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EN ESTE

Créditos Editorial
MOVIMIENTO
Estudiantes en El arte que perdió su sombra. Análisis
Movimiento del ready-made de Marcel Duchamp 6
Consejo Editorial

P. José Antonio Balaguera Cepeda, O.P.


Caminando la memoria.
Rector General El arte como herramienta de la
P. Pedro José Díaz, O.P. memoria en tiempos de conflicto 10
Vicerrector Académico
P. Marco Antonio Peña Salinas, O.P.
Vicerrector Administrativo y Financiero General Lo social como musa de inspiración
P. Luis Francisco Sastoque Poveda, O.P. de los artistas contemporáneos 14
Vicerrector General de Universidad Abierta
y a Distancia -VUAD-
Omar Parra Rozo
La delimitación del ámbito estético
Director Unidad de Investigación y Posgrados y su relación con la política 19
Maria Andrea López Guzmán
Editora
Profesional Invitado La memoria colectiva y las
Comité Fundadores
prácticas artísticas 24
Liliana Silva Bello en Movimiento
Giovana Rojas Mora
Paula Pinilla Orduz
Mauricio Poveda Pineda Opinión en ¿Arte por sí, y para sí? 33
Carlos Laverde Rodríguez
Constanza Gómez Gavilan Movimiento
Capitalismo, arte y contracultura 38
Comité Editorial
Juego en el aire 40
Yuri Martínez Molina
Catalina Vargas Mayorga
Paula Pastrana Martínez Construcción Arte que atraviesa la organización juvenil 44
Giovanny Forigua Ortiz
Paola Niño Vargas Estudiantil
Karen Tovar ¿Qué es eso de la asamblea? 46
en Movimiento
Con la participación de Más allá de la identidad 49
Colectivo Chibcha
Colectivo Maya
Jornada nacional en contra de las ejecuciones
Colectivo Pachamama
extrajudiciales, falsos positivos y demás crimenes
de Estado. Estudiantes coordinando, construyendo
y transformando. Universidad
Idea original de diseño y diagramación Santo Tomás 51
Lorena Margarita Flautero Guerrero

Correción de texto, diseño,


Expresión en Ausencia 57
diagramación e Impresión Movimiento Metamorfosis en el olvido 59
Universidad Santo Tomás
Departamento de Comunicaciones Hermosa y poderosa 60
Editorial y Publicaciones
Bogotá, D.C., Colombia Lo que la ciudad calla 61
2009
Del arte y el corazón 63
Las ideas aquí expresadas
son de exclusiva responsabilidad Un día cualquiera 68
de los autores.
¿Sabes algo de mí? 68
revistamovimiento@correo.usta.edu.co
revistamovimiento@hotmail.com
Cultura en Movimiento
Clasificados
Para estar en Movimiento

2
Editorial
Para iniciar el cuarto número de la revista Mo- de expresión y trascendencia de las más grandes
vimiento, deseamos hacer un reconocimiento y represiones y, por tanto, de la búsqueda de la
agradecimiento especial a la labor de los y las emancipación de las sociedades en sus infinitas
estudiantes que han participado de diferentes posibilidades. Pues hay que aclarar que la eman-
maneras en cada una de las publicaciones, y han cipación no se construye de una sola manera;
permitido crear un escenario de participación li- antes bien, este número se propone demostrar
bre y fecundo para las ideas, como también abrir que existen miles de formas y matices que no se
espacios de discusión, construcción y conciencia. agotan en los ya conocidos discursos, ni en los ya
Así mismo, destacamos la valiosa colaboración de rutinizados métodos. De esta manera, el arte se
toda la comunidad tomasina, que en todo momen- convierte a nuestros ojos en un elemento de cons-
to nos ha brindado su apoyo para conseguir que trucción, resistencia, libertad y reivindicación, y en
este trabajo sea posible. un ejercicio que, de múltiples formas, posibilita la
interpretación, transformación y materialización
En la presente edición, la revista estudiantil Mo- del sentir de los individuos ante la realidad social
vimiento hace énfasis en la comprensión del arte a la cual pertenecen.
como representación simbólica de lo humano, no
sólo desde una perspectiva teórica, sino también Esta edición pretende ser una continuación del ter-
desde su expresión, que bien puede ser visual o cer número de la revista Movimiento, denominado
escrita. Esto se debe a que a lo largo de la historia, “Cultura e identidad desde un marco contempo-
el arte se ha configurado a través de diferentes ráneo”. La discusión planteada por el anterior
formas de expresión hasta llegar a ser uno de los número aún está abierta, y en este número se en-
elementos característicos que nos permiten com- foca a partir de la relación existente entre cultura
prender a las sociedades antiguas, modernas, e y arte, mediante artículos que conciben a lo social
incluso a las contemporáneas. Lo anterior es po- como inspiración para el arte y el arte como mani-
sible gracias a la capacidad que tiene el arte de festación social, el capitalismo y el arte, e incluso
reflejar las diversas transformaciones y cambios el concepto mismo de arte y la expresión artística,
estructurales dentro de un contexto social, político entre otros.
y cultural determinado.
Sin embargo, antes debemos poner en conoci-
La importancia del arte se configura en el ser mis- miento de nuestras lectoras y lectores lo precario
mo de la humanidad, como expresión de todo del proceso de construcción de este número y la
aquello que ésta piensa, hace, percibe, desea y dificultad con la que se recibió la convocatoria por
siente. De manera que el arte no es sólo una sim- parte del cuerpo estudiantil, primordialmente en
ple narración de la vida humana, sino el medio la producción científica en sociología del arte y en

3
las demás disciplinas. Es curiosa la poca existencia soñando y haciendo realidad con la idea de incidir
de este tipo de trabajos al interior de las facultades en el panorama colombiano, precisamente desde
a las que se hizo extensiva la invitación, o el poco el hecho, que lleva en sí mismo un movimiento, de
interés en dar a conocer lo escrito en relación con ser estudiantes.
el tema propuesto.
Aprovechando las nuevas dinámicas que en el
La revista estudiantil Movimiento quiere aprovechar cuerpo estudiantil se están gestando, la revista
esta oportunidad para redefinir su perfil como un quiere hacer a sus lectores partícipes de los cam-
medio de comunicación interinstitucional, gracias bios que al interior de ésta se han generado. En
a la creciente colaboración de las diferentes facul- primer lugar, el grupo editorial para este núme-
tades universitarias del país que con su producción ro y para los siguientes se ha reestructurado con
académica y evidente difusión han apoyado el cre- nuevos y nuevas integrantes, respondiendo a unos
cimiento de nuestra labor como estudiantes. A esto principios de renovación generacional que buscan
se suma el reconocimiento que tiene la revista en impulsar una mayor participación en este medio; y
algunos países de Latinoamérica, el cual ayuda a en segunda instancia, el nuevo nombre y estructu-
ampliar los horizontes para este medio de comuni- ración de la sección “Representación en movimien-
cación propuesto y desarrollado por estudiantes de to”, que ahora se llamará “Construcción estudiantil
Colombia. Por tanto, reiteramos nuestro propósito en movimiento”, teniendo en cuenta las diferentes
de acercar las diferentes disciplinas y ciencias en manifestaciones estudiantiles que en su genera-
pro de la construcción del conocimiento, y pug- ción de movimiento han resignificado el escenario
namos por la intervención de éste en la sociedad, estudiantil nacional, y que por supuesto, no son
desde los diferentes puntos de vista de la acade- necesariamente parte de la “representación”.
mia como afirmación continua de LA LIBERTAD DE
LAS IDEAS. No nos queda más que renovar nuestra invitación
a quienes hoy nos leen, para continuar participan-
Por último, como entrega especial, Movimiento do de este espacio de difusión, discusión, creación
proporciona a sus lectores un artículo sobre el tra- y libertad, con sus producciones académicas, opi-
bajo elaborado con ocasión de la conmemoración niones, múltiples y ricas formas de expresarse, y
del 6 de marzo, como generación de los espacios aún más, con la intención de crear MOVIMIENTO;
académicos y universitarios que pretendemos con- el movimiento que no se agota en este medio, sino
servar desde la revista estudiantil y como eviden- que vive y se construye continuamente por todas
cia de los propósitos que el cuerpo estudiantil está las iniciativas y acciones de los y las estudiantes.

4
Movimiento

EL ARTE QUE PERDIÓ SU SOMBRA.


Análisis del ready-made de Marcel Duchamp

KAREN ANDREA NAVARRETE GUZMÁN


SOCIOLOGÍA. IX SEMESTRE
UNIVERSIDAD EXTERNADO DE COLOMBIA
FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANAS Lo curioso del ready-made es que nunca
karennavarrete@msn.com he conseguido dar una definición o
explicación que me satisfaga por completo.
Marcel Duchamp

La función del arte en la sociedad es edificar,


reconstruirnos cuando
estamos en peligro de derrumbe.
Sigmund Freud

En el ámbito de las creaciones del arte en el si- Ahora bien, desde un enfoque más profundo, se
glo XX, se puede nombrar una cantidad bastante puede afirmar que la ausencia es una cualidad
amplia de personajes, movimientos y sucesos so- del ready-made: ausencia de sombra, ausencia
bresalientes. Marcel Duchamp por ejemplo, es un de color, ausencia de reflejo y ausencia del “yo”.
personaje de la época que vale la pena mencionar, Ante esto, vale la pena peguntarse ¿dónde queda
no sólo porque ha dejado una huella que se evi- el alma del ready-made?, ¿el ready-made efecti-
dencia en posteriores movimientos artísticos, sino vamente ha muerto?, ¿será un arte sin tiempo?
también por su influencia en el pensamiento del No sabemos en realidad si el ready-made alguna
siglo XX. vez estuvo vivo, pero los hechos nos indican que
la vida en esta obra no recae en su sombra, sino
Dentro de la obra de Marcel Duchamp se desta- en el principio del conocimiento al que se refería
can los ready-mades, entre los cuales, uno de los Platón. Es por esto que el arte no sólo es vida, sino
más famosos es La Fuente (1917): un orinal puesto también es muerte; el ready-made vive entre el re-
al revés sobre el que está inscrito el nombre de flejo y las sombras.
R. Mutt (fabricante de este tipo de utensilios). Los
ready-mades constituyeron una crítica contunden- En su definición más elemental, el ready-made
te al arte como institución y al endiosamiento de se refiere a los objetos de uso cotidiano que se
las obras artísticas, hecho que generó controver- disponen de manera arbitraria y se convierten en
sias entre los círculos artísticos, inclusive entre los arte por el deseo del artista. Para Duchamp, los
mismos surrealistas1. No obstante, es importante ready-made son una crítica al gusto y una manera
aclarar que aunque el sentido de los ready-mades de alejarse del arte retiniano y la composición ma-
puede relacionarse con conceptos como el de no- nual. En palabras de Duchamp, “el gusto es ‘una
significación o anti-arte, Duchamp consideraba costumbre’. La repetición de una cosa ya acepta-
sus ready-mades como arte2. da. Si se empieza de nuevo varias veces alguna
cosa se convierte en el gusto. Bueno o malo es lo
mismo. Es siempre gusto”3.
1 El dadaísmo es una de las vanguardias consideradas bajo el
título de surrealistas, aunque el surrealismo precedió al da-
daísmo.
2 PAZ, Octavio. La apariencia desnuda: la obra de Marcel Du- 3 CABANNE, Pierre. Conversaciones con Marcel Duchamp. Bar-
champ. Madrid: Alianza, 1998. celona: Anagrama, 1984, p.72.

6
Sociología

Así pues, el gusto es el que determina aquello que


puede ser bueno o malo, bonito o feo, según las
reglas de la sociedad. Por tanto, cuando Duchamp
propone alejarse del gusto por medio de la no-
repetición, decide dejar de realizar ready-mades
de manera continua, pues la repetición lo acerca
nuevamente al gusto. En ese mismo intento por
alejarse del gusto, el artista devela la libertad, ya
que encontrar la forma en la que las reglas de lo
social no están presentes implica una abstracción
de la realidad.

En un sentido más estricto de la definición de


ready-made, y de lo que Duchamp quiso hacer,
más allá de la disposición arbitraria de los objetos,
se destaca que la elección (el choix) permite que
el objeto transfigure su uso y se convierta en obje-
to de contemplación4 . De esta manera, Duchamp
pretendía establecer una nueva concepción de lo
que el arte significaba ubicando la esencia de lo
artístico en la idea y en la selección de un objeto y
no en la creación y la imagen visual de la obra.

En el ready-made, la funcionalidad y el uso pasan


a un segundo plano, para convertirse en un objeto
de contemplación, no por su belleza física, sino por
el acto de la elección. El ready-made no enmar-
ca entonces una arbitrariedad en la elección, sino
una lógica que permite relacionar su significado
con la intención del artista. Al escoger un urina-
rio o una pala para recoger nieve como uno de
sus ready-mades, Duchamp no esgrime una razón
estética en particular, sino que se inclina hacia la
antiestética, en la cual confluyen las ausencias no
accidentales de sombra, reflejo y color.

En las diferentes interpretaciones que se le acu-


ñan a la obra de Duchamp, especialmente a sus
ready-mades, encontramos que muy pocos autores
son los que descubren el sentido de su obra. Hasta
los más devotos duchampianos caen en el posible
error de considerar, por un lado, que el azar es una
de las características relevantes en el momento de
la elección y, por otra parte, que la elección de los
objetos que toma para realizar sus obras refleja la
vida anímica del artista.

En las obras de la madurez, Duchamp deja de lado


la pintura al óleo y sus tendencias impresionistas,

4 OYARZÚN, Pablo. Anestética del Ready-made. Santiago de


Chile: Universidad ARCIS, 2000.

7
Movimiento

fauvistas, cubistas e incluso futuristas, impregna- en el padre del arte conceptual y en uno de los
das notablemente de los colores y formas de la artistas más importantes e influyentes del siglo XX
naturaleza (excepto en el futurismo). Al entrar en y del arte moderno; o podríamos decir, del arte
la producción de ready-mades y el diseño del Gran posmoderno.
Vidrio, el color en la obra de Duchamp empieza a
desaparecer y predominan materiales con colores La ausencia de un yo es la ausencia de la concien-
neutros como grises y blancos, provenientes de la cia. La conciencia como acto racional nos permite
naturaleza del material con el que están hechos. diferenciarnos como seres humanos y reafirmarnos
como individuos; por tanto, el ready-made está au-
El color, según Kandinsky, tiene un efecto sobre el sente. Pero esto no implica que su autor también
alma que permite a los más sensibles no sólo im- lo esté, pues todo esto queda negado en la medi-
pactar el órgano encargado de percibir el color, da en que Duchamp introduce la elección como
sino también otros de los órganos a través de un el acto de la razón y conciencia que
sonido o de un olor: lo identifica como un yo,
como un individuo parti-
En general, el color es un medio para ejercer cular y singular.
una influencia directa sobre el alma. El color es
la tecla. El ojo es el macillo. El alma es el piano, Muchos de los más
esta o aquella tecla hace vibrar adecuadamen- fervientes seguido-
te el alma humana. La armonía de los colores
res de Duchamp
debe basarse únicamente en el principio del
contacto adecuado con el alma humana. Lla- han intentado,
maremos a ésta base principio de la necesidad por medio del
interior5. psicoanálisis,
establecer re-
En este sentido, no sólo en la relación con el exte- laciones entre
rior y con la actividad social se construye la psique; sus obras de
ésta también se estimula y configura a partir del arte, su personalidad y
arte. En el caso de los colores, su vibración produ- su historia. Error fatal,
ce efectos en el alma. En este punto cabe pregun- pues el pensamien-
tarse: ¿esto era a lo que Duchamp se refería con to lógico de Duchamp
una obra de arte fuera de los parámetros de la es- pone en evidencia que su
tética?, ¿acaso Duchamp deseaba un ready-made procedencia no se ubica en
muerto? Quizá no, quizá el ready-made adquiera dichas fuentes. ¿En dónde se
vida cuando se le reconozca como tal, en la me- ubica entonces el pensamien-
dida en que se introduzca en la conceptualización to de Marcel Duchamp?
de la obra de arte e interactúe con el otro, con el
espectador, y con esos aspectos inconscientes que La obra de arte en Duchamp no necesariamente
devela de una sociedad futura. El ready-made ca- nos remite a aspectos individuales e íntimos del
rece de sombra y de alma, pero esto no significa artista, representa el razonamiento lógico, la ima-
que sea una obra de arte muerta. ginación como ente de creación y producto de la
psique6 . La genialidad de Duchamp está en matar
A pesar de que las diferentes interpretaciones de a su obra al no incluir aspectos personales en ella y
Duchamp y su obra insisten en que él se encuentra darle un carácter anti, que la opone a lo estético, a
representado en ellas, Duchamp siempre intentó la luz y al color. Más que un objeto de contempla-
alejarse de todo aspecto estético, del gusto, de la ción, el ready-made es una “cosa mental”, como
repetición, del síntoma como tal. Su obra refleja la lo refiere Calvin Tomkins (biógrafo más importante
ausencia del yo, la ausencia de Marcel Duchamp de Marcel Duchamp), haciendo referencia a Leo-
como individuo y como artista. Éste es el hecho nardo da Vinci, pues deja de ser un experimento
principal que permitió que Duchamp se convirtiera retiniano y meramente visual y pasa a ser un obje-

5 KANDINSKY, Wassily. De lo espiritual en el arte. Barcelona: 6 CASTORIADIS, Cornellius. Ontología de la creación. Bogotá:
Labor S.A., 1991. p. 59. Ensayo y error, 1997.

8
Sociología

to constituido a partir de la mente. tal para su carácter vanguardista; de modo que


el dadaísmo marca la definición del artista y de
A pesar de que en toda la obra de Duchamp (y su obra. Así mismo, el ambiente político y social
no sólo en sus ready-mades) existe cierta oposición que se respira en la primera mitad del siglo XX,
con los aspectos formales del arte, se mueve en deja ver los inminentes hechos que se producirán
la dialéctica de la contradicción, en la cual arte y y que marcarán la transición de una época a otra,
anti-arte se oponen, luz y sombra se complemen- en donde surge la variabilidad y la multiplicidad
tan y alma y yo se vuelven uno solo. El recorrido de formas. En este momento, Duchamp deja de
de la obra artística de Duchamp se mueve entre verse como un elemento aislado de la estructura y
la oposición de todos los factores del arte con el empieza a articularse dentro de una sociedad que
arte mismo. La contradicción que se evidencia en empieza a normalizar todo aquello que antes era
el ready-made está en el hecho de que, al carecer visto como diferente.
de sombra, los objetos no tienen alma. Sin em-
bargo, Duchamp lo dota de un alma y un sentido
a partir de la Choix, en la que el uso cotidiano se BIBLIOGRAFÍA
anula y se le concede un uso como pieza artística
y contemplativa. Por más simpleza y alejamiento CABANNE, Pierre. Conversaciones con Marcel Du-
que pueda tener con los aspectos formales del champ. Barcelona: Anagrama, 1984.
arte, termina siendo arte; arte elitista, porque fi-
nalmente, y a pesar de que a Duchamp nunca le CASTORIADIS, Cornellius. Ontología de la crea-
incomodaron las interpretaciones que otros hicie- ción. Bogotá: Ensayo y error, 1997.
ron de sus obras, muy pocas personas entienden y
acuñan el significado y sentido que el artista le da
KANDINSKY, Wassily. De lo espiritual en el arte.
al simple acto de la Choix.
Barcelona: Labor S.A., 1991.
Incluso en sus actos más intrépidos, el artista nos
KRAUSS, Rosalind. Pasajes de la escultura moder-
deja ver cómo transfigura los conceptos, los con-
na. Madrid: Akal, 2002.
tenidos y los usos, pero siempre direccionando su
fin para contradecir al arte; ejemplo de ello es su
MINK, Janis. Duchamp. El arte contra el arte 1887-
“ready-made recíproco”, en el cual se proponía
1968. Alemania: Taschen, 2004.
utilizar un Rembrandt como tabla de planchar. De
manera que el concepto que puede definir la obra
OYARZÚN, Pablo. Anestética del Ready-made. San-
de Duchamp es la transfiguración. De esta forma,
tiago de Chile: Universidad ARCIS, 2000.
se dilucidan las relaciones existentes entre sus con-
tradicciones y oposiciones, desde las cuales se hila
su pensamiento lógico dialéctico. PAZ, Octavio. La apariencia desnuda: la obra de
Marcel Duchamp. Madrid: Alianza, 1998.
La contradicción y la oposición, al ser elementos
fundamentales en la obra de Duchamp, hacen vi- PLATÓN. La República. Buenos Aires: Universitaria,
sibles otras relaciones que se entretejen a su al- 1969.
rededor y están directamente imbricadas con su
producción artística. El gusto, la sombra y el alma, TOMKINS, Calvin. Duchamp. Barcelona: Anagra-
no son elementos aislados dentro de sus obras; se ma, 1999.
articulan junto con aspectos individuales y contex-
tuales de la vida del artista. La época en la que
se desarrolla la obra de Duchamp es fundamen-

9
MOvIMIEntO

CAMINANDO LA MEMORIA:
El ARTE COMO HERRAMIENTA DE LA
MEMORIA EN TIEMPOS DE CONFLICTO

ANA MARÍA CUESTA


SOCIOLOGÍA. X SEMESTRE
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
No basta con plasmar un solo estado de las cosas.
saguairu@hotmail.com Se necesita incidir en el recuerdo para la ejecución de una
idea artística.

Sin lugar a dudas, la memoria se ha convertido en duce entonces reparaciones simbólicas en las
estos tiempos en un factor importante para reparar comunidades.
los hechos individuales y colectivos que han cau-
sado dolor y muerte a la población, a partir de la La importancia de la “memoria histórica” en la
degradación del conflicto en Colombia. Se puede construcción de la paz dentro del conflicto armado
pensar que este es un pacto social y político que en Colombia, ha sido subrayada por el profesor
lleva a la construcción de la convivencia y la paz. Gonzalo Sánchez, quien afirma lo siguiente:
Lo cierto es que la memoria se ha convertido en
el interés y el ideal de quienes vuelven a evocar el El problema, es que no hay memoria sin me-
pasado, pensando en el presente, y sobre todo en morias. En la sociedad y sobre todo en las
el futuro, para continuar con la construcción de un sociedades de guerra, la memoria es esencial-
porvenir basado en la no violencia. mente plural. Por eso, más que una definición
de memoria preferiría hablar de la memoria
como un escenario, como lugar de enunciación
De esta manera, se entiende con claridad que el
de diferencias (pasado) lugar de negociación
tiempo de las memorias no es lineal, no es crono- (presente) y lugar de debate social sobre el
lógico o racional. Los procesos históricos ligados futuro1.
a las memorias del pasado conflictivo tienen mo-
mentos de mayor visibilidad, y en otros casos de Sociológicamente, y adoptando un concepto per-
latencia o de aparente olvido y silencio. Cuando sonal de memoria, se podría decir que la memoria
nuevos actores o nuevas circunstancias se presen- es la construcción social y cultural de recuerdos.
tan en el escenario, el pasado es resignificado. Es vista como un proceso de resistencia social en
la que se verbaliza el dolor a través del lenguaje,
Muchos países han dejado constancia de su histo- presentándose este último de diversas formas. Es
ria, de sus tragedias y heroísmos, en monumentos así como no sólo se habla de memoria como un
y museos en los cuales se hace presente la voz de cúmulo de recuerdos o evocaciones, sino también
las víctimas y su verdad. La paz y la reconciliación como un ejercicio de darle sentido a algo. La me-
necesitan la construcción de la memoria, la cual moria y los recuerdos los produce un sujeto, y no
parte de un marco referencial conocido como la siempre estos van a ser de carácter individual; es
historia no oficial, que se manifiesta en percep- en este punto en el que se visibiliza la “memoria
ciones y recuerdos. Cuando la memoria se asocia colectiva”.
con la violencia, su papel se orienta a recuperar
la verdad y la identidad de las personas y pro-
1 SÁNCHEZ, Gonzalo. En El Espectador, septiembre 7 de 2008.

10
SOCIOlOgía

Por otra parte, Maurice Halbwachs2 señala que la


memoria es la posibilidad que tienen las personas
de construirse en dos marcos sociales (el tiempo
y el espacio) por medio de la cultura, la cual de-
pende fundamentalmente del lenguaje y de otras
representaciones o performances3. Por tanto, toda
memoria es una construcción individual, ya que
la capacidad de recordar y olvidar es singular, y
define la identidad personal; sin embargo, esos
recuerdos y olvidos no se presentan en individuos
aislados, sino que están inmersos en contextos
sociales y culturales específicos, que recuperan,
construyen o cobran sentidos y están cargados de
valores y de necesidades sociales enmarcadas en
visiones del mundo.

Para Alicia Lindón4, el lenguaje es una de las es-


tructuras simbólicas que dan sentido a la acción, es
así como el carácter de la memoria, por medio del
lenguaje, hace parte de una construcción cultural.
No existe la memoria si no se contextualiza en un
espacio, y siempre estará inscrita en el tiempo. De
esta manera, la memoria hace uso de herramien-
tas artísticas como el cine, artes plásticas, teatro,
fotografía, monumentos, música, poemas y demás;
es decir, la palabra, la imagen y el sonido a favor
de la memoria y en contra de la impunidad.

Antes de hablar sobre estas representaciones, em-


pecé a preguntar sobre el significado del “Arte” y
su relación con la memoria en tiempos de conflicto
a algunos amigos. En realidad no esperaba una
única definición o un esbozo profundo sobre el
tema. Con base en esas respuestas, en este artícu-
lo se entiende que el “Arte” es “El sentido creativo

2 Maurice Halbwachs (1877-1945), sociólogo francés, estudió


el condicionamiento de los individuos, sus necesidades y con-
ducta social en la sociedad industrial, y vinculó la sociología
a la psicología. Explica la memoria colectiva en su libro Los
marcos sociales de la memoria.
3 ALEXANDER, J. C. Pragmática cultural: Un nuevo modelo de
performance social. En Revista Colombiana de Sociología. Bo-
gotá. No. 24 (2004); p 19. El performance es visto como una
práctica cultural en la que se desenvuelve un proceso en el
cual los actores individuales o colectivos “exhiben para otros
el significado de su situación social. Este significado puede o
no, ser uno con el que ellos se adhieren subjetivamente; es el
significado que ellos como actores, consciente o inconsciente-
mente desean hacerle creer a otros”.
4 Profesora-investigadora del Departamento de Sociología de
la Universidad Autónoma Metropolitana, campus Iztapalapa,
México. Miembro del Sistema Nacional de Investigadores.
Doctora en ciencias sociales con especialidad en sociología
(El Colegio de México). Magíster en Desarrollo Urbano (El Co-
legio de México). Licenciatura en Geografía (Universidad de
Buenos Aires).

11
Movimiento

y vivo hacia lo que nos rodea, materializado a tra-


vés de lo tangible” y en cuanto a su relación con
la memoria, “Arte son ideas que se presentan a
los demás concebidas con retazos del ayer y con-
textualizadas desde el tiempo presente, donde se
congelan y se recuerdan colectivamente”.

Se podría decir que el arte como herramienta de


la memoria rompe la dicotomía de lo privado a
lo público, para tejer una misma historia dentro
de un marco político. El arte público, como lo de-
cía Louis Bickford5, “conmemora eventos pasados,
otorga señales a los lugares históricos al borde de
los caminos y establece placas en las que se desta-
can a héroes y villanos”6 que no sólo son, sino que
también toman elementos visuales y artísticos. En
la mayoría de los casos, este arte habita en luga-
res específicos, como los museos, o en las calles y
sus paredes. Lo cierto, sin importar el medio en el
que esté, es que es una forma de “conciencia para
catalogar y grabar la experiencia de la violencia,
aun cuando las atrocidades son tan complejas que
no pueden ser fácilmente representadas”7. El arte,
antes que re-presentar el pasado, lo incorpora
performativamente.

La memoria, entonces, se produce en tanto que


hay sujetos que comparten una cultura, y cuan-
do hay agentes sociales que intentan materializar
estos sentidos del pasado en diversos productos
culturales que son concebidos como, o que se con-
vierten en, vehículos de la memoria tales como la
creación simbólica8 . Estas representaciones artís-
ticas son una lectura del conflicto colombiano, y
hacen parte de reparaciones, ya que visibilizan no
sólo a las victimas, sino que también permiten se-
ñalar a los victimarios.

Todorov9 plantea la separación de lo individual a


lo colectivo, en la cual se construye una identidad,
un proyecto vital, y un reconocimiento en el pasa-
do. Ubicar esta memoria en un escenario político
donde se fortalecen las posiciones del sujeto, le

5 Director del área de memoria conmemoraciones y museos,


del Centro Internacional para la Justicia Transicional (Nueva
York).
6 BICKFORD, Louis, En El Tiempo, septiembre 7 de 2008.
7 Ibíd.
8 HALBWACHS, Maurice. Los marcos sociales de la memoria.
Barcelona: Anthropos, 2004.
9 En Los abusos de la memoria, Todorov esboza esta idea para
dar a la memoria un carácter político.

12
Sociología

da condiciones de igualdad a la memoria y a la En Colombia, el arte y la memoria añaden a las


víctima. La memoria se permite utilizar lo aconte- acciones colectivas un componente transformador,
cido con vistas al presente, para que por medio de el cual genera identidad colectiva y una critica po-
estos sucesos se pueda luchar contra las injusticias lítica a la realidad colombiana. En estos casos, el
que se producen hoy en día. En tiempos de con- arte va más allá de lo estético, es una responsabi-
flicto, la memoria debe ir encausada a visibilizar lidad social dentro del contexto cultural y simbólico
las víctimas a través del arte, y de las dinámicas que influye en la construcción de una memoria
que se instalan en éste. Por esta razón, las ideas ejemplar para un país que, al parecer, tiene poca
de muchos artistas contienen un sentido que invita memoria.
a la responsabilidad y solidaridad, ya que la me-
moria remueve, voluntaria o involuntariamente,
lo que yace adormecido en el suelo de la mente, BIBLIOGRAFÍA
haciendo de las experiencias privadas y violentas
algo publico y demandable. ALEXANDER, J. C. Pragmática cultural: Un nuevo
modelo de performance social. En Revista Colom-
Una de las exposiciones artísticas más importan- biana de Sociología. Bogotá. No. 24 (2004); p 19.
tes que se han presentado en Colombia sobre el
tema de la violencia, tuvo ocasión el año pasado. BICKFORD, Louis, En El Tiempo, septiembre 7 de
Los Desaparecidos, curada por Laurel Reuter10, 2008.
confirma que
HALBWACHS, Maurice. Los marcos sociales de la
… los artistas no han sido inmunes, y a lo lar- memoria. Barcelona: Anthropos, 2004.
go de los años artistas latinoamericanos han
creado obras en torno a los desaparecidos.
Muchos de ellos han vivido los regimenes mi- JELIN, Elizabeth. Los Trabajos de la memoria. Ma-
litares, han sido víctimas de la persecución, o drid: Siglo XXI, 2002.
han sufrido la desaparición de un ser querido
a manos de las dictaduras. Otros viven en paí- LINDÓN, Alicia. Narrativas autobiográficas, me-
ses como Colombia, azotados por la violencia moria y mitos: una aproximación a la acción social.
y una lucha armada que parece no tener fin11. En Revista economía, sociedad y territorio. México.
Vol. II, No. 6, (Julio-Diciembre de 1999).
Esta exposición fue catalogada por The New York
Times como “la muestra más poderosa de arte Recuerdos de los desaparecidos. En El Tiempo.
contemporáneo, político o de cualquier clase”12, Septiembre 10 de 2008.
lo cual demuestra cómo el arte permite influir en
ese marco político. REUTER, Laurel. Los Desaparecidos (catálogo de
Exposición). Bogotá: MAMBO, 2008.
La relación entre la memoria y el arte es un claro
ejemplo de cómo se soslaya más allá de lo jurídi- SÁNCHEZ, Gonzalo. En El Espectador, septiembre
co, pues los artistas exploran la posibilidad de pro- 7 de 2008.
nunciarse frente a crímenes de Estado y de grupos
al margen de la ley que afectan a la población co- STERN. Steve. J. De la memoria emblemática: ha-
lombiana. En este sentido, esta pronunciación ya cia el recordar y el olvidar como proceso histórico
no sólo se hace desde los estrados, sino también (Chile 1973-1998). En www.cholonautas.com
desde escritos, guiones, trabajos cinematográficos
y artísticos, y es allí donde el arte es una demanda
Todorov, Tzvetan. Los abusos de la memoria.
contra la impunidad y el olvido.
Buenos Aires: Paidos, 2000.

10 Directora del North Dakota Museum of Art.


11 REUTER, Laurel. Los Desaparecidos (catálogo de Exposición).
Bogotá: MAMBO, 2008.
12 Recuerdos de los Desaparecidos. En El Tiempo. Septiembre
10 de 2008.

13
Movimiento

LO SOCIAL COMO MUSA DE INSPIRACIÓN


DE LOS ARTISTAS CONTEMPORÁNEOS

JAYDER E. ORSINI URIBE


ARTES PLÁSTICAS. X SEMESTRE
UNIVERSIDAD POPULAR DEL CESAR
chityrock@hotmail.com
No hay identidad sin la presencia de los otros.
jorsinis.u@gmail.com No hay identidad sin alteridad.

Marc Augè

De acuerdo con Anna María Guasch, al abordar tanto, parece posicionarse como un gran campo
los procesos de las prácticas artísticas que dieron que ha construido toda una estructura compleja de
forma a múltiples tendencias y movimientos como pensamiento, en estrecha relación con las diferen-
vanguardias históricas (cubismo, dadaísmo, su- tes disciplinas de las ciencias sociales y humanas,
rrealismo, minimalismo, entre otros) a través de la como son la filosofía, la sociología del arte, la etno-
historia del arte, logía y la antropología, entre otras. En ese sentido,
y de acuerdo a lo planteado por el filósofo y crítico
… podemos observar cómo estas han sufrido francés Yves Michaud, cuando se trata de visionar
una transformación emblemática y simbólica, el museo del futuro en relación con la producción
en las últimas tres décadas, en donde se han artística, y si se observa a éste como un centro de
reconfigurado de manera sustancial difumi- servicios culturales parecido a Disneylandia:
nando barreras y expandiéndose a campos que
vislumbran nuevos procesos socioculturales,
el arte deja de mirarse a sí mismo, en ese acto
políticos, económicos y tecnológicos, tomando
narcisista (el arte por el arte), y comienza a mi-
como referente dos temas que se nos presentan
rar a su alrededor y a indagar por todos esos
hoy con suma importancia en el campo del arte
procesos socioculturales, urbanos y tecnológicos
y las ciencias sociales y humanas, como lo son:
que emergen y circundan día a día la interac-
los estudios culturales y el multiculturalismo en
ción de los individuos y sociedades (imaginarios
relación con las prácticas artríticas contempo-
urbanos, intersubjetividades, alteridades, mar-
ráneas o emergentes1.
ginalidades, etc.); dejándose de parecer cada
vez más a sí mismo y, por el contrario, tomando
En efecto, si se analiza la direccionalidad del arte formas en las que se ven representados feha-
actual o contemporáneo, se concluye que éste se cientemente todos los contextos y las estructu-
ha desbordado a infinitas formas de manifestacio- ras sociales, culturales, políticas, económicas y
nes-representaciones y materializaciones de ideas, tecnológicas de donde se origina: el pueblo, la
en donde emergen tantas técnicas como artistas región, el país, etc.2
existentes, por lo que se abre un abanico de po-
sibilidades en todo el mundo del arte. El arte, por

1 GUASCH, Anna María. El Arte último del siglo XX: del pos 2 MICHAUD, Yves. El Arte en estado gaseoso. En http://flagelo-
minimalismo a lo multicultural. Madrid: Alianza, 2000, p. 17- paraarmar.blogspot.com/2008/01/tambin-la-belleza-encon-
23. china-la-casa.html

14
Sociología

De ahí que la inspiración de los artistas contempo-


ráneos ya no sea los dioses greco-romanos o egip-
cios, basada en una concepción de la producción
como resultado de un acto divino, sino los mismos
procesos en los que ellos se ven involucrados coti-
dianamente, procesos que facilitan o dificultan su
desempeño en el plano social. Todos estos aspec-
tos son evidenciados por los artistas actuales, pues
son estos mismos los que constituyen simbólica,
ética y estéticamente “las nuevas obras de arte”3.

Por consiguiente, somos espectadores de una nue-


va era, tal y como lo señala el antropólogo francés
M. Augè:

…una era sobremoderna que al parecer está


signada por todo un sinfín de hechos paradóji-
cos que se entretejen generando por ende una
gran telaraña que comunica semánticamente
una cosa con otra, mostrándonos desde la her-
menéutica y la semiótica una reconfiguración
de lo social, ya no a partir de lo racional sino,
al parecer, de lo irracional4.

El mundo del arte no es ajeno a estas realidades.


Estas mismas transformaciones, al parecer paradó-
jicas, han marcado el paso de un contexto a otro,
lo cual se ve reflejado, por ejemplo, en el cambio
de un arte nacionalista a una diáspora artística,
de la autoría a la muerte del autor, de una era del
arte a una era después del arte5; en síntesis, se
impone la visión de una globalización que lo une
todo pero que a su vez nos hace más individualis-
tas. Todos estos procesos son los que constituyen
y estructuran el mundo del arte hoy: un mundo
que va dando forma a nuevos paradigmas y nue-
vas tendencias y necesidades de vida, ante los
cuales, las practicas artísticas emergentes buscan
dar respuesta a partir de sus diversas representa-
ciones. De esta manera, nos encontramos con un
arte contemporáneo que se acciona y se perpetúa
diversa y dinámicamente, y que ha adquirido la
capacidad de construir y reconfigurar contextos y
estructuras socioculturales y políticas, tal y como lo
señala el artista colombiano Antonio Caro, a quien
más adelante retomaremos.

3 GARCÍA CANCLINI, Néstor. Imaginarios urbanos. Buenos Ai-


res: EUDEBA, 1999.
4 AUGÈ, Marc, Los no lugares, espacios del anonimato, una an-
tropología de los mundos contemporáneos. Barcelona: Gedi-
sa, 1992.
5 DANTO, Arthur. Después del fin del arte. El arte contemporá-
neo y el linde la historia. Barcelona: Paidós, 1999.

15
Movimiento

Entre todas las transformaciones, quizá la más


notable, simbólica y emblemática sea la transfor-
mación sustancial del espacio expositivo (salas de
exposiciones, museos, galerías, entre otros), recin-
tos que a través de la historia han validado, jerar-
quizado y regulado todo el proceso de las produc-
ciones artísticas (y a los mismos artistas), espacios
que de acuerdo a las nuevas necesidades de in-
teracción de la obra de arte y el artista como tal,
han sido cuestionados y soslayados para dar paso
a nuevos lugares. En este contexto de innovación,
las ciudades y sus habitantes se nos presentan
como “el gran salón expositivo”, donde convergen
múltiples escenarios (parques, carreteras, plazas,
casas, terrenos baldíos, etc.); espacios emancipa-
dos y emancipadores, cargados de lecturas que se
articulan y emergen de todo un imaginario social
(el imaginario de lo publico y lo privado, lo valo-
rado y lo fútil, lo vitalicio y lo efímero, etc.). Son
estas nuevas estructuras las que le dan ese sentido
diverso, abierto y multicultural al arte de hoy.

Los nuevos espacios expositivos emergen de la


pugna y las intersubjetividades de quienes los ha-
bitan o quienes se resisten a salir de ellos. Hacien-
do alusión a lo escrito por Mayra Santos Febres:

… si los poderosos eran los dueños indiscuti-


bles de ‘la ciudad’, los sometidos se apropiaron
de ‘la calle’6; espacios donde las obras interac-
túan con todo un conjunto de dispositivos que
la ‘rodean’ y deciden, desde esa exterioridad,
su efectivo valor estético y social.7

En ese sentido, la “obra de arte” adquiere el carác-


ter de obra de arte a partir de su interacción con
el entorno o contexto en donde se desenvuelve o
acciona.

Por tanto, el tiempo es el gran prefecto y elemento


conceptual de toda “obra de arte” actual. Es aquí
donde

… reflexionar sobre el espacio público nos


obliga a pensar el espacio como recurso, como
producto, como práctica (sexual, social, políti-
ca, simbólica), como escenario de producción

6 SANTOS FEBRES, Mayra. Arte público, espacio Caribe. 2006.


En http://www.caratula.net/Archivo/N17-0407/Secciones/
Critica/critica-arte%20publico.html
7 BREA, José Luís. El tercer umbral. Estatuto de las prácticas ar-
tísticas en la era del capitalismo cultural. Barcelona: Funda-
ción cajamurcia, 2004, p. 15.

16
Sociología

de especialidades inéditas, en correspondencia


con distintos proyectos culturales ‘emergentes’
y en pugna8.

El espacio es entonces el gran crisol donde se fun-


den identidades.

A pesar de que no se ha consolidado una historia


del arte nacional, es importante resaltar el pleno
y continuo desarrollo de las artes visuales en Co-
lombia, al proyectar, en gran medida, mitologías
personales −artistas que de forma aislada y des-
articulados de cualquier tendencia o movimiento
han impulsado y dado forma a todo un proceso
artístico−, como lo han sido Beatriz González, Ber-
nardo Salcedo (Q.E.P.D), Doris Salcedo y Antonio
Caro, entre otros. Este último, ha sentado grandes
e importantes precedentes en la configuración de
un estado del arte en nuestro país, postulando todo
un proceso de arte conceptual, mediante el cual ha
generado un gran campo discursivo que denuncia
episodios violentos (por ejemplo, en la obra titula-
da Aquí no cabe el arte, 16 pliegos de pintura so-
bre cartulina, de 1972), problemáticas económicas
(en la obra titulada Todo está muy caro, xilogra-
fía, 1978), como también procesos de identidad y
desidentidad nacional (en la obra titulada Colom-
bia, esmalte sobre metal,1976). Así mismo, Caro
ha tomado posición ante la problemática sobre el
aborto en el país (en la obra titulada Malparidos:
luchemos porque el aborto sea reconocido como un
derecho fundamental para que en Colombia haya
menos malparidos, volantes impresos, 2005)9.

Todos los artistas mencionados con anterioridad


han representado fiel, simbólica y estéticamente,
mediante sus procesos artísticos, todo el contexto
de los diferentes problemas de nuestro país, en
especial la violencia histórica que nos aqueja. En
consecuencia, han entrado a hacer parte del siste-
ma internacional del arte. Antonio Caro, un artista
que aún nos sigue sorprendiendo con sus postula-
dos y acciones artísticas, afirma lo siguiente:

8 REMEDI, Gustavo. “La ciudad latinoamericana S.A. (o el asalto


al espacio público)”, Montevideo, Escenario 2, No. 1, abril,
2000.
9 RUBIANO CABALLERO, Germán. Arte moderno en Colombia:
de comienzos de siglo a las manifestaciones más recientes,
en http://www.lablaa.org/blaavirtual/historia/colhoy/colo13.
htm

17
Movimiento

he dejado de ser un artista que produce ‘obras GARCÍA CANCLINI, Néstor. Imaginarios urbanos.
de arte’, para convertirme en un artista activo Buenos Aires: EUDEBA, 1999.
dinámico y continuo en el plano social, donde
me involucro viviendo en carne y hueso todas
GUASCH, Anna María. El arte último del siglo XX:
esas problemáticas que aquejan a nuestra
sociedad.
del posminimalismo a lo multicultural, Madrid:
Alianza, 2000, p. 17-23.
Este artista ha recogido tantas experiencias me-
diante talleres artísticos de mediación-creación en MICHAUD, Yves. El Arte en estado gaseoso. En:
poblaciones de “no artistas”, sensibilizando y utili- http://flageloparaarmar.blogspot.com/2008/01/
zando el arte como acción mediadora del contexto tambin-la-belleza-enconchina-la-casa.html
social.
REMEDI, Gustavo. La ciudad latinoamericana S.A.
Así pues, y de acuerdo a lo ya planteado sobre (o el asalto al espacio público). Montevideo, Esce-
el arte actual, Colombia no ha sido la excepción nario 2, No. 1, abril, 2000.
de todas estas transformaciones, ya que obedece
a toda una tradición artística que no es ajena a RUBIANO CABALLERO, Germán. Arte moderno en
las diversas tendencias, al influjo renovador de Colombia: de comienzos de siglo a las manifes-
los procesos socioculturales y a la pluralidad de taciones más recientes. En http://www.lablaa.org/
los caminos que exploran las diferentes prácticas blaavirtual/historia/colhoy/colo13.htm
artísticas (plásticas y visuales) contemporáneas
emergentes. SANTOS FEBRES, Mayra. Arte público, espacio
Caribe. En http://www.caratula.net/Archivo/N17-
0407/Secciones/Critica/critica-arte%20publico.
BIBLIOGRAFÍA
html
AUGÈ, Marc. Los no lugares, espacios del anoni-
mato, una antropología de los mundos contempo-
ráneos. Barcelona: Gedisa, 1992.

BREA, José Luís. El tercer umbral. Estatuto de las


prácticas artísticas en la era del capitalismo cul-
tural. Barcelona: Fundación Cajamurcia, 2004, p.
15.

DANTO. Arthur. Después del fin del arte. El arte


contemporáneo y el linde la historia. Barcelona:
Paidós, 1999.

18
Sociología

LA DELIMITACIÓN DEL ÁMBITO ESTÉTICO


Y SU RELACIÓN CON LA POLÍTICA

RED REVUELTA
www.redrevuelta.tk

Para pensar la relación entre estética y política, Si bien es complicado afirmar un vínculo necesario
es decisivo, en primera instancia, considerar los l’art pour l’art entre y la estetización de la política,
problemas que surgen cuando se procura hacer sosteniendo, por ejemplo, que la autonomía abso-
una delimitación del ámbito de lo estético. Cier- luta del arte desemboca ineludiblemente en usos
tamente, fue Walter Benjamin uno de los primeros fascistas, es claro que el arte autorreferencial deja
en captar la profunda peligrosidad de la preten- abierta la posibilidad de que la política sea esteti-
sión de l’art pour l’art: abogar por el arte como zada. De allí la importancia de poner en cuestión
un ámbito separado y diferenciado de todas las esta concepción de la estética que asevera que el
otras esferas culturales humanas. La afirmación arte se basta a sí mismo.
de que el arte vale por sí mismo, y que es inde-
pendiente de cualquier consideración extraestética Sin embargo, tal vez la estética no deba ser consi-
–sea esta cognitiva, histórica, ética, económica o derada como una esfera totalmente independiente
de otro tipo–, puede generar nefastos efectos si de las otras expresiones humanas. Sin duda, en
se traslada a la esfera política. Precisamente, esta las preocupaciones de los clásicos del marxismo
manera de concebir la autonomía del arte puede por el arte, se encuentran valiosos aportes a esta
conducir a lo que Benjamin llamó “estetización de discusión. Para el marxismo, la obra de arte no es
la política”1. El ejemplo más palpable de esta for- ajena a la historia; ella es producida en un periodo
ma de estetización es la aplicación de criterios de histórico determinado y, por ende, conserva una
lo bello a la guerra y, por ende, de la exclusión de relación muy particular con su época. Esta relación
toda pauta extraestética en la evaluación de dicho es usualmente abordada por medio de la catego-
acontecimiento. ría filosófica del “reflejo”, de la cual se valió Lenin
para llamar a León Tolstoi “espejo de la revolución
rusa”2. Como veremos más adelante, la categoría

1 BENJAMIN, Walter. La obra de arte en la época de su repro- 2 MACHEREY, Pierre. Lenin, crítico de Tolstoi. En A.A.V.V. Litera-
ductibilidad técnica. En Discursos Interrumpidos I. Madrid: tura y sociedad. Buenos Aires: Editorial Tiempo Contemporá-
Taurus, 1982. neo.

19
Movimiento

del reflejo, que es comúnmente malentendida y ha ella. Canetti muestra, entonces, que los espacios
dado lugar a muchas confusiones, no alude a una arquitectónicos no son recipientes vacíos o neutra-
relación mecánica e inmediata entre la obra de les, sino que tienen el poder de darle forma a las
arte y la historia. Por el contrario, distanciándose masas. Así, refiriéndose a algunas de las construc-
del conocido realismo socialista, la categoría del ciones que Hitler buscaba realizar, Canetti señala
reflejo proporciona una importante aproximación lo siguiente:
a la relación entre estética y política.
Estas construcciones e instalaciones, que ya en
En su agudo ensayo “Hitler, según Speer”, Elías el papel tienen algo frío y reservado debido
Canetti evidencia el sorprendente vínculo entre los a sus dimensiones, están, en el espíritu de su
proyectos arquitectónicos de Hitler y el nacional- constructor, llenas de masas que se comportan
diversamente según el tipo de recipiente que
socialismo. Así, por medio de un examen de las
las contenga o el grado de limitación que les
obras que Hitler le encargaba a su arquitecto Al- sea impuesto4.
bert Speer, se revela una conexión palpable entre
estética y política. Esta conexión puede ser aborda-
De esta manera, Hitler –como buen conocedor de
da en dos sentidos principales.
la masa–, proyectaba la construcción de plazas gi-
gantescas para que la “masa abierta” tuviera la
Por un lado, es notorio el influjo de l’art pour l’art posibilidad de seguir creciendo, como también la
y, por tanto, de la primacía de la grandeza del pro- elaboración de edificios de tipo cultual para la re-
yecto arquitectónico sobre cualquier consideración petición de las “masas cerradas”, o la edificación
social relacionada con el bienestar de la ciudada- de estadios deportivos, de forma circular, en donde
nía. Precisamente, reseñando el entusiasmo de la masa pudiera verse a sí misma5. Así pues, en
Hitler por superar los monumentos arquitectónicos este modo de estetización de la política, el artista-
más significativos de la historia de la humanidad, gobernador intentaba dar forma a las masas según
Speer recuerda lo siguiente: “Su pasión de cons- su voluntad. Ciertamente, esta forma de estetiza-
truir para la eternidad lo llevó a desinteresarse ción era promulgada por Mussolini cuando afirma-
totalmente de las estructuras de la comunicación, ba que las masas eran como cera en sus manos6, o
las urbanizaciones y las áreas verdes: la dimensión por el mismo Hitler, quien elaboraba los proyectos
social le era indiferente3”. arquitectónicos que hemos reseñado para crear
espacios totalitarios en los cuales las masas pasi-
Es evidente que la indiferencia frente a la “dimen- vas eran despojadas del diálogo y la posibilidad de
sión social” es la otra cara de una arquitectura que distinguirse como individuos con una pluralidad de
sólo se interesa por el aspecto decorativo y sim- intereses, opiniones y modos de ser. Lo llamativo
bólico. Por ejemplo, al ordenar la construcción de es que, como se había mencionado anteriormente,
una gran vía, Hitler tenía como único criterio su la noción de un artista-gobernador está estrecha-
valor estético y se despreocupaba por solucionar mente relacionada con l’art pour l’art y la inclu-
los problemas de transporte. sión de criterios estéticos en el ámbito político. El
artista-gobernador ve la política como una obra de
No obstante, estrechamente conectado con esta arte cuyo único criterio es estético; su intención es
relación entre estética y política, Canetti pone en realizar su obra permaneciendo indiferente frente
evidencia un segundo sentido en que se hace pa- a cualquier otro factor. Más aún, teniendo esto en
tente la estetización de la política. En la reseña de cuenta, él quiere realizar su modelo de manera
los proyectos arquitectónicos de Hitler se vislum- total; su idea debe ser realizada plenamente. Por
bra que la arquitectura no puede ser divorciada esta razón, las masas son moldeadas por un sujeto
de sus usos políticos. Lo interesante es que esta que crea su propia obra de arte, según su volun-
relación entre arquitectura y política no es mera-
mente instrumental, sino que existe una conexión
4 Ibid., p. 226.
esencial entre el tipo de construcción arquitectó-
5 Ibid, p. 224-225.
nica y las personas que son contenidas dentro de
6 JAY, Martin. La ideología estética como ideología o ¿qué sig-
nifica estetizar la política?. En Campos de fuerza. Entre la
3 CANETTI, Elías. “Hitler según Speer”. En La conciencia de las historia intelectual y la crítica cultural. Buenos Aires: Paidós,
palabras. México: F.C.E., 1981, p. 231. 2003, p. 148.

20
Sociología

tad. En el totalitarismo se manifiesta, entonces, la


transferencia de los principios de l’art pour l’art a
la política.

Hasta el momento hemos tratado de mostrar que


existe una estrecha conexión entre la autonomía
absoluta del arte y la estetización de la política. Tal
vez sea problemático afirmar que la conexión es
“necesaria”, pero, definitivamente, este vínculo sí
es una posibilidad que se concibe en el momento
de iniciar una defensa de l’art pour l’art. Tanto en
el caso de lo expuesto por Benjamin como en lo re-
saltado por Canetti, se pone en evidencia una pe-
netrante relación entre la autonomía total del arte
y las formas totalitarias de la política. Sin embargo,
¿es esta la única relación que puede existir entre
estética y política?, ¿está condenada esta relación
a una estetización de la política y, por ende, a una
vinculación del arte con el fascismo o el nacional-
socialismo? Nuestra intención es, notoriamente,
mostrar que aquella opción no es la única vía. Sin
embargo, para apoyar esta afirmación tal vez sea
necesario abandonar la autonomía absoluta del
arte y pensar que la estética, en la medida en que
está vinculada con la historia y la sociedad, puede
relacionarse con una política libre de visos totalita-
rios. De ahí la necesidad de abordar el problema
que hemos venido considerando desde una óptica
marxista.

Pierre Macherey, en su artículo “Lenin, crítico de


Tolstoi”, comienza señalando que, para Marx y En-
gels, la estética marxista permaneció como un pro-
yecto nunca realizado7. Aunque reconoce las alu-
siones que dichos pensadores hicieron al arte en
varias de sus obras, Macherey es enfático en afir-
mar que ellos nunca llegaron a realizar un estudio
exclusivo sobre la estética. Es por esta razón que
el filósofo francés considera como una excepción
los escritos que Lenin dedicó a Tolstoi entre 1908
y 1911. Estos escritos surgen, fundamentalmente,
de la necesidad de una reflexión política, razón por
la cual iluminan de manera muy aguda la función
de la obra de arte en este tipo de reflexión. León
Tolstoi adquiere tal grado de importancia en las
tareas políticas inmediatas de Lenin, que por esa
época se le escuchó decir que se debía examinar
con cuidado la obra del escritor ruso y difundir sus
escritos en millares de ejemplares. Pero, ¿qué es lo
que le interesa a Lenin de la obra de Tolstoi? Lenin

7 Macherey, op. cit., p. 37.

21
Movimiento

ve en este autor el espejo de la revolución, es de-


cir, ve en sus escritos el carácter situado del artista
y de su obra. El arte no puede ser ajeno a su época
y a la sociedad determinada de la cual surge.

Más allá de lo anterior, la obra de arte, al ser un


reflejo de las relaciones de contradicción de un
periodo histórico, no es una totalidad comple-
ta, sino una creación fragmentaria, conflictiva y
desarmónica. En contraposición a la postura del
arte absolutamente autónomo que reseñamos con
anterioridad, según la cual la obra de arte es el
producto “pleno” de un proyecto subjetivo, en la
teoría del reflejo la obra de arte nunca encuentra
un cierre definitivo. Ahora bien, es justamente este
carácter abierto de la obra, que no permite que
ella se agote como la manifestación de una verdad
esencial o como la expresión acabada de una épo-
ca, lo que genera efectos políticos muy distintos a
los que analizamos en el caso de l’art pour l’art.

En la medida en que, para Lenin, la obra de arte


no es una reproducción exacta de la realidad, sino
un reflejo fragmentado, se abre la posibilidad de
que se cree cierta distancia frente a la época y así
se reflexione sobre ella. De la misma manera, si
la obra no es una mera copia de lo cotidiano, sino
un descentramiento respecto a la inmediatez de
los acontecimientos, el estado de cosas existente
es profundamente cuestionado. De esta manera,
la categoría del reflejo rechaza la estetización de
la política. No se presenta aquí la transferencia
de criterios estéticos a la política, sino el recono-
cimiento de que, en la medida en que la obra no
es ajena a la historia y a la sociedad, la estética
puede proponer distintas miradas de la realidad
que, consecuentemente, generan efectos políti-
cos liberadores. Tal vez esto era lo que tenía en
mente Lenin cuando proyectaba editar millares de
ejemplares de la obra de Tolstoi; su interés no era
la mera denuncia o la propaganda, sino que su
motivación se nutría de la confianza en los efectos
progresistas de los libros del escritor ruso.

22
Movimiento

LA MEMORIA COLECTIVA Y LAS


PRÁCTICAS ARTÍSTICAS
JANNETH ALDANA CEDEÑO*
PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA
janneth.aldana@javeriana.edu.co.

La presente reflexión parte de un proceso inves- ciones, pero, sobre todo, como medio de compren-
tigativo a propósito de la relación entre diversas sión de aquello que aparece inaprensible desde
prácticas artísticas y el lugar que estas ocupan en mecanismos “racionales” o “instrumentales”.
la permanente (re)configuración de la memoria co-
lectiva1. De tal manera, se presta especial atención El arte es un espacio especializado de la cultura,
al espacio público de la memoria en consonancia y de esta manera, ocupa un lugar central en los
con aspectos políticos que promueven u ocultan, procesos simbólicos que es explicitado en la crea-
visibilizan o esconden, relatos e historias colectivas ción de las obras propiamente artísticas. Sin em-
que han sido consciente o inconscientemente mo- bargo, el interés aquí no radica en analizar tales
deladas en el entrecruce de diversos discursos. obras en sí mismas, ni siquiera en acercarse a un
campo de producción y consumo que actualmente
Este ámbito aparece gracias, en gran parte, a la se encuentra altamente determinado por reglas
búsqueda de espacios alternativos, o por lo menos propias, a propósito de lo que merece o no lla-
lo suficientemente apartados de los oficiales, como marse arte. Estas discusiones se desenvuelven en
escenarios en los que las personas buscan exponer mayor medida entre los propios artistas, los espec-
sus propios discursos, altamente emotivos y sensi- tadores y una serie de intermediarios que posibi-
tivos, cuando tales canales se han cerrado. De esta litan la interrelación entre ambos. En este caso, el
manera, desde diversas representaciones en pla- abordaje sobre las prácticas artísticas se presenta
zas públicas, performances, acciones cotidianas y como correlato de formas disidentes, subordina-
elaboración de monumentos, entre otras múltiples das y/o alternativas de contar sucesos, opuestas a
prácticas, numerosos grupos sociales encuentran la construcción de relatos oficiales que contribuyen
un camino abierto para plantear abiertamente sus particularmente a la configuración de la memoria
esperanzas e ilusiones, sus decepciones y frustra- colectiva, aunque la mayoría de las veces no nu-
* Docente investigadora del Departamento de Sociología de la
tran la historia oficial.
Pontificia Universidad Javeriana.
1 La investigación se centra en el desarrollo de determinadas El arte no sólo cuestiona las formas impuestas a
prácticas artísticas como intento de reconfiguración de memo-
rias colectivas en escenarios violentos. En este caso particular, través de las cuáles se recuerda y se determina lo
se trata de la masacre de Trujillo (Valle del Cauca, Colombia). que merece o no ser conmemorado, sino que tam-
Más adelante se harán las precisiones pertinentes para este
caso.
bién se convierte en un nuevo e importante espa-

24
Sociología

cio para grupos que han sido marginados y exclui- cias, como un botón de encendido que pone a ju-
dos de la historia oficial, no sólo porque ellos no gar toda la construcción de un rompecabezas con
aporten en su escritura, sino porque muchas veces piezas variantes gracias a la acción del tiempo. La
llegan a ser ignorados como sujetos participantes memoria, aunque pueda entreverse en manifesta-
en la misma. Es así como desde el arte, un arte ciones individuales, no puede darse sin la memo-
más ligado con lo cotidiano y lo popular que con la ria de los otros. Así, la pregunta central del autor
estrechez de las reglas artísticas, se re-configuran se orienta sobre los mecanismos de evocación de
recuerdos individuales y colectivos que miran de tales recuerdos, ya que la memoria colectiva no
otra forma al pasado, buscando alejarse de cons- es igual que la memoria histórica; aquella puede
trucciones hegemónicas en la proyección de un fu- ser múltiple y continua, mientras que la segunda
turo más cercano a las necesidades e identidades puede ser como “…un cementerio donde el es-
de los grupos que recurren a él2. pacio está limitado, y donde hay que encontrar
constantemente sitio para nuevas tumbas”5. Las
dimensiones que cobran el tiempo y el espacio en
Arte y memoria
la(s) memoria(s) colectivas(s) poco tienen que ver
La memoria no es una condición biológica, sino con las construidas por la historia, por los histo-
que se trata de una construcción social. Por tanto, riadores. En la construcción del pasado actúa la
el hecho de recordar, la manera en que se hace y sociedad en su conjunto.
justamente lo que se recuerda, no corresponde a
una capacidad innata o a una reproducción lite- Y este ámbito es en el que el arte ofrece nuevos
ral de los sucesos plasmados en un relato. Por el escenarios, al revisar dicha historia elaborada a
contrario, hay una serie de intervenciones que van través de las clásicas “fuentes escritas”, de las cua-
desde lo social hasta lo más íntimo, involucrando les beben los agentes autorizados (historiadores,
profundamente sentimientos y emociones. Ya Mar- periodistas, académicos, políticos). El arte cues-
cel Proust3 mostraba cómo sus propios recuerdos, tiona los mecanismos tradicionales que obligan
en un orden que poco correspondía con aquél en a recordar a la mayoría de la opinión pública la
el cual se fueron cimentando, involucraban im- forma en que sucedieron determinados sucesos
presiones particulares, momentos específicos y y la responsabilidad de los agentes involucrados
sensaciones concretas en un relato que articula el en ellos. De esta manera, el arte cumple un papel
presente con el pasado. central en la revaluación de los recuerdos colecti-
vos e individuales, no sólo para replantear el pa-
Halbawchs4 plantea así que la mayoría de los re- sado y las versiones hegemónicas que se tienen de
cuerdos aparecen cuando son evocados, es decir, éste, sino como mecanismo de resistencia a través
que no tienen ninguna emergencia automática, de la cultura popular.
sino que dependen de determinadas circunstan-
El caso de la masacre de Trujillo (Valle del Cau-
2 Esta es, por ejemplo, la orientación hacia la caracterización ca, Colombia), se presenta como una construcción
del arte no sólo como discurso oculto (en la categoría plantea- desde abajo de una nueva forma de historizar en
da por Scott, referida al empleo del arte como formas de disi-
dencia y resistencia al discurso público), sino como expresión contra del olvido, e incluso en contra de las formas
explícita y abierta de posturas frente a los sucesos, en bús- como agentes estatales construyen la historia des-
queda de la comprensión de éstos y de la impresión emotiva y de las mesas de diálogo y negociación, y lo que
sensorial que permita otro tipo de apropiación. Véase: SCOTT,
James. Los dominados o el arte de la resistencia. Discursos permiten o no conocer públicamente. Cuando los
ocultos. México: Era, 2000. mecanismos de participación política, y más aún
3 PROUST, Marcel. En busca del tiempo perdido. Madrid: Alian- los de decisión, se encuentran cerrados para la so-
za, 2001. Imposible señalar cada uno de los pasajes de un li-
bro que en toda su narrativa se nutre de los recuerdos propios ciedad civil (que en este caso particular ha ocupado
del autor, evocados por diversos olores, sensaciones y pala- el lugar de simple espectadora), aparecen otras di-
bras, en la elaboración de un relato que también reconstruye námicas que posibilitan no sólo a las víctimas sino
una época.
a la opinión pública en general encontrar rutas
4 “Es en este sentido que existiría una memoria colectiva en
los marcos sociales de la memoria, y es en la medida en que hacia distintas formas de aprehensión de la rea-
nuestro pensamiento individual se reubica en esos marcos
y participa en esta memoria que sería capaz de recordar”.
HALBAWCHS, Maurice. Los marcos sociales de la memoria. 5 HALBAWCHS, Maurice. La memoria colectiva. Zaragoza:
Barcelona: Anthropos, 2004, p. 10. Prensas Universitarias de Zaragoza, 2004, p. 57.

25
Movimiento

lidad y visibilización colectiva. Es entonces cuando


se hace uso de algunos lugares cuya construcción
se destinó como manera de consagración de quie-
nes se ubican en posiciones hegemónicas; la plaza
pública se convierte en espacio de resistencia de
quienes, al no encontrar otros, ocupan los que aún
no han sido privatizados.

De esta manera, se toma el espacio público en el


que memorias particulares y colectivas han sido
conscientemente destruidas por medio de los in-
formes oficiales y del manejo de la información
desde los medios masivos. Para contrarrestar esto,
surgen iniciativas de la sociedad civil que se han
manifestado a través del arte, reconstruyendo el
pasado desde los aspectos políticos de las memo-
rias suprimidas y silenciadas que, al darles voz,
permiten otras interpretaciones de estos sucesos.

El parque monumento a las víctimas de los


hechos violentos de Trujillo

Frente al conflicto armado por el que desde hace


varios años atraviesa el país, y especialmente en
relación con distintos procesos de paz como el que
se está llevando a cabo actualmente con los grupos
paramilitares (“Justicia, Paz y Reparación”), uno de
los grandes interrogantes que se presenta se re-
fiere a las consecuencias de privilegiar la justicia
sobre la verdad, es decir, de enjuiciar y condenar a
los “culpables” en el marco de procesos que ofrez-
can garantías y rebaja de penas, en detrimento del
conocimiento de la verdad de los hechos y, por ob-
vias razones, en la posibilidad de una reparación a
las víctimas que sobrepase las simples asignacio-
nes monetarias. Así pues, los reclamos actuales de
la sociedad civil se orientan a la superación de la
impunidad reinante que promueve el olvido como
estrategia para intentar “devolver” a la sociedad a
un estado previo (antes del conflicto, como tiempo
imaginario), sin mayores consecuencias para los
responsables directos e indirectos, por acción o por
omisión, de crímenes de lesa humanidad.

Como se mencionó anteriormente, a pesar de los


fallos legales y jurídicos (y de ahí en adelante los
económicos, sociales, etc.), los grupos que carecen
de las herramientas para hacer presencia en es-
pacios públicos y oficiales, establecen nuevos me-
canismos de visibilización a través de la memoria
popular. Este es el caso del parque monumento en

26
Sociología

Trujillo. Después de años de silencio, por iniciativa


de la sociedad civil y de algunas comunidades re-
ligiosas se ha erigido un parque monumento que
tiene el fin de mantener en la memoria la identi-
dad de las víctimas, y al mismo tiempo sirve como
lección con miras al futuro, frente al incompleto
proceso educativo y pacificador que lleva al final
de estos conflictos sangrientos. Este, como se men-
cionó anteriormente, es sólo uno, entre muchos
ejemplos. No sólo en Colombia, sino también en
el resto de América Latina, las expresiones artísti-
cas, que no provienen exclusivamente de los pro-
fesionales, se han convertido en el mejor vehículo
de expresión de las inconformidades sociales: en
Perú, por ejemplo, como protesta contra el gobier-
no de Fujimori, se elaboraron grandes muñecones
caricaturescos; en el sur de México, las instala-
ciones sirvieron como forma de protesta contra el
asesinato sistemático de mujeres; en Argentina,
ha adquirido gran reconocimiento el movimiento
de las “Madres de la Plaza de Mayo”; en Colom-
bia, con la reciente toma de la plaza de Bolívar, “El
campo se toma a la ciudad” frente al problema del
desplazamiento, y se destacaron también las di-
versas instalaciones en el mes de octubre del 2007
con las pertenencias de los asesinados de la Unión
Patriótica, entre otros casos.

Ahora bien, pese a que la construcción del parque


monumento a las víctimas de los hechos violentos
de Trujillo fue concebida inicialmente por recomen-
dación de la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos de la Organización de los Estados Ame-
ricanos, éste ha sido impulsado y preservado por
los familiares de las víctimas y por otros miembros
de la comunidad. Dicha comisión conoció inicial-
mente 63 casos violentos de violaciones graves de
Derechos Humanos ocurridos entre 1988 y 1990 y,
bajo un análisis riguroso, consideró que “El caso se
convirtió, sin duda, en el más serio y compromete-
dor de cuantos se han tramitado contra el Estado
colombiano ante la mencionada Comisión Intera-
mericana de Derechos Humanos”6. Por esta razón,

6 El país firmó la Convención Americana de Derechos Humanos


o Pacto de San José (22 de noviembre de 1969), ratificada por
Colombia el 31 de julio de 1973, previa aprobación del Con-
greso de la República mediante la Ley 16 de 1972. Tomado
del Informe final de la Comisión de investigación de los suce-
sos violentos de Trujillo. Caso 11.007 de la Comisión Intera-
mericana de Derechos Humanos. Bogotá, enero de 2005. En
esta masacre se presentaron más de 300 muertes y desapari-
ciones, a manos de diversos agentes armados (paramilitares,
militares y guerrilleros) en pugna por intereses en los que se
vio involucrada la sociedad civil.

27
MOvIMIEntO

entre las muchas recomendaciones que la comisión


hizo al Estado colombiano tras hallarlo culpable,
se sugirió realizar un reconocimiento simbólico, un
monumento a la memoria de las víctimas, el cual,
concertado con sus familiares, estaría en el muni-
cipio de Trujillo.

El parque monumento funciona como recurso de la


memoria, pero también como un intento de supe-
rar la impunidad por una vía diferente a la justicia
estatal; a la par que se conoce a los culpables, se
recuerda constantemente a las víctimas con el pro-
pósito de contribuir al conocido “nunca más”. Con
base en lo anterior, se encuentra aquí un espacio
en el que se recuerda a los seres queridos que des-
aparecieron físicamente, y que incluso se estuvie-
ron cerca de desaparecer de la memoria de todos
los colombianos. Con este monumento, continúa
el trabajo de esclarecimiento de la Asociación de
Familiares de la Víctimas de los Hechos Violentos
de Trujillo –Afavit–, acompañado por un proceso
de sanación de esta trágica situación, que aporta
a la comunidad una visión de futuro basada en
una comprensión más amplia y ajustada sobre su
pasado. En un terreno de seis hectáreas adquirido
por el gobierno colombiano con recursos oficiales,
empezó la construcción del parque en 1998, con
la intención de, en primera instancia, otorgarle voz
a los familiares de las víctimas; voces que primero
fueron intervenidas por una serie de profesionales,
pero que luego cobraron vida propia, tanto así que
quienes ahora impulsan las actividades para man-
tener el parque son los mismos familiares.

El punto de partida, tanto del proyecto en gene-


ral como de la distribución de los espacios en el
parque, es el reconocimiento de la pérdida de la
persona que ha desaparecido con el componente
de restablecimiento de su dignidad humana. Por
consiguiente, para planear la construcción del
parque se hizo necesario entonces realizar una in-
dagación profunda sobre lo que significa la muer-
te como tránsito en el que la vida nunca puede
ser eliminada. Se estableció así un lugar para las
tumbas, pero también un lugar para el recuerdo
y para pensar, con esperanza, en el futuro. Es un
sitio en el que se busca que las almas de aquellos
que vivieron esta tragedia puedan descansar en
paz, y en donde se deja abierta la posibilidad de
contacto con los que aquí quedan.

28
SOCIOlOgía

La construcción del parque monumento de Trujillo


se planeó en forma secuencial7: primero se expo-
nen los hechos violentos, para luego pasar al en-
tierro de las víctimas. Los entierros, la mayoría de
los cuales son simbólicos, se encuentran en módu-
los, en organización cronológica; son 245 osarios
con los restos de las víctimas o con objetos que
corresponden a víctimas cuyos cuerpos nunca fue-
ron hallados, alineados en 7 niveles que represen-
tan los 7 años en los que se presentó la masacre.
Lo que se busca es que los familiares tengan la
oportunidad de despedirse de sus muertos y des-
aparecidos, pero que además, tanto ellos, como
otras personas conocidas y desconocidas, sepan
quiénes fueron las víctimas; sus nombres, oficios
y datos generales sobre la fecha y condiciones de
desaparición o asesinato. Sumado a lo anterior,
los osarios se encuentran rodeados de fuentes de
agua como símbolo de purificación y de redención
del sufrimiento que soportaron las víctimas.

Algo similar sucede con los otros espacios, de los


cuales cada uno tiene un significado particular
como forma de recuperación física y simbólica de
las víctimas de la masacre, sumado a un significa-
do más general en torno a los principios de pre-
servación de la vida como condición fundamental
de la dignidad humana. Muchos de estos espacios
ya han sido construidos, faltan otros tantos, que
se realizarán en la medida en que los recursos fí-
sicos, humanos y monetarios vayan apareciendo.
Son etapas definidas a través de espacios físicos
que hacen relación a varios momentos conectados
con la descripción de los hechos, el entierro de las
víctimas, la reconstrucción de los recuerdos y el
hallazgo sobre el sentido de la memoria.

Así pues, este monumento a la memoria se ha


convertido en un instrumento para escribir de otra
manera la historia que si bien enfatiza en los mo-
mentos de dolor y sufrimiento, puede seguir de
largo hacia proyecciones y visiones de una nueva
sociedad. Quienes sostienen este lugar son per-
sonas que sólo al inicio recibieron apoyo estatal y
que actualmente tienen mayor resonancia a nivel
internacional que nacional; con sus propios recur-
sos mantienen este parque para no olvidar a cien-

7 Información tomada de: Parque por la vida, la justicia y la paz.


Monumento a las víctimas de los hechos violentos de Trujillo
1987-1994. Bogotá: Comisión Intercongrenacional de Justi-
cia y Paz, 1998.

29
Movimiento

tos de personas que en un momento concreto de


la historia se vieron envueltas en tan lamentables
hechos, y al mismo tiempo buscan emitir una voz
de alerta sobre la posibilidad de la repetición. Este
es además un parque que orienta de otra manera
la memoria colectiva, y que en ese sentido es fun-
damental para ver la historia desde otro ángulo,
el ángulo de las víctimas que por lo general no
encuentran lugar para expresarse ni para contar
su versión de los hechos.

Preguntas y cuestionamientos. El lugar del


arte en el espacio social

Para el desarrollo de este apartado, se parte de un


principio básico: el arte, como cualquier otro ám-
bito de la realidad social, se encuentra estrecha-
mente interconectado con otros que lo determinan
en mayor o menor medida. De esta manera, si
bien se puede rescatar el papel que cumple como nó, en algún sentido puede funcionar como forma
ruta alternativa cuando los canales oficiales se de subversión que, así como rompe la cotidianidad
han cerrado, tampoco puede llegar a reemplazar- obligándola a tomar distancia de sí misma, tam-
los del todo. Este aspecto es bastante importante, bién ocupa los espacios consagrados por la his-
en tanto que ofrece una doble visión. Por un lado, toria oficial, como aquél momento en que al lado
las prácticas artísticas se convierten en un canal de Bolívar, en la Plaza de Bolívar, se ubicó a una
de expresión (para no reducirlo a la denuncia) que Manuelita. En efecto, esto quería dar a entender
puede ser tomado por diversos agentes, más por que Manuelita estuvo ausente en los discursos de
aquellos que no tienen entrada a otros espacios la independencia, lo cual significaba una manifes-
de mayor impacto, en torno a la opinión pública; tación del papel no sólo de las mujeres, sino de
sin embargo, por otra parte, a veces las expectati- otros sectores subalternos en tales luchas.
vas son más grandes que las posibilidades reales.
Si bien casos como el del parque monumento de No obstante, hay que reiterar que sólo hasta ahí
Trujillo son pioneros en Colombia en el sentido de puede llegar el arte. El arte, por sí solo, no puede
construir espacios de la memoria (algo que hace cambiar el mundo. Tal vez su mayor contribución
mucho tiempo, en varias partes del mundo, ya se sea la de hacer ver el mundo de otra manera, ver
ha dado), y en esa medida merece un reconoci- lo cotidiano como extraordinario y traer otras vo-
miento especial, también es cierto que no es su- ces, diferentes a las ya conocidas, para que hablen
ficiente frente a las carencias e insuficiencias de sobre sus propias y particulares historias. Por tan-
los aparatos encargados de preservar la vida y el to; frente el trabajo que hace la historia, el arte
bienestar de las personas. sólo llegaría a ser un dato, otro recurso a las fuen-
tes, que en ningún sentido desplaza el trabajo del
Por tanto, no se puede sobredimensionar la capa- historiador en la comprensión de los fenómenos
cidad artística, sino que se hace necesario ubicarla sociales.
en su justa medida. En este caso, ésta funciona
alrededor de los mecanismos de la memoria colec- Al diferenciar la escritura de la historia de la me-
tiva, al dirigirse desde otro escenario a un público moria colectiva, podría concluirse que la memoria
cada vez mayor. Tal acrecentamiento de puestas colectiva encuentra poca relación con la historia
en escena en la plaza pública, como ya se mencio- escrita con respecto a determinadas sociedades y

30
Sociología

BIBLIOGRAFÍA

HALBAWCHS, Maurice. La memoria colectiva. Za-


ragoza: Prensas Universitarias de Zaragoza, 2004

HALBAWCHS, Maurice. Los marcos sociales de la


memoria. Barcelona: Anthropos, 2004

Informe final de la Comisión de investigación de


los sucesos violentos de T rujillo. Caso 11.007 de
la Comisión Interamericana de Derechos Huma-
nos. Bogotá, enero de 2005
periodos, pues las formas en que se recuerda no
dependen de la enseñanza de dicha historia, sino Parque por la vida, la justicia y la paz. Monumento
de la manera en que se hayan vivido determina- a las víctimas de los hechos violentos de Trujillo
dos acontecimientos. Además, esta rememoración 1987-1994. Bogotá: Comisión Intercongrenacio-
siempre es colectiva, nunca individual, pues es nal de Justicia y Paz, 1998.
en sociedad justamente donde el individuo toma
todas sus experiencias y construye sus formas de PROUST, Marcel. En busca del tiempo perdido. Ma-
pensamiento y sentimiento comunes a otros, con drid: Alianza, 2001
quienes comparte dicho pasado. Las divisiones tra-
dicionales sobre espacio y tiempo funcionan como SCOTT, James. Los dominados o el arte de la resis-
convenciones que se han impuesto también social- tencia. Discursos ocultos. México: Era, 2000.
mente para permitir el contacto entre individuos
y grupos. Así, aquí nada es individual, nada es
biológico o físico, sino que en la construcción del
pasado actúa la sociedad en su conjunto.

El presente funciona como un filtro en el que se


selecciona lo que se recuerda sin producir una
absoluta transformación sobre el pasado, pues di-
cho pasado se mantiene de manera generacional.
Esta permanencia de un pasado común es lo que
permite que con el tiempo los grupos cobren con-
ciencia de su propia identidad conservada por las
propias memorias colectivas, pero olvidada por la
historia abstracta. Se estaría hablando entonces de
la necesidad de un arte colectivo que efectuaría tal
conexión, y esto llevaría a otras discusiones sobre
la democratización del arte.

31
Sociología

¿ARTE POR SÍ, Y PARA SÍ?


GIOVANNY FORIGUA
SOCIOLOGÍA. VI SEMESTRE
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
gioforisk@hotmail.com
para lograr objetivos transformadores,
no basta sociologizar el arte; hay que socializarlo.

Néstor García Canclini

En algún momento, revisando textos con el fin de se destacan los siguientes cuatro: en primer lugar,
acercarme más a la sociología, y en especial bus- surge la reflexión sobre si compete a la sociología
cando alguna base para seguir en la misma, me el abordar el arte en sí, y de ser así, ¿en dónde se
encontré con un cuestionamiento planteado por encuentran las herramientas metodológicas y teó-
García Canclini, que en ese momento aplastó más ricas para hacer dicho abordaje?; en segundo lugar
la ilusión de hallar una salida fácil, y por el con- se encuentra la inquietud en cuanto al papel que
trario, lo que logró fue un mayor distanciamiento. el arte cumple en el individuo, y el individuo (en
Este planteamiento, que en un momento logró dis- toda su expresión) en el arte (en cuanto a procesos
tanciarme, ahora podría ser el punto de partida de de formación, integración y retroalimentación); li-
una nueva visión (pues no siempre una pregunta gado a esto surge un tercer cuestionamiento con
es el inicio de un momento; es más, generalmen- respecto a la figura del arte como objeto ligado
te es el fin inconcluso del mismo). Básicamente, a la lógica de la oferta y demanda en términos
lo que García Canclini postulaba en su libro era: económicos (como mercancía), más que como pro-
“¿que puede decir una ciencia que estudia las re- ducto artístico libre de presiones económicas que
gularidades de lo social acerca de experiencias ar- limiten su total expresión; y por último, se impone
tísticas cuyo fin es subvertirlas, sobre las obras que la pregunta de ¿en qué medida el contexto social
no quieren ser mercancías, gestos que no quieren influye directa o indirectamente en la producción
ser obras?”1. artística?

A partir de una de estas cuatro preguntas, se de-


De esta extensa pregunta (que más bien parece sarrollará un escrito medianamente adecuado
una puya que se extiende por todos y cada uno para tratar de exponer un planteamiento que vaya
de los problemas mismos de las ciencias sociales acorde con lo buscado por la pregunta misma. Así
y aterriza feroz y arraigadamente en la sociolo- pues, en cuanto al primer punto, sobre las herra-
gía), se desprende una serie de cuestionamientos mientas metodologicas y teóricas que desde la so-
intrínsecos entre los cuales, en primera instancia, ciología se presentarán para el abordaje del arte,
declino por ahora de toda intención de abordarlo,
1 GARCÍA CANCLINI, Néstor .La producción simbólica, teoría y pues, si bien he conocido textos que tratan en al-
método en sociología del arte.1971, p. 12

33
Movimiento

gún sentido el mismo, no he tenido la fortuna de


conocer más sobre el tema, y sería una gran irres-
ponsabilidad, limitando con la estupidez, referirme
a algo que ni los más prestigiosos sociólogos han
llegado a concebir como algo homogéneo que fa-
cilite dicho estudio (igualmente no estoy muy se-
guro de que tan viable sea homogeneizar concep-
tos teóricos y metodológicos sobre el estudio del
arte). El segundo cuestionamiento nos llevaría en
primera instancia hacia una reseña histórica que
revisara autores y obras de arte, aspecto bastante
interesante, pero que no viene al caso en este mo-
mento. La tercera pregunta planteada despierta la
imaginación sociológica, e inquieta en cuanto a lo
interesante de su estudio; sin embargo, implicaría
el uso de información ligada a la evolución de las
formas artísticas en la historia, y a las articulacio-
nes de éstas en la aparición de un mercado (figu-
ras económicas) del arte y artistas, de modo que,
por mi ignorancia sobre los dos aspectos, y por el
corto tiempo que poseo en este momento para do-
cumentarme sobre el mismo, me declaro amplia-
mente impedido para su desarrollo. Entonces, por
deducción, y no más que por facilidad respecto a
“conocimientos” adquiridos, me gustaría entrar a
abordar la última pregunta desglosada del gran
cuestionamiento de García Canclini.

La frase “no hable de lo que no sabe”, más que un


dicho popular, es una restricción cultural, una ac-
titud que nos inculcaron desde pequeños, y se su-
pone que debería estar interiorizada, y por tanto,
la probabilidad de vulnerar su fin sería mínima. No
obstante, en este texto me atrevo a romper (así sea
por cuatro paginas) esta limitación, por lo que se
hablará desde la ignorancia tratando de rescatar
algo de ella. Admito que más que respuestas, ten-
go preguntas sobre el tema que se desarrollará;
sin embargo, al ver la oportunidad, el riesgo me
ganó, así que después de varias vacilaciones, creo
que el esfuerzo valdrá la pena.

Alguna vez escuche en un museo a un sujeto que


conversaba con otro mientras veían una escultu-
ra. Éste mencionaba la repetida frase “el arte por
el arte”, a lo cual no pude reaccionar en alguna
manera, ya que no descifraba a que se refería con
esta proclama. De hecho, mucho tiempo después
seguí con la misma inquietud, de no entender di-
cha frase que parece tan simple, pero que si se
retoma desde la nada, no se le encuentra algún
sentido.

34
Sociología

Hasta ahora entiendo que es simplemente una ex-


presión que reducía tanto a la creación de obras
artísticas como al artista a sí mismos, es decir,
algo que nace desde el arte y para el arte, en-
casillándose en el sí para sí, y eliminando de tajo
cualquier influencia externa que pudiese quitar la
perfección latente entre Edvard Munch y el Grito,
o entre Dalí y el Reloj blando en el momento de
su primera explosión. Así que, desde ese punto de
vista, la sociología no tendría un que hacer respec-
to al estudio del arte (en su forma de estructura y
construcción), pues no existiría ninguna estructura
social tras la creación de las obras, que vendrían
siendo más o menos reveladas por una fuerza os-
cura al artista mismo (viendo esto desde la procla-
ma del arte para el arte). En este orden de ideas,
el trabajo sociológico se reduciría a dar cuenta de
los procesos resultantes de los símbolos derivados
de las obras de arte, en un ejercicio entre emisor-
receptor, lo cual delimitaría estudios sociológicos
representados, entre otros, por la sociología que
Bourdieu aborda desde el campo intelectual, con
respecto al ejercicio y estudio de los procesos de
simbolización (en este caso en el arte).

He aquí un gran dilema, pues con la poca teoría


sociológica que he conocido, con el conocimiento
que tengo como persona del común, me parece
que esta concepción de inspiraciones inexplicables
de los artistas, que no deben nada ni a lo histórico
ni a lo social, es algo ¡traído de los cabellos!, en
cuanto a que, si bien es muy claro que no todo
lo que acontece en la cotidianidad influye en el
arte, éste sí tiene que reclamar un dividendo en
cuanto a la creación de un espacio-tiempo propi-
cio para la representación del arte en manos de los
artistas. En términos de Marx, lo anterior significa
que “lo concreto no es lo primero que se presenta,
a nuestros sentidos, sino la síntesis de múltiples
determinantes”2; expresión en la cual lo concreto
vendría siendo la obra en sí, que está claramente
influenciada por los “múltiples fenómenos” que
para nuestro efecto serían el contexto social en un
lugar primordial, acompañado de otras variables
(que no vienen al caso para la intención del escri-
to) para el desarrollo mismo de la obra.

2 MARX, Karl. Introducción general a la crítica de la economía


política. México: Siglo XXI, 1857.

35
Movimiento

En este punto (desviándome un poco del tema), cusión del arte en lo social. Por tanto, es pertinen-
me gustaría resaltar muy brevemente la influencia te enunciar la siguiente reflexión de Hauser: “si
que ha tenido la simbología desprendida de las bien todo el arte está condicionado socialmente,
obras de arte para el contexto y la realidad de un no todo el arte es definible socialmente”4. Como
tiempo-espacio determinado, y que de hecho ha se puede ver, Hauser también apela a un sentido
logrado trascender el tiempo para abrirse camino de integración innegable entre el arte y lo social,
hasta nuestra época. Trayendo a acotación la obra dejando notar el papel que las vivencias sociales
de Cesar Lorenzano3, en la cual, muy acertada- ejercen en el artista para la creación de su obra,
mente (en la medida de lo posible), el autor trata como también la idea del desciframiento del arte.
de mostrar cómo este proceso de simbología en las Claro está que no siempre estas influencias son di-
sociedades tiene unas repercusiones en el incons- rectas, y que tampoco necesariamente tienen que
ciente, dejando en el aire (respecto a lo que nos ser conscientes; simplemente es una relación de
atañe) el papel de otras disciplinas como comple- interdependencia entre artista, obra y sociedad. En
mento al estudio desde la sociología del arte, ya cuanto a la relación de artista y obra, en el contexto
que en este caso se habla específicamente desde social está ligada en el aspecto de retroalimenta-
el psicoanálisis. ción, en donde, si bien el artista, como lo decía an-
tes, recibe influencia del contexto para su creación,
Después de este paréntesis, necesario para ampliar al plasmar su obra también inyecta un cambio en
el marco de la percepción sociológica del arte, re- la estructura social, pues es claramente conocido
tomamos el hilo del escrito y traemos a acotación por todos que un sólo cambio en el sistema, por
lo mencionado sobre la improbabilidad del “arte pequeño que sea, influye a gran escala (ya sea a
para el arte”. En el estudio de este fenómeno, es corto, mediano o largo plazo) en el orden social,
claro que hay tanto una provocación de lo social más aun en el contexto actual de globalización de
en el arte, como del arte en lo social. Como se las expresiones y homogeneización de las ideas.
estipuló en un principio, lo que por ahora se tocará
con mayor referencia es la provocación de lo social Con el fin de dejar la discusión abierta, pero al
en el arte, sin desconocer el estudio de la reper- mismo tiempo a modo de conclusión, en este pun-

3 LORENZANO, Cesar. La estructura psicosocial del arte. Méxi- 4 HAUSER, Arnold. Introducción a la historia del arte. Madrid:
co: Siglo XXI,1982. Guadarrama, 1961.

36
SOCIOlOgía

to hay que aclarar que la reproducción artística es BIBLIOGRAFÍA


en su mayoría eso, una reproducción de diferentes
aspectos externos al artista, que inciden directa o BOURDIEU, Pierre. Las reglas del arte, génesis y
indirectamente en él, y no una producción aislada estructura del campo literario. Barcelona: Anagra-
autónoma de sí para sí, en la que se niega cual- ma, 1995.
quier intervención de factores externos. Sin embar-
go, tampoco es mi intención dejar de lado el papel GARCÍA CANCLINI, Néstor. La reproducción sim-
del artista, rezagándolo como simple marioneta de bólica, teoría y método en la sociología del arte.
unas condiciones sociales que lo utilizan para un México: Siglo XXI, 1979.
fin (en este caso una obra). Ciertamente, dar rele-
vancia al papel del artista no es el fin de la obra
HAUSER, Arnold. Introducción a la historia del arte.
de arte, sino que, como es normal, en las diná-
Madrid: Guadarrama, 1961.
micas sociales se compenetran bastantes aspectos
que salpican a toda la producción, no sólo en el
LORENZANO, Cesar. La estructura psicosocial del
arte, sino en los distintos procesos en el mundo en
arte. México: Siglo XXI, 1982.
los que esté ligada la producción. En este aspecto,
se hace necesaria una mención especial a aque-
MENDIETA Y NUÑEZ, Lucio. Sociología del arte.
llos que se arriesgan a plasmar en sus obras las
México: Instituto de investigaciones sociales de la
vivencias cotidianas o las distintas formas de ver
Universidad Nacional de México, 1962.
el mundo, pues no todos los días nacen autores
como Cortazar, Dalí, Saramago, Bach, etc.
MARX, Karl. Introducción general a la crítica de la
economía política. México: Siglo XXI, 1978.
Para ser artista, no simplemente se necesita un
contexto social que lo facilite, sino estar extraordi-
nariamente compenetrado con la realidad y con-
sigo mismo, para así mismo compenetrarse con la
obra. Un ejemplo de esto lo aporta Gustave Flau-
bert, quien nos dice que “no se escribe lo que se
quiere”. Yo diría que no se escribe lo que se quiere,
pero se debe querer lo que se escribe, lo que se es-
culpe, lo que se pinta, etc. Cuando se reproduce la
satisfacción por las obras, se reproducen las obras
mismas en toda su plenitud.

Llegamos al ocaso de esta exposición, que preten-


de dejar las puertas abiertas para el abordaje y
profundización de lo postulado. Mirando la temá-
tica de la revista, y contrastándola con lo anterior-
mente planteado, se podría decir que el arte, más
que una representación simbólica de lo humano,
es una representación simbólica de lo social; de
esta manera, la sociedad, en algún sentido, es una
reproducción secuencial de las consecuencias de
las obras de arte.

37
Movimiento

CAPITALISMO, ARTE Y CONTRACULTURA

CÉSAR AUGUSTO GUERRERO


SOCIOLOGÍA. VI SEMESTRE
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
unitedxstrong@hotmail.com

A lo largo de todos los tiempos, las expresiones trario, es única y exclusivamente el de la deman-
artísticas han poseído una capacidad grandiosa da apoyada por un bombardeo mediático situado
de persuasión sobre los seres humanos y sus ac- dentro de los medios masivos de difusión, y para
ciones; de esta manera, en muchas ocasiones la ello, el uso de la persuasión que puede generar
capacidad de seducción ha sido utilizada como el arte en las personas es indispensable. De esta
herramienta en la creación y legitimación de mo- manera, para el mercado capitalista el valor más
delos de vida y representaciones de statu quo. Sin importante es la ganancia de dinero, sacrificando
embargo, en el modelo capitalista-neoliberal que la diversidad, creatividad y esencia de nuestras
se vive en la actualidad, el uso de las expresiones expresiones.
artísticas y humanas se convierte en una excelente
técnica de mercado para generar más demanda a Como respuesta a estos lineamientos del merca-
partir de la apropiación (por intereses meramente do capitalista, hemos presenciado el surgimiento
económicos) del arte para establecer y legitimar un de múltiples expresiones artísticas alternativas sin
determinado estilo o modo de vida encadenado a ánimo de lucro que manejan canales alternativos
la creación de necesidades ficticias. Los canales de de difusión, en los cuales las ideas no son simple
difusión masivos (televisión, radio, internet, pren- mercancía y se rigen por principios como el Do It
sa, etc.) se compaginan y promueven la imposición Yourself o D.I.Y (hazlo tu mismo). Acá la coope-
de modos de vida creados por y para beneficio úni- ración, la ayuda mutua y la autogestión, son los
camente del mercado capitalista; nos venden una principales cimientos de estos espacios contracul-
identidad similar, los mismos gustos, las mismas turales que deciden en un momento determinado
ideas, y en últimas, los mismos modos de vida. no seguir los lineamientos del orden económico
capitalista actual y proponen hacer frente al statu
Bajo esta misma lógica, surgen los “modelos gené- quo implantado por el mercado.
ricos de las expresiones culturales y artísticas”. El
interés principal de estos no es propiamente el de Los espacios contraculturales se encuentran en
enaltecer o exaltar las expresiones humanas como cualquier lugar del mundo como “pequeños”
algo inmanentemente único y creativo; por el con- centros de resistencia a la estandarización de las

38
Sociología

expresiones humanas, no desean establecer re-


lación alguna con las grandes multinacionales o
corporaciones; los integrantes de estos espacios
promueven la autogestión y la asociación horizon-
tal como modelo de organización, y así mismo, de
difusión de ideas y expresiones alternativas inde-
pendientes. Un ejemplo bastante claro sobre este
tipo de espacios lo podemos encontrar en diferen-
tes movimientos urbanos como el hardcore, punk
y hip-hop. A pesar de que los géneros musicales
y varios aspectos de los estilos de vida han sido
“atrapados” y comercializados como cualquier otro
tipo de mercancía, en sus inicios la esencia y el
sentido de muchos de estos movimientos plantea-
ba la necesidad de alejar sus expresiones artísticas
contra-sistémicas totalmente del mercado capita-
lista, creando espacios propios a partir de la auto-
organización y autogestión.

Sin importar el tipo de expresión humana (músi-


ca, cine, literatura, pintura, etc.), la esencia de los
espacios y pensamientos alternativos de expresión
artística es la afirmación de una libertad de orga-
nización por fuera de la lógica capitalista. Se ins-
cribe como la negación de la realidad y a la vez
la creación de objetos imaginarios inéditos, por
ello la contracultura es todo aquello que niega la
totalidad o estandarización con meros fines eco-
nómicos de la realidad humana, y que al hacerlo
imagina la posibilidad de otra realidad al margen
de lo establecido.

39
Movimiento

JUEGO EN EL AIRE

ANA MARÍA CASTIBLANCO DURÁN


COMUNICADORA SOCIAL
PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA
anamariacastiblanco@yahoo.com

El rápido y acelerado ritmo, propio de los procesos al trabajo informal como medio para “ganarse la
de intercambio y consumo, no sólo ha cambiado vida”. Millones de personas que han visto limitados
drásticamente la rutina y las formas de interacción sus medios de subsistencia a través del mercado
de las personas, sino también el escenario donde laboral empresarial, han optado por idearse mi-
éstas se desarrollan, pues la ciudad se ha transfor- les de formas para satisfacer sus necesidades más
mado a pasos agigantados para adaptarse a las básicas, lo que significa que no cuentan con nin-
leyes de la oferta y la demanda. Por ello, no es gún tipo de estabilidad o de seguridad, y que ni el
raro encontrarse en cualquier esquina de la ciudad Estado ni la empresa privada responderá en caso
con actividades comerciales que abarcan desde el alguno, pues ellos corren por su propia cuenta.
intercambio de bienes y la prestación de servicios,
hasta las más creativas formas de acceder al entre- En Bogotá, la lógica del “rebusque” se ha converti-
tenimiento. Y es que las artes hoy se han tomado a do en una fuente de ingresos para miles de artistas
Bogotá, no sólo para manifestarse acerca del paso que diariamente conviven en las calles y que con
de la vida, sino que también se han convertido en su trabajo han logrado pequeñas transformacio-
una forma de entretenimiento para los transeúntes nes del espacio urbano. Una de las artes que más
y en un medio de subsistencia para los artistas, que se ha apropiado de la ciudad es el malabarismo,
ofrecen su talento como una mercancía más, pues pues es la excusa perfecta para miles de jóvenes y
ya tiene un valor comercial. La música, los colores, de niños que fusionan su talento con la necesidad
y las pelotas en el aíre, propios de muchas mani- de obtener el sustento diario. La luz roja de los
festaciones artísticas, se mezclan con los tiempos, semáforos es la señal para que muchos malabaris-
ruidos y afanes de la ciudad, logrando convertir a tas conviertan las cebras en sus lugares de trabajo
la urbe en el espacio que lo absorbe todo. y a los conductores en un público, que forzada-
mente da un par de monedas y nunca ofrece un
El elevado incremento en el índice de desempleo aplauso.
y la actual incapacidad del mercado y de la indus-
tria por ofrecer oportunidades laborales bien re- El crecimiento del fenómeno del malabarismo
muneradas, ha generado que en los últimos años como trabajo informal ha suscitado una serie de
más del 50%1 de la población colombiana recurra interrogantes y de inquietudes, que lo abordan
como un problema social y como una práctica ries-
1 Según el Dane, en el año 2008 el 57.6% de la población se gosa para aquellos que lo realizan sin tener algún
encontraba en el sector informal. http://www.dane.gov.co/
files/investigaciones/boletines/ech/ech_informalidad/bolet_
ech_informalidad_sep_nov2008.pdf

40
Sociología

tipo de experiencia. Muchos sectores de la socie- través del diálogo entre la formación y la práctica,
dad, pasando por académicos, urbanistas y hasta y desarrolla en ellos capacidades empresariales
políticos, han llamado la atención acerca de las que propician su inserción en la vida productiva y
implicaciones que la práctica del malabarismo tie- hacen sostenibles sus vocaciones”3.
ne en la movilidad de la ciudad, en la organización
del espacio urbano, en la disminución del nivel Sin embargo, en ámbitos académicos se ha obser-
de accidentalidad en las calles, en el fomento del vado el fenómeno del malabarismo en las calles,
trabajo entre muchos jóvenes y en crecimiento de como un problema social que afecta a la población
las manifestaciones artísticas en la ciudad. Y aún a infantil. Un estudio publicado en el año 2003 por
pesar de esto, es difícil encontrar estudios o políti- la Revista de Ciencias de la Salud de la Universi-
cas que miren concretamente esta problemática y dad del Rosario, titulado “Trabajo Infantil en las
que permitan una aproximación más detallada al Calles de Bogotá”, llama la atención acerca del
malabarismo y a las personas que en las calles lo incremento del número de niños que realizan ma-
practican. labares en los semáforos. La revista señala que en
el año 2003, el 28% de los niños que trabajaban
Existen muchos grupos artísticos y ámbitos acadé- en las calles se dedicaban al malabarismo. Este
micos que abordan el arte del malabarismo como mismo estudio afirma que al ser el espacio público
una práctica propia del desarrollo cultural de la el lugar de trabajo de los niños, estos “están en
ciudad y que va ligado con una nueva estética ur- la obligación de disputar su sitio de trabajo con el
bana. Por ejemplo, proyectos como Circo Ciudad, resto de la población, incluso muchas veces tienen
que instruye en las artes escénicas y corporales a que pagarlo, y están expuestos a ser arrollados por
niños y jóvenes de la localidad de Ciudad Bolívar, vehículos constantemente”4.
le apuestan al teatro callejero como medio de ex-
presión y de socialización del proceso cultural que De igual forma, la Universidad Nacional, a través
se viene gestando. Circo Ciudad instruye semes- de la investigación titulada “Creciendo en asfalto.
tralmente a un grupo de jóvenes en el oficio del Niños, niñas y jóvenes vendiendo en las calles de
malabarismo, ampliando así su posibilidades de la ciudad”, llama la atención acerca de la cantidad
trabajo y de manutención2, pues este modelo “res-
ponde a las actividades artísticas de los jóvenes a 3 http://circociudad.org/
4 Revista Ciencias de la Salud / Bogotá (Colombia) 1 (2): 151-
63, julio-diciembre de 2003 p. 158
2 Ver http://www.pedagogica.edu.co/proyectos/sentidos/Docu- http://www.urosario.edu.co/medicina/CienciasSalud/docu-
mentos/LOC%2019%20CIRCO%20CIUDAD.htm mentos/vol1n2/winfantil_vol1n2.pdf

41
Movimiento

de menores y de jóvenes que además de ofrecer a nivel, pasos peatonales, separadores, bermas,
productos, han empezado hacer malabares y ruti- ciclovías, ciclorrutas, estacionamientos, paraderos,
nas de gimnasia frente a los vehículos para conse- todo tipo de puentes y en las zonas destinadas a la
guir algo de dinero. Este estudio habla acerca de circulación de todo tipo de vehículos”6. La medida,
las características de la informalidad callejera, la aunque no fue aprobada, suscitó un sinnúmero de
cual es sumamente “flexible en lo relacionado con críticas, pues se decía que se le estaba negando
la oferta, así como respecto al tiempo y lugar don- la posibilidad de trabajar honestamente a un am-
de tiene lugar, facilitando de esta manera el acceso plio sector de la población cuyas oportunidades
no sólo de los adultos, sino de distintos integrantes son más que restringidas. A partir de este deba-
del núcleo familiar, dentro de los cuales aparecen te, diferentes sectores de la sociedad, incluyendo
los niños, niñas y jóvenes”5. El estudio, además, académicos y trabajadores estatales, han afirmado
hace énfasis en las condiciones de pobreza que que el malabarismo y el trabajo en los semáforos
impulsan a los niños a trabajar en las calles, y que sólo disminuirán cuando el mercado sea capaz de
hace que en muchas ocasiones estos niños dejen incluir laboralmente al 57% de la población.
sus estudios para incorporarse a la vida de la ca-
lle, por lo que crecen en un ambiente competitivo, El malabarismo en la ciudad compromete a un
hostil y violento. Para los investigadores, no cabe gran número de personas provenientes de distin-
la menor duda sobre las consecuencias mentales y tos sectores de la sociedad, y es por esto que no se
psicológicas que esta situación desata en los me- debe dejar pasar por alto la necesidad de realizar
nores y en sus familias. un estudio que abarque los factores socioeconó-
micos que lo impulsan, las características propias
El malabarismo es quizá una de las artes en las de la ciudad que lo fortalecen y las cualidades ar-
que más se expone el bienestar del cuerpo huma- tísticas de las personas que lo practican, quienes
no, más si no sólo se juega con el equilibrio de en muchas ocasiones llevan a la urbe comercial un
los objetos, sino también con la velocidad de los poco de arte y de cultura. Además, se podría es-
carros, y por ello, el incremento de esta práctica en tudiar los muchos matices y variantes con los que
los semáforos de la ciudad y sus distintas formas se ha desarrollado el malabarismo en las calles de
de desarrollarlo, en las que se valen de elementos Bogotá, y su relación con el gusto del mercado. Y
como el fuego, cuchillos y acrobacia, han hecho claro está, no se pueden dejar de ver las conse-
que se enciendan las alarmas en torno a la segu- cuencias que esta forma de empleo acarrea para
ridad de estos niños y jóvenes que arriesgan con quienes lo realizan y para la economía general del
cada luz roja su vida. Muchos estudios demues- país.
tran que menos del 50% de los trabajadores en
las calles tienen seguro social, por ello, esto se ha De esta forma, se puede observar que la falta de
convertido en un verdadero problema social, del estudios acerca de las implicaciones del malaba-
que cada gobierno local se ha ocupado de manera rismo en las calles de la ciudad como modo de
distinta. subsistencia, imposibilita una mirada más cercana
que permita comprender y proponer, por parte de
En el año 2007, el Congreso de la República, con sectores especializados, alternativas para que esta
el ánimo de disminuir el trabajo en las calles y práctica sea cada vez más segura y más apreciada
de aumentar la movilidad, propuso modificar el como lo que es: una manifestación artística con
Artículo 76 del Proyecto de Ley 087 de 2007 del una tradición milenaria. Pues no debemos olvidar
Código de Tránsito, a través del cual se quería que el malabarismo no sólo es un juego en el aire,
prohibir a los conductores “participar en activida- también es el legendario “arte del equilibrio”.
des comerciales o benéficas en 200 metros a la
redonda de semáforos, señales de tránsito, paso

5 http://www.siju.gov.co/earte/index. 6 Ver http://www.viva.org.co/cajavirtual/svc0118/index%20


php?opt=1&accion=2&rae_id=45 -%20pagina%208.html

42
Movimiento

ARTE QUE ATRAVIESA


LA ORGANIZACIÓN JUVENIL

LAURA MORENO GALINDO


PSICOLOGÍA
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
laura_moreno_g@hotmail.com Todo ser humano es un artista… todo conocimiento
humano procede del arte.
Joseph Beuys

La organización juvenil Centro de Cultura Popular artísticas alternas, contrarias, paralelas o ajenas a
Acción y Reflexión (CCPAR), es un proyecto de crea- la tradición. A partir de la relación con el otro, en
ción colectiva que propone la pluralidad a partir el CCPAR se moviliza el desarrollo de destrezas,
de una interacción entre la teoría y la práctica en habilidades, aptitudes y estrategias de acción que
torno a las actividades y conocimientos construidos dan la posibilidad de potencializar recursos socia-
desde el sentido común de los y las jóvenes que les. Se congrega un colectivo en el que no conflu-
ponen en juego su subjetividad en un espacio de yen individuos aislados; en lugar de esto, con base
convergencia. en la interacción se articulan subjetividades, se ex-
presan diversidad de voces, símbolos y códigos en
El tema a desarrollar en este texto, contempla a la torno a la actividad artística que deja a su vez una
subjetividad expresada a través del arte como un marca en los estilos de vida.
motor de desarrollo. CCPAR hace énfasis en cons-
truir escenarios transitorios y simbólicos distantes El arte ha funcionado como punto de partida para la
de la lógica que se ha venido manejando en rela- creación de materialidades, el desarrollo de proce-
ción con los productos juveniles; busca, así mismo, sos de auto-gestión, organización y participación,
fomentar el trabajo en torno a las inquietudes de la emergencia de multiplicidad de significados,
los jóvenes y su curiosidad por conocer la realidad formas de autonomía y liderazgo, sentidos de per-
y querer expresarla, proyectando significados del tenencia y hechos constituidos por los sucesos sig-
arte en un momento y circunstancias específicas, nificativos al interior del colectivo, lo cual obliga a
que vinculan a jóvenes hombres y mujeres de la reflexionar sobre los recursos y dificultades presen-
capital. De esta manera, se acentúa el acerca- tadas en el transcurso del proyecto (refiriéndonos,
miento entre los sujetos y el arte. por supuesto, al CCPAR). Se le apuesta a alcanzar
mayores y mejores niveles de sentido crítico, desde
El arte constituye una forma de expresión que el entendido de que éste es un aporte humano que
permite la conexión entre personas desde su sin- amplía posibilidades de reconocimiento para que
gularidad, subjetividad, imaginación, sentido de los sujetos no se diluyan en la masa y desarrollen
pertenencia, lenguaje y procesos comunicativos, sus formas particulares de existir en el mundo.
entre otros. Y esto se logra convocando a una
praxis que busca respuestas frente a necesidades La coordinación de acciones a través de implicacio-
contextuales que la sociedad señala en relación nes artísticas viabiliza la adquisición, el desarrollo
con la juventud. CCPAR es el punto de encuentro y funcionamiento del sentido común, e incluso es-
de diversidad de estilos de vida y manifestaciones timula destrezas que competen al saber-hacer de

44
SOCIOlOgía

los sujetos. Fomenta la construc-


ción de un entramado de opinio-
nes, ideas y conjeturas susceptibles
a cambios, separándose de las
relaciones de poder que muchas
veces se imponen a través de la
historia y los procesos contextuales.

CCPAR es un escenario donde el sujeto es


atravesado por su estructura psíquica parti-
cular, como también por referentes que son dados
a nivel grupal; esto último puede entenderse en la
relación establecida con los agentes de socializa-
ción. En la organización, la participación adquiere vida o biografía
sentido en el momento en que la cosmovisión indi- personal, y que
vidual tiene la posibilidad de inclusión en el desa- a su vez transmi-
rrollo del proyecto, lo cual ayuda a construir subje- te su aporte a la
tividades con autonomía y capacidad reflexiva. creación de un ima-
ginario social, lo cual
Los modos de ser y estar en el mundo expresados legitima la existencia
por medio del arte versan sobre la naturaleza de de una intersubjetividad
los sujetos y cosas, mostrando que la promoción responsable. Hablamos
de las prácticas asociadas al arte sirven como sus- en este caso de subjetivi-
tento de sistemas de creencias, principios, valores dades transitorias, que no
y cosmovisiones que permiten la aprehensión de se consolidan como uni-
la realidad inmediata, generando reactividad des- dad, sino que se definen;
de una dimensión emocional hacia las personas y que no son tan armónicas, sino que evidencian lo
los objetos. El arte muestra cómo las transacciones conflictivo como parte de su naturaleza misma, y
no desarrollan un contenido específico; de hecho, se movilizan de tal forma que permiten la agrupa-
es posible hablar de la polarización que muestra ción en torno al CCPAR, nutriéndose de las redes
la falsedad o verdad de las apreciaciones alre- como un recurso potencializado al interior de la
dedor de dichas transacciones, lo cual carece de organización.
sentido, ya que implica hablar del mismo asunto
desde puntos de vista contrarios o diferentes. En En el CCPAR, las subjetividades entran a romper
contraste, fomentar el arte en la organización ju- con lo colectivo, al dar cuenta de comportamientos,
venil permite movilizar la subjetividad respecto a cogniciones y formas de sentir y vivir la afectividad
la construcción de proyectos colectivos, y es aquí de manera singular en un ámbito de interacción
donde los bienes de la cultura se ponen en circu- social. Cuando se trata de realizar aproximaciones
lación. Es la interacción de subjetividades en plena a la realidad (en este caso, a través del arte), es
actuación lo que evidencia marcas distintivas que frecuente la concurrencia de múltiples versiones
permiten un tipo de identificación particular, sub- de la misma. Las restricciones hacen sus límites
jetividades construidas a partir de situaciones con- exhaustivamente flexibles y sus únicos paráme-
textuales divergentes, pero con un amplio marco tros giran en torno al núcleo temático acordado
de incidencia cultural. por la organización. Así pues, citamos uno de los
lemas de una importante y reconocida revolución
Las personas vinculadas con la actividad artísti- juvenil: “prohibido prohibir”. Como se puede ver,
ca y los espectadores críticos son inherentes a un a través del lenguaje y la comunicación es posible
momento particular y a un tiempo que trasciende evidenciar el impacto del arte en distintas formas
las fronteras de la individualidad, ya que están en- de pensar, sentir y actuar en la sociedad. El arte en
vueltos en un cúmulo de deseos y fantasías que esta medida, establece un recurso y un medio para
muestran su singularidad a partir de su historia de formar personas y/o ciudadanos.

45
Movimiento

¿QUÉ ES ESO DE LA ASAMBLEA?

ASAMBLEA PERMANENTE DE
ESTUDIANTES DE SOCIOLOGÍA
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
aspeesso@hotmail.com

El pensamiento reflexivo y propositivo hace parte


no sólo de la razón, también de la acción y la liberación…

En primer lugar, vale la pena resaltar que como en la toma de decisiones, sin tener que depender
estudiantes inmersos en múltiples realidades, nos de la figura institucional representativa; tenien-
encontramos frente a cambios que nos incluyen do en cuenta que dichos canales y mecanismos
de manera directa o indirecta, cambios que como existentes de comunicación entre la facultad y la
estudiantes nos ubican en uno u otro espacio de comunidad universitaria como la “Representación
confluencia entre realidad y verdad. Por esta mis- Estudiantil” existen como figuras, y en cierto grado
ma razón, como estudiantes conscientes y propo- son deficientes, ya que no son legítimos como una
sitivos, no debemos ser ajenos a la realidad tanto herramienta real de acción.
externa como interna que día a día nos acalla co-
sas y nos ubica en un mal puesto de “espectado- Esta apuesta, que nos vincula a todos los sociólo-
res” de dicha realidad, en donde el cambio y el gos en formación, pretende que como estudiantes
entendimiento de la razón solamente tienen lugar tengamos todos y todas un papel y un espacio par-
cuando algunos pocos nos dejan opinar, pensar y ticipativo e incluyente en donde las decisiones to-
transformar. madas estén avaladas por el consenso de todos, el
cual permita llegar a acuerdos aceptables. Como
El siguiente texto pretende resaltar y dar a conocer organización horizontal se pretende llegar a la dis-
el proceso de organización estudiantil horizontal, cusión y el debate sobre las problemáticas que nos
que los estudiantes hemos logrado llevar a cabo aquejan como estudiantes de Sociología, en aras
en los últimos dos semestres dentro de la Facultad de establecer propuestas COLECTIVAS de solución
de Sociología de la Universidad Santo Tomás, el y seguimiento de las mismas.
cual se conoce como “La Asamblea Permanente
de Estudiantes de Sociología” ASPEESSO. El texto A nivel interno, es claro que la facultad está atra-
es una recopilación de las propuestas, avances, y vesando por varios procesos académicos e institu-
proyectos organizativos que han surgido en los úl- cionales que juegan un papel determinante en el
timos dos semestres alrededor de la Asamblea. desarrollo presente y futuro de la misma, asuntos
que afectan de manera directa a los estudiantes
Se busca que con la ASPEESSO, todos los estudian- que adelantamos actualmente nuestros estudios
tes de la Facultad de Sociología, podamos incidir universitarios dentro de la facultad, evidenciando

46
Sociología

una serie de necesidades que han sido develadas


pero para las cuales no ha habido una respuesta
satisfactoria por parte de las directivas. Así mismo,
y como es de público conocimiento, tanto la infor-
mación que se nos brinda como la capacidad de
acción que tenemos, en la toma de decisiones de
aquellos procesos, es poca o nula.

De allí que se convierta en prioridad pensar en


nuestro futuro, ya que este depende en buena me-
dida de la preparación académica que se nos ofre-
ce, ¿y quienes más sino nosotros mismos, estamos
llamados a velar porque se nos den las condiciones
necesarias para encaminar nuestro desarrollo tan-
to intelectual como personal de la mejor manera
posible? Por esta y otras razones más, en días an-
teriores nos hemos reunido varios compañeros de
los diferentes semestres de la carrera para discutir
esta preocupante situación y tomar acciones con-
cretas frente a estos hechos. Los estudiantes ne-
cesitamos tener conocimiento de las disposiciones
institucionales, y por supuesto tener una opción y
propuesta real de participación dentro de los pro-
cesos que se llevan a cabo en la facultad y en la
Universidad.

Basado en lo anterior, surgió la idea de conformar


una organización (asociación) en la que los estu-
diantes de la Facultad de Sociología de la Universi-
dad Santo Tomás podamos transformar y comple-
mentar la figura de la representación estudiantil y
conformar un ente grupal, logrando de esta forma
avances en cuanto a los propósitos anteriormente
mencionados.

La ASPEESSO es un espacio abierto e incluyen-


te en donde nosotros, ¡todos!, como estudiantes
tomamos la vocería, tomamos las palabras y las
hacemos acción. La idea se está llevando a cabo
en estos momentos y es por esta razón que ne-
cesitamos que cada uno de nosotros en colectivo
nos apropiemos del espacio citando a reuniones,
convocando a los demás colegas y tomando el
aporte que cada uno de nosotros genere, para
poder construir de manera colectiva, participativa
y propositiva una posición que nos reivindique el
papel que como estudiantes estamos llamados a
cumplir dentro y fuera de la Universidad.

47
Movimiento

queremos es que desde las diferentes disciplinas


LA REALIDAD ES que la academía ofrece, se promueva y se permi-
ta el cambio. Sabemos que desde la academia se
DINÁMICA pueden engendrar los más profundos cambios.
Queremos que todos participemos en una cons-
trucción colectiva del conocimiento, y por qué no,
de universidad.
EMILIO TORRES
SOCIOLOGÍA. VI SEMESTRE Como ciudadanos, no queremos pasar indiferen-
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS tes ante la miseria y la exclusión, que no camine-
mos como borregos con los ojos vendados hacia el
pixis45@hotmail.com
precipicio de la inconciencia, que no nos hagamos
los sordos, antes de que el ruido de los disparos
Porque algunos no nos cansaremos nunca de bus- nos deje sordos, que no nos hagamos los ciegos
car cambios y nos preocupan las diversas situa- mientras la actual realidad nacional salpica sangre
ciones que ocurren en nuestro contexto a diversos a nuestros ojos.
niveles, vemos la necesidad de apropiarnos de
nuestras responsabilidades sociales como jóve- El hecho ya endémico, sistemático, de que se
nes, estudiantes, ciudadanos y humanos. Como asesinen a indígenas, campesinos, maestros, es-
jóvenes, queremos no sólo ser potenciales focos tudiantes, sindicalistas, intelectuales, periodistas,
de consumo, seducidos por los comerciales (tal y políticos, activistas, jóvenes excluidos y afrocolom-
como a un niño lo seduce un dulce envenenado), bianos, nos compete, y nos compete que no quede
con el último producto, el último celular, la últi- el trágico y frió silencio, ya que guardar silencio
ma cerveza, el último noticiero, la última basura. ante esto sería como estar muertos.
Por tanto, queremos que, como habitantes jóve-
nes de este convulsionado y conflictivo contexto Como humanos, no queremos que se derrame más
nacional y mundial, nos detengamos un momento sangre, queremos autodenominarnos con justicia
y nos cuestionemos algunas situaciones que nos humanos, y no repetir el salvajismo de la selva en
afectan. la organización de nuestra sociedad. Por esta ra-
zón, a la hora de buscar un cambio y beber de la
Por el hecho de ser jóvenes no podemos olvidar experiencia humana, somos conscientes de que las
que el mundo, el país y la universidad están siem- acciones que se emprendan no pueden ser violen-
pre sujetas al cambio, y que si hay algo mal en tas, porque esto sería como echarle leña seca al
cualquiera de estos ámbitos, es nuestra respon- fuego, sería darle otro pedalazo al eterno circulo
sabilidad social emprender acciones para gene- vicioso de la violencia, que sólo ahonda más en la
rar un cambio, para lo cual es necesario romper crónica irracionalidad de nosotros los humanos.
el individualismo imperante en toda la sociedad
moderna. En este punto, cito a Mahatma Gandhy, de quien
creo que todos conocemos su estatura intelectual,
Vemos como jóvenes que es necesario reestructu- política y espiritual: “He comprobado que la vida
rar y resignificar el discurso y la acción de la mis- persiste en medio de la destrucción. Por lo tanto
ma resistencia; pensamos que debemos hacer una debe haber una ley superior a la destrucción, úni-
lectura histórica de los errores, para corregirlos y camente bajo esa ley ordenada, la sociedad puede
emularlos en nuestros contextos. Como jóvenes, ser inteligible y la vida digna de vivirse”. Sabias,
nos preocupa profundamente que una gran mayo- políticas, intelectuales y espirituales, son las pala-
ría de los casos de ejecuciones extrajudiciales de- bras de este hombre. Es por esto que comprende-
nominadas “falsos positivos” han sido ejecutados mos que nuestras acciones deben ir dirigidas hacia
sobre población joven. la manifestación cultural, la resistencia pacífica y
la promoción amplia de un pensamiento crítico-
Como estudiantes no queremos ser sólo consu- propositivo dentro y fuera de la universidad.
midores de la academia como mercancía, lo que

48
Sociología

MÁS ALLÁ DE LA IDENTIDAD

FACEBOOK: IDENTIDADES ALTERNAS


UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
identidadesalternas@hotmail.com
Esperamos que todos(as) hagamos parte de una re-
flexión a través de la palabra dentro de este espacio
en común, tal es la invitación que el programa identi-
dades alternas deja entre sus oyentes.

“Identidades alternas” se ha constituido como un espacio


de debate que responde a la búsqueda de una presencia
como medio de comunicación alternativo frente al modelo
tradicional dominante, que excluye la realidad tanto de
los movimientos minoritarios y sociales como de la auto-
nomía de la producción cultural. Cada uno de de nosotros,
como sujeto activo, propone ideas y ejecuta palabras para
la construcción de diferentes enfoques que convergen en un
mismo punto: el análisis de temáticas que tengan interés e
incidencia en todos los que hacemos parte de un contexto urba-
no, político, cultural, universitario, pero ante todo colombiano,
que es cambiante y complejo.

Teniendo en cuenta las diferentes problema-


ticas coyunturales que hacen a nuestro
país tan característico, surge un progra-
ma radial que se ha constituido como un
espacio de debate, donde los intereses
de quienes lo sacan al aire y quienes los
escuchan se convierten en una pluralidad
temática que logra construir representa-
ciones imaginadas mediante la palabra, la
opinión, el debate y los diversos escenarios
de nuestra realidad. Para esto, nos basamos
en una dinámica que articula la diversidad y
la pluralidad con varios aportes teóricos, sin
caer en embelesamientos ni marginaciones
populares.

49
Movimiento

Somos todos identidades alternas que nos recono-


cemos como una construcción social, como creado-
res de contextos que contribuyen al entendimiento
de una sociedad que cada día es más hostil. Por
tanto, Identidades alternas no solamente es un
nombre; desde la sociología, la identidad tiene
un significado profundo que contempla a los in-
dividuos que se sienten como tal identificados con
algún objeto, cultura, música, o algún contexto en
el que se encuentren. Lo que ocurre en la actua-
lidad se puede observar desde el enfoque que el
autor sociólogo Zygmund Bauman refuerza en su
libro Identidad, en donde dice que la identidad es
un concepto que queriendo unir divide, y que que-
riendo dividir excluye, de tal manera que si alguna
vez sirvió como estandarte para la emancipación,
hoy puede verse como una forma encubierta de
opresión.

De esta manera, en la búsqueda de mayores es-


pacios, no sólo para los estudiantes, sino para
los individuos que sienten la necesidad de dar a
conocer y manifestar su identidad, Identidades
alternas genera este espacio para todos, recor-
dando ante todo el concepto de lo alterno. No
solamente la Universidad Santo Tomás se des-
taca por ser un territorio variado, sino toda
la cultura colombiana, que a partir de este y
otros espacios se puede dar a conocer y pre-
sentar desde diferentes perspectivas y ámbitos
que alimentan a la población sin memoria,
con poca identidad, y con parte de la cultura
descontextualizada.

El objetivo del programa no es simplemente ser


escuchado, sino que realmente trasciendan las
diferentes temáticas que se manejan allí, y que
se genere una conciencia real en la población
que asume las diferentes problematicas del país
como suceso de cada día, porque más allá de la
identidad, se busca la conciencia, y más allá de la
conciencia de cada uno de los individuos, se busca
la reivindicación de lo que realmente nos perte-
nece, no sólo como colombianos sino como seres
humanos.

IDENTIDADES ALTERNAS
¡TODAS LAS VOCES, TODOS
LOS TEMAS, DISCUSIONES
SIN LÍMITES!
50
Sociología

JORNADA NACIONAL EN CONTRA DE LAS


EJECUCIONES EXTRAJUDICIALES, FALSOS
POSITIVOS Y DEMÁS CRIMENES DE
ESTADO. ESTUDIANTES COORDINANDO,
CONSTRUYENDO Y TRANSFORMANDO.
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS

JOSÉ DARÍO PATARROYO


PSICOLOGÍA. X SEMESTRE
VANESSA JULIANA LEÓN OSMA
PSICOLOGÍA. III SEMESTRE
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
psycho.riot@hotmail.com

En noviembre del año pasado, los estudiantes de Dicha movilización sirvió de impulso para que el
diversas facultades de la Universidad Santo Tomás sector estudiantil tomasino generara un poco más
se congregaron en torno a una causa social y po- de unidad y conciencia social de la realidad que
pular: la reivindicación de los sectores indígenas y construye nuestra Colombia; de ésta forma, el día
campesinos del país, el sentido de pertenencia por 6 de marzo del presente año, y de acuerdo con la
nuestras tierras y el reconocimiento de una multi- convocatoria anunciada por el MOVICE, los estu-
culturalidad presente y olvidada en nuestro país. diantes tomasinos se congregaron, una vez más,
Es así como un pequeño sector de la comunidad en torno a la protesta, movilización y manifestación
tomasina acompañó la manifestación de la min- en contra de los mal llamados falsos positivos, que
ga indígena y popular en su llegada a Bogotá. Los vienen siendo, al igual que muchas acciones en
estudiantes acompañaron la movilización con una este país, crímenes de Estado.
visión crítica, consciente y transformadora de la so-
ciedad, y aún continúan con la minga indigenista Es así como los estudiantes tomasinos se prepara-
y campesina, ya que ésta en ningún momento ha ron para asistir a una gran clase, una asignatura
llegado a su finalización. Desde su recorrido por en la cual no había calificaciones, en la cual no
Colombia hasta su llegada al palacio de Nariño, la estarían simplemente sentados asimilando un con-
minga continúa, y aún los estudiantes universita- tenido, o esperando a que les dieran la orden de
rios son partícipes de ella, mediante sus acciones y realizar una tarea. Esta clase seria muy diferente,
aportes a la construcción de la realidad de nuestro en ella encontrarían personajes dispuestos a cola-
país.

51
Movimiento

borar, a construir realmente academia y convivir


en la sana crítica de su participación como estu-
diantes, como tomasinos.

La información expuesta por el Movimiento de


Víctimas de Crímenes de Estado, generó mucha
expectativa en el estudiantado, respecto a la movi-
lización que se avecinaba, y esto a su vez causó un
enorme despliegue de organización y participación
para crear una gran convocatoria que motivara a
toda la comunidad tomasina de una forma artísti-
ca, cultural, educativa, original e impactante.

Con mucho esfuerzo y dedicación, pero también


con muchas ganas y expectativas, con el aporte de
cada una de las disciplinas participativas se conso-
lidó una propuesta de invitación a la movilización
pacífica al interior de la USTA; se realizaron dos
presentaciones teatrales durante la semana previa
al 6 de marzo, una en la sede norte de la univer-
sidad y otra en la sede central, y dos proyecciones
de cine. En la primera proyección se presentó el
documental El baile rojo de Yezid Campos, un do-
cumental de producción colombiana que trata el
tema del genocidio de la Unión Patriótica; en la
segunda proyección, La sombra del caminante de
Ciro Alfonso Guerra, otro film colombiano. Otra
de las actividades en la sede central consistió en
el conversatorio “Descubriendo Realidades”, que
contó con la presencia de organizaciones como
Hijos e Hijas, la ONIC y jóvenes líderes de Soacha,
además de muestras artísticas y musicales. Al
mismo tiempo, en la sede norte se realizó el foro
“especificidad del conflicto social, político y militar
en Colombia”, en el cual participaron integrantes
del Comité Permanente por la Defensa de los De-
rechos Humanos (CPDH), un representante de la
Fundación Comité de Solidaridad con los Presos
Políticos (FCSPP) y un docente de la Facultad de
Filosofía de la USTA. Además, el mismo 6 de mar-
zo, se presentó una nueva muestra teatral y una
muestra musical con la “batucada” estudiantil, la
cual acompañó la marcha durante su curso hasta
el búnker de la Fiscalía.

52
Sociología

Agradecemos y reconocemos todas las acciones


desempeñadas en esta jornada por cada uno
de los sectores mencionados, compañeros de las
diferentes facultades de la universidad. Todas es-
tas acciones fueron de gran satisfacción para lo
que sería la movilización y participación del sector
estudiantil.

El día viernes 6 de marzo, los tomasinos, con un


real sentido de proyección social, se reunieron en
la plazoleta de la sede central, advirtieron de su
unión y se alzaron en una sola voz en contra de la
violencia de nuestro país, en contra de las desapa-
riciones forzosas, en contra de los falsos positivos,
en contra de los crímenes de Estado. Alrededor
de 150 tomasinos, estudiantes de la mayoría de
facultades y algunos maestros, acompañaron tal
despliegue hasta la Fiscalía General, en lo que fue
la mayor asistencia universitaria de un sector apa-
rentemente privado para esta movilización, con lo
cual se demostró que no es ajeno para nosotros lo
público, ni lo social, ni cada acción que desangre
nuestro país.

Los tomasinos presentes, transformando, no ate-


rrorizando, construyendo, no destruyendo a nues-
tra universidad, tomasinos consecuentes con el
humanismo de la academia, no con la indiferencia
social, tomasinos que manifestamos nuestras ideas
con respeto, con libertad, sin atentar en contra de
alguien, estudiantes que independientemente de
un color, una herramienta, una ideología, una re-
ligión, una raza, nos unimos y demostramos que
se puede trabajar desde nuestro contexto por la
transformación de la sociedad, de la academia.

53
SOCIOlOgía

INCLUSIÓN

Borboleta Cega
A vida valeu mas sera que era pra ser assim
sofrimento do principio ao fim
a uma dor seguida de outra dor nao resistiu o amor
a vida valeu mas viver em solidao a dois
fez sangrar um coraçao depois
fez secar a flor fruto e raiz de todo bem que fiz
hoje eu depois do vendaval me sinto imune ao mal
pois deus nao pune a quem se deu
ela que ironia borboleta cega
fui a luz do seu dia
sou cruz que ela ainda carrega
e a mulher que foi minha paixao
hoje de mao em mao chora por quem ja nao lhe quer
ao seu mudo grito reflito m minha mente
ninguem deixa um poeta impunimente.

Jorge Aragão

55
MOvIMIEntO

CINDY MUÑOZ

CINDY MUÑOZ

56
Sociología

AUSENCIA
PEDRO CÁRDENAS
SOCIÓLOGO
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
pedrocardenasavila@gmail.com

Para aquellas mujeres que aún caminan…


A las madres que siguen buscando a sus desaparecidos,
y que ya no sienten temor.

Por qué insistes en decir que no soy, por qué in-


sistes en decir que no puedo, que no tengo ra-
zón, que tu palabra es siempre adecuada, y la mía
siempre desatinada. ¿Por qué ves enemigos donde
no los hay?

¿Qué debo hacer para hablar?, ¿a quién puedo


preguntar?, si cada vez que lo hago me dicen que
no existo, que si hablo no entro, que si entro debo
callar. ¿Cuándo podré decirte que no soy la culpa-
ble? Miremos juntos el camino, y respóndeme con
franqueza, ¿qué mal te he hecho yo?, si lo único
que te pido es un poco de atención y que me dejes
decir adiós a los que no han de volver.

Deja de perseguirme, no busques más, aquí estaré


yo para verte a los ojos. Mi paciencia estará hasta
el último halo de aliento que me quede. Puedes
escindirme, desvanecerme, maquillar mis manos y
pies con el tinte carmesí de mis venas, tomar mi
cuerpo si lo deseas, poseerlo en la carne, pero no
me tendrás.

Sólo quiero que me escuches, que me reconozcas,


y no me niegues que existo, pues tú sabes que
siempre estoy parada frente a tu ventana mirán-
dote fijamente, en espera de alguna respuesta.

57
MOvIMIEntO

NATALIA WAKED SÁNCHEZ


natawa@hotmail.com

NATALIA WAKED SÁNCHEZ


natawa@hotmail.com

58
Sociología

METAMORFOSIS EN EL OLVIDO

MELISSA QUIROGA
SOCIOLOGÍA. V SEMESTRE
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
melissa_esteffanyquiroga@hotmail.com

Yo, fui testigo de tu cambio,


A partir de este corrosivo otoño,
Y pude darme cuenta de que tu nunca desangrarías por mí.

Cuando vi tu cambio te empuje hacia el vidrio,


Te arranque las alas,
Y por fin me sentí algo vivo.

Y se que desde ese lacérate momento,


Yo tome tu oxígeno y te lo arrebate,
Tus arácnidas extremidades padecieron.

Tus hermosas ciudades palidecieron,


Tus brillantes ojos se desorbitaron,
Y tú junto con tu miserableza se descompusieron.

Pero lo más triste de todo, es que a pesar,


De que yo te haya arrancado la vida,
Tú te fuiste con todo lo que mi pueblo te dio.

Te fuiste, con tu repulsiva metamorfosis,


A un oscuro hoyo donde te podrás saciar de miseria y
Resentimiento.

Un hoyo donde abunda todo lo injusto


Habitado por mí,
En el reino de lo vacío,
En el imperio de los recuerdos,
Encerrado en mi castillo de lágrimas.

59
MOvIMIEntO

HERMOSA Y PODEROSA

JUAN CAMILO MÁRQUEZ


SOCIOLOGÍA. V SEMESTRE
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
vlad1850@gmail.com

Hermosa y Poderosa que con tu manto oscuro


cubres los campos de guerra,
para ti nada se oculta.

Tan poderosa eres que nos das una


exagerada ventaja en una lucha
absurda que sabemos que subyugarás.

Tan hermosa eres que como hechizados


nos paramos en el campo de batalla
temerosos de ti, viéndote bailar
al ritmo del tic tac de nuestros corazones.

¡Oh! Hermosa y poderosa has ganado batallas sobre mí


pero yo no he perdido la guerra, aún firme estoy
deambulando por los campos de guerra
donde héroes y guerreros han sido derrotados
por tu dulce pero mortal aliento.

Sobre los campos de batalla voy viendo como escrita en piedra,


sobre ellos está tu victoria que me recuerda constantemente
que pronto una de éstas estará sobre mi.

60
SOCIOlOgía

LO QUE LA CIUDAD CALLA

LUIS CLAVIJO MORENO


PSICOLOGÍA. VI SEMESTRE
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
vergasosunidos@hotmail.com

El impulso de las noches no se da por tu simple ciedad distractora. Requisitos cumplidos para es-
voluntad, las estrellas siguen en pie así caigas dor- trella suicida de rock. Basura clasificada. Noches
mido en una calle apuñalada. perdidas en la misma medida que el encorbata-
do, que pierde ciertos viernes en su cubículo, y
Mañanas de fuego enguayabado toda su vida en el primer tinto con cigarrillo de la
Zumban los milagros viejos y olvidados mañana.
Me sonríen cálidamente
Y nuevamente al día he llegado. Se han quedado todos callados, ya está.
Aplausos desdel coma social, que reciben callada-
La pereza es un mal que carcome mente quienes menos lo merecen
El aburrimiento de andar desocupado. “Tengo un escrito que voy a leerles”
Sinónimo de infierno en medio del paraíso de ¿Habrá distinción entre esta frase y la vieja
vivir. “vine a contarles unos chistecitos”?

Hay ciertos “poetas” que al abrir los ojos terminan


Los psicociados y neurotizados son sólo síntomas siendo un panycirco aburrido.
(…lo humano: síntoma de humanidad) de una
Tres copas de wisky barato, un cigarro, luces apa-
sociedad conmórbida y perdida en cigarros solos,
gadas y un público callado
calles sin gracia y ojos abiertos que duermen. Las
llagas enfermas de su desesperada piel fluyen
como salsa en una papa, y todos los encorbatados ¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh! ¿Acaso no hay
andan desocupados: gente viva en este recinto?

Desocupado el encorbatado que vive del sufrir aje- Hay poetas que mueren porque olvidan quel papel
no. Desocupada su existencia carroñera y su vacío será quemado en las llamas viejas de un tiempo
enfermo. Intranquilo pide un poco de calma, luego lineal que como mecanismo, elimina de tanto en
él mismo se la niega. tanto uno que otro engranaje. No confundamos a
la obra de arte con su producto. Sólo se puede ha-
cer una obra d’arte en la vida y es la vida misma.
Desocupado el chirri de potenciales humanos,
Poetas necesita este mundo callado e implotado.
quien ha de recordar cuando el padre de Johnny
Poetas, gente sin plata que vaya por mil de pan a
Cash le decía: “Tienes una gran casa vacía, tienes
París
nada”. Desocupado e ignorante, parte d’esta so-

61
MOvIMIEntO

Que senfarran con eskorbuto


Que coman pollo asado con el pastor,
El gringo
El junkie
El azul
Y hasta con la gran puta que a todos parió.
Jesucristo es un parcero daventuras,
Ya nos han lanzado demasiados tomatazos y botellas
de cerveza.
A veces se va borracho al trabajo, porquel papa llega sin
avisar. Dios padre no le reclama nada, pero es el papa
quien le costea la farra. El papa, su jefe, que no hace
más que morir en su gran jaula de oro. El papa. Un ca-
nario triste y moribundo que olvidó cantar, quien alardea
no haber conocido una jeringa deroína en toda su vida,
pero la jeringa dorada de su triste dios ya le ha arrebatado
todo cuanto de vivo pudiese tener.

Ríen y lloran los espectadores; semáforos nocturnos


que no hacen más que esperar la señal para carca-
jear, aplaudir, llorar o repudiar. Títeres jueces quen
su más grande odio tienden a buscar dolor ajeno,
su inertexistencia no les alcanza para sufrir. Espec-
tadores, los únicos que mantienen viva a esta ma-
triz obsoleta, este mundo de hadas borrachas y de
ciencia en declive. Mundo gris y oxidado, mundo
artificial que ya no sirve ni siquiera para taparnos del
sol.

Espectadores, lo quel tiempo se ha de llevar. De lo único


que está cansado el mundo es de los espectadores. Protago-
nistas es lo que le falta a esta fantástica novela. Protagonistas,
quencuentran el paraíso, que nos regalan una sonrisa o un silen-
cio ancestral. Protagonistas, asesinos de todo sistema o autori-
dad, gente merecedora del reino de los cielos, capaces de cantar
solos en la calle, gente que no le venda su alma a ningún ídolo,
aprendíces de nubes y lloviznas cálidas. Protagonistas, que no son
pecadores porquen cada farra lujuriosa se la parchan con Jesús y
cuanto santo endemoniado (o demonio santificado) se les ocurra,
mientras el papa muere’n su triste trono, en su triste soledad.

Planteadas así las cosas, ya no se si realmentel papa es más


rico que yo.

62
SOCIOlOgía

DEL ARTE Y EL CORAZÓN

SARAI ANDREA GÓMEZ CÁCERES


COMUNICACIÓN SOCIAL. VI SEMESTRE
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
saraigomez14@hotmail.com

El mejor espacio que encuentra el hombre de- se hace imperioso mostrar los secretos más recón-
trás de los ruidosos lugares y las penumbras del ditos del corazón para que en el alma y el espíritu
misterioso mundo es aquel donde solitario, y no liberados despierte la pasión por la vida, para en-
necesariamente solo, trata de encontrarse consi- contrar en ella un lugar mejor, en donde todo lo
go mismo. En aquel sitio en donde no hay límites que escasea en la tierra, pero que abunda en la
para que, recogidos, aislados, compungidos o feli- inmensidad del viento, nutra nuestro pensamiento
ces, puedan fluir con enorme facilidad las lágrimas y existencia. Porque cuando todo parezca perdido,
y el dolor agazapados en los pensamientos. Allí siempre habrá una voz a quién contarle lo que el
sentimientos como el amor, el odio, la tristeza o corazón guarda con o sin razón.
la misma alegría, aunados con el deseo de cam-
biar el mundo, nos impelen a actuar y a crear sin Por ello, lo mejor que el hombre ha encontrado
que haya poder humano que pueda detener dicha dentro de sí y de manera absurda, es desbordar por
actuación. su piel y su mirada las cosas que piensa, encuentra
y escucha, que marcan para siempre su corazón.
Las sensaciones que están siempre presentes de La razón lo lleva a elevar sus placeres hasta que se
manera latente pueden ser reflejadas al final con pierdan en la inmensidad de las alturas, para que
una expresión, un verso, un trino, y quizá sin nin- en algún momento sean vistos o escuchados por
gún tesón ayuden a palpitar el corazón. Allí los alguien y se quede en el corazón de aquel que
pensamientos más profundos se encuentran para comparta su dolor o situación.
ser libres; sin presión alguna, se libera lentamente
al representar los secretos que su alma esconde y El arte, así entendido, sea cual sea su manifesta-
que carcome, sin darse cuenta, el centro mismo de ción, ha de convertirse en una herramienta, en una
su existencia. estrategia, en una posibilidad de entender mejor
la vida, para aprehenderla y poseerla en toda su
Para romper con los esquemas de la vida y pensar extensión.
y reflejarnos como seres humanos, vale la pena y

63
MOvIMIEntO

4. En donde la verdad...

64
SOCIOlOgía

6. La mentira que oculta una


innegable realidad...

7. Que pide a gritos...

5. Jamás sea silenciada por el


olvido, la impunidad, y...

LILIANA SILVA
SOCIOLOGÍA. IX SEMESTRE
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
lilianandresilva@hotmail.com 8. Cantos de libertad y justicia.

65
MOvIMIEntO

Arte Callejero

Centro de Bogotá

66
SOCIOlOgía

Mercado de las Pulgas

Mercado de las Pulgas

ANDREA MUÑOZ
ancamusa@yahoo.es

67
Movimiento

UN DÍA CUALQUIERA
PEDRO CÁRDENAS
SOCIÓLOGO
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
pedrocardenasavila@gmail.com

Deja que tus prendas caigan en la cama,


que cada una de ellas se mezcle entre las sábanas,
que tu sonrisa nerviosa se note por tu desnudes,
y tu cuerpo tembloroso se agite por mis manos.
Permite que tu pecho se estremezca,
que se hinche por el roce de mis dientes,
que tus piernas se suelten y tu ombligo se muerda,
que el vacío entre en tu sexo húmedo y dilatado,
que el sudor sea una promesa para compartirse,
que el tiempo no importe, que las palabras
sean dichas sin pudor, y los labios se rompan.

¿SABES ALGO DE MÍ?


PEDRO CÁRDENAS
SOCIÓLOGO
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
pedrocardenasavila@gmail.com

¿Debo enumerarte nuevamente quién soy yo?


Sólo te lo repetiré una vez más,
para que cuando lo vuelvas a ver, no te tome por sorpresa:

a. Soy una idiota que lee al revés historias sin sentido, de hadas y nomos,
b. Gozo con tener libres mis pies del suplicio de los zapatos,
porque me gusta que ellos conozcan la superficie del suelo,
c. Amo los títeres, los cuentos y las expresiones exageradas,
d. Soy una vieja enemiga de lo común, y lectora insaciable
de cartas de papel.

Pensando mejor lo que te acabo de enumerar,


me doy cuenta, y te puedo afirmar, que ya no te necesito.

68
Movimiento

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Sociología

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Movimiento

72
Movimiento

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Sociología

75
Movimiento

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Sociología

77
Sociología

PARA ESTAR EN
MOVIMIENTO
ORIENTACIONES PARA LOS AUTORES

1. Movimiento es una revista de estudiantes de la Facultad de Sociología de la Universidad Santo Tomás. Está
abierta a los estudiantes de la facultad que deseen dar a conocer sus trabajos sobre aspectos relacionados con
la sociología. De igual manera, es un medio de expresión estética para los autores y un canal de difusión de
eventos académicos y culturales.

2. La publicación de trabajos académicos y artísticos en Movimiento se fundamenta en las siguientes normas:

1. Los trabajos destinados a ser publicados deben ser artículos originales y representar un aporte a la investiga-
ción y el análisis desde la mirada sociológica que permita entender, interpretar y analizar la compleja realidad
social.

2. Los textos deben ser presentados en tamaño carta, en letra Arial, 12 puntos, con 1,5 espacios, y su extensión no
debe sobrepasar las 3 cuartillas. Debe agregarse archivo magnético del documento en Word e incluir cuadros,
gráficas, tablas y anexos, si el artículo los tiene.

3. Las imágenes deben entregarse en formato JPEG, con reducción Dpl de 300, con un tamaño mínimo de 6 cm.

4. Los cuadros, gráficos o figuras deberán aparecer numerados de manera continua e indicando en el texto el
lugar en que deben aparecer o si deben figurar como anexos.

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de trabajos científicos. La forma de citar referencias a pie de página en la bibliografía deberá conservar las
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original, respetando el estilo utilizado por el o los autores.

8. Las ideas expresadas en los artículos serán responsabilidad de cada autor.

9. Los trabajos deberán remitirse a: revistamovimiento@hotmail.com

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