You are on page 1of 6

1 DICIEMBRE / 2004

M
MEED
DIFERENCIA
DIFERENCIA EN
EN LA
LA CAPACIDAD
CAPACIDAD DE
DE SALTO
SALTO

D II C
EN
EN EL
EL LABORATORIO
LABORATORIO Y Y EN
EN LA
LA CANCHA
CANCHA

C II N
UN
UN ESTUDIO
ESTUDIO TRANSVERSAL
TRANSVERSAL

D
DE NAA
RESUMEN

EL
L
Se ha realizado este estudio con el fin de establecer las posibles diferencias que pudieran
acontecer en la evaluación de la capacidad de salto cuando se miden en laboratorio y en

E
cancha. Se han evaluado doce jugadores de baloncesto de la liga universitaria española

EJ
cuya edad media es de 22 ± 2,17 años. Los tests aplicados, a los que los deportistas

JE
estaban habituados, fueron squat jump (SJ), counter movement jump (CMJ) y counter
movement jump con movimiento de extremidades superiores (arm swing; CMJas). La altu-

ER
ra del centro de gravedad de los saltos se midió en una plataforma de rayos infrarrojos

RC
acoplada al sistema Muscle Lab™. Existen diferencias estadísticamente significativas
cuando se evalúa en campo con respecto a la evaluación de laboratorio en los tres saltos

C II C
analizados: SJ (37.88 ± 0.96 vs 35.88 ± 1.19) p<0.0015 un, CMJ (44.98 ± 1.94 vs 42.53±1.73)
p<0.0015 y CMJas (52.95 ± 2.30 vs 50.90 ± 2.32) p<0.0015 siendo el valor de la evaluación

C II O
de campo superior en un 5.5, 5.7 y 4.0% en el SJ, CMJ y CMJas respectivamente. Los
resultados sugieren que deberían realizarse las evaluaciones de la capacidad de salto en
el propio ambiente de entrenamiento siempre que sea posible.

O
PALABRAS CLAVES: Salto vertical – Baloncesto - Test de Bosco.

ABSTRACT
The present study has been conducted in order to establish the possible differences that
could result from evaluating jump capacity, as a means for power estimation, in two different
locations such as laboratory and field. We have evaluated twelve basketball players of the
University of Córdoba (UCO), Spain, who compete in the national University League, mean
age for the players was 22 ±2.17 ys. The applied tests, to which the sportsmen were
accustomed, were the squat jump (SJ), counter movement jump (CMJ), and counter movement
jump with arm swing (CMJas). The vertical displacement of the centre of gravity height during
the jumps was measured with an infra-red rays platform linked to the Muscle Lab system.
We found statistically significant differences between the field evaluation versus the laboratory
evaluation for the three types of jump analysed: SJ (37.88 ± 0.96 vs 35.88 ± 1.19) p<0.0015,
CMJ (44.98 ± 1.94 vs 42.53±1.73) p<0.0015 y CMJas (52.95 ± 2.30 vs 50.90 ± 2.32) p<0.0015. M. E. DA SILVA,
These values represent an increase for the field evaluation of 5.5, 5.7, and 4.0% respectively V. NÚÑEZ ÁLVAREZ,
for SJ, CMJ, CMJas. The results suggest that the evaluations for jump capacity should be D. M. VAAMONDE,
done in the training environment whenever possible. A. IBNZIATEN HAMMADI,
B.VIANA, J. R. GÓMEZ Y
J. L. LANCHO
KEY WORDS: Vertical jump, Basketball, Bosco Tests. _____________________

Laboratorio de Ciencias
Morfuncionales del Deporte.
Servicio de Medicina Deportiva
Facultad de Medicina.
Universidad de Córdoba.
_____________________
Aceptado en 23 de febrero del 2004.
Medicina del Ejercicio. Año XIX, Nº 2. Dicienbre de 2004.
DICIEMBRE / 2004 2
M
MEED
INTRODUCCIÓN.
D II C

Desde hace ya algún tiempo los fisiólogos deportivos se apoyan en tests evaluativos como
C II N

referencia para aplicar entrenamiento con el fin de mejorar el rendimiento de los atletas,
proceso de máxima cualificación que viene determinado por unos resultados objetivos de
éxito. Dicho rendimiento es uno de los objetivos fundamentales de un entrenamiento. En el
NA

rendimiento deportivo confluyen aspectos técnicos, tácticos, físicos, psicológicos y otros


(1). Sin embargo, previa aplicación de un entrenamiento se debe realizar una evaluación al
A

atleta para saber la materia prima que tenemos y así poder aplicar un determinado entre-
namiento y conseguir los resultados a los que aspiramos. Stuffleebeam (1996) (2) definió
D
DE

la evaluación como un proceso mediante el cual se proporcionará información útil para la


toma de decisiones. La evaluación consiste en una batería de pruebas que facilitan la
EL

medición analítica de parámetros que influyen en los apartados que conforman el rendi-
miento, facilitando así la determinación cuantitativa del grado de eficacia física y de habili-
L

dad de un deportista.
E
EJ

Por tanto, para obtener dicha información útil, se requiere una serie de instrumentos, proce-
dimientos o técnicas usadas para tal fin, denominados tests evaluativos (3). Para que
JE

dicha información sea útil, los instrumentos a usar deben presentar una serie de caracte-
ER

rísticas que los conviertan en elementos válidos. Los tests han de cumplir tres conceptos
de rigurosidad: validez, fiabilidad, objetividad. Es de suma importancia saber si el test que
RC

vamos a aplicar cumple estos requisitos (1).


C II C

De entre la gran cantidad de tests existentes, uno de los tests más usados es el que mide
la potencia. Es importante analizar la potencia porque ésta se ha considerado un elemento
natural de muchas acciones deportivas, y parte integral de los resultados atléticos, hasta el
C II O

punto que los atletas que han ocupado los primeros lugares de las clasificaciones de sus
especialidades han obtenido mejores resultados en esta prueba (4). Uno de los métodos
de estimación de la potencia es la batería de test de Bosco en el cual la potencia viene
O

indicada por la altura del salto; y puesto que en la mayoría de las actividades deportivas el
rendimiento en el salto vertical juega un papel crítico, los tests de salto son un instrumento
fiable para medir la potencia (5,6), haciendo del test de Bosco un método valioso de
evaluación (7). Según García-Fogeda (2001) (8), los saltos en el atletismo, los rebotes en
baloncesto, los bloqueos en voleibol, etc., son claros ejemplos donde se pone de manifies-
to que el hecho de tener gran capacidad de salto contribuye al éxito deportivo.

Un problema que se nos presenta a la hora de una correcta evaluación es la afirmación,


generalmente aceptada que los resultados obtenidos en pruebas de campo no son tan
fiables como los obtenidos en prueba de laboratorio ya que los métodos empleados para
las evaluaciones difieren bastante; sin embargo, las pruebas de campo suelen tener mayor
validez debido a que son mucho más específicas (9). Estando conscientes de estas venta-
jas y limitaciones, proponemos el uso para nuestro estudio de la plataforma de rayos
infrarrojos del MuscleLab. Dicho sistema proporciona la misma fiabilidad que el laborato-
rio con la ventaja añadida de la especificidad de realizar el test en campo o cancha (10).
En el presente estudio evaluaremos la potencia muscular en función del salto vertical con
la batería de tests de Bosco. Los aspectos técnicos, tácticos, y físicos se mantienen cons-
tantes, para poder introducir y aislar una nueva variable, el ambiente. Varios autores (8,11)
postulan que se puede considerar el comportamiento motor, capacidad de salto en este
caso, como constituido de tres elementos básicos: El organismo (atleta), un medio (labora-
torio y cancha de basket) que está compuesto de estímulos de potencial de acción sobre el
organismo, y las interacciones del organismo con el medio, capacidad del sujeto de alterar
la información obtenida. En el caso del salto, las interacciones vendrán reflejadas por la
influencia del ambiente sobre la magnitud de la potencia de salto medida por la elevación
del centro de gravedad (C.G.). Analizaremos, por tanto, si los resultados de la evaluación de
la capacidad de salto de los atletas son alterados por el hecho de estar en su ambiente de
entrenamiento o fuera de él, y de igual modo se analizará la capacidad, por parte del sujeto
evaluado, de modificar o alterar la información obtenida, manipulando el local de aplicación
de la prueba. Se pretende ofrecer, con estos resultados preliminares (será seguido a lo
largo de la temporada), una recomendación a la hora de realizar las pruebas para optimizar
los resultados y que éstos reflejen mejor la realidad del atleta.

Nuestro estudio pretende conocer si el cambio de local (laboratorio vs. cancha de basket)
en que se realizan estas pruebas influye o no en los resultados obtenidos en las pruebas
de salto.
3 DICIEMBRE / 2004

M
MEED
MATERIAL Y MÉTODOS

D II C
Doce jugadores de baloncesto del equipo de la Universidad de Córdoba (UCO), liga nacio-

C II N
nal universitaria, que se encontraban inmersos en el Periodo de Preparación General fue-
ron los sujetos seleccionados para el presente estudio, cuyos datos antropométricos,
medias y desviación estándar constan en la tabla 1. Todos los evaluados fueron inicial-

NA
mente informados sobre la batería de tests a realizar; para ello se impartieron una serie de
indicaciones previas de realización, tuteladas en todo momento por la presencia del entre-

A
nador. No obstante se debe saber que el responsable de la preparación física ya utilizaba
habitualmente dicha batería de salto como método de evaluación, por lo que pareció

D
DE
evidente que el gesto presenta síntomas de automatización, en cuanto a ejecución se
refiere.

E
EJEL
L
JE
ERRC
C II C
C II O
O
Diseño Experimental
Todos los sujetos fueron evaluados con una plataforma de rayos infrarrojos A.F.R
Technology® integrada en el sistema MuscleLab™ (Model PFMA 3010e). Se han utilizado 3
tests para el registro de información: squat jump (SJ), counter movement jump (CMJ), y
counter movement jump with arm swing (CMJas) pertenecientes a la batería editada por
Bosco para la determinación de la potencia muscular (14).
Squat Jump (SJ) test empleado para valorar la potencia de los miembros inferiores así
como la capacidad de reclutamiento de unidades motoras.
Counter Movement Jump (CMJ) test empleado para valorar la fuerza explosiva con
reutilización de la energía elástica y aprovechamiento del reflejo miotático según Bosco
(1994) (15).
Counter Movement Jump with arm swing (CMJas). En el ámbito de la Actividad Física
y el Deporte, es más conocido como test de Abalakov. Empleado para valorar, al igual que
el CMJ, la fuerza explosiva con reutilización de la energía elástica y de aprovechamiento del
reflejo miotático añadiendo la valoración de la coordinación.

Se registraron 2 evaluaciones distanciadas entre si por un total de 3 días, con el objeto de


evitar una posible contaminación del entrenamiento deportivo sobre la segunda medición.
La primera evaluación tuvo lugar en el laboratorio de medicina deportiva de la Facultad de
Medicina- Universidad de Córdoba. Para la segunda evaluación desplazamos el material
de registro al campo de entrenamiento, entorno habitual de los sujetos.
Se registraron 2 series de evaluaciones distanciadas entre sí por un periodo de dos sema-
nas, para asegurar que los resultados no dependían del orden en el que se realizaban las
pruebas (efecto aprendizaje). Cada una de los series a su vez constaba de 2 evaluaciones
que se realizaron con una separación temporal de 3 días con el objeto de evitar una posible
contaminación del entrenamiento deportivo sobre la segunda medición. Con respecto a la
primera serie, la primera evaluación tuvo lugar en el laboratorio de medicina deportiva de la
Facultad de Medicina- Universidad de Córdoba. Para la segunda evaluación desplazamos el
DICIEMBRE / 2004 4
M
MEED
material de registro al campo de entrenamiento, entorno habitual de los sujetos. La segunda
D II C

serie fue realizado en orden inverso; es decir, la primera evaluación se realizo en campo y la
segunda, habiendo igualmente 3 días de separación, en laboratorio.
C II N

Procedimiento experimental (laboratorio). Los sujetos llegaron al Laboratorio de Ciencias


Morfofuncionales del Deporte (CMFD-UCO), donde previamente se realizaron medidas de
NA

antropometría (peso, estatura, composición corporal) con objeto de obtener valores estándar
necesarios para el programa MuscleLab versión V6.07. Posteriormente el Preparador
A

realizó de forma individualiza una preparación previa (calentamiento + estiramiento) pro-


puesta por Bosco (1994) (15) .
D
DE

Los tests se llevaron a cabo en una sala de 20 m2 con una altura de 3 mts (temperatura de
EL

25°C). Los sujetos (perfectamente acondicionados con ropa y calzado deportivo) fueron (de
forma individualizada) introduciéndose en el interior de la plataforma de infrarrojos donde
L

llevaron a cabo la ejecución de los tests. Se registraron un total de 3 muestras para cada
uno de los tests (SJ, CMJ, CMJas), seleccionando el mejor y obviando los 2 peores regis-
E
EJ

tros de cada uno. Los intervalos entre repeticiones fueron de 1 minuto y las pausas entre
tests se fijaron en 3 minutos; realizando en ambos casos una actividad pasiva.
JE
ER

Procedimiento experimental (campo). Realizamos el desplazamiento del material de re-


gistro al campo de juego (cancha del polideportivo), donde los sujetos entrenan semanal-
RC

mente. Los individuos fueron citados 30 minutos antes del comienzo de la sesión, perfec-
C II C

tamente equipados con ropa y calzado deportivo. Al igual que en el procedimiento de


laboratorio el Preparador realizó de forma individualiza el mismo calentamiento. Los tests
se llevaron a cabo en el interior del recinto, próximo al espacio de juego (temperatura de
C II O

27°C). Al igual que en el anterior registro, los sujetos, de forma individualizada, fueron
introduciéndose en el interior de la plataforma de infrarrojos, realizando la misma secuencia
de registro (Tests, repeticiones, intervalos, pausas etc…). En ambos procedimientos se
O

mantuvieron constantes características como la presencia de entrenador, mismo nº de


personas presentes, ropa y calzado deportivo.

Análisis Estadístico Los datos obtenidos fueron analizados utilizando el programa SPSS
(V.11.0). Se ha realizado un análisis de población apareada usando la prueba de los
rangos con signo de Wilcoxon, ya que las muestras resultaron no normales según el test de
Shapire-Wilk. La probabilidad límite, para el test unilateral, es p= 0, 0015 es decir que para
cualquier nivel de significación á > 0,0015 se detectan diferencias significativas esto es que
el salto en campo es superior al de laboratorio.

RESULTADOS

En este estudio realizado con varias pruebas para comprobar la capacidad de salto vertical
de un grupo de deportistas en distintos ambientes y por tanto sometidos a condiciones
distintas, se indican variaciones en los resultados; en las tres pruebas realizadas el rendi-
miento es inferior cuando éstas son llevadas a cabo en un ambiente extraño al deportista.
Los resultados medios de las dos series de evaluaciones realizadas, tanto en campo
como el laboratorio se presentan en tabla 2 y figura 1.

SJ ( Squat Jump)
Los resultados de nuestro estudio
ponen de manifiesto que el SJ al-
canzó valores diferentes según fue-
se realizado en nuestro laboratorio
o en el ambiente habitual donde los
atletas realizan su entrenamiento.
Así en nuestro laboratorio la media
fue (35,8 cm + un error típico
1,19cm) mientras que para las
pruebas de campo los valores fue-
ron (37,88 + 0,96). Realizado el
estudio estadístico se comprobó
que existen diferencias significati-
vas (p=0,0015). El estudio porcen-
5 DICIEMBRE / 2004

M
MEED
tual indica que el ambiente en que

D II C
se realiza la prueba modifica la
magnitud del salto de forma que

C II N
cuando ésta es realizada en am-
biente de normalidad con el que el
deportista esta familiarizado, los va-

NA
lores son un 5.5 %superiores a
cuando la prueba es realizada en

A
un ambiente extraño al deportista.
CMJ.- (Counter Movement Jump)

D
En relación al CMJ hemos compro-

DE
bado cómo, al igual que en el caso

EL
anterior, el ambiente influye
significativamente sobre los resul-

L
tados de la prueba (p=0,001); así
en nuestro laboratorio la media fue

E
EJ
42,53 + 1,73 mientras que al ser
realizada en un ambiente al cual el atleta está habituado dicha media se elevó a 44,98 +

JE
1,94cm lo cual representa un incremento del 5,7 %.

ER
CMJas .- (Counter Movement Jump with arm swing)
Con respecto al test CMJas se comprobaron diferencias significativas (p=0,001) entre los

RC
dos grupos de forma que las medias fueron de 50,90cm + 2,32 en nuestro laboratorio y

C II C
52,95 + 2, 30cm en el polideportivo en el que los deportistas realizan su entrenamiento
habitual. En este caso el incremento fue del 4,02%.

C II O
DISCUSIÓN

O
En esta discusión, los valores y datos de este estudio se muestran en letra negrita para
evitar innecesarias repeticiones.
Los resultados de los tests realizados en el laboratorio coinciden, prácticamente, con los
publicados por Bosco (1994) (15), quien obtuvo éstos al evaluar la selección finlandesa de
baloncesto mediante los test de SJ y CMJ. Sus datos prácticamente coinciden con los
obtenidos en este trabajo, a saber, 34 cm. y 35,88 cm. para el SJ y 42 cm. y 42,53 cm. para
el CMJ, respectivamente.
Así mismo, nuestros valores para el CMJ son similares a los que Mouche (2001) (16) obtuvo
cuando estudió a baloncestistas de la liga A de Argentina (42,53 cm. vs. 41,20 cm.). Sin
embargo, el valor del SJ es menor (31,90 cm) en los deportistas argentinos (16). Este
último hecho puede encontrar explicación en varias hipótesis siendo la más plausible que
es casi inevitable que no se realice un pequeño contramovimiento previo al efectuar un SJ
(17). Sin embargo, al comparar resultados del CMJas, movimiento más especifico de ba-
loncesto, las diferencias son favorables al equipo de más nivel, en este caso el argentino
(42.5 vs. 55). Hay que mencionar que los resultados de otros investigadores citados o están
diferenciados en test de campo o de laboratorio. La razón para ello es que simplemente
queríamos expresar que en general nuestros resultados son semejantes a los de los
otros; además, el propósito de nuestro estudio no es comparar resultados nuestros con
respecto a los publicados por otros sino simplemente poder investigar la diferencia de
resultados producida por el cambio de ambiente.

Es interesante destacar también que el CMJas, tanto en laboratorio como en campo, produ-
jo unos resultados que superaban en un 20% a aquellos obtenidos por el CMJ, aumento
que difiere del 10% reflejado por Tous (1999) (18).
Hay que destacar que se obtuvieron unos valores más altos en los 3 tipos de salto cuando
se realizaron en la cancha (Tabla 2), siendo la diferencia para el SJ de un 5,5%, 5,7 para el
CMJ y 4% para el CMJas. Tales diferencias son significativas en los tres tests (p<0.0015).
Es difícil encontrar una explicación o justificación unívoca que resuelva esta diferencia
estadística significativa porque los atletas son los mismos, el entrenador ha estado pre-
sente, el material es el mismo, las personas responsables de la realización del test son las
mismas, etc. Todos los elementos y factores que han intervenido en la realización de los
sucesivos tests han sido los mismos, excepto el lugar de realización. Está claro que podría
afirmarse, a partir de los datos de este trabajo, que la adaptación del deportista a un ambiente
extraño (laboratorio) puede provocar un descenso cuantitativo/cualitativo de los resultados.
Por tanto, no es ilógico considerar que estas diferencias se deban al entorno, en su más
DICIEMBRE / 2004 6
M
MEED
amplio sentido (laboratorio versus cancha de baloncesto). Dentro de esta posibilidad, que
D II C

deberá explorarse, han de tenerse en cuenta circunstancias como el suelo diferente, altura
del techo, distinta temperatura (en este trabajo fue de 2º C), etc. Desafortunadamente, la
C II N

prospección bibliográfica no ha aclarado nada con respecto a diferencias producidas por la


realización de evaluación de los atletas en distintos ambientes. Sin embargo, un estudio de
Ferry et al (1998) (19) en el que se evalúan distintos estados psicológicos mediante tests
NA

en un equipo de rugby antes de jugar partidos en casa y partidos fuera de casa pone de
manifiesto diferencias significativas a causa del local del partido para diversos parámetros
A

como auto confianza, fatiga, ansiedad cognitiva y somática, etc. Aunque los autores no
hablan de la productividad de los atletas, no es ilógico pensar que dichos cambios psicoló-
D

gicos puedan afectar la capacidad de rendimiento; y por tanto tampoco es ilógico pensar
DE

que nuestra muestra se vea alterada de manera similar.


EL

Se concluye que, como consecuencia de este estudio, que existen diferencias significativas
L

entre los resultados de los test de salto en laboratorio y en cancha, a favor de esta última.
Además, en futuras investigaciones es conveniente cuidar meticulosamente la realización
E
EJ

de las pruebas en campo, con unos métodos de evaluación estrictos, ya que se optimizarán
los resultados y reflejarán mejor las características a investigar en los atletas. El estudio
JE

deja abiertas muchas posibilidades para futuras investigaciones, sin olvidar un aspecto
ER

interesante como es el factor psicológico, que podría ser responsable de las diferencias
observadas en campo y en laboratorio.
RC

BIBLIOGRAFÍA
C II C

1. GROSSER M, STARISCHKA A. Técnicas de entrenamiento. Barcelona: Martínez Roca, 1988.


2. STUFFLEEBEAM, DL. El papel de la evaluación en la mejora escolar. El gran cuadro. En Dirección
C II O

participativa y evaluación de centros. II Congreso Internacional sobre Dirección de Centros Docentes.


(pp. 37-69). Bilbao: ICE-Universidad de Deusto, 1996.
O

3. RIBERA, JY. La evaluación en el proceso del entrenamiento deportivo http://


www.efdeportes.com/ Buenos Aires: Revista Digital - 2001;6 (30).
4. FLECK SJ, CASE M, PUHL J, VAN-HANDLE P. Physical and physiological characteristics of
elite woman volleyball players. Can J Ap Sport Sci 1985;10:122-126
5. HATZE, H. Validity and reliability of methods for testing vertical jumping performance. J Appl
Biomech 1998;14(2):127-140.
6. SILLAMPÄÄ J, SIEVÄNEN K, HEINOMEN A, MÄNTTÄRI A, VIITASALO J. Reproducibility of a
novel measurement and analytic method for jumping testing. In: Häkkinen K, Keskinen KL, Komi PV, Mero
A (eds). A Book of abstract, XVth Congress of the Internacional Society of Biomechanics. Jyväskyla,
Finland: Gummerus Printing, 1995: 850-851.
7. BOSCO C, LUHTANEN P, KOMI PV. A simple method for measurement of mechanical power
jumping. Eur J Appl Physiol 1983;50:273-82.
8. GARCÍA-FOGEDA, HA. Variación de las características mecánicas del salto de detente vertical
en función de referencias externas. Tesis Doctoral. Universidad de Barcelona, 2001.
9. MACDOUGALL JD, WENGER HA, GREEN HJ. Evaluación Fisiológica del Deportista. Barcelona:
Paidotribo, 1995.
10. VIITASALO JT, LUHTANEN P, MONOME HV, NORVAPALOV K, PAAVOLAINENE L, SALONEN.
Photocell contactmat: a new instrument to measure contact and fly times in running. J Appl Biomech
1997; 13(2): 254-66.
11. OÑA A, MARTINEZ M, MORENO F, RUIZ LM. Control y aprendizaje motor. Madrid: Síntesis,
1999.
12. SIRI WE. Body composition from fluid spaces and density: analysis of methods. En: Brozek J,
Henschel A, Eds. Techniques for measure of body composition. Washington: Acad Sci Res Council;
1961; 223-44
13. DURNIN JVGA, WOMERSLEY J. Body fat assessed from total body density and its estimation
from skinfold thickness: measurements on 481 men and women aged from 16 to 72 years. Br J Nutr.
1974; 32: 77-97.
14. BOSCO, C. La Forza musculare. Aspectti fisiologici ed aplicazione pratiche. Roma: Societá
Stampa Sportiva, 1997.
15. BOSCO, C. La valoración de la fuerza con el test de Bosco. Barcelona: Paidotribo, 1994.
16. MOUCHE, M. Evaluación de la potencia anaeróbica con ErgoJump. Presentado en el CIB’2001
I Congreso Ibérico de Baloncesto, Cáceres, 2001.
17. BOBBERT MF, GERRITSEN KGM, LITJENS MCA, VAN-SOEST AJ. Why is countermovement
jump height greater than squat jump height? Med Sci Sport Exerc 1999;28(11):1402-12.
18. TOUS, JF. Nuevas tendencias en fuerza y musculación. Barcelona: Ergo, 1999.
19. FERRY PC, WALROND N, CARRON AV. The influence of game location on athletes psychological
state. J Sci Med Sport 1998;1(1): 29-37

You might also like