You are on page 1of 3

RIESGOS DE LA DESHIDRATACIÓN Y SOBREHIDRATACIÓN

¿Sabía que estar sobrehidratado o, lo que es lo mismo, tener hiponatremia


puede ser peligroso para su cuerpo?
La nutrióloga especialista en temas del deporte, Lourdes Mayol explica que
"mantener al cuerpo adecuadamente hidratado con los líquidos correctos es esencial
para la seguridad, pero en ocasiones el exceso de éstos puede ser perjudicial"
explica la experta, quien también es asesora médica del Instituto Gatorade de
Ciencias del Deporte.
"La hiponatremia, aunque rara, es una condición que ocurre cuando los niveles de
sodio en la sangre disminuyen por debajo de lo normal, es decir, cuando ingerimos
muchos líquidos que no contienen sodio y perdemos mucho de este electrolito por
funciones como sudar" agrega la experta.
El sodio es necesario para las personas, pues ayuda a mantener el balance de los
sistemas de fluidos físicos. También es requerido para el funcionamiento de nervios
y músculos.
"Cuando perdemos demasiado sodio y sólo bebemos agua simple, que no lo
reponga, se considera que un organismo está sobrehidratado" dice la especialista.
Entre los principales síntomas que señala Mayol están una ganancia rápida de peso,
confusión, mareos, náusea, fatiga severa, falta de coordinación, dificultad para
respirar, inflamación de manos y pies, dolor de cabeza con punzadas, apatía,
calambres, estómago inflamado y convulsiones.
"Aunque es raro, la hiponatremia puede resultar en convulsiones severas, coma y
muerte, por lo que es vital que las personas en general, y especialmente los atletas,
conozcan esta condición y cómo prevenirla" asegura.
¿Quién está en riesgo de hiponatremia? Cualquier persona que beba demasiado y
no reemplace adecuadamente el sodio que se pierde en el sudor está en riesgo de
presentar hiponatremia, pero deben tener cuidado especialmente:
*Los atletas de resistencia.
*Aquellos que se ejercitan durante más de cuatro horas diarias.
*Atletas con dietas bajas en sodio.
*Maratonistas principiantes que tienden a correr lentamente y están excesivamente
preocupados por su hidratación.
*Atletas que se sobrehidratan antes, durante y después del ejercicio.
· "Sudadores salados" son aquellos que al sudar dejan su piel y ropa
manchados de una especia de polvo blanco, que es sal.
LA DESHIDRATACIÓN es un trastorno que ocurre cuando una persona pierde
más líquidos (por ejemplo, en forma de orina o sudor) que los que ingiere. La
deshidratación no es un problema tan grave en un adolescente como puede serlo en
un bebé o un niño pequeño, pero si no haces caso a tu sed, la deshidratación puede
quitarte muchas energías.
Cuando una persona se deshidrata, significa que la cantidad de agua que contiene su
cuerpo ha descendido por debajo del nivel adecuado (nuestro cuerpo contiene
aproximadamente dos tercios de agua). Las pequeñas pérdidas de líquidos no
representan ningún problema y en la mayoría de los casos pasan completamente
desapercibidas. Pero perder una cantidad importante de agua puede hacer que una
persona se encuentre francamente mal.
¿Cómo se deshidrata la gente?
Una causa habitual de deshidratación en los adolescentes son las enfermedades
gastrointestinales. Cuando te infectas por un bichito estomacal o intestinal, puedes
perder mucho líquido a través de los vómitos y las diarreas. También te puedes
deshidratar si haces mucho ejercicio físico y no repones los líquidos que gastas,
aunque es muy poco habitual llegar siquiera al nivel de la deshidratación moderada
mientras se hace deporte u otra actividad física normal al aire libre.
Algunos atletas se deshidratan a propósito para perder peso rápidamente antes de
una gran competición o de un acontecimiento deportivo importante, sudando en
saunas o utilizando laxantes o diuréticos, que les hacen ir más al váter. Pero estas
prácticas son mucho más nocivas que buenas. Los atletas que las utilizan se sienten
más débiles, lo que repercute desfavorablemente sobre su rendimiento, y además
pueden provocar problemas mucho más graves, como anomalías en los niveles de
sodio y potasio del organismo. Estos cambios, a su vez, pueden ocasionar
problemas en el ritmo cardíaco.
El hecho de ponerse a dieta también puede mermar considerablemente las reservas
de agua de una persona. No te fíes de las dietas que hacen hincapié en "dietas
secas" como una forma rápida de perder peso.
Tratar la deshidratación
Para tratar la deshidratación, es preciso restablecer el adecuado equilibrio hídrico en
el organismo. Pero primero uno tiene que reconocer el problema. La sed es el mejor
y primer indicador de deshidratación potencial. A pesar de que la sed es un
indicador de deshidratación, no se trata de un signo de alarma temprano. Cuando
experimentes sed, es posible que ya estés deshidratado. Otros síntomas de
deshidratación son:

sentirte mareado o inestable, como si se te fuera la cabeza


tener la boca seca o pegajosa
orinar menos y orinar más oscuro

Al tratarse de un trastorno progresivo, una persona se va encontrando mucho peor a


medida que la deshidratación va afectando a más sistemas corporales y a más
órganos.
La forma más fácil de evitar la deshidratación es beber mucho líquido, sobre todo
en los días calurosos, secos y/o ventosos. Esto puede implicar beber entre 6 y 8
vasos (entre 1,4 y 1,9 litros) diariamente para algunas personas, dependiendo de
factores como cuánta agua obtienen a través de los alimentos y cuánto sudan a
consecuencia de la actividad física que realizan. Recuerda que el hecho de beber
agua no añade calorías a tu dieta y puede ser muy bueno para tu salud.
Cuando tengas pensado pasar un tiempo al aire libre en un día caluroso, vístete
adecuadamente para la actividad que vayas a desarrollar. Ponte prendas holgadas y
un gorro, si es posible. Así te mantendrás más fresco y sudarás menos. Si te mareas,
tienes la sensación de que se te va la cabeza o tienes mucha sed, tómate un descanso
de varios minutos. Siéntate a la sombra o en un lugar fresco y bebe agua.
Si vas a practicar algún deporte o a participar en una actividad física agotadora,
deberías hidratarte bien bebiendo algo de líquido antes de iniciar la actividad.
También deberías beber a intervalos regulares (cada 20 minutos aproximadamente)
mientras realices la actividad y al finalizarla. El mejor momento para entrenar o
hacer deporte es a primera hora de la mañana o a última de la tarde para evitar las
horas más calurosas del día.
Si tienes un bichito en el estómago o los intestinos que te está dando la lata y no
paras de hacer visitas al váter, probablemente no te apetecerá comer ni beber nada.
Llevarte algo a la boca probablemente sería lo último que se te pasaría por la
cabeza, pero aún y todo, necesitas beber. Ves dando pequeños sorbos de líquido
frecuentemente. Algunas personas toleran mejor chupar cubitos de hielo.
El hecho de no consumir bebidas que contengan cafeína, como el café, el té y los
refrescos de cola, puede ayudarte a evitar la deshidratación. La cafeína es diurética
(te hace orinar más a menudo de lo que necesitas orinar normalmente).
¿Cuándo deberías ir al médico?
Generalmente la deshidratación se puede tratar simplemente bebiendo líquido. Pero
si te desmayas o estás a punto de desmayarte cada vez que te incorporas (incluso un
par de horas después de la aparición de los primeros síntomas de hidratación) o si
orinas muy poco, deberías decírselo a un adulto para que te lleve al médico.
Probablemente el médico sólo te pedirá que bebas más líquido, pero si estás más
deshidratado de lo que creías, es posible que necesites recibir líquidos por vía
intravenosa (VI) para acelerar el proceso de rehidratación. Una vía intravenosa es un
tubito que se inserta directamente en la vena.
Ocasionalmente, la deshidratación puede ser un signo de algo más grave, como la
diabetes, de modo que es posible que el médico te mande algunos análisis para
descartar otros problemas potenciales.
Por lo general, la deshidratación se puede prevenir. O sea que sigue bebiendo
abundante H2O (agua) para mantenerte saludablemente hidratado.

You might also like