En memoria a los políticos carlistas desde el recuerdo a D.

Francisco Navarro
Villoslada
por S. G.

En Navarro Villoslada, los jóvenes carlistas queremos saludar a todos los políticos carlistas que
representaron a nuestros mayores en los Ayuntamientos, en la Diputación Foral de Navarra, en
las Cortes Generales y en el Senado, durante la segunda mitad del siglo XIX hasta avanzado el
siglo XX.

Los políticos carlistas han sido abundantes, fieles a su compromiso de vida. Surgieron como
natural expresión de una sociedad consciente, comprometida y organizada. Su heroísmo fue
anónimo, y menos llamativo que el de nuestros soldados y generales. Su heroísmo es anterior al
de estos últimos pero sin duda siguió su profunda huella. Este heroísmo silencioso y anónimo,
del todo necesario, ha perdurado durante los 176 años de edad que tiene el término “carlista”.

· Navarro Villoslada, mantuvo con firmeza la Unidad Católica de España vulnerada por la
Constitución liberal de 1876.
· Mantuvo los Fueros vascongados abolidos por Cánovas del Castillo.
· Mantuvo los derechos de ese gran rey don Carlos VII –este año recordamos el centenario de
su fallecimiento-, que son los derechos de la Monarquía de las Españas.
· Mantuvo los derechos del Rey que tremoló la bandera de la cristiandad y legitimidad frente a
la bandera de la Revolución;
· la bandera de Dios frente a la secularización y el relativismo;
· la bandera de la Unidad Católica frente a leyes que conllevarán, en 1931 y de nuevo hoy,
arrancar el crucifijo de las escuelas y la sociedad;
· la bandera de la persona y la sociedad bien constituida frente a la opresión que conlleva una
libertad mal entendida, una libertad engañosa y peor practicada.
· Mantuvo los derechos del Trono y la Autoridad frente a la Revolución liberal mansa –que
siempre trae la radical o violenta-, frente a la Revolución liberal que se escondía -no sin astucia-
tras un débil trono, que de tal sólo tenía el nombre, como República coronada.

El rey, y los políticos, juraban ante los Santos Evangelios defender los derechos de Dios, los
derechos del hombre y cuerpos sociales basados en Aquel, los Fueros, la personalidad y libre
desarrollo de los cuerpos intermedios, la tranquilidad y la justicia, la seguridad, y la honradez
frente a la corrupción.

Los jóvenes necesitamos una intensa vida cristiana para amar a Dios y a los hombres por Él, y
no caer en el materialismo más grosero. Los jóvenes necesitamos formación y unión para
preparar el futuro. La sociedad necesita unos buenos políticos. Y no sólo buenos, sin también
representativos, porque el actual Régimen político en España no sólo es antinatural en sus leyes
y anticristiano al expulsar a Jesucristo de la Constitución, las leyes y los lugares públicos, y no
sólo estimula la corrupción de todo tipo, sino que tampoco es verdaderamente social y
representativo.

El mayor enemigo de la Política es el liberalismo, la actual forma de hacer política, los actuales
partidos con mando y los políticos del actual candelero.

Preparando el futuro y mirando con esperanza a él,

Los jóvenes carlistas.

DIOS, PATRIA, REY