investigación

Por: Dr. Abelardo Cantú Chapa,

Instituto Politécnico Nacional.
Revista PetroQuiMex, Julio-Agosto, 2008
pp 30-35

Reservas Petroleras
¿Es Posible Aumentar las Reservas
Petroleras en Campeche?

Nada es más desconocido que el subsuelo cubierto por el mar.

Todas las posibilidades de conocerlo se materializan, si se aplican metodologías
de investigación acertadas.

30

Resumen Antecedentes

La Sonda de Campeche oculta valiosa infor- En 1974 se inició la exploración petrolera en

mación geológica petrolera, es preciso cono-
cerla. Su gran potencial petrolero, actualmente
explotado, se distribuye en varios horizontes
no consecutivos, correspondientes a potentes
secuencias sedimentarias de origen marino,
de aproximadamente 6,000 m de espesor.
Todos los horizontes son fáciles de caracteri-
zar por metodologías estratigráficas rigurosas,
ya comprobadas en países petrolizados.
Para ahondar en sus posibilidades petroleras
aquí se esboza parte de los elementos geoló-
gicos que resguardan múltiples yacimientos,
en el Cenozoico y en el Cretácico Superior.
Con el análisis del material de subsuelo, recu-
perado de pozos perforados, se infieren po-
sibilidades para localizar nuevos yacimientos
de petróleo y gas, en aguas someras de esa
región. Falta realizar el estudio geológico pe-
trolero integral, para acceder a conocer la dis-
tribución razonada de tan importante tesoro.
aguas someras de la Sonda de Campeche,
con la perforación del pozo Chac 1, el cual
resultó productor de aceite y gas en las cali-
zas (brecha) del Cretácico Superior. Esa roca
fue posteriormente denominada formalmen-
te Formación Cantarell (Cantú y Landeros,
2001). Los resultados espectaculares de esa
etapa exploratoria se ampliaron y permitieron
descubrir varios horizontes productores de
petróleo y gas en esa región.
Hasta el momento, esos resultados explora-
torios no han sido integrados regionalmente,
en planos y por edades geológicas, para un
mejor conocimiento petrolero de esa basta
región del sureste de México.
Ni Petróleos Mexicanos ni el imp pueden ha-
cer ese trabajo, el primero porque distraería
recursos humanos para realizar esa empresa;
el segundo no ha tenido la capacidad para
imponer su presencia en el medio petrolero

PetroQuiMex
nacional, por falta de un programa de investi-
gaciones exploratorias.
Por otra parte, es necesario reconocer el tra-
bajo operativo y eficiente que realizaron los
técnicos petroleros, al consolidar el gran edi-
ficio que soporta ahora la economía del país.
Para tal efecto se contó con el apoyo oportu-
no de inumerables profesionistas, quienes se
convirtieron en especialistas de operaciones
geológico-petroleras. El mérito es de ellos,
por permitirnos vislubrar el potencial petrole-
ro de esa región.
Es imposible mencionar a tantos profesionis-
tas que cruzaron sus actividades diarias, en
la construcción de esa gran obra de Petró-
leos Mexicanos; en ella se tuvo la fortuna de
estar presente en el rubro de la identificación
cronoestratigráfica de varios estratos, donde
se localiza la máxima producción petrolera
nacional, desde el inicio de la actividad ex-
ploratoria hasta la presente década (Cantú
Chapa, 1977, 1982, 2003).
Parte de esa información ha sido publicada,
para dar fe del rigor con que se trabaja en
esa institución. Las aportaciones científicas
de su personal fueron consideradas, a nivel
internacional, como propuestas inéditas y
correctamente documentadas, en la cer-
tificación acertada de estudios geológico-
estratigráficos, con objetivos directos en
exploración petrolera.
La abundante información geológica resca-
tada y publicada, a medida que la barrena
perforaba potentes rocas, fue considera-
da como referencia científica valiosa, en
monografías y tesis de doctorado de uni-
versidades extranjeras, sobre geología es-
tratigráfica nacional y mundial (Callomon,
1992; Michaud, 1987).
Una de las actividades relacionada con la es-
tratigrafía aplicada a la exploración petrolera,
fue determinar la edad de la roca producto-
ra de petróleo más importante de México,
la Formación Cantarell del Cretácico Supe-
rior. Esa aportación científica ocurrió simul-
taneamente con el estudio de las rocas del
Jurásico Superior, también productoras de
petróleo en esa región. Ambas son referen-
cias geológicas no contiguas en el subsuelo
de la Sonda de Campeche.
Exploración petrolera
Los trabajos de esta actividad fueron previa-
mente documentados por medio de la geofí-
sica sísmica, única herramienta capaz de
proponer vertientes a seguir, en la intrincada
red de información desconocida de la región
marina mencionada.
Asimismo, la perforación de pozos con fines
exploratorios proporcionó abundante ma-
terial de rocas; éstas fueron estudiadas por
personal nacional que se especializó sobre
la marcha, en disciplinas geológicas, geofí-
sicas, paleontológicas y petrográficas; sus
aportes confluyeron para consolidar esa gran
obra petrolera que emergió del mar, como
valuarte de la economía nacional.
Durante la actividad operacional ocurrió un
cambio positivo en algunos sectores de su
personal, quien contribuyó con aportaciones
científicas, al documentar casos geológicos
de la Sonda de Campeche (Ortuño 2002,
Ríos 2002). Esto no ocurrió en años ante-
riores, cuando compañías extranjeras explo-
raron y explotaron la llamada Faja de Oro en
Veracruz; la documentación publicada sobre 31
ella fue muy limitada, no obstante correspon-
der a una región petrolera de gran impacto
nacional e internacional.
Localización Fig. 1. Sonda de Campeche,
Sureste de México; su
producción petrolera
La región petrolera aquí estudiada se localiza procede de pozos perforados
en la plataforma continental de aguas someras entre las isobatas 10 a 90 m.
Datos de producción, según
del sur del Golfo de México, entre las isobatas pemex (1999).
N 460 500 540 580 620
O E
S
2170
2130
2090
2050
La Revista de la Industria Petrolera
 investigación
10 y 90 metros, en la también llamada Sonda
de Campeche, la cual está aproximadamente
a 80 km al NW de Cd. del Carmen. Esa re-
gión representa una superficie aproximada de
4,000 km2 (Fig. 1).
En total, su producción petrolera procede de
varios estratos no contiguos, desde el Eoceno
al Oxfordiano (Cenozoico al Jurásico Superior).
Los mayores yacimientos de esa región corres-
ponden a la brecha de la Formación Cantarell,
que se ubica entre 1,400 y 3,650 m de profun-
didad, en los pozos aquí analizados (Fig. 2).
Por su parte, los 5 campos gigantes que
conforman el Complejo Cantarell represen-
tan una ¨mega estructura de 260 km 2, y un
tirante impregnado de hidrocarburos original
de 2,200 m; su producción principal proviene
de rocas del Cretácico, con 1,900 000 bls/d¨
(Ortuño, 2002) (Fig. 1).
Estratigrafía
La información aquí expuesta sobre este ru-
bro es compactada en dos temas, para es-
32 bozar el panorama de exploración petrolera
conocido actualmente; en ella se sugieren
posiblidades de reorientarla, al deslindarla del
necesario trabajo operacional.
Para complementar la información se recurre
a propuestas académicas, utilizadas en cur-
Fig. 2. Distribución estra-
sos de posgrado, como casos analizados en
tigráfica de la producción talleres de estudio. En ellos se muestra esa
petrolera, según profun-
didades promedio de los
importante actividad operacional, al confron-
pozos; región marina de tarla con propuestas de investigación global
Campeche. que requiere la exploración petrolera. El he-
cho de poder realizar la integración correcta
de datos cronoestratigráficos, con el apoyo
de disciplinas de estudio rigurosas, permitirá
mantener el nivel de producción demandado
a los petroleros.
El Eoceno Medio
La calcarenita Kumaza, de la edad men-
cionada, corresponde a una roca porosa y
permeable, cuyo espesor varía de 6 a 190 m
(Ríos, 2002). Sus componentes calcáreos
son representativos de medios de depósi-
to de plataforma marina, y los estratos que
conforman esa unidad están intercalados
entre dos cuerpos potentes de sedimentos
arcillosos, de origen abisal, aún no definidos
cronoestratigráficamente.
PetroQuiMex
Las dos unidades de diferente origen sedi-
mentario representan una relación estratigrá-
fica poco común en la secuencia geológica
nacional, con implicaciones petroleras. Sus
relaciones estratigráficas han sido ya anali-
zadas y documentadas en sendos estudios
cronoestratigráficos por publicar; como roca
almacenadora de hidrocarburos, su presencia
es de gran importancia en la región sur del
Golfo de México.
La calcarenita Kumaza está distribuida en una
área limitada al NW de Campeche, esa roca se
localiza parcialmente en los campos Ku-Ma-
loob-Zaap. Asimismo, se tiene información de
su presencia en áreas cercanas a esos cam-
pos, cuyos datos aún no han sido integrados
a lo ya reconocido [Fig. 1(8,9), y Fig. 3A].
Perspectivas
El hecho de poder establecer relaciones es-
tructurales y estratigráficas de la distribución
de esa roca en esos campos e incluir, ade-
más, un número mayor de datos estratigráfi-
cos a esa área, son poderosos elementos de
investigación suplementaria que redundará
en la exploración. Se trata de un caso facti-
ble de realizar en términos de investigación
geológica avanzada, para incrementar las
reservas petroleras.
Este caso, de integración y análisis de infor-
mación geológica puede ser concebida sólo
en espacios académicos, donde predomine el
apoyo del rigor científico que el caso amerita.
En cambio, la institución petrolera nacional,
inmersa en tareas operacionales inmediatas
que la jerarquía impone, no proporciona los
elementos apropiados para la investigación
científica que require el caso aquí analizado.
Limitantes
El problema del conocimiento geológico
petrolero acertado, en áreas inéditas de ex-
ploración, no se resuelve con costosas herra-
mientas y programas computarizados; es ahí
donde falla la intervención de ciertas institu-
ciones, en el ámbito de esa disciplina petro-
lera, al pretender avanzar mediante el apoyo
de herramientas modernas, publicitadas por
algunas compañías.
Al analizar la distribución espacial de los sedi-
mentos mencionados, según el plano estructu-
ral correspondiente a los campos Ku-Maloob-
Zaap (pemex, 1999), se observan deficiencias sus resultados incrementarán las reservas de
en la integración de los datos ahí configurados; hidrocarburos, toda vez que están apoyados
esto limita la actividad de exploración. por pozos ya perforados (Fig. 3B).

Un caso insólito, de representación de estruc- Las expectativas de éxito en exploración pe-

turas geológicas, corresponde a la parte aún trolera conducen a proporcionar resultados
inexplicada del plano geológico petrolero de favorables, al apoyarse en métodos de in-
los campos Ku-Maloob-Zaap. En efecto, al vestigación petrolera basados en material de
ser configurado sólo con datos geofísicos, en subsuelo y analizado cronoestratigráficamen-
ese plano no se consideran todos los elemen- te (Fig. 3C).
tos estratigráficos de pozos de los campos
mencionados (pemex, 1999) (Fig. 3). Esa región es productora de petróleo en los
campos Ku-Maloob-Zaap en estratos de di-
Asimismo, la configuración de supuestas es- ferentes edades; la explicación de dos de los Fig. 3. A) Configuración
tructuras geológicas, de importancia petrolera, principales yacimientos, Eoceno y Cretácico estructural de la cima de
la Formación Cantarell
es cortada abruptamente en la parte oriental de Superior, recae en reconocer eventos estruc- (Cretácico Superior),
ese plano. Ese modelo de configuración geo- turales y estratigráficos que afectaron esa re- en tres campos petroleros
de Campeche, según pemex
lógica no es posible asimilarla como tal, toda gión, donde se localizan esos campos. Éstas (1999). Obsérvese el área
vez que en el subsuelo no hay interrupciones corresponden a: oriental, sin integración
abruptas de estratos, como se muestra a partir de datos estructurales de
pozos.
de métodos geofísicos sísmicos (Fig. 3A). • Las propiedades físicas de la roca almacén,
la calcarenita Kumaza, por ser porosa y per- B) Dos estructuras geoló-
gicas y su relación con la
Con ese tipo de configuración estructural meable, producción de petróleo en
se pretende justificar la ausencia gráfica de • las trampas mixtas que ocurren en esa área, esa área.

estratos en el plano mencionado, por estar • los cambios laterales de litofacies, y C) Secuencia sedimentaria
afectada por potentes fallas geológicas, no • las fallas geológicas, cuyos saltos abruptos, en pozos afectada por fallas,
a nivel de Eoceno Medio,
documentadas. Aun así, éstas deben ser es- de magnitud variable, son del orden de 190 con importante producción 33
pecificadas, si las hay, para mejor control de a 350 m. petrolera. Escala horizontal
alterada.
la distribución de los yacimientos de ese nivel
geológico (Fig. 3A).

Propuestas
Varios elementos geológicos han sido ya ana-
lizados en este espacio, relacionados con ele-
mentos estructurales inmutables impuestos
por métodos sismológicos, en la configuración
de los campos mencionados. Parte de esas
observaciones las retomamos, por contener
elementos geológicos no contemplados en
propuestas oficiales; éstas son incompatibles
con el avance de la exploración racional que
precisa el país. Por lo mismo, no es posible
mantener expectativas de éxito en esa región,
cuando el análisis geológico es deficiente
(Cantú Chapa, 2006).

A ese respecto, aquí se ilustran dos secciones

geológicas obtenidas en prácticas académi-
cas; en ese material gráfico se muestran fallas
geológicas y su relación con el yacimiento en
explotación del área mencionada. Como pro-
puestas de exploración, representan material
complementario, según datos cronoestrati-
gráficos obtenidos de pozos de los campos
mencionados. Al analizarlos apropiadamente,

La Revista de la Industria Petrolera

 investigación

Fig. 4. A) Sección estra-

tigráfica entre los pozos
Abkatun 74 y Cantarell 57.
Obsérvese la potente brecha
de la Formación Cantarell
(flechas verticales), con
subdivisiones litológicas en
pozos centrales. Los pozos
Abkatun 5 y Cantarell 82
representan las secciones
tipo de las formaciones
Abkatun y Cantarell,
del Paleoceno Inferior y
Cretácico Superior, respec-
tivamente. Posibles hiatos o
cambios de facies hacia los
pozos laterales de la sección.
Horizonte de referencia: cima
de la Formación Abkatun
(Cantú y Landeros, 2001).

B) Sección estructural
configurada con los mismos
pozos; varias fallas inter-
ceptan el área. La cima de
la Formación Cantarell, con
desplazamiento máximo de
1,600 m, se localiza entre
1,800 y 3,400 m de profun-
didad, en distancias muy
cortas, de 30 km aproxima-
damente. Escala horizontal
alterada.
34
Estos elementos actuan mediante estructu-
ras geológicas que producen hasta 20,000
b/d y permiten explicar su importancia,
como roca almacenadora de petróleo. La
integración de esos elementos geológicos
no son aun factibles de realizar en propues-
tas oficiales.
La Formación Cantarell (Campaniano-
Maestrichtiano)
Unidad caracterizada por una brecha cal-
cárea, constituida por fragmentos del mismo
material, cementados por caliza micrítica.
Esa unidad formacional representa la roca
productora más importante de México; el
yacimiento está caracterizado por trampas
estructurales y estratigráficas mal analiza-
das en propuestas institucionales. La roca
sello de ese importante yacimiento nacio-
nal es la lutita de la Formación Abkatun,
de edad Paleoceno Inferior, los planos de
fallas actuan como trampas. (Fig. 4A).
En esos pozos se determinaron foramíniferos
globotruncanidos que le asignan una edad in-
cuestionable de Campaniano-Maestrichtiano
(cima del Cretácico Superior) (Cantú y Lan-
deros, 2001).
Esos dos miembros han sido subdivididos
a su vez, en otros tantos cuerpos, presentes
sólo en algunos pozos del Complejo Cantarell.
Una sección estratigráfica, de dirección oeste-
este, cubre aproximadamente 30 km de largo.
La Formación Cantarell tiene aproximadamen-
te 260 metros de esperor, en el pozo Cantarell
82; en cambio, sólo tiene 70 metros en el pozo
Abkatun 74. Esta formación cambia lateral-
mente a una unidad arcillosa en otras áreas
(Cantú y Landeros , 2001) (Fig. 4A).
La cima de la Formación Cantarell manifiesta
un desplazamiento máximo de 1,600 m en los
pozos de la sección aquí ilustrada. A su vez,
esa cima se localiza entre 1,800 y 3,400 m
de profundidad, en distancias muy cortas, del
orden de 30 km aproximadamente (Fig. 4B).

En otras ocasiones ya se ha mostrado la Todos estos elementos estructurales y estrati-

litología variable de esa unidad formacional,
la cual ha sido dividida en dos miembros,
inferior y superior, según sus característi-
cas físicas reflejadas en la curva de rayos
gama del registro radioactivo, correspon-
diente a los pozos implicados en el estudio
mencionado.
gráficos, caracterizados por fallas de diferente
tipo y por cambios laterales de litofacies, influ-
yen en los yacimientos de esa formación en el
Complejo Cantarell.
Sin embargo, quedan pendientes muchos da-
tos estratigráficos de esa formación, según

PetroQuiMex
material de los pozos de ese mega yacimiento interpretación geofísica impuesta en tareas
nacional; estos aún no han sido considerados de exploración,
en estudios regionales, su integración y análi- • las posibilidades de localizar más yacimien-
sis contribuirá poderosamente en el incremen- tos en la región de Campeche no han sido
to de las reservas petroleras. agotadas,
• la utilización de metodologías estratigráficas
Conclusiones ha sido rebasada por análisis ineficientes,
a nivel petrográfico, que afecta el estudio
Como ya se señaló, los datos cronoestratigrá- geológico-petrolero de esa región,
ficos de la calcarenita Kumaza (Eoceno Medio) • el caso petrolero de la exploración racional
y de la brecha de la Formación Cantarell (Cre- en Campeche corre el riesgo de ser des-
tácico Superior) no han sido integrados ni en el cuidado, como ocurrió con la Faja de Oro,
Complejo Cantarell, ni en áreas vecinas. debido a la premura impuesta por aumentar
las reservas de petróleo.
De lo anterior se desprenden las observaciones
siguientes, en exploración y en la administra- ¿Más petróleo y para qué? ¿De qué estratos?
ción del petróleo, las
cuales no son com-
patibles; la segunda REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
predomina sobre la
primera. Angeles-Aquino, F. and A. Cantú-Chapa, 2001. Subsurface Upper Jurassic Stratigraphy in the Campeche Shelf, Gulf of
Mexico. American Association of Petroleum Geologists, Memoir 75: 343-352.
• No se ha dado una
explicación geoló- Cantu Chapa, A. 1977. Las amonitas del Jurásico Superior del pozo Chac 1, Norte de Campeche (Golfo de México).
gica, de la distri- Revista del Instituto Mexicano del Petróleo, 9(2):8-39.
bución regional de
esas dos unidades Cantu Chapa, A. 1982. The Jurassic-Cretaceous Boundary in the subsurface of Eastern Mexico.Journal of Petroleum 35
formacionales, Geology, 4(3):311-318.
• se desconocen da-
tos estratigráficos y Cantu Chapa, A. 2006. Exploración petrolera incompleta, caso Ku-Maloob-Zaap en Campeche. Revista PetroQuiMex,
estructurales pro- May-Jun: 21-26.
cedentes de cam-
pos vecinos, para Cantu Chapa, A., and R. Landeros. 2001. The Cretaceous-Paleocene boundary in the subsurface, Campeche Shelf,
ser integrados a lo Southern Gulf of Mexico. American Association of Petroleum Geologists, Memoir 75:389-395.
ya conocido, que
expliquen la delimi- Cantu Chapa, A. and E. Ortuño-Maldonado. 2003. The Tithonian (Upper Jurassic) Edzna Formation, an important hydro-
tación espacial de carbon reservoir of the Campeche Shelf, Gulf of Mexico. American Association of Petroleum Geologists, Memoir
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los dos complejos,
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• no se han analizado Jurassic of the Circum-Pacific. World and Regional Geology 3. Cambridge University Press: 247- 272.
los cambios latera-
les de litofacies de Michaud, F., 1987. Stratigraphie et Paléogeéographie du Mésozoique du Chiapas (Sud-Est du Mexique). Thèse de
las dos formaciones Doctorat de l´Université Paris 6. Mémoires de Stratigraphie, Université Pierre et Marie Curie, 301 p.
mencionadas, según
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ral, y de acuerdo a
su representación Pemex Exploración y Producción, 1999. Las reservas de hidrocarburos de México, Vol. II. Los principales campos de
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gistros geofísicos de
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gicos no han podi-
do deslindarse de la

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