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ARTÍCULOS
CIENTÍFICOS

Rehabilitación visual de pacientes


con enfermedades retinianas que
cursan con baja visión
Irene Verde López O.D. nº 15.781 - Lema Gesto I. - Piñeiro Ces A.

Objetivo: Evaluar la eficacia del tratamiento rehabilitador en los casos leves y moderados de baja visión (BV) por
enfermedades retinianas, analizando las patologías que con más frecuencia producen esta deficiencia visual.

Métodos: Estudio transversal realizado sobre 65 pacientes de la Unidad de Baja Visión. Valoramos la agudeza visual
de cerca y lejos con optotipos específicos para BV, sin y con corrección óptica, la sensibilidad al contraste y las alte-
raciones del campo visual central con la rejilla de Amsler. Realizamos la rehabilitación visual y un control un mes des-
pués de la adaptación de la ayuda para ver su eficacia.

Resultados: Los pacientes afectados de BV en nuestro estudio se encuentran, con más frecuencia, entre 60 y 80
años. Afectó por igual a hombres y mujeres. Las patologías predominantes en BV fueron la retinopatía diabética (RD)
(41%), seguida de la degeneración macular asociada a la edad (DMAE) (21%) y la degeneración miópica (DM) (13%).
La RD produjo deficiencias visuales en los pacientes antes que la DMAE y la DM afectó con más frecuencia a las
mujeres. En la mayoría de la muestra la agudeza visual de cerca mejoró de A12-13 sin corrección, a lectura de letra
periódico con corrección (P≤0.001). Los pacientes con DMAE presentaron las agudezas visuales de cerca más bajas,
pero tras la rehabilitación alcanzaron lectura de letra periódico con mayor frecuencia. La ayuda principal más pres-
crita para tareas de cerca fueron los microscopios (gafa prismática) en el 74% de los casos. Los filtros fotocromáti-
cos fueron la ayuda secundaria más demandada.

Conclusiones: Los pacientes con enfermedades retinianas que cursan con BV pueden mejorar mucho en las tareas
de cerca y en las actividades diarias con ayudas visuales sencillas y fáciles de manejar por el paciente.

Palabras claves: países europeos este porcentaje se acerca al


2%. Por lo tanto, en España el número de
Baja visión, RD, DMAE, microscopios, filtros afectados oscilaría entre 400.000 y 800.000
fotocromáticos. personas2.
El propósito de la unidad de BV es ofrecer
INTRODUCCIÓN atención especializada a pacientes con defi-
ciencias visuales con el fin de facilitar la inte-
En 1989 la Organización Mundial de la Salud gración familiar, social, laboral o educativa, así
(OMS) diferencia el concepto de ceguera y como la normalización en su vida cotidiana.
baja visión (BV) basándose en los parámetros Para ello, es muy importante tomar contacto
de agudeza visual y campo visual. Así, pode- con el paciente desde el primer momento,
mos definir los sujetos con BV como aquellos cuando todavía es posible una labor rehabili-
cuya agudeza visual con la mejor corrección tadora con ayudas sencillas y el paciente
óptica es inferior a 0.3 y/o con un campo siente que dicha rehabilitación es útil3. La
visual menor de 10º1. Se considera que estas población con BV tiene muchas dificultades
personas tienen un resto visual suficiente en actividades de la vida diaria. Estas perso-
para ver la luz, orientarse por ella y utilizarla nas cada vez se van apartando más de activi-
con propósitos funcionales. Según estimacio- dades sociales y se vuelven socialmente soli-
nes de la OMS, al menos el 1% de la pobla- tarias4. Una de las actividades que se ve
ción mundial está afectada de BV. En diversos particularmente afectada en estos pacientes

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es la movilidad independiente. Para mos de medios para estas rehabilita-


50
las personas mayores el deseo de ciones tan laboriosas, ni es el objeti-
ser autosuficiente es uno de los estí- vo de esta consulta. De los 61 41
mulos psicológicos más fuertes5. Las pacientes que rehabilitamos, 31 fue- 40
tareas que presentan realmente difi- ron mujeres y 30 hombres. Se inclu-
cultades son aquellas en las que el yeron en el estudio todos aquellos
30
alto o bajo contraste entra en juego o pacientes con un resto visual sufi-
en las que el detalle visual sea el fac- ciente para realizar la rehabilitación 21
tor determinante para desem- en la consulta, adaptar ayudas ópti- 20
peñarlas, como por ejemplo: leer, cas sencillas y el enfermo poder 13 13
maquillarse, afeitarse, cortarse las manejarlas. Excluimos del estudio los 10
10
uñas, cocinar, coser6... pacientes con una agudeza visual de
Actualmente las patologías que oca- cerca de A20 o inferior o que mostra-
0
sionan la mayoría de los casos de BV ron desinterés por la rehabilitación. r c j e

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son las patologías retinianas. Dentro El material utilizado en la exploración

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de ellas podemos destacar la dege- y en la rehabilitación fue casi todo

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neración miópica (DM), la degenera- material específico de BV. El optotipo

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ción macular asociada a la edad utilizado para medir la agudeza visual
(DMAE), la retinopatía diabética lejana (AVL) fue el test ETDRS, Figura 1.
(RD), el desprendimiento de retina “Early Treatment Diabetic Retino-
(DR) y la retinosis pigmentaria, entre paty”. La sensibilidad al contraste se premontados asféricos de 2x hasta
otras7. exploró con el test Gradual de Opsia 8x), lupas (de apoyo, de costura, con
El objetivo del trabajo es evaluar la para discernir qué pacientes necesi- iluminación) y 6 suplementos de fil-
eficacia del tratamiento rehabilitador taban filtros de absorción como tros fotocromáticos. Las ayudas no
en los casos leves y moderados de ayuda principal o secundaria. La ópticas utilizadas fueron los flexos de
BV debido a enfermedades retinia- exploración de la agudeza visual pró- luz fría fluorescente, rotuladores de
nas, analizando las patologías que xima la realizamos con el test de Kee- punta gruesa, atriles y tiposcopios.
con más frecuencia producen esta ler, que indica junto a la notación el Con respecto al método seguido en
deficiencia visual y las ayudas pres- aumento necesario para conseguir el estudio, todos los pacientes fueron
critas. una AV comparable al tamaño de la incluidos en un protocolo, que se
letra de periódico (aproximadamente realizó entre el primer día de la con-
SUJETOS, MATERIAL Y MÉTODO 0.4 en la escala decimal). Utilizamos sulta y la valoración al mes (este pro-
la rejilla de Amsler para valorar altera- tocolo se ajustó con valores numéri-
Estudio transversal realizado entre ciones del campo visual central cos para la base de datos del
enero de 2004 y enero de 2005 (escotomas positivos, relativos o programa estadístico SPSS). En
sobre 65 pacientes de la Unidad de absolutos) y el test de Ishihara para dicho protocolo se incluyeron: los
Baja Visión del Instituto Gallego de descubrir las posibles alteraciones datos de filiación, motivo de la con-
Oftalmología (INGO), Hospital Pro- en la visión de los colores. Las ayu- sulta (destacando las tareas en las
vincial de Conxo, Santiago de Com- das ópticas utilizadas en la Unidad y que los pacientes acusaban más el
postela. El estudio incluyó a todos para este estudio son las de la caja déficit visual y desde cuándo), diag-
los pacientes que acudieron por pri- de pruebas completa para BV de nóstico principal y edad de inicio,
mera vez a la consulta durante este AVS, caja de pruebas de Keeler, caja posibles diagnósticos secundarios,
periodo y a los pacientes ya rehabili- de pruebas de Eschenbach, ayudas tratamientos oculares previos y
tados que necesitaron nueva valora- de Novovision (sobre todo microsco- actuales. Además del interrogatorio
ción de la ayuda prescrita. Los pios asféricos y lupas) y kit de prue- realizado por nosotros, los pacientes
pacientes fueron citados al mes para ba de filtros fotocromáticos (Corning de primera vez acudían a la consulta
evaluar de nuevo el manejo de la CPF). En la consulta no disponemos con un informe de su oftalmólogo, en el
ayuda y su uso real. Conseguimos de ayudas electrónicas. Dentro de que habitualmente nos informaban de
mejorar la visión con el tratamiento las ayudas ópticas manejadas desta- los CV periféricos. También incluimos
rehabilitador en el 93.44% de la caremos, por su utilidad en nuestra en el protocolo los datos del estudio
muestra, con edades comprendidas consulta, los microscopios (6 gafas funcional del resto visual: AVL y test de
entre 31y 88 años. Cuatro pacientes, prismáticas de prueba, desde +4,00 sensibilidad al contraste (monocular y
con resto visual mínimo, los remiti- D con 6 Δ base interna AO hasta binocular) sin corrección, con su gafa y
mos a la ONCE, ya que no dispone- +12,00 D con 14 Δ y 7 microscopios con la mejor corrección adquirida obje-

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ARTÍCULOS
CIENTÍFICOS

El análisis de las patologías retinianas que cur-


A18-19-20 5 saron con BV se representa en la Figura 1;
podemos ver que la RD fue la patología más fre-
A16-17 6 cuente de la muestra. El 38% de los pacientes
poseía un diagnóstico secundario asociado a la
A14-15 11
patología principal, en la mayoría de los casos
catarata. Los pacientes con RD fueron los que,
A12-13 34
con mayor frecuencia, eran ya pseudofáquicos.
A10-11 21 La correlación de las variables diagnóstico pri-
mario y sexo nos destacó la mayor presencia en
A8-9 11 mujeres de DM (75%) y de RD (56%).
Las agudezas visuales de lejos fueron muy
Periódico 10
bajas: un 25% poseía una agudeza visual menor
de 0.100, sólo un 5% superaba el 0.500. El
0 10 20 30 40 46% de los pacientes con RD presentaba una
agudeza visual de lejos menor de 0.100 y sólo
Figura 2.
en un 16% de la muestra la agudeza visual de
lejos llegó 0.300-0.400. El análisis de la sensibi-
tiva y subjetivamente; estado del campo visual lidad al contraste evidenció pérdida de contras-
central con rejilla de Amsler; valoración de la te en todas las frecuencias. En el grupo de fre-
visión de los colores y AVP sin corrección o con cuencias bajas la mayoría de los pacientes
su gafa de cerca, a la distancia elegida por el tienen AVL inferior a 0.100 y el contraste tam-
paciente. Con estos datos comenzamos la reha- bién es muy bajo (19 pacientes en el contraste
bitación visual, preferentemente para visión pró- más bajo, C1; 8 en C2; 3 en C3 y 3 en C4). En
xima, registrando en el protocolo la ayuda o ayu- el grupo de frecuencias medias las AVL son
das ópticas y no ópticas preferidas por el mejores pero sigue predominando el contraste
paciente, la agudeza visual próxima alcanzada y bajo (32 pacientes se quedan en el C1 y 8 en
velocidad lectora, así como la mejoría en las C2 y 1 en C6). En las frecuencias altas sólo
tareas de la vida diaria. encontramos 5 pacientes en C1, 6 distribuidos
El estudio estadístico se realizó con la ayuda del entre C2 y C3 y 2 en C6.
programa SPSS para Windows versión 11.5. El En el análisis de la alteración del campo visual
análisis estadístico descriptivo se valoró con la central evidenciamos que un 32% de la muestra
determinación de medias, desviaciones típicas, poseía un Amsler normal en monocular. Al anali-
máximos y mínimos, medianas y percentiles para zarlo en binocular observamos que este porcen-
los datos cuantitativos y el porcentaje para los taje de Amsler normal aumentó a un 52%, en el
cualitativos. 13% detectamos metamorfopsias, en el 11%,
La comparación entre los valores cualitativos se escotomas paracentrales, en otro 11%, escoto-
realizó con la prueba del chi-cuadrado y las mas con afectación del punto central, en el
tablas de contingencia. La comparación entre 10%, escotomas y metamorfopsias y el 3% no
dos variables relacionadas no paramétricas se logró ver el test. Al analizar la relación entre las
realizó con el test de Mann-Whitney-Wilcoxon. patologías analizadas y los resultados del Ams-
Consideramos con significación estadística ler observamos que el 69% de los pacientes
una diferencia poblacional de P≤0.05. con DMAE, el 48% con RD y el 50% con DM
presentó alguna alteración en el test. En la RD
RESULTADOS destacaron los escotomas paracentrales
(58%).
La edad media de la muestra estudiada fue de En el 36% de los pacientes observamos alte-
66.6 ± 13.2 años (de 31 a 88 años, con un ración de los colores mediante la realización
rango de 57). Podemos destacar que el 60% del test de Ishihara. De ellos, el 3% no logró
de los pacientes se encuentra en un rango de distinguir ninguna letra o color. La alteración
20, entre 60 y 80 años. El 50.8% fueron muje- en este test implicó a todas las patologías
res y el 49.2% varones. Observamos que el estudiadas.
45.2% de las mujeres se ve afectado entre los La AVP sin corrección se expresa en porcen-
60-70 años y el 40% de los varones una déca- tajes en la Figura 2. Destacaremos que el
da más tarde. 11% de la muestra tenía agudezas visuales

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muy bajas, entre A20-A16; estos adaptamos microscopios (gafas pris- 74


80
pacientes fueron los más difíciles de máticas) como ayuda óptica principal
rehabilitar. La mayoría de la muestra para tareas de cerca. En los pacientes
presentó una agudeza visual de A12- con RD esta ayuda óptica no se pres- 60
13, formato que se corresponde con cribió siempre para lectura. En
el utilizado en los titulares de los muchos casos fue para poder ver las
periódicos y de A10-11. Un ejemplo dosis de insulina. Los pacientes con 40

representativo del tamaño de esta DM mejoraron la visión próxima con


letra es un modelo entre el tamaño de gafas convencionales, disminuyendo
20
un subtítulo y de una entradilla perio- en 6-7 dioptrías su corrección de 10 10
5
dística. El 11% tenía una agudeza lejos. A todos los pacientes se les
visual de A8 (consiguen ver letra indicó la necesidad del uso de flexos 0
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periódico con un +4.00 o +5.00) y el de luz fluorescente enfocando la

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10% leyó el periódico ajustando su página de lectura, el uso del atril para

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gafa de cerca y con la ayuda de luz lecturas prolongadas y tiposcopios

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fluorescente. en algunos pacientes con escotomas.

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La correlación entre la agudeza visual El estudio comparativo (tablas de Figura 3.
de cerca y el diagnóstico, analizada contingencia) entre la ayuda óptica
con tablas de contingencia y chi-cua- principal y la alteración de campo
drado, mostró una significación esta- visual central mostró que la prescrip- La relación entre la agudeza visual de
dística de P<0.012. La agudeza visual ción de gafas convencionales fue cerca rehabilitada y el diagnóstico tam-
de cerca más frecuente, de A12-13, hecha en pacientes con campo visual bién nos muestra una significación esta-
fue para todas las patologías. El 23% normal y en un paciente con meta- dística de P=0.041, destacando la
de los pacientes con DMAE presentó morfopsias. Las gafas prismáticas, buena AVP que alcanzan patologías
las agudezas visuales más bajas con distintos aumentos, fueron pres- como la RD o la DMAE. Casi el 70% de
(A18-20). critas con el campo visual normal, así los pacientes con estas patologías
En la Figura 3 se representa la distri- como en pacientes con escotomas alcanzó AVP de A8-9 o lectura de letra
bución de las ayudas ópticas princi- centrales, paracentrales y metamor- periódico. Las mejorías de los pacien-
pales prescritas, las proporcionadas a fopsias. tes, tras la rehabilitación, las podemos
los pacientes como primera opción o El análisis de la agudeza visual de ver sobre todo en tareas de cerca,
las más demandadas por ellos. Con cerca rehabilitada (Figura 4) nos evi- como leer el periódico, revistas, afeitar-
respecto a la valoración de la rehabili- denció que más de la mitad de la se, coser, manejo de la insulina o cubrir
tación visual podemos destacar, en muestra alcanza la lectura de letra documentos.
nuestros casos, como ayuda óptica periódico (0.4). Todos los pacientes Además de estas ayudas principales,
principal los microscopios en forma con una agudeza visual de cerca pre- también se prescribieron para comple-
de gafa prismática (de +6.00 D y via de A11 alcanzaron lectura de letra tar la rehabilitación otras ayudas ópti-
+8.00D principalmente), que fueron periódico, excepto dos. Aquellos con cas (magniclips en un 3%, lupas en un
prescritos en un 74% de la muestra. una agudeza previa de A12-13 alcan- 8%, telescopios en un 3%, filtros foto-
En el 10% prescribimos una gafa con- zaron, en un 72%, la lectura de letra cromáticos para exteriores en el 30%,
vencional para cerca. Otro 10% lo periódico. Los enfermos con visión actualización de la gafa covencional de
rehabilitamos con lupas (lupas de de cerca de A16-20 tuvieron peor lejos en el 15%). La rehabilitación de la
apoyo y de costura), en pacientes a pronóstico y alcanzaron tan sólo, tras agudeza visual de lejos es más difícil,
los que no les interesaba la lectura. la rehabilitación, una agudeza visual los pacientes normalmente mejoraron
Sólo se prescribíó un microscopio de A14-15. La Figura 5 representa, sólo una línea de visión tras el ajuste de
asférico monocular de 5x en un mediante diagramas de cajas, la la refracción, pero sí mejoraron el con-
paciente con un resto visual muy bajo. mejoría en la AVP rehabilitada. traste y les disminuyó el deslumbra-
El 5% mejoró su capacidad lectora Observamos que la mediana de la miento con los filtros fotocromáticos.
con filtros fotocromáticos CPF 450, AVP previa se sitúa en el valor 4
que les aumentaban el contraste y (A14-15) y en la rehabilitada la DISCUSIÓN
disminuían el deslumbramiento. mediana sube al valor 7 (letra periódi-
Al analizar la relación entre la ayuda co). La diferencia entre la agudeza Los pacientes analizados en este estu-
óptica y la etiología de la BV observa- visual de cerca previa y rehabilitada dio no incluyen enfermos en edad
mos que en un 92% de los pacientes muestra (chi-cuadrado) una significa- pediátrica, ya que los niños con BV
con RD y en un 77% con DMAE ción estadística de P<0.0001. suelen acudir a centros especializados

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ARTÌCULOS
CIENTÌFICOS

porque los enfermos con deficiencias visuales


A14-15 que necesitaban este tipo de rehabilitación los
remitimos a la ONCE. Nuestra Unidad no dis-
A12-13 13
pone de medios ni de personal para estas reha-
bilitaciones con restos visuales mínimos. Valo-
ramos el resto visual, la agudeza visual antes y
A10-11 13 después de la rehabilitación y proporcionamos
al paciente la mejor ayuda en función de sus
A8-9 15 expectativas y su mejoría.
El aumento de la esperanza de vida en los paí-
ses desarrollados es determinante entre otras
Periódico 53
razones en el incremento de la frecuencia de
pacientes afectados de baja visión por DMAE.
En este grupo de pacientes, el importante défi-
0 10 20 30 40 50 60
cit visual producido por su patología oftalmoló-
Figura 4. gica, que a menudo se incluye en la considera-
ción de “ceguera legal”, puede ser parcialmente
aliviado mediante el empleo de ayudas visuales
de aprendizaje6,7. Esto nos da un sesgo a la ópticas y no ópticas2, 7 ,8. En nuestro estudio la
muestra para compararla con otros estudios, patología más frecuente no fue la DMAE, sino
sobre todo los realizados en el entorno de la la RD. Estos resultados no coinciden con la
ONCE y grandes centros de rehabilitación mayoría de los estudios hechos sobre
visual integral. Consideramos que nuestra patologías que causan baja visión, en los que
muestra aporta un número de casos suficientes destaca la DMAE como la patología más fre-
para el análisis efectuado, teniendo en cuenta cuente7-10. En nuestro caso, la frecuencia tan
la incidencia de la BV en la población y que es alta de RD se debe a un sesgo, ya que un
un estudio transversal de un año. Para la reco- grupo importante de pacientes procede de la
gida de datos de los pacientes elaboramos un Unidad de Retina Médica del Servicio de Oftal-
protocolo (ya comentado en métodos) en el mología, donde consultan un volumen muy alto
que incluimos todos los datos que considera- de pacientes diabéticos.
mos necesarios para el estudio de las deficien- El estudio realizado muestra que el tramo de
cias visuales y su posible rehabilitación y que edad más frecuente de los pacientes afectados
nos facilitó el estudio comparativo estadístico. de Baja Visión fue entre 60 y 80 años, edad
La Unidad de Baja Visión del INGO se creó comprendida entre la prejubilación y la jubila-
como una consulta para apoyar las Unidades ción. Resultados similares fueron descritos en
de Retina Médica y Quirúrgica, donde tratan un otros estudios2, 4, 8-10. En nuestro trabajo la reti-
volumen muy importante de pacientes que nopatía diabética afectó a los pacientes a eda-
necesitan rehabilitación visual, pero que en des más tempranas que la DMAE. Esta obser-
muchas ocasiones todavía no entran en los cri- vación ya se había hecho en otras series7, 9, 11.
terios de inclusión o filiación de la ONCE. Ade- El sexo no fue un factor determinante a la hora
más, sobre todo al principio, la mayoría de los de diagnosticar la baja visión, aunque se asoció
pacientes rechaza esta opción y siente que a algunas patologías. Resultados similares fue-
nuestra consulta es como una prolongación del ron encontrados en un estudio de la Universi-
tratamiento y seguimiento que reciben con su dad de Valencia12.
oftalmólogo habitual. El hecho de recibir a Dentro de las pruebas funcionales que realiza-
pacientes desde que comienzan con las dificul- mos, el test de Ishihara tenía como objetivo fun-
tades en VP explica las buenas visiones alcan- damental saber si el paciente presentaba algu-
zadas en la muestra y el manejo de ayudas sen- na afectación del color. Esto nos ayudaría para
cillas, como los microscopios (gafas orientar al paciente con el color del rotulador
prismáticas). que debería utilizar, color de los utensilios de
Como comentamos anteriormente, enfocamos cocina, etc3, 5. Sin embargo, estudios publica-
la rehabilitación preferentemente para tareas de dos por el Instituto de Oftalmobiología Aplicada
cerca y con ayudas fáciles de manejar para el de la Universidad de Valladolid13 ponen en duda
paciente. No prescribimos ayudas electrónicas la validez de este test para la detección de alte-

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raciones adquiridas de la visión cromá- DM. Esta patología se rehabilitó, en la


tica en pacientes diabéticos. Parece mayoría de los casos, con gafa con-
que, para el estudio de la visión de los vencional de cerca. En diversos estu-
colores en población de riesgo como dios, con este tipo de patologías,
diabetes, cataratas, glaucoma y neuritis también utilizaron preferentemente
es más fiable con el test de Farns- los microscopios para la visión próxi-
worth-Munsell13, 14. Nosotros no lo utili- ma2, 4, 7-10, 12, 13, 15. La razón de la pres-
zamos porque en ese momento no dis- cripción tan elevada de gafas prismá-
poníamos de él en la Unidad por ticas es que la mayoría de los
considerarlo muy largo para un pacien- pacientes todavía no se había menta-
te al que le realizábamos ya muchas lizado de su problema visual y acepta-
pruebas y no teníamos conocimiento ba esta ayuda como una gafa de
de la superioridad de este test. Por presbicia, con buenos resultados fun-
tanto, en nuestro estudio es posible cionales y estéticos. Además, todavía
que no detectásemos algunas altera- el deterioro visual permitía su utiliza-
ciones de los colores. ción. Los pacientes afectados de
Otra de las pruebas realizadas, impor- DMAE fueron los que poseían unas
tante para valorar la visión central, fue agudezas visuales sin corrección más Figura 5.
la de la rejilla de Amsler. Este test, muy bajas, pero sin embargo respondieron
sencillo para el manejo en la consulta, muy bien a la rehabilitación. Resulta- devolver la independencia a pacien-
nos permitió detectar escotomas cen- dos similares se publicaron en otros tes con agudezas visuales muy bajas.
trales o paracentrales. Por tanto, nos estudios13, 16, 18. Podemos concluir que la DMAE fue la
orientó para la forma de rehabilitar la En el año 2020 se estima que más de patología con más deterioro en VP
VP y en la utilización de ayudas no ópti- un 20% de la población será mayor que alcanzó mejores resultados tras
cas, como el tiposcopio o papel raya- de 65 años19. Con el aumento de la la rehabilitación con microscopios
do. Cuando un paciente con BV tiene esperanza de vida, hay un incremento (gafas prismáticas). En general, los
un trastorno grave e intenso de la asociado de las enfermedades cróni- pacientes con enfermedades retinia-
visión central debemos utilizar técni- cas, de la necesidad y coste del cui- nas que cursan con BV pueden mejo-
cas de rehabilitación diferentes, dado de la salud y de los problemas rar mucho en las tareas de cerca y en
todas ellas encaminadas a aumentar en las actividades diarias17, 18, 20. Por las actividades diarias con ayudas
el tamaño que va a ocupar la imagen tanto, la rehabilitación visual adquiere visuales sencillas y fáciles de manejar
en la retina y situando dicha imagen una gran relevancia, ya que puede por el paciente.
fuera de los límites del escotoma5.
Las mejorías obtenidas con la rehabi- BIBLIOGRAFÍA
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Gaceta Optica 422 enero 27

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