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"Creo que tengo un problema y quiero resolverlo: no me va bien con la comida. No lo entiendo, podría enfrentarme a ello pero cada vez tengo menos fuerzas. He adelgazado mucho. A veces desearía no haber empezado nunca con eso, pero ya no puedo parar. "
Moïra tenía catorce años cuando “el mal de la belleza” –la anorexia– se instaló en su vida cotidiana.
Cuando la enfermedad invadió su cuerpo y amenazó literalmente con derrotarla, Moïra escribió en un diario su experiencia al borde de la muerte. Ahora, años después, recupera esas páginas y analiza capítulo a capítulo la transformación física y psicológica sufrida durante aquella época.
Con la esperanza de que otras jóvenes se atrevan a reconocerse en estas páginas y comprueben que es posible ser más fuerte que la anorexia y vencerla, Moïra nos ofrece una crónica que contiene angustia, sufrimiento y dolor, pero también amor, esperanza y valentía. Un libro que muestra la lucha desesperada contra un enemigo inusual: el propio cuerpo.
"Creo que tengo un problema y quiero resolverlo: no me va bien con la comida. No lo entiendo, podría enfrentarme a ello pero cada vez tengo menos fuerzas. He adelgazado mucho. A veces desearía no haber empezado nunca con eso, pero ya no puedo parar. "
Moïra tenía catorce años cuando “el mal de la belleza” –la anorexia– se instaló en su vida cotidiana.
Cuando la enfermedad invadió su cuerpo y amenazó literalmente con derrotarla, Moïra escribió en un diario su experiencia al borde de la muerte. Ahora, años después, recupera esas páginas y analiza capítulo a capítulo la transformación física y psicológica sufrida durante aquella época.
Con la esperanza de que otras jóvenes se atrevan a reconocerse en estas páginas y comprueben que es posible ser más fuerte que la anorexia y vencerla, Moïra nos ofrece una crónica que contiene angustia, sufrimiento y dolor, pero también amor, esperanza y valentía. Un libro que muestra la lucha desesperada contra un enemigo inusual: el propio cuerpo.
"Creo que tengo un problema y quiero resolverlo: no me va bien con la comida. No lo entiendo, podría enfrentarme a ello pero cada vez tengo menos fuerzas. He adelgazado mucho. A veces desearía no haber empezado nunca con eso, pero ya no puedo parar. "
Moïra tenía catorce años cuando “el mal de la belleza” –la anorexia– se instaló en su vida cotidiana.
Cuando la enfermedad invadió su cuerpo y amenazó literalmente con derrotarla, Moïra escribió en un diario su experiencia al borde de la muerte. Ahora, años después, recupera esas páginas y analiza capítulo a capítulo la transformación física y psicológica sufrida durante aquella época.
Con la esperanza de que otras jóvenes se atrevan a reconocerse en estas páginas y comprueben que es posible ser más fuerte que la anorexia y vencerla, Moïra nos ofrece una crónica que contiene angustia, sufrimiento y dolor, pero también amor, esperanza y valentía. Un libro que muestra la lucha desesperada contra un enemigo inusual: el propio cuerpo.
Cronica de una
reo ue tno un rable yale
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tengo moos rcs He alscado ihe
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/ j ‘nunca con esto, pera ya no puedo parar:
Molra tena catorce anos cuando
«el mal dela belleza» -la anorexa~
se instal6 en su vida cotidiana
Cuando fa enfermedad invadio su cuerpo
xy amenaz6 Iteralmente.con derrotara,
Movra escribié en un diario su experiencia
al borde de la muerte. Ahora, aos después,
recupera esas pauinas y analiza capitulo
4 capitulo [a transformaciénfisicay pscoldaica
suid durante aquella €poca
Con la esperanza de que otras jovenes se atrevan
2 reconocerse en estas paginas y comprueben
que es posible ser mis fuerte que la anorexia
yy vencerla, Moira nos ofrece una crénica
que contiene anaustia,surimiento
y dolor, pero tambien amor, esperanza y vatentia.
Un Ivo que muestra la lucha des:
contra un enemigoinusual: lp vpio seroduedian)
TRODUCCION
fo tenia diez anos, coment a escribir un diario porque que
ser escritora. Al principio no escribia muy a menudo, pero 3
fda que empecraba mi sald, empecé a hacerfo con mis ie
fenca. En este diorio deseribo céeno la anorexia se col6 en mi
‘como me domins y me gané, edmo luché para eurarme y
jo me fue cuando logré escapardel umbral de lamuerte, |
“Alprincipio eseribia solo para mi, Primero, para sacarmelo de
Jcabera,y luego, para no olvidar jams lo que habia aprendigo
‘mi enfermedad, Como no fue despues, sino en el mismo
nto, que escribi mi dole, lant, felicidad y alegra, creo que
hhechos son directamente perceptibles Al mismo tiempo, veo
1 entances desfiguraba las cosas, me engaiaba a mi misma o,
‘plemente, no eseribia lo que realmente sucedia. Desde el
mento en que ahora me encuentro, comento lo que en su dia
crib estos comentarios estan marcados en cursiva entre os fag-
308 del diario
Fibro est dvidico on tes partes La primera ofrece una mae
‘de mi vida antes de enfermar. La segunda explica claramen- |
‘eSmo, primero lentamente, pero cada vez con mis evidencia, la
orenia inwacio mi vida y literalmente, me venci. La tercera
rte deseribe mi proceso decuracisn,
Estas en mis experiencis, y no quiero afar que sean igo
s para todo el mundo, Cada persona es diferente y esta enfer>‘meclad se manifiesta de manera distinta en cada uno y tene un
‘motive dlstnto; aun asf, exis
aspoctos comnes, Tampaoco pe
tendo que mi libro cure a nadie; es0 no lo puede hacer nade,
excepto el enerme mismo, Miinico objetivo ss que lens chiens
reconacerse en él y que sus entornos tambiga Jo 2660"
nozcan. Mi mayor deseo es animar a los chicas que padecen esta
enfermedad para que vean que no son las nies y para que come
prucben gue realmente es posible ser més fuerte que la anorexia y
vencerla
Durante mi proceso de curacin, las personas encangadas de
sguiarme no hicieron hincapié en la comida, Primero, mi propio
fentomo me permitié sanar psicolégicamente, y después isica
‘mente (para que yo misma comenzara a comet.
[Espero que mi libro dé otra vision de como se puede tratar la
“anorexia: que se mite mas hacia Ia persona hacia el ser human que
hay tras la enfermedad, y que esto sea punto de partda en lagar
cle solamente laimagen de la enfermedad o de los sintomas.
Debo decir que me asusta descubrirme de esta manera, peso
se trata simplemente ce sun libect soy yo, con toa mi fealdad y
bolleza.Y, aun asf, quiew hacerlo, pore s€céma se pueden ser
tirotraschieas y porque me hubiera ayudado mucho leer en aquel
periedo-un libro de tna companera de fatigas
Motta Muller
Amster, marzo de 2000
PRIMERA PARTE