ABSORCIÓN DE LA DIRECCIÓN NACIONAL DE ARCHIVO HISTÓRICO
Hemos sido testigos de las constantes muestras de rechazo de los profesionales
archiveros a la aplicación de la norma que cercena la Dirección Nacional de Archivo Histórico (DNAH) del Archivo General de la Nación, colocándolo en una relación de dependencia, completamente artificial, dentro de la estructura del Instituto Nacional de Cultura, produciendo de esta forma una dualidad de responsabilidades de la protección del Patrimonio Documental de la Nación, pese a que la mencionada norma antitécnica, aparecía en el marco de una supuesta necesidad de evitar la duplicación de funciones en el Estado.
Estamos en completo desacuerdo con la absorción de la DNAH en el INC, lo cual
no hace sino desnaturalizar el objetivo y razón de ser del Archivo General de la Nación, además de romper el ciclo vital de la cadena documental, al considerar al documento de archivo como un elemento equiparable a una pieza de museo, un concepto que ignora por completo la teoría archivística y lesiona las bases del Sistema Nacional de Archivos; además de ir en sentido contrario a todos los sistemas de archivo existentes en Hispanoamérica.
Lamentamos que sin embargo, pese a que los diferentes pronunciamientos
emitidos anteriormente por las diferentes agrupaciones de archiveros, hayan hecho hincapié en lo mencionado arriba, las autoridades no hayan querido comprender el error técnico que se está permitiendo y la consecuente afectación de uno de los ingentes recursos de la identidad institucional del Estado: La memoria de gestión contenida en los documentos de archivo.
Sabemos que la lucha por la reposición de la DNAH al Archivo General de la
Nación continuará y no cesará hasta que las autoridades gubernamentales nos escuchen y rectifiquen esta medida antiarchivística, pese a que a la fecha la funesta norma se ha cumplido transfiriendo la DNAH y con ella su acervo documental al INC, medida que más bien nos compromete a seguir levantando nuestra voz de protesta hasta que la razón y la ciencia sean escuchadas.