You are on page 1of 73

1

“Te lo verso a la cara”, por Ada Menéndez

©2010 Ada Menéndez

Prólogo por David Suárez


Epílogo por Eva Márquez

Todos los derechos reservados.


Editado digitalmente por Groenlandia con permiso de su autora.

Directora: Ana Patricia Moya Rodríguez


Corrección: Anabel Ocaña
Diseño: Ayhelén Kagner y Bárbara López Mosqueda (Portada y
Contraportada) \ Ana Patricia Moya

Depósito legal: CO 887-2010

Córdoba, 2010 2
Este libro se une al nacimiento de una auténtica revolución
literaria. El papel impreso, el formato tradicional del libro,
va a dejar paso como lo hizo el vinilo o la cinta cassette al
formato digital. Esto tendrá, sin dudas, un sin fin de
ventajas. Babel se alzará desde un mar incandescente
directamente al salón de casa. Pero, fundamentalmente,
desaparecerán las trabas para que autor@ y lector@ se
encuentren en el espacio que ellos decidan con los destellos
de la sinceridad. Al igual que está pasando en los blogs, las
“cosas” podrán escribirse sin tapujos directamente a la cara.

Muchas editoriales especulan con el bien literario para


sacar su particular tajada a través de subvenciones, venta a
bibliotecas e instituciones. El / la poeta es, en muchos
casos, un mero instrumento estandarizado a merced de esta
gris maquinaria.

No ocurre este caso con Ada, una emergente voz de la


nueva literatura castellana. Rebelde e inconformista, su
vida y su obra se extienden más allá de la habitación de un
poema. Sale a la calle, a los bares donde la poesía es
recitada en chupitos acompañada del humo y la música.
Ada entiende el hecho artístico como algo participativo, por
eso tú, lector@, formas parte de esta obra, de su vida. Ada
te lo versa a la cara tal y como lo siente, directamente

3
desde su corazón, de su cabeza, de su sexo, desde un cuerpo
ardiente por el mundo.

Pasa amig@, abre la cortina y comparte un rato con ella


porque estos momentos también son tuyos.

David Suárez “Suarón” 4


A Kenny,
el loco que libera a los pájaros de sus jaulas. Te amo.

5
Agradezco con toda mi alma cargada:

A mi madre, mi hermano y mi abuela porque siempre les querré,


a Beatriz Gutiérrez de Juan porque la quiero,
a José Luis Piquero porque le quiero,
a Eva Vaz porque la quiero,
a Tito Muñoz porque le quiero,
a Fran Picón porque le quiero,
a Maribel Sánchez porque la quiero,
a Danilac porque le quiero,
a Valentina porque la quiero,
a Batania porque le quiero,
a Santiago Tena porque le quiero,
a Chema Rubio porque le quiero,
a Jorge Muñiz porque le quiero,
a Javi Pascual porque le quiero,
a Ángel Rodríguez porque le quiero,
a Javier Belinchón porque le quiero,
a Ana Vega porque la quiero,
a Santiago Bertault porque le quiero,
a David Suárez porque le quiero,
a Rubén Rodríguez porque le quiero,
a Pelayo Fueyo porque le quiero,
a María Paseli porque la quiero,
a Eva Márquez porque la quiero…
a Ana Patricia Moya y Groenlandia porque les quiero…

A muchos poetos y poetas de bares porque les quiero


(ellos/as saben quiénes son).

6
“Pero como dijo Dios,
cruzándose de piernas:
veo que he creado muchos poetas pero no mucha poesía"
Charles Bukowski

“Soy sólo un verso que está equivocado”


Manolo Tena

“Te lo aviso:
tengo un alma
y está cargada”
Tito Muñoz

7
8
Comienza la cuenta atrás
diez nueve
me engancho como una perra
del amor no correspondido
ocho siete
confío
en todo el mundo
cuento con amigos que cronometran mi tiempo
y me cuelgan el teléfono antes de que pueda llorar
seis cinco
no hace falta que aprietes el gatillo
ya tengo aquí mi bomba colocada
bajo el jersey
cuatro tres
no salgo de la habitación
no como
no duermo
sólo me concentro en mi pensamiento circular
dos uno
antes de arrancar la anilla
sé que volveré mañana

9
viva
resucitada
y también sé que otro día explotaré
porque soy autodestructiva
como la granada que llevo bajo mi ropa.

10
Cada mañana
antes de ponerme cara nueva
me ato los cordones de mis botas
abrocho botón a botón la chaqueta
busco el sombrero más cálido
cuido que mi ropa interior
esté limpia y visible
por si tengo un accidente
nada más cerrar la puerta
no vaya a ser
que el cirujano
descubra
que por muy vestida que vaya
no hay nada que proteja
el golpe frío a recibir
cuando cruce
a la calle de las mujeres desnudas.

11
Tengo una cama vacía llena de manos,
tengo una boca vacía llena de besos,
tengo un corazón vacío lleno de promesas,
tengo unas piernas vacías llenas de palabras,
tengo un día vacío lleno de minutos.

Tengo un alma vacía


llena
de mi alma.

12
Te he visto varias veces
en diferentes sitios
a distintas horas
con otras edades
guapo feo regular
alto bajo mediano
listo justo mediocre
has tenido varios nombres
me quisiste mucho
y otras veces nada
siempre pensé que tú eras él
él
que ya habías llegado
que ya estabas aquí
al primer segundo de conversación
supe que eras él

a la primera mirada
al primer contacto
lo tenía clarísimo
clarísimo
nunca dudé

13
te vi y era cierto
tú eras él
escuchaba tus palabras
y eran las necesarias
afines en lo principal
proyectos de futuro similares
enfoques de vida idénticos
sexo insuperable
piezas encajadas
puzzle resuelto
y cuando te marchas
o cuando me voy
cuando me dejas
o cuando te dejo
cuando ya no me quieres
o cuando ya no te quiero
cuando te esfumas
o cuando nos esfumamos

ciertamente sé
que volveré a encontrarte
otro día
en la barra de un bar mirándome

14
pidiéndome un cigarro en la calle
recitando poesía
acompañando a algún amigo mío

ciertamente sé
que volveré a verte
y sentiré
que tú
eres él
él
aunque nunca llegues a serlo.

15
Te he querido
hasta fracturarme entre tus huesos,
hasta la última vértebra de mi espina dorsal,
hasta licuarme sobre tu amplio esternón,
te he querido hasta romperme la pelvis
porque contigo se corrían poemas
entre mis piernas abiertas.

Te he querido
desde Valencia a París
y bailar nuestro último tango.

Te ha querido

un esqueleto
que ahora
encaja sus piezas.

16
Si bebiera alcohol
me bajaría una botella de whisky
si tomara drogas
compraría medio gramo
si no fuese cobarde
despedazaría mi cuerpo bajo un tren
si viviera en un país en guerra
pintaría una diana sobre mi pecho
si pudiera volar
ascendería hasta quebrarme las alas

Pero lo único que puedo hacer


lo único
es ser totalmente consciente
de mi existencia.

17
Qué tipo de poeta puedo ser
si sólo veo silencios
entre las palabras

18
Qué me importa a mí tu silencio
qué me puede importar, a mí, la palabra de Dios

sólo despierto preocupada


cuando no me escucho
durante los gritos de tus oraciones

qué me importa a mí la noche


si no crees en lo que no ves

19
Padre,
me confieso:

No
te
debo

nada.

20
Me gustaría
salir un día a la calle
y encontrarme contigo de frente
así
como por casualidad
decirte
que las diosas a veces lloran
aún desnudas
saben que hasta la belleza se marcha
decirte
que no siempre la diosa es fuerte e irrompible
me gustaría
salir un día a la calle
tenerte a mi lado
poder explicarte
que si una vez fui de otro mundo
ahora soy más terrenal que nunca
porque tú
me hiciste bajar
a tu altura
a la altura de un hombre sin pies sobre el suelo

21
decirte
que esta diosa
ha caído
y se ha roto los huesos
haciéndose
más humana
incluso
que tú.

22
Me confieso
no iré al cielo
no me abrirán las puertas
ni me darán la llave
nadie vendrá a recibirme

Me confieso
pecadora

Confieso
si me haces daño
rayaré tu coche
si me engañas
te daré donde más duele
si me traicionas
patearé tu culo
confieso
ser mala persona
si me manipulas

gritaré que la tienes pequeña

23
escribiré hijo de puta en tu portal
empalaré tu corazón
me llevaré tu nombre al infierno
si me lastimas

Me confieso
no habrá un cielo para mí
y ni Satanás me acogerá
porque incluso a él
le diré a la cara
lo que tenga que decirle.

24
Me canso
están las noches demasiado largas
se estiran hasta provocarme el sueño
ése en el que tú no apareces
donde sólo puedo distinguir tres o cuatro cuerpos
desmembrados
sangrientos
devorándose unos a otros
tirando de la tripa
buscando el desenlace

Me canso
está la noche muy larga para una poeta
para una puta

25
Estoy harta
de comer labios indigestos,
harta
de amar a los cuarenta ladrones,
muy harta
de entrar en esa cueva
de abrir mi ventana
y vomitar el nombre de la bestia.

Si no estuviera tan harta


aún me tendrías entre tus piernas
trazándote mis besos.

Pero estoy harta


muy harta.

Demasiados días clavados


en la cruz,
demasiados hurtos en mi casa
sin poder evitar llamar a tu puerta
porque me perdiste las llaves.

26
Me tienes harta
escúchame
muy harta.

No quiero
más creos ni quisieras ni podríamos
tuyos,
sólo quiero la verdad
la maldita verdad.

Y si no me quieres
o no lo sabes:

entonces
cállate la puta boca

y deja que me vaya por donde vine


por donde tú me acechabas.

Mi error
fue no habértelo exigido antes,

27
antes
de convertirme en un cadáver
de los muchos que siembras por tu camino.

Trágate las pociones


permite a tus futuras muertas
aún no visitadas
aún vivas
descansar en paz.

28
Con tanta agua de por medio
me he acordado de ti
y sé
que tú
con tanta agua de por medio
me has lanzado a la profundidad
con una piedra
alrededor
de mi garganta
alrededor
de tu memoria.

29
Cuántas veces te habré prometido
no envidiar lo que no he ganado
no desear lo que no me pertenece
no perdonar a quien no siento
no sentir a quien no perdono
cuántas veces te lo habré prometido
y cuántas veces
me encuentro
pecando
por ausencia de pecador.

30
Podría escribirte un verso largo
lleno de palabras
con pocos adjetivos
y mucho significado
podría hacerlo
pero prefiero
quedarme
con mis versos pobres
aunque implique
no tenerte a ti
entre
ellos.

31
Y vendrás tú
a cuestionar mis errores
a ponerme los puntos sobre las íes
vendrás
sé que vendrás
cuando ande despistada
a decirme cómo debo hacer y deshacer
porque tú sabes siempre mucho más que yo
porque yo nunca sé nada de lo poco que tú sabes
vendrás
agazapado
a por mí
vendrás
sé que vendrás
y yo te estaré esperando
al otro lado de las emociones
las que se me descontrolan
cuando creo estar sola
vendrás
como un depredador vendrás
a invadir

32
mi
perplejo
espacio.

33
Me canso de deambular
desorientada
en busca de la dirección correcta
se me hinchan los pies
las manos
cuarteadas por el viento huracanado
que me hace doblar
y perderme.

Me canso de cansarme
necesito una finca
sólida
sobre la que asentar mis versos fugitivos.

Es cansino cansarse
dicen que el camino se hace al andar
y yo no quiero dar más pasos
quiero
un camino
señalizado
que me lleve
donde pueda colgar la chaqueta.

34
Tengo espacio para todo:

decepciones
desilusiones
engaños
daños
desengaños
torpezas
traiciones

Tengo espacio
pero no manos
para guardarlo todo
por orden.

35
No es sano
amar
y al día siguiente
lavarte el estómago
de todos los besos las camas las pieles
no es sano
quererte
y al día siguiente
hacerme perder el apetito
te juro
no es nada sano
adelgazar siete kilos en siete días
llorar por la calle
por el pasillo de casa
no poder respirar de tanta lágrima
créeme
no es en absoluto sano
tocarte sobre el césped de la piscina
y al día siguiente
pretendas olvide que una vez me hiciste el amor
aún mojada del baño

36
en serio te digo
no es sano nada sano
hincharme de te quieros
y al día siguiente
vaciarme.

37
Te quise hasta evaporarme
y al de antes que tú
también
y al de antes del de antes
y al anterior
y al anterior del anterior
también
a todos os quise
hasta pulverizarme
os quise tanto
maldita sea
tanto
que no sé cómo encontrarme los pedazos
esparcidos entre vuestras bocas calientes
no sabría por dónde comenzar
a llamarme
a solicitar mi presencia
una mujer no debería andar por ahí
así
desnuda
anónima

38
sin ganas de nada
y sólo hallándome
podré recuperar
el pago por mi rescate.

39
Según tú
qué es la poesía
quién es poeta
¿hay un carné
que diga
“Fulanita Pérez, poeta de profesión”?
¿quién da ese carné?
¿tú?
¿la universidad?
¿la calle?
¿los años?
según tú
qué es la poesía
quién es poeta
¿lo eres tú?

que formas los versos
muy elocuentes
muy ordenados
y yo
yo no soy poeta

40
ya te lo dije una vez
soy
una
maldita
peatona.

41
He bailado entre diferentes brazos
me han cantado muchas bocas
fueron varias lenguas
las que me subieron la fiebre
me he evaporado alrededor de anchos remolinos
se desencajaron mis huesos
a golpe de timón
fui amada
odiada
he sido siempre aquello que pude
sólo para ti
olvidándome
perdiéndome
volviéndome difusa
etérea
porque sólo así
se puede amar
sin cabeza
sin miedo
y lo demás
es palabrería

42
intenciones anodinas
un sinsentido
un sinsabor
un te quiero
limitado
hasta que ya no te quiera.

43
Sé que quieres jugar
a que no me ves
a encontrarme escondida tras las sábanas
sé porque te conozco
que inventas este juego
sólo para fastidiarme
y sentirte más fuerte
más hombre
sé que deseas meterme en tu sorteo
que sobresalga mi rostro
entre los números de otras
para hacerte el loco
cuando te diga te quiero
sé qué tipo de jugador eres
que soy pelota de baloncesto
sin canasta
sé todo lo que tengo que saber sobre ti

que tú eres el apostante
y yo
la rueda de tu infortunio.

44
No llames más
te he cerrado la puerta
vete a otro sitio
donde la amistad se mida
no por besos húmedos
sino por besos sin lengua

45
Mis lágrimas
son las gotas
que colmaron
el vaso de tu vanidad

46
He querido tanto a todos
que ahora
que no quiero a nadie
sólo tengo espacio
para quererme a mí
sola
sin la compañía
de quienes aman
volcando su reloj de arena
sobre mi tiempo vacío de soporte.

47
¿Quieres romperme la cara?
¿quieres?
¿verme en la calle y darme una lección?
¿decirme cuatro cositas?
¿tus ‘cuatro’ cositas?
¿llamarme mierda?
¿que soy una puta?
¿cuestionar todo lo que hago,
todo lo que digo,
todo lo que soy?
¿quieres enseñarme qué es la vida?
¿preguntarme a dónde voy?
¿recordarme de dónde vengo?
¿quieres que desaparezca del mapa?
¿de
tu
mapa?
¿quieres?
o mejor aún
te diré qué quiero yo
quiero

48
que me dejes en paz
que me dejes vivir
tener derecho a mi espacio
en esta jauría de hambrientos
caminar por la acera de enfrente
si por la tuya no quepo
olvidarme de tu nombre
porque la suciedad no la guardo en mi casa
barrer tus palabras sordas
y oídos necios
quiero
que me rompas la cara
despacio
sin titubeos
porque si eres tan hombre
tan mujer
los golpes se dan secos
uno
a
uno
firmes
y yo los recibiré
como cuando encajo la fiebre en la gripe

49
porque tú
mírame a la cara

eres
un
puto
virus.

50
Cuánto tiempo crees que aguantaré
sin llorar
sin llorar ni una puta lágrima
cuando pase por delante del portal
en el que me levantaste la falda
metiste tus manos
caricias clandestinas
cuánto tiempo crees que aguantaré
sin llorar
sin llorar ni una maldita lágrima
cuando entre en aquel garito
donde me arrancaste besos
donde me tirabas del pelo para engullirme
cuánto tiempo crees que aguantaré
sin llorar
sin llorar ni una cochina lágrima
cuando camine por tu calle
y vea el balcón
donde nos tocamos desnudos
buscando testigos de nuestra creatividad
cuánto tiempo crees que aguantaré

51
sin llorar
sin llorar ni una jodida lágrima
cuando pida cocacola light descafeinada
o pasteles con dulce de leche
sabiendo que fue nuestro primer desayuno
nuestro último desayuno juntos
cuánto tiempo crees que aguantaré
sin llorar
sin llorar ni una puñetera lágrima
cuando duerma de noche
sin que fotografíes
mi cuerpo mojado en tu sudor
cuánto tiempo crees que aguantaré
sin llorar
sin llorar ni una asquerosa lágrima
dímelo
cuánto tiempo crees que ha de pasar
para volver a ser
de carne y hueso.

52
Me lo dijo por teléfono
me lo dijo con miedo
me lo dijo muy bajito

me lo dijo:
tengo sida.

Cuatro letras
me entraron por la oreja
bajaron por el intestino
apuñalaron mis órganos.

Yo también tuve miedo


mucho miedo.

Miedo
a quedarme sin esa persona
a que nos dejara solos
sin su risa
sin su belleza
sin sus abrazos

53
sin sus besos.

Ahora
su grasa corporal va mal colocada
la piel está más oscura
tiene menos piernas
menos brazos
vómitos tempraneros
dolores de cabeza inoportunos

pero continúa su risa


su belleza
sus abrazos
sus besos
continúa aquí
conmigo
con todos
como antes de aquella llamada
continúa aquí
y aquí continuará.

El sida
sólo nos recuerda

54
que una vez
tuvimos miedo.

55
Quiero
sí quiero
un anillo dorado
en mi anular

Quiero
sí quiero

un hombre que me ame por las mañanas


con mi raya del medio en el lateral
con mi pijama de osos amorosos
con mi aliento espeso

Quiero
sí quiero

un hombre que me ame por las tardes


con mi mal humor después del trabajo
con mi siesta de hora y media
con mi bigote sin depilar

56
Quiero
sí quiero

un hombre que me ame por las noches


con mi cansancio que ni para freír un huevo
con mis zapatillas de cuadros
con mi gato al pie de la cama

Quiero
sí quiero

un hombre que me ame

cuando estoy linda para fiestas


cuando estoy horrible con kilos de más
cuando soy graciosa
cuando soy hija de puta
cuando me desvisto para él
cuando sólo quiero dormir
cuando todo el mundo me mira
cuando nadie me recuerda
cuando soy luchadora
cuando quiero perder

57
Quiero
sí quiero

un hombre que me ame


en la salud y en la enfermedad
cuando sea una anciana
y se me caigan las tetas.

58
Esta noche
he estado en el restaurante
mejor dicho
en nuestro restaurante
mejor dicho
en
mi
restaurante

es sólo mío desde aquel día


cuando no recibí respuesta
(tú
que siempre tienes respuestas para todo)
al recordarte
nuestro primer beso
al recordarte
que el cuerpo te temblaba
te sudaban las manos
que morías por tocar un centímetro mío
al recordarte
tu pequeña mentira

59
para llevarme a tu cama
al recordarte
que todo comenzó

en
mi
restaurante.

60
No te voy a escribir más poemas de desamor
ni a ti
ni a ti
ni a ti
ni a ti tampoco

a ninguno más
voy a escribiros poemas de desamor

ni de amor

no voy a inmortalizaros
en mis versos
no voy a cicatrizarme
con vuestros poemas

no voy a hacerlo
nunca más

así me hinche a reír con otros


aunque no quiera reír
así reviente a bailar con otros

61
aunque no quiera bailar
así me destroce los pies con otros
aunque no quiera paseos
así me estrese a citas con otros
aunque no quiera ligar
así me desgarren las bragas otros
aunque no quiera irme a la cama

no voy a escribiros más poemas

no
y no

me niego

paso

que os den

a ti
a ti
a ti
y a ti también.

62
63
Por más que me lave el rostro
pinte mis párpados
alise el pelo
alargue mis pestañas
por más que lo intente
nada
conmueve
mi expresión
de mujer
perpleja.

64
Sé lo que me dices

que
tienes
razón
sé que
soy una mala persona
llego tarde a las citas
olvido felicitarte cuando lo mereces
hablo más de la cuenta
callo cuando no debo
no te miro en tu día más hermoso
ni beso tus mejillas tan solicitadas
soy una desagradecida
nunca devuelvo los favores
no me arranco la camisa por ti
tampoco me arrastro para verte
sé lo que me dices
sé que soy
una mierda de poeta
una mierda de mujer

65
una mierda de amiga
una mierda de amante
también
sé lo que yo te digo
sé que
si alguien debe llorar más
seré yo
si alguien debe bajar al infierno
seré yo
si alguien debe desear morir
seré yo
si alguien debe pedir perdón
seré yo
si alguien debe aprender todos los días
seré yo
si alguien debe castigarse
seré yo
si alguien debe sentirse defraudada
seré yo
sé lo que me dices
pero también sé
no haber afirmado nunca
ser nada

66
porque yo
no
soy
nadie
ni soy tú.

67
A d a M e n é n d e z ( M a d 68
rid, 2010)
“Te lo verso a la cara”, podría decirse (perdón), escribirse en
formato Times New Roman a tamaño 68, pero no más claro. Este
poemario de Ada Menéndez es una de las pocas declaraciones al
amor no correspondido sin hipocresía, real y sincera que he
tenido el gusto de leer.

"Me engancho como una perra al amor no correspondido", tal y como


nos cuenta Ada en uno de sus primeros versos es una
autoafirmación de su carácter de mujer débil, transparente,
sincera, real, afectiva, nada orgullosa y con una capacidad
amatoria infinita; y, sobretodo, poco o nada habitual en los
tiempos que corren; pues, si de algo entiendo, o algo sé reconocer,
es a qué saben las cicatrices del amor y sus consecuentes e
inevitables secuelas. Lo que más me impacta de sus versos, es
cómo esta mujer ha sabido reconocerse a sí misma en esa batalla
de brazos partidos y reclamos abatidos, y tras ahogarse en el
fango de la soledad una y otra vez, ha encontrado el modo de
aparcar la causa de su dolor para volver a confiar de nuevo en el
próximo hombre que el duende misterioso y caprichoso del
destino le depare; tal y como nos repite una y otra vez en sus
versos, “Te quise hasta evaporarme/ Y al de antes que tú/ También/Y
al de antes del de antes …”, aún cuando (y ésto es lo más
sorprendente) se reconozca plenamente racional y consciente para
predecir que dicho futuro hombre no merecerá el privilegio de su
afecto, porque como todos los anteriores, será imperfecto al igual
ella misma se considera, y aún así, le es indiferente y se sabe

69
capacitada para continuar sintiendo, para continuar amando,
amándole, sintiéndole, sintiéndose a sí misma, sintiéndose parte
del amor que fluye y atraviesa sus venas; “[…] y por tan lleno de
imperfecciones /sé que es verdad que te quiero /por mucho que se
obstine en no disfrazar su rencor”.

Porque el amor genera desamor, y el desamor genera a su vez


rencor y arterias lisiadas para el resto de los días, este poemario
de Ada es la prueba tangible de la autodestrucción de una mujer,
que se envenena y se diluye en un mundo de papel maché
convirtiéndose en una muñeca de plastilina chuki manipulada al
antojo del susodicho señor rencor. Y, sin embargo, tras el
doloroso parto, esta mujer se sabe reconocerse como una mujer
valiente versando a la cara del pasado que jamás volverá “[…] a
escribir poemas de desamor/ni a ti/ni a ti/ni a ti tampoco/no voy a
inmortalizaros en mis versos”.

Ada nos versa a la cara que, tras los huracanados poemas repletos
de reproches y sentimientos pulverizados, mezcla de amor y odio,
aún existe un camino a la esperanza, aún existe una vuelta al
sendero del amor. Ada, nos demuestra que dicho trayecto ha de
pasar ineludiblemente por hallarse a uno mismo, “Sólo hallándome
/Podré /Recuperar /El pago por mi rescate.”

Eva Márquez 70
Prólogo, por David Suárez 3

Uno 9
Dos 11
Tres 12
Cuatro 13
Cinco 16
Seis 17
Siete 18
Ocho 19
Nueve 20
Diez 21
Once 23
Doce 25
Trece 26
Catorce 29
Quince 30
Dieciséis 31
Diecisiete 32
Dieciocho 34
Diecinueve 35
Veinte 36
Veintiuno 38
Veintidós 40

71
Veintitrés 42
Veinticuatro 44
Veinticinco 45
Veintiséis 46
Veintisiete 47
Veintiocho 48
Veintinueve 51
Treinta 53
Treinta y uno 56
Treinta y dos 59
Treinta y tres 61
Treinta y cuatro 63
Treinta y cinco 64
Treinta y seis 65

Epílogo, por Eva Márquez 69

72
“Rebelde e inconformista, su vida y
su obra se extienden más allá de
la habitación de un poema. Sale a
la calle, a los bares donde la
poesía es recitada en chupitos
acompañada del humo y la música
[…].Ada te lo versa a la cara tal y
como lo siente, directamente desde
su corazón, de su cabeza, de su
sexo, desde un cuerpo ardiente por
el mundo” (David Suárez, “Suarón”)

“Lo que más me impacta de sus


versos, es cómo esta mujer ha
sabido reconocerse a sí misma en
esa batalla de brazos partidos y
reclamos abatidos, y tras ahogarse
en el fango de la soledad una y
otra vez, ha encontrado el modo de
aparcar la causa de su dolor para
volver a confiar de nuevo en el
próximo hombre que el duende
misterioso y caprichoso del destino
le depare…” (Eva Márquez)

Ada Menéndez (Xixón, Asturias,


1972). Poeta y escritora. Ha
obtenido diversos premios literarios
y ha publicado dos poemarios: El
desvestir del Pulgar (Ediciones
Vitruvio, 2008) y Abierta de Piernas
(Bohodón Ediciones, 2009). Ha
aparecido en la antología digital
Póker de Reinas, así como en
diversas revistas de poesía.
Entusiasta organizadora de recitales
poéticos, dirige el taller literario
Little Becky. En breve, sus poemas
aparecerán en distintas antologías.
Te lo Verso a la Cara es su
tercer poemario; su cuarta obra, La
Mujer Anochecía, será editada por 73
Amargord Ediciones.

You might also like