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La mesa puede estar tendida, y con algunos adornos de flores. A la hora del ofertorio se traerán luces
y panes. En el centro de la gran mesa estará la Cruz vestida con uvas y espigas.
3. Acto penitencial
SACERD. Celebramos la cena que inaugura las celebraciones pascuales. Con fe viva nos
acercaremos a la mesa del Señor para comer el Pan que es su Carne, entregada para
dar vida al mundo, para beber la Copa de la Alianza nueva, que nos ofrece la alegría
de la Reconciliación. Dispongamos nuestro corazón para recibir dignamente este
Sacramento de su Pascua.
LECTOR 2 En la tarde del Jueves Santo, nos diste el mandamiento tuyo del amor. Pero tus
discípulos seguimos divididos. El mundo no reconoce aún que eres el Enviado del
Padre, por nuestros odios, nuestras violencias... por nuestra falta de amor.
SACERD. Damos gracias y alabamos al Padre que nos ama, al Hijo que nos ha salvado y al
Espíritu que nos reúne en el amor y la unidad.
5. Oración colecta
SACERD. Tú nos invitas, Dios, Padre nuestro, a celebrar esta tarde la Santa Cena, en la que tu
Hijo Único, antes de entregarse a sí mismo a la muerte de Cruz, ha querido dejar a su
Iglesia el Sacrificio Nuevo de la Alianza Eterna; concédenos que podamos recibir de
este alimento, que es el Sacramento de su amor hasta el fin, los dones del amor, del
servicio y del perdón verdadero. Por N.S.J.C. tu Hijo...
6. Liturgia de la Palabra
6.6. HOMILIA
SACERD. Reunidos como los Apóstoles en torno a Cristo, que se ha hecho el Servidor de todos,
pongamos en común nuestras plegarias, al servicio de todos los hombres.
LECTOR La Comida Pascual de Cristo, es un alimento para el camino. Roguemos hoy para que
la Iglesia y todos los cristianos, no se instalen nunca en las comodidades, sino que
estén siempre dispuestos a seguir la marcha hacia adelante. Roguemos unidos en el
amor:
LECTOR El Señor Jesús nos ha dado esta tarde el supremo mandamiento de amarnos los unos
a los otros. Roguemos para que nuestra caridad no olvide a nadie, especialmente a
quienes sufren la enfermedad o la injusticia. Oremos por los que hoy se sienten solos
o abandonados. Roguemos unidos en el amor:
LECTOR Para liberar a todos los hombres, Cristo pasa por la muerte de Cruz para ofrecernos
su vida divina. Roguemos para que el mensaje pascual llegue a los oídos y los
corazones de tantos hombres y mujeres sedientos de verdadera vida. Que cada uno de
nosotros se abra un poco más en estos días, a la Gracia que se nos ofrece. Roguemos
unidos en el amor:
SACERD. Cristo Jesús: con tu ejemplo y tu palabra, has querido enseñarnos el amor verdadero
hasta el fino. Recibe hoy nuestras plegarias fraternales. Ayúdanos a ser testigos de tu
amor en un servicio entregado a nuestros hermanos, para que el mundo crea en Tí.
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
7. LITURGIA EUCARISTICA
Pan y vino. Jesucristo como uno de su tiempo toma estos dos elementos de la vida cotidiana para elevarlos
a la categoría de sacramento y misterio. A partir de este pan y de este vino que te presentamos, te damos
gracias y te glorificamos porque van a ser el cuerpo y la sangre redentora que nos traerán la salvación.
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Nuestro compartir con los más necesitados, debe de ser una práctica constante, al presentarte estas
especies materiales para los más necesitados expresamos la petición de que la iglesia sea una en
fraternidad y en amor.
(El pan consagrado estará sobre el altar y luego será trasladado al lugar de la Reserva – traer
para este momento el incensario encendido)
El traslado de la Eucaristía hacia el lugar de la Reserva es muy sencillo: todos permanecen en sus
puestos. Solamente se desplazan los dos sacerdotes y dos hermanas con cirios y el incensario.
Durante la procesión se entonan algunos cantos como los siguientes:
Después de la Cena, Jesús salió para el huerto de los Olivos, donde Judas lo iba a entregar con el
beso traidor. Antes de comenzar su Pasión redentora, Jesús ora prolongadamente. Quiere someter
su voluntad a la del Padre. Sus discípulos duermen...
Nosotros, después de esta Santa Cena, reservamos con fe y devoción el Pan Eucarístico, que
comulgaremos mañana, al celebrar la Muerte del Señor. Este Cuerpo de Cristo que ahora
reservamos, nos manifiesta su amor y su voluntad de permanecer siempre con nosotros.
ORACION (sacerdote)
Señor nuestro Jesucristo: al tomar en tus manos el pan y el vino para instituir la Eucaristía en la
Ultima Cena, tuviste presente este nuestro Jueves Santo, que es reproducción del primero.
Queremos celebrarlo en unión tuya, teniendo tus mismos sentimientos y meditando en tus palabras.
Gracias, Señor, por la Eucaristía, que nos posibilita estar contigo, ofrecerte un sacrificio digno y
alimentarnos con tu Cuerpo y Sangre.
Gracias también, por el gran don del Sacerdocio. Que sepamos corresponder y valorar la entrega y el
servicio caritativo de tus ministros.
Gracias por tu precepto de la caridad fraterna y por el ejemplo de tu vida. Enséñanos a amar con
sincero corazón como tú lo haces. Ya conoces bien lo que hemos hecho de este mandato tuyo de
amarnos como hermanos... Qué fuerza tan maravillosa para la transformación de nuestro mundo
violento y duro... Déjanos descubrir en esta tarde, la naovedad de tu amor entregado. Déjanos cantar
siempre la grandeza de tu sacrificio, de tu entrega y de tu presencia.
PREPARACION DE LO NECESARIO
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PARA LA MISA DEL JUEVES SANTO
Un copón que sea suficiente para la comunión del jueves y del viernes
Garrafones con vino (si el grupo es pequeño todos podrán tomar del cáliz)
Jarras y poncheras para el lavatorio de las manos. (de vidrio) No olvidar toallas.
Para el traslado de la Eucaristía: un velo humeral
Incensario para las ofrendas y al final para la Procesión al Monumento
- Organizar los turnos de velación ante el monumento. (No debe permanecer solo… ojalá en la
noche se pudieran tener turnos con dos hermanas para reemplazarse a lo largo de la noche.)