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Ensayo sobre: ¿Qué es un adulto?

“El sol se levanta por la mañana (infancia),


va ascendiendo (juventud),
continua hasta alcanzar el cenit (madurez),
para luego comenzar su descenso (vejez)
y hasta llegar a la puesta del sol”.
Jung.

Introducción
Cuando una persona menciona la palabra “adultez” fácilmente se puede traer a la
mente la imagen de un adulto, ya que todos tenemos a grandes rasgos una
representación mental de lo que implica un adulto. Sin embargo cuando se trata de
definir lo qué es un adulto, es sumamente complejo lograrlo. Es por ello que diversos
autores se han propuesto realizar esta tarea desde diferentes aproximaciones
teóricas.

En este sentido, el objetivo de este ensayo es presentar la definición que un hombre


de 47 años, (ingeniero industrial, casado y padre de familia) dio acerca de lo qué es
un adulto, identificar cuáles son las características que menciona y desarrollarla a
partir de los conceptos que han abordado los autores que explican esas
características. Por último concluyo con algunos comentarios que considero
importante rescatar sobre la definición del adulto.

Desarrollo

Definición: “Un adulto es una persona que además de tener una edad madura posee
cierto grado de madurez, pues es responsable, sabe cuando jugar y cuando ponerse
serio, y ante los problemas reacciona de una manera general, como la mayoría, de
tal manera que se puede esperar su respuesta. Y no es solo cumplir cierta edad, ya
que desafortunadamente, hay jóvenes que deben asumir responsabilidades desde
niños. Ver por la familia, trabajar, cuidar de alguien (pareja), te hace madurar y
convertirte en adulto”.

Las características que se enfatizan en la definición del entrevistado a parte de la


edad cronológica, son la madurez y la asunción de responsabilidades sociales
(familia y trabajo).

Sobre la madurez, Quintanilla (2003) menciona que es un término que ha adquirido


muchos significados, puede referirse a cierto estilo de vida, se le utiliza para referirse
a una persona que actúa serenamente ante circunstancias adversas y también
indica una etapa de la vida: la adultez. Así tanto teórica como socialmente se ha
relacionado al adulto como la personificación de la madurez, tal como se aprecia en
la definición que dio el hombre entrevistado.

Cornachione (2006) dice que la madurez hace referencia a atributos de una persona,
tales como: autonomía, conductas apropiadas a las circunstancias, equilibrio,
estabilidad, responsabilidad, cercanía afectiva, claridad en objetivos, dominio de sí,
etc. Se puede observar que en la definición analizada engloba algunas de estas
características, por ejemplo, la responsabilidad e implícitamente la cercanía afectiva
(familia, cuidar de alguien), conductas apropiadas (reacciones generales) y
estabilidad (trabajo).

En la definición del entrevistado se hace una distinción entre la edad madura y el


grado de madurez, lo cual puede ser abordado a partir de los conceptos de madurez
biológica y psicológica a la que hacer referencia Beatriz Quintanilla. La autora
menciona que en nuestra sociedad la “mayoría de edad” se establece a los 18 años,
lo cual no significa necesariamente que el proceso evolutivo del individuo ha
terminado y mucho menos que se ha alcanzado la madurez psicológica. Además a
los 18 años la mayoría de las personas no se encuentran preparadas para enfrentar
una vida independiente, ni para formar una familia propia. Sobre este último punto
coincide la autora con el entrevistado, ya que ambos afirman que es el adulto el que
está mejor preparado para las responsabilidad de cuidar de una familia.

Las responsabilidades que menciona el entrevistado son cuidar de la familia, el


trabajo y la pareja. Sobre la pareja los teóricos han resaltado la importancia de
establecer y mantener una relación de intimidad, ya que esto tiene repercusiones
positivas en el desarrollo psicológico de la persona; y se ha estudiado a la familia
partir de su ciclo vital, el cual inicia con el matrimonio, paternidad y maternidad,
establecimiento de relaciones intergeneracionales, y en dado caso, separación de la
pareja y divorcio. Estos teóricos afirman que cada una de estas fases conlleva una
actividad o problema fundamental que el adulto debe de resolver (Silvestre et al.,
1995).

Erikson es uno de los autores que definen a la adultez a partir de su carácter


psicosocial. Enmarca a la adultez en dos estadios: el sexto y el séptimo. En el sexto
estadio da fundamental importancia al establecimiento de relaciones íntimas
refiriéndose este concepto a las relaciones amorosas con los demás (amistades,
pareja, familia) y consigo mismo. Y en el estadio séptimo resalta la importancia de la
generatividad, lo cual incluye el trascender a través de los hijos (Silvestre et al.,
1995). Estos dos ámbitos son considerados dentro de la madurez adulta por la
responsabilidad que implica el elegir una pareja, formar una familia y hacerse cargo
de ella, y es uno de los aspectos que el entrevistado considero en su definición.

Otra de las características que aborda el entrevistado en su definición es el hecho de


que los adultos “reaccionan de una manera general ante los problemas”, ya que esta
afirmación era algo ambigua se le pidió al entrevistado se explicara, y lo que él quiso
decir es que los adultos no reaccionan de manera impulsiva ante los problemas sino
que tratan de calmarse y actuar de la mejor manera posible ante las adversidades.

Esta postura también ha sido conceptualizada por Beatriz Quintanilla (2003), quien
explica que tiene madurez psicológica quien es capaz de regular sus impulsos de
manera inteligente y libremente, y que integra esos impulsos a su trayectoria
personal, de tal manera que se comporta de forma estable y continua ante cualquier
situación. La autora menciona que tal madurez es algo activo, por lo que representa
una búsqueda individual constante.

En este sentido Quintanilla (2003) también hace referencia a la madurez como


precursora de proyectos de vida, es decir, la tendencia del hombre a la realización
personal. Por ejemplo, en la definición del entrevistado se hace referencia a la
adquisición de un trabajo como constituyente de madurez, y por ende de adultez. Ya
que el desarrollarte profesionalmente es uno de los factores que llevan al ser
humano a sentirse realizado y a transformar en resultados tangibles todas sus
potencialidades.

Cornachione (2006) habla también sobre lo que implica el trabajo en la adultez, ya


que le brinda al adulto de cierto rol social respetado y valorado por su carácter
productivo. Además menciona que en general la adultez debe ser planteada en
relación a los roles sociales que las personas adultas cumplen, y que estos se ven
afectados por situaciones colectivas como crisis económicas, guerras etc. Por lo
que el adulto es generalmente definido por la actividad o el trabajo que realiza, por
ejemplo si es maestro, comerciante, médico, etc., o por su condición de esposo,
esposa, madre o padre.

Conclusión

La adultez es una etapa de la vida que como cualquier otra es sumamente


problemática al momento de adjudicarle las características que la definan. Esta
dificultad está determinada por la compleja dinámica de la etapa, ya que es
probablemente la fase de la vida que más diferencias presenta de un individuo a otro
y que más cambios y conflictos implica al interior de la persona.

Sin embargo, el hecho de que como seres humanos estamos en condiciones de


experimentar la adultez, observar a otros adultos y compararlos, por lo menos
dentro de nuestra sociedad podemos hacernos una representación mental de lo que
grosso modo implica ser un adulto.

Si bien, la definición a la que una persona puede llegar sobre la adultez puede
contener errores perceptivos, o referirse más bien al ideal del adulto, con este
ejercicio, al analizar la definición de un adulto común, no especializado en la materia,
podernos darnos cuenta de que sí existe una noción real de la adultez, por lo cual
ha sido posible desarrollarla a través de los diferentes autores expertos. Todo ello
indica que las teorías parten de la vivencia real del ser humano sobre sus propias
experiencias, y que además se puede comprender y explicar las conductas de las
personas adultas a través de los marcos teóricos que los autores han desarrollado.
Bibliografía

Cornachione, María. (2006). Psicología del desarrollo. Adultez: aspectos biológicos,


psicológicos y sociales. Argentina: Ed. Bujas.

Quintanilla, B. (2003). Personalidad madura. Temperamento y carácter. México: Ed.


Cruz O.

Silvestre, N.; Solé, R.; Pérez, M.; Jodar, M. (1995). Psicología Evolutiva.
Adolescencia, edad adulta y vejez. Barcelona: Ed. CEAC.
UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DEL ESTADO DE
MORELOS

Facultad de Psicología

ENSAYO SOBRE:

¿QUÉ ES UN ADULTO?

Psicología Evolutiva 2

Profesora: Silvia Vargas López

Nancy Laura Curiel Martínez

19/11/2010

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