You are on page 1of 11

Mateo concluye el gran discurso de Jesús en una montaña de Galilea con dos breves parábolas fáciles de recordar por

todos.

El mensaje es importante: Seguir a Jesús consiste en «escuchar sus palabras» y «ponerlas en práctica».

Se presenta la imagen del cimiento de las casas. Sobre la roca de Jesús se edifica bien.

No se puede construir nada firme y duradero sin cimientos profundos, sobre arena, nada es duradero

Es una llamada a la autenticidad y a la coherencia entre el orar y el obrar.

Entre el decir y el hacer

No basta conocer la Palabra, o predicarla. Lo fundamental es hacerla vida. En la Iglesia se ha buscado demasiado la ortodoxia en detrimento de las obras .

Hoy está en crisis la autoridad. Es difícil que la fe brote de la obediencia a una autoridad religiosa. La palabra que pronuncie la Iglesia ha de ser desde el testimonio y la credibilidad por las obras.

¿Desde dónde estoy construyendo mi persona, mi vida? ¿ Dónde me fundamento para dar sentido a mi vida?

Hemos de creer mucho más en la fuerza transformadora del Evangelio. Es posible construir desde la fe en Cristo y unirnos a su Reino.

Señor, poner por obra tus palabras, hablar con el lenguaje de los hechos, olvidarse de máscaras y apariencias. Señor, quiero ser coherente, vivir en profundidad la vida. Señor, reconocer lo que es tierra firme, construir sobre tu roca, y no tener miedo a huracanes y riadas.

You might also like