MI CARRO

Mi carro sale del cielo.

Su placa es JBG730.
Y su identidad es una Hamert

Soy la propia conductora de este vehículo.

Allí viajan personas muy importantes a mi lado; mi mamá en el puesto de adelante,

atrás mi hermanito, y mi abuela Lucy.

Este carro anda a 60 Km. por hora, porque es una velocidad normal, porque es una
velocidad adecuada para ir por las calles de la vida, aunque en algunas ocasiones me
acelero un poco o por el contrario me freno por que me da miedo seguir pero si embargo
sigo mi camino y así vuelvo nuevamente a la velocidad corriente.

Mi carro se dirige hacia me meta que es mi realización como persona.

En esta trayectoria he encontrado miles de obstáculos que intentan hacerme frenar o en
su peor instancia chocar y así perder el rumbo. Estos son los problemas y todos esos
altibajos que me hacen sentir caer.

Normalmente le hago un mantenimiento preventivo a mi auto, porque vigilo que mi

vida este marchando hacia la dirección correcta, si hay un problema lo trato de
solucionar eficazmente. Recibiendo consejos y teniendo muy claro que de los errores se
sacan las mejores oportunidades.

El trafico esta calmado, porque me relaciono muy bien, no he tenido choques, pues me
relaciono muy bien con los demás y por eso sigo andando tranquilamente.

En la mayoría de los casos las señales que encuentro, son luces verdes aunque en
algunos momentos me detengo porque me encuentro luces rojas.

La actitud que asumo hacia esas señales es satisfactoria porque las comprendo bien,
Ya que me dicen si me tengo que detener, en que momento y cuando puedo continuar.

Estoy cargada de valores, pero mientras viajo voy adquiriendo y fortaleciéndome aún
más. Estos son indispensables en mi formación integral.

Los defectos y antivalores son los elementos que no tienen ningún valor y que me
estorban mucho en mi carro, por eso a medida que viajo los voy dejando tirados en
lugares lejanos para que no vuelvan a hacer parte de mi.

En el transcurso de mi viaje que lleva 17 años de trayectoria me he sentido muy bien

porque me he llenado de las muchas experiencias que me han hecho crecer como
persona y me van a servir de gran apoyo en mi futuro.

Cuando hay tacos pequeños me empiezo a desesperar, pero calmadamente continuo y

me siento muy bien.
Veo con buenos ojos el futuro que me espera, en la condición de mi carro. Porque estoy
completamente que voy a lograr mis metas.

Si tengo un choque me recupero y sigo.

Y me propongo fijamente seguir manejando con calma siempre y sin perder de vista mi
punto de llegada.