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DEONTOLOGÍA ÉTICA DEL DEBER

El economista, jurista, literato y filósofo inglés Jeremías Bentham (1748-1832)


define por primera vez la deontología en general, como la ciencia de los deberes o
teoría de las normas morales“, en su obra Science de la Morale (ciencia de la
moral

Ampliando un poco el significado dado por Bentham, la deontología es la rama de


la ética cuyo objeto de estudio son los fundamentos del deber y las normas
morales. Teniendo como resultado un conjunto ordenado de deberes y
obligaciones morales que tienen los agentes de un determinado ámbito social-
profesional. Es un tratado de ética aplicada que investiga la rectitud moral de la
conducta humana en el campo de la profesión u oficio de la persona. De esta
forma, el trabajo profesional, como actividad humana, cae dentro de la Ética, y le
sirve al profesional, para comprender situaciones prácticas en sus relaciones
sociales. Es posible también que ayude a inspirar la actitud personal, que debe
mantener una conciencia profesional, cuando en su trabajo presenten conflictos
entre el bien y el mal.

La Deontología es una ciencia normativa que establece leyes para que el hombre
sepa elegir el bien y actuar con rectitud dentro de su ocupación. Es la ciencia de lo
que debe hacer el hombre para vivir y como debe vivir en el desempeño de su
profesión u oficio, ejerciendo su trabajo con rectitud.

Se basa y justifica en los principios de las normas éticas y morales.

Si bien Jeremías Bentham fue quien acuñó el término "deontología" en su libro


Deontology, or the science of morality, con el significado de lo obligatorio, lo justo,
lo adecuado. Tanto deontología como deontológico son términos que han caído en
desuso y han sido reemplazados por "DEÓNTICO".

La familia tiene la responsabilidad natural de la educación moral, ética y


deontológica ya que opera espontáneamente sobre los individuos que ella misma
engendra, porque está dotada para influir sobre los afectos, acciones y tendencias
del individuo durante su evolución vital.

La deontología proviene del griego deo-ontos=deber y logo= tratado, e implica


limitaciones, mandatos o reglas. Las deontológicas exigen a los agentes
abstenerse de hacer el tipo de cosas que son malas aun cuando éstos prevean
que su negativa a realizar estas cosas les producirá claramente un mayor daño (o
menor bien).

Deontología es el tratado de los “deberes” determinadas por la ética que, en


definitiva, fija íntimamente nuestras obligaciones en relación con la bondad o
malicia de las acciones libremente ejecutadas.

En cualquier caso, la norma deontológica tiene límites y lo que está fuera de esos
límites no está en absoluto prohibido. Así mentir es malo, mientras que no revelar
una verdad que otro necesita puede ser perfectamente permisible pero ello se
debe a que no revelar una verdad no es mentir.

Ése es el fundamento de la deontología tal como hoy la entendemos.

La Deontología como rama de la Ética aplicada que estudia el comportamiento


moral de los hombres con relación al trabajo tiene las siguientes características:

 Es Filosófica: porque realiza investigaciones a las ultimas causas de


rectitud moral de la actividad laboral, y lo hace por medio de la razón.
 Es normativa: ya que brinda las leyes y reglas parar el comportamiento
humano.
 Es Científica: ya que investiga racionalmente las causas de la rectitud de tal
comportamiento, y además es un estudio sistematizado.
 Es práctica: Porque se propone a dirigir la vida de las personas.

La Ética del deber o Deontología es fundamental en la vida de un profesional ya


que hace referencia a un conjunto de principios y reglas éticas que regula y guían
una actividad profesional.
La deontología va de la mano con la ética profesional (sin embargo no significan lo
mismo); cabe distinguir que la ética profesional es la disciplina que estudia los
contenidos normativos de un colectivo profesional, es decir, su objeto de estudio
es la deontología profesional, mientras que la deontología profesional es el
conjunto de normas vinculantes para un colectivo profesional, que regulan y guían
una actividad del mismo. Estas normas determinan los deberes mínimamente
exigibles a los profesionales en el desempeño de su actividad.

En una profesión organizada, es imprescindible formular y aceptar libre y


voluntariamente normas éticas que tengan como efecto la regulación de la
actividad profesional en todos los campos que ésta abarca. A pesar de que las
obligaciones éticas básicas son constantes, su cumplimiento puede variar por las
necesidades siempre cambiantes de una sociedad compuesta de seres humanos
libres. Surge pues, la necesidad de precisar dichas normas y también de contar
con organismos que aseguren su cumplimiento y puedan eventualmente
determinar sanciones en caso de faltas a las mismas.

Suele ser el propio colectivo profesional quién determina dichas normas y, a su


vez, se encarga de recogerlas por escrito en los códigos deontológicos.

El código deontológico hace referencia a las aplicaciones de la deontología en un


campo en específico.

A nivel profesional, las normas dictadas en el código deontológico son


previamente aceptadas y aprobadas de manera común y unánime por todos los
miembros de la profesión para la que se elaboran. Son, por tanto, pautas de
conductas que tiene como objetivo realizar un determinado trabajo de forma
correcta, adecuada y eficiente.

El contenido de los códigos deontológicos suele abarcar los siguientes aspectos:

Deberes generales y objetivos de la profesión; deberes específicos en situaciones


especiales dentro de cada profesión; deberes respecto a otros compañeros de
profesión; prohibiciones y situaciones especiales. El cumplimiento de las normas
contenidas en el Código deontológico conlleva un deber ser que va a fortalecer la
profesión, que va a proyectar una imagen hacia la sociedad de nuestra
profesionalidad y, ante la Administración y los demás colectivos de profesionales,
va a reflejar nuestras actitudes del buen hacer profesional

Un código de ética indica la aceptación de la responsabilidad y confianza invertida


por la sociedad, en una profesión. Bajo los términos del contrato implícito entre la
sociedad y la profesión la sociedad le otorga a la profesión autonomía y autoridad
considerables para funcionar en el desempeño de sus tareas. El desarrollo de un
código de ética es una actividad esencial de una profesión.

La deontología forma parte de lo que se conoce como ética normativa y presenta


una serie de principios y reglas de cumplimiento obligatorio.

Limitaciones, mandatos o reglas de la deontología suelen:

1) Formularse negativamente de la forma “no harás” o mediante


prohibiciones. Aun cuando parecería teóricamente posible transformar las
exigencias deontológicas que se formulan como prohibiciones en prescripciones
manifiestamente “positivas“.

2) Se interpretan de manera estrecha y limitada. Esto es decisivo, pues


diferentes conceptos del alcance de las exigencias deontológicas — o diferentes
conceptos sobre lo que constituyen tipos de actos diferentes — obviamente darán
lugar a comprensiones muy diversas de las obligaciones y responsabilidades de
los agentes.

3) Las exigencias deontológicas tienen una estrecha orientación: se asocian


estrechamente a las decisiones y actos de los agentes más que a todas las
consecuencias previstas de sus elecciones y actos.
Algunos ejemplos en donde se puede aplicar la deontología son:

 La Deontología Médica
Es el conjunto de principios y reglas éticas que deben inspirar y guiar la
conducta profesional del médico.
Los deberes que impone este Código obligan a todos los médicos en el
ejercicio de su profesión, cualquiera que sea la modalidad en que la
practiquen.
Ejemplo: Todo médico, cualquiera que sea su especialidad o la modalidad
de su ejercicio, debe prestar ayuda de urgencia al enfermo o al
accidentado.

 Deontología jurídica
Significa "lo obligatorio, lo justo, lo adecuado". Es la rama de la filosofía
jurídica que tiene como finalidad específica la determinación de cómo debe
ser el derecho y cómo debe ser aplicado. Principalmente aplicada a
aquellos que estudia alguna profesión jurídica como magistrados, abogados
y fiscales de justicia.

En cuanto a la Ética del deber debemos intentar realizar una conducta que manda
la moral, pero no quiere decir que con ella podamos conseguir algún bien
relacionado con nuestra felicidad, sino exclusivamente por respeto a la ley. El
cumplimiento del deber es tan importante que incluso lo debemos elegir aunque su
realización vaya en contra de mi felicidad y la felicidad de las personas a las que
queremos.

Para la deontología del deber, la racionalidad confiere a cada sujeto un valor


particular para cada uno. En ella reside la fuente última de la moralidad. Entonces
lo que determina el carácter bueno de un acto moralmente hablando, no son ni los
resultados, ni los sentimientos, sino la universalidad de la norma aceptada por la
razón. 
Hay cuatro puntos importantes en la deontología o ética del deber:

1. El ideal de vida para el hombre consiste en la aceptación a ciertas


normas o mandamientos.

2. Las normas morales son incondicionales.

3. La voluntad de una persona a determinar si algo le conviene


moralmente reside en su capacidad de raciocinio.

4. Los valores éticos como la libertad, la dignidad, y  el respeto


son derechos individuales.

El concepto de Deontología o ética del deber ya implica la idea de la existencia de


un código moral colectivo con un cierto grado vinculante entre sus miembros, y no
sólo un mero conjunto de normas apelativas a la intuición, a la emoción o al
extremo del relativismo de la moral individual.

DEONTOLOGÍA ÉTICA

Se basan en la moral
y la conciencia.
Es
Reglas y normas discutible.
que regulan el
ejercicio de la Ejemplo:
profesión. Relación de Rol fundamental:
un médico Conciencia de
con sus uno, admite
enfermos, visiones y
Estas normas no se sociedad y
discuten, al no
opiniones de
colegas.
respetarse debe de personas
sancionarse. diferentes.

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