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Infante 85, Santiago, Chile • Fono: 236 0470 • Fax: 235 9091
MARZO
2009 66 • www.sitiosur.cl
Este artículo es una contribución al proyecto Development models and logic of socio-economic organization in
space (demologos) / Los modelos de desarrollo y la lógica de la organización socioeconómica en el espacio,
financiado por el Sexto Programa Marco de la Comunidad Europea (CIT2-CT-2004-505462). Agradecemos a
nuestros colaboradores en el proyecto, especialmente a Andreas Novy y Bob Jessop, por sus aportes, aunque la
responsabilidad por los contenidos aquí desarrollados es nuestra.
Resumen
En este artículo analizamos las conexiones entre los procesos de neoliberalización y las transformaciones urba-
nas. Las ciudades han devenido centros estratégicos para el desigual avance de proyectos de reestructuración
neoliberal, con su secuela de crisis. No obstante, en contraste con la ideología neoliberal, nuestro análisis pone
de relieve las interacciones dependientes de la trayectoria entre los proyectos neoliberales de reestructuración,
por un lado, y los escenarios institucionales y espaciales heredados, por otro. En consecuencia, subrayamos el
carácter geográficamente variable, aunque multiescalar e interconectado translocalmente, del urbanismo neoliberal.
También sugerimos que es en las ciudades donde tiene lugar el reiterado fracaso de las políticas neoliberales,
y la resistencia a los programas de reestructuración urbana emanados de ellas. Por estas razones, las regiones
Palabras clave
Neoliberalización, ideología neoliberal, ciudades, urbanismo, neoliberalismo realmente existente, políticas estatales
fracasadas.
Traducido para Temas Sociales por Paulina Matta, con permiso de los autores, a quienes SUR agradece.
Las reglas del mercado todo el mundo —un realineamiento desigual, pero
La ideología neoliberal se sustenta en la creencia concertado—, el neoliberalismo se había convertido
Base de la
de que los mercados abiertos, competitivos y ‘no en la forma dominante de globalización capitalista,
ideología
neoliberal. regulados’, que no se encuentran sometidos a in- tanto política como ideológicamente.
jerencias estatales ni a las acciones de colectivos Aunque a menudo se equipara el neoliberalismo Naturaleza política
sociales, representan el mecanismo óptimo para el con las presiones e imperativos ‘globales’, de hecho y multiescalar del
su naturaleza es esencialmente política. Esto se neoliberalismo.
desarrollo socioeconómico.
El neoliberalismo adquirió relevancia por pri- hace evidente en sus fuertes vinculaciones con los
mera vez a fines de la década de los setenta, al diversos proyectos y transformaciones de alcance
surgir como una respuesta política estratégica a nacional que han tenido lugar durante los últimos
dos fenómenos: la decreciente rentabilidad de treinta años. Sin embargo, más allá de ese carácter
las industrias de producción masiva y la crisis del nacional, el neoliberalismo es muy claramente un
Estado de Bienestar keynesiano. Para los Estados fenómeno multiescalar, y ello al menos en dos senti-
nacionales y locales del mundo industrializado dos: uno, reconstituye relaciones a distintas escalas
más antiguo, estos dos procesos significaron el —regionales, nacionales, internacionales— entre
desplome de los regímenes de acumulación y de actores institucionales y económicos, como los
los sistemas de gobernanza vigentes. La reacción Estados locales y el capital ‘financializado’; y dos,
del mundo industrializado, aunque vacilante al sustituye las lógicas regulatorias redistributivas por
comienzo, fue comenzar a desmontar los compo- lógicas competitivas, al mismo tiempo que transfie-
nentes institucionales básicos de los acuerdos de re los riesgos y responsabilidades a las agencias,
posguerra, para poner en marcha un conjunto de actores y jurisdicciones locales.
políticas orientadas a fortalecer la disciplina del En este artículo destacamos tan solo un aspecto Foco del artículo:
mercado y la competencia. Al mismo tiempo, en de lo anterior: las conexiones entre neoliberali- conexión entre
zación y transformaciones urbanas. Exploramos neoliberalización y
todos los sectores de la sociedad se transformaba transformaciones
los bienes y servicios en commodities, esto es, en teóricamente las complejas interfaces institucio-
urbanas.
mercaderías transables. nales, geográficas y sociales entre neoliberalismo
Proyectos de En este contexto, las doctrinas neoliberales se y reestructuración urbana. Comenzamos presen-
reestructuración tando los fundamentos metodológicos de nuestro
neoliberal.
utilizaron para justificar diversos proyectos; entre
ellos: análisis, que pueden resumirse en el concepto de
• la desregulación del control del Estado sobre ‘neoliberalismo realmente existente’. A diferencia
la industria; de la ideología neoliberal misma, uno de cuyos
• las ofensivas en contra del trabajo organi- supuestos es que las fuerzas del mercado operan
zado; de acuerdo con leyes inmutables, independiente-
• la reducción de impuestos corporativos; mente del lugar donde se les dé rienda suelta, el
• la contracción y/o privatización de los recur- concepto de ‘neoliberalismo realmente existente’
sos y servicios públicos; destaca la inserción contextual de los proyectos de
• el desmantelamiento de los programas de reestructuración neoliberal, y su dependencia de
bienestar social; la trayectoria.∗ En particular, este concepto ofrece
• la ampliación de la movilidad del capital una base analítica a partir de la cual explorar la pro-
internacional; ducción de tales proyectos al interior de contextos
• y la intensificación de la competencia entre nacionales, regionales y locales específicos, cuya
localidades. especificidad está determinada por el legado de
El Chile de Pinochet representó el primer ejem- marcos institucionales, políticas estatales, prácti-
plo de un ‘tratamiento de choque’ neoliberal, con la ∗
Existe “dependencia de la trayectoria” (calco semántico del inglés
incorporación de tendencias como el thatcherismo path-dependence) cuando el resultado de un proceso depende
y el reaganismo entre sus proyectos de vanguardia de la secuencia completa de decisiones tomadas por los actores
más característicos. No obstante, en países tradi- a través del tiempo, y no solo de las condiciones del momento.
cionalmente socialdemócratas o socialcristianos, Ejemplo son las decisiones del Estado —usualmente a cargo de
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lización de los regímenes de políticas estatales no respecta, explota y a la vez produce diferencias
se requiere la sustentabilidad en el largo plazo de socioespaciales. El desarrollo desigual no es
señal de una cierta etapa transitoria o interrup-
∗
En su artículo “La esencia del neoliberalismo”, Pierre Bourdieu ción en la senda de la neoliberalización ‘total’;
dice: “En efecto, el discurso neoliberal no es simplemente un
más bien, representa una faceta co-evolutiva
discurso más. Es más bien un ‘discurso fuerte’ —tal como el
discurso psiquiátrico lo es en un manicomio, en el análisis de y co-dependiente del proceso mismo de neo-
Erwing Goffman [Asilos. Estudios sobre la condición social de liberalización.
los enfermos mentales. París: Ediciones Minuit, 1968]—. Es tan Un análisis del neoliberalismo realmente exis- Para comprender
fuerte y difícil de combatir solo porque tiene de su lado todas las tente, entonces, debe comenzar por explorar aque- el neoliberalismo
fuerzas de un mundo de relaciones de fuerza, un mundo que realmente existente.
llos escenarios donde la regulación capitalista se
contribuye a hacer como es. Esto lo hace muy notoriamente
al orientar las opciones económicas de aquellos que dominan ha consolidado: escenarios derivados del periodo
las relaciones económicas” (http://www.analitica.com/bitblio/ fordista-keynesiano de desarrollo capitalista, en
bourdieu/neoliberalismo.asp, visitado 20/01/2009). [N. de T.] el marco del cual se activaron por primera vez los
programas neoliberales tras la crisis geoeconómica se los introduce en contextos político-institucionales
de comienzos de los setenta. Desde esta perspec- que han sido moldeados significativamente por un
tiva, los impactos de las estrategias neoliberales no legado de disposiciones regulatorias, prácticas
se pueden comprender adecuadamente mediante institucionalizadas y arreglos políticos transmitidos
un análisis abstracto y descontextualizado de los a través del tiempo (véase Peck 2004). En este
méritos relativos de las iniciativas reformadoras sentido, existe una gran probabilidad de que la
basadas en el mercado, o de los supuestos límites evolución de toda configuración político-institu-
de ciertas formas específicas de políticas estatales. cional tras la imposición de reformas neoliberales
Más bien, para una cabal comprensión del neolibe- en materia de políticas estatales, muestre fuertes
ralismo realmente existente se requiere explorar: propiedades de dependencia de la trayectoria, en
• en primer lugar, los escenarios regulatorios que la institucionalidad vigente configura de manera
y acuerdos políticos históricamente específi- significativa el alcance y trayectoria de la reforma.
cos prevalecientes en territorios (nacionales) En este contexto, las instituciones pre-neoliberales
particulares durante el periodo fordista- o no-neoliberales que perduran en un proceso de
keynesiano de desarrollo capitalista; reestructuración neoliberal no deben ser vistas
• segundo, los patrones de formación de crisis como simples residuos institucionales anacrónicos,
históricamente específicos, el desarrollo pues al interpenetrarse con formas neoliberales
desigual y las protestas sociopolíticas que de reestructuración configurarán trayectorias y
emergieron al interior de esos territorios resultados en modalidades que son específicas, ge-
tras la crisis sistémica del modelo fordista- neradoras y contradictorias. De ello se desprende
keynesiano de desarrollo a comienzos de la posibilidad de que cada forma híbrida de neoli-
los setenta; beralización —cada formación neoliberal realmente
• tercero, la subsiguiente interacción entre ini- existente— esté asociada a sus peculiares propie-
ciativas neoliberales orientadas al mercado dades emergentes. Así, las distintas variedades
y ciertos marcos regulatorios, patrones de de neoliberalismo son más que contingentemente
desarrollo territorial y alianzas sociopolíti- variables; representan formaciones coyunturales
cas que han sido heredados a través del inconfundibles, aunque interconectadas. Esto exi-
tiempo; ge llevar a cabo análisis situados de formaciones
• y cuarto, la concomitante evolución de las híbridas específicas en conexión, no evaluaciones
agendas neoliberales relativas a políticas es- espurias de los grados de divergencia respecto de
tatales y sus estrategias reestructuradoras, una ‘norma’ estadounidense putativa, o ingenuos
en su conflictiva interacción con condiciones ejercicios de catalogación de ‘tipos’ de neolibera-
político-económicas, disposiciones regulato- lismo (véase Peck y Theodore 2007).
rias y ‘geometrías de poder’ contextualmente A lo largo de las últimas tres décadas, las agen- Modificaciones y
específicas. das neoliberales dirigidas a la reestructuración de evolución del
Pasos en análisis neoliberalismo.
En lo que sigue, analizamos las espacialidades políticas estatales se han visto modificadas a través
de procesos de (y, por implicación directa, las temporalidades) de de su interacción con institucionalidades y configu-
neoliberalización.
procesos contemporáneos de neoliberalización. raciones de poder heredadas. El neoliberalismo
Seguimos para ello tres pasos estrechamente re- ha evolucionado considerablemente durante este
lacionados. Comenzamos destacando el carácter tiempo, desde un doctrina económica relativamente
‘dependiente de la trayectoria’ de las iniciativas de abstracta (su forma inicial en los años setenta) y un
reforma neoliberales. Luego centramos la atención medio para desmantelar los acuerdos de bienestar
en los ‘momentos’ destructivos y creativos del pro- keynesianos (forma prevaleciente en los ochenta),
ceso de neoliberalización. Por último, concluimos a ser, más recientemente, una forma reconstituida
examinando las formas en que las ciudades han de regulación dirigida por el mercado, orientada no
devenido arenas estratégicamente esenciales para solo a estimular el crecimiento económico ‘finan-
el desarrollo de modalidades neoliberales aplica- cializado’, sino también a manejar algunas de las
das a la experimentación de políticas estatales y profundas contradicciones sociopolíticas inducidas
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reestructuraciones institucionales. por formas anteriores de intervención neoliberal en
las políticas estatales.
Neoliberalización dependiente de la trayectoria En el contexto actual, el punto clave es que
estos cambios político-ideológicos han surgido,
Reestructuracio- La noción de neoliberalismo realmente existente en una medida importante, a lo largo de una
nes neoliberales tiene por objetivo iluminar las formas complejas —y
condicionadas por evolución fuertemente dependiente de la trayec-
siempre sujetas a disputa— en que las estrategias toria: las políticas neoliberales se propusieron
institucionalidad
preexistente en neoliberales de reestructuración interactúan con inicialmente como una respuesta estratégica a la
cada contexto. usos del espacio, configuraciones institucionales y crisis de un marco político-económico anterior (el
constelaciones de poder sociopolítico preexisten- capitalismo fordista-keynesiano), pero luego fueron
tes. Tal como lo hemos recalcado, los programas modificadas cualitativamente para hacer frente a
neoliberales de reestructuración capitalista nunca diversos fracasos gubernamentales, tendencias
son impuestos en una forma ‘pura’, porque siempre a las crisis y contradicciones. Algunos de estos
mal-funcionamientos eran endógenos al neolibera- En este sentido, la neoliberalización no puede
lismo en cuanto proyecto político-regulatorio en sí ser considerada como un ‘sucesor’ coherente del
mismo; otros, en cambio, fueron consecuencia de Estado de Bienestar keynesiano en los países for-
dilemas regulatorios contextualmente específicos distas atlánticos (o como sucesor de los Estados
surgidos frente a formaciones híbridas particulares. desarrollistas en el sur globalizado). Ello porque,
La transición desde los neoliberalismos ortodoxos, en la práctica, los programas de reestructuración
radicalmente antiestatistas, de Reagan y Thatcher neoliberal se ven abocados de manera importante,
en los ochenta, a los neoliberalismos más mode- primero, a desmontar las institucionalidades here-
rados y tolerables socialmente de Blair, Clinton y dadas, tarea de largo aliento y siempre incompleta;
Schröder en los noventa, puede explicarse como y segundo, al desafío de manejar las consecuen-
un ajuste y reconstitución de las estrategias neoli- cias económicas asociadas a los programas de
berales, ambos dependientes de la trayectoria, en neoliberalización y sus derivados sociales. En
respuesta a disfunciones y trastornos endógenos. contraste con los discursos primigenios relativos a
Incluso si, en un sentido abstracto, las líneas ge- la competencia y la libertad, que sirven de marco
nerales de los proyectos neoliberales muestran a las estrategias liberales y las legitiman, estas
una serie de rasgos distintivos (o definitorios) formas de reacción institucional no solo son más
—tales como tendencia al capital financializado prosaicas, sino que necesariamente entrecruzan
orientado a la exportación, preferencia por modos todas y cada una de las estrategias de reestructura-
de regulación no burocráticos, rechazo a la redis- ción neoliberal con un pertinaz conjunto de legados
tribución socio-espacial, inclinación estructural institucionales y condiciones co-evolutivas.
hacia sistemas de gobernanza tipo mercado o mo- Con esto no queremos tan solo apuntar a Desmantelamiento
nopolios privados—, los actuales neoliberalismos que las estrategias neoliberales replican políticas de institucionalidad
realmente existentes son marcadamente diferente estatales ‘nacionales’ y son dependientes de la existente como
parte integral del
de, digamos, sus predecesores de comienzos de trayectoria de maneras meramente contingentes; neoliberalismo.
los ochenta. Concomitantemente, puede esperarse nuestro propósito es plantear una idea más radical:
que los intereses, emplazamientos, estructuras y que las estrategias neoliberales están conformadas
materias de la neoliberalización contemporánea profunda e indeleblemente por diversos actos de
sean significativamente diferentes en, por ejem- disolución institucional; que esa cara del neolibe-
plo, Berlín, Johannesburgo y Chicago. Cada una ralismo que se manifiesta en el desmantelamiento
de estas neoliberalizaciones ‘locales’ echó raíces de institucionalidades que le son extrañas, más
en distintos momentos críticos de sus respectivas que una simple fase de ‘limpieza’, es parte integral
institucionalidades vigentes y como reacción a de sus orígenes, dinámicas y lógicas. Todos los
esas crisis, y cada una de ellas implica trayectorias neoliberalismos realmente existentes acarrean la
coyunturales únicas. fuerte impronta de antiguas luchas regulatorias,
que recurrentemente configuran las capacidades
El neoliberalismo creativamente destructivo y orientaciones políticas y las trayectorias futuras
Análisis de dos A fin de captar las interacciones dependientes de de las reestructuraciones neoliberales. Y ninguna
momentos: la trayectoria que se dan entre las formas institu- trayectoria o ‘modelo’ único debiera ser considerado
• destrucción de cionales existentes y los proyectos neoliberales paradigmático (esto es, uno a partir del cual pueden
institucionalidad medirse ‘desviaciones’), dado que los neolibera-
vigente;
emergentes, proponemos analizar el neoliberalismo
realmente existente en referencia a dos ‘momentos’ lismos realmente existentes son coyunturalmente
• creación de nueva
infraestructura. dialécticamente entrelazados, pero analíticamente específicos. Conceptualmente, esto habla de la
diferenciables: primero, la destrucción (parcial) de naturaleza de la neoliberalización como un proceso
disposiciones institucionales y acuerdos políticos abierto, más que una fase; políticamente, subraya
vigentes, mediante iniciativas reformadoras orienta- su carácter de conjunto de estrategias de rees-
das al mercado; y segundo, la creación (tendencial) tructuración que se intersectan, más que ‘sistema’
de una nueva infraestructura para un crecimiento estable y autónomo.
económico orientado al mercado, la mercantiliza- Antes de seguir, debemos añadir dos importan-
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ción de bienes y servicios (su transformación en tes advertencias para aclarar esta conceptualiza-
commodities), y una normatividad centrada en el ción del neoliberalismo realmente existente como
capital. un proceso de destrucción institucional creativa.
Los programas concretos de reestructuración Primero, el énfasis que colocamos en las capa-
neoliberal tienden a combinar dos tendencias: cidades tendencialmente ‘creativas’ del neolibera-
• el desmantelamiento de formas institucio- lismo está en desacuerdo con estudios anteriores,
nales que les son ‘ajenas’, a través de la que subrayaban su carácter preponderantemente
destrucción de sistemas colectivistas y pro- destructivo; no obstante, sostenemos que esta
gresivamente retribucionistas y de la desre- conceptualización dialéctica, a dos frentes, puede
gulación contradictoria de las economías; y ayudar a iluminar las complejas y a menudo extre-
• el lanzamiento de nuevas modalidades de madamente contradictorias trayectorias del cambio
regulación institucional y nuevas formas de institucional generado mediante el despliegue
gestión estatal (Peck y Tickell 2002). de programas políticos neoliberales en diversas
escalas espaciales. El punto, sin embargo, no es Claramente, a partir de las crisis geoeconó- Ciudades como
sugerir que el neoliberalismo pudiera, de alguna micas de comienzos de los setenta, los procesos espacios
privilegiados para
manera, proveer una base para el crecimiento de destrucción creativa señalados antes se han
despliegue de
capitalista estable, reproducible. Más bien, se trata estado manifestando en una amplia gama de procesos
de explorar sus amplios impactos transformadores escalas geográficas y en una gran variedad de neoliberales.
sobre las infraestructuras político-institucionales y emplazamientos institucionales. Postulamos, sin
geográficas heredadas de los Estados y economías embargo, que —a lo largo de las tres últimas dé-
capitalistas desarrollados. Este último tema debe cadas— las ciudades se han convertido en ruedos
ser explorado aparte de la cuestión (regulacionista) estratégicamente decisivos donde se han estado
convencional relativa a si una forma institucional desplegando las formas neoliberales de destrucción
dada promueve o socava el crecimiento capitalista creativa. La ubicación central de las ciudades en
sustentable. Incluso cuando las reformas neolibera- los sistemas fordistas-keynesianos de producción
les aplicadas a políticas estatales son incapaces de y reproducción las definen como arena clave (si
impulsar olas de crecimiento capitalista de corto o no ‘blanco’) para las estrategias neoliberales de
mediano plazo, sí pueden imponer rupturas evolu- desmantelamiento, pero su significado estratégico
tivas mucho más duraderas al interior de las reglas como loci de innovación y crecimiento, y como
del juego institucionalizadas y de las desigualmente zonas de gobernanza delegada y experimentación
desarrolladas políticas estatales asociadas con la institucional local, igualmente las posicionan a la
regulación capitalista. vanguardia del avance neoliberal.
Interconexión de En segundo lugar, debemos reconocer que los Lo anterior no implica sostener que el ámbito
‘momentos’ ‘momentos’ destructivos y creativos del cambio urbano haya alcanzado una cierta primacía escalar
destructivos y
creativos.
institucional al interior del neoliberalismo realmente en estos tiempos pos-keynesianos, sino plantear
existente, en la práctica están íntima e inextricable- que las ciudades han llegado a ser nodos críticos,
mente interconectados. Nuestro uso del término y puntos de tensión, en las políticas escalares de
‘momentos’ para describir estas interconexiones la neoliberalización. Las infraestructuras urbanas
remite, entonces, al sentido hegeliano-marxista de son necesarias para la acumulación y regulación
elementos en conflicto pero mutuamente relaciona- neoliberal, incluso cuando en el proceso simultá-
dos al interior de un proceso dinámico, dialéctico, neamente se las socava y devalúa; se coloca a
más que a una descripción de ‘unidades’ temporales las ciudades en las fronteras de la formación de
distintas en una transición lineal. Nuevamente, las políticas neoliberales, al tiempo que son lugares
formas de los neoliberalismos realmente existentes de resistencia concertada a la neoliberalización
—y ciertamente algunos de los rasgos definitorios (Leitner et al. 2007). Tampoco esta resistencia
de la neoliberalización en tanto una abstracción puede ser ubicada simplistamente ‘después’ de la
real— son ‘reactivas’, en el sentido de que están neoliberalización, porque la dialéctica propia de las
configuradas tanto por sus antipatías y antítesis disputas ha moldeado cada faceta de la evolución
(por ejemplo, a la redistribución keynesiana o a las del neoliberalismo, desde las primeras luchas en
instituciones de solidaridad colectiva), como por sus torno a los desmantelamientos y ‘cortes’, hasta las
explícitas e intrínsecas metas de transformación más audaces formas de avance del neoliberalismo
del mercado, meta que es social, ecológica y, por tardío.
cierto, económicamente irrealizable. Aceptando que los procesos de destrucción crea-
tiva institucionales asociados con el neoliberalismo
Urbanización neoliberal realmente existente están operando claramente en
todas las escalas espaciales, postulamos que ocurren
La dinámica de destrucción creativa nunca ocurre
con particular intensidad en la escala urbana, en las
sobre una ‘tabla rasa’ en la cual el ‘viejo orden’ es
grandes ciudades y ciudades-regiones. Se suma a
eliminado repentinamente y el ‘nuevo orden’ se des-
ello que las ciudades se encuentran hoy insertas en
pliega como una totalidad completamente formada.
un entorno geoeconómico extremadamente incierto,
Más bien, ocurre a lo largo de un paisaje institu-
caracterizado por inestabilidad monetaria, movimien-
cional que se encuentra en disputa, donde ‘espa-
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tos especulativos del capital financiero, estrategias
cios proyectados’ emergentes nuevos interactúan
globales de localización de grandes compañías
continua y conflictivamente con las regulaciones
transnacionales y una cada vez mayor competencia
heredadas, lo que a su vez lleva a nuevas ‘capas’
entre localidades (Swyngedouw 1992). En el contexto
de espacio político-económico, no previstas y a
de este cada vez más profundo ‘desorden global-
menudo altamente inestables (Lipietz 1994). Estas
local’, la mayoría de los gobiernos locales se han
amalgamas donde se recombinan disposiciones
visto forzados, en cierto grado con independencia de
institucionales heredadas con otras emergentes,
sus orientaciones políticas y del contexto nacional,
también redefinen las arenas e intereses políticos
a ajustarse a crecientes niveles de incertidumbre
en los cuales y a través de los cuales se articularán
económica por la vía de participar en formas corto-
y desarrollarán las subsiguientes disputas en torno
placistas de competencia interespacial, marketing
a la regulación de la acumulación y las contradic-
territorial y desregulaciones, a fin de atraer inversiones
ciones que se le asocian.
y empleos (Leitner y Sheppard 1998; Peck y Tickell
1994). Entretanto, la reducción de los regímenes no solo puede estar poblada por ‘variedades’ na-
propios de los Estados de Bienestar y de los sis- cionales o ‘modelos’ del neoliberalismo, sino que
temas intergubernamentales también ha impuesto también puede incluir una serie de formaciones y
sobre las ciudades nuevas y pesadas restricciones coyunturas urbanas características.
fiscales y responsabilidades regulatorias, llevándolas Un segundo tema se refiere a la evolución y/o
forzosamente a la austeridad presupuestaria frente a reconstitución de ciertas formas neoliberales de Años 70-80:
ciudades como
la profunda deslocalización socioeconómica y nuevos políticas urbanas, desde el momento de su implan- centros de
desafíos competitivos. tación inicial en ciudades de América del Norte y deslocalizaciones
Por otra parte, en muchos casos los programas de Europa occidental a fines de los años setenta y económicas y
neoliberales también han sido directamente ‘inte- comienzos de los ochenta. Los espacios urbanos luchas
riorizados’ en las políticas urbanas, a medida que han desempeñado papeles estratégicamente signi- sociopolíticas.
algunas alianzas territoriales de formación reciente ficativos en las sucesivas olas de neoliberalización.
intentan robustecer las economías locales a través Durante el ascenso inicial del neoliberalismo, las
de un ‘tratamiento de shock’ de desregulación, ciudades se convirtieron en puntos álgidos de las
privatización, liberalización y mayor austeridad principales deslocalizaciones económicas y de di-
Metas de políticas fiscal. En este contexto, las ciudades (y sus zonas versas formas de lucha sociopolítica, en particular
urbanas suburbanas de influencia) se han convertido en en la esfera de la reproducción social. Las ciudades
neoliberales: blancos geográficos cada vez más importantes, y también estuvieron entre los principales campos de
• crecimiento también en laboratorios institucionales para diver- batalla de las luchas políticas en torno a la forma y
económico
orientado
sos experimentos de políticas neoliberales, como el trayectoria de la reestructuración económica duran-
al mercado; marketing territorial, la creación de zonas empresa- te la prolongada crisis del régimen de crecimiento
• consumo de riales, la reducción de impuestos locales, el impulso fordista-keynesiano. Como consecuencia, en mu-
las elites; a las asociatividades público-privadas y nuevas chas de las más antiguas ciudades industriales se
• control de formas de promoción local. Recurren para ello a adoptaron iniciativas económicas locales a fin de
poblaciones
excluidas. sistemas de prestaciones sociales condicionadas, promover ‘desde abajo’ un crecimiento renovado,
planes de desarrollo de las propiedades, nuevas mientras al mismo tiempo se buscaba defender los
estrategias de control social, acciones policiales y acuerdos sociopolíticos y arreglos redistributivos
de vigilancia, y una batería de otras modificaciones ya establecidos.
institucionales al interior del aparato estatal local. La No obstante, durante los años ochenta, cuando Años 80:
meta última de tales experimentos neoliberales de la faceta de desmantelamiento del neoliberalismo racionalización de
los gobiernos
políticas urbanas es movilizar espacios de la ciudad era el aspecto dominante, las formas imperantes de – disminución de
tanto para el crecimiento económico orientado al políticas urbanas cambiaron significativamente. En costos.
mercado, como para las prácticas de consumo de esta era de del ‘gobierno racionalizado’ (lean govern-
las elites, asegurando al mismo tiempo el orden ment), se forzó crecientemente a las municipalidades
y el control de las poblaciones ‘excluidas’. En la a introducir diversas medidas tendientes a rebajar
Tabla Uno se ilustra esquemáticamente algunos costos, incluyendo reducción de impuestos, conce-
de los muchos mecanismos político-institucionales siones de tierras, recortes en los servicios públicos,
utilizados para promover proyectos neoliberales la privatización de obras de infraestructura, entre
en ciudades de América del Norte y de Europa otros. La meta era disminuir los costos administrati-
occidental durante las dos últimas décadas, dis- vos y productivos de corto plazo en sus jurisdicciones
tinguiendo en forma sintética sus componentes y, de ese modo, lubricar y acelerar las inversiones
destructivos y momentos creativos. externas de capital. En este contexto, los Estados
Reestructuración Para los propósitos de este artículo, dos as- nacionales neoliberalizadores impusieron medidas
urbana pectos de los procesos de destrucción creativa de austeridad fiscal a los gobiernos locales, con lo
neoliberal.
señalados en la tabla merecen explicación. que se redujeron las formas fordistas-keynesianas
Primero, los diferentes caminos de la reestruc- tradicionales de consumo colectivo localizado. Con-
turación urbana neoliberal que han cristalizado a comitantemente, la mayor eficiencia administrativa,
lo largo del viejo mundo industrializado no solo paralela a subsidios estatales directos e indirectos
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reflejan la diversidad de proyectos políticos neo- a las grandes corporaciones, y una creciente pri-
liberales, sino también las interacciones contex- vatización de las funciones de reproducción social,
tualmente específicas de dichos proyectos con los pasaron a considerarse las ‘mejores prácticas’ para
marcos de regulación urbana político-económica promover un ‘buen clima de negocios’ en las grandes
heredados y co-evolucionantes. Un examen de los ciudades.
diversos caminos a través de los cuales las agen- Las contradicciones de esta forma de empresa-
das políticas neoliberales han sido impuestas a las rialismo urbano suma-cero, orientado a reducir cos-
ciudades y reproducidas en ellas es, por lo tanto, tos, hoy son claramente evidentes. Además de sus
un aspecto central en cualquier indagación amplia consecuencias extremadamente polarizadoras, se ha
en las geografías del neoliberalismo realmente visto que la efectividad de tales estrategias destinadas
existente. Esto plantea la clara posibilidad de que a promover el robustecimiento económico decae
la familia de híbridos del neoliberalismo que son aceleradamente al difundirse a lo largo del sistema
significativos tanto analítica como políticamente, urbano mundial (Leitner y Sheppard 1998).
Tabla Uno: Momentos destructivos y creativos de la urbanización neoliberal
Mecanismos de urbanización
Momento de ‘destrucción’ Momento de ‘creación’
neoliberal
Desmantelamiento de los anteriores sistemas de Devolución de tareas y responsabilidades a los municipios
Recalibración de las relaciones
apoyo de los gobiernos centrales a las actividades Creación de nuevas estructuras de incentivos para recompensar al empre-
intergubernamentales.
municipales. sariado local y catalizar el ‘crecimiento endógeno’.
Creación de nuevos distritos de recolección de ingresos y creciente dependen-
Reducción de las finanzas pú- Imposición de medidas de austeridad fiscal sobre
cia de fuentes locales de ingresos, pagos de los usuarios y otros instrumentos
blicas. los gobiernos municipales.
de finanzas privadas.
Expansión de sectores con base en la comunidad y privatización de la provisión
Reducción de los intermediarios locales en la pro-
de servicios sociales.
Reestructuración del Estado de visión de servicios de bienestar social nacionales;
Imposición de requerimientos obligatorios de trabajo a los beneficiarios de las
Bienestar. ofensiva contra los aparatos estatales locales
políticas de bienestar; nuevas formas (locales) de sistema de prestaciones
administradores de bienestar social.
sociales condicionadas.
Avance de nuevas formas de trabajo en red de los gobiernos locales basadas
Desmantelamiento de las formas burocratizadas y
Reconfiguración de la infraestruc- en asociaciones público-privadas, organizaciones no gubernamentales cuasi-
jerárquicas de la administración pública local.
tura institucional de los Estados autónomas y la ‘nueva administración pública’.
Ofensiva contra las intermediaciones tradicionales
locales. Incorporación de los intereses de las elites empresariales en las políticas
de la rendición de cuentas democrática local.
locales y el desarrollo local.
Eliminación de monopolios públicos para la provi-
Privatización del sector público Privatización y subcontratación de servicios municipales.
sión de servicios públicos municipales (empresas
local y de las infraestructuras Creación de nuevos mercados y redes interurbanas para la provisión de
de servicios públicos, sanidad, seguridad pública,
colectivas. servicios y mantenimiento de infraestructura.
transporte público, etc.).
Creación de nuevas oportunidades para la inversión especulativa en el
Aniquilamiento de la vivienda social y otras formas
mercado habitacional del centro de la ciudad.
de alojamiento de bajo precio.
Reestructuración de los mercados Soluciones de ‘emergencia’ transitorias para los sin techo.
Eliminación de los controles sobre alquileres y
de viviendas urbanas. Introducción de alquileres determinados por el mercado y la capacidad de los
subsidios a la construcción de proyectos habi-
arrendatarios, en nichos de bajos alquileres de los mercados habitacionales
tacionales.
urbanos.
Creación de nuevos ambientes regulatorios orientados a impulsar y apoyar
Desmantelamiento de los programas tradicio-
modalidades de trabajo precario.
Reprocesamiento de las regulacio- nales y financiados públicamente dirigidos a la
Implementación de programas de capacitación laboral orientados al recluta-
nes del mercado laboral. educación, capacitación y aprendizaje de jóvenes
miento de trabajadores en empleos de bajas remuneraciones.
trabajadores desplazados y desempleados.
Expansión de las economías informales.
Desmantelamiento de los modelos nacionales
Creación de zonas de libre comercio, zonas empresariales y otros espacios
autocéntricos de crecimiento capitalista.
‘desregularizados’ en las principales regiones urbanas.
Reducción paulatina de las políticas tradicionales
Creación de nuevas áreas de desarrollo, tecnopolos y otros ‘nuevos espacios
Reestructuración de las estrate- de compensación regional.
industriales’ a escalas subnacionales.
gias de desarrollo territorial. Creciente exposición de las economías locales y
Movilización de nuevas estrategias ‘glocales’ para recanalizar las capaci-
regionales a las fuerzas competitivas globales.
dades económicas e inversiones en infraestructura, hacia aglomeraciones
Fragmentación de los espacios económicos nacio-
‘conectadas globalmente’.
nales en sistemas regionales discretos.
Creación de espacios privatizados para el consumo de elites/corporativo.
Construcción de megaproyectos destinados a atraer inversiones corporativas
Eliminación de los espacios públicos urbanos y/o
y reconfigurar los patrones locales de uso del suelo.
intensificación de la vigilancia sobre ellos.
Transformaciones del ambiente Creación de comunidades enrejadas, enclaves urbanos y otros espacios de
Destrucción de los barrios de clase obrera para
construido y de las formas ur- reproducción social “purificados”.
abrir paso a una reurbanización especulativa.
banas. Corrimiento de las fronteras de gentrificación y la intensificación de la pola-
Repliegue de iniciativas de planificación orienta-
rización socioespacial.
das a la comunidad.
Adopción del principio “el mayor y mejor uso” como la base de importantes
decisiones de planificación de uso del suelo.
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Temas Sociales nº 66 marzo 2009 • 11
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Escuela de Líderes de Ciudad
La Escuela de Líderes de Ciudad en Talca es un programa a conflictos urbanos que afectan sus intereses y la calidad
de formación para la acción ciudadana. Se propone generar de vida de sus territorios. Diversos medios de comunicación
y renovar liderazgos sociales para incidir con voz propia en local han destacado estos hechos sociales y las propuestas
los procesos de cambio y desarrollo de esta ciudad interme- frente a los conflictos urbanos estudiados, los que han ido
dia, en un ejercicio del poder más democrático e inclusivo. ganando reconocimiento social en la Región.
Heredera de la Escuela de Planificadores Sociales-EPS/SUR El surgimiento de opinión pública crítica y propositiva en
(creada en 1987), es una iniciativa de SUR Corporación de torno a la ciudad, sus fenómenos, relaciones y transforma-
Estudios Sociales y Educación que desde el año 2003 se ciones, exige un esfuerzo educativo continuado para elevar
desarrolla en forma ininterrumpida en Talca, en alianza con el nivel de razonamiento, de argumentación y protagonismo
la ONG Surmaule y el Servicio de las Iglesias Evangélicas de los actores con menos poder de decisión. Pero sobre
(EED) de Alemania. todo, exige momentos y espacios públicos para el ejercicio
Entre el 2003 y 2008 en los seis ciclos de formación del foro, del debate y la confrontación de ideas y propuestas.
anual de la Escuela de Líderes de Ciudad han participado Y ése es el sentido de la Escuela de Líderes de Ciudad en
más de 220 mujeres y hombres dirigentes de organizaciones la Región del Maule.
sociales y territoriales, y de nuevos movimientos sociales;
así como funcionarios públicos, municipales, universitarios,
integrantes de gremios, partidos políticos, iglesias, etc. El
proceso formativo les permitió ampliar sus propios campos
de reflexión y de acción poniéndolos en relación a las pro-
blemáticas estructurales y complejas de la ciudad. Y desde
una perspectiva ciudadana, impulsaron iniciativas en torno