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³HOY SON USTEDES, MAÑANA PUEDO SER YO´

Inicio este ensayo con la alarmante notica que en nuestro país el 86% de los

costarricenses con discapacidad no llegan a la universidad1. En Costa Rica se han hecho grandes

esfuerzos estableciendo dos instituciones de gran prestigio, la primera con la fundación del

Centro Nacional de Educación Centeno Güell en el año 1940, centro de enseñanza público,

subvencionada por el Gobierno, el cual cuenta con tres departamentos para la atención de las

personas con discapacidad, a saber: el Departamento de Audición y Lenguaje el cual atiende a

personas sordas y a estudiantes con sordoceguera y/o retos múltiples conjuntamente, el

Departamento de Retraso Mental, que a su vez atiende a población con retraso mental y

estudiantes con sordoceguera y el Departamento de Deficientes Visuales que atiende a

estudiantes con baja visión, ciegos y sordociegos con retos múltiples2. Tiene como misión,

ofrecer atención educativa a los estudiantes, de manera que esta responda a necesidades

particulares de cada uno para que puedan desempeñarse de la mejor manera posible, en el

entorno en que se desenvuelvan; haciendo uso, para ello, de todos los apoyos posibles.

La Centeno Güell logra cumplir en ayudar, guiar y darles educación a niños y niñas de

edad escolar, apoyar a los padres de familia y darles una luz para que sus hijos e hijas puedan

desenvolverse y defenderse en medio de una sociedad. La segunda institución, en el año 1985 se

crea el Instituto de Rehabilitación y Formación Helen Keller, que nace oficialmente como un

servicio perteneciente al Ministerio de Educación Pública con la aprobación del Decreto

Ejecutivo #16831-MEP publicado en la Gaceta de diciembre de 1985.

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Es importante mencionar que el antiguo Instituto de Rehabilitación para ciegos Helen

Keller fue abierto a principios de la década de los años 60 por la Asociación de Ciegos

Costarricenses Helen Keller, gracias al empeño y dedicación del Profesor Humberto Marenco

Ovares y colaboradores. 3El Ministerio de Educación Pública hace grandes esfuerzos para

integrar a estos niños y niñas a las aulas formales, siendo una intención real, pero se olvida que

nuestro país no esta tan siquiera preparado para los cambios físicos, sociales, educativos y

emocionales que esta población requiere, tratando de cambiar de un enfoque asistencialista hacia

uno más integral, fundamentado en la promoción de los derechos humanos y la participación

ciudadana de las personas con discapacidad.

Los esfuerzos de algunos pocos quedan a la deriva cuando la sociedad deja de un lado a

estos jóvenes cuando desean optar por oportunidades, una sociedad actualmente hecha y

planificada para personas que pueden desarrollarse por sí mismas, sin necesitar algún tipo de

acceso especial.Es fundamental el desarrollo de una sociedad mucho más inclusiva, concientede

las diferencias y de la convergencia de identidades de los grupos sociales y de la

necesidadindispensable de resolución de las principales limitaciones de la población

discapacitada enmateria de: prestación de servicios públicos, sistemas de información y

cobertura de los serviciosde rehabilitación.

Viéndolo desde la parte sociológica, la sensibilidad pública pudiera no ser, todo lo

positiva que se presupone, y más bien confina a los discapacitados y discapacitadas a los

márgenes de la vida social, a la exclusión. Esto se debe ya que no le preguntamos a ellos

mismos que necesitan, nosotros vemos el mundo de una forma completamente diferente a como

la perciben los discapacitados, además está organizado para nuestras necesidades y no para las de

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ellos. Aunque está muy claro en la Declaración de los derechos humanos, adoptada y

proclamada por la Asamblea General en su resolución 217 A (III), de 10 de diciembre de 1948

en su artículo 24:

³Toda persona tiene los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción

alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen

nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición´.

Además, no se hará distinción alguna fundada en la condición política, jurídica o internacional

del país o territorio de cuya jurisdicción dependa una persona, tanto si se trata de un país

independiente, como de un territorio bajo administración fiduciaria, no autónomo o sometido a

cualquier otra limitación de soberanía.

Los discapacitados no sólo nacen así, con alguna limitación como puede ser la sordera,

ceguera, una parálisis cerebral o un retraso mental. Por el contrario, ninguno de nosotros está

exento de la posibilidad de quedar discapacitado, ya sea por un accidente o por una enfermedad.

Pensar en la posibilidad de la discapacidad, nos ayuda a entender el proceso de

adaptación que vive todo discapacitado a esa nueva realidad a la que se enfrenta. Ser

discapacitado no es algo agradable y a nadie se le ocurriría creer lo contrario. !




 
          

   
       . Es

decir, lo que más limita a una persona no es la discapacidad en sí misma sino la actitud que la

sociedad asume frente a ella.

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Las personas discapacitadas suelen escuchar con frecuencia las palabras ³no puedes´, ya

que los médicos, los familiares, los terapeutas, viven mostrándoles sus limitaciones. Sin

embargo, es necesario recordar: ³una discapacidad es una condición médica. Por otra parte,

puede convertirse o no en un impedimento emocional, intelectual y física al individuo.´ Son

personas únicas, con talentos escondidos que debemos de aflorar, estimular, desarrollar y tratar

de encontrar, ellos mismos poseen sus habilidades y destrezas. No son personas de otro mundo,

son seres humanos iguales a nosotros, que poseen sentimientos y emociones encerradas en su

limitado espacio, limitado por la incomprensión social, de darles lo necesario para poder

desarrollarse como personas normales.

Como personas tienen los mismos derechos que los demás a realizarse según su propia

forma de ser, sus posibilidades, sus propios ritmos y deseos. Y en ese camino, pueden caerse,

sufrir, fracasar. Estas experiencias forman parte de la vida y las personas discapacitadas tienen

derecho a vivirlas y nadie puede impedírselos. La rutina diaria es más difícil para ellos y aún

más porque deben de ³tratar de´ adaptarse y protegerse ante el mundo. La práctica cotidiana se

convierte en malabarismo, en vencer no solo su deficiencia, sino tratar de vencer al mundo que

lo rodea. Aún más difícil, lograr interactuar socialmente con otros; antiguamente en la época de

Helen Keller, todos estos niños y niñas con algún defecto eran excluidos hasta de sus propios

hogares, porque la misma sociedad los señalaba a todos, sin excepción como personas extrañas,

enfermas, era común como la historia de su teacherAnne Sullivan, que fue recluida junto con su

hermano Jamie, en un sanatorio, por tener un defecto físico.

Hoy en día, somos un poco más sensibles con los discapacitados, no obstante seguimos

sintiéndonos indefensos ante sus reacciones, movimientos o el cómo poder ayudarles.

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Un ciego no ve, debe de desenvolverse en un espacio social limitado, determinado por

referencias visuales; un sordo no oye, y debe desenvolverse en un entorno auditivo; un

parapléjico ha de desenvolverse en un espacio diseñado para piernas ágiles: escaleras, aceras

pequeñas, puertas por donde no pasa una silla de ruedas, y sin decir de aquellas personas

afectadas psíquicamente, a las cuales no podemos ni escenificar su espacio.

Es claro que nuestro contexto social, está limitado a las necesidades de las personas con

discapacidad, lo cual condiciona todo su desenvolvimiento de la vida diaria, estando obligados a

adaptarse a este entorno ofrecido por la sociedad, mientras que la sociedad no asume la

responsabilidad de adaptar el ambiente al discapacitado. Las medidas sociales que se cambien,

no van en prejuicio de los demás, por el contrario serian también ayudas a nosotros mismos,

donde debemos de promover las ayudas auditivas, de estructura física, áreas seguras y

confortables.

La sociedad se enfrenta a un problema que debe de solucionar, es un derecho adquirido

por todo ser humano, a no sentirse discriminado en su propio ambiente y el problema radica en

como colectivamente enfocamos el hecho de la discapacidad. La discapacidad es el resultado de

una afección fisiológica que un individuo padece, y ese individuo podemos ser nosotros mismos.

Qué haríamos acostumbrados a un mundo hecho para una sociedad con sus cinco sentidos

normales?, cómo podría adaptarme a una situación de discapacidad?.

El ser humano siempre está luchando por la supervivencia, la función que tiene nuestro

cerebro es sobrevivir siempre para que todo nuestro organismo funcione, no obstante los

obstáculos en los discapacitados los hacen dar el paso más lentamente y no les facilita la

sociedad nada para poder alcanzar metas, más bien las interrumpen, de actuaciones tan simples

como trabajar, estudiar, tener contacto social y afectivo. Las puertas para aquel niño o niña,
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empiezan a cerrarse repentinamente a la hora de crecer. Son personas que necesitan sentirse

útiles, que tienen capacidades para adquirir procesos de enseñanza-aprendizaje. La superación

en estas personas es un objetivo primordial, poco a poco lidian con sus frustraciones y tratan de

superarlas con un esfuerzo mayor que las de otros. Por qué los ignoramos?, dijo lo siguiente:

que   
          , temor al enfrentar situaciones que salen de lo que

supones normal en nuestra sociedad y esta ignorancia es la que los lleva a no cumplir tan siguiera

con los derechos y las leyes.

Las personas discapacitadas no tienen por qué darnos miedo. Si no conocemos sobre su

discapacidad, aprendamos; únicamente ellos pueden indicarnos en qué consiste y cuáles son las

limitaciones y posibilidades que les ocurran. Como personas tienen derecho a hacer las cosas por

sí mismos y encontrar su propia manera de hacerlas. Nosotros no podemos hacerlas por ellos o

imponerles nuestro modo de hacerlas, porque de ambas maneras los estamos atacando y no los

respetamos como personas individuales, con características y necesidades diferentes a las

nuestras.

Son personas que tienen un enorme potencial creativo en su interior que es necesario que

cada uno lo descubra por sí mismo. Esto requiere aprendizaje y no solamente en lugares cerrados

y protegidos, sino en contacto con la vida misma. Ejemplo y vuelvo a mencionar a Helen Keller,

que aprendió y llego a identificarse con el mundo porque vivía la misma naturaleza en su proceso

de enseñanza:

³Nature played a key rol in Helen¶s education. Many lessons were conducted outside,

where Helen could explore through touch´5.

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Por eso, las personas discapacitadas tienen derecho a compartir todos los espacios con las

personas que no lo son. Es en el intercambio entre todos, como se construyen los puentes de

integración. Por eso, ˜    ˜               
        

    Y si pensamos que todos somos discapacitados en algún aspecto, sabremos también

que todos tenemos necesidades especiales en distintos momentos de nuestras vidas y algún día

podría ser yo, esa persona especial.

Es muy importante que las familias se conozcan y que estemos abiertos, porque todos, de

una manera u otra, nos vamos a enfrentar con los mismos problemas: la necesidad de un cambio

de vida.

El ser no se divide en buenos o malos, discapacitados y normales, todas estas etiquetas

son imposiciones de la sociedad, y de lo que se trata es de acabar con ellas, volver al inicio,

revisar de que se trata ser un ser humano y de que va vivir, y sobre estas la verdad solo es una,

todos somos iguales, nuestra esencia es la misma, nadie es mejor ni peor, simplemente distintos,

y por eso el mundo tiene más colorido y es más divertido, si fuésemos iguales sería muy

monótono, nadie aportaría nada a otro.

Porque ese ³discapacitado´ que puedo ser Yo, siente, oye, mira, cada uno en su medida,

pero no se le pasan las cosas por alto, al contrario, está muy entrenado para ver lo que hay sin

que los demás se den cuenta, olfateando como un perro donde se encuentra el amor, donde no me

van a dañar y sentirme seguro.

Muchos sólo necesitan respeto, con eso ya serían parte del grupo, y ser parte de algo es

importante, te hace sentir bien, y de esto se trata todo, de sentirse bien en la piel de uno mismo.

Por más que uno se quiera, lo consiga, acepte su situación, si los demás no te dejan entrar y con

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esto te rechazan, te quedas solo en tu aceptación, pero nadie quiere sentir que está solo, muy

diferente es desear estar en soledad en ocasiones, no es lo mismo.

Debemos de meditar, ponernos en los zapatos del otro, Jesús dijo:

³Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor´.

 

Cuando logremos quitar el velo del temor, la inseguridad y poder brindarle todos los

servicios y derechos, es así como los discapacitados ya no tendrán que llevar esa etiqueta

distintiva, cuando la sociedad los abrace y les digan, todos somos uno, todos somos iguales,

seres humanos, nada más ni nada menos, con capacidad de amar.

³Hoy eres tú, el que sufre tanta discriminación, nosotros somos lo que estamos ciegos,

sordos e inválidos; somos realmente los que estamos discapacitados, porque al verte pasar, te

ignoramos, sin darte lo que realmente necesitas, que es nuestra mano amiga, de bondad, de

aceptación y de lucha por cambiar y adaptar el mundo a tu vida´.

Vivian Pérez Echeverría

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Rodríguez Irene. ³El 86% de ticos con discapacidad no llega a la universidad´. Periódico

La Nación, 28 de marzo del 2011.

http://www.bvs.sa.cr/php/situacion/discapacidad.pdf´

http://www.cnree.go.cr/

http://www.hrea.net/learn/guides/discapacidad.html

http://www.freewebs.com/institutohelenkeller

http://www.sordoceguera.org/vc3/organizaciones/costa_rica/fernando_centeno_guell.php

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