Tal vez el legado científico de visitantes extraterrestres, a pesar de haber sido
tan vapuleada por las ciencias ortodoxas y convencionales, es interesante obser var como la alquimia ah sobrevivido en todas las culturas todos los tiempos, co ncitando siempre la atención, la adhesión de los espíritus más preclaros, de las mentes más luminosas de sus momentos, lo cual es toda una certeza en favor de su veraci dad. Tenemos la tendencia típica con la soberbia de la gente que transita este siglo XX I de suponer que nuestros antepasados eran genéticamente eh estructuralmente, cas i superficialmente crédulos, supersticiosos y fanáticos, y olvidamos con mucha frec uencia que las cúspides alcanzadas en las disciplinas que más tienen que ver con el conocimiento puro, que fueron hechas por nuestros antepasados y desde entonces no hacemos más que matizar sobre ello. Si tomamos el caso preclaro de la Filosofía, nos daremos cuenta de que siempre vol vemos a los antiguos exponentes, desde Platón a Aristóteles, y en tiempos más recient es a Kant. Siempre nos remitimos en primer lugar, no solo por antigüedad histórica sino por ma rco referencial significativo a ciertas enseñanzas, propuestas y iluminaciones que al intelecto humano le dieron los antiguos. Lo que ha hecho el hombre contemporáneo es avanzar sobre las aplicaciones prácticas de esos conocimientos puros, nadie discutiría que quizás la tecnología hoy en día este masificadamente más avanzada que la tecnología de hace cinco mil años, masificadamen te y no individualmente, pero los conocimientos elementales, las ciencias puras sobre las cuales se construye ese desarrollo tecnológico (Filosofía, Matemáticas y l a Geometría) son sin lugar a duda señales luminosas dejadas a través de los tiempos por nuestros propios antepasados. La Alquimia de alguna manera es antecesora de la Química y madre de esta, anteceso ra en el tiempo y madre porque la cobijó y la prohijó. Hay muchos aspectos interesantes en la Alquimia que serán tocados, que nos dan la pauta de que tal vez no solo sea de origen extraterrestre sino que hasta podríam os determinar un lugar en el espacio donde esta ciencia nació, un lugar que qu izás este mucho más próximo a nosotros, de lo que nuestra curiosidad podría sospechar, un lugar que tal vez sea el planeta Venus. Venus, el planeta cuya conformación geológica y morfológica lo hace casi un hermano ge melo de la Tierra pero que en primera instancia tan diferente a esta aparece e n la observación astronómica, el lucero matutino, el planeta más cercano a nosotros, uno de los astros más conocidos desde la más remota antigüedad, pero que sin embargo ocupa un lugar muy especial en la atención de los sabios del pasado que nos han dejado pistas para que comencemos a observarlo con otros ojos. Lo primero que nos deberíamos preguntar es por qué la temperatura superficial de Ven us es de 450º, mientras que en la alta atmosfera de ese planeta es de solo 0º no puede explicarse que sea tan tórrida en su superficie solo por la acción solar que lógicamente incidiría primero en las altas capas de la nubes, ¿es posible que este ef ecto invernadero bajo el manto de nubes de Venus se deba a un residuo de gigan tescas y terroríficas combustiones nucleares ? De esto y más en la próxima parte.