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RESUMEN
La ordenación territorial en zonas de vocación forestal intenta resolver un conjunto de problemas
entre los cuales está la conservación y la restauración de los bosques. En este trabajo se defiende
la hipótesis de que una correcta planificación se facilita conociendo las potencialidad del territo-
rio expresada cartográficamente mediante modelos de idoneidad. Estos modelos pueden cons-
truirse objetivamente mediante métodos de análisis espacial que relacionan la presencia/ausencia
del bosque con un conjunto de variables ambientales influyentes. En este trabajo se presenta un
ejemplo de la utilidad de estos modelos como criterio orientador sobre futuras actuaciones de or-
denación. Se muestran resultados procedentes del análisis del territorio potencial del rebollar, o
bosque de Quercus pyrenaica, en el territorio de la Comunidad Autónoma de Extremadura (Espa-
ña). El análisis del modelo de idoneidad permite establecer criterios de actuación en conservación
y restauración forestal, recomendando zonas de actuación prioritaria.
1. INTRODUCCIÓN
La ordenación territorial en zonas de vocación forestal intenta resolver un conjunto de problemas
entre los cuales está la conservación y la restauración de los bosques. En una zona como la Penín-
sula Ibérica, donde los bosques han sido progresivamente eliminados a lo largo de siglos, entre los
objetivos de la ordenación forestal destacan la reducción de la fragmentación del bosque y la con-
servación de la diversidad.
Para conseguir estos objetivos es necesaria una información territorial básica de buena calidad [15]
que permita conocer el territorio y orientar las actuaciones desde un punto vista espacial. Pero la
disponibilidad de información territorial no es suficiente, sino que se hace necesario disponer de
métodos objetivos de análisis que permiten, entre otros objetivos, delimitar espacialmente las zo-
nas de actuación y definir las actuaciones recomendables o prioritarias.
A la hora de analizar la potencialidad forestal del territorio, los modelos de idoneidad son una al-
ternativa poco utilizada cuya utilidad intentaremos demostrar en este trabajo. Se entiende por mo-
delo de idoneidad a un mapa donde cada punto del territorio tiene asignado un valor que refleja lo
adecuado o inadecuado de la localización para un uso determinado. Los modelos de idoneidad
pueden construirse mediante técnicas diversas entre las cuales destacan la regresión logística y mé-
todos no paramétricos como CART (classification and regression trees) y MARS (multiple adap-
tative regression splines). Todas estas técnicas exigen disponer de un mapa de vegetación (la va-
riable dependiente) y de cartografía de un número suficiente de variables ambientales potencial-
mente influyentes en la distribución de la vegetación (clima, topografía, litología, etc.). El funda-
mento del método está en establecer relaciones entre las variables ambientales y los patrones de
distribución espacial de la vegetación. Lógicamente, la distribución espacial de cada categoría de
vegetación responderá, en su caso, a un modelo diferente consecuencia de los diferentes requeri-
mientos o preferencias ecológicas de las especies de cada comunidad vegetal.
La zona definida como ‘adecuada’ en un modelo de idoneidad puede interpretarse como el área de
distribución potencial del tipo de vegetación correspondiente. Es en este área de distribución po-
tencial, donde los factores ambientales tienen valores adecuados para la implantación y crecimien-
to de, por ejemplo, cierto tipo de bosque. Normalmente, el área de distribución actual es significa-
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tivamente menor que el área de distribución potencial ya que el bosque ha sido eliminado secular-
mente de zonas donde existía en el pasado.
Veremos que conocer el área de distribución potencial permite obtener datos valiosos a la hora de
definir actuaciones de restauración y de delimitar áreas de actuación prioritaria. En este trabajo se
presentan ejemplos elaborados para los bosques de rebollo o melojo en Extremadura pero los pro-
cedimientos utilizados son de validez general e independientes del tipo de vegetación y área de
estudio.
En el presente trabajo, los valores de los coeficientes de la regresión logística se han calculado a
partir de un muestreo estratificado sobre las zonas de presencia y ausencia del rebollar. El proceso
es el siguiente:
1. Se realizaron dos muestreos aleatorios sobre las áreas de presencia y ausencia de bosque. La
primera muestra se usa para el cálculo del modelo logístico y la segunda para la verificación
del modelo. De acuerdo con las recomendaciones expresadas en [17] ambas muestras poseían
un mismo número de casos positivos y negativos.
2. La regresión logística se realizó con un programa estadístico comercial y un método paso a pa-
so (stepwise) por máxima verosimilitud.
3. El control de la bondad del ajuste se realizó comparando los resultados del modelo con la
muestra de contraste para diversos valores de punto de corte mediante el cálculo del área bajo
la curva ROC (Receiver Operating Characteristic)
Finalmente, se aplicó la ecuación logística a la totalidad del territorio para generar el modelo de
probabilidad. Los resultados fueron analizados comparándolos con el mapa de vegetación actual.
3. RESULTADOS
3.1. El modelo logístico
El método de análisis retuvo 7 variables significativas cuyos coeficientes y estadísticos básicos se
muestran en la Tabla 1.
Figura 3. Aplicación del modelo logístico al área de estudio. Los valores de probabilidad se han
codificado para mayor claridad según la leyenda siguiente: blanco: 0.00-0.10 (incompatible);
gris claro: 0.11-0.25; gris medio: 0.26-0.50; gris oscuro: 0.51-0.75; gris muy oscuro: 0.76-1.00.
El área fuera de la zona de estudio se representa en negro.
3.3. Análisis del área potencial disponible
Superponiendo el modelo de probabilidad a la información del Mapa Forestal de España se ha
comprobado la vegetación actual existente según el valor de idoneidad del área potencial para
Q. pyrenaica. Este análisis es similar al realizado en [9] para estimar la pérdida de biodiversidad
ante la extensión de especies de plantas invasoras. La combinación de ambos mapas, idoneidad y
vegetación actual, permite obtener resultados que ayudan a comprender algunos aspectos de la di-
námica vegetal y facilitan la propuesta de actuaciones. Los resultados referentes a formaciones ar-
bóreas, bosque y plantaciones, se muestran como ejemplo a continuación.
3.3.1. Otros bosques
Unos 1198 km2 del área potencial de Q. pyrenaica están actualmente cubiertos por otras dos espe-
cies de Quercus que pertenecen a otras series de vegetación. Las Figura 4 y Figura 5 muestran la
distribución de frecuencias de estas especies en el área de distribución de Q. pyrenaica; los valores
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de idoneidad han sido agrupados en 9 clases. Puede observarse que tanto Quercus suber (alcorno-
que) como Q. rotundifolia (carrasca) presentan histogramas que indican preferencias ambientales
diferentes de Q. pyrenaica ya que la superficie ocupada se reduce en las zonas de mayor idonei-
dad.
10000
Q.rotundifolia casi desaparece de las zo-
5000 nas de alta idoneidad para Q. pyrenaica.
0
1 2 3 4 5 6 7 8 9
Quercus suber
2000 Figura 5. Presencia de Q. suber en las clases
1500 de probabilidad de Q. pyrenaica. Como en el
area km²
En la planificación forestal, estas zonas deben ser excluidas del área potencial ya que se encuen-
tran ocupadas actualmente otro tipo de vegetación que debe respetarse. Resulta interesante obser-
var la exclusión no tan estricta del alcornoque respecto a las zonas de alta idoneidad del rebollo.
En efecto, existen zonas de cierta extensión donde ambas especies aparecen en formaciones mix-
tas. Debemos recordar que el alcornoque, identificada a veces como una especie xerófila, no lo es
y presenta exigencias de humedad que lo excluyen de zonas más áridas donde la carrasca se con-
vierte en la especie dominante.
3.3.2. Plantaciones arbóreas
En la zona de estudio existen plantaciones de Castanea sativa y de varias especies de Pinus y de
Eucaliptus. Las distribuciones de frecuencias se muestran en la Figura 6.
area km²
300
100
200
100 50
0 0
1 2 3 4 5 6 7 8 9 1 2 3 4 5 6 7 8 9
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area km²
area km²
40 400
20 200
0 0
1 2 3 4 5 6 7 8 9 1 2 3 4 5 6 7 8 9
Figura 6. Presencia de las 4 especies más frecuentes usadas en plantaciones en las clases de
idoneidad de Q. pyrenaica.
Puede observarse que Pinus pinaster y Castanea sativa fueron plantados en áreas de alta idoneidad
para Q. pyrenaica. En cambio, Pinus pinea y Eucaliptus camaldulensis manifiestan preferencias
muy distintas y se distribuyen en áreas de baja idoneidad. Otra especie no representada y menos
extendida, Pinus sylvestris con 11.5 km2, aparece de forma exclusiva en la clase de máxima ido-
neidad.
Finalmente, debe destacarse la presencia en zonas idóneas de formaciones arbustivas donde domi-
nan los escobonales (Cytisus sp.) y los brezales (Erica sp.). Estas formaciones deben interpretarse
como etapas de sustitución presentes donde el bosque original ha sido eliminado; si la degradación
del suelo ha sido moderada proliferan los escobonales mientras que los brezales son característicos
de suelos más degradados.
por ejemplo, además de áreas relativamente extensas de Q. pyrenaica existe la posibilidad de redu-
cir la fragmentación del bosque actuando sobre zonas de matorral que actualmente separan los ro-
dales de bosque y de ampliar su extensión total con la sustitución de las plantaciones de Pinus.
DISCUSIÓN
Tradicionalmente, los factores ambientales han sido considerados como los mayores condicionan-
tes de la distribución de la vegetación [13]. Los primeros trabajos para estalecer estas relaciones
fueron analíticos, explorando la asociación entre una especie y una variable [5], posteriormente los
medios informáticos permitieron abordar análisis multivariables (análisis factorial, clasificación,
etc.).
Los modelos de idoneidad construidos mediante regresión logística sintetizan la respuesta de las
especies vegetales ante un conjunto de factores ambientales que intervienen en su distribución es-
pacial. Se trata de modelos basados en datos reales (data driven) y en métodos estadísticos por lo
que están libres de subjetividad. Nuestra experiencia es que este tipo de modelos suele dar buenos
resultados en las zonas montañosas debido a que los factores limitantes son principalmente físicos:
altitud, insolación potencial, pendiente, etc. Estos factores suelen ser conocidos (elevación) o, al
menos, pueden ser modelizados con precisión suficiente (insolación potencial).
Quercus pyrenaica es una especie de amplia distribución biogeográfica en la Península Ibérica
pero siempre asociado al llamado sector submediterráneo: montañas con mayores precipitaciones
que las llanuras circundantes, por lo que permiten la existencia de especies que soportan mal la
aridez estival [2]. El modelo de idoneidad construido refleja con bastante exactitud la distribución
espacial actual del rebollo y predice un área de distribución potencial de extensión y características
razonables desde el punto de vista biológico. Otro argumento que aumenta la fiabilidad aparente
del modelo es el análisis de la vegetación actual en el área potencial. En todos los casos se trata de
formaciones que pueden considerarse de sustitución en el sentido de la sucesión ecológica de
comunidades vegetales. Las formaciones arbustivas y los brezales se generan por eliminación del
bosque y pérdida progresiva del suelo. Las plantaciones arbóreas de pinos probablemente se re-
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alizaron sobre este tipo de áreas previamente degradadas y se encuentran actualmente sometidas a
una práctica silvícola de entresaca para producción de madera [11].
La transición del modelo a las actuaciones es un problema cuya solución necesita información
complementaria, especialmente sobre la propiedad del terreno y su gestión económica actual.
Abordar este aspecto excede la capacidad de este trabajo y las actuaciones que se proponen debe
considerarse sólo como un ejemplo de aplicación directa de la información que proporciona el
modelo. Debe destacarse, sin embargo, que los mapas y estadísticas que pueden elaborarse medi-
ante los métodos expuestos reflejan datos objetivos de innegable utilidad; la combinación de estos
mapas con el parcelario y datos básicos de gestión de los montes puede completar satisfactoria-
mente un sistema de decisión útil y que consideramos novedoso como método de ayuda a la de-
cisión en planificación territorial.
AGRADECIMIENTOS
Este trabajo forma parte del Proyecto “Desarrollo de modelos de idoneidad para la vegetación en
Extremadura mediante Sistemas de Información Geográfica. Aplicación a la conservación y regen-
eración de recursos, a la gestión y conservación de la diversidad biológica y a la recuperación de
zonas degradadas” cofinanciado por la Junta de Extremadura (Consejería de Educación, Ciencia y
tecnología) dentro del II Plan Regional de Investigación, Desarrollo Tecnológico e Innovación de
Extremadura y Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).
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