida: Se denomina «luz de terror», ya que provoca efectos fantasmagóricos sobre el objeto.
Se usa exclusivamente como luz de efecto.
Tipos de Luz:
a) Luz Suave: Por paraguas, difusor o rebote. Crea sombras sin una línea definida, es decir, el paso de luz a
sombra es gradual. En la naturaleza, es la luz que encontramos los días nublados, y en general, toda
aquella luz que no viene de rayos solares directos sobre el objeto.
b) Luz Dura: También llamada Luz Directa. Crea sombras perfectamente definidas, el paso de luz a sombra
es brusco. En la naturaleza, es la luz que incide sobre el objeto directamente de los rayos solares.
RECAPITULACIÓN y CONSEJOS PARA UNAS BUENAS FOTOGRAFÍAS
La cámara tiene un objetivo en un extremo que enfoca un
rayo de luz desde el sujeto a la película. En el otro extremo
existe un compartimento para la película. Una abertura
variable o diafragma, limita el tamaño del rayo de luz que
penetra (apertura de diafragma). Un obturador controla el
tiempo que la película está expuesta a la luz (tiempo de
exposición). Se observa la escena a través de un visor. Para
elegir el momento de la exposición posee un disparador.

El objetivo enfoca un rayo de luz desde el sujeto a la


película. Consta de una o varias lentes de forma convexa que
proyecta los rayos de luz que lo atraviesan en un punto llamado
foco. Cuando enfocamos con la cámara en realidad alejamos o
acercamos el objetivo para obtener un foco nítido.
La distancia entre el foco y el diafragma del objetivo es lo que llamamos la distancia focal. Modificando la distancia focal
se consigue enfocar al sujeto más de cerca o más lejos. Con una distancia focal de 50 mm se consigue una visión lo
más parecida al ojo humano.
Todo objetivo tiene una distancia mínima respecto al sujeto. Si tratamos de hacer una fotografía por debajo de dicha
distancia el objetivo no podrá enfocar.
Tipos de objetivos.
• Normal: los objetivos normales tienen
una distancia focal de 50 mm para
darle una perspectiva similar a la del
ojo humano. Se recomiendan para la fotografía de propósitos generales y son ideales para aprender los
principios básicos de la fotografía.
• Gran angular: los objetivos de gran angular (distancias focales de menos de 50 mm) capturan tomas más
anchas que la normal. Le dan una mayor sensación de profundidad y son útiles para fotografiar paisajes o
grupos de personas.
• Teleobjetivo: los teleobjetivos tienen distancias focales de más de 50 mm y permiten hacer fotografías a gran
distancia. Son también ideales para hacer retratos y primeros planos.
• Macro: sirven para obtener un acercamiento máximo. La distancia mínima del objetivo al sujeto es muy inferior
al resto de tipos de objetivo. También son ideales para fotografiar insectos y flores.
• Zoom: este tipo de objetivo permite, a diferencia del resto, variar la distancia focal sin cambiar el objetivo. Con
esta característica se encuentran los zooms gran angular y teleobjetivos. Son los más versátiles y la opción
más económica para tener un rango de distancias focales. Por el contrario, este tipo de objetivo ofrece menor
luminosidad que los demás.
El compartimento de la película
El compartimento de la película es el hueco donde se aloja la película. En él no puede entrar la luz más que en el
momento de la exposición, y a través del obturador. Si no es así la película se velará y se perderán las fotos.
Por cada exposición el carrete va avanzando y enrollándose en un cilindro. Cuando se acabe la película se volverá a
enrollar dentro del carrete, y así estar protegida de la luz al sacarla de
la cámara.
A la hora de manipular la película dentro de compartimento se debe
mantener fuera del polvo y no presionar el obturador, que pueden ser
unas delicadas cortinillas como en la imagen.
El diafragma.
El diafragma es una parte del objetivo que limita el rayo de luz que
penetra. Funciona como el iris del ojo humano, abriéndose o cerrándose para permitir que entre más o menos luz.
Lo abierto que está el objetivo es lo que se llama apertura de
diafragma.

En las cámaras manuales controlamos el diafragma mediante


una rueda del objetivo y en las cámaras automáticas se puede
regular mediante botones.
Los objetivos tienen una apertura máxima, por ello, si son
objetivos con distancia focal fija la apertura máxima es fija,
para zooms la apertura máxima va cambiando según varía la
distancia focal.
Para conseguir el equilibrio de luz en cada exposición se combina la apertura de diafragma con el tiempo de exposición.
Es decir, que si se aumenta la apertura de diafragma (más luminosidad) hay que reducir el tiempo de exposición (tiempo
que la película está expuesta a la luz) o si no la fotografía sería muy clara (sobreexpuesta). Igualmente, para captar la
luz que hay en la escena, si se reduce la apertura de diafragma (menos luminosidad) hay que alargar la exposición, sino
quedaría una imagen oscura (subexpuesta).
La apertura de diafragma se mide en números f. El menor de los números indica la apertura máxima. La relación entre
los números f es que cada vez que se pasa de un número a uno menor, la luminosidad se reduce a la mitad, de modo
que f11, por ejemplo, tiene el doble de luminosidad que f16 y la mitad que f8.
La escala de números f básica es la siguiente: f1, f1.4, f2, f2. 8, f4, f5.6, f8, f11, f16, f22, f32, f45...

El obturador
El obturador limita el tiempo que el rayo de luz penetra en la cámara y expone la
película. Mediante el obturador se controla el tiempo necesario para que la película se
exponga el tiempo justo a la luz.
El obturador es un mecanismo muy preciso y rápido que permite limitar la exposición
a tiempos muy pequeños.
Habitualmente los tiempos de exposición varían
desde segundos (para condiciones de luz
muy malas) a milésimas de segundo (para
fotografías muy rápidas). Los tiempos más usuales,
en segundos, son:
...4, 2, 1, 1/2, 1/4, 1/8, 1/15, 1/30, 1/60, 1/125,
1/250, 1/500, 1/1000, 1/2000...
En las cámaras manuales el tiempo de exposición se regula mediante una rueda
similar a la de la imagen y en las cámaras automáticas se regula mediante botones.
Por ejemplo, la velocidad 125 corresponde a 1/125 segundos.
Tanto en las cámaras automáticas como en las manuales se puede elegir una apertura determinada y obtener un tiempo
de exposición estimado, y viceversa.
El visor
El visor es un dispositivo a través del cual se observa al sujeto que será fotografiado, haciendo posible componer la
escena y enfocar. Principalmente hay dos tipos de visores:
• Visor directo: se llama así porque el dispositivo visor es independiente del objetivo. El sujeto se ve a través de
un sistema óptico montado en un tubo en el que aparece encuadrado el área de la escena cubierta por el
objetivo. Este tipo de objetivos es el que suelen usar las cámaras compactas, en las que no es necesario
enfocar. Este tipo de cámaras montan un objetivo fijo que proporciona una imagen nítida en un rango de 2 a
infinitos metros.
• Visor reflex: la imagen proyectada en la película por el objetivo esta boca abajo e invertida lateralmente. El
visor reflex utiliza un espejo para volverla boca arriba y un pentaprisma (bloque de cristal de cinco caras, tres
de ellas plateadas), para corregir la inversión lateral, por tanto el fotógrafo contempla la escena en su posición
real.
Este es el tipo de visor que llevan las cámaras SLR, también llamadas reflex por esta razón.
El visor directo tiene un problema llamado paralelaje, acentuado en las fotografías en las que el sujeto está cerca de la
cámara. Tal como muestra la imagen, este problema consiste en que la imagen visualizada a través del visor no coincide
con la imagen enfocada por el objetivo. Esta es la razón por la que se han creado otros sistemas como el visor reflex.
Tipos de películas
1. Según color: el color en la fotografía no depende de la cámara sino de la película que puede ser en color o en
blanco y negro.
2. Según formato:
• Papel: película para ser revelada en papel. Los colores aparecen invertidos en la película.
• Diapositiva: La propia película se monta en soportes de plástico para ser proyectada. Los colores
aparecen en positivo en la película.
3. Número de exposiciones: los hay de 12, 24, 36 exposiciones. Dependiendo de la ocasión puede interesar
más utilizar uno u otro. Habitualmente resultan más económicas, por exposición, las películas de 36
exposiciones.
4. Sensibilidad: la sensibilidad se mide según el estándar ASA, de ISO (International Standard Organization). A
mayor sensibilidad la película es capaz de captar mayor luminosidad, con lo cual se necesitará menor tiempo
de exposición o apertura de diafragma. A mayor sensibilidad la definición de la película disminuye, siendo el
grano mayor. De esta forma hay que encontrar un punto medio óptimo entre definición y luminosidad.
Según el estándar ASA cuanto menor es el número del tamaño del grano, menor es la sensibilidad, teniendo en
cuenta que hay sensibilidades típicas de 100, 200, 400, 800, 1600 ASA. Una película 200 ASA proporciona el
doble de luminosidad que una película 100 ASA y la mitad que una 400 ASA.
Tipos de cámaras
En el mercado se pueden encontrar multitud de tipos de cámaras fotográficas. Según el tamaño y formato de la película,
tipo de visor, digitales, compactas, manuales, automáticas, etc.. Para los fines que persigue este curso, la cámara más
versátil y completa es la cámara con película de 35mm, reflex (también llamado SLR), ya sea automática o manual.

Bifocal
Compacta Digital y SLR
Mantenimiento del material
Consejos de tratamiento:
• No exponer la cámara a humedad extrema.
• No dejar la cámara en lugares expuestos a mucha temperatura, por ejemplo la guantera de un coche, o al sol
en el campo.
• Guardar la cámara en fundas almohadilladas.
• Llevar la cámara colgada evitará que se caiga al suelo. Nunca la lleves con la correa colgando del cuello,
llévala colgando del hombro. Esta opción es mejor ya que si te caes de frente, lo primero que se golpea es el
objetivo.
• Los objetivos: Guardarlos siempre en lugares secos con sus respectivas tapas. Si no lo hacemos de esta
manera, corremos el riesgo de que sean atacados por hongos. En casos extremos, los hongos terminan
deteriorando los cristales.
• Equipar todos los objetivos con un filtro UV o Skylight y dejárselo permanentemente y que sean de buena
calidad. Estos filtros no interfieren en el color (al contrario) y nos salvan de que toquemos descuidadamente los
cristales.
• En caso de tocar el cristal, limpiar en seco con un trapo que no deje pelusa o con papel óptico, pero tratemos
de evitarlo.
• El polvo lo quitamos con un pincel de pelo de marta y si se limpian con líquido para lentes, no aplicar sobre las
lentes directamente sino sobre un pañuelo suave.
• El cuerpo: Antes de abrir el cuerpo, debemos mover la ruedita bobinadora de película, o en cámaras AF, mirar
por la ventanita si no hay película en su interior. Si llegase a haber película sin rebobinar en el interior
y nosotros abrimos se velarían todas las fotos.
• Limpiar con un pincel de pelo de marta las guías de la película. Estas se encuentran en el compartimiento de la
película.
• NUNCA presiones el obturador con un trapo. Si hay que sacarle el polvo, usar un pincel de pelo de marta
muy suavemente.
• Para limpiar la cosmética de la cámara, podemos usar cualquier lustra muebles.
• Tratar de no tocar el espejo. Cualquier roce puede provocar un rayón en el cromado del mismo, así como
afectar su alineación y movimiento.
• No utilizar nunca aire comprimido para limpiar el interior de la cámara, porque puede dañar piezas sensibles en
el interior.
• No manipular el interior de una cámara, se puede recibir una descarga si se toca un circuito de alta tensión.
• Si vamos a la playa, al regresar de vacaciones debemos llevar la cámara al servicio técnico para que le realice
una limpieza, por mas que la cámara funcione perfectamente. Si no lo hacemos, corremos el riesgo de que la
arena que se haya infiltrado en las partes mecánicas de la cámara terminen haciendo un desastre.
• Si accidentalmente nuestra cámara cae al mar (nunca esta de más este consejo), coloca la cámara así como
está, dentro de una bolsa llena de agua y llévala enseguida al servicio técnico. Si no realizamos esto, al
secarse la salitre, oxidará todas las partes mecánicas.
Sobre el flash:
• Si se usa flash de zapata delicada, apagar el flash antes de sacarlo de la zapata (igual para colocarlo). De otra
manera, corremos el riesgo de quemar los circuitos eléctricos.
• Es recomendable quitarle las pilas cuando no se utilice.
• Al almacenarlo tratar de mantenerlo en un lugar seco y frío.
Las pilas:
• Nunca dejar las pilas puestas en periodos de larga inactividad.
• Nunca almacenar baterías de NiCad vacías. Siempre guardarlas cargadas.
• Utilizar sólo las pilas especificadas en el manual de la cámara.
• No instalar nunca las pilas con las polaridades invertidas.
• No exponer las pilas al fuego o altas temperaturas.
• No mezclar pilas de distintos tipos, marcas o antigüedad.
• Importante: Desechar las pilas de litio en un establecimiento de fotografía, pues no son biodegradables.
• Almacenamiento:
o Instalar las tapas protectoras.
o Guardar en un lugar frío, seco y bien ventilado.
o Oprimir periódicamente el obturador para comprobar que funciona correctamente.
Cómo hacer fotos: Elección de la película
El primer paso al ir a hacer fotos es elegir la película. Si la elección es correcta puede evitarnos muchos quebraderos de
cabeza. En el tema anterior pudimos ver los distintos tipos de película que nos podemos encontrar en el mercado. Los
conceptos que vamos a manejar en este apartado son los de sensibilidad y tamaño de grano. Como se puede apreciar,
al aumentar la sensibilidad disminuye la definición. Hay películas de gran sensibilidad que tienen tamaño de grano
bastante aceptable. Lo que nos va a determinar la sensibilidad que necesitamos serán las condiciones de luminosidad
y el movimiento del sujeto.
Al utilizar una película con el doble de sensibilidad que otra obtenemos el doble de luminosidad, por tanto utilizaremos la
mitad del tiempo de exposición. Igualmente, si utilizamos una película con la mitad de sensibilidad que otra
necesitaremos el doble de tiempo para hacer la misma exposición. Para fotografías al aire libre con bastante luz o para
sujetos estáticos, se puede utilizar una película 100 ASA. Ésta proporciona la máxima definición. También se
recomienda para fotografías nocturnas con tiempos de exposición muy largo.
Para un uso mixto se recomienda una película 200 ASA, que es un punto intermedio entre definición y sensibilidad. Para
condiciones de luz malas, por ejemplo interiores, se recomienda utilizar al menos una película 400 ASA. Hay películas
de mayor sensibilidad, pero no se suelen utilizar habitualmente. También son recomendables para objetivos con poca
luminosidad, zooms y para congelar el movimiento de sujetos muy rápidos.
La composición
Podemos decir que la situación de los objetos en la escena de una fotografía conforman lo que se llama composición.
Componer una fotografía es buscar la mejor vista de una escena, haciéndola llamativa. A continuación se muestran
unos consejos para hacer la composición.
La regla de los 1/3 -2/3.-Un sujeto no tiene porque estar situado en el centro de la escena, pues se podrían dejar partes
de la fotografía vacías. Es recomendable ocupar la mayor parte de la fotografía para obtener mejores resultados.
Dividimos hipotéticamente el marco en tercios tanto vertical como horizontalmente. Trataremos de que las líneas más
importantes de una fotografía se ajusten a esos tercios.

Este tipo de fotografías hay que evitarlas no centrando el horizonte.

Como el cielo no es llamativo le damos importancia al suelo.


Si el cielo es llamativo le quitamos importancia al suelo y se la damos al cielo.

En esta imagen está situado el sujeto en un tercio (verticalmente) y el horizonte en otro (horizontalmente).

En esta imagen los objetos se ajustan a los dos tercios verticales.

En esta imagen se ajusta la catarata a un tercio vertical.

Apunta al cuello. Derivada de la anterior regla. Al hacer retratos es aconsejable hacer coincidir
la línea de los ojos con un tercio del marco. Esto es aproximado a hacer coincidir el cuello del
sujeto con el centro de la fotografía.
Hay que evitar fotografías como las que aparecen a continuación, en las que hay gran cantidad de espacio vacío por
encima del sujeto.
Es típico encontrarse por la calle a un grupo de japoneses que hacen fotos a todos sus familiares pegados a un
monumento y a una distancia de ellos bastante considerable. En estos casos nos encontramos con fotos en las que casi
no se distingue al sujeto. Es bueno saber qué se está fotografiando, y si dos objetos no son compatibles en una misma
fotografía, entonces hacer dos fotografías distintas. Mejor acercarse al sujeto y jugar con el zoom y la perspectiva para
ajustar el fondo.

Este tipo de fotografías hay que evitarlas.

En esta fotografía se pueden observar tanto el fondo como los sujetos de la escena.
Puntos fuertes. Según la división por tercios de una escena, la confluencia de los tercios marcan unos puntos donde se
hacen llamativos los objetos, llamados puntos fuertes. El centro es un punto fuerte. Es recomendable hacer coincidir los
objetos con estos puntos.
Líneas. En algunas fotografías quedan muy marcadas algunas líneas. Éstas deben ser ordenadas, que no se crucen y,
a ser posible, que confluyan en puntos fuertes.

Zoom, perspectiva y distancia


El zoom es un tipo de objetivo que permite acercar o alejar el sujeto que se quiere fotografiar sin tener que acercar o
alejar la cámara. Sin embargo esta no es su única aplicación, pues también modifica la perspectiva de la escena.
La distancia. Como ya se ha dicho el zoom permite acercar o alejar la visión a un objeto, abriendo o cerrando el campo
de visión. Al acercarse se cierra el campo de visión, abriéndose al alejarse. Se modifica la distancia modificando la
distancia focal, de la que se habló en el tema anterior. La visión humana equivale aproximadamente a 50mm.

28mm 50 mm 100 mm 200mm 300 mm


La perspectiva. Al modificar la distancia focal se modifica la
perspectiva. De este modo se puede modificar una proporción
del sujeto respecto al fondo al modificar la distancia respecto a
sujeto y utilizar una distancia focal distinta. El siguiente gráfico
ilustra este concepto, así como las imágenes posteriores.
Es interesante observar cómo según se va utilizando una
distancia focal menor aumenta el campo de visión. En esta
serie de imágenes se ha ido modificando la distancia real al
objeto, desde 4 metros aproximadamente a 0,4 metros, a la vez que se reduce la distancia focal.

300 mm 200 mm 80 mm 50 mm
Recomendaciones. Al aumentar la distancia focal, el objetivo es más sensible a cualquier movimiento. Para evitar fotos
movidas se recomienda utilizar un trípode o un tiempo de exposición bajo. Para facilitar esto último se recomienda el uso
de una película muy sensible, de 400 ú 800 ASA.
El enfoque
El enfoque permite hacer nítido un sujeto. En las cámaras compactas el enfoque es fijo, no hay que enfocar. En las SLR
manuales se enfoca mediante una rueda que hay en el objetivo. En las SLR con autofocus el enfoque se hace
apuntando con el centro al sujeto y pulsando el botón de disparo suavemente. Apretando más se realiza el disparo.
También permiten ser enfocadas manualmente.
Distancia mínima. Cada objetivo tiene una distancia mínima entre el objetivo y el sujeto, por debajo de la cual no es
capaz de enfocar.
Los zooms de largo alcance (p.ej. 70-300) tienen una
distancia mínima mayor, aproximadamente 1,5 metros, que
los objetivos de menor alcance (p .ej. 28-80),
aproximadamente 40 cm.
La distancia mínima puede reducirse para fotografías de cerca
con lentes de acercamiento.
¿Cómo enfocar?. Para evitar sorpresas, se recomienda que antes de hacer una fotografía se tenga claro cuál es el
sujeto que se quiere enfocado, se enfoque éste (apuntando directamente sobre él)
y posteriormente se haga el encuadre de la escena. Realmente, cuando enfocamos un
sujeto lo que hacemos es enfocar una distancia. Si en la imagen se hubiera enfocado al
centro los sujetos habrían salido desenfocados. Primero se enfoca a uno de ellos (pues
están a la misma distancia), después se compone la escena (encuadrando)
y finalmente se dispara.
Con una cámara autofocus se apunta al sujeto, se presiona a la mitad el disparador
para enfocar, se compone la escena manteniendo el botón pulsado y finalmente se presiona completamente para
disparar.
Profundidad de campo
En el tema anterior se explicaba que modificando la apertura de
diafragma se modifica la cantidad de luminosidad que penetra en la
cámara. También hay otro concepto relacionado con la apertura de
diafragma, la profundidad de campo.
La profundidad de Campo es la distancia por delante y por detrás
del sujeto enfocado que aparece nítida. A mayor apertura de
diafragma (número f menor) la profundidad de campo es menor. La
profundidad de campo se acentúa todavía más cuanto mayor es la distancia focal, que se modifica con el zoom.
En la imagen se enfoca la figura del medio, con un número f pequeño las figuras cercanas aparecen desenfocadas,
mientras que con un número f mayor vemos más nítidas las figuras cercanas.
Cómo usarla. La profundidad de campo debe ser pequeña cuando queremos resaltar un sujeto sobre un fondo que no
nos interesa, por ejemplo un retrato o flores.
Debemos utilizar una profundidad de campo grande cuando queremos que no quede ningún objeto desenfocado, por
ejemplo un paisaje.
Esta fotografía se hizo con una profundidad de campo alta, es decir, un número f grande. La apertura de diafragma es
baja.

Esta fotografía se hizo con una profundidad de campo baja, es decir, un número f pequeño. La apertura de diafragma es
alta.

Al fotografiar paisajes con un objeto intermedio usar siempre profundidad de campo alta.

Para resaltar al sujeto en un retrato o primer plano usar profundidad de campo baja. Para acentuarlo aún más utilizar
distancia focal alta, usando el zoom (p. ej. 150 mm).
Tiempo de exposición
En el tema anterior se explicaba cómo el obturador limita el tiempo que el rayo de luz alcanza la película. Este tiempo es
el tiempo de exposición.
La primera imagen tiene un tiempo de exposición bajo, o velocidad alta. La segunda tiene un tiempo de exposición alto,
o velocidad baja.
Congelación del movimiento. A continuación se presenta una tabla con las distintas velocidades a partir de las cuales
un tipo de objeto concreto queda congelado (aproximadamente).
Movimiento
Velocidad Distancia de la Movimiento 45º con
Sujeto perpendicular a la
km/h cámara al sujeto la cámara
cámara

7,5 m 1 / 125 1 / 60
Nadador, barca de remos, persona
3a5 15 m 1 / 60 1 / 30
andando
30 m 1 / 30 1 / 15

7,5 m 1 / 250 1 / 125


Barco navegando, caballo al paso 5 a 15 15 m 1 / 150 1 / 60
30 m 1 / 60 1 / 30

7,5 m 1 / 500 1 / 250


Ciclista, corredor, caballo al trote,
13 a 25 15 m 1 / 250 1 / 125
coches lentos
30 m 1 / 125 1 / 60

7,5 m 1 / 1000 1 / 500


Atletismo, fútbol, carreras de
25 a 50 15 m 1 / 500 1 / 250
caballos, motor, lanchas
30 m 1 / 250 1 / 125

7,5 m 1 / 1250 1 / 1000


Automóviles, motocicletas, trenes más 50 15 m 1 / 1000 1 / 500
30 m 1 / 500 1 / 250

Medición de la luz
Una fotografía debe tener un equilibrio entre la apertura de diafragma y el tiempo de exposición para limitar la
luminosidad que alcanza la película en cantidad (apertura) y tiempo (tiempo de exposición). La cámara calcula esto
gracias a un fotómetro interno, de forma que podemos ajustar un tiempo de exposición fijo y calcular la apertura óptima
o viceversa.
El uso del flash
El flash es un dispositivo que nos permitirá aumentar la luminosidad de una escena. Podemos encontrar flashes
integrados en la cámara o flashes independientes. Aunque los primeros son menos potentes, suelen ser necesarios para
el autoenfoque en situaciones de mucha oscuridad, iluminando al sujeto para poder enfocarlo.
Realizar fotografías por la noche o dentro de algún edificio suele ser el uso más habitual del flash. En este tipo de
situaciones incluso el ojo humano ve al sujeto oscuro, y se hace necesaria una nueva fuente de luz.
Es muy importante tener en cuenta que el flash tiene una distancia máxima, que si se supera deja al sujeto sin
iluminación.
En muchas situaciones queremos hacer una fotografía en un interior en el que
hay luz natural. Sin embargo, hay poca y la fotografía resultaría muy lenta
(tiempo de exposición alto). Es útil apoyar a la luz natural con el flash para
hacer esa fotografía más rápida.
En la imagen hay luz natural suficiente para hacer la fotografía, pero utilizando
el flash se evita tener que usar el trípode para hacer una exposición lenta.

Se utiliza el flash de relleno cuando hay luz suficiente para


hacer la fotografía sin flash. Sin embargo hay zonas del sujeto
muy oscuras y otras muy claras, y de esta forma se resaltan las
oscuras. La zonas claras de la imagen no se ven afectadas por
el flash de relleno. Este tipo de flash es muy útil en fotografías
que tengan una luz intensa por un lado, que deja zonas oscuras
por el otro, como la imagen de la derecha.
Fotos a contraluz. Al fotografiar a un sujeto cuyo fondo sea muy claro corremos el riesgo de que dicho sujeto quede
muy oscuro. Para evitar esto se recomienda hacer la medición de la luz en un punto de dicho sujeto o, para evitar la
sobreexposición del fondo, utilizar el flash para iluminar al sujeto. El fondo permanecerá inalterable.
Fotos nocturnas con flash. Cuando se quiere hacer una fotografía nocturna con un
sujeto intermedio que no tiene iluminación, se puede hacer la fotografía lenta para que
se imprima en la película el fondo y también disparar el flash para que en un instante
concreto se imprima el sujeto en la película.
En la imagen se ha utilizado una exposición de dos segundos, acompañada por el
flash, que se dispara momentáneamente con la finalidad de iluminar a los sujetos. Se
podría pensar que los sujetos deben estar completamente quietos para que no salgan
movidos en la fotografía. Pues bien, es recomendable, pero hay que tener en cuenta
que ellos se imprimirán en la película sólo durante el tiempo de dure el flash.
Recomendaciones. El flash se refleja en los cristales y espejos. Hay que evitar las fotografías con cristales
perpendiculares a la cámara, situándola en ángulo.

El flash tiene un límite de distancia, si se supera no se


ilumina el sujeto. En la imagen del coche no se midió la
distancia para el flash al acercarse con el zoom.

Los ojos de las personas reflejan el flash, si éste es directo, creando un efecto de ojos rojos. Se soluciona apuntando
con el flash hacia arriba.
Errores de fotografía:
Veamos algunos errores fotográficos y sus correspondientes soluciones.
Fotografía Error Solución

Se pueden apreciar en la fotografía Siempre que se pueda hay que evitar


rayos de sol que estropean la imagen. el sol frontal. También hay que acoplar
En esta fotografía el sol estaba casi de el parasol al objetivo para evitar rayos
frente y nos ha deslumbrado. laterales, como el de la fotografía.

Como se explica en la pregunta de la


composición, en los retratos la línea de
Esta imagen no tiene una composición
los ojos del sujeto debe coincidir con
correcta. Como se puede apreciar, el
un tercio de la imagen. Se debería
sujeto no está bien encuadrado, pues
haber pedido al sujeto que se colocase
la línea de los ojos coincide con el
de forma que se pudiera recoger el
centro de la imagen.
fondo y que la composición fuera
correcta.

Se debería haber utilizado una


El sujeto aparece movido velocidad de obturación mayor.

En las fotografías a personas es


interesante que éstas aparezcan
Al sujeto no se le ve la cara ni
naturales y haciendo algo. Es
tampoco lo que está haciendo, que en
importante que se vea la cara del
este caso es cortar jamón.
sujeto, con la expresión típica de lo
que esté haciendo en ese momento.

Aplicando la regla 1/3 -2/3, explicada


en la pregunta de composición, los
horizontes deben estar situados a 1/3
La línea del horizonte está centrada en
del borde de la imagen, ya sea
la imagen.
superior o inferior. En este caso, ya
que el cielo no es llamativo, se debería
dar importancia al suelo.
Fotografía Error Solución

No se ve la cara del sujeto, La solución es hacer la medición en un


simplemente una silueta oscura. La punto del sujeto. Para evitar la
medición de la luz no es correcta sobreexposición del fondo se puede
porque el cielo es muy claro. utilizar flash de relleno.

La composición es incorrecta, pues no Es importante que el sujeto ocupe


se distingue al sujeto. Está demasiado buena parte de la imagen, pudiendo
lejos. distinguirlo.

En este caso el sujeto es el conjunto


La persona aparece centrada y deja coche-persona, debiendo centrarlo
de verse el coche. como tal. La persona quedará situada
en 1/3 de la imagen, resaltándola.

Se debería haber enfocado en un


El coche aparece nítido en el círculo
punto intermedio entre el sujeto y el
blanco, pero el sujeto aparece
intermitente del coche, así como
desenfocado. Se ha utilizado una
ajustar una apertura de diafragma más
profundidad de campo muy reducida
baja y con una profundidad de campo
y se ha enfocado al coche.
mayor.

Se debería haber utilizado una


apertura de diafragma inferior (mayor
En la imagen aparece desenfocada la profundidad de campo) y, en vez de
zona del círculo blanco. La enfocar en el círculo amarillo, enfocar
profundidad de campo es en un punto intermedio. Hay que
muy reducida. recordar que cuando se enfoca un
sujeto en realidad se enfoca una
distancia.
El trípode. El trípode es un accesorio con tres patas (tres puntos de apoyo) que permite mantener la cámara
fotográfica completamente estática. Suelen tener una zapata de acople rápido que se ajusta a la cámara con
una rosca para dejarla permanentemente en ella, y así acoplar la cámara rápidamente al trípode sin tener que
enroscarla. Permite girar la cámara vertical, horizontalmente y moverla en altura.
El trípode es necesario en las siguientes situaciones:
• Con exposiciones largas (a partir de 1/30 segundos aproximadamente).
• Al usar teleobjetivos. Hay que tener en cuenta que un ligero movimiento en la cámara supone un movimiento
muy grande en el sujeto enfocado a gran distancia.
• Con exposiciones múltiples, si se quiere hacer coincidir el fondo.
• Al usar el autodisparo. Así nadie tiene que sujetar la cámara.
• Cuando se quiere hacer fotografías con el mismo encuadre.
Es recomendable que el trípode sea pesado y estable para conseguir que la cámara esté completamente quieta. Si se
prefiere uno ligero, se recomienda utilizar un disparador para no mover la cámara en el momento de apretar el botón del
obturador.

El disparador. El disparador es un accesorio que nos permite efectuar un disparo sin afectar al movimiento de la
cámara cuando utilizamos un trípode.
Los primeros, y los más utilizados constan de un cable más o menos largo, con un botoncito en un extremo y una rosca
en el otro, la cual se insertaba en el pulsador de disparo del obturador. A estos, les siguieron los disparadores
electrónicos por control remoto, que afectaban aún menos al movimiento de la cámara. Éste es el tipo de disparadores
que se utilizan en las cámaras SLR automáticas.
En las cámaras SLR hay un modo de tiempo de exposición llamado BULB. Dicho modo permite mantener el obturador
abierto mientras se esté pulsando el disparador. Éste es el caso de fotografías nocturnas, de tormentas o fuegos
artificiales. En estos casos, y siempre con trípode, es muy recomendable el uso del disparador.
Lentes de acercamiento. Las lentes de acercamiento no modifican la distancia como el zoom. Lo que permite es
disminuir la distancia mínima de un objetivo. Sólo sirven para fotografiar objetos de cerca como flores, insectos, etc. Se
pueden utilizar varias lentes superpuestas, reduciendo aproximadamente a la mitad la distancia mínima por cada lente.
Los retratos
Al fotografiar a personas es muy importante que se les vea bien. Hay formas de resaltar la fisonomía del sujeto jugando
con la luz, el fondo, la perspectiva y la composición.
En el caso de la luz es importante que el sujeto tenga sombras en la cara que resalten sus facciones, si no es así
aparecerá una cara "plana", sin relieve. En este caso, una luz lateral puede ayudar.
En el caso del fondo es recomendable quitarle importancia haciéndolo borroso ya que, de esta forma, se resaltará al
sujeto. Para ello hay que contar con una profundidad de campo pequeña. Hay dos formas de disminuir la profundidad de
campo, aumentar la apertura de diafragma (número f bajo) y aumentar la distancia focal (zoom alto).
Aumentando la distancia focal con el zoom modificamos también la perspectiva acercando el fondo y haciendo la
imagen más plana. De esta forma evitamos deformar la cara del sujeto.
En cuanto a la composición, depende de si se quiere hacer un primer plano o no. En cualquier caso hay que tratar de
que el sujeto ocupe buena parte de la imagen.

En los retratos la cara ocupará casi toda la escena, por eso, es recomendable que se vean al menos los hombros de la
persona.
Aplicamos la regla 1/3 -2/3. La línea de los ojos se situará en 1/3 superior, o lo que es lo mismo, se apuntará al cuello.
Aparte de lo puramente técnico, es importante hacer una fotografía en la que el sujeto se sienta cómodo y adopte una
pose natural. Es mejor coger desprevenido al sujeto o haciendo algo, pues así resultará natural.
Los paisajes
Fotografiar paisajes no entraña demasiada dificultad técnica, más bien creatividad. Técnicamente sólo hay que tener en
cuenta los siguientes aspectos:
• La apertura del diafragma ha de ser pequeña (número f alto) para obtener una profundidad de campo y ver
nítida toda las escena.
• Distancia focal pequeña (zoom bajo) para obtener imágenes panorámicas. De esta forma es más sencillo
enfocar si tenemos objetos intermedios.
• Aplicar la regla 1/3 -2/3 para situar el horizonte en los tercios de la fotografía. Hay casos, por ejemplo con
reflejos en lagos, en los que no se tiene porque utilizar esta regla.
• A veces es interesantes buscar un lugar en alto para observar la escena e introducir elementos cercanos (como
un árbol, una persona observando el paisaje). Si en la escena aparecen edificios o zonas más representativas
es recomendable hacerlas coincidir con los puntos fuertes.
Objetos en movimiento
Dentro de lo estático de una fotografía se puede conseguir sensación de movimiento jugando con el tiempo de
exposición. En general podemos encontrar tres formas de fotografiar un objeto en movimiento, la elección es cuestión de
la creatividad del fotógrafo y de sus necesidades.

La exposición es muy rápida, es decir, el tiempo de exposición es muy reducido, por debajo de 1/500. La cámara está
quieta y cuando pasa el objeto se dispara.
La exposición es menos rápida, es decir, el tiempo de exposición es más largo. Se recomienda 1/125. La cámara está
quieta y cuando pasa el objeto se dispara.
La exposición es menos rápida, es decir, el tiempo de exposición es más largo, por ello se recomienda 1/125. La cámara
sigue al objeto y en un momento determinado se dispara.
Fotografías nocturnas
La principal característica de las fotografías nocturnas es la falta de luminosidad. Por ello, para realizar este tipo de fotos
utilizaremos un tiempo de exposición alto, del orden de segundos. En este caso necesitaremos un trípode y resultará útil
también un disparador para evitar mover la cámara.
Para forzar exposiciones muy largas es útil una película poco sensible (p. ej. 100 ASA). Para evitar que las zonas negras
aparezcan grises se puede compensar la escena.
Resulta muy llamativo el movimiento de las luces de los coches, así como, los reflejos que proporciona el agua.
Igualmente las fotografías de monumentos iluminados.
Si se enfoca al infinito se puede ajustar la apertura de diafragma a tope (número f menor) sin apenas reducir la
profundidad de campo, y así obtener más luminosidad.
Fuegos artificiales
La principal característica de las fotografías de fuegos artificiales es controlar la luminosidad y cuánto tiempo dura la
exposición.
• Utilizaremos un tiempo de exposición alto, del orden de segundos.
• Para ello, necesitaremos un trípode y resultará útil también un disparador para evitar mover la cámara.
• Antes de fotografiar se compone la escena y se comprueba cuánto suele durar la escena de los fuegos
artificiales que se van a fotografiar.
• Se enfoca al infinito manualmente.
• Se ajusta el tiempo haciéndolo coincidir con la duración de la estela de los fuegos.
• En función del tiempo se ajusta la apertura de diafragma utilizando la que nos recomienda la cámara en la
oscuridad.
• Finalmente se dispara en el momento en que empieza un fuego artificial.
• Para poder forzar la exposición bastantes segundos se recomienda utilizar una película poco sensible (p. ej.
100 ASA) y compensar la exposición.
Es importante tener en cuenta que el negativo sólo imprime la claridad y no la oscuridad. Sólo la luz altera el negativo.
de forma que, si hiciéramos una fotografía a algo totalmente oscuro no se alteraría la película.
FotografiarTormentas
La principal característica de las fotografías de tormentas es el control manual del tiempo de exposición.
• Utilizaremos un tiempo de exposición muy alto, del orden
de segundos.
• Para ello necesitaremos un trípode, y resultará casi
imprescindible un disparador para evitar mover la cámara
y controlar el tiempo de exposición manualmente.
• Antes de fotografiar se compone la escena.
• Se enfoca al infinito manualmente.
• Se ajusta el tiempo de exposición en modo BULB, de
forma que el obturador permitirá que la luz alcance la
película durante el tiempo que estemos disparando.
• Se cierra el diafragma lo máximo posible (número f
grande, p. ej. 22).
• Para poder forzar la exposición bastantes segundos se
recomienda utilizar una película poco sensible (p. ej. 100
ASA).
• Es importante que el lugar desde donde se hace la
fotografía esté exento de luminosidad ambiental. Es
muy difícil, por tanto, fotografiar tormentas en la ciudad.
Se dispara en un momento cualquiera y se mantiene el disparador pulsado, es decir, con el obturador abierto. En el
momento en que aparece un relámpago éste se imprime en la película y se deja de disparar. Si se quiere se pueden
combinar varios relámpagos manteniendo el disparo durante el tiempo necesario para que aparezcan estos.
Es importante tener en cuenta que el negativo sólo imprime la claridad, y no la oscuridad. Sólo la luz altera el negativo
de forma que, si hiciéramos una fotografía a algo totalmente oscuro no se alteraría la película.
El Contraluz
En las fotografías a contraluz captaremos una escena que tiene la fuente de luz al frente, con la intención de que
deslumbre y la imagen aparezca totalmente oscura y sólo se puedan ver
siluetas. Encontramos fotografías en las que la fuente de luz aparece cubierta
por el objeto y otras que deslumbran directamente en la fotografía. El resultado
será una fotografía con los colores anulados, con zonas muy claras y zonas
muy oscuras.
• La medición de la luz será compensación de la escena o medición en
un punto de la zona clara de la escena. Cuanto más rápida sea la
exposición más marcado será el contraluz.
• Se enfoca al fondo si se quiere resaltar éste o al sujeto si se quiere una
silueta muy definida.
• Si se juega con reflejos, como es el caso de la imagen, se debe evitar
situarlo en el centro aplicando la regla 1/3 -2/3.
El autodisparo es una función que permite que la cámara ejecute el disparo de forma automática tras un retardo de
unos segundos, aproximadamente 10. Lo implementan prácticamente todas las cámaras SLR del mercado, sea manual
o automática. En el caso de las primeras, el mecanismo es una palanca que gira una cantidad de grados según el
tiempo que se quiera retrasar la exposición. En el caso de las automáticas es un modo que se programa, dependiendo
del modelo de cámara, de un modo u otro. Es útil cuando se quiere que el fotógrafo aparezca en la fotografía. Pero
como veremos también es útil en otras ocasiones.
Con trípodes que son ligeros la cámara puede moverse si no se manipula suavemente. Si no se dispone de disparador
para evitar este movimiento, en el momento de hacer exposiciones muy largas, p. ej. fotografía nocturna, se puede evitar
mover la cámara utilizando el disparador automático.
Fotografiar Niños
• Las fotos de niños pueden dar mucho juego a la creatividad, obteniendo fotografías llenas de frescura y
espontaneidad.
• Es recomendable no utilizar flash y aprovechar la luz natural. En algunas ocasiones el flash de relleno puede
resultar útil.
• Lo más importante es ponerse a su altura, evitando las fotografías por encima de sus cabezas.
• Los primeros planos pueden ser espectaculares. Se pueden aplicar los conceptos de la técnica de retratos.
• Es importante que actúen de forma natural, que estén haciendo algo. Para no hacernos notar se recomienda
utilizar un zoom y fotografiar desde lejos.
• Es muy aconsejable ponerse a su misma altura, con el fin de que las fotos parezcan naturales. Hay que evitar
hacer fotos “de arriba hacia abajo”, desde nuestra perspectiva

Fotos en la playa y en la nieve


• El problema de las fotografías en la playa o en la nieve es el exceso de luz ya que, esto provoca en los
fotómetros de las cámaras una lectura incorrecta. De esta forma la fotografía será demasiado rápida
y aparecerá oscura.
• Se debe compensar la fotografía, ajustando a +1, +2 ó +3 la compensación de exposición si hace un día
oscuro, nublado o soleado respectivamente.
• Para resaltar el cielo y contrastarlo más, así como eliminar parte de la luz sobrante, se recomienda utilizar un
filtro polarizador.

Exposición compensada Exposición sin compensar


Fotografiar Animales
La dificultad de fotografiar animales suele residir en la
movilidad de estos. Pueden ser animales asustadizos o
muy activos, lo cual dificulta su exposición.
Se les debe fotografiar por sorpresa o evitando que detecten
nuestra presencia.
El uso del zoom se hace imprescindible en animales
asustadizos.
En caso de ser animales en movimiento o animales veloces
se recomienda utilizar un tiempo de exposición bajo
(aproximadamente 1/125).
Para destacarlos del fondo se reduce la profundidad de
campo. Si el animal no es asustadizo, se recomienda llamarle
la atención moviendo algún objeto.
La dificultad de fotografiar
peceras reside en la
absorción de la luz que
experimenta el agua. Aunque
parece una escena iluminada
no lo es tanto y se hace
imprescindible la iluminación
adicional.
• Se recomienda
utilizar películas
muy sensibles, 400
ú 800 ASA, para
conseguir la máxima velocidad posible. Hay que tener en cuenta que los peces se mueven.
• A ser posible, se utilizará un flash inalámbrico situado en la parte superior de la pecera.
• Si se utiliza un flash normal se recomienda colocar la cámara en diagonal a la pecera, pues si no el cristal de
ésta reflejaría.
La técnica para eliminar los barrotes de una jaula se basa en hacer la profundidad de campo lo más pequeña posible.
• Abriendo el diafragma al máximo (número f menor).
• Si no se dispone de zoom hay que acercarse lo máximo que se pueda a la jaula, con el peligro de asustar al
animal.
• Si se dispone de zoom se puede hacer desde mayor distancia pero el diafragma ha de estar abierto lo máximo
posible.
Las aves son muy asustadizas y por tanto la habilidad de fotografiarlas reside en quedarse quieto, observar, tener
paciencia y utilizar un teleobjetivo.
• Es imprescindible el uso de un teleobjetivo como mínimo de 200 mm de distancia focal.
• Para fotografías con teleobjetivo se recomienda el uso del trípode,ya que se evitan muchas fotografías
movidas.
• Para conseguir tiempos de exposición bajos se recomienda el uso de películas sensibles, p. ej. 400 ASA.
• Puede resultar espectacular la congelación del movimiento de las alas, utilizando un tiempo de exposición bajo.
• Se pueden conseguir resultados excelentes en fotografías a contraluz de aves.
• Si el ave no es asustadiza, se recomienda llamarle la atención moviendo algún objeto.
Fotografiar Iglesias y monumentos
Cuando se va de viaje fotografiar monumentos es muy típico. Veamos algunas recomendaciones:
• El monumento debe ocupar gran parte de la escena.
• Es importante la medición de la luz, pues el cielo puede ser muy claro. Para hacer una medición correcta es
preferible medir la luz en el monumento y realizar la composición posteriormente.
• Es muy recomendable evitar los monumentos con luz frontal, pues se eliminan los relieves y las sombras.
• Para hacer el cielo más azul se recomienda el uso de un filtro polarizador.
• Para encuadrar detalles utilizaremos el zoom.
• Son muy llamativas las fotografías nocturnas de monumentos iluminados. Se recomienda jugar con la
composición buscando siempre un ángulo curioso y distinto de las postales.
Fotografiar el agua
El agua es siempre muy agradecida en las fotografías. Es sencillo retratar el movimiento de ésta en una fuente o un río,
pero siempre queda a gusto del fotógrafo cómo hacerlo.
Se puede congelar el movimiento del agua utilizando un tiempo
de exposición muy reducido, p. ej. 1/250.
También se puede hacer una exposición larga, p. ej. 2
segundos, para difuminar el agua. Para ello es
necesario un trípode.
En caso de fotografiar gotas se les puede hacer brillar
utilizando el flash.
Las fotografías de gotas de cerca son muy estéticas.
Se recomienda jugar con la composición buscando siempre un
ángulo curioso y distinto al de las postales.
Fotografiar Flores y frutas
Las flores nos ofrecen unos colores y unas formas muy llamativas. Es un tipo de fotografía bastante sencillo, además, es
interesante buscar el detalle y un buen encuadre.
La apertura de diafragma ha de ser alta (número f bajo) para conseguir una profundidad de campo reducida y resaltar la
flor sobre el fondo.
La presencia de insectos, mariposas, etc... hace la fotografía más interesante.
Las gotas de agua son un recurso plástico muy llamativo. Si podemos, salpicaremos la flor con unas gotas antes de
fotografiarla.
Para buscar el detalle se recomienda que la flor ocupe toda la escena, utilizar objetivos macro o en su defecto lentes de
aproximación.
En caso de fotografiar gotas, se les puede hacer brillar utilizando el flash de relleno.

En las frutas, utilizar luz natural. Si no es así no utilizar nunca un flash normal, ya que la luz ha de venir de todas
partes.
Las frutas mojadas
resultan mucho más
apetecibles. Si no está
mojada y el tipo de fruta lo
permite se debe sacar
brillo a ésta.
Para buscar el detalle en
frutas pequeñas se
recomienda que la fruta
ocupe toda la escena,
utilizar objetivos macro o
en su defecto lentes de
aproximación.

Conceptos de Fotografía, 2006

You might also like