Buenos Aires

15/8/03

Para Caro

Menina de ojos tristes.

Ilusiones de alambre.
De voces que se acalambran en agonías comprensibles.
De claras palabras que quieren y deben ser oídas. Pero que no ven la luz del día.
Por obscuros designios. Por extraños pasados.

Siempre dije que quiero oírte. Y me quedo sin ellas. Imaginándote.

Al final, te escogí entre todas las mujeres.

Mi corazón baila entre tu pecho y tus pies. Algo así como una lógica utopía.
Una absurda y feroz melodía. De mi, un hombre que te busca bajo tu piel.
Que quiere la alegría ilimitada. Obligado, sin embargo, a esconderse bajo tierra.
Aunque sea por poco. Por un tiempo pequeño, incómodo.
Por eso, espérame. Guárdame tu dulzura. Tus caricias. Para los tiempos de gritos
exultantes. Es que quiero gritar, aún no lo viste escrito en mi ojos?

He pasado mil años por tu hermoso cuerpo, y olvido.

He dormido contigo y al despertar tu boca salió de mi sueño.
Del fondo de tu vida recibí tu beso y entre ruidos y deseos mojé tu ambarina
costumbre de abrazarnos. Como crianças.

Menina de ojos tristes.

Ven. Bien cerca. Mi compañera. Ven.
No huyas. Suelta todas las barcas que anoche se amarraron al cielo.
Hasta el último grito. Y anídate a mi lado como si tuvieras miedo.

No habrá sido fácil acostumbrarte a mí.

A mi alma sola y salvaje. Sin embargo, mis palabras llovieron sobre ti,
acariciándote.
Porque amé desde hace tiempo tu cuerpo y tus estrellas.

Ah! Menina de ojos tristes…Suelta tu cuerpo y tu alma….

Para que disfrute un hombre solitario…y vos, mujer de fantasía.

Dany