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EX ALUMNOS DE MARÍA AUXILIADORA

-Mendoza- 2010

¿Quién fue DON ORIONE?

Don Orione nació el 23 de junio de 1872. En 1886 viajó a


Turín para ingresar en el colegio salesiano fundado por quien
sería su modelo y maestro, Don Bosco, a quien el joven
estudiante llegó a querer como a su propio padre.
A través de aquel santo viviente, Don Orione supo de otro
hombre de Dios a quien Don Bosco había conocido en
persona, cuya misión caritativa en pro del desamparado no
tenía precedentes, San José Benito Cottolengo, fundador de
la Casa de la Divina Providencia. Esos dos hombres marcaron
a fuego el espíritu del joven Orione

Se ordenó sacerdote en 1895 , puso manos a la obra


fundando la Pequeña Obra de la Divina Providencia y las
Pequeñas Hermanas Misioneras de la Caridad, consagrando
ambas órdenes a Nuestra Señora de la Guardia.

Al igual que San José Benito Cottolengo, Don Orione inauguró hospicios para albergar en
ellos al desprotegido, al enfermo y al abandonado.
En Italia trabajó incansablemente por una obra que resultó ser muy amplia y fructífera. El 19
de marzo de 1924 el futuro santo abrió el Pequeño Cottolengo genovés y el 29 de agosto de
1931 inauguró el magnífico Santuario de Nuestra Señora de la Guardia, en Tortona. La obra
crecía y se multiplicaba.
Don Orione inició la expansión de su obra en Brasil. Unos años después, desembarcó en
Buenos Aires el 13 de noviembre de 1921, con sus misioneros. Monseñor Francisco Alberti,
obispo de La Plata, le ofreció la iglesia de Victoria, localidad suburbana situada a 24 kilómetros
al norte de la ciudad de Buenos Aires, cerrada a la comunidad desde su edificación en 1913…
¡por falta de sacerdotes!
En el templo un grito repentino sobresaltó a los presentes. Al volverse, vieron a Don Orione
corriendo por el pasillo central, en dirección al altar mayor para postrarse de rodillas frente a
una imagen de la Virgen y el Niño que se hallaba a un costado
EX ALUMNOS DE MARÍA AUXILIADORA

-Mendoza- 2010

Monseñor Silvani le preguntó qué sucedía. Entonces, con viva emoción, exclamó:

- ¿Pero es que acaso no lo veis? ¡Es la Virgen de la Guardia! ¡Vine a la Argentina a edificarle
una iglesia pero ella fue mucho más diligente que yo y me la da hecha!”
Y sin dudarlo un instante, aceptó el templo para iniciar desde allí su misión, la obra de la
Divina Providencia en América .Don Orione se alojó en la contigua casa parroquial, edificada
en 1919 y desde ese punto mandó venir a los primeros sacerdotes de la congregación, con la
intención de que diesen impulso a la Pequeña Obra de la Divina Providencia en América.

El 6 de febrero de 1922 desembarcaron en el puerto de Buenos Aires seis religiosos . Se


trasladaron a San Fernando, para alojarse en la que desde entonces pasó a ser su casa
madre en América, la iglesia Nuestra Señora de la Guardia de Victoria. El 11 del mismo mes
Don Orione ofició su primera Misa en la Argentina, ante gran concurrencia y para beneplácito
de una feligresía que lo escuchó con devoción. Sin embargo no faltaron los días difíciles... El
lugar estaba poblado totalmente por inmigrantes, la mayoría italianos, que trabajaban en el
Ferrocarril , quienes trajeron de Europa sus costumbres, sus tradiciones y algunos de sus
males. Entre ellos extrañas tendencias socialistas y anárquicas, que entre sus consignas
principales destacaban un feroz anticlericalismo. Fueron innumerables las veces que Don
Orione y sus misioneros fueron agredidos de palabra y de hecho por aquellos pobladores
incultos y resentidos que veían en la Iglesia a un enemigo de temer. Todo lo soportaron los
valerosos sacerdotes, burlas, insultos, desprecios y agresiones físicas de todo tipo y a todas
ellas respondieron con sonrisas, bendiciones y ayuda material. Tanta fue su fuerza, tanta su
Fe y tal su apostolado, que menos de una década después, aquellos mismos que lo atacaban
se volcaban masivamente al templo para asistir a Misa, bautizar a sus hijos, unirse en sagrado
matrimonio y participar de todas las celebraciones y festividades religiosas, como nunca antes
se había visto en aquellos lares.

Don Orione abandonó la Argentina definitivamente el 24 de agosto de 1937.Falleció el 12 de


Marzo de 1940 en San Remo, Italia. “Jesús, Jesús, Jesús, ya voy”, fueron las palabras con
las que abandonó este mundo.

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