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I.

Introducción

En este trabajo se estará analizando el libro de Éxodo 3:1-15. En el

cual se podrá analizar el llamado de Moisés y su liderato con el pueblo.

Además se estudia la relevancia que éste puede tener en nuestros

tiempos y en nuestra iglesia.

II. Contexto

La época del Éxodo, según la cronología que adoptamos, se sitúa

durante el periodo del Imperio Nuevo (1280-1090) según unos y (1580-

660) según otros que se extiende la dinastía XVIII a la dinastía XX o a la

XXV. Ramsés II, de la decimonona dinastía, es el faraón que impuso la

servidumbre a los israelíes, y su sucesor, Merneptah(1235-1224), el que

los persiguió o bien Seti II (1210-1205). Sin embargo la arqueología

mostro que el faraón Ramsés II sustituyo la ciudad de Avaris, por los

hicsos, por otra nueva, que es la de Pi-Ramsés de los textos egipcios.

En el libro del éxodo se presenta dos acontecimientos que marcaron la

vida de los israelitas, uno es, la salida de estos de Egipto; y la “alianza”

que hace este pueblo con Yahvé al revelarse en el Monte Sinaí. En este

caso estaremos considerando primero la salida de los israelitas de Egipto

y luego la alianza de este pueblo. En el contexto histórico existen algunos

acontecimientos que pueden explicar la historia y la tradición de ese

pueblo. Tales acontecimientos son: La salida de un grupo más o menos

arameo, que había estado por mucho tiempo en la región oriental del

Delta y que estuvo oprimido, y la salida que tuvo acontecimientos


extraordinarios; luego el grupo que había salido de Egipto (fue uno

heterogéneo), permaneció un largo tiempo en la Península del Sinaí,

donde adquirió su vínculo con un Dios único, quien era Yahvé; sin

embargo toda esta historia queda dominada por Moisés, ya que este va a

ser el caudillo providencial que va a cumplir los designios de Dios, o sea

fue el personaje que libero al pueblo de la opresión.

En el libro del Éxodo no existe el pensamiento de una persona

aislada, sino por el contrario encierra la carga de experiencias,

emociones, sabiduría tendencias, juicios, oraciones, memorización,

búsquedas de todo un pueblo, del pueblo de Dios. Es por eso el interés y

la profundidad de los temas que este libro representa. Además también la

gran variedad literaria de sus diversos componentes. Las amplificaciones

literarias que encontramos tienen la intención de engrandecer la acción

de Dios, y son de un orden distinto al mito. Se puede decir que el libro

del Éxodo contiene historia.

III. Critica de la forma

El libro del Éxodo es el segundo libro de cinco que se encuentran en el

Pentateuco. El titulo viene del latín Exodus, de Vg, y se aplica a

acontecimientos que van desde la Pascua hasta la llegada al Monte Sinaí.

Se basa además en documentos o tradiciones que fundamentalmente son

cuatro: J E P D, predominando en este libro J E D y además un redactor

sacerdotal, posterior a P, pero de la misma corriente. En el relato de la

vocación de Moisés en la estaré analizando luego, se entretejen las líneas


yahwistas y elohista; la revelación del nombre divino pertenecería más

bien a esta última. Por otro lado es Yahweh quien toma la iniciativa de

escoger a Moisés como talla heroica. Su vocación es descrita a la manera

de la vocación de los profetas, pero la misión que realizará supera

incomparablemente cuanto se nos dice de todos ellos.

Este libro es una narración histórica, pero de género religioso, que

cuenta solo lo que interesa al fin pretendido. Se puede considerar un libro

que pretende enseñar a vivir, que quiere inspirar al comportamiento del

pueblo de Dios, crearle cierto estilo espiritual y mostrarle el camino por

donde debe andar. Por tanto encontramos enseñanzas, prescripciones e

indicaciones, siendo las narraciones directas.

IV. Comentarios

Considerando los textos del capítulo 3 de Éxodo versículos del 1 al 15,

se puede decir que en los primeros seis versículos se da la aparición

Divina a Moisés, mientras este pastoreaba el rebano de su suegro Jetro.

En este llamamiento se pueden observar cinco elementos 1. La

presentación de Dios: Este se presenta como el Dios de su padre; 2) el

llamamiento profético; 3) la objeción del escogido; 4) la reconfirmación del

llamado y 5) la señal. Dios hizo un llamado a Moisés, y por primera vez

conoce a Dios y aprende que Dios está con los hebreos, sin embargo

tendrá que identificarse ahora con la clase en cuya opresión ha

participado si ha de ser consecuente con su nuevo conocimiento

teológico. En los textos del 7 al 10, Dios escucha al pueblo y la opresión


que estos tienen, es por eso que envía a Moisés y a este le corresponde

la misión a nivel social con el pueblo. Dicha finalidad de proporcionar a los

israelitas un país que sea para ellos y en el puedan servir libremente a

Dios. Sin embargo el profeta desde el primer momento sabía cual, era el

término de dicho camino. En los textos 11 y 12 el profeta tiene una

objeción al llamado, siendo esta perfectamente válida, ya que no había

compartido los sufrimientos ni los trabajos duros de los hebreos, ya que

había vivido en el palacio con la hija del faraón, y luego vivió lejos de

Egipto. Pero Dios le da seguridad, les garantiza su asistencia eficaz e

infalible: “Yo estaré contigo”. La misión de Moisés se va precisando a la

misma vez que Aquél que le envía se va revelando a él. Cuando Moisés

haya sacada al pueblo de Egipto podrá traer al pueblo a este monte para

servir a Dios. Repetidas veces se afirma que tanto Dios como Moisés

liberaron a Israel. En los textos de 13 al 15 Moisés por segunda vez se

objeta la misión y la respuesta de Dios toma la pregunta como más

profundidad. Por un lado Dios le da la respuesta que Moisés le dará a los

israelitas; a saber “Yave, el Dios de vuestros padres, el Dios de Abraham,

el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob, me envió vosotros”. Con esta

aseveración se dará a conocer dos cosas: que conoce los nombres de los

patriarcas de Israel y segundo que conoce el nombre de su Dios. Antes de

Moisés ir a su misión a Egipto, tiene que creer que es posible liberar a los

hebreos. De ahí el “Yo soy el que Es” y el Dirás a los israelitas, “Yo Soy”

me envió a vosotros. En este momento según la versión elohista del

éxodo, Dios revelo su nombre de Yave no solo a Moisés sino también a la

humanidad.
V. Resumen

Moisés puede representar hoy día a cada uno de nosotros, Dios nos

llama una nueva misión en nuestros tiempos, así como lo hizo al profeta

en sus tiempos. El llamado es individual sin embargo la tarea es

comunitaria. Ese llamado puede ser a la liberación de nuestros prejuicios.

Hoy día esa misión representa nuevos retos dentro y fuera de nuestra

congregación. Retos: como el de hacer justicia con nuestro prójimo, para

adelantar el Reino de Dios, que todos y todas estamos llamados a seguir.

Así como Moisés se quito las sandalias y se desplazo para liberar ese

pueblo, nosotros tenemos la responsabilidad de quitar de nuestra vida

todas esas cosas que nos apartan de nuestro prójimo y ser ese enlace

entre el prójimo y Dios. Además el texto nos enseña a ser sensibles al

llamado, estar dispuestos, comprometidos y tener disposición a la tarea a

la que seamos reclutados.

VI. Bibliografía

Auzou, Gerges. De la servidumbre al servicio: Estudio del Libro de Éxodo, 2da. Ed.

Ediciones Fax: España, Madrid, 1969.

Meyer, Lester. The Message of Exodus, Augsburg Publishing House, Minneapolis,

1983.

Pixley, Jorge. Éxodo: una lectura evangélica y popular. México, Casa Unida de

Publicaciones, S.A., 1983.

Soggin, Alberto J. Introducción to the Old Testament, (OTL) Philadelphia:

Westminster Press, 1980.


Bosquejo: Éxodo 3: 1-15
Sandra Nieves Cruz

EBAT 6010

Profesor: Guillermo Ramírez

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