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y Desarrollo
Elementos desde la multiactividad cooperativa
Compilador:
Juan Fernando Álvarez Rodríguez
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Racionalidad, Cooperación y Desarrollo / Elementos desde la multiactividad cooperativa
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Racionalidad, Cooperación y Desarrollo / Elementos desde la multiactividad cooperativa
ISBN: 978-958-98246-3-4
Diseño de carátula: Christy J. Salazar
Edición, diagramación y diseño final: Helga L. Franco R.
Primera edición: 500 ejemplares
Cootradian, Escuela de Economía Solidaria, carrera 25 No.42-50
Tels.: 3407199 - 7579284
www.cootradian.com / Correo electrónico: escuelacootradian@gmail.com
Bogotá D.C., Septiembre de 2009
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Racionalidad, Cooperación y Desarrollo / Elementos desde la multiactividad cooperativa
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Racionalidad, Cooperación y Desarrollo / Elementos desde la multiactividad cooperativa
Contenido Pág.
Presentación........................................................................................... 7
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Racionalidad, Cooperación y Desarrollo / Elementos desde la multiactividad cooperativa
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Racionalidad, Cooperación y Desarrollo / Elementos desde la multiactividad cooperativa
Presentación
El documento está diseñado para ser leído por ensayos, aunque se recomienda en su
lectura integral seguir los capítulos creados. Cada autor desarrolla de forma libre,
pero apelando a su experiencia científica, los ensayos proponiendo, creando y
manifestando elementos que a su juicio son vitales para el estudio y gestión de
cooperativas multiactivas.
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Racionalidad, Cooperación y Desarrollo / Elementos desde la multiactividad cooperativa
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
Este trabajo no trata de las fallas de la cooperación, por tanto no hace alusión a la
explotación que ocurre en las transacciones mercantiles (que aquí se caracterizan
como cooperación indirecta) y tampoco alude a la corrupción de los gobernantes o
representantes de la comunidad (que garantizan la cooperación directa). En este
artículo se examinan, simplemente, las motivaciones humanas (interés, emoción y
razón, o metapreferencias) para propiciar la cooperación indirecta (comercial) y la
directa (comunitaria). Sin embargo se hace un llamado a quienes leen, justamente,
para que no defiendan ingenuamente cualquier forma o modelo de cooperación, pues
las empresas humanas frecuentemente son propicias al fraude, al engaño y a la
decepción.
Existe una cooperación directa cuando hay algún bien en común que se puede
compartir, y cuya obtención o preservación depende de la ayuda voluntaria u obligada
de los integrantes de un pequeño grupo (familia, tribu, comunidad, empresa
comunitaria, etc.). Tal cooperación directa es posible, gracias a que los mencionados
grupos son pequeños, tienen decenas o a veces algunas centenas de personas. Además
se caracterizan por relaciones personalizadas, sus integrantes comparten valores,
creencias, reglas de reciprocidad, y gozan de alguna igualdad en cuanto a posesiones
económicas y participación política. Tal tipo de cooperación tiende a ser cerrada,
endogámica y local, dado que se coopera con los más cercanos o semejantes a nosotros
(familiares, allegados, vecinos, compadres, copartidarios, etc.). El carácter directo de
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
tal cooperación se evidencia en que esta se traduce en ofrendas, regalos o tributos que
se dan a un fondo público.
Ejemplos de cooperación directa son las familias, las pocas tribus y comunidades
existentes, las organizaciones voluntarias de cooperativismo y servicios sociales
desinteresados, y en cierto modo el sistema tributario del Estado Nación. Los diversos
mercados micro y macro son ejemplos de cooperación indirecta a través de la
competencia y el poder de intercambio.
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
Bajo este punto de vista subyace una particular tendencia del pensamiento,
denominada por C. B. MacPherson (1962, 1997) como “individualismo posesivo”,
quien así definió sus características básicas: a) El individuo es libre si tiene sus propias
posesiones y capacidades y, además, no debe nada por estas al resto de la sociedad; b) La
esencia humana es la libertad como independencia de la voluntad de otra gente y la
libertad está en función de la posesión; c) La sociedad consiste en relaciones de
intercambio entre propietarios; d) La sociedad política es una invención, con el fin de
proteger las posesiones individuales y mantener ordenadas las relaciones de
intercambio entre los propietarios.
Este autor insistió en que los rasgos esenciales del individualismo posesivo coinciden
con dos características sustantivas del capitalismo y son un obstáculo insalvable para
la democracia liberal pues reducen la libertad a la liberalización mercantil, en tanto que
suprimen la equidad y la fraternidad, debido a que: i) prima la propiedad privada del
capital, para lo cual los derechos de traspaso y herencia son adicionados por necesidad,
lo cual permite una ilimitada transferencia y acumulación de riqueza; ii) se prioriza la
competencia y rivalidad entre los individuos en la adquisición de riqueza y lucha por la
preservación de esta donde el más capaz sobrevive.
Desde tal perspectiva se asume también que los individuos —al menos en potencia—
son bribones, es decir, que sus intereses pueden ser contrarios a los del resto de la
sociedad y seguramente perjudiciales para los bienes colectivos. También es asumido
que sus preferencias, aún sobre asuntos trascendentales como el amor, el delito, la
cooperación en causas colectivas, la votación, etc., se reducen a meros gustos o
propensiones que se pueden incentivar (con beneficios o premios materiales) o
desincentivar (con costos o castigos materiales). Ver (Hirschman, 1992).
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
una mano invisible los vicios privados (intereses) serían benéficos para la riqueza de las
naciones y el denominado bienestar general; (iv) B. Constant mostraría que la libertad
de los modernos tiende a estar marcada por los límites del interés, pues se reduce a
buscar la prosperidad privada y a descuidar los destinos de la colectividad. Puesto en
breve: autores como los mencionados, y las Pléyades de intelectuales que les siguen se
han encargado de contribuir a la fabricación de un espécimen humano egoísta, apto
para competir en los mercados impersonales, pero inepto para participar en acciones
colectivas.
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
orden vigente, entonces empiezan a buscar sus propios fines. Lo que en realidad nos
hace humanos es la capacidad para trazar metas de largo plazo (denominadas como
sistemas de valores, ideologías o visiones del mundo), que guían nuestras preferencias
cotidianas y, por lo mismo, moldean nuestros gustos e intereses. Por tanto, la
cooperación en empresas económicas y no económicas, aunque con alguna frecuencia
requiera de móviles exógenos (hechos extraordinarios) y de ciertos incentivos, estaría
fundamentalmente motivada endógenamente por meta-preferencias. Las escogencias
colectivas suelen obedecer a dinámicas de ciclo, en algunos ciclos las colectividades son
apáticas al interés público y los individuos cultivan su egoísmo (seguramente guiados
por visiones del mundo neoliberales) y en otras épocas las personas están influenciadas
por otras ideologías y participan más en acciones solidarias.
A. Sen (1977, 1982) mostró que las personas en la vida real, al contrario de los “tontos
racionales” de las teorías ortodoxas de la economía, experimentan emociones positivas
(amor, simpatía, etc.) y tienen compromisos (deberes) con sus semejantes y, por tanto,
suelen ser más constructores de relaciones afectivas y sociales que fríos y aislados
acumuladores de riqueza. Su trabajo es un eco del planteamiento de Smith (1976),
quien previamente a su estudio sobre la cooperación indirecta en mercados
competitivos e impersonales, había mostrado que los seres humanos estamos
profundamente ligados a los destinos de nuestro prójimo y cuidamos de este, gracias a
que experimentamos sentimientos morales y a que las sociedades están cimentadas en
deberes.
J. K. Boulding (1993), sugirió la existencia de tres tipos de poder que son: el integrativo
(que tiende hacia el amor que permite constituir familias, comunidades y otras
relaciones sociales, gracias a que distintos grupos pueden tener profundas
convergencias en materia de valores; el de intercambio (el mercado y diversas formas
de negociación); y, finalmente, el poder amenazador (que podría surgir en ciertas
situaciones de conflicto, y puede a veces llegar a ser destructivo). Estos tipos de poder
también son conocidos como poder político militar, poder económico y poder social:
mediante el primero de estos se obtiene algo del prójimo por medio de la coerción
(violenta o noviolenta); mediante el segundo lo que se obtiene de la otra persona tiene
un precio (la mercancía que damos a cambio); y con la integración compartimos con
nuestros semejantes un lenguaje, una moneda, unos valores, y con frecuencia existen
donaciones (transacciones unilaterales) y reciprocidad (se coopera con acciones
colectivas a condición de que el resto de la colectividad también lo haga).
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
Un reciente trabajo de Gintis (et al, 2005) muestra que influyentes estudiosos de la
economía y de otras ciencias sociales han hecho una interpretación sesgada de Adam
Smith (se han circunscrito al estudio de su Riqueza de las naciones y han omitido la
lectura de su teoría de los sentimientos morales). También, sobre la base de evidencia
experimental y trabajo de campo, se ocupa de mostrar que los individuos tienen
preferencias sociales diversas, sienten simpatía o antipatía por sus semejantes y, por
tanto, sus escogencias económicas y no económicas presentan diversidad de matices
que se podrían ubicar entre los extremos de la malevolencia y la benevolencia. Una
interpretación de esta literatura, permitiría afirmar que existe un extremo de
preferencias malévolas (el individuo goza con el malestar de sus enemigos); el extremo
opuesto de preferencias benévolas (el individuo experimenta bienestar si su prójimo
está bien); y un centro análogo a una posición neutral o indiferente donde se podría
ubicar el estrecho autointerés. Los mencionados autores hacen énfasis en que, de
manera voluntaria y mediante el control social a pequeña escala (comunitaria),
existen exitosas experiencias de acción colectiva que se cimientan en confianza,
sentimientos morales y preferencias sociales que, por lo demás, pueden superar en
rendimientos económicos a los controles exógenos y economicistas de la empresa
privada y de la intervención estatal.
De acuerdo con Fehr y Fischbacher (2002), una persona tiene preferencias sociales si no
solamente cuida de sus propios recursos materiales sino, además, de los recursos
materiales de agentes de referencia relevantes. Tales agentes de referencia son, por
ejemplo, los colegas de un gremio, los compañeros de un sindicato, los vecinos del
barrio, los amigos más allegados o los familiares cercanos. Los mencionados autores
han sugerido una clasificación de las preferencias sociales, la cual se esboza así: a)
Preferencia por reciprocidad o justicia recíproca: se responde a la bondad con bondad y
a la hostilidad con hostilidad; b) Aversión a la inequidad: si una persona es altruista
buscará incrementar los pagos materiales de otra persona por encima de cierta línea de
equidad. Pero si es envidiosa, entonces, buscará reducirlos por debajo de tal línea de
referencia; c) Preferencias rencorosas y envidiosas: cuando un individuo valora
siempre los pagos materiales recibidos por un agente relevante de referencia de una
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
Gintis (et al, 2005), ofrecen profundos argumentos teóricos, evidencia experimental y
cuantiosos estudios sobre manejo de recursos colectivos locales por parte de pequeñas
comunidades, para mostrar al menos cuatro hallazgos fundamentales, a saber: 1) Los
individuos no están meramente motivados por incentivos materiales (estrechos
intereses egoístas), sino que poseen sentimientos morales, esto es, motivaciones
basadas en simpatías, antipatías, o compromisos son sus semejantes que sustentan
sus preferencias sociales; 2) Dentro de las preferencias sociales, la reciprocidad es más
frecuente y sofisticada que el altruismo; 3) Las preferencias sociales son distintas del
intercambio mercantil, porque evidencian la existencia de ciertos recursos colectivos.
En particular, la reciprocidad es distinta del intercambio mercantil calculado, pues no
busca intercambiar equivalentes sino, más bien, generar conductas de cooperación
para la obtención o preservación de algún bien colectivo; 4) Sentimientos morales y
preferencias sociales pueden aumentar la productividad en las empresas. Se destaca
que si los trabajadores son también propietarios de alguna empresa, entonces
responderán con reciprocidad a la generosidad de su patrono, y esto generará más
productividad que si fuesen no propietarios incentivados con premios materiales.
6. La economía civil
El reciente trabajo de Bruni y Zamagni (2007), muestra que la persistencia de
injusticias, infelicidad y daños ambientales del capitalismo, hoy dependen más y más
de lo que ellos denominan escasez social. Autores como Boulding preferirían hablar de
una escasez de poder social, y una cuestionable abundancia de los poderes de
intercambio y de amenaza. Tales autores critican a los estudiosos quienes ven al
empresario como alguien “asocial” (sólo enfocado a generar más riqueza) o alguien
“antisocial” (un ser que explota a sus trabajadores). En contraposición a estas
posturas, desarrollan una concepción denominada economía civil, y ofrecen sólidos
argumentos para mostrar la factibilidad de unas empresas y de una economía sin fines
lucrativos, algunas de sus ideas fundamentales se sintetizan enseguida.
El rasgo esencial de la relación de reciprocidad es que las transferencias que genera son
indisociables de las relaciones humanas, es decir, el objeto de cada transacción no es
separable de las personas que le dan razón de ser al intercambio. Y en algunas
escogencias personales, prima más el impacto sobre otras personas que los meros
gustos por lo material. Las empresas sociales y la economía civil serían apenas
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
“sociedades cerradas” o clubes, desde los Estados nación hasta los gremios y los
partidos políticos. Si tan sólo aceptásemos formas de cooperación directa, preferencias
sociales, economías civiles y normas de reciprocidad, entonces tendríamos que
propender por un mundo poblado de sólo comunidades y sociedades cerradas. Si
corroboramos que nuestro mundo es cada día más impersonal y globalizado y que los
mercados se expanden a casi todos los confines de la vida, entonces deberíamos aceptar
que existen formas indirectas de cooperación. En todo caso vale la pena preservar al
menos lo que queda de familiaridad y comunidad.
Bibliografía
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las donaciones. Madrid: Alianza editorial.
Boulding, K. (1993). Las tres caras del poder. Barcelona: editorial Paidós.
Boulding, K. (1999). “Nonviolence and Power in the Twentieth Century”, in Zunes, S. (et al)
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Fehr, E. and Fischbacher, U. (2002). “Why Social Preferences Matter. The Impact of Non-
selfish motives on Competition, Cooperation and Incentives. Economic Journal: London.
Gintis, H., Bowles, S., Boy, R., and Fehr, E. (eds). (2005). Moral Sentiments and Material
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Diversas motivaciones para cooperar y distintas formas de cooperación / Freddy Cante
Hirschman, A. O. (1992). Rival Views of Market Society and other Recent Essays. Harvard
University Press. Cambridge, Mass.
Popper, K. (1971). The Open Society and its Enemies, Princeton University Press, Princeton.
Sen, A. (1982). “Choice, Orderings and Morality”, in Choice, Welfare and Measurement.
Harvard University Press: Cambridge and London.
Schelling, T. 1960. The Strategy of Conflict. Harvard University Press, Cambridge Mass.
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
2. Se presume que esas funciones pueden ser cumplidas por la empresa cooperativa de manera más eficaz o a menor costo que
por los asociados o por terceros (Co-operative Union LTD., 1981, pp.81).
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
3. Esto implica, que la Gerencia debe evitar que las pérdidas sufridas por un servicio sean ocultadas por la ganancia de
otro. No significa lo anterior, que todas las secciones cooperativizadas deban ser obligatoriamente rentables para
garantizar su sostenimiento; pero si es necesario que todas las actividades tengan claramente atribuidos los costos y
beneficios implícitos.
5. Por ejemplo: la integración de tres servicios en una cooperativa multiactiva puede ser llevada a cabo con mayor
facilidad por su gerente, que cuando se ven envueltos tres gerentes y consejos de administración de cooperativas
distintas (con objetos sociales distintos, diferentes públicos objetivos y atributos en los bienes y servicios que
procuran).
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
Identificación
del área de
actividad
Visibilización Gestión de
Determinación
de productos Cooperativas
de precios
cooperativos Multiactivas
Preferencias de Distribución
los asociados de excedentes
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
1. En el caso reseñado se analiza el grado de especialización de cooperativas de ahorro y crédito, clasificando en esta
categoría a todas aquellas cooperativas donde el 60% o más de sus activos estén concentrados en la cartera de
préstamos.
2. No cabe duda que hay secciones más rentables que otras en una cooperativa y que no es posible comparar los
ingresos esperados de una sección de ahorro y crédito con respecto a los ingresos esperados de una sección de
recreación y turismo. No procede medir la viabilidad futura de una sección por el éxito económico de otra, ya que son
los asociados los que determinan el grado de esfuerzo que destinan a una actividad en tanto su fin cooperativo es la
maximización del bienestar integral y no sólo del retorno económico. Lo que si procede es conocer en detalle el costo de
oportunidad de desarrollar cada una de las actividades y conocer en qué áreas se presentan fallas de gestión con el
objetivo de corregirlas.
3. Algunos autores como Kaplan (2000), dan cuenta de la tendencia de algunas cooperativas a perder su razón de ser,
su naturaleza y su especificidad ante el éxito económico empresarial. A este fenómeno le denominan
desmutualización o desnaturalización y se caracteriza por una pérdida progresiva de la identidad cooperativa,
disminuyen las diferencias con las empresas capitalistas, sus asociados pierden sus motivaciones iniciales y
comienzan a preocuparse más por el éxito de la empresa que por la satisfacción de sus necesidades. Este fenómeno
encuentra asidero en cooperativas en las cuales las dinámicas empresariales privilegian el crecimiento organizacional
por encima del desarrollo institucional. Autores como Lattuada (2006) refieren como en algunas cooperativas
agropecuarias la necesidad y progresiva incorporación de técnicos para la dirección y gestión del crecimiento
empresarial termina afectando los intereses de los asociados, dado que los primeros buscan el crecimiento empresarial
como medio para la mejora en su remuneración y los asociados delegan a estos las decisiones sobre su bienestar. En
definitiva, los tecnócratas de la organización terminan fomentando el crecimiento progresivo de la empresa con
niveles de distribución de excedentes cada vez menores para los asociados (sus patrones).
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
Es por esto necesario fomentar un análisis organizacional por cada sección en las
cooperativas multiactivas, desagregar la información económica y lo que es más
difícil, asociar plenamente los costos para cada unidad económica, los beneficios (sean
estos calculables o no en forma monetaria) y la valoración del efecto de estos en la
satisfacción de necesidades de los asociados. Obviamente, habrá restricciones en
algunos costos dado que la naturaleza económica de las cooperativas multiactivas
tiende a compartir los costos de personal, negociaciones, etc; pero nada que
técnicamente no sea posible atribuir a una u otra actividad con análisis de costos
medios, unitarios y marginales.
9 Si bien las cooperativas son entidades diferenciadas de las empresas capitalistas no sólo por el destino de sus
excedentes, sino por las prácticas democráticas que le caracterizan, no es idóneo excluir a las cooperativas de la
posibilidad de prestar sus servicios a terceros dado que en muchas ocasiones, las cooperativas actúan en mercados que
requieren empresas que orienten sus negocios a la satisfacción de causas sociales por encima de la necesidad de
maximizar el lucro. Algunos estudios (Defourny, 1994; James, 1996; Vidal, 1998; Álvarez y Gordo, 2006)
demuestran el rol de las cooperativas en la provisión de servicios en áreas donde las empresas capitalistas encuentran
pocos incentivos para proveer bienes o servicios con estándares de calidad tan altos que requieren cuantiosas
inversiones difícilmente redimibles bajo valoraciones monetarias de bienes no mercadeables (como en el área de la
salud, la educación, la dotación de recursos a comunidades vulnerables, etc).
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
En el caso de las actividades extraordinarias la relación social entre los agentes pasa de
empresa-asociado, para convertirse en empresa-cliente y la noción de 'sin ánimo de
lucro' se hace borrosa si las utilidades de ventas a terceros pasan a formar parte de los
excedentes de la empresa.
10 Cabe apuntar que algunas cooperativas han establecido como política empresarial un porcentaje por encima del
cual no es posible hacer operaciones con terceros. Así, algunas cooperativas prestan especial atención a la
participación de los terceros en la determinación de los excedentes finales y ven con preocupación un aumento de la
misma dado que puede repercutir en el desarrollo de intereses distintos a los contemplados en el objeto social.
Finalmente, la cooperativa se crea por y para los asociados y la presencia creciente de excedentes causados por
operaciones con terceros les produce pérdida de identidad y desmutualización. Cuando algunas cooperativas
sobrepasan estos parámetros, crean algunas sociedades especiales destinadas a atender esos mercados con condiciones
claramente diferenciadas a las de otras empresas capitalistas (se producen bienes y servicios con fines sociales,
destinado a poblaciones vulnerables, carenciadas o se entregan a precios menores con atributos como mayor calidad,
ecoeficiencia, cobertura, cantidad, etc).
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
…El negocio es cooperación cuando se trata de crear una torta y competencia cuando
está se va a repartir (Nalebuff y Braderburguer, 1996, pp.53).
El profesor español Rafael Cháves (2000), menciona los problemas de coalición entre
los intereses de asociados que procuran y revelan distintas preferencias. Para él, existen
tres tipos de asociados: el asociado ordinario que hace aportaciones y participa de las
actividades cooperativas, buscando valorar al máximo su accionar cooperativo; el
asociado de trabajo o colaborador que al no participar de la actividad cooperativizada
busca la mayor valorización por su desempeño laboral; y el asociado inactivo el cual
buscará permanentemente la mayor valorización de sus aportes y poco le importará
los servicios que éstas empresas presten bajo condiciones favorables a los asociados
(Münkner, 1988, p. 40). Ante estas distintas valoraciones y ante la posibilidad de cada
tipo de asociados participe en la toma de decisiones, se genera un conflicto de intereses
que la cooperativa debe solucionar.
12 Las cooperativas a medida que se integran obtienen mayores beneficios por la agregación de demandas y ofertas de
grandes colectivos que generan, en las entidades involucradas, un mayor aprendizaje productivo, tecnológico y de
comercialización que redunda en ventajas competitivas que dinamizan y fortalecen los mercados (Sáenz, 2006).
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
13 En definitiva, la cooperativa absorbe las fallas que el mercado presenta en la provisión de algunos bienes y
servicios y lo hace apelando a su más noble carácter: el conocimiento de su asociado como medio para una óptima
dotación de bienes y servicios orientada a satisfacer sus necesidades.
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
Cuanto más cercano sean los atributos del servicio cooperativo a los de otro tipo de
empresas en el mercado, menor será la diferenciación con las empresas capitalistas y
menor será el grado de fidelidad del asociado.
Valga recordar que desde el ámbito económico las cooperativas multiactivas pueden
asignar a sus bienes y servicios los precios del mercado como referencia,17 o pueden
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utilizar precios por debajo de éste,18 por encima 19o incluso entregarlos de forma gratuita,
siempre y cuando la asignación de precios responda a una estrategia empresarial
claramente definida y compartida por los usuarios del servicio.
16 Esto incluye una gama de posibles ámbitos de diferenciación: diferencias en precios, diferencias en calidad, cantidad
u oportunidad de acceso.
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
En este sentido, se postula que las cooperativas multiactivas crean mercados propios,
con la ventaja de que pueden acceder en tiempo real a la información sobre los
atributos deseados en los bienes y servicios que se producen y previamente han
demandado sus usuarios. Por lo tanto, el margen para la asignación de precios, no está
atado sólo a las referencias de mercado, sino que por el contrario atiende a una
dinámica económica en la que es posible ganar con precios inferiores, superiores o
incluso con estrategias de gratuidad en la asignación. Lo anterior, supone que se
conocen las necesidades de los asociados, los atributos que desean por el consumo de
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bienes y servicios y que éstos conocen de cerca los objetivos de cada acción empresarial.
17 Bajo el mecanismo de mercado el precio juega el papel de asignador de recursos en los mercados de producción,
financiación, consumo, etc. Para los bienes y servicios que no se prestan bajo los principios de mercado se constata que
la financiación no es asegurada por un precio de mercado que compense los costos de producción, sino que se realiza a
través de las contribuciones.
18 Estimulando el consumo de un producto o servicio y estableciendo por su uso mejores condiciones que las del
mercado.
19 El precio pagado reflejaría el valor del bien más un componente adicional utilizado para maximizar la función
social de la cooperativa. Por ejemplo, el precio pagado por tarjetas navideñas de apoyo a personas vulnerables o el
precio pagado por bienes producidos por asociaciones indígenas, ex-combatientes, mujeres cabeza de hogar, etc.
20 La gratuidad como estrategia empresarial en las cooperativas asocia a la actividad económica, principios de
subsidiariedad por los cuales se buscan generar mejores condiciones para que todos los asociados pueden acceder de
forma equitativa al uso de los recursos. Por ejemplo: muchas cooperativas dotan a sus asociados, de forma gratuita,
de herramientas para el ejercicio de prácticas empresariales en las cuales pueda desarrollar al máximo su potencial
productivo como garantía de la sostenibilidad de su membresía.
21 De esta manera, los asociados que consumen productos con precios por encima del mercado saben de antemano
que lo hacen para procurar una causa compartida. Los asociados que se benefician de precios menores que los del
mercado lo saben, lo valoran y no suelen ser presa fácil de promociones 'falsas' de otras empresas. Los asociados que
pagan un precio similar a los del mercado saben diferenciar los atributos que les motiva a elegir la opción cooperativa
y los asociados que se benefician de bienes y servicios dados gratuitamente conocen el esfuerzo institucional para
generar mejores condiciones para todos, lo valoran y se esfuerzan al máxima para no faltar a un 'compromiso moral'.
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
22 Aquellos que no pueden acceder a los servicios financieros ofrecidos por la banca privada.
23 Aquellos asociados al beneficio que se obtiene del uso de un servicio cooperativo frente a la mejor alternativa en el
mercado.
24 Cuando los beneficios sociales son más altos que los privados se está en presencia de economías externas (Sáenz,
2006) y estas en el ámbito asociativo tienen un efecto positivo en la economía dado que promueve el mejoramiento de
las dotaciones iniciales de los agentes.
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
De manera que el socio de una cooperativa percibe permanentemente los beneficios por
su membrecía. Sin embargo, existe una natural tendencia a infravalorar estos
beneficios en tanto no se generan en un momento de finalización de operaciones. Esta
conducta parecería irracional desde el punto de vista de la percepción de la utilidad, no
obstante, la valoración de beneficios suele hacerse en términos monetarios y en medio
de una economía de mercado así está tácitamente establecido.
25 Entendida como aquellas destinaciones para el fortalecimiento de capital social que realizan las cooperativas de
forma preventiva, con el fin de dotarse de mayor fortaleza financiera.
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
Se sabe que el bienestar de los socios de una cooperativa de consumo es mucho mayor a
la simple transacción por medio de la cual adquieren los bienes o servicios que
necesitan y, de igual manera, para una cooperativa de producción los beneficios que
perciben los socios están mucho más representados por valoraciones de no mercado
que por retribuciones económicas. Pero ese conocimiento quizá no lo hemos sabido
transmitir.
Una vía para procurar transmitir la información sobre beneficios que reciben los
socios es a través de la educación cooperativa; más en nuestra experiencia el coste del
aprendizaje es alto y suele tardar varios períodos con el agravante de que no todos los
socios están dispuestos a aprenderlo. Otra vía, la presentación de balances en los que se
agreguen los valores cooperativos; más en nuestra experiencia la información que se
brinda en los sistemas implementados es excesivamente agregada para poder
demostrar al socio el beneficio de su relación cooperativa mediante relaciones
comparadas que muestren su costo de oportunidad frente a la alternativa de mercado
lucrativo.26
Sea cual sea la vía que se tome hay un problema que atender. Es necesario visibilizar el
beneficio que recibe cada socio al realizar operaciones con su cooperativa frente a la
alternativa de mercado, o dicho de otro manera, es necesario conocer el costo unitario
de la realización de cada operación de un socio con la cooperativa a fin de que pueda
conocer cuál es el coste de oportunidad implícito por su relación con la empresa.
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
Concepto que hace mención al cálculo de los incrementos de valor generado por las
cooperativas para los diferentes grupos de interés (García, 2007)
Sin embargo, ambos sistemas no logran visibilizar el beneficio que por cada unidad
consumida o producida de forma cooperativa logran sus socios; sino que lo plantea
como un valor agregado que se incorpora en una lectura integral del balance social de
la empresa y que responde a la responsabilidad social que tiene la misma con sus
diferentes grupos de interés. Es decir, si bien las metodologías desarrolladas logran
medir y rendir cuentas a los socios, y a todos los demás grupos de interés que están
involucrados, por su accionar en relación con el cumplimiento de sus principios, no
logran visibilizar y medir de forma sencilla el procedimiento contrario: cómo a partir
de la naturaleza cooperativa es posible obtener por cada unidad que se consume o se
27 Concepto que hace mención al cálculo de los incrementos de valor generado por las cooperativas para los diferentes
grupos de interés (García, 2007).
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
En adición, es menester contemplar que con los precios se involucran todas las
dotaciones que generan bienestar y no sólo las relativas al bien o servicio que en
condiciones de mercado se puedan efectuar. Se hace referencia a diferentes atributos
que otorgan las empresas cada vez que un socio realiza operaciones con ella. Un
atributo es, bajo esta lógica, toda aquella cualidad que poseen los bienes y servicios que
se intercambian en la operación.
28 Usuario y no externos.
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
Cabe apuntar que este análisis no es exclusivo para los socios, también debe
determinarse para el resto de grupos de interés de las cooperativas, pero en este papel de
trabajo haremos énfasis en los socios.
El supuesto 1 no niega los avances de investigación que dan cuenta de que en algunos
contextos las cooperativas, por su poder de mercado y eficiencia, son las orientadoras
de los precios de mercado. Tampoco niega las evidencias de que muchas veces actúan en
segmentos de mercado en los cuales las empresas lucrativas no actúan, no les interesa
actuar o actúan ineficientemente (Chaves, 2007). Ni tampoco niega que en ciertos
segmentos de mercado el Estado es quien determina los precios de forma regulada.
Simplemente genera una reducción práctica para verificar el accionar cooperativo en
segmentos de mercado en los que la cooperativa no determina los precios. Más
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
Veamos unos ejemplos para explorar las posibles interpretaciones de la aplicación de las
funciones apuntadas. Los casos han sido tomados de cooperativas en las cuales los
autores tienen relaciones y han realizado en otros artículos documentaciones sobre su
proceso productivo.
Con este nivel de información el socio no percibe los atributos que su cooperativa le
ofrece resumidos en 0 coste por estudio de crédito y envío de estados de cuenta. El precio
de los atributos está calculado, para ambos casos, en 120 unidades monetarias. Bajo la
función descrita para el cálculo del beneficio que brinda la prestación del servicio
crediticio al socio en mención, el beneficio cooperativo sería el siguiente:
29 Se entiende, en sentido estricto, como bienes y servicios no mercadeables a todos aquellos bienes caracterizados por la
falta de un mercado convencional donde pueda determinarse libremente su precio a través de la interacción entre su curva
de demanda y de oferta (Mendieta, 1999: 1).
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
Obviamente este cálculo es para un socio específico; en la medida en que haya n socios
que quieran solicitar crédito, la agregación tendrá que realizarse por la sumatoria de
créditos desembolsados y deberán atenderse las infinidades de planes crediticios con
sus respectivos costes asociados; pero en todo caso eso el interés en este artículo se
centra en el socio i y la función que se deriva busca elementos para reportarle in situ el
beneficio cooperativo. Si se siguiera esta función para el reporte en el balance social,
sería necesario generar un índice con referencia a máximos y mínimos desembolsos
individuales que facilitara al socio visibilizar su situación particular.
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Capítulo I. Racionalidad y cooperación / Elementos para el análisis económico de la cooperativa multiactiva / Juan Fernando Álvarez
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que los beneficiarios del accionar cooperativa paguen los costes por los beneficios que
reciben, sino para visibilizar lo que potencialmente tendrían que pagar.
Al respecto Douglas North (1993), realiza ingentes aportes que abogan por incorporar
al precio los costes de transacción y estos pueden ser maximizados o minimizados
hasta el punto de dotar a la empresa de 30diferencias competitivas porque adquiere
condiciones y reconocimiento social que se convierten en elementos generadores de
beneficios futuros. Para el socio productor una cooperativa responsable
ambientalmente, que informa sobre la naturaleza de sus productos, el proceso de
producción y es transparente con sus clientes, puede obtener sellos de calidad que
repercutan en el mejoramiento de los excedentes per cápita. Para el socio consumidor el
cumplimiento de contratos con sus trabajadores evita sanciones futuras, pero sobre
todo brinda incentivos que evitan conductas ventajosas de los mismos frente a los
múltiples incentivos que existen en la asignación y negocios con proveedores cuando
hay muchos consumidores.
Ahorro en costes
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Precios hedónicos 30
En el caso expuesto de la cooperativa de ahorro y crédito se puede suponer que con los
excedentes de la actividad crediticia para vivienda, la cooperativa propicia la
construcción de un parque aledaño a un complejo habitacional promovido por la
empresa. Y es que el precio de mercado de la vivienda no está en función sólo del precio
del metro cuadrado (precio por la disposición de tierra y la adecuación de
infraestructura), sino que está ligado a un complejo cúmulo de características que
posee un bien. En este caso, la construcción del parque es una característica deseable en
el ámbito habitacional que influye en el precio del bien, pero sobre todo en el bienestar
del socio. Saber cuánto aporta esta práctica al bienestar del socio puede visibilizar la
diferencia competitiva de la cooperativa. El cálculo de una característica particular de
un bien se realiza estableciendo la contribución de cada característica al precio total del
bien.
Evaluación contingente
Análisis costo-eficiencia
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Pese a que la función se desarrolla para los socios, es posible diseñarla para los distintos
grupos de interés pero los supuestos en los que se basa sólo son aplicables en contextos
donde los precios no son determinados por las cooperativas, por lo que se requieren
algunas consideraciones para ajustarla a contextos diferentes como aquellos en los que
el Estado interviene o las empresas cooperativas han configurado restricciones de
mercado (como barreras a la entrada). Así mismo, se destaca un elemento que puede
generar restricciones la necesaria comparació a partir de los precios de mercado y no
siempre existen precios para bienes o servicios que producen las cooperativas.
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9. Apuntes finales
En estas notas se delinearon algunas características económicas implícitas a la
naturaleza de la cooperativa multiactiva y se apuntaron algunas líneas de acción para
orientar la gestión económica de este tipo de empresas, siguiendo el esquema de la
30
problematización de aspectos cotidianos a la gestión empresarial. Quedan aún muchos
aspectos por estudiar y el presente sólo apunta a servir de introductor a una línea de
estudio que es necesario desarrollar: la teoría económica del cooperativismo.
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