Professional Documents
Culture Documents
País: Japón
Idioma: Japonés
Estación Ueno 54 es Kumiko, una joven bella, amigable y enérgica que, según
cuenta fue abandonada en el locker 54 de la estación Ueno al poco tiempo de
nacer, de ahí su seudónimo. Y de ahí el lugar donde se encontraron, el locker
54 de la estación. En ese casillero, Kumiko guarda cantidades de objetos que
recolectó a lo largo de su vida. Para simbolizar el inicio de su viaje, de su
aventura,el momento clave en el que deja finalmente de ser Noriko, Mitsuko
deja el hilo que cortó de su abrigo apenas bajó del tren.
El cordón umbilical de Mitsuko.
Sin dudas, su infancia tan particular le ha dado a Kumiko una visión un tanto
distorsionada de la familia, una visión que rápidamente absorbe a la naif
Noriko.
Resulta que la familia que Noriko tan rápidamente había adoptado como propia
no es siquiera una familia. Haikyo.com es en realidad la puerta de entrada al
negocio de Kumiko, una suerte de red (o -círculo-) de prostitución al cual la
gente solitaria de Tokyo recurre para “alquilar” familiares, recuperar hijas
perdidas, esposas, padres, abuelas, familias.
Kumiko entrena a sus actores para servir a quienes necesiten una hija a quien
gritarle, una famillia para que llore su muerte, una esposa infiel a quien
perdonar, o de la cual vengarse.
Sin pensarlo dos veces, Noriko se une a la retorcida familia de Kumiko, se muda
a su cuartel y se involucra al punto de ver a su primer cliente -un padre
abandonado, abusivo, sucio- como un padre real al que podría llegar a amar.
Noriko busca tan fervorosamente una realidad que no conoce, que hace mucho
más fácil y potente el impacto de la filosofía de Kumiko en su mente.
La familia decide tener una cena feliz, en familia como se debe (porque una
familia que cena unida, permanece unida), rodeados de los cadáveres de los
guardaespaldas. Y entonces se da un punto de ruptura. El monólogo de Yuka
(que ya no es más Yoko) lo dice todo: sólo quieren evitar el dolor. La huida a
Tokyo y el intento de despegarse de todo, de no tener familia y tener millones
de ellas, causa más pena y dolor de lo que pensábamos.
Yuka decide partir de madrugada, en la oscuridad, como su hermana. Lleva el
mismo abrigo que traía su hermana al llegar a Tokyo, y corta ella también un
hilo -rojo- que se desprende de la manga. El cordón umbilical, el signo de que
empieza el viaje, y camina por primera vez.