El sistema de activación reticular (SAR) es una red de neuronas en el tallo cerebral que juega un papel importante en funciones como el sueño, la vigilia, la motivación y la respiración. El SAR controla el estado de consciencia y actúa como un filtro de estímulos. Daños en esta área pueden causar coma, y su actividad anormal se ha relacionado con trastornos como la narcolepsia y la enfermedad de Alzheimer.
El sistema de activación reticular (SAR) es una red de neuronas en el tallo cerebral que juega un papel importante en funciones como el sueño, la vigilia, la motivación y la respiración. El SAR controla el estado de consciencia y actúa como un filtro de estímulos. Daños en esta área pueden causar coma, y su actividad anormal se ha relacionado con trastornos como la narcolepsia y la enfermedad de Alzheimer.
El sistema de activación reticular (SAR) es una red de neuronas en el tallo cerebral que juega un papel importante en funciones como el sueño, la vigilia, la motivación y la respiración. El SAR controla el estado de consciencia y actúa como un filtro de estímulos. Daños en esta área pueden causar coma, y su actividad anormal se ha relacionado con trastornos como la narcolepsia y la enfermedad de Alzheimer.
El
sistema
de
activación
reticular
(SAR)
es
una
parte
del
cerebro
mamífero
que
se
localiza
en
el
tallo
cerebral.
En
biología
humana,
se
piensa
que
juega
un
papel
en
muchas
funciones
importantes.
Estas
incluyen
los
procesos
de
sueño
y
vigilia,
la
motivación
conductual,
la
respiración,
y
el
latido
del
corazón.
Una
red
de
neuronas
y
fibras
neuronales
que
corre
a
lo
largo
del
tallo
espinal
forma
el
sistema
de
activación
reticular.
Estas
neuronas
se
conectan
con
diversas
partes
del
cerebro.
Existen
dos
partes
del
sistema,
el
sistema
de
activación
reticular
ascendente,
y
el
sistema
de
activación
reticular
descendente.
El
SAR
ascendente
se
conecta
a
las
partes
del
cerebro
llamadas
corteza,
tálamo,
e
hipotálamo.
El
SAR
descendente
se
conecta
al
cerebelo
y
a
los
nervios
responsables
de
las
distintas
sensaciones.
Las
funciones
del
sistema
de
activación
reticular
son
muchas
y
muy
variadas.
Entre
otras
cosas,
contribuye
al
control
del
sueño,
el
andar,
el
sexo,
comer,
y
la
eliminación
de
desechos.
Quizás
la
función
más
importante
del
SAR
es
su
control
de
la
consciencia.
Se
cree
que
controla
el
sueño,
el
estado
de
vigilia,
y
la
capacidad
de
enfocar
conscientemente
la
atención
en
algo.
Además,
el
SAR
actúa
como
un
filtro,
amortiguando
el
efecto
de
estímulos
repetitivos
como
pueden
ser
ruidos
fuertes,
ayudando
a
evitar
que
los
sentidos
se
sobrecarguen.
En
los
casos
de
daño
al
sistema
de
activación
reticular,
se
puede
presentar
un
estado
de
coma.
Debido
a
la
ubicación
del
SAR
en
la
parte
posterior
de
la
cabeza,
esta
área
es
particularmente
vulnerable
a
daños
durante
accidentes
automovilísticos.
La
actividad
inusual
del
área
del
SAR
en
el
cerebro
ha
sido
asociada
con
desórdenes
del
sueño
como
la
narcolepsia,
con
el
síndrome
de
fatiga
crónica,
con
la
enfermedad
de
Alzheimer,
y
con
el
Desorden
de
Déficit
de
Atención
(DDA).
Aparte
del
trauma,
hay
otras
cosas
que
afectan
al
SAR,
como
pueden
ser
las
drogas
y
otros
químicos.
Se
piensa
que
muchas
drogas
psicotrópicas,
que
son
sustancias
que
actúan
sobre
el
cerebro
y
el
sistema
nervioso,
actúan
afectando
directamente
al
SAR.
La
melatonina
también
afecta
esta
área
del
cerebro,
y
la
anestesia
general
funciona
al
“apagar”
la
consciencia
al
bloquear
el
SAR.
El
SAR
parece
jugar
un
papel
importante
en
el
sueño.
Observaciones
científicas
realizadas
con
escáneres
cerebrales
y
equipo
electrónico
demuestra
que
durante
las
etapas
de
sueño
profundo,
la
actividad
en
el
sistema
de
activación
reticular
es
muy
reducida.
Sin
embargo,
durante
la
etapa
REM
del
sueño
(Rapid
Eye
Movement,
o
Movimiento
Rápido
del
Ojo)
,
que
es
cuando
se
presentan
los
sueños,
la
actividad
en
el
SAR
se
incrementa
a
niveles
similares
a
los
que
se
observan
durante
el
estado
de
vigilia.