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INTRODUCCIÓN

El presente trabajo sobre axiología jurídica tiene que relacionarse necesariamente con los
valores, la ética, la moral, la filosofía jurídica, etc. Porque no pueden separarse ni ser
analizados independientemente unos de otros.
La axiología jurídica trata de valores jurídicos, es decir, tiene en cuenta cuáles son los
valores que harán correcto un modelo de derecho o que primarán a la hora de elaborar o
aplicar el derecho.
Los operadores de la justicia como los magistrados, fiscales, abogados, etc. Son los que en
su diario quehacer aplican el ejercicio de la axiología jurídica, como por ejemplo el juez al
dictar su sentencia o emitir los autos; y los abogados al defender a sus patrocinados
mediante sus escritos.
El juez sabe y acepta que su función central es hacer justicia a las partes involucradas en la
controversia, por lo que su sentencia se convierte en una suerte de notificación a la
comunidad de la actitud que los jueces deberían de tomar cuando surja un conflicto similar.
La axiología jurídica debería de imponer al juez el deber de dictar una sentencia que
contemple la preservación del orden y la seguridad, el poder y la paz y especialmente la
justicia como valor jurídico principal.

CAPÍTULO I: LOS VALORES Y LA MORAL


I. ANÁLISIS FILOSÓFICO DEL TÉRMINO VALOR
La génesis del valor humano se desprende del vocablo latín a estimable que le da
significación etimológica al término primeramente sin significación filosófica. Pero con el
proceso de generalización del pensamiento humano, que tiene lugar en los principales
países de Europa, adquiere su interpretación filosófica. Aunque es solo en el siglo XX
cuando comienza a utilizarse el término axiología (del griego axia, valor y logos, estudio).
en los tiempos antiguos los problemas axiológicos interesaron a los filósofos, por ejemplo:
desde Sócrates eran objetos de análisis conceptos tales como "la belleza", "el bien", "el mal".
Los estoicos se preocuparon por explicarse la existencia y contenido de los valores, a partir
de las preferencias en la esfera ética y en estrecha relación, por tanto, con las selecciones
morales, hablaban de valores como dignidad, virtud.
Los valores fueron del interés además de representantes de la filosofía como platón para el
cual valor "es lo que da la verdad a los objetos cognoscibles, la luz y belleza a las cosas, etc.,
en una palabra es la fuente de todo ser en el hombre y fuera de él".
A su vez Aristóteles abordó en su obra el tema de la moral y las concepciones del valor que
tienen los bienes.
En el modernismo resurge la concepción subjetiva de los valores, retomando algunas tesis
aristotélicas. Hobbes en esta etapa expresó: "lo que de algún modo es objeto de apetito o
deseo humano es lo que se llama bueno. Y el objeto de su odio y aversión, malo; y de su
desprecio, lo vil y lo indigno. Pero estas palabras de bueno, malo y despreciable siempre se
usan en relación con la persona que los utiliza. No son siempre una regla de bien, si no
tomada de la naturaleza de los objetos mismos".
Hasta este momento de la historia de los valores y luego en la axiología burguesa, que se
analizará seguidamente, se expresa el significado externo de los objetos para el hombre, se
hace un análisis idealista subjetivo, y desde este punto de vista los valores se fetichizan o se
reducen a propiedades naturales.
En la segunda mitad del siglo XIX, con la agudización de las contradicciones propias de la
sociedad capitalista, es cuando el estudio de los valores ocupó un lugar propio e
independiente en la filosofía burguesa convirtiéndose en una de sus partes integrantes.
Los filósofos burgueses aumentaron su interés por los problemas axiológicos. Lo cual
estuvo dado por las condiciones concretas de esa nueva sociedad, que conducían a sus
ideólogos a justificar el ficticio sistema de valores de la burguesía. Así se aprecia que la
necesidad del estudio de los valores ha existido siempre a través de las diferentes etapas
históricas, aunque respondiendo a los intereses de clases y a las condiciones concretas
existentes.
Max Scheler fue el filósofo burgués que más abordó el tema en esta etapa. Para él los
valores son cualidades de orden especial que descansan en sí mismos y se justifican por su
contenido. El sentimiento de valor es una capacidad que tiene el hombre para captar los
valores. Para Scheler: "el hombre es hombre porque tiene sentimiento de valor".
En igual marco histórico se desarrollaron los clásicos del marxismo, pero no se detuvieron
en el análisis de los valores, no los analizaron de forma independiente, aunque sí crearon
las bases para una solución científica de este problema. Entre algunas de ellas se
encuentran: un profundo análisis crítico de todo el sistema de valores de la sociedad
capitalista, que sirve de fundamento para el reconocimiento de los verdaderos valores de la
humanidad.
El estudio del papel del factor subjetivo para el desarrollo social, esta es la base para
comprender el significado de la valoración. En la teoría marxista del capital se analizan los
valores económicos. La doctrina leninista acerca de la coincidencia de los valores subjetivos
de clase del proletariado con las necesidades objetivas del desarrollo social. También los
postulados acerca de la posibilidad de diferentes valoraciones de determinados fenómenos
en dependencia de la pertenencia de clase del sujeto valorante. Estos señalamientos y
postulados constituyen una guía o fundamento metodológico para la teoría marxista
general de los valores.

II. CLASES DE VALORES


Se entiende por valor moral todo aquello que lleve al hombre a defender y crecer en su
dignidad de persona. El valor moral conduce al bien moral. Recordemos que bien es aquello
que mejora, perfecciona, completa.
El valor moral perfecciona al hombre en cuanto a ser hombre, en su voluntad, en su
libertad, en su razón. Se puede tener buena o mala salud, más o menos cultura, por
ejemplo, pero esto no afecta directamente al ser hombre. Sin embargo vivir en la mentira, el
hacer uso de la violencia o el cometer un fraude, degradan a la persona, empeoran al ser
humano, lo deshumanizan. Por el contrario las acciones buenas, vivir la verdad, actuar con
honestidad, el buscar la justicia, le perfeccionan.
El valor moral te lleva a construirte como hombre, a hacerte más humano.
Depende exclusivamente de la elección libre, el sujeto decide alcanzar dichos valores y esto
sólo será posible basándose en esfuerzo y perseverancia. El hombre actúa como sujeto
activo y no pasivo ante los valores morales, ya que se obtienen basándose en mérito.
Estos valores perfeccionan al hombre de tal manera que lo hacen más humano, por
ejemplo, la justicia hace al hombre más noble, de mayor calidad como persona.
Para lograr comprender plenamente los valores morales debemos analizar la relación que
éstos guardan con otro tipo de valores. Siendo el ser humano el punto de referencia para los
valores, cabe ordenarlos de acuerdo con su capacidad para perfeccionar al hombre. Un
valor cobrará mayor importancia en cuanto logre perfeccionar al hombre en un aspecto más
íntimamente humano.
Los valores infrahumanos: son aquellos que sí perfeccionan al hombre, pero en aspectos
más inferiores, en aspectos que comparte con otros seres, con los animales, por ejemplo.
Aquí se encuentran valores como el placer, la fuerza, la agilidad, la salud.
Los valores humanos inframorales: son aquellos valores que son exclusivos del hombre, ya
no los alcanzan los animales, únicamente el hombre. Aquí encontramos valores como los
económicos, la riqueza, el éxito, por ejemplo. La inteligencia y el conocimiento, el arte, el
buen gusto. Y socialmente hablando, la prosperidad, el prestigio, la autoridad, etc.
Valores instrumentales: son comportamientos alternativos mediante los cuales
conseguimos los fines deseados.
Valores terminales: son estados finales o metas en la vida que al individuo le gustaría
conseguir a lo largo de su vida.

III. EL VALOR Y SUS CARACTERÍSTICAS


Cuando hablamos de valor, generalmente nos referimos a las cosas materiales, espirituales,
instituciones, profesiones, derechos civiles, etc., que permiten al hombre realizarse de
alguna manera.
El valor es, entonces, una propiedad de las cosas o de las personas. Todo lo que es, por el
simple hecho de existir, vale. Un mismo objeto (persona o cosa) puede poseer varios tipos
de valores, por ejemplo, un coche puede ser útil además de bello.
El valor es pues captado como un bien, ya que se le identifica con lo bueno, con lo perfecto o
con lo valioso.
El mal es, entonces, la carencia o la ausencia de bien. Se llama mal al vacío, es decir, a lo
que no existe. Por ejemplo, el agujero en el pantalón, es la falta o ausencia de tela.
Las características de los valores son:
Independientes e inmutables: son lo que son y no cambian, por ejemplo: la justicia, la
belleza, el amor.
Absolutos: son los que no están condicionados o atados a ningún hecho social, histórico,
biológico o individual. Un ejemplo puede ser los valores como la verdad o la bondad.
Inagotables: no hay ni ha habido persona alguna que agote la nobleza, la sinceridad, la
bondad,
El amor. Por ejemplo, un atleta siempre se preocupa por mejorar su marca.
Objetivos y verdaderos: los valores se dan en las personas o en las cosas,
independientemente que se les conozca o no. Un valor objetivo siempre será obligatorio por
ser universal (para todo ser humano) y necesario para todo hombre, por ejemplo, la sobre
vivencia de la propia vida. Las valores tienen que ser descubiertos por el hombre y sólo así
es como puede hacerlos parte de su personalidad.
Subjetivos: los valores tienen importancia al ser apreciados por la persona, su importancia
es
Sólo para ella, no para los demás. Cada cual los busca de acuerdo con sus intereses.
Objetivos: los valores son también objetivos porque se dan independientemente del
conocimiento que se tenga de ellos. Sin embargo, la valoración es subjetiva, es decir,
depende de las personas que lo juzgan. Por esta razón, muchas veces creemos que los
valores cambian, cuando en realidad lo que sucede es que las personas somos quienes
damos mayor o menor importancia a un determinado valor.

IV. LOS VALORES MORALES


Como ya lo mencionamos son aquellos valores que perfeccionan al hombre en lo más
íntimamente humano, haciéndolo más humano, con mayor calidad como persona.
Los valores morales surgen primordialmente en el individuo por influjo y en el seno de la
familia, y son valores como el respeto, la tolerancia, la honestidad, la lealtad, el trabajo, la
responsabilidad, etc.
Para que se dé esta transmisión de valores son de vital importancia la calidad de las
relaciones con las personas significativas en su vida, sus padres, hermanos, parientes y
posteriormente amigos y maestros. Es además indispensable el modelo y ejemplo que estas
personas significativas muestren al niño, para que se dé una coherencia entre lo que se dice
y lo que se hace.

IV. CARÁCTER HISTÓRICO DE LA MORAL


Adolfo sánchez vázquez señala: si "por moral entendemos un conjunto de normas y reglas
de acción destinadas a regular las relaciones de los individuos en una comunidad social
dada, el significado, función y validez de ellas no pueden dejar de variar históricamente en
las diferentes sociedades
Así como unas sociedades suceden a otras, así también las morales concretas, se suceden y
desplazan unas a otras. Es por ello que podemos hablar de la moral de la antigüedad, de la
moral esclavista, feudal, de la moral burguesa, etc. La moral es un hecho histórico, y, por
tanto, la ética la considera como un aspecto de la realidad humana que cambia con el
tiempo. "la moral es histórica porque es el modo de comportarse un ser, el hombre, que es
por naturaleza histórico, es decir, un ser que se caracteriza por estar haciéndose, o auto-
produciéndose constantemente en el plano material, práctico, su vida espiritual". Algunas
doctrinas éticas ignoran el carácter histórico de la moral y se cae en concepciones
históricas. De este modo, el origen de la moral se sitúa fuera de la historia, fuera del hombre
real. Ante esto en el campo de la reflexión ética, sigue tres direcciones:
1. DIOS COMO ORIGEN O FUENTE DE LA MORAL. Las normas morales surgen de una
potencia supra- humana, por lo tanto las raíces de la moral están, fuera del hombre mismo.
2. LA NATURALEZA COMO ORIGEN O FUENTE DE LA MORAL. La conducta humana
moral, sería un aspecto de la conducta natural, biológica. Darwin llega a afirmar que los
animales conocen casi todos los sentimientos morales de los hombres: amor, odio,
felicidad.
3. EL HOMBRE COMO ORIGEN Y FUENTE DE LA MORAL. Un hombre dotado de una
esencia eterna e inmutable.
V. LAS NORMAS MORALES COMO EXPRESIÓN DE LOS VALORES MORALES
Sin asumir posturas pesimistas o cínicas, es necesario reconocer una realidad: en gran
medida el comportamiento de la sociedad indica que se están dejando de asumir los valores
morales, y en cambio se inyectan otros que podemos llamar anti valores, lo cual mina o
denigra las relaciones humanas. Las causas pueden ser diversas y combinadas, como: el
egoísmo excesivo, la influencia de algunos medios de información, conflictos familiares,
padres irresponsables en la crianza de sus hijos, presiones económicas, pobreza, etc.; pero
sobre todo el funcionamiento de un sistema educativo desvinculado de las necesidades
actuales de los ciudadanos. El proceso de desvalorización siempre ha estado presente en
todos los tiempos y civilizaciones; pero no tan acentuado ahora. Aunque todavía existen
personas que revelan una gran calidad humana, es decir, que asumen las normas
universales de toda sociedad, tales como la responsabilidad, la humildad, la honradez, la
solidaridad, el respeto, entre otras. La mayor parte de la población reproduce lo opuesto: la
negligencia, el engaño, la agresividad, la envidia, etc.

CAPÍTULO II: LA AXIOLOGÍA JURÍDICA


I. DEFINICIONES SOBRE AXIOLOGÍA
1.1. Axiología (del griego axios, ‘lo que es valioso o estimable’, y logos, ‘ciencia’), teoría
del valor o de lo que se considera valioso.
1.2. La axiología no sólo trata de los valores positivos, sino también de los valores
negativos, analizando los principios que permiten considerar que algo es o no valioso, y
considerando los fundamentos de tal juicio. (Encarta, 2000).
1.3. Axiología: parte de la filosofía que se estudia la naturaleza de los valores (lo
bello, lo bueno, etc.) y su influencia. (Bruguera, pág. 227).
1.4. Axiología o filosofía de los valores de max scheler, la consideraba que los
valores no eran propiedades sino objetos en sí, aunque diferenciados de los objetos reales
y de los ideales. Dentro de esta concepción el valor se halla fuera del espacio y del tiempo.
Es por lo tanto, indestructible (Bruguera, pág. 1988).
II. AXIOLOGÍA JURÍDICA.
2.1. DEFINICION:
*AXIOLOGÍA JURÍDICA: Enjuiciamiento crítico del derecho positivo desde un
determinado sistema de valores; pero también confrontación racional y análisis crítico de
los diferentes sistemas de valores que, de modo sucesivo (diacrónico) y simultáneo
(sincrónico), tratan de presentarse como legítimos o justo. La axiología jurídica habla no de
que es el derecho ( ontología jurídica) ni de cómo es de hecho aquí ahora (ciencia jurídica),
sino de cómo debe ser, con todo lo que implica al menos desde Hume y Kant semejante
salto cualitativo. Aparecen en ese sentido la axiología como una parte de la ética: ética
jurídica o análisis crítico de los valores jurídicos, teoría de la justicia principalmente, pero
incluyendo también a los demás valores como los de libertad, paz, igualdad, seguridad,
etcétera.
2.2. LA AXIOLOGÍA JURÍDICA.
La axiología jurídica trata el problema de los valores jurídicos, es decir, dilucida cuáles son
los valores que harán correcto un modelo de derecho o que primarán a la hora de elaborar o
aplicar el derecho.
Por ejemplo, en los ordenamientos jurídicos europeos no existe la pena de muerte, ya que el
valor consistente en que "el estado no prive de la vida a sus gobernados" es fundamental,
mientras que en algunos estados de estados unidos ese valor no existe; allí el estado puede
ejecutar a sus ciudadanos sin que ello sea un desvalor para el conjunto de la sociedad.
De todos los valores del derecho el más importante es el de "justicia". Tiene tanta
importancia que algunos autores designan a la axiología jurídica como teoría de la justicia.
La tolerancia podemos considerarla, también como un valor jurídico ya que de esta, nace el
respeto, admitiendo que existen otras personas, con distinta forma de pensar a la nuestra y
desde allí que es muy importante para realizar justicia. Uno de los exponentes más grandes
de la axiología jurídica es el maestro Luis Recasens Sichees.
La axiología jurídica o teoría de la justicia, que se encarga del estudio de los valores que se
encuentran incorporados al derecho positivo. Es decir, investiga como dice Del Vecchio:
"aquello que debe ser o debiera ser en el derecho, frente aquello que es, contraponiendo una
verdad ideal a una realidad empírica" pues resulta evidente, que el derecho persigue
siempre la realización de determinados valores jurídicos. Y de esta forma, toda legalidad
está apoyada en un sistema de legitimidad.
La justicia no es el dar o repartir cosas a la humanidad, sino el saber decidir a quién le
pertenece esa cosa por derecho. La justicia es ética, equidad y honradez. Es la voluntad
constante de dar a cada uno lo que es suyo. Es aquel sentimiento de rectitud que gobierna la
conducta y hace acatar debidamente todo los derechos de los demás. Hans Kelsen la define
de la siguiente manera: "la justicia es para mí aquello cuya protección puede florecer la
ciencia, y junto con la ciencia, la verdad y la sinceridad. Es la justicia de la libertad, la
justicia de la paz, la justicia de la democracia, la justicia de la tolerancia."
La justicia es considerada como valor y fin principal de la axiología jurídica (más que como
virtud subjetiva) al que se conceptualiza como "aquel conjunto de valores, bienes o
intereses para cuya protección o incremento los hombres recurren a esa técnica de
convivencia a que se llama derecho". El "ideal de justicia" o sea, ese conjunto de
condiciones protegidas por el derecho se puede considerar desde una perspectiva absoluta
naturalista dentro de lo cual todo derecho es justo y si no es justo es derecho. Pero desde
una perspectiva iuspositivista el derecho es condición de la justicia y a la vez esta es una
medida de valoración del derecho, por lo que se puede decir que un derecho positivo
determinado es justo o es injusto de acuerdo a un ideal de justicia subjetivo.
Todas las virtudes están comprendidas en la justicia. En definitiva, la verdadera justicia es
el arte de dar lo justo o hacer dar lo justo a un individuo, basándose en los principios del
arte del derecho, sin tener ningún tipo de discriminación o preferencia hacia ninguna
persona. Ya que todas las personas deben ser tratadas sin ninguna discriminación o
preferencia ya que así se estaría dando una justicia falsa, y no sería "dar a cada uno lo suyo",
sino "dar a él lo que le toque", dependiendo de su clase social o raza.
2.3. TEORÍAS AXIOLÓGICAS
Epicureísmo: Para el epicureísmo entonces, no existía realidad diferente que la materia. Lo
que se llama alma, así como las ideas, no eran más que formas de la materia compuesta de
átomos y organizadas de manera especial dentro del cuerpo humano. Alma y cuerpo eran
una sola naturaleza y no dos diferentes.
Todo valor entonces, estaría plenamente regido por la actividad sensible del cuerpo. Así lo
bueno moralmente no sería otra cosa que aquello que produjera sensaciones agradables al
hombre: el placer. Pero no se entienda aquí la búsqueda de placer como la simple
satisfacción inmediata y amoral de las necesidades fisiológicas y tendencias psíquicas, sino
como la búsqueda del mejor estado físico. La preservación saludable y satisfactoria del
cuerpo humano era considerada como el fin moral por excelencia.
El utilitarismo cuántico: en el siglo XVIII, y como herederos de epicureísmo, aparece una
corriente igualmente fundamentada en la fisiología de los órganos humanos. Según estos,
los valores se representaban en la mayor cantidad de reacción positiva que se produjera en
el individuo.
Determinaron además que mientas la reacción positiva aumentaba aritméticamente (1, 2, 3,
4, 5,....) En el individuo, el medio de producción de aquella reacción debía aumentar
geométricamente (2, 4, 8, l6, 32,. . .) De tal manera que se podía llegar a un punto donde no
hubiera aumento en la satisfacción al resultar imposible duplicar el medio de producción.
Teoría sociologista de e. Durkheim: para Durkheim la sociedad se comporta como una
entidad independiente de los individuos que la componen. Es decir, que la sociedad no es
solamente la suma de los individuos sino que presentan características específicas.
La sociedad para lograr mantener cohesionados a una multitud de individuos crea en cada
uno de ellos ideales que son colectivos en dos sentidos: se presentan en todos los
individuos, y en su consecución solo es posible en la medida en que estos individuos
permanezcan unidos.
Teoría de Scheler: los valores, para Scheler y su escuela, son objetos captados a priori,
independientemente de la experiencia; se diferencia de los bienes empíricos, en que son sus
depositarios. Como se trata de esencias ideales, pueden ser captados mediante una
intuición emocional y no mediante un razonamiento.
III. LA AXIOLOGÍA Y EL DERECHO.
La ética estudia los valores, es decir, todo aquello que las personas desean, consideran
importante de hacer o conformar su manera de ser, es decir, la manera habitual de ser y
hacer, mediante nuestros actos, por ejemplo quien roba se hace ladrón, quien miente se
convierte en mentiroso, quien estudia se convierte en estudiante. Haciendo el mal,
adquirimos hábitos negativos (vicios) y nos hacemos personas negativas o viciosas;
haciendo el bien adquirimos hábitos positivos (virtudes) y nos hacemos personas buenas,
correctas o virtuosas.
En el proceso de elección y el hacer se nos presenta siempre la posibilidad de elegir entre
varios actos posibles. Esta elección ha de basarse, a su vez, en una preferencia.
Al hablar del término valor cuyo uso se extiende hoy a todos los campos de la actividad
humana, incluyendo la moral. Corresponde a Carlos Marx el mérito de haber analizado el
valor económico ofreciendo con ello los rasgos esenciales del valor en general. El valor con
respecto a un objeto económico como: la mercancía, es en primer lugar un objeto útil,
satisface determinada necesidad humana. Tiene una utilidad para nosotros y, en ese
sentido, posee un valor de uso. La mercancía vale en cuanto puede ser usada.
Para que un objeto tenga un valor de uso se requiere simplemente que satisfaga una
necesidad humana, sea natural o producto humano. Cuando estos productos se destinan no
sólo a ser usados, sino ante todo a ser cambiados se convierten en mercancías, y, entonces,
adquieren un doble valor: de uso y de cambio. El valor de cambio de la mercancía es
indiferente a su valor de uso; o sea, es independiente de su capacidad para satisfacer una
necesidad humana determinada, sólo un objeto útil puede tener un valor de cambio.
La teoría que fundamenta los valores se le llama axiología. El hombre siempre ha estudiado
los valores, aunque no con el nombre y sistematicidad con que en la actualidad se realizan.
Ya los grandes filósofos como platón y Aristóteles, estudiaron con amplitud entidades como
la justicia, el bien, la responsabilidad, la moderación, la libertad, etc.
La mayoría de las personas no sabe qué son los valores: pero reconoce lo valioso de los
objetos, pues los valora y se decide, al elegir o tener preferencia más por unos que por otros.
Los valores no existen por sí mismos, al menos en este mundo: necesitan de un depositario
en qué descansar. Se nos presentan por tanto, sólo como cualidades de esos depositarios: la
belleza de un trofeo, la hermosura de la rosa, la utilidad de una herramienta, la armonía de
una escultura, en lo anterior existe cualidades para la existencia misma del los objetos, el
volumen, el peso, la exactitud, la extensión, como ejemplo. Ninguno de estos objetos podría
existir a la falta de esas cualidades. Son cualidades que los objetos comparten con los demás
objetos y que ellos mismos poseían antes de que se les incorporara un valor.
IV. SUBJETIVISMO Y OBJETIVISMO AXIOLÓGICOS
A finales del siglo XIX el tema acerca de valores cobró suma importancia, debido sobre todo
a la obra de Friedrich Nietzsche, tiempo después, surgieron dos clases de opiniones
contrapuestas respecto a la realidad del valor.
4.1. LOS SUBJETIVISTAS AXIOLÓGICOS
Defienden que no existen cosas valiosos por sí mismas, ni tampoco valores, sino que todos
los valores son creados o inventados por las personas, es decir, valioso es lo que los seres
humanos consideran como tal, por tanto el subjetivismo, traslada el valor del objeto al
sujeto, y lo hace depender del modo como soy afectado por la presencia del objeto. Como
representantes de esta corriente sitúan a los siguientes filósofos:
1. Nietzsche., reaccionó contra las ideas platónicas y contra la moral cristiana, defendió que
los valores morales son valoraciones subjetivas, es decir, que los valores dependen de las
preferencias individuales y colectivas y se encuentran sometidos a las modas y los caprichos
humanos.
2. Meinong., afirma que una cosa tiene valor cuando nos agrada y en la medida en que nos
agrada.
3. Ehrenfels., en cambio, rechaza el sentimiento de agrado como fundamento del valor.
Según el mismo, si el fundamento del valor fuera el agrado, sólo podrían ser valiosas las
cosas existentes, sin embargo, consideramos también como valiosas las cosas que no
existen; como la justicia perfecta, la felicidad total, la democracia plena. Para este filósofo el
fundamento del valor reside en nuestro deseo o apetito, valiosas son las cosas que deseamos
o apetecemos y porque las deseamos y las apetecemos.
4.2. LOS OBJETIVISTAS AXIOLÓGICOS
Sus antecedentes históricos son lejanos ya que se encuentran en platón en su doctrina
metafísica de las ideas. Lo bueno y lo bello existen idealmente, como entidades inmutables,
intemporales y absolutas que existen en sí y para sí, independientemente de cómo se
plasmen en las cosas empíricas, temporales, mudadizas y relativas, e independientemente
también de la relación que el hombre pueda mantener con ellas conociéndolas o
intuyéndolas. Para los defensores de esta corriente valorar consiste en descubrir valores.
En esta corriente se tiene dos concepciones distintas.
1. Para Max Scheler y Nikolai Hartmann., los valores son independientes, tanto de los
sujetos que valoran como de las cosas y los bienes en que se encuentran. Los valores son
entes ideales, objetivos y absolutos, existentes en sí y por sí, que poseen una esencia propia
y una existencia ideal.
2. Otros filósofos pertenecientes a muy diversas corrientes filosóficas, como Maritain,
Ortega y Gasset y casi todos los neoescolásticos, sostienen que no existen valores
independientes en sí, sino objetos reales e ideales bienes), que por ser bienes poseen valor y
se presentan a las personas invitándoles a su realización, o sea los valores son los propios
seres reales e ideales en tanto en cuanto se presentan como bienes a las personas.
Las tesis fundamentales del objetivismo, pueden sintetizarse de la siguiente manera:
separación radical entre valor y bien, y entre valor y existencia humana.
V. LA MORAL Y SU RELACIÓN CON EL DERECHO.
En las posibilidades de las relaciones existentes en la vida real, encontramos que, el hombre
tiene una gran diversidad de formas de conocer su realidad y su entorno social, ya que de
manera cotidiana está manipulando, sea a la manera de redescubrirlo, manipularlo,
reconstruyéndolo, contemplándolo, etc., esto responde a una gran variedad específica de
sus necesidades humanas reales. El hombre va enriqueciendo su conducta con diferentes
modos de comportamiento que, con el tiempo, adquieren rasgos propios y específicos.
Existe la creencia de que la ética y el derecho son comunes como parte de la conducta social
del hombre, ya que estos comportamientos se encuentran sujetos a normas que regulan las
relaciones entre los individuos. Se llega a afirmar que la moralidad deviene o se transforma
en derecho, es decir, las prácticas morales de importancia y trascendencia social, llegan a
convertirse en derecho, en normatividad de conductas de observancia obligatorias. En un
plano más académico y analítico, también se afirma que el derecho, la normatividad
jurídica, no solamente no tiene que ver con la moral práctica, sino que inclusive se opone a
ella. Así, se asegura que una cosa es la conducta moral, y otra la conducta jurídica; en tanto
que el derecho, opera al margen y, a veces, en contra de la moral practicada.
En la aplicación de las normas del derecho encontramos que no exigen un convencimiento
interno por parte del individuo, el sujeto debe cumplir la norma jurídica, aun sin estar
convencido de que es justa, la aplicación de ésta, es externa, ya que dispone de un
mecanismo o aparato estatal, capaz de imponer la observación de la norma o de obligar al
sujeto a comportarse en cierta forma.
Las normas jurídicas están codificadas formal y de manera oficial, mediante: códigos,
constituciones, reglamentos, leyes etc., la esfera del derecho la encontramos en la
regulación de las relaciones, entre los hombres dentro del estado. El derecho, está
relacionado, a un aparato coercitivo, ligado necesariamente a la aparición del estado. Y sólo
existe un derecho o sistema jurídico único para toda la sociedad, aunque dicho sistema no
tenga el respaldo moral de todos sus miembros, así pues, en la sociedad dividida en clases
antagónicas sólo existe un derecho, ya que sólo existe un estado.
La aplicación de las normas morales es diferente ya que se cumplen a través del
convencimiento interno de los sujetos, y por tanto exigen una adhesión muy personal a
estas normas, nadie ni nadie puede obligarnos a cumplir la norma moral, lo que quiere
decir que no existe ningún mecanismo coercitivo externo, que pueda pasar por encima de la
voluntad personal, aunque la sanción de la opinión pública, con su aprobación o
desaprobación, nos mueve a actuar en cierto sentido.
Las normas morales no se encuentran formalmente codificadas, ya que estas pasan de
generación en generación, con sus respectivas modificaciones e innovaciones, se considera
que la esfera de la moral es la más amplia de todos los diversos comportamientos, ya que si
se quebrantan las diversas normas de otros tipos de comportamiento, también son
quebrantadas las normas morales.
Se puede anexar que el derecho y la moral regulan las relaciones que surgen entre los
sujetos, mediante sus respectivas normas: postulando una conducta obligatoria o debida,
las normas de ambas tienen el carácter de imperativos, exigen que se cumplan, que lo
individuos se comporten en cierta forma, ya que responden a una misma necesidad social,
regular las relaciones de los hombres con el fin de asegurar la unidad y el orden social, la
moral y el derecho tienen cambios, al cambiar históricamente el contenido de su función
social, así como varía la moral de una época a otra, o de una sociedad a otra, así también
sucede con el derecho.
CONCLUSIONES
1. La axiología jurídica trata del estudio de los valores jurídicos, es decir los valores que
deben de tener en cuenta los operadores del derecho.
2. Comprendimos que los valores son un conjunto de creencias que nos dictan la forma de
conducta más aceptada socialmente.
3. Los valores determinan las normas morales, es decir que los valores establecen un
modelo de conducta aceptable en una sociedad y para garantizar que este modelo sea
observado por los miembros de esa sociedad se emiten las normas que regulan la actuación
del individuo dentro de la sociedad.
4. La relación entre ética y los valores es que la primera es el estudio de los actos humanos o
costumbres y los valores son en sí esos actos o costumbres preferidos o aceptados por una
sociedad.
5. Solo el ser humano tiene conciencia moral porque solo él tiene capacidad o conciencia de
sí mismo, de valorizarse y poder juzgar su conducta.

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