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Domingo I adviento
Domingo II adviento
Domingo III adviento
Domingo IV adviento
Navidad - vigilia
Navidad - misa del día
La Sagrada Familia
II Domingo después de Navidad
Santa María Madre de Dios, Solem.
La Epifanía del Señor
Bautismo del Señor
I DOMINGO DE ADVIENTO -C-
PRIMERA LECTURA
Mirad que días vienen-oráculo de Yahveh- en que confirmaré la buena palabra que dije a la
casa de Israel y a la casa de Judá.
En aquellos días y en aquella sazón haré brotar para David un Germen justo, y practicará el
derecho y la justicia en la tierra. En aquellos días estará a salvo Judá, y Jerusalén vivirá en
seguro. Y así se la llamará: "Yahveh, justicia nuestra."
Palabra de Dios.
Salmo responsorial
Sal 24, 4bc-5ab. 8-9. 10 y 14.
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la primera carta del apóstol San Pablo a los Tesalonicenses 3, 12- 4,2
En cuanto a vosotros, que el Señor os haga progresar y sobreabundar en el amor de unos con
otros, y en el amor para con todos, como es nuestro amor para con vosotros. Sabéis, en efecto
las instrucciones que os dimos de parte del Señor Jesús.
Palabra de Dios
EVANGELIO
+ Lectura del santo Evangelio según San Lucas 21, 25-28. 34-36.
"Habrá señales en el sol, en la luna y en las estrellas; y en la tierra, angustias de las gentes,
perplejas por el estruendo del mar y de las olas, muriéndose los hombres de terror y de
ansiedad por las cosas que vendrán sobre el mundo; porque las fuerzas de los cielos serán
sacudidas. Y entonces verán venir al Hijo del hombre en una nube con gran poder y gloria.
Cuando empiecen a suceder estas cosas, cobrad ánimo y levantad la cabeza porque se acerca
vuestra liberación."
PRIMERA LECTURA
Levántate, Jerusalén, sube a la altura, tiende tu vista hacia el Oriente y ve a tus hijos
reunidos desde oriente a occidente, a la voz del Santo, alegres del recuerdo de Dios.
Salieron de ti a pie, llevados por enemigos, pero Dios te los devuelve traídos gloria,
como un trono real. Porque ha ordenado Dios que sean rebajados todo monte elevado y
los collados eternos, y colmados los valles hasta allanar la tierra, para que Israel marche
en seguro bajo la gloria de Dios. Y hasta las selvas y todo árbol aromático darán sombra
a Israel por orden de Dios. Porque Dios guiará a Israel con alegría a la luz de su gloria,
con la misericordia y la justicia que vienen de él.
SEGUNDA LECTURA
Rogando siempre y en toda mis oraciones con alegría por todos vosotros a causa de la
colaboración que habéis prestado al Evangelio, desde el primer día hasta hoy; firmemente
convencido de que, quien inició en vosotros la buena obra, la irá consumando hasta el Día de
Cristo Jesús.
Pues testigo me es Dios de cuánto os quiero a todos vosotros en el corazón de Cristo Jesús. Y
lo que pido en mi oración es que vuestro amor siga creciendo cada vez más en conocimiento
perfecto y todo discernimiento, llenos de los frutos de justicia que vienen por Jesucristo, para la
gloria y alabanza de Dios.
Palabra de Dios.
EVANGELIO
En el año quince del imperio de Tiberio César, siendo Poncio Pilato procurador de Judea, y
Herodes tetrarca de Galilea; Filipo, su hermano, tetrarca de Iturea y de Traconítida, y Lisanias
tetrarca de Abilene; en el pontificado de Anás y Caifás, fue dirigida la palabra de Dios a Juan,
hijo de Zacarías, en el desierto. Y se fue por toda la región del Jordán proclamando un
bautismo de conversión para perdón de los pecados, como está escrito en el libro de los
oráculos del profeta Isaías: Voz que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor,
enderezad sus sendas; todo barranco será rellenado, todo monte y colina será rebajado, lo
tortuoso se hará recto y las asperezas serán caminos llanos. Y todos verán la salvación de
Dios.
PRIMERA LECTURA
Regocíjate, hija de Sión, grita de júbilo, Israel; alégrate de todo corazón, Jerusalén. El
Señor ha cancelado tu condena, ha expulsado a tus enemigos. El Señor será el rey de
Israel, en medio de ti, y ya no temerás. Aquel día dirán de Jerusalén: "No temas, Sión, no
desfallezcan tus manos. El Señor, tu Dios, en medio de ti, es un guerrero que salva. El se
goza y se complace en ti, te ama y se alegra con júbilo como en día de fiesta."
Palabra de Dios.
Salmo responsorial
Is. 12,2-3. 4bcd. 5-6
SEGUNDA LECTURA
Hermanos: Estad siempre alegres en el Señor; os repito, estad siempre alegres. Que
vuestra mesura la conozca todo el mundo. El Señor está cerca. Nada os preocupe; sino
que, en toda ocasión, en la oración y súplica con acción de gracias, vuestras peticiones
sean presentadas a Dios. Y la paz de Dios, que sobre pasa todo juicio, custodiará
vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.
Palabra de Dios.
Evangelio
PRIMERA LECTURA
Así dice el Señor: "Pero tu, belén de Efrata, pequeña entre las aldeas de Judá, de ti saldrá el
jefe de Israel. Su origen es desde lo antiguo, de tiempo inmemorial. Los entrega hasta el
tiempo en que la madre dé a luz, y el resto de sus hermanos retornará a los hijos de Israel. En
pie, pastorea con la fuerza del Señor, por el nombre glorioso del Señor, su Dios. Habitarán
tranquilos, porque se mostrará grande hasta los confines de la tierra, y éste será nuestra paz.
Palabra de Dios
Salmo responsorial
Sal 79, 2ac y 3c. 15-16. 18-19.
Segunda lectura
Hermanos: Cuando Cristo entró en el mundo dijo:"Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, pero
me has preparado un cuerpo; no aceptas holocaustos ni victimas expiatorias. Entonces yo dije
lo que está escrito en el libro: 'Aquí estoy yo para hacer tu voluntad."'
Palabra de Dios.
Evangelio
En aquellos días, María se puso de camino y fue a prisa a la montaña, a un pueblo de Judá;
entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. En cuanto Isabel oyó el saludo de María, saltó la
criatura en su vientre. Se llenó Isabel del Espíritu Santo y dijo a voz en grito: "¡Bendita tú entre
las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi
Señor? En cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. Dichosa
tú que has creído, porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá."
Palabra de Dios.
VIGILIA DE NAVIDAD
NATIVIDAD DEL SEÑOR
PRIMERA LECTURA
Por amor de Sión no callaré, por amor de Jerusalén no descansaré, hasta que
rompa la aurora de su justicia, y su salvación llamee como antorcha.
Los pueblos verán tu justicia, y los reyes tu gloria; te pondrán un nombre nuevo,
pronunciado por la boca del Señor. Serás corona fúlgida en la mano del Señor y
diadema real en la palma de tu Dios. Ya no te llamarán «Abandonada», ni a tu
tierra «Devastada»; a ti te llamarán «Mi favorita», y a tu tierra «Desposada»,
porque el Señor te prefiere a ti, y tu tierra tendrá marido.
Como un joven se casa con su novia, así te desposa el que te construyó; la alegría
que encuentra el marido con su esposa, la encontrará tu Dios contigo.
Palabra de Dios.
Salmo responsorial
Sal 88, 4-5. 16-17. 27 y 29 (R.: cf. 2a)
Sellé una alianza con mi elegido, jurando a David, mi siervo: "Te fundaré un linaje
perpetuo, edificaré tu trono para todas las edades." R
SEGUNDA LECTURA
Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 13, 16-17. 22-25
Palabra de Dios.
EVANGELIO
Palabra de Dios.
¡Qué hermosos son sobre los montes los pies del mensajero que anuncia la paz, que trae la
Buena Nueva, que pregona la victoria, que dice a Sión: "Tu Dios es rey!" Escucha: tus vigías
gritan, cantan a coro, porque ven cara a cara al Señor, que vuelve a Sión. Romped a cantar a
coro, ruinas de Jerusalén, que el Señor consuela a su pueblo, rescata a Jerusalén; el Señor
desnuda su santo brazo a la vista de todas las naciones, y verán los confines de la tierra la
victoria de nuestro Dios.
Palabra de Dios
Salmo responsorial
Sal 97, 1. 2-3ab. 3cd-4. 5-6 (R.: 3c)
SEGUNDA LECTURA
En distintas ocasiones y de muchas maneras habló Dios antiguamente a nuestros padres por
los profetas. Ahora, en esta etapa final, nos ha hablado por el Hijo, al que ha nombrado
heredero de todo, y por medio del cual ha ido realizando las edades del mundo.
Pues, ¿a qué ángel dijo jamás: "Hijo mío eres tú, hoy te he engendrado", o: "Yo seré para él un
padre, y el será para mi un hijo?" Y en otro pasaje, al introducir en el mundo al primogénito,
dice: "Adórenlo todos los ángeles de Dios."
Palabra de Dios.
EVANGELIO
En el principio ya existía la Palabra, y la Palabra estaba junto a Dios, y la Palabra era Dios. La
Palabra en el principio estaba junto a Dios. Por medio de la Palabra se hizo todo, y sin ella no
se hizo nada de lo que se ha hecho. En la Palabra había vida, y la vida era la luz de los
hombres. La luz brilla en la tiniebla, y la tiniebla no la recibió.
Surgió un hombre enviado por Dios, que se llamaba Juan: éste venía como testigo, para dar
testimonio de la luz, para que por él todos vinieran a la fe. No era él la luz, sino testigo de la luz.
La Palabra era la luz verdadera, que alumbra a todo hombre. Al mundo vino, y en el mundo
estaba; el mundo se hizo por medio de ella, y el mundo no la conoció. Vino a su casa, y los
suyos no la recibieron. Pero a cuantos la recibieron, les da poder para ser hijos de Dios, si
creen en su nombre. Éstos no han nacido de sangre, ni de amor carnal, ni de amor humano,
sino de Dios.
Y la Palabra se hizo carne y acampó entre nosotros, y hemos contemplado su gloria: gloria
propia del Hijo único del Padre, lleno de gracia y de verdad. Juan da testimonio de él y grita
diciendo:"Éste es de quien dije:'El que viene detrás de mí pasa delante de mi, porque existía
antes que yo.'"
Pues de su plenitud todos hemos recibido, gracia tras gracia. Porque la ley se dio por medio de
Moisés, la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. A Dios nadie lo ha visto jamás:
el Hijo único, que está en el seno del Padre, es quien lo ha dado a conocer.
Dios hace al padre más respetable que a los hijo y afirma la autoridad de la madre sobre su
prole. El que honra a su padre expía sus pecados, el que respeta a su madre acumula tesoros;
el que honra a su padre se alegrará de sus hijos y, cuando rece, será escuchado; el que
respeta a su padre tendrá larga vida, al que honra a su madre el Señor lo escucha.
Hijo mío, sé constante en honrar a tu padre, no lo abandones mientras vivas; aunque chochee,
ten indulgencia, no lo abochornes mientras vivas. La limosna del padre no se olvidará, será
tenida en cuenta para pagar tus pecados.
Palabra de Dios.
Salmo responsorial
Sal 127, 1-2. 3. 4-5 (R.: cf. 1)
R. Dichosos los que temen al Señor y siguen sus caminos.
SEGUNDA LECTURA
Que la paz de Cristo actúe de árbitro en vuestro corazón; a ella habéis sido convocados, en un
solo cuerpo. Y sed agradecidos. La palabra de Cristo habite entre vosotros en toda su riqueza;
enseñaos unos a otros con toda sabiduría; corregíos mutuamente.
Cantad a Dios, dadle gracias de corazón, con salmos, himnos y cánticos inspirados. Y, todo lo
que de palabra o de obra realicéis, sea todo en nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios
Padre por medio de él.
Mujeres, vivid bajo la autoridad de vuestros maridos, como conviene en el Señor. Maridos,
amad a vuestras mujeres, y no seáis ásperos con ellas. Hijos, obedeced a vuestros padres en
todo, que eso le gusta al Señor. Padres, no exasperéis a vuestros hijos, no sea que pierdan los
ánimos.
Palabra de Dios.
EVANGELIO
Los padres de Jesús solían ir cada año a Jerusalén por las fiestas de Pascua. Cuando Jesús
cumplió doce años, subieron a la fiesta según la costumbre y, cuando terminó, se volvieron;
pero el niño Jesús se quedó en Jerusalén, sin que lo supieran sus padres. Éstos, creyendo que
estaba en la caravana, hicieron una jornada y se pusieron a buscarlo entre los parientes y
conocidos; al no encontrarlo, se volvieron a Jerusalén en su busca.
A los tres días, lo encontraron en el templo, sentado en medio de los maestros, escuchándolos
y haciéndoles preguntas; todos los que le oían quedaban asombrados de su talento y de las
respuestas que daba. Al verlo, se quedaron atónitos, y le dijo su madre: "Hijo, ¿por qué nos has
tratado así? Mira que tu padre y yo te buscábamos angustiados." Él les contestó: " ¿Por qué
me buscabais? ¿No sabíais que yo debía estar en la casa de mi Padre?" Pero ellos no
comprendieron lo que quería decir.
Él bajó con ellos a Nazaret y siguió bajo su autoridad. Su madre conservaba todo esto en su
corazón. Y Jesús iba creciendo en sabiduría, en estatura y en gracia ante Dios y los hombres.
PRIMERA LECTURA
El Creador del universo me ordenó, el Creador estableció mi morada: "Habita en Jacob, sea
Israel tu heredad." Desde el principio, antes de los siglos, me creó, y no cesaré jamás. En la
santa morada, en su presencia, ofrecí culto y en Sión me establecí; en la ciudad escogida me
hizo descansar, en Jerusalén reside mi poder. Eché raíces entre un pueblo glorioso, en la
porción del Señor, en su heredad, y resido en la congregación plena de los santos.
Palabra de Dios
Salmo responsorial
Sal 1471 12-13. 14-15- . 19~20 (R.: Jn 1, 14)
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la carta del apóstol san pablo a los Efesios 15 3-6. 15-18
Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en la persona de
Cristo con toda clase de bienes espirituales y celestiales. Él nos eligió en la persona de Cristo,
antes de crear el mundo para que fuésemos santos, e irreprochables ante él por el amor. El nos
ha destinado en la persona de Cristo, por pura iniciativa suya, a ser sus hijos, para que la gloria
de su gracia, eue tan generosamente nos ha concedido en su querido Hijo, redunde en
alabanza suya.
Por eso yo, que he oído hablar de vuestra fe en el Señor Jesús y de vuestro amor a todos los
santos, no ceso de dar gracias por vosotros, recordándoos en mi oración, a fin de que el Dios
de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, os dé espíritu de sabiduría y revelación para
conocerlo. Ilumine los ojos de vuestro corazón, para que comprendáis cuál es la esperanza a la
que os llama, cuál la riqueza de gloria que da en herencia a los santos.
Palabra de Dios
EVANGELIO
En el principio ya existía la Palabra, y la Palabra estaba junto a Dios, y la Palabra era Dios. La
Palabra en el principio estaba junto a Dios. Por medio de la Palabra se hizo todo, y sin ella no
se hizo nada de lo que se ha hecho. En la Palabra había vida, y la vida era la luz de los
hombres.
La luz brilla en la tiniebla, y la tiniebla no la recibió. Surgió un hombre enviado por Dios, que se
llamaba Juan: éste venía como testigo, para dar testimonio de la luz,
para que por él todos vinieran a la fe. No era él la luz, sino testigo de la luz.
La Palabra era la luz verdadera, que alumbra a todo hombre. Al mundo vino, y en el mundo
estaba; el mundo se hizo por medio de ella, y el mundo no la conoció. Vino a su casa y los
suyos no la recibieron. Pero a cuantos la recibieron, les da poder para ser hijos de Dios, si
creen en su nombre. Éstos no han nacido de sangre, ni de amor carnal, ni de amor humano,
sino de Dios.
Y la Palabra se hizo carne y acampó entre nosotros, y hemos contemplado su gloria: gloria
propia del Hijo único del Padre, lleno de gracia y de verdad. Juan da testimonio de él y grita
diciendo: "Éste es de quien dije: 'El que viene detrás de mí,
pasa delante de mí, porque existía antes que yo.'"
Pues de su plenitud todos hemos recibido, gracia tras gracia. Porque la ley se dio por medio de
Moisés, la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. A Dios nadie lo ha visto jamás:
el Hijo único, que está en el seno del Padre, es quien lo ha dado a conocer.
El Señor habló a Moisés: "Di a Aarón y a sus hijos: Ésta es la fórmula con que bendeciréis a los
israelitas:'El Señor te bendiga y te proteja, ilumine su rostro sobre ti y te conceda su favor. El
Señor se fije en ti y te conceda la paz.' Así invocarán mi nombre sobre los israelitas, y yo los
bendeciré."
Palabra de Dios.
Salmo responsorial
Sal 66, 2-3. 5. 6 y 8 (R.: 2a
SEGUNDA LECTURA
Hermanos: Cuando se cumplió el tiempo, envió Dios a su Hijo, nacido de una mujer, nacido
bajo la Ley, para rescatar a los que estaban bajo la Ley, para que recibiéramos el ser hijos por
adopción.
Como sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo que clama: «¡Abba!
Padre.» Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si eres hijo, eres también heredero por voluntad
de Dios.
Palabra de Dios
EVANGELIO
En aquel tiempo, los pastores fueron corriendo a Belén y encontraron a María y a José, y al
niño acostado en el pesebre. Al verlo, contaron lo que les hablan dicho de aquel niño. Todos
los que lo oían se admiraban de lo que les decían los pastores. María conservaba todas estas
cosas, meditándolas en su corazón.
Los pastores se volvieron dando gloria y alabanza a Dios por lo quehabían visto y oído; todo
como les hablan dicho.
Al cumplirse los ocho días, tocaba circuncidar al niño, y le pusieron por nombre Jesús, como lo
habla llamado el ángel antes de su concepción.
¡Levántate, brilla, Jerusalén, que llega tu luz; la gloria del Señor amanece sobre ti! Mira: las
tinieblas cubren la tierra, y la oscuridad los pueblos, pero sobre ti amanecerá el Señor, su gloria
aparecerá sobre ti. Y caminarán los pueblos a tu luz, los reyes al resplandor de tu aurora.
Levanta la vista en torno, mira: todos ésos se han reunido, vienen a ti; tus hijos llegan de lejos,
a tus hijas las traen en brazos.
Palabra de Dios.
Salmo responsorial
Sal 71, 1-2. 7-8. 10-11. 12-13 (R.: cf. 11)
R. / Se postrarán ante ti, Señor, todos los pueblos de la tierra.
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 3, 2-3a. 5-6
Hermanos:
Habéis oído hablar de la distribución de la gracia de Dios que se me ha dado en favor vuestro.
Ya que se me dio a conocer por revelación el misterio, que no había sido manifestado a los
hombres en otros tiempos, como ha sido revelado ahora por el Espíritu a sus santos apóstoles
y profetas: que también los gentiles son coherederos, miembros del mismo cuerpo y partícipes
de la promesa en Jesucristo, por el Evangelio.
Palabra de Dios.
EVANGELIO
Jesús nació en Belén de Judea en tiempos del rey Herodes. Entonces, unos magos de Oriente
se presentaron en Jerusalén preguntando:"¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido?
Porque hemos visto salir su estrella y venimos a adorarlo." Al enterarse el rey Herodes, se
sobresaltó, y todo Jerusalén con él; convocó a los sumos sacerdotes y a los escribas del país, y
les preguntó dónde tenía que nacer el Mesías. Ellos le contestaron: "En Belén de Judea,
porque así lo ha escrito el profeta: 'y tú, Belén, tierra de Judea, no eres ni mucho menos la
última de las ciudades de Judea, pues de ti saldrá un jefe que será el pastor de mi pueblo
Israel.'"
Entonces Herodes llamó en secreto a los magos para que le precisaran el tiempo en que había
aparecido la estrella, y los mandó a Belén, diciéndoles: "ld y averiguad cuidadosamente qué
hay del niño y, cuando lo encontréis, avisadme, para ir yo también a adorarlo." Ellos, después
de oír al rey, se pusieron en camino, y de pronto la estrella que habían visto salir comenzó a
guiarlos hasta que vino a pararse encima de donde estaba el niño.
Al ver la estrella, se llenaron de inmensa alegría. Entraron en la casa, vieron al niño con María,
su madre, y cayendo de rodillas lo adoraron;después, abriendo sus cofres. Le ofrecieron
regalos: oro, incienso y mirra. Y habiendo recibido en sueños un oráculo, para que no volvieran
a Herodes, se marcharon a su tierra por otro camino.
PRIMERA LECTURA
Así dice el Señor: "Mirad a mi siervo, a quien sostengo; mi elegido, a quien prefiero. Sobre él
he puesto mi espíritu, para que traiga el derecho a las naciones.
No gritará, no clamará, no voceará por las calles. La caña cascada no la quebrará, el pábilo
vacilante no lo apagará. Promoverá fielmente el derecho, no vacilará ni se quebrará, hasta
implantar el derecho en la tierra, y sus leyes que esperan las islas. Yo, el Señor, te he llamado
con justicia, te he cogido de la mano, te he formado, y te he hecho alianza de un pueblo, luz de
las naciones. Para que abras los ojos de los ciegos, Saques a los cautivos de la prisión, y de la
mazmorra a los que habitan las tinieblas."
Palabra de Dios.
Salmo responsorial
Sal 28, la y 2. 3ac-4. » y 9b-10 (R.: l lb)
R. El Señor bendice a su pueblo con la paz.
SEGUNDA LECTURA
En aquellos días, Pedro tomó la palabra y dijo "Está claro que Dios no hace distinciones;
acepta al que lo teme y practica la justicia, sea de la nación que sea. Envió su palabra a los
israelitas, anunciando la paz que traería Jesucristo, el Señor de todos. Conocéis lo que
sucedió en el país de los judíos, cuando Juan predicaba el bautismo, aunque la cosa empezó
en Galilea. Me refiero a Jesús de Nazaret, ungido por Dios con la fuerza del Espíritu Santo, que
pasó haciendo el bien y curando a los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él."
Palabra de Dios.
EVANGELIO
Palabra de Dios.