IDEAS PARA ENFRENTARTE

AL COMENTARIO DE TEXTO

PRIMERO, LÉELO BIEN:

Cuando escuchamos una canción (en vez de oírla simplemente), la
disfrutamos de otra manera. Lo mismo ocurre con los textos, hay que
leerlos… bien leídos.
Y lo primero que hay que hacer para comentar un texto, lógicamente, es
leerlo bien. La primera vez, lo leerás atentamente, buscando las palabras
que no entiendas en el diccionario (siento que no lo tengáis en el examen)
y por supuesto, entero. Si no se ha entendido bien, lo intentas de nuevo,
para que quede más clara la idea general.
Después lo leerás con más detenimiento aún, fijándote en cómo las ideas
que el autor ha ido plasmando se organizan a lo largo del texto, mientras
intentas buscar (o al menos intuir) el “jugo literario” que el autor ha ido
dejando a lo largo de las frases.
DESPUÉS, ORGANIZA TU ANÁLISIS:
Antes de “meter mano” a las cuestiones concretamente literarias, es útil
elaborar un esquema que recoja la organización del texto, señalando
cómo está distribuido el contenido del mismo, es decir, las ideas. Este
esquema, que supone el “esqueleto” del texto, será tu hoja de trabajo y en
ella establecerás las diferentes partes del texto, numeradas y cada una con
su título: el de la idea principal recogida en cada parte (generalmente en
cada párrafo)
COMIENZA A “BUCEAR”:
Establecidas en el esquema las partes del texto, con su idea principal
destacada en el título, comenzarás el verdadero análisis del texto.
En cada párrafo, “bucearás“ en las frases buscando elementos para
comentar, teniendo en cuenta siempre dos aspectos: el contenido (las
ideas expresadas) y la forma (las palabras utilizadas) Todo lo que te parezca
destacable lo irás recogiendo en tu esquema, apuntando primero lo
referente al contenido y después los recursos lingüísticos que hayas
encontrado. Si encuentras relación entre el contenido y la forma utilizada,
debes destacarlo.
Se trata de “diseccionar” el texto y para ello es muy útil remarcar los
elementos que creas convenientes (si os vais a quedar la hoja del texto en
el examen podéis hacerlo ahí y si no, se hace en una hoja aparte) Ya has
visto cómo lo hemos hecho en clase. Se puede, por ejemplo, señalar las
palabras principales, redondear las citas, encuadrar los recursos lingüísticos,
hacer flechas que relacionen, o cualquier cosa que te parezca conveniente y
te venga bien.
ES UN TEXTO Y NO LA SUMA DE SUS PARTES:
Llegado a este punto, tendrás bastantes elementos para comentar, pero
estructurados por partes. Un texto es una totalidad comunicativa así
que debes intentar buscar los elementos que hacen posible esa cohesión
entre las partes. También has visto cómo lo estamos haciendo en clase:
buscando marcadores discursivos, léxico reiterativo, estructuras sintácticas
que se repiten, etc.
NO DEJES NADA EN EL TINTERO:
Cada texto es diferente y en cada uno podrás encontrar aspectos muy
diversos (aunque existan claves determinadas como las que vamos a ir
viendo en clase). Además, un mismo texto es único para cada persona.
Cada lector recibe el texto a su manera, desde su perspectiva y por lo tanto,
no debes olvidar comentar tu texto, sin pasar por alto cualquier elemento
o aspecto que consideres digno de mención.
POR ÚLTIMO (O CASI), HAZ EL ESQUEMA DE TU PROPIA OBRA:
El lector del texto que tú elabores (en el caso que nos ocupa, el profesor
que os corrija) desea descubrir lo que tú has sabido ver en el texto a
analizar, así que tu redacción debe ser clara y coherente. Debes explicar
todos esos elementos que has ido descubriendo en el texto de una manera
ordenada y para ello elaborarás un pequeño esquema que guíe tu
redacción.
Comienza recogiendo brevemente en una introducción todos los aspectos
que te sirvan para contextualizar el texto, (puedes decir algo sobre el autor,
si lo conoces; si sabes la procedencia del texto, lo señalas; lo encuadras en
el género textual que le corresponde...)
Después, para el desarrollo central de tu comentario (el análisis del texto),
puedes basarte en el esquema que ya tienes diseñado.
Por último, no olvides plasmar en el esquema las bases de tu conclusión, en
la que recogerás tu opinión personal sobre el texto, además de valoraciones
críticas sobre las ideas que en él se recogen y sobre los recursos lingüísticos
que el autor utiliza.
Y AHORA, SÍ, POR FIN, ESCRIBE:
Has hecho casi todo el trabajo, pero lo escrito hasta ahora solamente
vas a leerlo tú. Puede parecerte que con este trabajo agotarás el tiempo
del examen, pero aunque leyéndolo te parezca demasiado laborioso, no lo
es tanto, créeme. Todos iréis “cogiendo maña” a lo largo del curso y
adquiriréis la práctica necesaria como para hacer un esquema útil, breve y
conciso, de forma rápida. De todas formas, sí es algo que debes tener en
cuenta (los minutos invertidos en esa primera parte), pues es importante
que dejes tiempo suficiente para la correcta redacción. No olvides ser
claro al expresarte (intenta hacer frases bien construidas, usar la
puntuación correctamente y huir de las oraciones largas, pero no por ello las
hagas “simplonas”). Organiza tu redacción a través de diferentes párrafos y
cuida la relación entre ellos (sigue un orden lógico y utiliza marcadores
discursivos para relacionarlos)
En este momento tú eres el autor que va a ser analizado y debes
dejar claro a tus lectores qué es lo que has extraído del texto, qué ha
supuesto para ti al leerlo y hacerlo tuyo y sobre todo, transmitirle que lo has
leído y has sabido hacerlo bien.
Curso preparatorio acceso Ciclo Grado Superior. Prof:
Inés Andrés