Una búsqueda

Querida Amirnah,
Mi nave se ha acercado a un pequeño sistema estelar. Despues de
tanto tiempo surge una nueva esperanza en mi mente. Quizá sea este
al que llame hogar y termine mi búsqueda, este afán insaciable de lo
siguiente. Sabes que soy hombre de ciencia y me ha llevado esto a
emprender mi estudio de planetas distantes en que me dediqué sin
pensar en las consecuencias. Todo este tiempo me tomó comprender
que lo único que debí buscar desde un principio fue un hogar. Si por
un instante hubiera dejado de ver datos y estadísticas, buscando
números y letras, los habría observado al menos. En mi travesía
estudie algunos de los planetas más hermosos del universo, donde
claman se halla el paraíso de los mitos antiguos, pero nunca los vi,
aunque estuve ahí y los pisaron mis pies. Kanterra y sus vibrantes
lunas, Passil y su anillo...
Ahora me queda uno, uno y no más. Un solo sistema estelar por
estudiar... y ver. He decidido verlo como no lo hice con los otros. Es mi
ultima oportunidad para hacer las cosas como debí desde el principio.
Oh, si tu estuvieras aquí. Porque tus palabras hermosas seguramente
vuelven más bello al planeta que observas, seguramente mis
palabras toscas retratan mal lo que veo. Si, la imagen es asombrosa y
me impresiona más conforme crece ante mi vista. El vacío, el vacío
absoluto enmarca a este pequeño sistema. Al principio, un punto de
luz entre las incontables estrellas del borde del universo, nada más.
Pero seguí mi camino errante, no me detuve hasta el final del camino,
hasta llegar al borde mismo del universo. Poco a poco las luces del
resto de las estrellas se iban quedando atrás, pero como un faro, el
punto luminoso permaneció fiel frente a mí. Este es el sistema estelar
más externo del universo. Contra un fondo negro absoluto, una
burbuja de colores tornasol siempre cambiantes. Es el campo
electromagnético del sistema estelar presentando un fenómeno de
aurora. Nunca había observado algo igual. Sabemos que planetas, en
sus latitudes polares, presentan auroras coloridas. Pero en sistemas
estelares, jamás imaginé que se pudiera presentar un fenómeno
similar, mucho menos que abarcara la totalidad de la superficie de
esta burbuja. El espectáculo es constante, ya que si volteas en
dirección opuesta, verás a todo el universo, como un enorme
manchón de luces, como un fractal, hermoso, abarcando casi todo el
espacio observable. La fuerte aurora estelar protege al sistema, y a la
estrella misma de la energía que se ha ido acumulando en su
trayectoria al borde exterior del universo, como el agua desemboca
en el delta de un río, como una onda de choque remanente del big
bang. Casi parece que este planeta hubiera estado aquí antes, que
hubiera llegado mucho antes que el universo mismo...
Ahora me preparo para adentrarme en el sistema, pronto escribiré,
desde este, mi pequeño rincón desde el cual observaré al universo.
Espero me escribas tu también y perdones mi ausencia. Cuéntame de
tu pequeño rincón también, pues ansío conocerlo, aunque sea por
una carta.