El lugar sin limites
aia final del siglo % José Donoso se consolida como el
dor chiles de mayor tascendencia enc mundo de la ketas
camericanas deviacindon no tan solo po una ran obra
Paid aetna ain ee one
errs son eoenenzo fueron consderaas no
my menores. Fs lease, por gemplo, delanovelaE/agarain
. (enadelant, LS), publcadaen 1966 comelo demuestan ion
ncuidos en el volamenceleratorio Donooo, 70 afon gue
Cano.as, odin. 2008. er
EA lagac gin Unites", erisc seeteaene aenteersa tania
peri ncoladaalnxibisn de unorden cultural cncrss LSU eres
i cde a eneaperansn onttveso lu caoperfan xson
sy anoseclgicas quclahacen posible
configuracién del infierno
Desde su epigrafe nical una citadel Doctor Fausto de Matlo-
‘obra goyesca le sealaal lector espacio ominoso que viitars
las entratias de estos elementos. Donde somos torturados y per-
ceremos sempre. Einfierno no tiene limites, i queda circunserit
lo lugar, porque elinfiemoces aqui donde estamos y aqui don-
Sel infierno tenemos que permanecer”.
33Elepfgrafe nos conmina a inferpretaresta obra como una ale
gorfa del inferno: est debajo del cielo, enatcrra, esl lugar donde
‘ivimos. Aste misero prostbalo dean pacblo perdi (del vallecen-
tral chileno) constituye el séptime circulo del infieeno, espacio
sdemoniaco donde reina don Alejo Cruz, eacique local Es an kugat
‘oscuro, no aleanzado por la luz divina (el pueblo no sera electrifica-
do) ni por la msica celestial (las esferas clestes del wurlitzer no
_alumbrarsn el sadn del burdel). Acasolacnicachispaintermitente y
designo ambiguo, es el fulgor del vestido rojo en su giro circular en
‘medio dela noche (la Manuela ena pista de bail, cual luciéenaga),
Ahora bien, esta interpretacién es plausible solo porquela obra
‘std compuesta de un modo alegérico, es decir, como un euento que
‘serefereaotro!. Alemprender a tareade traduccin queesta novela
impone, elector donosiano descubre que el subtexto (es decir, in
fierno) est construido desde un complejo juego decitas dela tradicién
‘ecidental. Veamos.
Ete infiemo ests armado con piezas bblicasy dela mitologiahe
\snica, entreveradas entre sf, apareciendo muchas de ellas ~de orden
ctisiano-diepuestasde un modoinvertide, Esun inferno conformado
pprlosresos le muchos infieros, mismo yaconvertdo en escomibo.
‘Ast loscuatro perros moros de don Algo aden al Apoealipsis mientras
{que el animal de tres eabezas (los cuerpos sanguinolentos de Pancho,
(Octavio yla Manuela revolesndose junto al canal) alude ala figura del
‘Cancerberovgilando el paso del fo Fstigia. En el caso de las tas b=
‘2s lossimboloshancambiado de Foner lazarzaardonte no esindicio
dela presencia de Dios (desde lazarza se abalanzan Pancho y Octavio
‘sobre Manel, cual mastnes de Satan); las vias diezman el pueblo; a
Estacién El Olivaesuin lugar iredentoyla igurade Crur cerrael espa
‘Gen un movimiento regresivo, amén de quela Manuela -maricén det
‘burdel-puede considerarse comola virgen redentoa de todo el rein.
Seria un error, entonces, interpretar acciones y caracteres te-
niendo presente solo un escenario de la tradicién como lo han
intentade hacer algunos criticos- Hector uega con piezas sueltas
st
(don Alejo Satuo, Pancho-Luzbel, Manuela-santa invertida), caya
‘ombinaloria seresuelve enna magen grotesca armada por descale,
simil deuninfiemo desfondadoo den espacio que eta més all de.
sta novela no solo recrea escenas eimagenes del infierno, sino
ue tambicn lo diagrama en el espacio.
En un ee oe dibuja el lugar de El Olivo, que tiene dos centros:
arriba, el fundo, con su easapatronal(circundada por un parque dis:
‘puesto en U)y abajo pucblo,con su prosbulo, A imagen semejanza,
{GeF1 Olivo, en un geparalelo, se dibujala ciudad deTalea, donde dis
finguimos, arriba, el barriontevo (donde quiere vivie Ema, esposa de
Pancho) y abajo, e famoso prostibulo de la Pecho de Pao.
Si nos situamos en la perspeetiva “enajenada-de Tos persona-
jes, en EI Olivo existe un cielo y un infierno, que pueden ser
epresentados como dos etculos cuyo punto deinteseccisn es atra-
‘yesado por una linea la del canal),
$lcomedor ikuminade dea casadelSefor ese punto central det
rculo de cielo, en medio de un parque el eval, as ver, estdrodea:
ddo por una aglomeracisn de bodegasy galpones todo situado en el
‘adio de accion del Fundo Fl Olivo, quese conta enlas vifas hasta,
‘leanal
‘De un mode simetricoel sain de baile del burdel es el punto
“central del irc del inferno, sienda a Bstacién E1Olivo su radio de
“acc; laalambrada, el perimetro (olimiteinterno) ya zarzamora,
“Suenmarafada proyeccién, también hasta canal.
Sies verdad quelos personajes quieren habitar el cielo deF1 Oli
‘tanbieislunbran cual manondascaprichons ques delle
jpertenece en lajusta medida en quelos excluye, porsu condicionso-
{Gal o sexual, Bien sabe Manuela que si logra ingresar a ese recinto
felestial, Pancho queddaréexcluido de ese circulo, porque “al fin yal
“eabo noes ms que un hijo de un inguin” (26). No obstante, quien
fe imagina entrando alt vestida de gitana y con flores detrs de la
‘Oreja, siendoatendida como ja por Misia Blanca en realidad, nunca,
3sgard a eruzar ol canal i siquiera despojada de su rao vestido,
Para Manuela tantoc! prostbulo como casa patronal son espacios
deconfinamiento, quesolo leconceden una minima seguridad ta de
seguir viviendo- En ambos lugares, aparece sometida al miedo, el
‘ual queda momenténeamente interrumpid en su ndmero de baile
hhoyo negro por el cual ve desfonda este perverso espacio geomeétrico
yy ensus fugas periddicas, queno logran anular el juego de atraccién
Centripeta que ejrcela figura de los das efrculos.
Los lectores sabemos que los personajes estén condenadosacir-
cular pore espacio infernal de El Olivo. Singularmente, parte dest
‘condena consiste también en crear un mundo alternativo, oa vida,
‘otrocielo por donde circular. Este seré Tala, concebida desde los per.
‘onajes como dos erculos cclestiales Pancho se inscribe anto.a Ema
{ysuhija Normita enelcirculo del barrio nueva de castas de dstintos
‘colores; mientras que las regentas del ruinoso burdel dela Estaién El
(Olivo se instalan en el prostibulo dela Pecho de Palo o renuevan et
ssuyo asu imagen ysemejanza,
PParaclojalmente, desde la autoria,Talea es concebida como un
doble de Fl Olivo, como silos persongjesestuvieran condenados are
petir Ia misma contradiccidn en distintos escenarios, sin lograr
fesolvera.
‘Talea-al igual que El Olivo-es un espacio infernal que simula
tun dielo y un infiemo, Desde la autoria desde a programacién tex-
tual-elinfiemo solo setraslada desde el ee de H Olivo (rexido por las
relaciones de servidumbre signo dela premodernidad) al ejetalquino
(rogido por las relaciones de propiedad, propias de la modernidad),
reprodduciendo una estructura bfsica de oposicin irreducible (elo
‘versus infiero),sinsalida, Noes concebible una mediacién -un pu
tomedi-, debido a queeste espacio se define porlasimetria prversa
{quemantienen cielo einfierno, prlaimposiblidad de distincion en-
tre ellos, porque estén regidos por los mismos principios de
organizacion,
56
como clespaco delas
Lair nla cul vivimosno surgeaat .
idl rst cigs plantador aa espese
este eol i deacon Fe
” como se le aclara a Fausto, “es aqui donde estamos y’ aqui
ener tenemos gor permanese™ me
alse educe sunita dln ila ops art
pops ctkconebida dence oe aye
as planten demo split
rt teeta opestn categoria do inerocomofurdameto
ao cealmpca cei de tod stems ep
onal.
Trend al lagrama pac ta novela dine
ese pane pretest denier
sel wanscurs dela novel, Pancho Vega deambula encp-
ea a pend peer deadel ptohats
Me gun pga eu deta cota con AI,
an oe aegyenshucia! posto ala busch
Le a crn Su eso eine ciels dl ly
an owen unespa gee cece hac ab ese,
een debt iniro pda deve
: limomento
Pancho et condenao aco del Olivo, desde »
c ‘con a compania de Moniqui-
suc fur pea desde pono se
eetconosde dana lancay dom ls
ad en uncrndo- bene unseforaquien debe
Tollevaa
Tacatarclar del inferno para tomar a inca recta que leva 2
ica expacio celeste donde ls relaconss deservigumbre quedan abo
fet "utero it hacia otras cosas, hacia adelante” (96), nosinica esa‘noche del page de adeuda de su camién -nétese, sin embargo, quela