Son aquellas ondas que no necesitan un medio material para
propagarse. Incluyen, entre otras, la luz visible y las ondas de radio, televisión y telefonía.
Todas se propagan en el vacío a una velocidad constante, muy alta
(300 0000 km/s) pero no infinita. Gracias a ello podemos observar la luz emitida por una estrella lejana hace tanto tiempo que quizás esa estrella haya desaparecido ya. O enterarnos de un suceso que ocurre a miles de kilómetros prácticamente en el instante de producirse.
Las ondas electromagnéticas se propagan mediante una oscilación
de campos eléctricos y magnéticos. Los campos electromagnéticos al "excitar" los electrones de nuestra retina, nos comunican con el exterior y permiten que nuestro cerebro "construya" el escenario del mundo en que estamos. Las O.E.M. son también soporte de las telecomunicaciones y el funcionamiento complejo del mundo actual.
ORIGEN Y FORMACIÓN
Las cargas eléctricas al ser aceleradas originan ondas
electromagnéticas
El campo E originado por la carga
acelerada depende de la distancia a la carga, la aceleración de la carga y del seno del ángulo que forma la dirección de aceleración de la carga y al dirección al punto en que medimos el campo( sen q).
Un campo electrico variable engendra
un campo magnético variable y este a su vez uno electrico, de esta forma las o. e.m. se propagan en el vacio sin soporte material
Refracción
La velocidad de propagación de la radiación electromagnética en el vacío
es c. La teoría electromagnética establece que:
siendo ε0 y μ0 la permitividad eléctrica y la permeabilidad magnética del
vacío respectivamente.
En un medio material la permitividad eléctrica ε tiene un valor diferente a
ε0. Lo mismo ocurre con la permeabilidad magnética μ y, por tanto, la velocidad de la luz en ese medio v será diferente a c. La velocidad de propagación de la luz en medios diferentes al vacío es siempre inferior a c.
Cuando la luz cambia de medio experimenta una desviación que depende
del ángulo con que incide en la superficie que separa ambos medios. Se habla, entonces, de ángulo incidente y ángulo de transmisión. Este fenómeno, denominado refracción, es claramente apreciable en la desviación de los haces de luz que inciden en el agua. La velocidad de la luz en un medio se puede calcular a partir de su permitividad eléctrica y de su permeabilidad magnética de la siguiente manera: Dispersión
Dispersión de la luz blanca en un prisma.
La permitividad eléctrica y la permeabilidad magnética de un medio
diferente del vacío dependen, además de la naturaleza del medio, de la longitud de onda de la radiación. De esto se desprende que la velocidad de propagación de la radiación electromagnética en un medio depende también de la longitud de onda de dicha radiación. Por tanto, la desviación de un rayo de luz al cambiar de medio será diferente para cada color (para cada longitud de onda). El ejemplo más claro es el de un haz de luz blanca que se "descompone" en colores al pasar por un prisma. La luz blanca es realmente la suma de haces de luz de distintas longitudes de onda, que son desviadas de manera diferente. Este fenómeno se llama dispersión. Es el causante de la aberración cromática, el halo de colores que se puede apreciar alrededor de los objetos al observarlos con instrumentos que utilizan lentes como prismáticos o telescopios.
Radiación por partículas aceleradas
Fórmula de Larmor
Una consecuencia importante de la electrodinámica clásica es que una
partícula cargada en movimiento acelerado (rectilíneo, circular o de otro tipo) debe emitir ondas alectromagnéticas siendo la potencia emitida proporcional al cuadrado de su aceleración, de hecho la fórmula de Larmor para la potencia emitida viene dada por: Donde:
es la carga eléctrica de la partícula.
es la aceleración de la partícula.
la permitividad eléctrica del vacío.
es la velocidad de la luz.
Un ejemplo de este fenómeno de emisión de radiación por parte de
partículas cargadas es la radiación de sincrotrón.
La luz, es una forma de energía, que se transmite por el espacio en
ondas sinoidales, similares a las producidas cuando lanzamos una piedra a un estanque. Nace en la fuente que la produce (el sol, una lámpara, etc.) y se propaga en línea recta hasta encontrar un objeto que la intercepte. Pertenece a la familia de las radiaciones electromagnéticas, todas ellas poseen las mismas características (energía emitida en forma de ondas) pero sus diferencias en cuanto a longitud de onda pueden ser enormes. Las radiaciones electromagnéticas se extienden desde los rayos gamma hasta las ondas de radio es decir, desde longitudes de onda más cortas (rayos gamma, rayos X), hasta las kilométricas ( telecomunicaciones). En fotografía haremos mención frecuente de la longitud de onda que, al ser una distancia, se mide en metros. Para las más cortas se utilizan submúltiplos como el nanómetro (millonésima de milímetro) mientras que las más largas se miden en centímetros, metros e incluso kilómetros.
Las ondas del espectro electromagnético se miden por tres parámetros:
longitud de onda, frecuencia y amplitud. La frecuencia se define como el número de ondas completas o ciclos medidos por segundo, también denominados hercios (Hz).
La longitud de onda (8 ) se define como la distancia lineal ocupada
por una onda completa o ciclo medida horizontalmente es decir, la distancia entre dos crestas o dos valles.
Ambas magnitudes (frecuencia y longitud de onda) no son
independientes sino inversamente proporcionales: a menor distancia entre dos crestas de onda, más cantidad de ondas encajarán en un período de tiempo de un segundo. Si la frecuencia es alta la longitud de onda es corta y viceversa. La relación entre entre frecuencia y longitud de onda viene determinada por la ecuación F=C/λ donde C es la velocidad de la luz en el vacνo (300.000 km/s) y λ la longitud de onda expresada en metros. La intensidad (I) o amplitud, es la altura de las crestas de las ondas y en el caso de la luz, determina su brillo o intensidad. La luz se propaga a partir de la fuente emisora en todas las direcciones posibles y en forma de ondas perpendiculares a la dirección del desplazamiento. La orientación de las crestas respecto a la dirección de propagación () determina el ángulo de polarización. La luz polarizada tiene importantes aplicaciones fotográficas que veremos más adelante.