El tesoro escondido

Proverbios 2:1-22
Por Juan Carlos Cárcamo, Th.
Introducción
¿Quién no quisiera encontrarse un
buen día en el patio de su casa un
tesoro (barril $$$$$)?
De hecho hemos evolucionado de las
historias de las tinajas de oro que
contaban los abuelos a los barriles
con dólares de nuestra época.
 ¿Quién fue Salomón?
Como en toda la literatura sapiencial de la
antigüedad, la metodología teológica
fundamental de Proverbios no parte de dogmas
recibidos, sino de la experiencia personal.
Como Job y Eclesiastés, un sabio puede tener una
amplia experiencia, que refleja una variedad de
contextos históricos, y su teología y enseñanza
resultan dialécticas—y para una mentalidad
racionalista, no -histórica, incluso parecen
contradictorias. Al colocar juntas algunas
enseñanzas “contradictorias”, Proverbios hace
patente su carácter dialéctico por ello se usa la
figura de la comparación
 ¿Que son los proverbios?
Palabras claves como: sabiduría, prudencia,
inteligencia, conocimiento, juicio, ciencia, se reiteran
en los versículos del 2 al 11.

Luego del 12 al 19 se detiene para describir a las

personas que no buscan sabiduría; pero no solo las
describe sino que augura consecuencias para este
tipo de personas.

Del 20 al 22 cierra el planteamiento con un paralelo

entre lo que obtendrá la persona que se incline por
la sabiduría y quien no lo haga.
 ¿Que dicen los proverbios?
Proverbios, como género sapiencial, los ha habido en
todo tiempo y cultura, de ahí que se habla de
proverbios chinos, árabes, persas, entre otros.
Lo que distingue a la sabiduría heredada de la fe judía
es el monoteísmo Yavhista, la idea del Reino de
Dios presente en toda la reflexión teórica y
sapiencial del pueblo de Dios. De tal modo que sea
inteligencia, juicio, sabiduría, conocimiento o
ciencia tienen como objeto la búsqueda de Dios a
través de una agradable convivencia. Ser sabio,
entonces, es agradar a Dios y buscar comunión con
otros y otras.
El gran peligro para el lector moderno es tomar
un proverbio como una “ley científica” sin
excepciones, o como un dogma de teología
“sistemática” o un dictamen de “ética” o
“moral” universal absolutista (categorías de la
filosofía griega, ajenas a la mentalidad
histórica de la Biblia. En la Biblia misma, los
libros de Job y Eclesiastés hacen una crítica
feroz de tal tergiversación de las tradiciones
sapienciales.
Pero una lectura cuidadosa de Proverbios
también nos enseña a ser sensibles a los
distintos contextos históricos y sociológicos
 Conclusión.
Algunos creyentes han interpretado la sabiduría
cristiana como una radicalización de las normas
morales incluso han creado géneros como los
himnos de exhortación.
En el nuevo testamento, la radicalización tuvo su
máximo expresión en los ezenios, más adelante
grupos cristianos históricos como los moravos y
los valdenses continuaron en su tendencia
ascética. Los monjes medievales tomaron opción
por diferentes tipos votos ascéticos como de
pobreza, de castidad, el ayuno como prácticas
para formación del carácter y la búsqueda de la
sabiduría
 Conclusión.
Para una organización que pretende manejarse en
el ámbito de la diversidad ética y religiosa será
crucial la habilidad de sus operadores para
identificar principios básicos de vida y
convivencia por sobre la prácticas particulares.
Eso requerirá de un marco de referencia sólido y
amplio. Lo más fácil es ser fundamentalista en
cuanto a formas, lo más difícil es encontrar
sentido en la experiencia del Dios invisible.
Lo importante es definir en qué ámbito de la vida
cristiana vamos a ser radicales, de modo que si
vamos a serlo lo sea en los frutos del espíritu y
en valores universales como la justicia, el amor,
la compasión y la solidaridad
 Conclusión.
¿En qué preceptos está basada mi vida?
¿En principios o en rituales?
Cuando demando fundamentalismo
¿Estoy claro a que me refiero o en qué pretendo ser
fundamental?
Se necesita sabiduría para la toma de decisiones. La
mejor herencia que podemos dar a nuestros
hijos/as y a las nuevas generaciones son
principios de vida.
Debemos buscarlos y, en ese sentido, la biblia es el
manual de valores por excelencia.
Es el tesoro escondido de la sabiduría
 Conclusión.
“Una vida basada en principios es mejor que
una vida forrada de rituales”
Jesús insiste, en el sermón del monte, en una
expresión clave: Vosotros habéis oído más yo os
digo.. Esa es una forma de reinterpretar el
espíritu de la ley judía, los considerandos de la
ley de Dios.
La búsqueda de la sabiduría nos obligará siempre a
la hermenéutica de la norma. La interpretación
de cuál es en esencia el espíritu con que debe
aplicarse un precepto. Lo peor que nos puede
pasar es el reduccionismo irresponsable de
interpretarlo a mi manera e imponérselo a otros
 Conclusión.
Una clave para desarrollar esa sabiduría que nos deja el
libro de proverbios es tomar en cuenta la
experiencia.
1. La experiencia de mentores que nos orientan.
2. La experiencia de los/las personajes bíblicos; sus
éxitos y fracasos.
3. La experiencia del cristianismo histórico, rico en
buenas y malas prácticas de fe.
4. La experiencia sistemática de personas que han
dedicado su vida y esfuerzos a la interpretación de
las Escrituras a través del hacer teológico y otras
que lo han hecho a través del conocimiento
científico
5. La experiencia personal con el Dios vivo.
 Conclusión.
Una decisión que tome en cuenta los
anteriores elementos nos ofrecerá
mejores resultados en nuestros
decisiones cotidianas