La narrativa hispanoamericana de la segunda mitad

del S.XX

Características

La narrativa hispanoamericana de la segunda mitad del S.XX se caracteriza por

presentar dos tendencias similares entre sí: el Realismo Mágico (1940-1950) y el Boom
Hispanoamericano, movimiento que se produce a partir de los 50 y abarca toda la
segunda mitad del S.XX.

Las características del Realismo Mágico son:

 Denuncia crítica de las intenciones sociales y políticas en un determinado momento

y espacio.
 El realismo se funde con elementos fantásticos-mágicos: es el llamado Realismo
Mágico o lo real maravilloso, mezcla de realidad y fantasía.
 Se conserva el interés por el mundo rural pero se abre paso también al espacio
urbano.
 Mayor preocupación formal en las novelas, lo que manifiesta una innovación en las
técnicas narrativas.
 Presencia de elementos irracionales y subjetivos.

A partir de los 60 se produce un florecimiento espectacular de la narrativa

hispanoamericana, lo que da lugar al denominado Boom Hispanoamericano. Muchos
críticos señalan que el realismo mágico anterior desemboca en el Boom
Hispanoamericano. Por lo que las características de la anterior se dan en la mayoría de
las obras de los autores de Boom, aun así podemos matizar los siguientes:

 Aunque no faltan ejemplos de narraciones rurales hay un mayor interés por el medo
urbano.
 Prosigue el Realismo Mágico al mezclar la realidad y la fantasía.
 Renovación y experimentación formal y técnica que se dan en la ruptura de la línea
argumental y en cambios del punto de vista narrativo.
 Tendencia a la narración textual y discursiva con intendencia en la experimentación
del leguaje (superposición de estilos y registros lingüísticos diferentes)

Autores y Obras

Jorge Luis Borges: Ante todo es un excepcional autor de cuentos. Sus cuentos
están en cobras como Ficciones (1994) y El Aleph (1949 y 1952).
Miguel Ángel Asturias: El señor Presidente, una novela sobre el tema del
dictador.

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 Juan Rulfo: una colección de cuentos, El llano en llamas y una breve novela,
Pedro Páramo. Es una novela donde el protagonista es un pueblo, recrea el
mundo de los muertos.
Alejo Carpentier: El siglo de las Luces unas páginas de tema histórico en las
que el autor reflexiona sobre la revolución y el pensamiento revolucionario.
Julio Cortázar: Rayuela, es su obra más celebrada. Cortázar renueva el
lenguaje y distorsiona el tiempo, el espacio y la misma estructura narrativa: las
secuencias, especie de capítulos, de esta novela se pueden leer de diferente
orden.
Gabriel García Márquez: Cien años de soledad (contribuye a un universo
particular, mítico y maravilloso) , Crónica de una muerte anunciada, El amor en
los tiempos del cólera. También ha publicado su autobiografía con el título Vivir
para contarla y su última obra es Memoria de mis putas tristes.
Mario Vargas Llosa: Es miembro de R.A.E., escribe: La Catedral, Pantaleón y
las visitadoras, La tía Julia y el escribidor. Su última obra es Travesuras de la
niña mala.

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