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Máquina de coser

Primera máquina de coser inventada por Elias Howe.

Una máquina de coser es un dispositivo


mecánico o electromecánico que sirve para unir
tejidos usando hilo. Las máquinas de coser hacen
una puntada característica, usando normalmente
dos hilos, si bien existen máquinas que usan uno,
tres, cuatro o más.

Las máquinas de coser pueden hacer una gran


variedad de puntadas rectas o en patrones.
Incluyen medios para arrastrar, sujetar y mover la
tela bajo la aguja de coser para formar el patrón
de la puntada. La mayoría de las máquinas de
coser caseras y algunas industriales usan una
puntada de dos hilos llamada puntada de pespunte. La mayoría de las máquinas
de coser industriales usan una puntada remallada producida por una máquina
denominada remalladora. Algunas máquinas de coser antiguas producen
cadenetas.

El mecanismo para deslizar el tejido puede ser una simple guía de labor o estar
controlado por patrones (por ejemplo, del tipo Jacquard). Algunas máquinas
pueden crear puntadas de tipo bordado. Algunas pueden tener un marco para
sujetar la labor.

Historia
Antes de la invención de una máquina utilizable para la costura o el diseño de
vestimenta, todo fue cosido a mano. La mayoría de los primeros intentos trataron
de replicar este método para de coser y en general fue un fracaso. Algunos
esperaban que el bordado, donde la aguja se usa para producir un patrón
decorativo, no uniese las puntadas. Esta aguja se modificó para crear un buen
gancho de acero, llamado aguja en español. Esto se llama crochet en Francia y
podría ser usado para crear una forma de cadena puntada. Esto fue posible
porque cuando la aguja es empujada en parte a través de tejido y retirada, deja un
bucle de hilo. El siguiente punto se pasa a través de este primer bucle mientras
crea otro lazo para el próximo punto, esto se asemeja a una cadena, de ahí su
nombre.

El primer intento conocido de un dispositivo mecánico para coser fue del alemán
Charles Fredrick Wiesenthal, que estaba trabajando en Inglaterra. Se le concedió
la Patentes británica N.º 701 en 1755 para un doble señaló aguja con un ojo en un
extremo. Esta aguja fue diseñada para ser pasado a través de la tela por un par de
dedos mecánicos y comprendidos por el otro lado por un segundo par. Este
método de recrear la mano de coser método sufrido el problema de la aguja
pasando a través de la trama, en el sentido de toda la longitud del hilo tenía que
hacer lo mismo. Las limitaciones mecánicas significan que el hilo tuvo que ser
breves, que necesitan frecuentes paradas para renovar el suministro.

La primera máquina de coser fue concebida y patentada en 17901 por el inventor


británico Thomas Saint. La máquina de Saint, que estaba diseñada para coser piel
y tela, usaba un único hilo y formaba una puntada en cadena. No se usaba aguja
sino una lezna para perforar el material que se estaba cosiendo. Otro mecanismo
colocaba el hilo a través del agujero, tras lo cual una vara parecida a una aguja
con un punto hendido llevaba el hilo a través de la parte inferior, donde un gancho
recogía el hilo y lo llevaba a la parte delantera para la siguiente puntada. Cuando
el ciclo se repetía se formaba un segundo bucle con el primero en la parte inferior
de la prenda, creando así una cadena y el cierre de la puntada. Sin embargo, la
máquina de Saint nunca pasó del prototipo.

La primera máquina práctica de coser fue la fabricada en 1829 por el sastre


francés Barthélemy Thimonnier. Éste empleaba una aguja en forma de gancho
que se movía hacia abajo mediante un pedal y volvía a su posición inicial
mediante un muelle. Al igual que la máquina de Saint, ésta producía una puntada
en cadena. Cuando Thimonnier instaló 80 de sus máquinas en una empresa de
confección, los sastres de París lo llevaron a la quiebra y terminó por morir
arruinado en Inglaterra.

La primera máquina de puntada cerrada fue creada por el inventor estadounidense


Walter Hunt hacia 1834. La máquina, que empleaba al mismo tiempo una aguja
con un ojo en la punta y una lanzadera oscilante, no se patentó en el momento de
su invención, de forma que cuando más tarde Hunt intentó obtener una patente, su
petición fue desatendida por motivos de abandono.

Trabajando de forma independiente, el inventor estadounidense Elias Howe


desarrolló una máquina que contenía los mismos elementos básicos que la de
Hunt y la patentó en 1846. Otro inventor estadounidense, Isaac Merritt Singer,
patentó una máquina similar y Howe ganó la demanda que interpuso contra él por
usurpar su patente. Singer, sin embargo, fue responsable de la combinación de
varias patentes en el campo de las máquinas de coser y de sentar las bases para
la producción en serie de estas máquinas.

Otros descubrimientos importantes en este campo fueron la bobina rotatoria, que


se incorporó en 1850 a una máquina patentada por el inventor estadounidense
Allen Benjamin Wilson, así como la alimentación intermitente de cuatro
movimientos para hacer avanzar la tela entre cada puntada, que formaba parte de
la misma patente. El pie de sujeción, un dispositivo con un muelle a presión para
sostener la tela contra la superficie de trabajo, fue desarrollado por Singer
después de patentar su primera máquina.

Las primeras máquinas de coser de gran aceptación se accionaban girando una


manivela. Más tarde se incorporaron un pedal y un dispositivo de manivela que
permitían al operario usar las dos manos para guiar el material bajo la aguja. Las
máquinas de coser modernas están equipadas con motores eléctricos que se
activan con un interruptor accionado con el pie o la rodilla.

Estructura de la máquina de coser


La típica estructura de la máquina de coser se compone de una base desde la
cual el cuerpo de la máquina se apoya, dentro del cuerpo se encuentran los
engranajes de movimiento de la aguja. Del cuerpo sale un brazo. El extremo
opuesto del brazo termina con la cabeza que apoya la barra de la aguja, por fuera
están las poleas que determinan la tensión del hilo.

Las Máquinas de coser, son diferentes por el tipo de punto que se obtiene de ella.

Características físicas de la aguja de coser

La aguja tiene varias características que determinan la eficacia de la formación del


punto. La aguja de la máquina de coser debe estar siempre recta y afilada para
una costura óptima. Una aguja normal de máquina de coser se divide en las
siguientes partes:

• Talón: Es la parte de la aguja que se fija en la empuñadura en la parte


inferior de la barra de aguja del brazo. Tiene una forma cilíndrica y, a veces,
presenta una sección longitudinal, lo que ayuda para el posicionamiento
exacto de la aguja en la máquina.
• Cono: Es el final del talón, tiene un cono truncado para facilitar su inserción
en la barra de la aguja.
• Tronco: También tiene una forma de cono truncado, conecta el extremo
superior de la aguja con parte inferior.
• Ranuras: Este es un canal excavado a lo largo del tronco en la parte
delantera del ojo para el hombro y tiene la función de contener la costura
durante el paso por el tejido, con el fin de no causar fricción. En algunos
casos, puede ser una ranura en la parte posterior de la aguja, pero más
pequeña
• Ojo y punta: El ojo es el orificio en donde se coloca el hilo, este por lo
general tiene forma de ovoide. Debajo del ojo esta la punta, que debe estar
siempre afilada

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