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"',;; l ,P^^ ex?ql,icún [n.re5f;


Tradubción de
9*ñqnq LE ¿QUÉ ES ESA COSA
Euue¡.¡l PÉnsz Ssprño LLAMADA CIENCIA?
v
P¡un lf¡ppz MÁñez (capí:ulos 9-14 de la 2." edición)
Una valoración de Ia natur e\eze
y e[ estatuto de Ia ciencia y sus métodos

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O*,)p 'lcn ALAN F. CHALJEERS


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12. LA TEORIA ANARQUISTA DEL CONOCIMIENTO
DE FEYERABEND

Una de las concepciones contemporáneas de Ia ciencia más


estimulantes y provocadoras es la que ha sido pintoresca-
mente presentada y defendida por paul Feyerabend. Nin-
guna valoración de la naturaleza y el estatus de la cie¡rcta- ..
estarÍa completa sin un intento de comprenderla. Ery'este
capítulo resumiré y valoraré lo que considero que son los
rasgos clave de ia postura de Feyerabend, tal como aparece

I. TODO VALE

Feyerabend hace una enérgica defensa de la afirmación de


gue ninguna de las metodologías de la ciencia hasta ahora
propuesta ha tenido éxito. Su forma principal, aunque no
única, de defender su tesis es mostrar que esas metodolo-
gías son incompatibles con la historia de la física. Muchos
de sus argumentos en contra de las metodologÍas que he
clasificado como inductivismo y falsacionismo son simila-
res a los que aparecen en los capítulos anteriores de este
libro. De hecho, las opiniones expresadas allí están en par-
te en deuda con los escritos de Feyerabend. Feyerabend
mantiene de forma convincente que lás metodologías de la
ciencia no han proporcionado reglas adecuadas para guiar
las actividades de los científicqs. Además, sugiere que, daj,a-
la complejidad de la historia, es muy poco razonable e6p"-
rar que la ciencia sea explicable sobre la base de unas
t Paul Feyerabend, Against method: outline of an anorchistic
theory ol knowledge, Londres, New Left Books, 1975.
Alan F. Chalmers Teoría anarquista de Feyerabend.
189
.crantas reglas metoclológicas. citaré a Feyerabend con cier- de. investigación
ta ,r"Flitud: ¡roporcio na criterio., que ayudan al cien-
tifico a evaluar Ia situación histórica .n lu
decisione-s; no contiene reglas que le diganlue que
I¡l
toma sus
t"a lo
¡an.ge que la cie,rcia puede y debe actuar-"oÁo. de acuerdo con rl?c€r»,. Los cientifico.s,.pues, no deberíañ debe
l"-"*jj¡ :"^1''1:' + o" i""" r."1i. t" pu-i"iiio,". .rra. obligados
Es ,rcco- :: -1.:1i
reitís t a Doro ue ti"1. ri.ióff;;:#[" por las reglas del metodOtogo. En este senticio, todo yale._
.

"rá- ffiff:":?
i,omú
1: y_á; ;;-"#;",tancias que fomentan
-
l":_?.:*:' i
-!et,desarr«:rllo.
can su pernicioso poiqre el intento de oecada
pas.aje de un artÍculo escrito por Fe¡,eruU.r¿/rnu
,r^Yl antes que Against -hecho
'está _es method ilustra
las leyes abocado á
ción profesional a expensas de increm"ni* l.l.u.rr" cualifica. «todo valeo no deberia ser interpretado el de. que
nuestra humanidad,. Además, en un sentido de-
masiado lato. En esre pasaje, Feyerabera
lij*::". f:i?!,^":?r- i.y-,t"i?i;-;;,q". pasa por arto ras l"t.ri"
entre el cientlfico razónabi" y át extravagante. ái.ij"e"i,
comprejas condicioner físicas e histáricá. qil"-i"riuy.i'u" .r
§f"9io.cientffico. ttz,c. que ú ;;;;" sea rnenos adaptable
r.iulq¡ dogmática.,.
ffimás (¡LrE,rIratlca.,. La distinción no r:eside. en el hecho de que los primeros
:I Los estudios como los citados en los capfturos gente.«respetabie»] sugieran cosas posibtes
y prom*run-.t c*t-
fla
anteriores... to, míentras que los segundos Ilos L"trauugirri".s]
Hllt,f ::f::,::, -ii*i,*1";r';1';tll"i?3.
'odás las metodoloeÍn,sp_:1i¡;;;-*ii"'"j; á"
"""rq,i". ?er^
sugieran co-
tienen s"r sers irrrposibles, absuroás y c,ncier¡arlas
ai-frac¿ii.. ño prrcde
l?" q,r. queda "r, iir, ", ru á"-[".;;;" vale,2. :::91..^.: e,srg
reorra tenclrá éxito.porque no sabemos nunca de a¡rremanó qué
y qué teoria fracasará. Lleva l:tucho tiempo
Ia§ metociologías rie ra cieniia se entienden decidir esta cuestión y cacla paso que ileva
que guíen ..as eleccio¡res y du"i.ior,".
en ¡érminos a una revisión... No, Ia distlnción enrre et apensaaái*trrur-
eiia está abierto
cos, entonces me parece que la po§tura a" á"'il-;i."-
fsl"_.
r"v"rru""¿
gante y el respetable reside en la investigaciOn qr.
," t r""
correc.ta. Dada la,.:omplejidad de cualq"i",,ii,.rJJ¿;;;;- una \¿ez que se ha adoptado un determina'clo punio ¿e
Fl extravagante se.contenta normalmente con dlfender elv;sta.
13 ciencia y la irnir.uiri¡iti-¿uilá.1^ f"i"i"^;;'ñ pun-
:-1" ,"r, to de vista en su forma original, metafÍsica, no desarrollada,
al des¿rrrollo-de üna cienciu, ho .i .árái"ut. y no está en modo alguno dispuesto a probar su utilidad en
l"".i-l-drre
tr.]?a.'una metodol.ogí4 que determine que, dada una -si- todos aquellos casos que parecen favorecer
a su contrario, o in.
Éfl?1zg i^".:lT:,flo1
r1ci.ón.ar
Ia teoría n, c preferir ta.¿eue a¿opiu., rr-t**l,
ári"-i;1"';";;;;.
clulo 3 ad.mitir que éxiste un proUtema. Es esra
posterior, los detalles de la miima, el conocimientoirr"iiigr.io"
¿e la-s airi
l,:,r,:r;-.X r".to,,r. q"é ie"iu* ;á; iJ_
lillti": ó;; cuitades, del estado general del conocimiento,
ro-de las objeciones,-lo. que át;,hg;;;I «pensador ei reconocirni €ri:- -
¡ductivo de los hecl:ros ,".p,áaorl y=;;;il;;UT':#I: del extravagante, y no el iontenidolriginai de su reoria.
,".r.rutli',
con i ;.' h;;l,'"s gen era rnen te acep- Si pien-
:.;."-.:^T::lpjl,blls
incompatible.s con aquellos eliso«lios
r sa que habrÍa que dar otra oportunidád a tistoürlr,
a"3áo..
,1oi1,,.9" ,l; l";;"- le que-.se la _dé y esperemos ios resultados. si se contenta con
consideraCos iomo constitutivos de sus esta áfirmación y no comienza a elaborar una
['..gd¡1fu*ente nueva dinámica,
ié,c rm{s
progresiva
:H:;
s. La acus^.ián, ¿""i"ffi*r:Ir"d
- si no está familiarizado con Ias dificultades iniciares de su pos-
¡t^U,:3:-
ño,proveedoras : 1, llirise,,
drr reglas para guía ¿1
;"r;r;;;;,
ron rra tr. muio Jol"grá ; tura, entonces la cosa no tiene mayor interés. Sin
no §e contenta con el aristotelismo en la forma en"múurgá,
Si
que áxiste
Lakatos ,, inurqlt..,t" ."Á. h "i."irril"r.Xl,
l*.:_:l no propor:iona " n;;[";; ;;-
,^,t"..;;'j""'"ffiH; llol",L
trata de adaptarlo a la situación actual de la asfonomÍa,
la rls¡ca y Ia microfísica, haciendo nuevas sugerencias,
ll{91": o una
,.[.?pl teoría. «La metodóiogía de los
1:
:¿ derando los viejos probremas desde un nuevo punto
consi-
l'".' :', '; t;;g;;*;; de vista,

f,r¡firl:i pp. 29$96, sul:rrayado cu el orginal.


.dú:'i',';v,
t lbitl.,.p, 196. subrayaclo en el original.
190
Alan F, Chalmers Teorla anarquista de Feyerubend .)

entonces agradezcamr)s que haya


al
ideas inusuares y no traiemos -de meno-s alguien que tenga tión a la que nos referimgs eI el capÍtulo r.
detenerle -'- antemano con
argumentos irrelevantes y equivocados {. de ---'-.-.s.J A fa eo#ól
de inconmensurabilidacl de F;y;r;b-.;d
se deriva de lo.
he catificado en capiiulo l;;;;ñ.;;;[".
si alguien quiere la "t Los signifi"uáo, e interpreracio¡q
por ejemplo, no necesitahacer
§1^1esumen,
*.t",
una contribución a Ia
n*_t
los
teoría.
'srca,
metodologÍas conrernporiáneas iá*ili;;i;;;;^;o'lus conceptos- y lo9 enunciaáo, obr".rl"iil;::.;;;
sita es estar familia;:izado- cü ,lriua" la ;ü;i;^ b [.r1. r,"."-
.i.rtu física. No re será Br,iT_Í:t=1..*
En atgunos casos, tos
conreiio-
,detprincipi;, t.i.i." ; ;l
f;;;;"{idirit"alXlJ
,i;;
suficiente sesuir ri",'pt"*ente-rlriup"i.hos
de forma deiordenaá". ñ;;;;á
a" gue,
e incrinaciones
en la ciencia, :g' j::?*:
sea posible :i-.,f:.,::l
ni .siquiero 1""
;;áL;k"""re direrent", n,,"1
fo"m,ri;; i;;-;;""'i¡,'ül".iXII
todo valga\en un ser:tiao ilimitudol una teoría en ios términos de la otra,
Feyerabend arre::nete con éxito
contra er método en ra tEorÍas rivales no campartirán ningún
.on-io-q;i;"
medida en qu.e de.n:ruesrra enunciaáo
elecciones y decisiones de ;";-;;
es aconsejable que las I" tates casos, áo es posiblJ comparar lós
io. ,"^t:T!
por las reglas establecidas por "r.rrtiri.o. .rieri'áuiüuau,
lBs teorfas 'rivates. No será p;.tbü;;;ff'&;:tffill':
1".-*.i"?u""*r*'¿lTt
cia o irnplÍciras en. ,:llas. Sil-;;;rgo,
gunas de las consecuenc.ias ie ,rrro
,.o.i" pá.Ii.¡á;:i¿-
si se adopta la"irn- principJos de su rivai con fines comparativos.
trategia del capÍtulc, ¿¡t.r1-.,-r.plrundo es-
rÍas serán inconmensurables. --r Las dos
cambio de teorÍa der probre;; el problema del
problemas referente,, u lu, á;ü erección de reorÍa, ros Uno de los eiemplos de .iirco¡mensurabilidad
de feffi
teoria no'constituvern nrnhl",i*,] i,r" gri.r,
.r.Sl".- ::-^ :::"-'-'la elección
"t""Y'.u de :*f*:.1L,.:i;1"" ""ti-1"'*"'"*ica ctásica y ta leorÍa
c ambio J- ;;i;:H, #:"ll.Jff x*f.#3,.::i::il?L tj Í: ll retativi dart, »" u"u"ra; ;;;-r"';r,*Jij"iiliil1Hi!
teorÍa e' la fÍsica
;,
irr*i.r,u ; i; crrtica der método de
.
da de forma r.eatisra, es decir,
cómo es realmente.er mu-ndo,"tu"1o
.";;;íl;;;.;'H::iiüfr1
',is olse¡.vabre como
Feyerabend, servable o-, los objetos fisicás
ti""""-r"l;;;ü;. "o'"-#i
iJiTl
propiedades existen en ros óUJri.¡-l?jil:
Ij".,r:].lT^.I, I:l,t
cos y pueden cambiar córno i.esuitado
¡. ;; i;;;;;;Ij
IL INCONMENSURABJLIDAD
ta teo¡ía a. ," ,ui"':r]il, ;";ñ;^á.i"'i"r*n,
lr:f::1
realista, no exisren yu propi.ál;;"*; f:i;l1]L::r'HH,
un cornponente im,ortante der lurnen, qL¡('que rs
Feyerabend es su tésis anárisis de Ia ciencia de ¡s¡¡¡v¿¡r r.ru.io;;:".;;':#:;::,J_'-T,.
se cur¡v¡er.¡en en relaciones entre objetos ry ei
sobre ü i;;"_lTensurabilidad, que "u..ri."i.r,
de referencia y "" cambiar, sin ning,",na
pueder¡
tiene algo en común .o" ru
L.ir á"" xut o sobre esta cues- T::.:,r ¡ntÉr#
ción ffsica, si se .u*-biu u"
"rur.o
ci a, cual guier en*
;;'ñ;;;Tt";il;ái
11, :::T"1.: nciá Ao o U r.ru; ;i" Jú;J'JÉ
Feyerabend, oRearism and.instrumentalism:
.,
the',Puyl
logic of factual su.)port», en
comments on
Tni-iritical approach to science
"efiera a objetos fÍsicos
d.É yn significado diferente puiá
a*"tro á" -un
h ;;;il;':i;tá";;:i
and. philosophy, M, Bulgc, york, Free press, l9ó4, pá_ enunciado ou...Lrit
comp.,
gina 305, subrayado ,: á ;;ici;;i. Nueva cional aparenremenre similar en ra ,""rá'á"i-
e ÉLi"Luend.,no siempre le gus-
criticas-.que suponen qle todavfa
,.l",iliáJál'i
:1"^J":
en el pasado. (Véase A¡;¡aínst metnoA, suscribe lo que escribió ,..X:l-::,,1^::lif
cho que .reyerabend e,c.epte o ,,o ál'p,.'lfij-ñ, ir"olJo"..lü'**- ra relación entre su tesis y ta de Kuhn en
Aparte de argunos rec,:ros rru"iu-
pasaje, ciertamente
mensa¡e del pasaje citado.
ru-ori"ltación individuarista del i;,;::H:,T y.'j: ::. -r .1._:on, ñ.,ü;;,, s ;r, ¿,,,'|á'"ff
phitosopki;is;;;;;';:11.re;p::i?ü:'.í.:,,Ji{ulLTTri",ii"*Z itl
,ñZiii
principal para conocer Ias tesis'á, fuu-"lr¡.rrt cnrrra r¡ i-^^__^_ j
:,

Io l,.cepto y,
dr: los argumentos d,e tlgainst Io que es-más importante, ninguno 3Iffi',?,1"I'Jl;?:i;::*:,,:*.xi;ñ*ü;;"ltt;Ji""ii?":ffi:r."
surabilidad,,es Ag:tinst method,
method lo contradice. fi:
0 El realismo será
analizaciá "ü.
el ei'pró*inro capftulo,
AIan F. Chalmers Tearia anarquista de Feyerabend. 1g3

dos teorías son inconmensurables y no pueden ser com. La transición a unos criterios que no impliquen un conteni{o-
'das comparandc sus consecuenciás lógicas. citando ar lleva, pues, a la elección de teoría d,e una rutina.ru"idñii-
Feyerabend, «objetiva» y bastante unidimensional, a una compleja disóusión
que implique preferencias encontradas, y en ella Ia propaganda
des.empeñará un importante papel, como lo
nuevo sistema con{:eptual gue surge (dentro de Ia teorfa
de
hace en tá¿is tos
relatiúidad), no sólo ;iega li de los esractos de co
casós donde intervienen pretirenú;;.
s clásicos, sino que rri siquiera""iri"?r"i"
nos permite formular enincia-
,i3::,Tl1:=n-raler,'estados de cosás. No comparte ni tueae En opinión de Feyerabend, la inconmensurabiiidad, aun-
.r ningún enrrnciado con su predecesor, suponiendo que no elimina todos Jos medios de cornparar teorÍas
incon-
que no usem,)s las teorías corno esquemas mensurables rivales, lleva a un aspecto-de la ciencia nece-
de clasifi-
,f,1oj irechos neutrales... El eiquemu poiitirir. sariamente subjetivo.
I:r:- "rdenar
progreso, con r;us «gafas popperianasu, ie viená abajoz.
+qel
Lo que queda [después de haber eliminado la posibilidad de
¡, O§as parejas de teorias inconmensurables mencionadas comparar lógicamente- teorfas comparando con¡untos de con-
,r secuencias deductivasl son juicios estéticos, juicios de
.Fgyqraberrd incluyen Ia mecánica cuántica y Ia mecá- prejuricios metafísicos, anhelos religiosos; en re.sLlmen,
varor,
rr c-lásica, la teorÍ¡,r del imprriso y lo
la mecánica newtonia. qued.a san nuestros deseas sub jetilss $,
gue
y el materialisnr':r y el dualisml c,.r..oo-aima.
cuerpo-aima.
lDeJ hecho- de que una pareja de teoríás rivales sean in- Acepro la tesis de Feyerabend de que argunas teorías riva-
bles no r,e- dgspr,ende que.nc puedan ;;;;-
de ninguna formá. Una forma de comparar una Ies ¡lo pueden ser comparadas merlmente por medios.lógi
cos. Sin embargo, sugiero que hay que oponerse a su deci-
ontar
lCon una serie ,le situaciones observables y
;#-;;" ;; sión de sacar consecuenciis suu.¡eiivistás de este hecho.
registrar si nos centramos en la cuestión de la elección de teorÍa,
grado.es compatible cadi una de ta. t.oílas-;ü;;
ésás situaciones, interprctadas en sus propio. estoy dispuesto a admitir que habr;i nkún r:].:n..¿nto
- ^:¿--^ -! -
i¿;i;;r, jetivo impiícito cuando un CientÍfico .elija adopta*n¿'t*o-^ú1F'--..
de corrrparar las reorlas cii"a"'s po;r;;;"-
lll,lg"T"s rfa en lugar de otra trabajar en una teorÍa en lugar de
{ imnlicancoherentes.
-consiiláraciones acerca de si son rin.uí., o -o
otra, aunque estas elecciones estén infiuenciad^. pJr
-ru".
,.l,|rjeJ":, o
-incoherentes, si son ,rrr" tores «externos» tales- como las perspectivas pur, ,rt. carre-
aVénturada c, fiable, etc. t. "proxi ra. y la disponibilidad de fondos, además dei tipo de
nos
i§fentonces centramos en el-probrema de la erección de te.- sideraciones mencionadas por Feyerau""¿
c<¡n.
; surge un problema: ¿cuál de los Air"rsos cri- iul-"i,ur' u".
teriores. sin embargo, creo qu" necesario"¡decir que, aun
¡ios',de comparaci(rn se h, de pieferir €n aquelras situa- "i
cuando-los juicios y deseos individuales
el gue estos criterios están en conflicto? Segrin Feye- sean ci"^.to ,*r-
tido subjetivos y no puedan ser determinados ", por argu-
, lá eleccién r::ntre. criterios y, por consiguiente, Ia mentos Iógicamente obligatorios, esto no signific"'q,r* ,."n
entre teorÍa:; inconmensurables es en última ins- inmunes a un argumento racional. Las preierencias de
"subjetiva. los
individuos pueden ser criticadas, por ejemplo, ¿"*outruir-
do que son gravemente incoh"rrni., o qul tienen conse.
¡; t'r ;.i; ' '

t.
7 Ao¡ii¡ e lbid., p.
Against,methc.d,,
c pp, 275-76, subrayado en el original. 366.
rUhángirlg patterns of reconstructlonr, p. 365, n. 2. r0 Against nrctlnd, p.
2g5, subrayado en el original.
194 Alan F. Chalmerc
Teorla unarquista db Fe.yerabend
cuencias que los individuos que Ias manifiestan no de-
es subjetivista. IIay que adrnitir que en las condicioné
searían ". Soy consciente de que las preferencias de los
individuos no es;án determinadas rlnicamente por argu- pe.cificadas por el suplresto sociólógico del quq deÉ
mentos racionales y también de que están fuertemente mol- mi concepción objetivisia dej cambid de teorÍa hábrá
deadas e influenciadas por las condiciones materiales en siones y elecciones-subjetivas. Esta concepcién sup
que vive y actúa el individuo. (Un importante cambio en existencia de científicps con las habilidadei y los re
las perspectivas para su carrera será iusceptible de tener necesarios para aprovechar las oportunidades de desarró
un mayor efecto en las preferencias de un individuo que gue se les presenten. Cientfficos y grupos de cienifficos
un argumento rar:ional, por dar un ejemplo superficial.) ferentes podrán hacer "elecciones tiÍ.rá.,tr" .;"á;,;;;
Sin embargo, los .ir.ricios y deseos subjetivós de lós indivi- ilan a la misma situación, pero mi .orr..p.iOn d;l ¿;;
duos no son sacrc,santos ni inmutables-. Están abiertos a la de teorÍa no depende de lai preferenciar^ i"áiuiáuutes
crÍtica y al cambjo por la argumentacién y por Ia altera- guÍan tales elecciones.
ción de ias condir;:iones materiales, Feyerabend celebra su
conelusién de- gue la ciencia coatiene un elemento subje-
tivo porque ofrece al cientlfico un grado de libertad ausen- LA CIENCIA NO ES NECESé.RIAMENTE SUPERIOR
te de las «partes más pedestresn de .la ciencia ¡2. En una A O'I-ROS CAMPOS
sección posterior r:liré algo más acerca de la concepción de
libertad de Feyera.bend. Otro importante aspecro de Ia tesis de Feyerabend sobrd
_
Mi segunda rest)uesta a las observaciones de Feyerabend ciencia se refiere a la reiación entre la cíbncia y otras.f
sobre Ia inconmer.surabilidad nos aleja de la cuéstión de mas de conocimiento. Feyerabend señala que muchos r
la eiección de teoria. EI estud.io de Zahar sobre la rivalidad todólogo.s dan por supueito, sin argumentó alguno, que
entre las teorías <i.e Lorentz y Einstein, convenientemente ciencia.(o quizá la ffsica) constitu-ye el pu.uáigma
modificado a Ia luz de rni concepción objetivista del cam. racionalidad, Asl, Feyerabend dice áe l_akatos: -
bio de teorla, óxplica cómo y por gué la teorÍa de Einstein
reemplazó finalme rte a la de Lorentz. La explicación se Una vez acabada su <rreconstrucción, de Ia ciencia
basa en la medida en que la teoría de Einstein ofrecía más [Lakatos] se vuelve hacia otros (:ampos como si ya hubiera
oportunidades obj,:tivas de desamollo que la de Lorentz dad,o establecido que la ciencia modirna es superior a la n
y en la medida en que esas oportunidades dieron su fruto o a la ciencia aristotélica y que sus resultados no son ilusorió§
cuando fueron ap.r'ovechadas. Esta explicación es posible Sin embargo, no hay el -¡¡rénor argumento de este tipo. Las
«reconstrucciones racionales» dan por supuesta Ia usabidurfa
aunque las teorías sean al menos en parte inconmensura- cientlfica básicar, no demuestraft que es mejor que la «sabii
bles en el sentido rtlue da Feyerabend al término l¡, pero no durfa básica» de ias brujas y lo.s rnagos I
¡l Si un individuo r)uyas preferencias son asf crificadas responde
insistiendo en gue nc, le importa gue sus preferencias sean grave- Feyerabend se queja, con razón, de que loi defensores dt!,i
mente incoherentes y, además, no tiene ninguna rspuesta a las obje. Ia ciencia suelen juzgarla superior a oiras forrnas de cono:;,
clones habituales a l¿rs incoherencias, yo por lo menos no veo nin- cimiento sin investigar adecuadamente estas otras formas. ,
guna razón para tomar en serio las ideas de ese individuo. Aquí es
relevante la distincié¡r del propio Feyerabend entre pensadores ex-
travagantes y «respetirbles». plo de teorías inconmensurables, parece aceptar que Io son, dadoti|
t2 Agai*st method, p. que la teorfa de Lorentz incorpora la mecánica ólásica
285.
t! Aunque Feyerabe,od no cita'esta pareja de teorlas como ejem-
y la con-.t
cepción clásica de espacio, tiempo y masa, :1.
É Against method, p. 205, subrayado en el original,
;$i'+&1, ;i

i,ij tge Alan F. Chalmers Tearla anarquísta d.e Feyerabend


:' Observa qu-e los oracionalistas crfticoso y los defensores /*97-.
nes qu.e tuvieran consecuencias indeseables; por ejem¡rlo,
" de I-akatos han. examinaco la ciencia co' g.o, detalle, pero
su «actitud hacia el si se descubriera que para cada acontecimiento piedicho
,

i,", -gue marxismo o la aitrología u otras


'i, herejfas tradicio¡l¿.les es muy diferente. Aquí se -consideran por la teoría se podía predecir también tu n.g".iOl- á. .r.
,1 suficientes el exanren rnás süperficial y lor'".d*-u"iá, acontecimiento. No creo que Feyerabend disciepara
zatrgs»,,, y respalcla su afirmación con variosl¡emplos.
*¿. "i .rtu
último punto, pero tampoco c.éo que le dé la impo.i"n"i^
, debida.
,ir,: ,. !e1Ta.be-nd. no está clispuesto a aceptar tu ,r.
; perioridad de la ciencia sobre otras foimas de".."."ri" .o"o"i*i.rr- . Yn" vez más, acepto una parte sustancial cle las tesis
- to..Además, a la ir¡z ce su tesis sobre la in"onmen."r"uili-
de Feyerabend sobre iu comp^.ación de la física .o,
orro.
. dpd, rechaza Ia. ide l de que pueda haber un argumento deci- formas de conocimiento. si ieseaÁLs sub". cuáres
son los
,' sivo en fa',or de l¿r cieniia frente a otras fornLs de conoci-
objetivos y los mérodos de unu forÁu d;;;;;;.nily
_n
: mrento inconmens'¡rables con ella. si se compara la cien- qué medida. cumple estos objetivos, nece;i;;;.;;-;;luctiar
esa rorma de conocimiento. puedo incluso
i"r cia con otras form as de conocimiento, será neóesario inves- apoyar la pun-
;l:r,,:tigar la naturaleza, los tualización de Feyerabend con un ejemplo mio.'Aunq,rl
los métodos de la cien_
.,:cla y de estas otr¿rs fornras "bj";tr*-t
de conocimientc. Esto se hará crcflo modo sea una caricatura de la hisroria cle la iiloso- ".,
i-:mediante el.estudi,: de los «d«¡cumentos históricos: libros," li.u, u" puede decir que en los dos mir años anterioies-a ca-
l, ¡a-ol^-.^-:--:-^l^- t
originales, acta.s ,i.e . lileo, Ios filósofos áiscutieron si las teorÍas matemáticas
i 'papelescqrJas, reuniones y conversaciones pri-
son o no apricabres ar mundo físico, dan.do tos
etc.»,ó..Ni siquiera," puád" urporr"r,.¡rr rnr.
[j!yadas,
i:iinvestigación más ;r fondr-,, qile una io.rrru ¿" éonocñerrto una lespuesta afirmativa y.los aristotélicos trnaftoiánicos
negativa.
auque esté siendo in'restigada deba ajustarse a ias reglas Galileo zanjó esta cuestión no ofreciendo ,-,n
' de u.ou*.nii, iilo.
la lógica tal como normalmerte las entienden ,los filósofos sófico decisivo, sino haciéndoio, podemos ;p;;;;.; ;osas_-
,
y los racionalistas contempoiárreo.. El hecho ae no acerca de la forma en, que es posible describir ,lgunor/J-
a las exigenc:.as de ia lOgica clásicá pr.a" ru",rn".j.ro pectos del mundo físico anarízando ra fisica o
,,..1"F "
--tecto- pero. no.lo r:s necesariamente. un á¡empro ofrecido
de- [^.ti, a"
Galileo. Para comprender Ia naturaleza tal vez .:ambiante
Feyerabend se refiere a la mecánica cuá¡rtica moderna. de la ffsica, necesitamos investigar la fisica, a.l -Ái.mo
;., lor modo que para comprender otras-formas de conocimiento
r: 'Para considerar la cuestión de si los modos de razánamien-
necesitamos investigar esas otras formas. No es lÍcito, por
ii¡ilo impltcitos en ai;guna "rrJ¿n-j"-"rrr",ár]" ,jái# o ejemplo, rechazar el marxismo sobre la base a. q". no
i las normas de la lágica clásicá,;, ;;;";;;;i"rlrlir^"
"o
l" ,"
mecánica cuáhtica ,¡ la forma en que funciona. Esta iñvesti- ajusta alguna idea preconcebida del método ci.rrtíii"o,
-a
.hace .lgpp.., o defenclerlo por motivos .iÁilo..r,
puede revel,irr un nuevo.tipo de lógica cuyas venta- como
|i::,$ació1,
como hace Althusser.
ii,:ias s.güre la lógica :nás tradicionai pued"ris", deírostradas
, en'el iontexto de Ia mecánica .cuántica. ror ot.a p".tu, Aunque estov de acuerdo aquí con la tesis básica cle
"t Feyerabend, el uso que desearía darle es algo diferente. .El
;,descubrimielto de violaciones de ra rógica iiiá"'ii,
¡puesto'constituir una seria crltica a la mecánica cúántica. ""- falso supuesto de que hay un método cien"tífico universal
¡,Ei¡o sucederfa por ejemplo si se descubrieran .ontráái..io- al que deberian ajustarse todas las formas a. *rrá.i*ir.r.
to desempeña un papel perjudicial en nuestra sociedad aquí
y ahora, especialmente a la luz del hecho de que ra versión
',, '.,-t.P.
.1-': ,:'. r. teyerabend,
Feyerabend, «(.r¡
o(.rn the critique of scientific en Method ' del método científico a Ia que normalment. i" .."rrre es
,, and oppraisal inthe pi:tysica_I sciences, C. Howson,reasonr,
comp., p.315, n.9. una tosca versión empirista o inductivista. Esto es espe.
cialmente aplicable al campo de la teorÍa social, en el que
Alan F. Chalmers Teoría qnarquista de Feyerabend 201
xii
i,1

uos conserven la iibertad de elección y no se Ies impon- tructura social, de modo que el análisis de Ia estructura
r una ideología co:rtra su voluntad
2r. social es un requisito previo para comPrender la libertad
iita nociOn de libertad ciel individuo que Feyerabend del individuo.'Hay al menos un pasaje en Agaittst m-ethod.
prestada de Jll.ill está expuesta a una objeción habi' en el que Feyerabend indica que es consciente de este tipo
Esta noción, qr,re considera la libertad como la libera- de cuestión. En una nota a una observación acerca de la
de toda obliga,::ión, pasa por algo el aspecto positivo libertad de investigación señala:
la cuestión, es decir, las posibilidades a las que los indi
tienen acces(r dentro de una estructura social. Por El científicó está además limitado por ias picpieciades de sus
mplo, si analizanros la libertad de expresió.n en nuestra instrumentos, la cantidad de dinero disponible, la inteligencia
de sus ayudantes, las actitudes de sus colegas, sus compañeros:
iedad únicamentt:, desde el punto de vista de ia libera- está limitado por innumerables imperativos físicos, fisiológicos,
de la censura, I:rasamos por alto cuestiones tales como sociológicos, históricosa.
I

medida en q¡.re los diferentes individuos tienen acceso a


medios de comur,icación. El frlósofo del siglo xvur David Las posteriores palabras de Feyerabend acerca de la liber'
ume ilustraba mu,¿ bien este punto cuando criticaba la tad áel individuó no prestan la debida atención a k>s imyté:-' '-
lea del contrato sor::ial de Jchn Locke. Locke pensaba que rativc¡s que operan en la sociedad. Así como un cientÍfico
:rcontrato social erra iibrernente adoptado por los miem' que espera hacer una contribución a la ciencia se enfrenta
de una socied;ld democrárica y afirmaba que cual- con una situación objetiva, asl también un individuo que
rierá que no quisiera suscribir el contrato era libre de espera mejorar la sociedad se enfrenta con una situación
. Hume repiicaba: social objetiva. Además, así como un científico en una si'
tuación dada tendrá a su disposición una serie de técnicas
decir seriarrente clue u¡l campesino o un artesanó teóricas y experirnentales, asl también un reformador so'
tiene libertad cle elección pára dejar su país cuando no cial en una situación social determinada tendrá acceso a
ninguna lengui:. o costumbre extranjera y vive al dia del
ueño salario que percibe? Igualmente' podríamos afirmar una serie de técnicis politicas. En arnbos casos, las accio'
qn hon'rbre que permanece en un barco consiente libre- nes y aspiraciones del individuo sólo pueden ser debid"-
te .en la dominacirin del r:apitán, aun cuando haya sido lle- mente vaioradas y analizadas teniendo en cuenta las mate-
a bofdo mientrar; dormía y para de¡ar el ba¡'co tenga que rias primas con las que tiene que trabajar y los «instru-
mentos, o «medios de producciónn disponibles 2{. Si que'
remos cambiar a mejor la sociedad contei'{iporánea, enton-
ces no tenemos más- alternativa que partir de la sociedad
*por tanto no librr,rmente elegida. La libertad que tenga con la que nos enfrentamos e intentar cambiarla con los
.individuo depend:rá de la posición que ocupe en la es- medios que existan. Desde e§te punto de vista, el ideal utó'
pico de iociedad libre que ofrece Feyerabend no es de ayu-
l;1l,El ideal de sociedacl libre de Feyerabend es tratado süperficial- da alguna.
rénte en 'Against ntcthctd, y desarrollado con más detalle en §cience
tür,,|iun slcicty, Londr,:s,'Nerv Left Books, 1978.
:¡, La;fqita de Ol the rig,inal contrdcl de Hume puede encontrar'
ts Against method, p. lü/.
187. -l
in E. Barker, Social contract: essdls bt [-ocke, Hwtrc and Rorts' ?{ Louis Althusser ha hecho una titil analogÍa entre la prod'üc'
bau; Londres, Oxford tlniversity Press, 197ó, p. 15ó. Las tesis espe' ción material y otras formas de proclucción, tales como -11 produc'
lficas'de Locke cfitica,las en este pasaje se pueden encontrar en ción de conocimiento y la producción de cambio social' Véase espe'
cialmente §u For Mait, Harmondsrvorth, Allen Lane, 1969, cap' 6'
PP: ?q?2. del mismo volumen.
202 Alan F. Chalmers 13. REALISMO, INSTRUMENTA LISMO Y VERDAD

. !o q"g puede s,lr visto con facilidad, y en mi experien,


cia io es frecuenternente, como el mensajá de los recientes
escritos de Feyerai:end es que todos dáberían seguir sus
inclinaciones individuales y lia.er lo que quisieran.-En .rro
de ser adoptada, r,:sta tesis podrra lievai a una situación
en la que aquellos que ya tuvieran acceso al poder Io con.
servaran. Corno djce John Krige, de una forma que me"
hubiera gustado que se me ocurriera a ml, «todo yale.,,
significa que, en la práctica, todo sigue igualuu.
I. OB§ERVACIONE§ PRELIIIINABES

En este capítulo y en el siguiente intentaré tratar


LECTURAS CO MPLEMEN IARIA§ cuestiones problemáticas acerca de la relación entre
teorías cientÍficas y el mundo al que se las pretende 4pli
En Science in a f ree socíety, Londres, New Left Books, I97g., Por una párte, tenemos unas teorías científicas que
Feyerabend desarrolla algunas de las ideas de Agaínst method construcciones humanas y están sr:.ietas a cambios'y.d
y responde a algunos de sus críticos. Un artÍculo breve y útil arrollos tal vez incesantes. Pol otra, tenemos el mundo-
que presenta la eserrcia de la postura de Feyerabend es «How gue se preterrde aplicar estas teorías y cuyo modo de
to defend ag;: inst science», Radical phílosophy, 11 ,lg7S, portamiento, al menos en. el caso del mundo fÍsico, no
-society
páginas 3-8. En general, las crÍtióas a la postura de Feyerabend sujeto a cainbios. iCuál es Ia relación entre las dos
que han aparecido no son de un alto nivel. El indiviáualismo
feras ?
radicai que se puedc encontrar en ios escritos de Feyerabend, '
en parte justificada:.nente, es criticado con dureza desde una Una posible respuesta a esia cuestión es que las
perspectiva marxista althusseriana en J. Curthoys y W. Suchting, describen, o aspiran a describir, qué es realmente eI
,,Feyerabend's discr:rrrse against method: a maixist critiquer, Utilizaré el término «reaiis'mo» para definir las
Inquiry, 2A, W7'?, pp 243-397. que adoptan une versión de'esta respuesta. Desde el pun
de vista realista, la teoría cinétiia de los gases descril
qué son realmente los gases. La teorÍa cinética es in
táda como una teoría que afirma que los gases están
mente compuestos de moléculas que se mueven al azar
chocan unas con otras y con las paredes del recipiente
las contiene. Similarmente, clesde un punto de vista
lista, la teorÍa electromagnética clásica es in
como una teoría que afirma que hay realmente
eléctricos y magnéticos en el mundo que obedecen á
ecuaciones-de Máxwell y particulas con i"tg" que obedey'ñi
a la ecuación de la fuerza de Lorentz. il,
i,ai!

De acuerdo conI una


u¡¡s concepción alternativa,
vv¡rv r q, que
1Ev dénoi
minaré instrumentalismo, el componenté teórico de la cien:rll
?5 John Krige, Sci¿nce, revolutían
and. discontinuity, Brighton cia no dcscribe la realidad. Las teorías son entendidas comci :
(Sussex), Harvester, l!80, p. l4I, subrayado en el original.
instrumentos destinados a relacionar un conjunto de esta',i
, ::':ii
,-.*\
/.\
(+)
\_1
EI- MITO DEL ONIOEN §ENSüRIA.L
DE LOS CoNOCIMIENTo§ clrrur[TICOS
EI esfue,rzo que se riedica a verifi.car d,eLerrnina
opiniories es a veces inversamente proporcional d,'i
fiu.erza de propagación, por:que-' al conside.rarlas'
balmente parecen eviCentes ¡r, sobre todo, polque,
transmitir!e se benefician de Ia autoridad de un
siente r:frmer"o'de autores. Siguienclo a .A.ristóteiés.
a-las niúltiples valiedaCes cle cmpit.ismos, i-r.a-pasai
a ser un lugalr co¡nún cn ia r.l-Ia),orÍa rJe los'círcu
cibntÍficos e.l soste¡rer qrre toclo'conoci¡nientó p
cede cle los sentidos y es resulta,Jo de una allstreccii
.partir
a de los datos sen:iorialer;, E. Mach, uno (
lbs escasos fÍsjcos que se l:an ciecidido a apuntalar
cha tesis con irechos, rs€ vio obligacio, en su' Andlis
de las sensacír.,ne§, a censidera: el conocirniento
co como rrn puro fenomenisn'rü perceptivo (cuyo :
cuerdo ira pesado sobre toda Ia historia clel CÍ
cle Vieua 1' del ernpirisrno 1ógiccl).
Este ¡nito (término con el qu,e. denom!riarnos aq
llas opiniones a las clrre una :rdhesiriir colectiva
masirrdo obligatoria har p:'ir'¿ritc del beneficio de,
rificaciones ¡:i'ecisas) ne l:a dcjado cJe influir
ciertos matenláticos, es clecir, en un ca.ulpo en'
que; sin embargo, la sensar:;ión no tiene nada quÉ:,
cer. Por cjenrnlo, el gran c{'Aiembert ati'i'ouía a
sentidos irr génesis de las n<¡ciones'aritnriticas y
gebraicas, y empezó cc¡nsi,ieranc{c¡ los núnre¡-os
tivos como menos intcligibles que los positivos puesto H. Piéron dice tanrbién que Ia sensación es de natu-
que no corrcsponclen a nada sensible. Tras'lo cual ralez,a sirnbólica pero que nunca alcanz.a el grado de
les concedió una' intelígibiliclad igual argumenrando objetiviclad que crrracteriza a la más scncilla ecuación
ue traducen una r ausencian,l pero sin darsc cuenta ¡rrátemática. Ahora bien, cuanclo sc habla de sífñ6ie
hecho de quc lr parcja prcsencia-auscncia se re- se está apunLanclo a un sistenra cle significaciohes, Io
here a toda la acción y no simplemente a la .sensa- cual supera, desde luego, Ios marcos del puro .idator
Todavía en nuestros días, F. Enriques pretendía (del serrse datunt cIásico).
lxplicar la fc¡r¡nacicin clc Jos divcrsos tipos de geomc- .Así pues, en lo quc sigrre \'üy Ír intenta¡.' recxami"
(métdca, proycctiva, topológica) por la pred<> ner la tesis.; tradicional del origen sc,.nsorial cie los
nancia de talcs o cualcs formas dc scnsaciones collocimientos a la luz de ia psicología contcniporánea
:inestésicas, visua.le.s, etc.). poniendo cle manifiesto sus equfvocos. Admitirernor
Ellg nq obstantc, I:r hipótesis de .un origen senso- qr:e*}p sen.sa-cjp¡ o ie psrgqpción opcran éiéiiiB¡q""n
rI dc nucstro"s conocineientos lleva a paradojas cuyo los estadios clemcntaleg dc fo¡rnación de los qo$o"
signilicativo f:,:r: enr:nciado por M. Planck en ci¡lienlo:ii .r:cro nunca o-pc.t-an .qq)as y lct clue ¡;e ies
,j

ir¡iciacíone.s a t'o lísica: nuestros conbcjrnientos añade rcsrilta pcir io nlenos tan iniporta]-lie c.omü
úcos habrán s¿riid > dc la sensación, pero su progre- eilas en ia ciaboracirSn citacia,
j,coosiste precisar:nente en.liberarse de todo antro-
$rno y, por consiguiente, en alejarse lo rnás
ible del dato se.nsori:¡i. Alirmación de Ia que no- 1. PLniii'LrlriiEl{To iriil- PRünl-EhtA
conchlirfamos que el conocinriento nunca pro-
¡,¡de la sensació:r sola, sinc' de aquello que ia ac- Erripezaremos llam¡rndc: ia atención :;.::brr: una dis.
h-i.áñade a este dato. De tbdas fornlas, Plancl< tinción tcrnrinológica. I-a psicología clásica É**4
pt!',fiel a la o¡:iniq.ir.r rradicional y, en consecuencia, guia la.s ser:sacio¡res, r'ei.e.rid¿.s a ias c'.ralidadc§ (una
l,,l.lgg* a resolver s;u propia paradoja. n:agnitud, la blariclrra, etc.) y ias ¡rerce¡tciones, tre-
i:€io, que J. J. Anrpére decia ya a principios del si-
fcridas a io§ oi:jeto.s (csta ]roja áe ¡:epcl). Se consi-
Xr:r que la sens::.ción es ulr simple sÍmbolo y que delabn po¡.' i,anto quc la. sensaciórr cori'esponclÍa a
ne§, admite¡r s¡.l adecuat;ión a ios objetos son elemsntos prc',,,io.s y Ia pcrccpción a trila sÍntesis se-
o los campesinc,.s (yo dirÍa: corno los l:-iños) que cr:;:clalia. Iin la act.ualid¡rcl, ya no sr rr¿c cll tales
ti;Bn üna necesaria corresilondencia entre el nonr- seilsacio¡tes «clemcntales» 1' llr"cviirs (.:aivo ciesrie el
de Jas cosas y l.as cosas rrornbradas..En uno de punto cle vist¿r f;sicilógico; pcro nada pn:eba que la
rneJores Iitlros recic:ntes sobre Ia sensación,? scns¿lción tir] tantc-r quc l:ü,rcción llsi,-¡lógica corres.
lroncla & un estaclo psicciió¡¡ico clelinido): existen sin
0,.'§obre las opiniones c.e d.'AIerrrbert, r,cr ltf . Mülu¡r, La philt»sophía
"1!i
d'Atc»tbcrl, Payor, P;,rÍs. miis pcrce¡:ciones corno totnlidíid, 1o cr.ial quiere de.
.1,.'H.:l:Í,nox, Lo .fprrsolrlrt guídc dc t,ic, Gallinla rd. cir qu(:1 Iás sensacionc,s sc,n sólo Ios eleli're,ntos estiuc-
lu¡'aclo.s cle aquéllas A este respecto se pl¡edLr cit¿rr unif experie¡rlia
diferencja cre narura reza "y ),a no cstn¡cturantes (y sin
.no ;i';;;;tl,il"pu.,*r).
entre cial. Nos refe¡-imos a la realizeda por lr," ¡l"if+
Cuanclo pcrcibo un' aooo sujefos que, después cte atgunos áir, á" ii;;;'"#ü
dr un rcjado, ln *^rEnii;; ;; 'eo primero el cotor gafas con espejos que i:¡vierten ios oirjeio,
flnatmenre ra casl. .l;;-;";-d-¿: -r:na
chimenea, erc., ), iBo";;;§i
s¡¡l5qda pcrcibo ra de enderezarlos (hásta ur p,.ntó"á!ri
cass !CImo sCcsralrt *
.y ,:"i.r*9niü.fu¡n¡iS,i.rro",,r
-r'::-:""Y1'-: ::1:"^:a¡1cjc{aa
anciar en bicjclera por las cattcs de
qnáliqis dc sus áct¡ll,:s.. Y::i'.:": P: Ias gafas citadas sobre Ia nariz). E,rr^
Innsbruc* ;{jI
pucs, para .§er mÍrs exactos *"j"" OE"
".'J, prro_.,ri*i
mosrración cl* cómo, la percei:ci<in ri;;;i
, Itforigen habrfa que hablar
pcrccptivo y no sensorial -l; de los conoci_ inflüicla por el conjuntc, áe Ia acción, .or,
-dct
micn(os cienrfficc,s, F,ui:sro q"- ro'r"tiüüáii
retroactiva de Ia rnotriciciael sobre ia percc;;ü;:Íji
co.T'¡llucsfo clc r,e¡rsacic,ne_, o_r"_¡"¡jn"l,o .u
I*r:- sin,: Lna .o*por:.irm cle ras craves vjri.uares-l 'rr"iiñlrr*_,n
tnmccliata ¿ic ústas. ,:n1Íl:""tór:
.te§/.iloracu;lnlo
bicn, .ri lr¡.s s;c:,$;rcioncs no son indepenclien_ Pa¡'tiencio Ce estr¡s premisas r¡antos
a ciefencle. lru
,

;)c.r siclnpi-c están r,":, r. Nu e s t r.o. . u,, o. i *L.,",'


rtcs, p*d*nxois prcgun{:ll.nos reuni,Jes en pcrcepcio_ :i *l:;.rr i::,
vien,:n l-. i, o¡il{,
cort.stitr"rys unl re:¡Jid::cl
si la perce¡:ciád ,rior.,-r:l ú.ic¿r,rrir:ntc r:i r..le l¿r u",,....-;i*';,';; "". ií-ii¡
:rutú¡¡o¡la. A Io que Jray quc cepció::, ¡;i¡:: clc la tr¡t¿tiici;tcl. cis l¿r
que pecio cie ra cuar r, acción con reit
depenric
Iltp.*lglr
go
rte lo-Áorri.idad. Et ¡reuróto_
v. Wc:i¿sricker dccfa rgudunr.n;;;-;¿;oá*i.r.i. ;-;;;;.,,,; ,.,"'lllil,i,?,]"'il1§
señatizaci6n, iin efecto, to propió
bo una casa, no veo luta imagen
que
f:fl!:.de
inteligencia *rr e.s contci:J:lar-, oino' á; ü,:il
ojp, ¿¡ contrÍtrio, \,co un sólici<¡ en me entra en el "iri,.,rIr*"*'iill
Irár". Con Io cual prc:tc¡rdÍa il,.lrrrrr"su el que pueclo en_ i-T.._*".rnisrnc, es eser.¡cialnrentc opüi-atorio. Á;;r;,
oCestaltkreis, (opuest.o ai cencepto dc
sirnple concepto cle oss5-
blén, coü o I o, cr1, *,.o.i;r;;';;;; l, ;í
teriorizaclas
_ __-.eqqs.§ ,y' L\rr.rr
L¡/uu,_las gn
:;' I:;;;illiri$
taltr), clestinadc¡ a sul.,ra),ar la acción . .r coorclirtaclas $trucl rr r:... deJ
en eestruclura..: Ápt ¡^-.rlii.:i
donrr,ii
(re'ersibles, etc:.), si .,,* .'il[i,'-.T}..,iiln"X:í*i
mtrtriciclacl sobre ia '::eicepción que recíproca cle la ]Yrq
*.t* ,'f*.;;- v}.er6tL(r¡tu Cic
:;c qrriere ,j..,,:-;;1oY.6.:riii
pa.ña a ]a acció"
i* p*r."p.i0,.,
siemprc acorn-
es convenienic";;;;*,,,j'
;; Ia rntellgencii:i hurnana;,,,.1
dad' acr':ión csla .I.. ,oUre Ia n:otrici- partir
HqrL¡r cle
L¡\: Ia ¿rcClL)I)
¡ct ,r,,Ir**
¿rcció, rfltsma------ ,,;;;;.,üi#
iu.o¡rte Percepción §in más. ) Il.g
), ':Y YY
dg,;lali,
se consider.ú exclusiv;t -úrti'ra'q"* nrucrro tiemirc:
(¡iodelo sinrplista del «arco §iempre que operanros sobre r:1 r,r'Lrjeto j¿r
reflcjo,). En el rnism, erpiriir,, esta*ort'i
V. iil;;; ,I1""*r, ra mismi rnancra que el or*ont,i
rtro§ ha, insistido sc,br* ur., p.incipio
:ia" que'tiene én cuerrta estas ;i; í.;;;;."_ ::":j?:':Tl:
mo sóto reac"iona !o* ante el nredio
ffiT;il;,ll*"TT; ¡
¡nis¡nas retroacciones sentido má5 3¡¡¡1¡rio crer tór:mir"ro).. I-Ia,'
ie Ia motricidad sobr.e lu p....pción. .
.

tr*]lsf()rmar et objeto u .o,.,o.*.. ú" -;";;;


dos nloclos ¿e .
,$,.
¿"
{,.g.,$ificar sus ¡rosiciones;'.su , ,ffir*
t
' E: sus movirri"riioi ,,f
4-qq!r, conro
't.iri.inlc¡rrac.:d¡
I,T-l d-" p.Ír rr e.s . Il¡ ,Ar;te nig.$.aags para
r.v.sqqLr l./drd explorar
exl-).torar su :taturaiezra:
:taturajeza: ln rnniÁ- ,",,1
inüi'; i,
.cOf¡t¡¿;uración cstru(.turar,:a,
(:;.)
e
ffi I
!¡ lIiHi'li;lt* ;,",§ii;?i*l$ que IIermáremos ofísicai,. E,l ctro consistees l'a acción
.:n enrique-

89
ql obj,etq con propiedad.es o relaciónes nuevas ralización de las acciones ¡:ris¡na.s y no de su percalí*'-
cónien'an sus propierJ.ades o relacióires áirterio- ción; como tal, cl csquema no es perceptible en ai:_
pcro cómpletánciolas rneáiante sistemás áe clasi- soluto.
§.39i gr_r gs, o rde-nac io ne st coldespondeucias, enumera- Poclemos plantcarnos el 1:roi:lema en los siguieates
ióri"s o *ódidrs, ci,::.: son iás aációr:es quó'ttarirare- ténninos: la noción ¿es más i-ica <t mái pobre que ia
os lógico-matcm.fiti,:as.3 E,i origen de nuástros cono- percepcirin correspo¡rcliente? por ejemplo: la noción
cntos cientflicos re.sidc, por tanto, en estos dos de espacio ¿es r:rás rica o n:ás pobrc que ia percep
de acciones ], rio solamente en las peicepciones ción del espacio? En Ia medicla en que Ia noción
üe Ié3 sirven dc sefialización. procéciiera de le jlercepción sin más debeda ser más
*,Aun así, al defcniler quc el origen de los'conoci- pobre, pue§to que en e§e caso se construi¡-ia soiame¡r-
tos nunc:r está en la percepción sin más, sino te por abstracción a partir cie lo dacio y mcdlanl.e
deriva dc Ia totalidad de la acción cuyo esque' gcneralización; gencraiiz-ación quc, siempre en el mis-
tismo engloba la pcrcel:ción superándola, topare- r'¡:ro suiluesto, nada nrás consistina en retcner las par-
sin lugar a duila.s con la objeción siguiente: la tes cornunes de los datos y abstrar:rlas de los otros, lc¡
u misrna sólo nos es cclnocicla gracias a una cu;rl r":,:n(iucir.í;¡. a ir¿rcer del c¿r::cci)to un csi.lucrlir ciil-
varicd ad. clc p'.:rccpr:ion es denomi s propi o-¡'ra c1a
prrbrc.cicir: de lrr pcrcii:ido. Fcie, en reelicllrc.l, J.:t nociún
(mientras quc los resultados externos de la es mr{l; ric;i clue la pcrce¡tcirlu ¡, e¡r ei c¿iso tlel espacio
- serán registr;rdos por vÍa exteroceptiva). ?or
es incluso infi¡ritafiente rsás ricil que lo percibido;
Io, si clasifico u ordeno objetos con manipula- y cstr: por dos razones cornplcmeniarias. Le prinrera *-
efectiva sentirc: mis rnouimientos gracias a un e.s que la noción no consisle simplem"nt* t.uy'.r-
fiebo Ae percepciorles propíoeeptivas ), constataré cir el dato perceptivo, siilo tantbiúit (3r, co;:"r,frecue§*
iüs efCctos inatcrial:s por las vÍas visudl c¡ táctil ha: cia, clc rlanera csencial) en cor¡.egirlo, en sustitüir,
[ualss. por ejümplc, lil anisotropia del canlpo visual por una
,.Ello'no obsiantc, lo irnportante para el ionocimien- isotro¡rÍa perfccta, eJ corrlinuo apro.r:imaíivo de la
no es la serie de tales acci'cnes conside¡:adas ais- perce¡-rsi$n po¡'un continno prcciso (puesto que en el
te, sino eI *esquema» d.e dichas acciones, o primero, como han mostr-ado Henri p,iincarú y
Io que en ellas es gener¿il y puede tra.nsponerse \\¡. Kóhler, insistien¿io en 'eilo cada uno dr:sde su
una situeción a ctra (por ejemplo."un esquema de punto de rristá, tenemos qll,.] A* B, B: C, pero
n o un esquernir de reunión, etc.). Y el esquema A < C), los per:alelismos groseros de la pcrcepción {
sale de Ia perce¡::cióD, sea propioceptirra o de otrc:
; el esquema es; el .resultadc¡ directo de la gene- 4.- Decirnos.los paralclislr¡os, (cn ¡:lr-rr;:!) porquc, nr" *l
paralc-li.:rno perccptivti ordinario es inducablcmcnre cuclidiano, "uon¿o
es sal¡ido
Vi¡rsc L. AmsrEL. \f. lvl,r:"s, A. lvto¡u y J. flrcrr, .'Lcs liaisons ana- cl matcnrático y psicólogo Lu¡¡g¡unc ii¿ clescubicno una cstructura
qr..rc
ct slr¡théliqucs dans !cs coirrportcments du sujet,, É.tttdcs d'épis- Iobarschcvskiana cn el espacio c!c Ia vÍsión con convergencia, dcsaparición
c..génétique, r'ol. 11,¡, cap. III, PüF, Parfs, I95?. y tnovimicntos lit¡res dc la nrir¡da. El ¡rrufcscr A. Jóxcx¡;rap.c,'dc Lon-
clrcs, hn rccogido cstc prolrlcmr er¡ nircstro ccntro dc I:pisicrnologia

o1
por un par¿rlelisnlü ad ínfinítunt; etc, kr séguncla rar dicha forrir¿lc.ión. Existc, por cjcmplo, un nivel,i
rón (que explica Ja primcra) consiste en que Ia ne cual el nifio no adnrite que .,1
ción cs más rica i{racias a todo Io quc Ia acción ha y necesita Lrn control perceptivo =C,-si á .= B y'g
para adm'ítii:
añadiclo a la percc:pción: el espacio nocional es csen- transirividad. Lo r¡tismo ecurre con la propiédgd
cialrncnte operatorio, introcluce sistemas dc trans, mutati\.? y esencialntente ion cl hecho á. qre ta sü
formaciones nilí rl,lncle ta percepción se contenrta con de i.s elenrc,tos de una serie es inclepenciente deli
estrtr<;turEs cst/rtic:lts ¡:obres. Pues bien, estas tr¿rns- dc¡: de enumcración. AsÍ pues, al principio sóloi
iormacioncs ticncn su or-igen en las acciones (que coltc! \..u¡r
vv¡¡\/ur. con ¡.'
Ia ayuda
(¡yuLra «le ia gxll3flencta
oe !!1 ex1:criencia algO que (a
algo qUe (h p!
p
r:ngloban las ¡rcrc*psioncs señaliz¿doras) y no en di- tir del nivel operatorio de ios ? a ios B ános¡ ai
chas pcrcc¡rcionc.s como tales. Por eso Ia noción es recerá come evidente por nece.sidacl cleductiva:' .ifi
irreductit¡l* a sirr:ples abstracciones y generalizacic¡- Pnr consigiriente, se pocirÍa.ttegn, *;;i-I
ncs a Farti¡: ciel r:lato pr:rceptivo. Al contrario, pre- lembert y lir:riques que las prc,pias maternáticas :;, tuó
cecJe es*rrcial¡ncrit r de construcciones (mediante ge- salidr-r cle Ia percepción, si sc pi.nru que toda exp
ncrali;:¿rcio¡')es L:cr¡,:;tt'u,ctiyas y no sólo por abstracciórr riencia consiste en urxa lr:cl¡,rra .¡rc,,.cpti.,,,a de las pii
cic pllrtcr cr:n1un*r;) r,,inculad¡rs clcsde un'principio a piecierCc..; fÍsica¡; clel oi:jetc. $iii e¡i¡bargü, exisie¡¡
ln uccián ¡:'lis;nn, tipos dc er:pcricncias, tal vez r¡nidas sic:tpr-c de
Estc r:os }ieva :rl problerna clel carácter especÍfico cho, perc fíicilnente riisociarbJcs en ei anáiisis:i,,
dc ios corr(.|cimientos lógico-rnatenráticos en general. experiencia qlle llarnaremés físic¡r ]i la e:*perient
1ógico-n:atenL¿itica, ?n)
ra
La expcrie::rcia fÍsica rr:sponclc rr jü coflc-o"ió/¡1i{
Z. L.t FoR\{/,crdN rrE los CONOCIL{IEliT0S sica cle Ia e:ii>eriencia; colrsiste eil ir(:tLlut-. sobre obii
tr.rÍüI cr:-trr,rrr¡,r/.'¡ l cos to.1 para e)lt.r'aer rr¡t conocilrrir:r:ro 1>or a.bstracciónfá
partir clc es,tos mis¡*os objeto:;. Fcrr. eje,lplo, cuanát
Cornu sobre estl punto ya he h¿rblado bastante en eI niño i*i'alita sólictos aclr¡iel ti: por expcriencia fÍii
CItrrr$ ocnsienes,t ',¡oy a limitarme a resumir los re- ca la Civersiclaci de los peso.s, s;u r-elación con el vo
sult.aclos crsencialc s. Irrrnen u ig,iutt Censid;rd, lÍr ,,,ili:e.clad clc Ias densiáa
A lii hc'r¿t cle e:;tudiar I¿t gónesis
de Ias nociones cles, r:tc. ".,,.'
Iógicas y n:atem¿ticas eR el niño resulta obligaclo Por ei coli irario, la experiencia iógico-matemá
reconocer que }a experiencia es indi.spensable para consiste en ':iper'ar sobri: k:s cbjetos pero sacant
conc¡cimientüs a partir de Ia lcció¡r y r:o a partir dB:
GcnCtica clc Cínebra. Viirsc cl forcic,rlc V de los Étud¿s d'épis!únologie los objetos n:ismos. En este caso, la acción empie-'
girrit:rilrr, PUF. Peifs, I1;5?. IFi tltulo dcl rrabajo de .{. Joxcxxesnr cs
Géqatétrie tt pt.rccptien, (T.).1 za por co¡:ferir a los oLjetos cerr.írcteres quB no poseÍan
V{ase Corlp/es re '¡dus clu Cotgrés de Plútosopttic c!¿s scic¡rce¡
- IZuriclt,l95,l, por sÍ n:ismos (mantenie:ncio ad.elnás sus anteriores
de r,c¡l. I, .Jl"rrrosds gCnéraux,, J. puc¡z, 'Lcs grundcs ligr:cs
ttt l' 4pi st lutal{)§ic ténCtiQue. prr:piedacles) 1, la expc:¡.icnci¿r se ¡:efiere al Iigamen
ti2
93;
'entre los caractcres introclucidos por la acción.en er propia de un organisrno que for¡na parre rlcl universo
:.:!j.,9 (y no.a las arrreritt,rcs propiecfades dc éste).,Es
ricn cste sentido en er que er conocirr¡ientc §e extrae físico se compre¡rde tambiin por. qué csta.s conibi-
nacíones operatorias ilimitadas se anticipan .Lan a me-
, 1"-lu-acció¡:
:É:," .
__-
-__.*..
ev¡¿¡v tll
corno r.f,r y
J r:o u(j ras
rrL, clc las propir:dades físicas
l)ropl(:oaoes t¡s¡cas nucio a. Ia ex¡reriencia y por qui, arrunJo *,"fr*o
oet objcto. En ci ca:r;o de ias reraciánei e'tre ra suma
f". a encontrarlie, hay acuerclo *ntl-e las propiedacles dei
i¡:y !t orden de unos cantos en¡.rmc¡.ados por el nilio, re-
eviclenre que ,r:i o¡-cien ha sicl«¡ introducido por
objeto y.ias o¡:er¿rciones de) sujeto.
ili,illli
; la acción en Jos cantos (puestos cn ltilera o en círcu-
l?l: y Io n:ismo ocur.rc cr-.n Ia .suna (<tcbicla. a la acti-
" 3. Ln ron¡.1¡tclót.t uu Los coNoür[*]l]tr0l; r,fstcos
.;lvidaa de coaligar o de rcunir). ["o quc el sujeto cles- O fXPERi¡\fti|{TALES
,:cubre entonces no es una propiedad fÍsica de los
i, cantos, sino una rciación de inclependencia eutrc l¿rs
E,n car:nbio, el conocirnienl* fi.,;ico, c) r:i;iicrimental
;$i$os acc-iones dc rct:,¡rión y clc orcienació,. Cierto es en general (i;:cluicia en éi lu quc¡rlr(::tria clei rnurido
Quc ha hsbicio acl¡.'in¡i:; unñ expericr¡cia fÍsica que pro- real), prccecle ¡:ar. abstracció¡r a 1:artir cle jas propie-
li:ura los c*r¡oi:i¡¡ijr-'rit.r:; sigr.rienre.s: quc ca,.la uno clc clilde:r clel objelo coj]lo lal. Asi
i:rii.js, j:ii-v ri,,., ,,,}#i--.
iilOs Cantos s;¿: ]te (:i-¡.)1iril-r,.ido clurantt: I¿r opei-ación -y qr-rr: el papcl rici clairi pcrce¡:tiv. :i,_:1.;,i
quc §on orclcn;!bl,:5 v citl.tn:er¿iblcs, etc. pe..¡.-o la cx_ fiii.s.ii,,po;..Lairt,,l
en efi te segrrntlo canlilo. I:'(lr..l *.-ll cstr; e ri *.:,cnciiij-*
a.
riencia no sq h;i refcrii;lo a este asjpect() fÍsico: se t'
fi
queda el hechr; de q,c cll le i;r-lrctica i:L .1;e;:cepcióu
r§-¡.¡r{1u¡¡t L,i§
,r.lrataba clc 5..1(.},it;-
s¿bc;" sl si til
ia §ui¡ia
sui¡til. ee.-.. ciepcnclientc o no Cel §
nunori opera :;cla: únicarnentc ilirsiriu.ll;-inios l;l
r¡¡dcn seguiclo
§cu\uau(.} )"
3', urc
brc
sr..il:rc csle pl:ntü ¡:rcciso, la expe-
c:;le ¡:ro-
rii"-.,".-*¡¡ 5(.¡ c.s
I

I
E
picia.i ciel oi.lir:to cuando aliaCiint.s llgr_, a Ia »c:-cllr-
||Iiencia es autdnI ic¿rn:i:nt.r: Iógico-mirte¡nirtica
l en tantt: I ciirn, Y estc ...aigo» qrre añiitli¡.:1,:s c,.;, 1:it-e..'is;ilir,e,ts,
¡e.ficre a )as pr.opias a¿:cio¡rcs cie lcr:s sujetos y f
s

l1o
no al:uI.ru-l{1
c¡¡ ob_icto
¡; u;r coitjrrnto cit: trlar.co.s )ógicr:-r;ratcl_,i¡itic.s qur scrr
t(] er)
elt cuÍt,1to
ctlÍ] llto t¿Il.
t¿ri.
,..,if.!,y,
los_ qire h¿rce:¡ ¡:osibic Ja.s lec:tr¡r.e.s
$iti.1tta es Ia cause rie qqs, eri ull momento dado, las I
. En efecto, rs fundan:entai para itilcstl"üs ¡;rr.cr:;:ii,.,es.
!ó¡¡ico-matr:ur¿lric¿ls del sujcto p,.,e.i^n p"rr_
l propósi-
,:::i:"": ir dc.su
¡
l!
I fos recorciar elrre si bien e:ristr: ur¡. conocii:rienr-o rógi-
aplicar..i<in a *bjct.s firi.oi e interiori r
'i.

co-¡r'lfiternáticc p*ror en i.ilntcr qr:c ciesligacic, ci,e tocia


árse en
en '
operacion,.:s
f,r:" con orl:as paiabras, nriirl:ipr:lables sir¡rbiriicarr,*,r,...
i)
Í¡
f
t ex¡:ericncia, ci] c.¡mI:io no existe cr;¡:ocinrir,r-Lü c.\i:)c-
?j"n: é.r* es la ¡:azón cl,i eü€, s. rintental que pueda scr caliñcaclo coijro ,jJjuro)) en.
cierro irir.et, exisran una tógic^ *nu ,,¡i¡
lT_,1:.9,:
tpmática ""qy.or- i:ara l:rs qu'e Ia ex¡:eriencia)i tan*,ü que des)igado de toda or¿qanización lágico_rÍr¿i-
deja ternática. La experieacia sóro §* rrace ¿:ccesibre a
tener sentido. P(,r eso, ade¡¡{s,, la liigica y l:,
|,S ina- par-ti]' de los illarcos lógic+mateiriñticos cue cr:nsi§-
§,..lnati"1
pura ¡;ueclr:, sup*)rar indeñniciamente la
:nencia al no est¿.rr. liniitaclas por ias prilpieciades e>:- len en clasihcaciones, orcle';rciones, coa:e.§poi.r cenci,Ls,
f'utrci<.¡nes, etc. La tnisnr¿r lccf.ui-¡l perccpiti a
¡icas {el objeto. P,:rt¡ cr..¡rno t" á..iOn humana es la
sup,.l n-e,._ -
conro verentos más adelalitc, Irr irllcri,enc:irj:.1 cLc tafr:s

()(
marcos o de sus esi)oz.os más r: mcnos incli.fercncia-
dos. En el otro extrrtrno. ia física, en tanto que cien. laf<¡r¡-n;lcicrn clr: estas nociq'¡lss cn ei .¡rif¡o, t*outtien-ii:i
cia de la experienci¡,r nrás evoluciona<la, en *no p"r- do asÍ a urla espucic de e¡ntr¡:ir¡lc.rgÍa mental (quc pue-.:
"
pctua asimiiaciórr del dato cxp*rirnental a estructuras de prestar lo.s inismos servicios que los -1!
que el estú-,]i
Itigico-riaterná{,icas, l)ur:sto quc cl re6namiento ¡nisrnc.r dio cte la ontoúólresis or-gáni,.:a ha prestacio. a la ana-l ,

dc la cxpcriencia csrÍ c¡r fui.¡ción dc los insrruntentos tomÍa comparada). , ,.,.


lÓgico-maternjticos r,rtilizatjos a titulo cle intermcclia.
Vamos, pucs, a dar algur:os cjc:npli:s cle posibles
investigacio¡:c.s ::obre l¿rs reiacicries c¡:trc lrr forma.',
rios necesarios entlc cl sujeto y lod objctos a al. ción dr: una noción y ias rc.acciones pcrceirtivas co-..
carlzar,
' Existe por urnto rrna posible solución l'respondientes, de.ianüo para r:i aparlaclo a. el análi--
cle ia p,ara. sis de los mccar:ismos cie l¿l ¡:ercepci<ln u:isma e¡r|
doja de PLanck: si c,l conocimiento físico, qlte pare- tanto clue yf¡g¡.rlacla a Ia acción"
cíi.r p*rt,ir cle Ia scnslciórr, §e va alejando de ella cacla
Los estuclios realizarir¡s hacc aitos so]:re las rcla-
t'c.z r:rá§, {:s lJorque dc hecho nunca procede de ia
ciones entre de,Í.erlr:inaclas llcciones y .las percepcÍo-
scr:sación ni {ampct.;o clc la pcrcepción puras, sino
r¡r"it rir;,ri* rrl ii:-jn;ii:ir.r .tup+:re ur.jr,r esqlrenli¡ii:r;ici,j:r §
nes corr*s¡ionr.iicntes, iros han per-nritido por.ei e¡.
ll clírl-Cl r..1 l,ti'.i¡ii,.:;'r:; (1il:,;Iltl:,..!,-iIli.i; r;r:tififr]cjaS aiJC
i--j{.1.i-iÓ
ló¡;ico-rrater::liiir.a ck.: las percei:ciones, así corrro c1.: t.
t.
se alr:jll'r C,itsiid,.:l'¡rbli:incnie dc li.r clrrr: rrrrc,, »od¡.ia es.
Ias acciones *jcrcicias sobrc los objctor;; teni.encio cr¡ I¡
ir perar nl I:o:;iuliil' ilil¿t sir:rpic fiiiación rlc 1;r noción a
cuenttl rlut) su puntc, de. particla está en dicira esque- il
li partii" cle la ;:rcr:ccpción.
,

ül"ti:rrciún, rcsr:lta risturÍli que las agregi.rcir:ncs Jirgi- ,'l


I' TOn:r,,¡llC,:: cotito 1;r'iuiCt' e.j ,_,nr¡llr; Cl clC laS L.i:laCiOneS
.c.}§Iüterrlilticas vayírn cobrancic ¡rlayot' irnpOi'i;tncia I.

a :nedicla gr¡c $c: cieslrl"clllan ics conocilniento físicos


;
h
t. '
entre ci espl,,cio proyecti',ro nocit.»ilrl .,, Ia 1le:'ceSlción
y que, g,t:r colrsiguic:irle, istos sc rilejen cada vcz. nrás L
ii
t,' delasn.iagtlittll}cspi.ovecii\'a!:.Pr,,t'IcQui:j}aCe¿..l
í
f pfimcrO C:c ci:;tOs; clOs ¡.iunl.o..j (.r:j co.sr¿ Sabir:ja e:l C¿r-
de Ia p<:r*e¡:ción cc,mü t&1.
De tqclas Iorma$, pirra deurostrar ,i ráictc¡' ilrrrl;o rlLtc, por. io ¡i,;n,....t-ril, tiene crr cl ¡:iño
l¿.rlcs hi¡:óicsi:; larep:.eselrtecjd¡¡rjelaI)cisI)cC:l.i\,il.].)r-ritér:.:linornc-
:

es nncesürio rastrea;:' e} or-igen irsiccllógico de ias nr:- ir


I clio la »erspóctirra no aparece espontáneanrr:nte en el t
cioncs rerrr]CInlándon,:s hasta sus estaclios precientiti- t'
cos. Efectivanrente, Ias nociones fr-rndamentales cic i dibujo lrasta los 9 o 10 ¡rncis. Cdan(io se le p.resenta
espacio fÍsico, ti.enr¡:,::, vciociciad, cau.salidacl, etc., pr,c_
L

l) un ob;eto ti:;ual (un J:t¡:i::, r-rn re1oj, ctc.) en .ji!crcntes


ii
ced.en de u¡r senticlr¡ cornún rnuy ante¡.ior a $u sr.g:r- .t1 ¡:osicir:r::s con i;i consigna <le que elija er:,ire dos o ;
ni¿ación científi,ca. ]:' co¡rro la prelrisr.oria intelectuar
t,
i1 tres ciii:ujo.s cl quc corrcs¡:onde :nás exacl.Íur¡ente a
de las socieElades hulnenas puedi:. coütisuar :;iónclonos f
p
la persnrctivai elegida, il$ i¡,i-. .obticnen es;t.i:inacioncs
correct;ts iia.sta ios 7 u $ añcs, y lo misnlo ():urrs pol-
desceinocid;: para sic:it,p¡s, es inclispe¡:sable estr-rcliar il
t:
t.
lo gcncral colr l;i ccmprensión dc las ljneas de fugn.
;ó.. I:n ci :e¡¡t!ctC ¡lc un¡ ()rgxni¿ijción dc ]t¡ d¡dr¡. n.,crcccl a ii Cuandcr, en pr:Lr.§üncia <Je un rnacjz-r¡ cle tres r;tsntaña¡,--- ..
vcnción dc I c5c¡trcn:i5. E(.rll.)r¡1()lO¡-es, ll urtcr. i,
dc c¡rrlrln (cr.rn tiQ cm clc aitur¿'r \,L n]: rle super'ficie
t;
QR 1..

U/
7. *.L-¡¡sn¡,lo¡.olf ¡
.llr I

|iotal. de base), se ¡:ride al niño que reconst*rya las pues, ante le paradójica sitrracii¡n siguicntc: I;r r.¡o-
relaciones izquierda-Jcrecha y clelantcdetrás de acuer-
,;:do con Ios cuatro principalcs puntos de vísta posiblcs
ción cic espacio lrro¡,sg¡iyo sólo cmpicz¡r , orgunizar-
(puntos carclinales), se con:itate quc a los pcqucños se en el nivel en que la pcrcepción clc ias rrragnitr.r-
des ¡:ro1,er:tivas sc cleteriora, mientras qur: cn I<;s lri-
iiles cuesta un Sr?rt ,rtsfuer¿o ]ibcrarsc de su- pcrspec- veles el1 quc ista alcanza su situación mejor (por
.iiva cgocénirica rv r;uc el prr:blcrna sólo sc resuelve. clesgracia üo se la puccle elevsrr rnilcho clebicio a ias
;Cntre lo.s 9 i.. lc¡s l0 a¡ios. En una palabra: la noción dificultadcs cle comprc¡¡l;ión vc¡'bal de la c()nsig¡.1¿r j
como tal no h:rce $u: apar.ición hasta los 7 u I años y !a noci<ilr no exi-stc. AJrr¡ra bie¡r, si la nr:citin fuer¡r
;gta.1cr1c alcanz;r :;rr punro rJc equilibrio hacia los
b l0 arios.
abstraícla de Ia percepciór¡ sin rnás, clebería conlri---
¿'
tuirse jrtstamente en el ¡rrr¡nrento ci1 c¡ue la pcr/"p-
4;§i clc uhf pesanror; al ür,arztcn dc la perce¡:ción del ción proyec[ii,a es r¡rcjor y, por consigiricnte, deliqríar
,P§lracio proycct.ivo, {:lllc hcmos cstudi!¡do juntamentc ser :'¡:lucho rnás prücoz d¿: lo quü cs en rcaliciaci. De
tor¡ Larnlxrr:i*r,? hu:icndo coroparar las n:.a6p'ritudes hechr.l, Ia noción de espacio prcil'ectivo ii-r:plica rnu-
gparc¡¡tcs <le r:na c¿'.ii;.r elc 10 cm a 1nr clel sujeto y cho ii:ás que una ai';str;rcción a pariir rle la.s percep-
Á+! '+
.l in clel slrjeto (r1ue. i:)oi tantc)
.

"clc utra c:;:íia i.arilrirL:: a ciol;csl ileva rol::;iilo una cc,o:'djnacion rj¡; jos pi"itlrus
{gbel.i icnr:r .iü c:iir }}}r;l scr ¿:stirnacla proycctlvarnen- de vista y, er: conscclr::Lcj¿r, rill nltr-'.anismr; i:pcratoric;
irif¡ual a la prinrc:.'a), r:r:s (lncontr21reilto.s rinte un cle tt'¡:lg[or¡n::r.'ión t;il,icho l;i;i:; cr.i¡l'i,!:1r.jrr rirrr Ia:; p:c;"-
¡i
Sqdto srttli' rlifcrcl:c. Lo:; niÍios pccueños ironen Ce v
¡l cepciones qu{: cort'cspo¡:¿1e¡: il cacia uno cie estü.s
iesto iln¡! grau ¿lificuliad a Ia hora C* compren- Ii
í. punios cle t,jsta considcr¿rdos ¿lisIlrlíri.rtcn1il. ,¿isí pui.'s,
lo quc se lcr piiir: (y se precisa uua injciación cori t,
la nocjón cilaia ¡rrocedc de un rnarco ici¡lico-nrati:-
tura sobre un c¡:jl;ral plano par¿r que se den cuen- ¡náticr"; impur.sto a lar; perr'.*¡r*ioilL.s i: :ro sirr:plcil-tcr:r-
de que sr: trata sólo dr: {a rnagnitud apar-ente J¡ te rie las 1:*rcr.p*ioilcri inislnas.
rnrr¡Inítucl reai), p".o c.rárrdr¡ lo han com- Ex;.:.,rTrini:¡no:i aho¡'í.1 ei s;r:¿:lrndo r:.ie::lp!r-.'. (ir.re rie iii-
'de,'Ia.
i<Io d¿in estim.:rcioncs pcrc:eptivas mucho nrejo- fiere a la cc,nS,*r',,aciún d.e las Jr:ngitirde¡-. AcaF:anrt:s
que los niños rn.lyores e incluso que los adultos,
. cl':: cr¡nslatal qus exi¡;teil «';oI)sl.ai1üias l:)ui"cüDtiva.S»
t excepci<ii1 de lc'rl'; rlii:ujantcs. Dicho con otras pa- t¿rles conir.r l¿t qi.¡c c¿,.:'í¡r:te ri?.ü Ia pcrci'1:ción rlc l;r:,
¡aq: micnirúls clu( c<.,n el clesarrollcr rnei:tal )a rn;rg- n:a'-lnilucles r¿iilc:i {}, ¡ic¡ t}i'(.¡_l,i:cti.,,a§), }, qilc: sori bíi§-
real («constarcia pcrceptiva de Ia rnagnituclr¡ talrte prccoc{:.§. Fcll oti'a paif.e, i::.tis[c;¡ «i"rücione.s {ic"..
lomina cacla vez ri:ás sr_¡bre Ia magnitucl a¡rar.ente, F conservAciono que sol': ntuciro r:r.ás t;r:'¿ií¿rs (a ¡:aitir
¡iinos pequefios son rnás apt;; que ios aclultos de los 7 u I ai1<,;si. Un r-:;eilririo f/rcii de esi.ririiar cs ei
$
evaluar esta irlr.inra. de la coilscrl.'ació¡r de In Iun¡litr-lr! cie u.l'l mór,i1 cil
i;
§l caso del p: imer ejenrplo nos ericonlramos, r:atio dc des¡-riiz¿rn:iei'rto, Sc
":oloc¿r
anl(, rl njííc¡ cios
:J. :'I¡ra¡r .r, I.f . LAr.lliril;:,'ri,ri, r L;: compartr:son dcs gr-airduu:s piojcc. rcglas SUprlrpriü"stas cie i5 clrt i, :rr-t ies hi.ri,:',: i.otlstat,r.i'
.cfi,qz .l'cnfant ct cher. I'aciulrc,, Arch. de ?sycho!., Rectr. XI l. su i¡:;uraldad r:1.; lr¡ngitucl ¡:u,r' co¡rgr-r:crrcil. )-,trcgo sr:
desplaza una dc ellas 7 u 8 centírnetros dejando un tervicne en la pr(rscntnción dc Ias iinees ,,'.orrtprt{
cspacio entre ar¡rbas y .sr.: prcglrnta.al niño li lo lor¡-, dificultn r.:¿rclu vcz. ¡:rás al niñr¡ cuanto r)1ir¡,Jr ci, lti
qitu-d de la regla dr:splazada si6re siendo igual a Ia peclrreños tr)el'fltanecen indiferc¡:tcs ante esto'al
dc Ia otra. ¡1 los i aiios solan¡ente el 15 % cle los tener t¡na r.:slnrcturación espacial suñcicntc,.y cli'áll
suje tos admitc Ia cr:,nsen'aciún, porque a esa edad el su rnc.io' c.stin:ac;ión cle Ias longitucles, Ta¡nbién e:
rti¡1o csrima la longitud por cl punto a que llega cste ejenrplr: vcntos quc no liiri¡, relación entre.,Ii
cl oi:jeto: la r.c6gla clcsplazacla e.s consiclerada como noción.(conscn'nción de Ia lr:rrgitr"rcl cr¡ caso de deii
rnás larga ooporf¡ue reL¡Í¡sa» a la otra, sin que el srr- l¡laz¿:r,¡icnto) y.);r pcrccpcii:n corl e§lli;nclici: te (estifa&
t'
icto tenga er) cuenta ct rct¡a.:arnicnto rccÍproco _-v :
ción de las Iongitudps corr rc:biirsirnrient<-r por lbi
con(r;¡rio* q¡"¡* s(: Ilroduce por el otro extrerno. A lo.s ¡
F trerr:ns): en el ca.so c1e Ia ¡rc.¡cióti, loi; pequeños 3.uz!
{J ;liir¡s s:} ?ü g6 d* lg,ri sujctr:l; acli:rite¡: la consetl,a- P
¡: (por abstracción 1' cn virtud cic,l prc<Ionrinio cie
r,
cirln .1' r los il lo ;:¿trnitc$ ya cl 100 %: el raz_ona- l:
co¡rsideracioilcs topológicas sol:rr: lers 1:reocr,pacione'§
¡f iic¡ito tr:'p<;lri¡.:icr¡ f rr¡"¡clrreio cn el orden de los pur-jtos r::étrica.s) ítlicail'lcnte en fu:¡:c;ión cle un soio rebasd
tlc ile¡.larJ; l¡.: "lir.tri¡ $ustituid() por una evaluacirin ntietrto, lniciitrÍl.s que en cl ca:;<¡ cie la ;;cr-r.:epción ldi
rllI'ttti!-:i
r-¡\.rF.vÉ.
nusrilüs l:iiicr; r,cll ios cios rcb;is¿r¡.ilic.i-ltos sin que pri
i:rt,i:;t.'nl{}ri:I,1.¡tt{),;c iLiantea ia prcgunta de si ia e.s- ellcrs c¡¡n::tiiu¡.ir otrstácrrlo ;rlr,L.:lro i;l in«:j;nación qúó
tir::::,"ciúi: ¡-¡:etr-ic¡, c)n co¡tsert,ació¡r cic Ia lon¡¡itucl, <lifici.rltr r:.1 .ji-itcio dr: jcs lrjíii,c,i-c-,; '::;
tst;i vi¡:cr.¡!acla o n,,) ít consideraciones pcrqep¿ivas lJrr terce:: e3eilplc )tos.ntostl.ar.;i. cir c,irntbio, unai
{¡li:rei:¡'r*irir: cic! inttt'i,lio e.ntl'e Ioi; extrenros, por opo* clara cenr,rcliqeilciir e¡:tre iir lrr;e irilr *,, ii:. i:ei.cepción,
sic:tin clc ústos:, eic,). Para rcsponder a ella he r¡re- pclo en c:l s;nticlr¡ c!e i:na nr:cirj¡i rccín¡-i.,ca y no cié
'ciicio c¿:rr: S, T'aponi:r s Ia estimación percepti\¡a cie
dirección ririi¿e.. I{c,s; ¡-cf,c¡-inrr..:; a los sist.:¡rras de
sli.iirtü:i r.lc 5, E ]' l L ariros, asi. oorno cle adultos situa- cOorcien¿iC.as lratu¡-ale:s (ho¡-i;ir'::ir.rl .,.'.,r.il-tir::il) o siS.,1
dc":§ tüa}o.§ ellc¡s entc dos trazos; irorizontales cle 6 cm
tern¿i:i cle t'eic¡.cnci;t cu\'Íi nr.:gi¡1,, itc:li-,;:rn.l(-,s Ciu entfe- l
se¡:nrados 1)0r un .ntcrvalo vatÍo y con despiaza- ltel'¿ pitl¡:ósiio rJe i¡r e.':l;,¡rici.ici;t ¿:.¡1,[.r:i.ior. En lo,t;
t
micrlco recíproco igual a Ia mitad cle IÍ refercntc a l¡ nr::c.iór'I, sc: peclir.:i, cotilo hg:¡ros hecho
i;r l,:rngitucl (cf. los dos trazos ¿rl mar_ I B. Inh,:1clr.r ',r 5;g ntis;n:c,e j)ro\:*]- .l¡i t¡li.;:¡-riación de la
n

pequcñ os cle .,,:"¿:' :H":3j#::"i::ir,ffi j::


;:: I
t
que los niños de B',, 11 años r: jncluso mejores que I
t
F tintas maner'íis, asÍ corno pl-cv,.:,i. I¿r clircci:ión cle una
los adultos. En efec:;o, mientras que con el progreso g'
plomada pt'ó:cinra 'a ¡'.rarer.ics vr'r.lil:::le§, jriclinadas. o
dc la esrrucruracióri rler'espacio siguiendo ias loor- ¡i
I en n:úitiples ¡rlrrnos, Se consti-rf a rntoncc.§ con sor.
de¡radas tio¡-izi;¡rtai .y vertical l;r irrclinación que in- F
presa que las «ilociones» clr Ia hl;;-izont¡l
I 1,, l;r vertical
6. J, l¡rrcrr y S, Trrcru::g., Arclt. de psvcAof., Rcch. X.XXII.
b 9, J. Ptr<;Ur 1, Il. ]xltUt.¡rlln, I-¿ r,:fri.:t:¡ut)i!e¡.t t!c l,csoace chcl l,¿n.
r /arr!. P!ii:. Ir..rfs.
r
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lo0 ! 101
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X["r:$-:":
solamcnte se adquierr:n hacia Ios 9 o l0 años (mlen_ ser caracterizada por la posibilidad cie establecer rc-,
tras que las ¡rosturas correspondientes soa conocidas laciones a clistancias cacla vc¿ mayores cn ei 'espacio
por el aiño desde qrle aprende a andar, etc.); En y en el üempo. Si los niños pequeños de 5 a ó años,.ao ,r

cuanto a la percepción se les maunda¡á comparar las presentau más que una débil estructuración percgp-
Iongitudes de una vertical (constante) y de u¡ra obli- tiva de actierdo con los ejes de coordenad¿s e§
cua (var-iable) en diferentes inclinacionqs.¡o Se cons. les, esto se rlebe simplement.e a clLle se quedan en'ce'-:. ,

tata ahora, igual que antcríorrnente, quc los niños rrados en las fronteras de ia figura y no establece¡r
t pequcÍios dc c:incq a¡los da¡r las mejorcs esti- relaciones entre Ios elementos de ésta y unas refe- ,

I macioncs ds Ia longitucl de los trazos y que, rqutias exieriores cadavez rnás alejadas. Ahor-a Üie¡i,,:.
cn cambio. c','alúan muy mal la inclinación un sistema de coordenaclas supone precisamente'eI'
,I (Por cogrparar:ión de las ñguras entre ellas); citado establecimiento de relaciones entre la figqr¿ y ;
por cl c\*Etrerio, los lnayores csf iÍurn cada.vez con Ios objetos lejanos de refcrencia (el soporte ¿"¡ 1¿¡¡e:'Í:
más di$cu¡ftrd las lorrgiiudes debido a Ia dificultad o del dibujo, Ia superñcie de Ia rnesa, el suelo y las,,,;
de tá ÍncllnÍ¡ción. Fcrc,-cvalúar¡ ceda vez mejor Iá in- paredes de la habitaciórr, etc.). Los progresc¡.§ en Ia'
tlinaciún rnisrna a pa:.rir cle un umbral que.l:ay que ,5
estructureción ¡.Iel espacro poneri clu rna¡:ificsto,- .por .:;
§ituar dc nuevo en lc¡s 9 o I0 aiios" Etr otras palabras: t tanto, una liberación con l'especto al factor de pro;<i.:,.;
I
lcs ¡iños pequeños nc¡ tic¡ren en cuenta las coorde- Í. midad; de ahÍ qr.re dichos progrcsor; sean ta¡díos; r:r

I
n§des p..:¡'É:€pthÉrs rniei:tr'as que ]os mayores son sen- r: Resulta, pues, evidente, en estc caso particular, guc",
slbles e ellas. ilT la percepción esi,á influicJ.a rnás o rnenos directa o in- '
Asl pues, er] este último ejemplo se da una estre- L
directarnente (e.s decir, pof nrediirción de la motr,ici. .,:
fi,¡
clrs cürretación enire la percepción y la noción, pero dad) por el estairlecimiento cie relaciones. a Cistancia
T
propio de la intr:ligencia, y que si l:av cc,nvergencia
':i
¿en qud scntido? ¿Es r:1 sisiema de coordánadas per- i.

ccptivas, por así deci:'k:, el que determina unÍr,oca- entre l¿i evolució¡r de jas coorcienadas perceptivas y
rrlctltc el sistema de r:lerencias nocional, o hay que la de ]as coorcienad.as re¡:resenti¡tivas o nocionales es/<'
hqcer iutervenir una ¡rcción cie Ia inteligencia ioure e¡r función d,el desarroiio sensorrlotor e inteiectual ,

la :estructuración perc,:¡:tiva? Recordemos en primer completo.


lugar que Ia percepcii,n eslá subordinada a las con.
diciones dc proximidal en el espacio y en el tiempo
y gue este factor de ¡"::.oximidad entre los elementos, 4. PrRcurcrós i: rt¡TELrcENcr¿
al entrar en interacciólt en el seno de rJna misma per-
cepción, es tan to rnás importante cuanto más peque- El ejernplo que acabanros de citar muestra la posibi.
ño es e.l niño. Por el contrar-io, Ia inteligencia puede Iidad de una acción dc la inteligencia sobre Ia per-
cepción tnisma. Hasta aqui }ratrÍamos admitirio gue
¡0. Véasc Il. \\,r.;NsfEN, A¡.c,r¡. ¿lc ps¡,clt<¡l.,Rech, IX. en la forrnació¡r de los conr.¡ci¡::ic:ntos no sólo está
102 I03

""+,1
en juego la perc<:'pción, sino que se añade a ella, como
otro origcn nece.sariei, Ia acción y sus coordinaciones, Todo 1o que actualmcnte sabcmos itabla cn favbr
lo sual equivalc a decir Ia inteligencia, pues bájo csta segunda solución, pero tociavía no es posible t
'esa palabra *-1.¡:1 tanto vaga y bastánte peligrosa- nrostrar su gcnerali¿lacl completa. De lo quc_Ua es
mos süglrros cs de quc las perccpcitrnes ddl espac
.debcmos comprrnder prccisamcnte el ft¡ncio¡ramien- clel tiempo, cie Ia velocidad, dr: la causalidad (mo
'to dc I<¡.s sistcmars opcratorios salidos Ce Ia acción (y
:que son, princi¡:rlrrrrntil, los sistümts cle agruposr,, miento transitivo), efc., consistcn cn pctividades tr
de «¡sdcso o a¡'c'ticrrlc¡sp y otras importuntc§ e§truc' cho más compleias q'ue sirnlrlus icctüras'y dan tes
,tr¡ras l{rfiico.ml:1r:rn¡lticas). Ahora bicn, si rccfproca' ¡nonio cic. r¡na ,":rganizacidl pre-lógica o ple-infcrr
imcnlc Ia acción la inteligencia transforman Ia cial, cie tal n:*:rera que est¿rs ¡¡cl.iviclacie.s prcfigur
'perccpci6n, y rf$'i:;1,!'f,$ luglsr ele scr autónoma, es es- el1 cierto sentido las dc Ia pi'o¡:i;r intcligencia.
ttructuracln clrda vca de fomna nrás estrecha por el Los tres ejem.1:los que valnos a r.i¿rr ahora nos
:esqúumctisrno y o¡:eratorio, la hipóte- trotraen e los problcnras cle 1as rc:laciones entre
F!'fic¡psratr:ria ¡:ercepción y la nocirln (al igual filr¿ en ei apar
sis tlt:l *riglln .,;,r:n'.qoital d* Ios conocimientos debe
cons,iclcrar§e fic Í,ilílrnentc coÍrrc) i}rcr:mpleta (tal como
ciil li), i:cro d.esci¿r un ;;unto Ce v;:j1{i nue..,t-:. Aitc
hnbf¡¡n:cs i:ists¡ ¿ri; ic¡s apartarS'ós ? y 3)' sir:o incluso ",,a flo se traia dc rieinostra:' qr-ie la l:oción nü pro
Ce, sin r:iá.s, Ce la pei'cr:pcióri cr.,¡'it,spcndier:tr:, si
c*Ilio f¡t[:;a cn ,l'l rrtisrno campo perceptivo; y esto en
la ¡ntlrlirJa *ft {it,:Í:Ia perc-c¡:ción como tal no se re- cle i:acei ver que la pcrccpcil.rn ¡:iisn:h se orga'
rli::tc a r.ln;r ll'ri'tt:";:r rlc los rlatos sensorialcrs, sino qtfe r.a de urlil fo¡';ue que bos<luei;l lil cirgaiiiz¿rción rle
i':r¡ciúi:. "i'nü sc: i'¡üs ctiqa r¡i.i;-l sc tl'r.ii"a cie un r*.toi'
ccrrr.rii;tr s¡) {,}nl¡r¡'filniz;¡c'.it5n que prefi¡pra la i¡teli-
gtncia )" q1¡rj clid:. t't.:z est¡i ¡nás inflr-ricia por los pro- ciisimulaelo a lrnn iiii¡ciún cie l;¡ ril,- i(.)j) fi i)a1'1ir cie
Sr*sss de csta rilti¡no ¡ierc:c¡rcióit: t-'Jt lr ¡¡rcilicl:r en (:iLre ,":)rl:;tc filiación és
se cia ellí:re la l'roción .1, *1 esqr.tcr¡:;rÍ-j..:rno sel1;-alllot
, I')icho ri$to, cl ¡r:'oblema f-in¿rl ]' funcian:cntal que
'n*s {ucrla IJCIl' rliscutir puecle enunciarse como sigue. cn gcnc:l'el, y io que se traia clc cicn:ostr;/r es-Q
este mis:lno esqui:n"raLi.rrn,: juegia ','J uri papcl en
¿Conriistc l* percepción en una sintple lectura de los
datos scnsorialcs. o en acti'"'ídad¿.s qr¡e prefiguran las organizaciór: clc las ¡:i:i'cr:pcio¡rcs ai nñadir§e ,je e¡
rt:odo a.! cle.t'o scns<.¡l'i¡1 c1t.ic cL r:ilado esqucmirtisr
.:opetaciones i¡rlc.lectr-rales v que en cacl;,r nivel siguen
Cstando vinculacl:ls a eilas? Iv'Iás ¡:recisarncnte: ¿exis- ¡:ermite i,¡simjlar 1, elabfll"ar cir:scie r:1 misrno irrom(
.t ie'' prinrer"o un estaCio r1e simpie reqist¡'o sen.soriai
tr: de Ia perce¡:ción.
.,,(más o mencs pi,.sivr:) 1, solanierrtc en segundo lugar iruos*,lu irrimcr ej.crr.r'il1o scr¿i cl ile Ia .,'eir:cid¿
t¡n nivci de c:oorclinaciones légico-nratemáticas, o bien Ilri¡riero trataretnos de caiacterizal slt flaturaieza r
'Ínterviengn ria.si:/rr cl ¡trincipio .t,, cor:jr:nto ¿1e coor- cional ¡rara erbr:i-clirr lucgrJ sus ÍisJlücLos irerceptil,r
dinaciones Iósico.nratenráticas en ei seno mismo de Ia Es sabiclci quc. cn la rrccÍrnica ulfr¡;ice. la velocid:
es prescr.llada corilo ulta reiai:irin ei:tre cl espa{
..P..9¡cePció¡r?
,','I . '' recorrjclo *,' la dul'aciórr, lo cual c,illiga a pcnsar q'

]r
i'éstbs corresponcien a intuiciones si¡nplcs y dircctas. tados psicológicos para construir una noción f ,sica t
la r,élocidad a partir del rebasamiento o adelan¡áiilie
,,Por el contrario, er:. Ia mecánica relativista, la 'velo to.¡, Obtuvieron agí un teorema de adición cle I
gidad, aunque conscrva su forma dc rclación, es rnás
elernental que el tiernpo. puesto quc cornporta un vclociclades asc¡ciancio el aclelantamicnto orciinal
'1tnaxímum y el ticuirpo cs relativo a clla. A. Einstein una ley logaritmica y a un grupo abeiianc¡ y extr
yendo de ello a la vez el grupo de Lorentz, Ia iev
;1iuvo a bien cn cicrr:a oc»sión aconscjarnos que cia-
,

mi¡¡áramos r^Ia cur$¡


ri'xÍ-I-^--- ^----,-.r- ión clcsde
J-^J.. -i punto
c¡ '^---r^ de
J-
vista
-.!-e* psi-
*-: isotropía y l¿r existencia de un nta-riryzunt.
y que inveiitigdscmQs si cxistfa o no una in- Una vez rccordado esto, ticnc igualrnente un gr;
interés invesligar si la ¡nisrna percepción de la I
de Ia vclocidsd indepcndlente del tiempo. ,locidad obedéce a 1a relación r¡= e: f a si se deri
c§ta cl¡c$tión se oñadc otro asPecto interesante en
scntido de quc l¡r fisica. incluso la relativista, siem- también de conside¡'aciones o¡'dinales relatii,as
sc ha reslgnado ¿r admitir una cspecie de cfrculo
adelantan:iento. Creen:os quc todavía cs pronto pa
(sobrc"el cual ha in.sistido profundamente sacar conclusiones de las investigacionc.s quc csta.rn
Xu.vet, entrc otrrx;): se define la velocidad utilizan'
realizando con Y. Feller y E,. IvfcNcar, pero a pes
cle ello nc:j parc:cc habcr pucsto yit r:rl cviclcr,cin
.el tiempo, per$ c:l liempo sólo se mide recurrien- varias .situaciones el papcl del ariclantin-iienla, en t!
a vdgcidodes. 'Irsnienclo esto en cuenta, pusimos
iiüos.a la obra y llegamos a Ia conclusión de que to que factor prapiamcntc pcrceptivo. Sca, por eje:
ii,bte¡x lss nocioncs ternporalbs son efectivamente ¡:lo, una t"rayectoria rectiiÍnea cu),a n:iiad (tanto
que se trate cle Ia ¡rrimera rnitaci conlo cle la scgun,
corUplejas y de: com¡>letitud tardÍa, en cualquier
existe una sitr-tacióu priviiegiada que da lugar
I
I
r
o del espacio con:prenCido entre ,/, _t' ,/r) esti_p¡
lntuición de la velocidad indepencliente de la l.
t
vista de nueve barras vcrticales nor ¿elrás/ñá-1
(aunquc, naturairrrente, no del orden dc f ct,alós pasa el nróvil: e] 7ü-Bü 9á clc los sujcto's tien,
tenrporal)" Tal is la noción de «adelanta- cn este caso la irnpresiór: cle ur¡a acclei"iición iiel n:
to», que se co¡rstituye cn funr:ión de relaciones vi¡niento en Ia ¡:arte entrecortada coil i'especlo a
te ordinales (si A empieza precediendo a B parte libre. Pues bicn, aqui nc, se trata c1e una re.
runa misma trayr:ctoria y luego es.B la que va en ción entre Ia velocidad, el ticrnpo y cl espeicio «fe¡:
Iugar, E tien,r: una velocidad superior a A).tt tt nlénicos», es decir, cv;rlu¿r¿lCIs perceptivamente, segl
te señalar ir este respecto que un fÍsico y un el esquema dc Brorvn: ai inter¡'ogar fi los sr.rjetos s
temático, francer;es a¡iibos, J. Abelé y F. Malvaux, bre las duraciones aparentes, I<¡s cspacios aparent
de. refundi:r' ias n,cciones funclamentales cle Ia y ias velocidades percibidas, hallanlo.s en el aclui
de la relativi,:lad evitando.el circulo vicioso cle aproximaclamente un 50% de res¡ruesiiis no coh
h[bciaad y el tie:inpo, han utilizado nuestros resul- rentes desde el.punto de vist¡, de r,=. e:r, y c¡r el nif
.t,
l.; J. Prrcr.r,I*s notiotts de ntouvctncnl et de vitesse chci ['ctt,on!, l?. J. A¡nt.f 1'P. l\{.llvlu\, Vitr.'ssc ct u¡rivc¡s rci:ilivisic, cdji. Scd,
r,Parf¡. 194ó. Paríc,1954.

1{
tl
'a l,:.

,: tociavra más. La expJícación que parecc imponerse e6 bio la impresión cie un odisparor. Si se
qi:e el movimiento por cl quc la mi¡ada un^a inmovilización bastante larga ¿e losi:¡r
sigue al
mór'il se halla consranternente obstaculizacro cn Ia después ,del impacto, c.l rnovimienro utr.eiiéii
I,.rt{.! . entrccortada lror fijaciones' mornenláneas cn
jil:: parece indepeudiente y no causal¡nente süü'¿
bArras, Io eual implica un arlelantamiento del al de .,{, etc. De estas cliversas impresiones,'áü
con respecto í:r los movinrientob dc la rnirada
r---------------nirvil
cutiblemente son percei:tivas, N{ichoit* ruco,
y t,ll impresión rle rnryor vetocids,d. Désde,Juego el ch:sión de que la «noción¡ de causa es itabs
trrfirblcma c$ ¡¡ú$ ceinnplejo cusndo Ia mirá¿a cstá de tale.s pcrcepciol:es. pero, alln riudiendo,:d
innróvil y l* velocld,ad localizri¿a en el inrcrior de a ]as experiencias de Jr,Iichotte, uilo ha dbl
un cnmpo visual ewil rlo oc clcsplaza con el móvil; sorprendido por el hecho de que ias inil:
pcrü cn cste qaso qu,lda por cstablecer una relació¡r cle «choque», de «e.gpuje» q.ue tenen or eo prü
cnt¡"c la velocl.dad árl rndvil exterior y el de Ia exci- de estos cuadr.os visuales seari de origeii táEtílc
taciC:n o cxtincÍón dr: las pcrsisteneias retiirianas en tésico y havan sido trasplzrntaci.as a las claves,
cl propio c&rDFü vÍsru¡I- Ies por lrna especie de Lsimilaciór: pe.i:ceptiv§
t;'!1 §€Sundo ejcrnpi:o ser/r eI dc Ia «percepción cle procamente puede rnostrarse la existencia de E
de causalidadr. §i6Ujendg a los «gestaitistasa Dunc- siciones Ce lo l,isuai a lo táctilo-cinestúsico,erii
"ker ¡' il{eEagcr, Ioi c,raies sostenÍan que experirrren- minadas impresiones cle causaliclad tácti.l: cf.il
tamüs una irnpresló» causal de naturalez¿ percep- nera corno, bajo la influencia de j¡r visión, se Ii
itil'g e¡r ¡lrescncia de dcterminaclas secuencias, tales
'cslnü e.l rnovirnlenlo l:ransitivo, A. Michotte replanteó
al final clcl .bastón y Llo en la m¿rno la imfl
táctil del. contacto entre el b¿rstón y la aceri
el problen'la por mr:clio de interesantísimas cxpe- 'esta prin:era obsen,ación r.esulla que Ia imf
ri*¡rcias, qub pronto se hicieron clásicas. Cuancio causal percept.iva tiene ind.uclablcrrente .sus pi
'un rectángulo negro .¿i se desplaza en cjirecció¡r a un en toda ia acciór: y no sólo cn urrá <rGestalti,,i
-rcstán$ulo rojo B, inrnóvil, y, después del impac- Pero aclemás es fácii probur que esta .iaü
to,. los dos continúi:rn moviéndose uaidos uno al perceptiva llcva ya consigo una cieita forma dó
ttroque a la velocidad jnicial de A, se tiene Ia impresión posición por compensación que prefigura Ia ,r
de estamos ante dos sóiicros, er primero de ros'
cualcs «arrastra» ¡l e).npuja aI otro, Si á se para des- lidad operatoria: si el movimient¿: dcl agentcj
rece producir causaimente el ciei pacie::te A, éa
'p,1ér clel ímpacto y Ji' se pone en movimiento a uüa hay compensación aproxirnacja eutre, cle unaiit
velocidad igual q infe::ior a la que tenía A, tenemos
impresié¡i de que se .:rata de un ulanzamiento» de B
ra el movimiento perdido por .,{, asf conro el cho
po-r "4 como consecu:ncia cle un choque. etc. empuje atribuidos a A ),, Ce otra pa_rte, el movi
vclociclarJ de. B desp.-ris del inrpacto es súperior
Si Ia to ganaclo por B, asf colno su resistencia'apa:
Ia que tenía ,4 antei del impacte, tenernos en cam-a Por ejeropio, presentado el dis¡rositivo cie Iúi
verticalmente y no horizontalmcnte, i"remos
IOB
do con l-ambcrcier una apreciable modificación jora en dicha percepción, cuafido sc da, obeuece
_l:1.f:"ros apar(:ntes, pues[o qtre de est¿ rnanera.
'fa ta imprc.sión qlc
p¡¿ cprÉ'inferenciao y no a u* sirnprc efecto inm
"resistcn"ior.
medida en que ¿::xiste
R;Á;;;;;;" diato quc se apoye cn el significaclo de los trazos c
una caus¿lidacl p*r".pii.r., correspondencia.
ta misma sc halla cn función de lrr'"rt"ior." Así pues, de los resultad.os precedcntcs poclemr
s,dcl sujctc, y prcscr¡tá ya un modo dc'com- sacar dos conclusiones. por u¡ra partc, los cono(
,l !r" pnetigr,rra cr_rn ls forrn+ de un grosero rnientos rlo proceden nunc* exciusir.amente de
fo la r:Ompó$;ición opcrat<¡ris. .". sensación o de la percepciór:, sino tarnbién de lr
rinal¡acntc .*y
dstc ser¡á Duesuo tcrcer ejcmpló- esquemaS de. acciones o cle ios esquemas operat
tPla dc mostr¡¡r c¡ue an el campo perceptivo in- rios, que son, tanto unos colTro etros, irred.uctibl
¡lcncsl tarubldn ,ul6o ¿rsí corno aprc.inferencias> r. lo p":cepción sin más. por otra parte, la
i tt" alca'rts¡' !a, neccsid¿rcl decuitiva propia de
, Infcrenclas opcri:r(ori&s o !ógicas, rlan iguaimente
ción rnisn:a uo consiste en urla simple lectura ¡:erce
c
uosqucjo dc t:§Í..u,s rlltl¡tras. En'e.xperimentos rea-
los datos sensoriales, sino qr-re im¡:Iicei u¡:a
cién activa en )a que inter-vienen rleci:;ic;rrc.s "t#lU
y llre-i
Itrss §ü¡r¡ .§. &{mr[ prctsünla]nos a niños db. diferen- ferencias y que se debe a la jnlluclicil sobre Ia pe
lgdadc-s sru@§ ds: cuar¡.o Íichas o rn4s pidiéndoles cepción corno tai der esquematisnro rie ras ácr1i6¡¡
i.eu cI tr¿rr¡"scursn de una breve preJ"otación per- o de las operacio¡res.
sly!, S€r¿ su opinión sobre si d,iclios conjunto.iorr.
¡E$ o no. l-uego ]:)i:escrrtarrros nuevamente las mis-
No es exageraclo, por tanto,. tt.atai. de rnrítica
con)o lo ira.ce un tanto ir¡everentenlc'te cr tÍ,tLilo d
[;f{!urs§ (por ejr:mplo, una fila de cuatro fichas este estudio, la opinión clásica y cier.tamente simpli:
,iultas- y_otra con l¿rs fichas r^:rás espaciadas), ta según la cual todc¡s nucstros coltocir¡ientos,
u¡ricndo biu,r.l,r¡carnente los eleme.rtá= a" l,rrr"
conlo mÍnimo nuestros conocinricittc):; cxpcrin:cntt
tos, Ae
,ls otra por mr:d.io de ,rr;á.- "."ri;;.:': les, tendrÍan un origen sensorial. El
ts{p dichos tra;ros de diverr", Áu".*r.^t" .U- tal de una tal interpretaciórr ernpir-isra'icio
tundai-ne¡
e¡itonces, natu ralmente, r-rna notable mejoau es oivjciar 1

ccpci'ón de ras igualdades mantenienclo actividad del sujeto. y esto cuancio tr:da ia histori
"n
Ia mis-
d3 ra p,"".",u;:o";;;;;:;"il",1j',i"; , de Ia fisica, la más a'anzad¿r, cre ras iisciprinas fur
lyá:ig" reside en que iepenaer, áli u*r
dadas en la expcriencia, estli ahÍ pai.a clemostr.erno
i¡riodificaciones
esquemas que Ia experiencia nunca basta por sÍ sola que e
É{os de: acciones o de operaciones ¡r
Dicho del progreso rie los conocimientos es obr.a cie u-na
- __ __._con- rras pclrduras:
o L^qJ palabras: para percibir inaiso
11"_:
espondencias ha',, que saber construirias de
las lubie unión' entre Ia éxpcriencia y ia deciucción
otro, O, dicho de otro moc.lo, obra de Ia nccesaria c,g]airs
."Iii: ys,.en ca io ccnfário los trazos que
unen ración entre los ciato.s ofrecidos por. el objerd y iá3
¡.!riu1-""
de.la
tienÁ significació"-;i [:i::#;H:
iguaid;rcl de ios aós con¡unros. La acciones u opct-aciones clel sujeto; acciones u opet?.
;iO" me- ciones, estas últi:uas, que collstitlrr¡e, el maico ió.

111
\

gicGmatemático fucl,ra del cr¡ai eI sujeto iro


lleSa nun- :::t.,

ca a. asimilar intelr:ctuak¡rentc'los-objetás. í;J;


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