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Una guía sobre cómo cuidar el corazón de la familia

La familia cálida y solidaria

Amor… la fuerza que mantiene viva una familia


Unión… la fuente del cariño
Felicidad… que rodeará su familia veinticuatro horas al día

Este libro comparte con ustedes m uchos relatos maravillosos, que tal
vez no hayan escuchado antes

Charla de Dhamma pronunciada por


Phrabhavanaviriyakhun
(Phra Phadet Dattajeevo)

Escrito por S. Phongsawasdi


y The Exemplary Youth Development Foundation
Prólogo

Buda señaló que todos l os problemas existentes en este


mundo tienen su origen en las impurezas mentales ( kilesa)
que residen dentro de nosotros.

De la misma manera, los problemas familiares


provienen del kilesa que tiene la pareja. Empiezan cuando
estas dos personas, quienes s e aman mutuamente, deciden
vivir juntos como marido y mujer y aceptan crear una
familia.

Cuando dos personas, que todavía poseen kilesa,


deciden vivir juntos, tienen que adaptarse, porque las dos
están compartiendo atributos positivos y negativos en ese
hogar. Si combinan sus atributos positivos, su unión
marchará sobre ruedas. Sin embargo, si integran sus
atributos negativos, su experiencia familiar resultará
bastante explosiva. Luego, si tienen hijos, no importa el
número, sus obligaciones aumentarán . Además de las
responsabilidades de ser marido y mujer, tendrán
adicionalmente la responsabilidad de ser padres.

La presencia del recién nacido obligará a los padres a


trabajar más para asegurar los medios necesarios para
cuidar al niño. En consecuen cia, cuantos más hijos decidan
tener, más responsabilidades tendrán.

El kilesa es como una enfermedad destructiva que


reside en la mente de los seres humanos desde su
nacimiento. Incluso un bebé de un día de nacido tendrá
kilesa adentro. Nadie sabe cóm o el kilesa llegó a residir
dentro de nosotros, pero está arraigado en cada ser
humano, incluso en nuestros propios hijos.
El hecho de que los niños se conviertan en buenas
personas dependerá de cada bocado de comida, de cada
gota de agua y de cada gramo de leche que los padres
ofrezcan a los niños durante su crianza. Con cada una de
estas acciones los padres estarán criando correctamente al
niño.

Si los criamos como es debido su kilesa disminuirá y


las virtudes se cultivarán en ellos. Entonces, el mun do se
beneficiará con su existencia. Sin embargo, si los criamos
incorrectamente, su kilesa aumentará y como resultado
surgirá el mal comportamiento. Entonces, el mundo
resentirá su presencia.

Los problemas familiares actuales no desaparecerán


fácilmente ni en un futuro próximo, dado que provienen de
la incapacidad de los padres para controlar a sus hijos y su
propio kilesa.

Para crear una familia de buen corazón, uno necesita


tener un sistema a través del cual se entrene para controlar
y eliminar el kilesa. Esto se puede lograr de las siguientes
maneras:

1) Controlar su kilesa para que su mal


comportamiento no se extienda a otras personas.
2) Compartir su conocimiento, capacidades y
virtudes con los demás.
3) Absorber las virtudes de otros y cultivar e
incorporar estas cualidades positivas dentro de sí
mismo.

En este libro, se presenta una colección de sabiduría,


experiencias y recomendaciones, tomadas de las enseñanzas
del budismo y de enseñanzas transmitidas de nuestros
antepasados a nosotros. Presentamos métodos que
podemos incorporar en nuestras vidas para crear una
familia cálida y solidaria .
El equipo que ha trabajado en este libro espera que
todo el contenido del mismo pueda ayudar a los lectores a
tener éxito en la creación de una familia cálida y feliz cuyos
miembros se apoyen con amor y comprensión: que tengan
todos una familia con cimientos sólidos, con la sabiduría,
las capacidades y las virtudes que contribuyan a la crianza
de más individuos buenos y virtuosos en las generaciones
venideras. Ellos serán los representantes de la sabiduría,
las capacidades y las virtudes de sus padres que al final les
servirán a ellos mismos y al mundo entero.

S. Phongsawasdi

Y
The Exemplary Youth
Development Foundation
Dedicatoria

Que cada familia que lea este libro tenga la felicidad, el


éxito y la determinación de realizar siempre buenas
acciones.

Dedicamos los méritos acumulados a través de cada


palabra escrita en este libro a nuestros bisabuelos (Soon y
Hoye Pongsawat) y a t odos los antepasados que ya han
fallecido. Sus experiencias de la vida real, ilustradas en este
libro, fueron nuestra fuente de inspiración.

Que reciban nuestros dos bisabuelos, todos los


familiares que ya se han ido y las numerosas personas que
han contribuido a la publicación de este libro, felicidad y
éxito en esta vida y en las venideras. Mientras sigamos en el
Samsara (ciclo de vida y muerte), que nazcamos con todos
los requisitos necesarios para seguir adelante en la
búsqueda de la Perfecciones en cada vida, para que
podamos vencer al Mal, erradicar por completo todas las
impurezas mentales y alcanzar el Nirvana.

Los hijos de la familia Phongsawasdi


Índice

Prólogo
Dedicatoria

Parte I ~ Las bases de la familia

Capítulo 1 El corazón de la familia


Capítulo 2 Cómo manejar la vida matrimonial
Capítulo 3 Mantener vivo el amor
Capítulo 4 La madre de gran virtud de la c asa
Capítulo 5 El nacimiento de una persona meritoria
Capítulo 6 Educar a su hijo desde el embarazo

Parte II ~ Educar a sus hijos

Capítulo 7 Educar a los niños para que sean inteligentes


y virtuosos
Capítulo 8 Matar con la bondad: L os padres que
defienden a sus hijos incluso cuando se
portan mal
Capítulo 9 Las cuatro funciones importantes q ue los
padres deben desempeñar para criar buenos
hijos
Capítulo 10 Cómo educar a nuestros hijos para que sean
buenas personas
Capítulo 11 La enseñanza de la moderación a los niños
para garantizar el futuro de la familia
Capítulo 12 Querido Padre, por favor , no permitas que
me convierta en un adicto a la televisión
Capítulo 13 Niños adictos al Internet
Capítulo 14 Una hija que se viste en forma muy atrevida
Parte III ~ Armonía en la familia

Capítulo 15 Crear armonía dentro de la familia


Capítulo 16 ¿Qué deben hacer los padres cuando sus
hijos no se llevan bien?
Capítulo 17 Cómo solucionar las peleas entre vecinos
Capítulo 18 Enseñar a los niños a cuidar de los
familiares que estén enfermos
Capítulo 19 El amor incondicional de los padres

Parte IV ~ Los Caminos a la Perdición

Capítulo 20 Los niños que son adictos a los Caminos a la


Perdición (Apāyamukha)
Capítulo 21 El marido mujeriego y alcohólico
Capítulo 22 Los Caminos a la Perdición
Capítulo 23 Porqué es pecado solicitar los servicios de
una prostituta
Capítulo 24 El apostar nunca hizo millonario a nadie
Capítulo 25 Los niños que quieren que los padres dejen
de beber alcohol
Capítulo 26 El tipo de padre que los hijos odian

Parte V ~ La verdad sobre la vida

Capítulo 27 Papá, ¿por qué nacimos?


Capítulo 28 Los jóvenes y Buda
Capítulo 29 ¿Es cierto que las buenas acciones siempre
traen consigo buenos resultados?
Capítulo 30 Cómo las buenas acciones pueden producir
buenos resultados
Capítulo 31 Un criterio completo al momento de dar
Capítulo 32 Enseñar a los hijos a vivir bajo los Cinco
Preceptos
Capítulo 33 Hacer que los Cinco Precept os sean fáciles
de entender para los niños
Capítulo 34 Inspirar la afición por la meditación en los hijos
Capítulo 35 Ser ordenado para honrar a sus padres es
meritorio

Parte VI ~ El final de la vida

Capítulo 36 El valor de la vida


Capítulo 37 Los últimos momentos en la vida de un
padre
Capítulo 38 Padres, merecedores de nuestro respeto
Capítulo 39 Dar la bendición a nuestros hijos
Capítulo 40 Autoformación en la prudencia mediante la
práctica de la austeridad (Dhūtanga)

Parte VII ~ Una Sociedad budista

Capítulo 41 Templos abandonados y templos prósperos


Capítulo 42 Cómo resolver la crisis del budismo
Capítulo 43 Buda - Un modelo de sabiduría
Capítulo 44 Aportar con una imagen de Buda – El
Cuerpo de la Iluminación

Glosario
Parte I

Las bases de la familia


Capítulo 1

El corazón de la familia

Cuando nuestro corazón cesa de latir, significa que


hemos muerto. Sucede lo mismo con la familia. Si el
corazón de la familia deja de funcionar , la familia ha
muerto, aunque todos sigan viviendo en la misma casa. Una
familia feliz, cálida y saludable es el mayor logro en un
matrimonio. Pero, ¿qué es lo más importante al
formar una familia? Es crucial para dos personas
que se aman entender esto an tes de formar una
familia.
El siguiente tema a tratar es muy importante para
todas las familias: quien quiera casarse; quien quiera tener
hijos, un marido o una esposa debe estudiar estas páginas
para lograr un entendimiento profundo. La importancia de
leer esto radica en que todos los problemas que se
desarrollan en una familia giran alrededor de estos temas.
La pareja que estudie este texto cuidadosamente, se
beneficiará mucho del mismo. Pero si les falta
entendimiento, enfrentarán muchos problemas. Est e
conocimiento es llamado “Dhamma para Profanos”
(Gharāvās-dhamma): el corazón vital de una familia
estable.

Los problemas típicos de una familia:

Antes que una persona se case, él o ella ya tienen una


serie de imperfecciones. Cuando dos personas forman una
familia, no son capaces de evitar los conflictos que nacen de
estas imperfecciones. Por lo tanto, cualquiera que carezca
de uno de los cuatro elementos del Dhamma para Profanos,
es decir, Veracidad (Sacca), Autocontrol (Dama),
Entereza (Khanti) o Sacrificio (Caga), experimentará
uno o más de los siguientes problemas:

1) El problema de la sospecha
2)El problema de la necedad de no poder seguir
el ritmo del mundo, de las personas o de
rendirse ante las impurezas mentales
3)El problema de estar cansados el uno del otro

4)El problema del egoísmo

Lo mejor es no permitir que estos cuatro problemas


surjan en la familia. Si ellos empiezan a materializarse debe
buscarse rápidamente una solución para que no crezcan en
magnitud. Estos problemas pueden escalar tanto que
pueden volverse persistentes y sin fin.
Problema # 1: El problema de la sospecha

La sospecha es una enfermedad típica que se


desarrolla actualmente, incluso, entre personas de una
misma familia.

No es sólo entre marido y mujer que existe la sospecha,


también entre los hijos. Hay desconfianza, incluso, entre
padres e hijos, ni qué decir entonces entre aquellos que no
comparten misma sangre o aquellos que no son de la
misma familia. Ellos indudablemente padecen esta
enfermedad.

El hecho es que hay muchas razones que nos llevan a la


sospecha. Algunas sospechas son causadas por celos,
otras por desigualdades, otras por injusticias y la más
peligrosa de todas proviene de la falta de responsabilidad.

No importa cuál sea la fuente de la sospecha en una


familia, cuantas más personas vivan juntas, más posibilidad
habrá de que la desconfianza se incremente.

Problema #2 El problema de la necedad, de no


poder seguir el ritmo del mundo, de las personas y
de rendirse ante las impurezas mentales

Este problema ocurre cuando la inteligencia de las


personas, el conocimiento y la habilidad no están al mismo
nivel. Este problema se llama necedad.

Algunas acciones y pensamientos de una persona no


están al mismo nivel de las acciones y pensamientos de
otros miembros de la familia. Esto lo incapacita para seguir
el ritmo de los cambios de la vida. La principal causa de este
retraso no es la necedad intrínseca, sino que otros
miembros de la familia están constantemente adaptándose
a nuevas situaciones y aquellos q ue se quedan retrasados se
niegan adaptarse a los cambios o a mejorar sus condiciones.
Ellos se estancan y se quedan con lo que conocen y con
aquello con lo que están acostumbrados. Los demás
miembros de la familia tendrán dificultad para sacarlos de
ese estancamiento.

Esta clase de personas piensan que la culpa de su


situación es la falta de suerte o los sentimientos de
inferioridad en la familia; ellos se sienten heridos porque
sus padres, pareja o hijos no los aman. Esto con seguridad
traerá desacuerdos y creará problemas familiares.

Problema #3: El problema de estar cansado el uno


del otro

El problema de estar cansado el uno del otro puede


también denominarse “estar cansado de las personas”.

Un juez en Chiang Mai, Tailandia, contó un caso que


sucedió hace algún tiempo en relación con un joven menor
de 18 años. Este joven había violado la ley y el tribunal lo
sentenció a una prisión para menores como castigo y para
ser evaluado. Tan pronto como el juez emitió el veredicto,
sus padres comenzaron a llor ar y pidieron que se les
permitiera llevarlo a casa para educarlo ellos mismos. No
importa que los hijos sean unos delincuentes, sus padres
siempre los amarán y se preocuparán por ellos. Los padres
desean cuidar y corregir el comportamiento de sus hijos. N o
confían en que otra persona cuide de sus hijos porque
temen que nadie más pueda cuidarlos tan bien como ellos.

Hoy en día cuando los jóvenes violan la ley y tienen


que comparecer ante un tribunal, se les pregunta a los
padres: “Su hijo quebró la ley. ¿ Qué quieren hacer?”.

Los padres rápidamente responden: “Es decisión del


tribunal. Lo que el tribunal decida hacer. Estamos tan
cansados de él, ya no sabemos que más hacer con él”. Como
podemos ver, esta situación ha cambiado notoriamente.

En la sociedad moderna de hoy en día hay personas


que están cansadas de sus propios hijos.

Los miembros de una misma familia deben tener


cuidado de no permitir que el cansancio se desarrolle. Si hay
alguien, dentro de su familia, que hace algo malo y los
demás miembros de la familia están cansados de advertir,
educar o aconsejar a esa persona, esto ocasionará que cada
uno viva su vida por su cuenta, a pesar de que vivan juntos
en la misma casa. No compartirán ni habrá intercambio de
buenas acciones entre los miembros de la esta familia.
Nuestras buenas acciones y las de ellos no se
incrementarán.

El cansancio entre unos y otros es una señal de una


inevitable destrucción familiar, porque éste pronto crecerá
al punto de ocasionar que todos vivan separados y nadie
podrá prevenir al otro sobre este problema.

Cuando los miembros de la familia no son capaces de


advertirse a sí mismos, serán incapaces de tolerarse
mutuamente y luego surgirán peleas e intercambio de
negatividad. Al final, cada uno terminará por abusar del
otro.

La forma de permanecer juntos como una unidad


familiar es tener una mente y un diálogo abiertos. Cada
miembro de la familia debe ser capaz de informarle al otro
desde el principio cuando vea que la acción de esa persona
es inapropiada. Esto es mejor que esperar a que lleguen al
punto en donde no se soporten y eviten hablar del tema y
pospongan esta conversación. Esta situación podría
ocasionar una futura erupción volcánica.

Problema #4: El problema del egoísmo


El problema del egoísmo se relaciona con la s personas
centradas en sí mismo .

La naturaleza humana es tal que cuando más de tres


personas viven juntas, se forman grupos individuales.
Cuando existe una división entre los grupos, si una persona
recibe algo especial, esa persona pensará primero en su
propio grupo. No importa si hay alguien más en la casa. Si el
problema del egoísmo se agrava, incluso los hermanos se
separarán, porque el egoísmo ha sumergido la mente de la
persona en la oscuridad.

Si, en algún momento a un miembro de la familia le


llega la suerte de modo inesperado, esa persona, tan
centrada en sí misma, no querrá compartir con nadie de la
familia su buena fortuna. Es más, se aprovechará de otros
hasta que eventualmente la familia sucumbirá por el
egoísmo de uno. Un día el problema caus ará la
desintegración de la familia y la unidad familiar
desaparecerá.

“Dhamma para Profanos”: El corazón de una


familia estable.

Cuando una persona piensa en elegir una pareja o


piensa en casarse y tener una familia, debe prepararse a sí
misma porque nadie puede evitar los cuatro problemas
mencionados.

Aunque la solución no es simple, no quiere decir que


no exista un camino para corregir o prevenir que los
problemas se presenten. Si cada persona se da cuenta de lo
que el corazón de la familia es y cada uno elige cuidarlo de
la mejor manera posible, los problemas podrán resolverse.

Buda dio un discurso de Dhamma relativo a un método


que puede ser utilizado como una base para la vida diaria y
como un medio para crear una familia estable. Es conocido
como “Dhamma para Profanos”. Se lo considera el
corazón de una familia estable y está compuesto de
cuatro partes.

1) Veracidad o sacca
2)Autocontrol o dama
3)Entereza o khanti
4)Sacrificio o caga

Si nuestros corazones aún laten, entonces todavía


estamos vivos. Del mismo modo cuando los miembros de la
familia poseen Dhamma para Profanos entonces también
los corazones de la familia continuarán latiendo. Todos los
problemas anteriormente mencionados no surgirán de
ninguna forma. Sólo habrá una familia estable, cálida y
armónica que mejorará con el paso de los días.

El Dhamma para Profanos está compuesto de cuatro


partes, pero ¿cuál es su importancia y cómo orienta a una
familia para corregir y prevenir los dilemas que se viven a
diario en familia?

Buda nos dio las siguientes las respuestas:

1) La veracidad o sacca resolverá los problemas de


sospecha

Sacca significa veracidad, sinceridad y un


fuerte sentido de confianza hacia el otro.

Dicho de esta manera tal vez algunas personas no


entiendan el concepto claramente. Sin embargo, explicado
en forma más sencilla para permitir a las personas ponerlo
en práctica, veracidad significa responsabilidad o el
acto de ser responsable.
Al analizar la forma en que una familia actúa, el
sentido de responsabilidad de cada persona es e l elemento
más importante. Si a un miembro de la familia le falta
responsabilidad, entonces inmediatamente surgen las
sospechas entre los miembros de la familia. De la misma
manera, si una persona quiere casarse, la primera
característica que debería evalu ar es su sentido de
responsabilidad. El novio y la novia deben reconocer si el
otro es suficientemente responsable para experimentar una
vida familiar, la muerte, el éxito y los fracasos.

Una persona sincera, demuestra responsabilidad de las


siguientes maneras:

1.1) Responsabilidad en los deberes y en el trabajo.


Esto significa que sin importar el trabajo que se realice, la
cantidad de trabajo que haya, que sea fácil o difícil, sea que
exista o no una situación favorable, sea que haya o no un
presupuesto limitado, sea que se tenga o no una asistencia
limitada, tiempo limitado o conocimiento limitado, incluso
con todos estos factores, una persona sincera, siempre
demostrará responsabilidad realizando su tarea y
trabajando lo mejor que pueda.

1.2) Responsabilidad al hablar. Esto significa que la


palabra de la persona debe ser coherente con su acción y su
acción debe coincidir con su palabra. Es irresponsable aquel
que dice que hizo un pie si en realidad hizo una pulgada. Es
irresponsable aquel que dice que h izo más de un pie si en
realidad hizo menos que eso. Las acciones de uno deben ser
siempre expresadas sinceramente.

1.3) Responsabilidad en la forma en que se hacen


amigos. Los amigos deben hacerse con sinceridad y sin
ocultar nada. Lo que sea que uno deb a decir o advertir a un
amigo, debe ser expresado directamente. Uno debe ser
sincero y aún más importante, uno no debe ser subjetivo o
prejuicioso, menos aún si se trata del amor, del odio, de la
estupidez o del miedo.

1.4) Responsabilidad en el bien y la moral. Esto


significa que la persona debe tener el Dhamma como su
centro, de tal forma que no querrá hacer nada equivocado o
que vaya en contra de sus preceptos, en contra del
Dhamma, en contra de la cultura o en contra de las leyes del
país. Demostrar esta responsabilidad evitará que la persona
vaya a prisión o al infierno y más bien esta responsabilidad
le abrirá la puerta al cielo.

Visto de de esta manera, se dice que una persona que


tiene veracidad es responsable en su trabajo, en su modo de
hablar, en la selección de sus amigos y tiene principios
morales. Por lo tanto, piensa, habla y actúa con sinceridad y
con buenas intenciones, así todo se hace de la mejor forma
posible. Ésta es la vía para incrementar el conocimiento y la
habilidad y para dar la m ejor imagen de sí mismo siempre.

En la medida en que nuestra veracidad sea vista de


estas cuatro formas, cuanto más poseamos, más
responsables debemos ser. Esta clase de personas puede
mantener estos fundamentos constantemente en su mente.
Sea lo que sea que ellos hagan, lo harán con lo
mejor de sus capacidades; sea lo que sea que digan,
lo dirán tan claramente como sea posible y
mantendrán sus mentes siempre según los
fundamentos morales.

Una persona sincera no es sólo muy confiable en la


familia sino también valiosamente confiable para sus
amigos. Las sospechas que los amigos puedan tener de ella
disminuirán. Pero si la persona no es sincera será siempre
saludada con sospecha y desconfianza. Las buenas personas
escaparán y evitarán relacionarse con la pe rsona que
transmite desconfianza. Las buenas personas no querrán
ser amigos de personas deshonestas porque no quieren
ganar una mala reputación por relacionarse con dichas
personas.

Así que si una persona en la familia no es sincera o


carece de responsabilidad hacia el trabajo, al hablar, al crear
relaciones personales, hacia el bien y la moral, el problema
de sospecha aparecerá. Entonces, ¿cómo podrán vivir en
pareja?

Por lo tanto, para que una familia tenga unos


cimientos sólidos, los miembros de la fam ilia deben tener
sinceridad o sacca como su primer hábito.

2)El autocontrol o dama soluciona el problema de


la necedad, de no poder seguir el ritmo del
mundo, de las personas o de rendirse ante las
impurezas mentales.

Dama significa tener autocontrol.

La forma de practicar autocontrol es estar alerto y


entrenarse, dándose a sí mismo más conocimiento,
habilidad y bondad todos los días.

Coloquialmente, tener autocontrol también puede


entenderse como “el gusto de entrenarse a sí mismo”.
Algunas veces los ancianos se refieren al autocontrol como a
“no permitirse ser necio”.

Siguiendo estas pautas se podrá incrementar el


conocimiento, la habilidad y la bondad en todas las formas
posibles:

2.1) Usted debe encontrar un buen maestro. Esto


significa que sin impor tar si una persona está interesada en
un tema o desea incrementar su conocimiento, esa persona
debería primero encontrar un maestro que tenga el
conocimiento y la habilidad en esa área antes de hacer algo.
Es decir, habrá muchas oportunidades para el fraca so. Si no
se puede encontrar al mejor profesor, como último recurso
se deberá encontrar uno que tenga el mayor conocimiento
posible en el área de interés.

2.2) Usted debe escuchar a su maestro. Esto significa


que debe escucharlo cuidadosamente. Escúchelo una y otra
vez y haga preguntas hasta que realmente comprenda. Es
muy importante entender claramente lo que su maestro está
enseñando, tanto la teoría, como el método y la práctica,
llegando a entender el tema a cabalidad.

2.3) Usted debe analizar las pal abras de su


maestro. Preste atención a cada punto que el maestro ha
explicado y analícelo hasta que verdaderamente entienda el
razonamiento, su significado, su uso práctico, sus
precauciones, sus beneficios y desventajas.

2.4) Usted debe seguir las instru cciones de su


maestro. Eso significa que después de analizar el material
y de entender lo que es correcto y apropiado, usted
comienza a seguir y a practicar esas enseñanzas con
atención y cuidado. No debe descuidarse porque, en el
futuro, eso puede llevar consecuencias dañinas.

Aquellos que poseen un conocimiento cabal, que


poseen habilidad y bondad deben seguir únicamente este
camino para que así puedan prepararse a sí mismos para
estar al nivel del ritmo del mundo y de sus personas, y no
rendirse ante sus impurezas mentales.

Si usted decide seguir este camino, muchas veces


tendrá que ir en contra de su voluntad, tendrá que
esforzarse mucho, incluso tendrá que sufrir en algunos
casos.

La razón por la que usted debe esforzarse e ir en contra


de su voluntad es porque si el entrenamiento no puede
cambiar sus hábitos, esto no podrá considerarse auto -
entrenamiento.

Por ejemplo, si usted no es capaz de cambiar un hábito


como el de comer entre comidas, lo cual no es fácil de hacer,
o es incapaz de cambiar un h ábito como el de quedarse
dormido, usar malas palabras, o responder groseramente a
sus padres, usted tendrá que encontrar el método apropiado
para corregirse a sí mismo o incluso entrenarse a sí mismo a
no ser despreocupado. Esto no es fácil de hacer. Para
algunos de nosotros corregir estos malos hábitos puede
tomar toda una vida y esto sin considerar hábitos más
serios como el de beber alcohol, los celos o los juegos de
azar.

Por lo tanto para que una familia tenga unos cimientos


sólidos, los miembros de la familia deben tener
autocontrol o dama como su segundo hábito.

3)La entereza o khanti corrige los problemas de las


personas que se cansan el uno del otro.

Khanti significa entereza.

¿Por qué debemos tener entereza? Debemos tener


entereza porque si alguien quiere incrementar o cultivar la
bondad en sí mismo, esa persona necesita contar con la
entereza para conseguirla.

¿Qué es lo que tenemos que resistir los seres


humanos? La respuesta es que hay cuatro categorías de
entereza que forman partes de la c ondición humana:

3.1) Debemos soportar las condiciones naturales


desfavorables, tales como los rayos fuertes que provienen
del sol, fuertes vientos, lluvias, etcétera.
3.2) Debemos resistir el sufrimiento , es decir,
debemos soportar las condiciones desf avorables que
nuestro cuerpo físico experimenta tales como las
enfermedades, pero sin crear un caudal excesivo de quejas.

3.3) Debemos resistir el conflicto , es decir nosotros


debemos soportar a otras personas.

La verdad es que debemos aceptar que todos tenemos


defectos que muchas veces causan insatisfacción con
nosotros mismos. Sobre todo cuando trabajamos
rápidamente o cuando requerimos prolijidad siempre habrá
algo que todavía nos desagrada.

Cuando estamos disgustados con nosotros mismos,


estas molestias son consideradas defectos que se han
convertido en malos hábitos pero no nos daremos cuenta de
ello.

Todos tenemos defectos; el marido, la mujer y los hijos


así que el conflicto en la familia es algo inevitable.

Incluso cuando marido y mujer viven juntos y se llevan


bien mutuamente, igual tienen defectos. Si creemos que
seremos incapaces de afrontar estos defectos por favor no
se rinda y se case como consecuencia.

Actualmente, a pesar de estar casadas, a algunas


personas les gusta defender los derechos individuales.
Después de casarse aparecen los documentos para poder
separarse, lo cual plantea la siguiente pregunta: “Si usted no
creyó posible soportar al otro, ¿por qué decidió entonces
casarse?”

Los ancianos tienen un refrán acerca del marido y l a


mujer que dice: “son como la lengua y los dientes –
ellos siempre están chocando el uno con el otro”.
Por lo tanto, no importa que tan buena sea la pareja
porque inevitablemente tendrán conflictos. Si ellos sienten,
cuando pelean, que no se soportan, mej or no deberían
haberse molestado en casarse. Pero cuando sus mentes
están claras y creen posible tolerarse y los familiares de
ambos están dispuestos a ceder, pues es momento de
conversar sobre cómo solucionar los conflictos cuando estos
aparezcan. Es mejor tocar el tema que dejarlo pasar para
después de haberse casado.

La pregunta que los cónyuges tienen que hacerse es


“¿está usted seguro que puede tolerarme?” Si no
estamos seguros de poder soportarnos, entonces no
deberíamos casarnos. Si lo hacemos crear emos mal karma.
Y así una pareja que se ama terminará luego siendo
enemigos. Deberíamos en lugar de eso, ¿separarnos ahora
mismo? Ésta es la pregunta que usted debería hacerse antes
de casarse.

Así que en lugar de preguntarse cuantos quilates tiene


el anillo de compromiso o cuánto dinero va a tener o
cuántos millones va a gastar en comprarse una casa, lo cual
es inestable, la pregunta más importante que debería
hacerse es “¿está usted seguro que puede
tolerarme?”

Si usted realmente piensa acerca de ello, hay muchas


más personas, además de su pareja, que usted debe
enfrentar, tales como los padres, los hermanos y las familias
de cada lado. Éstas son personas que no puede ignorar y
tendrá que enfrentar cualquier conflicto que pueda surgir a
lo largo de su vida.

3.4) Debemos resistir las impurezas mentales o


kilesa, lo que significa que debemos enfrentar nuestros
propios comportamientos negativos.
Las impurezas mentales son una enfermedad
peligrosa nuestra que viene unida a nosotros desde el
nacimiento. Al avanzar, esta enfermedad nos cambia, nos
controla y nos lleva a realizar toda clase de malas acciones
sin vergüenza alguna. Después, cuando realizamos esa
acción las impurezas mentales nos harán sufrir, recibir
castigos, experimentar toda clase de dificul tades, lo que nos
hará lamentarnos y criticar nuestras propias acciones.

Las personas incapaces de controlar sus impurezas


mentales se convierten en personas que tienen el hábito de
cometer malas acciones. Al final, esas personas no volverán
a ser buenas y pueden desarrollar adicciones que los
conducirán a los “Caminos a la Perdición”, los cuales son
más difíciles de corregir.

Los Caminos a la Perdición o Apāyamukha, son


estímulos externos que siempre harán que los vicios crezcan
en nuestras mentes hasta que se convierten en malos
hábitos que son muy difíciles de rectificar.

El “Camino más peligroso a la Perdición” es la


asociación con malas personas, porque las malas
personas contagian infecciones de “maldad”, sin excepción,
a todos aquellos que están a su alrededor. Las impurezas de
la mente los controlarán hasta que se conviertan en esclavos
de las malas acciones, sin pensar acerca del sufrimiento de
los demás. Relacionarse con malas personas es como añadir
infecciones peligrosas a nuestras mentes. Los buenos
hábitos del pasado son siempre destruidos por impurezas
mentales convirtiéndolos en malos hábitos.

Debido a que las impurezas mentales afectan los


buenos hábitos, la seguridad y la estabilidad de una familia,
nuestra habilidad para enfrentar esas debilidades
dependerá de un riguroso entrenamiento en dos áreas:
3.4.1) El esfuerzo de controlar y prevenir que nuestros
malos hábitos influencien a los demás . El marido y la mujer
que elijan estar juntos pero que sean incapaces de enfrentar
esto desarrollarán mal karma entre sí. Esto podrá ocasionar
actos agresivos entre ellos, destruirá la unidad, los hará
tomar posiciones opuestas y reaccionar explosivamente el
uno con el otro.

3.4.2) El esfuerzo de resistirse a las tentaciones de los Seis


Caminos a la Perdición. Estos caminos son: beber alcohol,
disfrutar la vida nocturna, ir a sitios de entretenimiento,
apostar, asociarse con malas personas y ser perezoso. Si uno
es incapaz de tener fortaleza para resistirse a los Seis
Caminos a la Perdición, la situ ación financiera de la familia
se desintegrará, ya que se es incapaz de mantener unos
fundamentos principales.

Si cada uno de la familia puede entrenarse a sí mismo


para fortalecerse en estas dos áreas, entonces los hábitos
individuales mejorarán. La situ ación financiera de la familia
se estabilizará. Sólo buenas personas estarán con nosotros y
los necios no se nos acercarán. Los Caminos a la Perdición
permanecerán distantes y lejos de la familia.

Por lo tanto, para tener unos cimientos familiares


estables, los miembros de la familia deben tener entereza
o khanti como su tercer hábito .

4)Sacrificio o cāga es el medio para corregir el


problema de egoísmo.

Caridad significa sacrificio.

Hay tres clases:

1) Sacrificio de objetos materiales


2)Sacrificio de comodid ades
3)Sacrificio de emociones negativas, al no
mantenerlas en su mente. Es la base para
preparar la mente para la meditación.

Sacrificio significa generosidad al vivir juntos como


familia, anteponiendo el bienestar de la familia antes que el
nuestro.

Un matrimonio es dependiente del sacrificio de dos


individuos. Si no hay sacrificio, entonces la familia no puede
mantenerse. Si en una familia no se practica el sacrificio
para beneficiar a todos los miembros de la familia y en
cambio se saca provecho del otr o, será como si la familia
viviera en un hogar desintegrado.

El sacrificio generalmente se relaciona con la vida


diaria. El marido y la mujer deben pensar en la felicidad de
toda la familia más que en su propia felicidad individual.

Los fundamentos de la convivencia son los Cuatro


Requisitos. Sin embargo, los aspectos más importantes
que uno debe saber antes de distribuir recursos para los
Cuatro Requisitos son: ser capaz de distinguir entre lo que
usted quiere y lo que su familia necesita .

Si usted no sabe cómo distinguir entre lo que usted


quiere y lo que usted necesita, entonces su familia se irá
desintegrando más y más cada día. Al final, habrá el
sentimiento de que unos fueron aprovechados y otros
fueron egoístas. Los miembros de la familia terminará n
viviendo cada quien por su cuenta y no les importará el
otro.

Por ejemplo, suponga que hay una familia compuesta


por marido y mujer pero que no tiene hijos todavía. El
salario que ganan juntos es limitado. Un simple perfume
para la mujer, el alcohol y v ino para el marido les reducirán
el presupuesto para la comida mensual. El sentimiento
de que cada persona está aprovechándose del otro
surgirá porque ellos no pueden distinguir entre sus
deseos individuales y las necesidades de la familia.

Perfumes caros son innecesarios y lujosos. Alcohol y


vino son uno de los caminos a la ruina; estas son sustancias
que dañan la salud y que tienen un valor negativo en la
sociedad. Así que, si tanto el marido como la mujer no son
capaces de considerar estos gastos como i nnecesarios,
entonces el egoísmo será perjudicial para la familia.

El matrimonio implica una vida de presupuestos para


el individuo. Uno debe tener una base de sacrificio. Pero si
se gasta para satisfacer sus propios deseos y el marido y la
mujer no combinan sus ingresos desde el principio,
entonces cada uno desde el comienzo llevará vidas
separadas, ya que ninguno de los dos estará pensando en
compartir los gastos familiares. Así que, ¿por qué se casó?

Cuando usted vea artículos lujosos como necesarios el


presupuesto familiar sufrirá inmediatamente. Eso se llama
egoísmo y crea muchos problemas adicionales en el hogar.

El matrimonio no es juego de niños, porque tan pronto


como usted se casa, la responsabilidad, el cambio, la
entereza y el sacrificio surg irán inmediatamente.

Por lo tanto, una persona que esté pensando en el


matrimonio debe analizar qué tan bien preparada está su
futura pareja en estos dos aspectos:

1) ¿Puede usted depender de su pareja cuando


usted se enferme o su vida esté en riesgo?

2)¿Tiene su pareja, el conocimiento, la habilidad,


y un carácter suficientemente bueno para
mantener a la familia feliz y para educar a los
hijos para que sean buenas personas?
Estos dos factores son los principales sacrificios en la
familia.

Hoy, las personas tienden a casarse más por las


necesidades personales que por considerar estos dos
factores. Eso crea muchos problemas después de haberse
casado. Algunas parejas incluso se vuelven abusivas y
terminan atacándose el uno al otro.

Aquellos que todavía no se han casado o que están por


hacerlo deben considerar cuidadosamente que cuando la
pareja se casa, debe ser capaz de depender el uno del otro
en la enfermedad y la vejez. Deben ser capaces de cuidarse
mutuamente. El matrimonio, por lo tanto, debe depender
en gran medida del sacrificio individual.

Además, cuando la pareja tiene un hijo, ambos deben


hacer más sacrificios porque tienen que fijar tiempo libre
para estar con sus hijos. Es para eso que cada persona
debería prepararse antes del matrimonio.

Las personas que van a ser padres deben preguntarse


si tienen los conocimientos, habilidades y bondad, los
cuales se desarrollan al entrenarse durante toda la vida.
Todos moriremos y cuando seamos viejos debe haber
alguien que cuide de nosotros. Si vamos a casa rnos y a tener
una familia, debemos usar nuestro conocimiento, habilidad
y bondad para criar niños buenos para la sociedad.
Podemos pasar nuestros conocimientos y bondades a ellos
para que así ellos continúen viviendo con fortaleza en este
mundo.

El matrimonio no es solamente placer sensual. Eso no


dura. Pero como la mayoría de las personas busca la
satisfacción sexual, la tasa de divorcio es alta. La
satisfacción sexual solamente existe en los primeros años
del matrimonio.
Después de que uno se casa el f undamento de la vida
será el sacrificio por el otro. Si alguna vez nos volvemos
egoístas hacia el otro, le seguirá el divorcio o el asesinato.

El sacrificio en el matrimonio es un sacrificio para


cuidar del cuerpo y de la mente. Es el apoyo para el
cuerpo y la mente y esto da como resultado un
matrimonio feliz.

Cuidarse el uno al otro físicamente significa usar


el ingreso de la familia sabiamente, gastando en las
necesidades del hogar, compartiendo y sacrificando la
felicidad de uno.

Cuidarse el uno al o tro mentalmente significa


saber cómo amarse en el día a día, siendo capaz de ayudar
al otro en tiempo de crisis, siendo capaz de advertir a otros
cuando se vuelven descuidados y siendo capaz de ser
honesto a toda hora.

La pareja que puede cuidarse física y mentalmente de


esta forma, siempre hará sacrificios en beneficio de la
familia, tales como renunciar a objetos materiales,
comodidades y malos sentimientos. Un ambiente
armonioso residirá en la familia como resultado de ello.

Por lo tanto, para que una familia tenga una base


estable sus miembros deben tener el sacrificio como el
cuarto hábito.

Con estos cuatro factores del Dhamma para


Profanos (Gharāvās-dhamma), cualquiera que esté
contemplando buscar una pareja, casarse, tener una familia
o cualquiera que esté teniendo actualmente problema
familiares, debe tener el Dhamma para Profanos como
su fundamento. La veracidad, el autocontrol, la enterez a y el
sacrificio son el corazón de la familia, un corazón vital que
sus miembros deben tener a toda hora para que la base
familiar sea estable desde el principio. Si esta base familiar
es estable los problemas familiares, tales como sospechas,
no seguir el ritmo del mundo y de las personas, rendirse
ante las impurezas mentales, estar cansados el uno del otro
y el egoísmo, definitivamente no ocurrirán. El corazón de la
familia entonces latirá continua y poderosamente.
Capítulo 2

Cómo manejar la vida


matrimonial

Saber controlar las emociones antes de casarse es


fundamental para mantener y prolongar la vida
matrimonial. Si ninguno de los cónyuges había desarrollado
esta cualidad antes, será difícil desarrollar otros aspectos
morales después de casarse; al contrario, la situación
empeorará y surgirán malas conductas, como el uso de
palabras fuertes, las que harán que las dos personas no sean
capaces de tolerarse. Al final, el divorcio parecerá ser la
única solución que queda. Por lo tanto el saber controlarse
emocionalmente es la mejor medida para prevenir el
divorcio.
Ideas básicas antes de casarse

Se ha comprobado, desde hace millones de años que


cuando dos personas deciden compartir su vida como
marido y mujer, el conflicto entre el cónyuge y sus
familiares será inevitable.

Un punto para considerar es que si no se ha bía


entrenado bien el control emocional antes de casarse ,
cuando surjan desacuerdos no los podrán resolver
positivamente y acabarán peleando. Estas peleas afligirán
mucho a los miembros de la familia. Como consecuencia la
familia nunca vivirá en paz.

Por el contrario, si marido y mujer saben controlarse


emocionalmente, serán capaces de retener los sentimientos
negativos y resolverlos ese mismo día sin esperar hasta otro
día, de este modo el entorno familiar se llenará de
tranquilidad y felicidad. La pareja intentará eliminar sus
malos hábitos y sacar lo mejor de cada uno. Esto creará una
actitud positiva y tolerante hacia el otro y así fortalecen los
vínculos familiares y aumentan su pre stigio social.

Ciertamente aquellos que son capaces de controlar sus


emociones deben haberse entrenado antes de casarse.
Nuestros abuelos trataron estos temas durante sus propias
vidas y entonces establecieron los siguientes principios
relacionados con el matrimonio.

Cualquiera que no pueda esperar para casarse debe


primero cumplir con los siguientes requisitos para tener
éxito en el matrimonio.

Los requisitos son:

1) Debe ser autosuficiente.


2)Debe saber cómo elegir a la pareja acertada.

3)Debe tener un consejero matrimonial.


4)Debe saber cómo purificar la mente.

Nuestros abuelos insisten en que cualquier persona


que esté pensando casarse debe cumplir primero con estos
cuatro importantes factores de modo que pueda manejar
todas las responsabilidades inherentes al matrimonio.
Deben saber lo que se les viene y qué tipo de conocimiento,
habilidades y virtudes son necesarias para crear un mejor
matrimonio, una mejor nuera, un mejor yerno y mejores
padres para los hijos. Compartir este conocimiento
permitirá a la pareja mejorar sus destrezas, habilidades y
virtudes, lo cual influirá para que su matrimonio se
desarrolle como se espera.

En la siguiente parte del capítulo se expondrán las


razones en las que se basa cada factor y por qué estos
cuatros factores son neces arios para conseguir un
matrimonio exitoso.

Las expectativas de la vida matrimonial

Nuestros abuelos nos dijeron la verdad sin tapujos


sobre la razón por la que las personas se casan: ellos
carecen de confianza en sí mismo ; no están seguros de
si pueden valerse solos. Si usted carece de confianza, tendrá
la esperanza de encontrar alguien que le pueda ayudar en
sus asuntos de la vida.

Hay personas que se casan con la expectativa de que


sus parejas les vayan a tratar favorablemente de distintas
maneras y a cambio ellos también tratarán correctamente a
sus parejas. Pero lo que pasa es que sus parejas no les tratan
de la manera que ellos esperaban o no pueden tratarlos de
la misma manera durante todo el día. Además, las formas
de trato no cumplen con sus exp ectativas.
Algunos hombres se casan por el deseo de tener una
esposa guapa. Sin embargo, las mujeres no pueden
mantener su belleza día y noche. La belleza física no dura y
si lo que importa es la atracción física, cuando la belleza
externa se deteriore, la posibilidad de ser infiel será alta.

Algunos se casan porque se encaprichan con la buena


conducta del otro. Estaban equivocados cuando pensaban
que su pareja siempre se comportaría bien, la verdad es que
la gente no puede comportarse de maravilla todos los días
de la semana.

Si la búsqueda de una pareja se basa en la


“dependencia” cuando ya no se sientan seguros con su
pareja, empezarán a pelearse y llevarán al otro a juicio,
como vemos con frecuencia. De estos problemas se deriva
este refrán: “Falsas expectativas traen decepciones”.

El pensamiento correcto que uno debe tener antes de


casarse es “tengo que ser autosuficiente”. En un
matrimonio, hay muchos aspectos que obligan a otros a
depender de usted. En otras palabras, hay más asuntos que
exigen nuestra paciencia que asuntos que no exigen
paciencia, habrán asuntos que requieran los conocimientos,
habilidades y virtudes que usted desarrolló antes de casarse.

Además, habrá muchas más obligaciones que las que


usted tenía antes y nunca sabrá si los res ultados serán
buenos o malos. Este es el caso de los padres de un niño
recién nacido que no puede depender de sí mismo y que
tiene que contar con sus padres para muchas necesidades.
Para criar a los niños con tal de que sean individuos
independientes, los padres necesitan dedicar mucho de sus
propios conocimientos, habilidades y virtudes a este
empeño.
Sin embargo, es equivocado pensar antes de casarse,
que usted va a depender de la otra persona. La realidad es
que la posibilidad de que otras personas va yan a depender
de usted es mayor que la posibilidad de que usted vaya a
poder depender de los demás.

Autosuficiencia

Una persona independiente es una persona dotada de


conocimiento, habilidades y virtud, en resumen esta
persona debe practicar el Dhamma para Profanos
(Gharāvās-dhamma).

Una persona que practica el Dhamma para Profanos


debe demostrar los siguientes hábitos:

1) Hábito de responsabilidad: cualquier trabajo que


tenga esta persona lo realiza de la mejor manera
posible en términos de calidad, pr esupuesto, tiempo y
el cuidado de la cualidad de la mente.
2) Hábito de autocontrol y autosuperación: una
persona que demuestra este hábito estudi a e investiga
varias áreas para mejorar su conocimiento, habilidades
y virtud para un mejoramiento continuo.
3) Hábito de entereza: él es capaz de superar todos los
obstáculos cualquier que sea el trabajo, hasta que éste
se termine, sin importar el estado del tiempo, razones
de salud o los conflictos que pudieran surgir. Además
es capaz de resistir las tentaciones o pla ceres
sensuales.
4) Hábito de sacrificio y generosidad : en cualquier
trabajo él siempre da prioridad a lo colectivo sobre lo
individual. Incluso puede sacrificar sus pertenencias y
ofrecerlas a los más necesitados, sacrificar sus propias
comodidades para asu mir las responsabilidades que
los demás han abandonado y eliminar los malos
humores para mantener el buen ambiente familiar.
Uno debe sacrificarse en pro del bien del conjunto y
debe haber adquirido estos hábitos desde pequeño. De
lo contrario los demás no podrán depender de él.

Solamente la persona que tiene estos cuatro hábitos, el


Dhamma para Profanos , será capaz de ser autosuficiente,
ser un buen refugio para los demás y actuar como un buen
padre de la familia.

Los cuatro niveles de la belleza

Nuestros abuelos no nos enseñaron solamente cómo


depender de nosotros mismos, sino que también enseñaron
a aquellos que planean casarse cómo elegir la persona
acertada para ser la madre o el padre de sus hijos.

Usualmente observamos solamente la belleza física y


no la profunda e interna belleza de la mente. Sin embargo,
nuestros abuelos nos enseñaron también a buscar la belleza
profunda e interna de la mente. Ellos dividen la belleza en
las cuatro categorías siguientes:

1º Nivel: Belleza de apariencia

Es la belleza del vestido, el maquillaje, el lápiz labial y


la ropa según la época y la moda. La belleza exterior pronto
pasará de moda y ya no será la preferida. Esta belleza puede
ser comprada o prestada de otros.

2º Nivel: Belleza corporal

Es la belleza del cuerpo en términos de nuestra figura,


la piel, la cara, el pelo, los dedos, etcétera. Es la belleza
individual que no puede ser comprada ni prestada de otros.
Ésta no dura y se deteriorará con el tiempo. No hay
garantía de que la persona sea buena o mala.

3º Nivel: Belleza de las actitudes


Es la belleza de la actitud apropiada tanto en el habla
como en las acciones ante otros. Esto incluye ser cortés,
humilde, respetuoso, amable y alegre con los demás. Sin
embargo, si estas actitudes no salen realmente d el corazón,
es considerado hipócrita. Hay refranes que advierten,
“Dulces palabras son más devastadoras” o “Dulce
comienzo, amargo final” o “Dulce boca, trasero
agrio”.

4º Nivel: Belleza de la mente

Es la belleza de la virtud dentro de una persona, que


puede ser expresada mediante las responsabilidades que
tiene esa persona. Podemos medir cuán responsable es una
persona a través de los siguientes aspectos fundamentales:

1) Uso de los Cuatro Requisitos: vestimenta, comida,


alojamiento y medicina
2) Actividades cotidianas
3) Responsabilidades en el trabajo

Al observar los hábitos de una persona a través de


estos tres aspectos podremos evaluar si esa persona es
responsable o negligente. Sólo una persona responsable
puede tener una mente bella y esta belleza mental y moral
proviene de la práctica del Dhamma para Profanos, de la
responsabilidad, el autocontrol, la entereza y el sacrificio.

La importancia del anciano en la vida matrimonial

La belleza de una persona se divide en cuatro niveles,


pero el nivel más difícil de observar es la belleza de la mente
puesto que se trata de la moralidad de una persona. Para
descubrirla, necesitamos contar con personas que han
experimentado la vida matrimonial. En otras palabras,
tener una familia requiere que uno tenga un consejero o un
entrenador que pueda dar consejos sobre distintos asuntos
familiares.

En los tiempos pasados, los que deseaban casarse


tendrían a un anciano para ayudarles con el propuesto
matrimonio. A pesar de que sus servicios todavía siguen
siendo utilizados hoy en día, pocas personas conoce n el
verdadero significado y papel de un anciano.

"Un anciano" es una persona que tiene un alto


nivel de virtud y que es muy respetado por la
comunidad.

Una persona que se convierte en un anciano debe ser


muy virtuosa y muy respectada por la mayoría de la gente.
Ellos tienen muchas virtudes, porque sus propios
matrimonios incorporaban los cuatro factores importantes
de un matrimonio:

1) Deben adoptar verdaderamente el Dhamma para


Profanos, porque de lo contrario no será una fuente
confiable para ellos mismos y sus familiares.

2) Deben ser capaces de identificar el comportamiento de


otra persona mediante la observación de su uso de los
Cuatro Requisitos, sus actividades cotidianas y su s
responsabilidades en el trabajo. Caso contrario, no van a ser
capaces de encontrarle una pareja adecuada con gran
virtud, una persona que los miembros de la familia acepten
y respeten totalmente.

3) Deben tener un maestro de la vida o un buen consejero


que les informe sobre el matrimonio y las relaciones. De lo
contrario, es posible que no sean capaces de mantener una
relación por mucho tiempo.

4) Deben ser capaces de entrenarse a sí mismos hasta que


puedan elevar su nivel de moralidad, de no hacerlo
carecerán del conocimiento , capacidad y virtud que les
permitirían manejar todos los deberes que implica el
matrimonio. Ellos deben ser capaces de cuidar de sí mismos
y de los demás al mismo tiempo. Si su nivel de virtud no es
suficientemente alto con respecto a la generosidad y el
sacrificio por el bien mayor, no serán capaces de seguir
adelante y apoyar a sus familias y a las generaciones futuras
y no serán aceptados por la sociedad en este nivel.

Los ancianos disponen de tanta virtud y están


capacitados para ser consejeros fia bles de los niños y de las
generaciones venideras porque s e entrenaron a sí mismos y
sentaron las bases para sus familias según los cuatro
factores mencionados anteriormente.

Por lo tanto, una familia o relación necesita un


consejero para ayudar en la sel ección de la pareja, para
enseñarles sobre las responsabilidades de un buen cónyuge,
responsabilidades para con los suegros, las
responsabilidades de los padres, de los familiares, las
responsabilidades comunitarias y también sobre lo que se
necesita para conseguir una carrera exitosa y las
responsabilidades comunitarias.

Por consiguiente, un matrimonio no puede funcionar


sin un anciano o un virtuoso adulto que aconseje y
supervise la conducta del marido y la mujer. Sin "un
anciano", la familia se irá hacia el camino equivocado.

El Dhamma que crea una hermosa mente

Con un conocimiento profundo de los tr es primeros


factores, llega el momento en el que el matrimonio continúa
con más fuerza y más estabilidad hacia un nivel más alto de
moralidad. Si marido y mujer carecen de los mismos
valores cuando están juntos, no van a ser capaces de
mantener el amor que tienen entre sí a largo plazo, puesto
que el corazón de la familia se basa en l a moralidad
aceptada por el marido y la mujer.

Debemos capacitarnos a no sotros mismos para ser


independientes antes de casarnos . Nuestros abuelos
presentaron el Dhamma para Profanos como una guía de
autoformación. Incluso después de habernos casado y de
tener una familia, todavía necesitamos practicar el
Dhamma para Profanos a un nivel superior. Una de las
cuatro virtudes que los cónyuges deben aplicar con más
frecuencia y que tendrá el mayor impacto sobre la familia es
la entereza (khanti) y el sacrificio (cāga).

Después de la boda, es necesario adquirir un mayor


nivel de entereza para poder aguantar los conflictos
eventuales, es decir, tener la capacidad de soportar los
defectos de otros. Una vez que la pareja se casa y viven
juntos, habrá muchas responsabi lidades que uno debe
asumir para con su pareja y sus parientes. Se necesita u n
mayor grado de entereza durante esta etapa para que toda
la familia pueda seguir adelante.

El sacrificio también tiene que llegar a un alto nivel,


principalmente para eliminar sentimientos negativo s. En
otras palabras, será necesario mantener una mente
tranquila a través de la práctica regular de la
meditación para no afligirse por los conflictos familiares.
Incluso si no nos gusta un miembro de familia del cónyuge,
tenemos que aprender a vivir con ellos para que el problema
no se convierta en ira dentro de la familia. Debemos
desechar nuestros temperamentos, de manera que las
peleas y la venganza no lleguen a ser una posibilidad.

El nivel de sacrificio adquirido cuando todas las


emociones negativas se eliminan de la mente, se conoce
según el budismo como la docilidad o soracca, que
significa “la mente refinada hasta llegar a un estado de
calma”.
El perfeccionamiento de la mente es el que nuestros
abuelos se alcanzaban únicamente según los conceptos de la
entereza y la docilidad. Ambos vienen de las enseñanzas
budistas y son las principales virtudes que nos ayudan a
refinar la mente. También es una manera de pensar
sólo en los aspectos de la regulación de la mente en
el Dhamma para Profanos.

Cuando se plantea un problema que requiere entereza,


tenemos que tratar de calmar nuestra mente, porque de lo
contrario será como si tuviéramos un volcán dentro de
nosotros que estuviera a punto de estallar y de este modo no
seremos capaces de aguantar más, pero a pesar de todo
tenemos que ser capaces de soportar.

La docilidad puede explicarse como el intento de


reducir el calor en el volcán que puede explotar en cualquier
momento; esto se logra con el uso de estrategias para
calmar la mente. Pero no hay mejor manera de p roteger la
mente del caos que simplemente cerrar los ojos y
meditar, dejando al lado todas las preocupaciones,
concentrando la mente y haciendo caso omiso de los
conflictos del pasado.

Cuando la mente esté tranquila, no sentiremos la


necesidad de resistir nada. Nuestr as actitudes y
expresiones reflejarán la calma de nuestra mente , como si
nada hubiera ocurrido. Cualquier persona con la que
tratemos también estará calmada, porque va a sentir la paz
y la belleza que mantene mos en nuestra mente. La calma y
la paz mental que compartimos con los demás van a
conquistar todo.

Por lo tanto, para elevar nuestra moral idad a un nivel


superior, debemos confiar en las dos grandes virtudes de la
entereza y la docilidad. Son el Dhamma que crea
una hermosa mente.
Dichos mágicos para prevenir el divorcio

Hasta ahora hemos aprendido que nuestros abuelos


aprendieron cómo desarrollar la entereza y la docilidad
en su mente y convirtieron estas virtudes en metáforas con
fines prácticos, que incluyen las siguientes cuatro formas
mágicas de conducta:

Forma mágica de conducta #1: “Ojos tan fijados


como nudos que atan el bambú ”

Forma mágica de conducta #2: “O rejas como las


agarraderas de un wok”

Forma mágica de conducta #3: “Cuerpo como una


alfombra de bienvenida”

Forma mágica de conducta #4: “Mente como la


Tierra”

Nuestros abuelos eran capaces de utilizar ejemplos del


medio ambiente para ilustrar el Dhamma, éstas son
lecciones para la purificación de la mente y de muestra el
alto nivel de moralidad que mantenían. La explicación de
cada metáfora es la siguiente:

1) “Ojos tan fijados como nudos que atan el


bambú”, significa que debemos mantener la mirada
fija. Esto incluye no prestar atención a situaciones
llenas de tensión y no meterse en los asuntos de otros
para buscar culpas o causar estragos con futuras
murmuraciones. Esto hará que nuestra mente recoja
los problemas de los demás y como consecuencia
nunca aprenderemos cómo ver la vida desde una
perspectiva positiva.
Nuestros abuelos crea ron esta metáfora observando
una escalera de bambú.

Una escalera de bambú se construye utilizando


un tipo de bambú silvestre. Los palos se cortan de
una longitud lo suficientemente larga para que los
pies los puedan pisar. Pueden ser atados a un árbol
de modo que sirvan como una escalera para poder
subir. Si los árboles son demasiado altos, se atarán
varias escaleras juntas para llegar a la cima.

Las personas que viven en los campos de palmas de


azúcar conocen bien el beneficio de la escalera de bambú ,
que se usa para trepar palmeras muy altas.

Para crear este tipo de escalera, los aldeanos


mantendrán intacto el largo del tronco del bambú al no
dividirlo por los nudos, las partes que conectan el bambú.
En cambio, entre los nudos, hacen cortes de
aproximadamente un pie, cada uno sirve de peldaños para
la escalera. Por esta razón, el tronco de l bambú debe ser
muy fuerte y tener nudos grandes, de lo contrario, no podrá
soportar el peso del escalador.

Cuando un aldeano sube la palma de azúcar, coloca la


escalera de bambú contra el árbol y sub e paso a paso hasta
la copa. Si se trata de un árbol macho, se cortarán los tallos
de palma y utilizará un tubo de bambú para recibir el
líquido que se usa para hacer azúcar de palma; si se trata de
un árbol hembra, se recoge el fruto y se extrae su líquido,
mezclándolo con harina para hacer tortas de palma que se
venden como postres.

Nuestros abuelos, con las mentes siempre centradas en


el Dhamma, se dieron cuenta de que la parte vital de la
escalera de bambú era la calidad lo s nudos u ojos en el
tronco de bambú. Así la parte más importante de la escalera
de bambú es el nudo u ojo. Cuantos más fuertes sean los
nudos, más seguro será escalar para cosechar los frutos de
las palmas de azúcar.

Los seres humanos también tienen ojos. Tenemos que


entrenar nuestros ojos a ser como los nudos de bambú,
porque la enseñanza más importante con respecto a la vista
es:
"No vea cosas que no debe de ver. No busque
problemas ni se fije en los problemas de los demás.
No busque los errores en otros. No atraiga con los
ojos a nadie para que le siga , porque al hacerlo,
los problemas se transfieren de los ojos a la mente
y a su casa”.

Una persona que es capaz de controlar su vista tendrá


una mente más tranquila y alerta. Cuando piensa, los
pensamientos siempre serán buenos. Las palabras que
pronuncia serán positivas, lo cual mejora la mente y esto se
extiende a los demás.

Alguien que pueda limitar su vista según nos


aconsejaban los abuelos, verá el mundo con optimismo, no
exhibirá de manera pesimista los defectos de otros y no será
causante de relaciones extramatrimoniales. Se evitarán los
conflictos que surgen a raíz de la vista y la mente y podrá
mantenerse en estado de calma y tranquilidad.

Por lo tanto, el control de la mente a través del


entrenamiento de los ojos para que estén tan fijados como
nudos de bambú elevará la belleza de dicha mente. Ésta es
la primera forma mágica de conducta que previene
el divorcio.

2) “Orejas como las agarraderas de un wok” significa


que debemos escuchar sólo lo qu e es adecuado.

No escuche los errores de los demás ni escuche a


escondidas a los demás a causa de la paranoia de que
alguien pueda estar hablando mal de usted. No crea en los
chismes de los demás; debe de ser cautelosos y escuchar
sólo con atención parcia l. Trate de cambiar el tema de
conversación cada vez que el tema sea algo que no vale la
pena escuchar. Si no, podríamos convertirnos en necios y
formar en nosotros el hábito de criticar y decir chismes
sobre los demás, lo cual perjudica nuestro proceso de
acumular más virtudes.

Nuestros abuelos no querían que fuéramos necios, ni


que fuéramos como aquellos que no hacen nada más que
escuchar los defectos de los demás y que no tienen la
posibilidad de avanzar. Nuestros abuelos nos advirtieron
utilizando la metáfora de, “orejas como las agarraderas
de un wok”, lo que significa escuchar l os mensajes
valiosos que aumentan nuestros conocimientos y
nuestras virtudes.

Cuando entramos en la cocina, podemos ver


claramente que las agarraderas del wok sólo sirven par a ser
tomadas y para colgar el wok después de usarlo.

Es lo mismo con las orejas de las personas; no deben


ser usadas para escuchar el chisme, porque los problemas
de otras personas no tienen nada que ver con nosotros .

Sólo deben usar las orejas para esc uchar cosas que nos
traigan sabiduría, moralidad y virtudes. Esto es el
verdadero propósito de las orejas.

Cuando oiga una cosa, usted debe decidir si es útil


escucharla o no. Si es inútil, debe aprender a pensar en sus
orejas como agarraderas de un wok, porque así, los
problemas de los demás no podrán entrar en su mente.

Cuando algunas personas se enteran que se están


diciendo chismes acerca de ellas se ponen tan furiosas que
hasta podrían matar a la persona que originó el rumor. Pero
si sabemos cómo convertir nuestras orejas en agarraderas
del wok, esas palabras no tendr án ningún efecto sobre
nosotros. Pronto los chismes se irán en el aire con el viento.

Incluso cuando escuchamos a algunas personas hablar


mal de nosotros, no tenemos que tomarlo en serio. Deje que
sigan. Siempre y cuando no lo tomemos en serio, las
injurias se devolverán a la persona que las inició, dado que
es esta persona la primera que escucha sus propias
palabras.

Nuestros abuelos también nos recuerdan que, incluso


si no nos enojamos por estas palabras negativas, no
debemos pensar de inmediato que somos los
mejores. Es más valiente quien ni siquiera sonríe
frente a los elogios. Sigue serena y busca la razón por la
cual la están elogiando y piensa si es que tienen razón.
Quien hace esto es verdaderamente una persona especial.

La mayoría de las personas tienden a contentarse y


sentirse orgullosas al recibir elogios. U na chica se pone muy
contenta y orgullosa cuando recibe elogios de su novio.
Ella decide casarse con él sólo por la alegría que le produjo
un elogio como éste: "Querida, eres tan hermosa"; esta
chica termina teniendo muchos hijos y sufriendo por los
problemas familiares. Si ella sólo se mantuviera serena y no
estuviera tan alucinada con el cumplido , ella podría haber
vivido cómodamente por sí misma, sin tener dolores de
cabeza preocupándose pensando si su marido tenía una
amante.

Una persona verdaderamente sabia es la que sabe lo


que vale la pena escuchar y lo que no vale la pena esc uchar,
con el fin de mantener su mente serena.

Por lo tanto, una persona que sabe controlar la


mente al saber cómo hacer que sus orejas sean
como agarraderas de un wok tiende a tener una mente
tranquila y apacible. Es la forma de elevar la belleza de la
mente. Ésta es la segunda forma mágica de conducta
que previene el divorcio.

3) “Cuerpo como una alfombra de bienvenida ”


significa que debemos ganarnos la vida hon radamente y no
avergonzarnos de ello, como una alfombra de bienvenida
que cumple sus funciones de quitar la suciedad sin
afectarse. Cuando decidimos hacer algo bueno debemos
poner todo el esfuerzo y dedicar toda nuestra vida en
completarlo, pensando, hablando y actuando de manera
virtuosa; lo más importante es que debemos realizarlo sin
establecer condiciones y sin pensar en el orgullo, el
egoísmo, las dificultades, etcétera.

Nuestros abuelos utilizan la metáfora cuerpo -alfombra


para enseñarnos cómo debemos comportarnos.

Debemos realizar solamente trabajos honrados y al


decidir hacer algo, tenemos que poner todo el esfuerzo, todo
el conocimiento y toda la virtud en e l trabajo sin despreciar
ni tener miedo a las dificultades; es decir, dedicando
nuestra vida para asegurar que el trabajo salga bien.

Nuestros abuelos habían mejorado su vida utilizando


estos principios del Dhamma y al contarnos su éxito,
siempre pueden hablar con orgullo de él.

Puesto que a lo largo de su vida siempre actuaban y


trabajaban de manera honesta, cuando enseñan a los hijos
sobre la honestidad, pueden contar sus historias con toda
confianza y orgullo:

“Desde pequeño, si teníamos que realizar algún


trabajo, incluso si fuera limpiar el baño, lo hacíamos con
todo esfuerzo porque se trataba de un trabajo legal.
Imaginábamos que nuestros cuerpos fueran alfombras.
Sin embargo, si el trabajo era robar a alguien o imp licaba
el engaño, la decepción o el fraude, nunca pensaríamos en
aceptarlo”.

El cargo de mantener una fami lia es un trabajo duro


porque cada comida se provee con dinero que ha sido
ganado con el sudor de la frente . Una persona que trabaja
concientemente, que nunca se queja o tiene actitud negativa
y que intenta trabajar honradamente estará orgullosa del
hecho de haber ganado este dinero para mantener a su
familia con todo su esfuerzo y honestidad. Nunca se
arrepentirá y nunca se le culpará en el futuro.

Con un trabajo honesto, la mente se tranquiliza.


Aunque la gente pueda despreciarnos por tener un trabajo
de rango inferior, no tenemos porqué avergonzarnos.
Debemos sentirnos orgullosos de nuestra manera de
ganarnos la vida honradamente, como la alfombr a que sólo
sirve para quitar la suciedad de los zapatos sin quejarse,
afectarse, ni tener prejuicios. Una persona que mantiene
una mente serena, basándose en el trabajo honrado y en la
ausencia de mal carácter, será respetada por sus hijos,
aunque tenga un trabajo inferior.

Entonces una persona que se concentre en hacer


buenas acciones y realice un trabajo honesto y legal
comportándose como si fuera una alfombra cultivará una
mente tranquila y aumentará su virtud, sirviendo de buen
ejemplo para los hijos. No estará celoso de nadie y los
miembros de la familia estarán orgullosos de formar parte
de una familia que valora esta manera honrada de ganarse
la vida.

Una mente tranquila y refinada es el resultado de


realizar buenas acciones, trabajar honradamen te y ser
humilde sin imponer condiciones, como la alfombra. Son
cualidades valoradas en el matrimonio. Ésta es la tercera
forma mágica de conducta que previene el divorcio.
4) “Mente como la Tierra ” se refiere a una mente firme
al momento de realizar bue nas acciones, sin establecer
condiciones y teniendo una determinación férrea ante las
dificultades.

Nuestros abuelos utilizan esta metáfora para


enseñarnos que en la vida, aunque dediquemos todo el
esfuerzo y todo el conocimiento para hacer el bien , a veces
siguen presentes los problemas o los obstáculos que sean
demasiado difíciles como de solucionar. Sin embargo
tenemos que aprender a soportar el problema por más
difícil que sea.

Basándonos en este hecho, no importa si estamos


contentos o no, tenemos q ue aprender a calmarnos y a
mantener firme la mente, a no tener miedo de las
incertidumbres de la vida y a mantenernos atentos, como la
Tierra, que no retrocede ante las sustancias aromáticas y
putrefactas tiradas a ella.

Una vez Buda habló al Venerable R ahula sobre la


importancia de mantener la mente calmada y tranquila
como la Tierra:

“A la Tierra si se le echa perfume por encima ¿estará


contenta? No, nunca, se quedará indiferente. Y si se le echa
agua sucia se mantendrá igual, estable. Si una persona l e
tira un objeto apestoso tampoco se sentirá triste;
permanece indiferente.”

“Rahula, debes mantener tu mente como la T ierra.


Sin importar lo que te hagan los demás, no respondas ni
reacciones. Concéntrate solamente en la meditación, así
pronto eliminarás las impurezas mentales”.

Esto significa que cuant o más sufrimos, más


concentración tenemos que adquirir. Si nuestra mente está
bien concentrada, nin gún obstáculo podrá distorsionar la
sabiduría y la tranquilidad mental que tenemos.

Del mismo modo, cuan to más felices nos encontramos,


más necesidad hay de calmar la mente, dado que el estar
felices nos hace ser más negligentes y creer erróneamente
que somos más privilegiados que los demás .

“Tener la mente siempre concentrada es como estar


preparado para cualquier situación.”

Sin embargo, la mente por sí misma no se comporta


como la Tierra sino como la cera: extremadamente blanda,
débil y susceptible cuando se encuentra cerca del fuego. Al
vernos ante problemas inesperados, encontramos que no
somos capaces de recobrar la compostura y muchas veces
caemos en la desesperanza, aumentando más nuestro
sufrimiento.

Las personas en dichas situaciones pueden encontrarse


desesperanzados. Aumentan en su mente la angustia, la
tortura y la presión por todas partes, produciendo un
sufrimiento aparentemente interminable. Algunos se
enferman, mientras que otros, las personas que no logran
encontrar una solución a sus problemas, optan por
suicidarse.

Los abuelos quieren que seamos capaces de hacer


frente a las incertidumbres de la vida y no quieren que nos
encontremos en una situación así, pues aprovechan cada
oportunidad para enseñarnos a cultivar nuestra mente para
que esté preparada para cualquier situación y en cualquier
momento, porque en la vida lo más seguro es la
inseguridad.

Quien no se ha entrenado para aceptar la


incertidumbre de la vida será incapaz de afrontar los
problemas y las pérdidas inesperadas. Por lo tanto,
debemos cultivar nuestra mente para que sea estable como
la Tierra al comprender que la incer tidumbre es la verdad
de la vida.

Entonces, cuando experimentemos decepciones, miedo


y torturas inesperadas, debemos tomar en cuenta que nada
dura eternamente. Todo surge, existe y después se
deteriora. Nadie puede escapar de esta realidad de la vida.

Los abuelos nos enseñan que para mantener la mente


tan estable y firme como la Tierra, debemos entender
primero que siempre estamos sujetos tanto a la satisfacción
como a la decepción en este mundo; es una cuestión de cuál
viene primero.

Buda enseñó que existen factores comunes que causan


la satisfacción y la decepción en la vida del ser humano.
Esto se llama las Ocho Condiciones Mundanas (Loka
Dhamma).

Se dividen en dos categorías:

Grupo 1: Causas de una mente encaprichada

Las personas con una mente encaprichada desean


recibir lo que quieran y lo que a ellas les guste; esto incluye:

(1) Fortuna: recompensas materiales, como una


casa, un coche, un esposo, una esposa , una
propiedad, joyas, etcétera
(2) Prestigio: rango, estatus, autoridad y poder
(3) Reconocimiento: cumplidos, elogios y la
admiración de la gente
(4) Felicidad: comodidades de la vida, tanto físicas
como mentales; alegría y placer

Éstas son las cosas preferidas por la mayoría de las


personas. Si no las tienen las buscarán. Cuando las tienen ,
las van a guardar celosamente. Cuanto más las intenten
guardar, más preocupados estarán y cuanto más
preocupados estén, más celosos estarán. Una mente
caracterizada por estos sentimientos es una mente
encaprichada.

Grupo 2: Causas de una mente atemorizada

(1) Pérdida de fortuna: la pérdida de lo que uno


ya posee, como el dinero, una casa, un hijo, un esposo
o una esposa
(2) Pérdida del prestigio: la pérdida de la
autoridad, del rango o del control
(3) Murmuraciones: críticas directas o indirectas
(4) Sufrimiento: físico o mental

Estas condiciones no las buscamos ni deseamos que


nos pasen. Aunque no nos hayan llegado todavía, tememos
que nos vayan a llegar. Cuando nos llegan, pedimos que se
vayan. Después de habernos ido seguimos temiendo de su
regreso.

Los abuelos nos cuentan las causas de la obstinación y


del miedo con el fin de que seamos concientes de ello. Ellos
también nos enseñan a meditar para tener la mente
calmada y determinada para que no sea influenciada por las
Ocho Condiciones Mundanas.

El propósito de la práctica de la meditación es


familiarizarnos con el estado de calma y de la sensación de
paz mental.

C0mo resultado cuando nos enfrentamos con la


pérdida de la fortuna, del prestigio, las críticas o las
dificultades seremos capaces de manten er nuestra mente
siempre calmada y firme. Incluso cuando nos encontramos
en condiciones favorables como recibir fortunas, prestigio,
reconocimiento o felicidad , nuestra mente se mantendrá
calmada y no se alterará demasiado.

Una persona consciente de la felicidad y del


sufrimiento en la vida ha entrenado su mente para que esté
estable y firme, como la Tierra, a través de la práctica de la
meditación. Cuando la mente se quede calmada, seremos
capaces de ver que las Ocho Condiciones Mundanas
no son permanentes. Las fortunas pueden aumentar pero
podrán también volver a perderse, al igual que el prestigio.
Tanto los elogios como las críticas o la felicidad pueden
desaparecer al final, según las Tres Características de
la Existencia (tilakkhaņa).

Las Tres Características de la Existencia son las


verdaderas características de todas las cosas en el mundo.

Cada cosa en el mundo tiene características propias,


por ejemplo el oro es dorado, el diamante es brillante, el
cristal es claro y refleja, los seres humanos son cognitivos y
tienen pensamientos propios . Sin embargo sean se res
vivientes o no vivientes todos comparten las Tres
Características de la Existencia.

1) La no permanencia (aniccatā): Significa que nada


es permanente. No podemos mantenernos en la misma
condición física ni mental. Las personas cambian
constantemente con el transcurso del tiempo. No
éramos ayer como somos hoy.

2) El sufrimiento (dukkhatā): Significa el estado de


sufrir. Esto no se refiere solamente a las penas o los
dolores sino también a la insatisfacción derivada de la
incapacidad de mantenerse en la misma condición
puesto que las incertidumbres y los cambios siempre
surgen y al final del cambio algo disminuye . Nuestro
mundo también se encuentra en un estado de cambio
continúo; algún día llegará a su fin y desaparecerá.
3) Yo irreal (anattatā): Se refiere a que nosotros no
somos dueños absolutos de nuestro cuerpo, es decir,
no todo está bajo nuestro control; por ejemplo, no
podemos evitar la vejez, la enfermedad ni la muerte. Si
dividimos nuestro cuerpo a nivel de los componentes
básicos, encontraremos sangre, huesos, tendones, piel,
y otros órganos que lo componen. El cuerpo no es el yo
real, sino algo temporal que se descompone con el
tiempo.

Las personas que no saben de las Tres Características


de la Existencia estarán obsesionadas y no tendrán miedo
de las Ocho Condiciones Mundanas , como consecuencia, se
encontrarán siempre en un estado de perpetuo sufrimiento
y insatisfacción.

Buda por su sabiduría universal conoció bien la


realidad de todo en el mundo y enseñó a la gente la práctica
de la meditación para que tenga una mente calmada, como
la Tierra que no se ve afectada por las Ocho Condiciones
Mundanas.

Los abuelos siempre nos recuerdan que debemos


calmar la mente hasta que se encuentre tan firme como la
Tierra. La mente concentrada nos capacita para ver el
mundo considerando las Tres Características de la
Existencia. Además todos estamos sujetos a las Ocho
Condiciones Mundanas, independientemente de que nos
damos cuenta o no. Lo más importante es entrenar nuestr a
mente para estar siempre calmada y preparada para las
incertidumbres de la vida. Si estamos bien preparados para
lo inesperado, siempre podremos hacer frente a la realidad
de la vida con una mente “despierta”.

Las personas que conocen la realidad de la vida e


intentan mantener su mente estable, como la Tierra que
no se afecta por los objetos aromáticos o
putrefactos, serán capaces de elevar su virtud a un nivel
más alto. Ésta es la cuarta forma mágica de
conducta que previene el divorcio.

Conclusión

La esencia para mante ner una vida matrimonial es la


elevación de la virtud de cada miembro de la familia según
los siguientes factores:

1) Debe ser capaz de depender de sí mismo


económica y moralmente.
2) Debe saber elegir la pareja apropiada.
3) Debe disponer de un asesor s obre la vida
matrimonial.
4) Debe saber cómo purificar la mente.

Estos cuatro factores son los consejos que nuestros


abuelos nos han dado para elevar nu estra virtud. Después
de casarnos muchas obligaciones y responsabilidades nos
esperan y aunque pensemos que no podríamos aguantarlas
tenemos que aprender a manejarlas. Si no uno desarrolla su
virtud hasta el punto en que pueda manejar todas las
obligaciones de la vida matrimonial, no podrá mantener
vivo el matrimonio.

Si la pareja se siente completamente satisfecha de su


matrimonio, sólo debe prestar atención a estos dos puntos:
primero los dos deben soportar todo lo que se les
presente y segundo los dos deben mantenerse
calmados ante las situaciones inesperadas.

Si todos los miembros de la familia sigue n los consejos


de nuestros abuelos nunca surgirán conflictos familiares;
cada persona elevará su virtud a un nivel alto así que el
divorcio nunca llegará a ser una opción en el matrimonio;
los hijos tendrán de quien depender y tendrán un modelo de
mente calmada a seguir. En consecuencia la calidad de vida
mejorará económica y socialmente junto con la calidad de la
mente. Sería de gran beneficio para el mundo entero que
todas las familias alcancen este estado .
Capítulo 3

Mantener vivo el amor

En el libro Thirty-eight Universal Steps to Eternal


Happiness (Treinta y Ocho Pasos para una vida gloriosa ),
recopilado para el programa de verano para la ordenación
de monjes por el venerable Profesor Monje Somchai
Tanavuddho, se trató el tema de cómo abrigar el amor. Ya
que marido y mujer deben considerar este tema
cuidadosamente, deseamos presentar una discusión acerca
de la protección del amor en la familia desde una
perspectiva budista.
¿Cómo mantenemos el amor vivo?

Vivir juntos como marido y mujer puede s er difícil o


fácil. Si uno se pregunta cómo marido y mujer pueden vivir
felizmente juntos, no habrá nunca dos respuestas iguales.
Algunos opinarán que eso depende de lo que dicta la
astrología y el destino. Los cínicos dirán que dependerá del
tamaño del regalo.

Buda respondió a esta respuesta con una sola palabra:


benevolencia. Eso quiere decir, la benevolencia mutua, la
práctica de Cuatro Formas Universales de
Benevolencia (Sańgahavatthu), promueve la felicidad en
la vida en pareja.

1. Generosidad (Dāna)

Amar y vivir juntos requiere compartir. Cada uno


debería poner sus ganancias en el mismo cofre y
compartirlo. El no hacer eso conduciría al surgimiento de la
sospecha. Donde no exista la generosidad, la atmósfera
familiar se tornará desagradable. Compartir involucra
compartir problemas también. Cuando uno tenga un
problema, el otro debe estar dispuesto a darle una mano
para ayudarlo.

2. Forma de hablar agradable (Piyavācā)

Ambas partes deben tener cuidado cuando dan un


consejo. Ser muy franco puede lastimar el ego del otro y
ocasionar resentimientos. La regla de oro es que las buenas
palabras que uno utilizaba antes del matrimonio deben
continuar usándose durante el matrimonio.

3. Beneficio mutuo (Atthacariyā)


Las parejas pueden ayudarse el uno al otro hablando
acerca de lo que es correcto y de lo que es incorrecto
basados en el Dhamma que han estudiado. Ellos deberían
siempre continuar adquiriendo el conocimiento del
Dhamma y ponerlo en práctica. Generalmente cuando el
esposo y la esposa pelean, cada uno tratará de culpar al
otro, cuando en realidad ambos son culpables de no
encontrar la forma apropiada para prevenir conflictos.

4. Roles correctos (Samānattatā)

El marido debe ser un buen padre y la mujer debe ser


una buena madre. Ambos deben asumir responsabilidades
dentro y fuera del hogar. Solamente la meditación les
permitirá conseguir ese objetivo. Aquellos que han
meditado hasta que su pensamiento está claro sabrán como
comportarse. Quienes ten gan su pensamiento claro no
permitirán que influencias externas afecten su
comportamiento.

En conclusión, practicar las Cuatro Formas


Universales de Benevolencia es lo mismo que realizar las
tres acciones meritorias básicas, las cuales son:

Generosidad – compartir las cosas


Cumplimiento de los Preceptos – mejorar la
propia moral tanto al hablar como al actuar
Meditación - la meditación aclara nuestra mente y
una mente clara abre la puerta a la sabiduría y la sabiduría
muestra la forma apropiada de actua r.

Responsabilidades del marido y la mujer

Para que marido y mujer puedan mantener vivo su


amor, deben saber muy bien cuáles son sus
responsabilidades ante el otro. Estas responsabilidades
están basadas en las Cuatro Formas Universales de
Benevolencia.
1. Cinco responsabilidades del esposo ante su
esposa.

Aprecio. El esposo debe abiertamente respetar a su


esposa sin verla fortuitamente como si fuese un amante. Si
su esposa hace algo bueno, reconózcaselo. Y si ella hace algo
malo hágaselo saber, pero sin de círselo en público o al
frente de otros miembros de la familia, ya que al hacerlo
puede disminuirla a los ojos de los demás. Él debe darle a
ella cierta privacidad e independencia en su vida social y en
el tiempo que pasa con sus familiares.

No menospreciar. El esposo no debe concebir a su


mujer como una persona inferior a él en términos de su
nivel social, de su riqueza o de su inteligencia. Él no debe
tomar ninguna decisión familiar sin antes consultar con
ella. Él nunca debe usar ninguna violencia fí sica hacia ella o
abusar emocionalmente de ella.

Fidelidad. Él no debe involucrarse con otras mujeres


como amantes ya que esto es el peor insulto que le puede
hacer a su esposa. El orgullo de toda mujer es tener un
marido fiel sólo a ella.

Autoridad. El esposo debe darle autoridad a su


esposa para que decida asuntos familiares, tales como
aquellos relacionados con la cocina. Si hay algo que su
esposa no puede hacer por sí misma entonces el marido
debe ayudarla.

Accesorios. Es natural que una mujer ponga mucha


atención a su apariencia. Tener accesorios siempre las hace
felices. Esto incluso elimina la ira en algunas mujeres. Por
lo tanto, todo marido debe apartar un presupuesto para esta
tendencia.
2. Cinco responsabilidades de la esposa ante su
esposo.

Ama de casa. Una esposa debe ser buena ama de


casa, cocinar deliciosas comidas y mantener la casa limpia.

Pensamiento. Ella debe estar dispuesta a ayudar a


los familiares de su esposo y a hablar con ellos suavemente.

Fidelidad. Ella debe ser siempre fiel a su marido.

Frugalidad. Ella no debe ser despilfarradora o


tacaña.

Diligencia. Ella debe trabajar mucho para cuidar su


hogar y no debe ocuparse en cosas secundarias.

En un matrimonio tradicional tailandés, cuando el


novio y la novia reciben agua en sus manos regada por la
familia y amigos, ellos llevan guirnaldas conectadas a sus
cabezas significando que ellos estarán unidos por mucho,
mucho tiempo. Desafortunadamente, este símbolo no es
una garantía para tener un matrimonio armonioso.

Buda nos señaló el camino a la unidad, no con


guirnaldas, pero con Dhamma, es decir, benevolencia. La
presencia del Dhamma será como dos lazos que mantienen
unida a la pareja hasta la muerte.

A pesar del comportamiento de la pareja, uno no debe


darle nunca la espalda al Dhamma. Ocasionalmente el
esposo puede extraviarse o la esposa puede empezar a
comportarse de una manera frívola, gastando tiempo y
dinero y dejando la casa descuidada. La forma correcta de
resolver este conflicto es seguir haciendo el bien, cuidando
muy bien del otro y manteniendo su propia bondad. Hacer
eso hará que la situación mejore.
Capítulo 4

La madre de gran virtud de la c asa

El budismo contiene muchas enseñanzas destinadas a


mantener la familia feliz. Estas enseñanzas han sido usadas
como referencia durante miles de año. También es cierto
que hay muchas teorías modernas acerca de la familia. Sin
embargo, los textos budistas ofrecen un conocimiento más
profundo sobre la unidad familiar que las teorías actuales.
Los diez consejos de pad re a hija en el día de su boda
hacían que una hija se convirtiera en una figura importante
en la familia de su esposo. Tanto el esposo como sus
familiares le dieron gran amor y respeto. Eventualmente
ella fue reconocida y adorada como la madre de gran
virtud de la casa.

¿Quién fue doña Visakha?

Visaka, la mejor Upasika [laica budista], fue una


persona muy importante en el budismo. Ella fue la
responsable de la construcción del Wat Bupparam, uno de
muchos monasterios que ayudaron a difundir el budismo
por toda la India durante la época de Buda. El templo fue
construido en la ciudad de Savatthi, Estado de Kosala. Ella
donó una gran cantidad de dinero para construir la
residencia de dos plantas que disponía de mil habitaciones
para los monjes.

Además, fue la primera persona que pidió a Buda


permiso para ofrecer las vestiduras a los monjes para su uso
durante el retiro anual budista durante la estación de las
lluvias. Esta ofrenda se convirtió posteriormente en una
tradición budista muy importante que se ma ntiene hasta el
día de hoy.

Visakha nació en una rica familia en el Estado de


Magadha, el estado más grande en aquel momento. Su
padre se llamaba Dhananjaya.

Una vez, cuando el Estado de Kosala sufría una crisis


económica, el Rey Pasenadi de Kosala hizo una petición
personal al Rey Bimbisara de Magahada para que
Dhananjaya fuera Ministro de Finanzas de su país. El Rey
Bimbisara aceptó la petición, entonces Dhananjaya tenía
que trasladarse de Magadha a Kosala, llevando a su hija
consigo.
Cuando entraban en el territorio de Kosala, a 112
kilómetros de Savatthi, capital de Kosala, Dhananjaya dijo
al Rey Pasenadi, “Esta cuidad es demasiado pequeña, tengo
un séquito grande conmigo, y sería inconveniente vivir en
esta ciudad. Le pido permiso para construir una nueva
ciudad en esta zona”. El Rey le otorgó el permiso. Entonces
Dhananjaya construyó una nueva ciudad llamada Saketa. El
nombre de esta ciudad se puede encontrar en la historia de
la India y en la actualidad aún existe.

El abuelo de Visakha, llamado Men daka, era el hombre


más rico de Magadha, así que la familia de Visakha era muy
importante en la economía de ambos estados durante el
tiempo de Buda.

Los diez consejos que el padre dio a su hija el día de


su boda

El día de la boda de Visakha con un hombre de otra


familia de Kosala, su padre le dio los siguientes consejos:

1} No dejar que el fuego interno salga por el


exterior. No debe revelar problemas internos de la familia
a gente de fuera de la familia.

2} No traer el fuego externo a la familia. Esto


significa no traer los problemas externos a la casa.

3} Dar a aquellos que nos dan. Prestamos cosas a


aquellos que siempre nos las devuelven. De la misma
manera, cuando necesitamos algo ellos pueden prestarnos
ayuda según su capacidad.

4} No dar a aquellos que no nos dan. No


prestamos cosas a aquellos que nunca nos las devuelven y
que se aprovechan de nosotros ni a quienes nunca nos
prestan ayuda cuando la necesitamos aunque tienen la
capacidad de hacerlo.

5} Dar siempre a nuestros familiares sin


importar si nos den o no. Si nuestros parientes
necesitan ayuda debemos ayudarles aunque no nos
devuelvan nada. Aún así son nuestros familiares.

6} Asegurarse de que la familia esté bien


alimentada. Asegúrese de que las comidas que se sirven a
los miembros de la familia sean buenas y que todos los
parientes estén bien alimentados.

7} Saber donde debe sentarse. Esto significa que


debe conocer la manera de comportarse para demostrar el
respeto hacia otros miembros de la familia. Por ejemplo,
sentarse en un nivel superior al de la suegra es una falta de
respeto. Mostrar el debido respeto en la mesa permitirá que
haya paz durante la cena.

8} Cuidar bien de la cama. Debe cuidar bien de los


dormitorios de todos los miembros de la familia. Debe estar
preparada para levantarse primero y acostarse al último.
Debe asegurarse de que todos los asuntos de la familia estén
cumplidos antes de acostarse.

9} Tener respeto al fuego interno. El enfado de


los suegros o del esposo se entiende como el fuego dentro de
la casa. No debe responder de ninguna manera ante los
exabruptos de ellos cuando están enfadados. Tiene que
esperar hasta el momento apropiado para explicarles la
situación con todo respeto.

10} Dar homenaje a los ángeles de la casa.


Cuando el esposo o sus pa rientes han hecho algo virtuoso
debe alabarles y darles apoyo para que continúen
portándose bien.
Aplicando los diez consejos de su padre, Visakha pudo
ganar el afecto de su esposo, de sus suegros y del séquito.
Se convirtió en una tradición para las mu jeres el aprender
estos consejos antes de casarse, una práctica que existe
hasta el día de hoy. La esposa en cualquier familia que
practique los diez consejos será llamada “la madre de
gran virtud de la familia ”.
Capítulo 5

El nacimiento de una person a


meritoria

Todos siempre están contentos cuando nace un nuevo


miembro de la familia. Algunas familias están tan alegres
que invitan a los monjes para recibir ofrendas en sus casas
durante siete días. Otros celebran con una fiesta de siete
días. Naturalmente el nacimiento es un momento de
alegría, pero también es un buen momento para plantear
una cuestión importante: si todos nacimos como humanos
¿por qué somos diferentes? ¿Qué determina nuestra
diferencia?
Somos diferentes, pero hay una cosa que to dos
compartimos: la ignorancia. Hemos nacido en el mismo
mundo, pero no sabemos cómo llegamos a ser quienes
somos. No sabemos exactamente en qué punto del universo
se sitúa nuestro planeta, ni a dónde vamos después de la
muerte. De hecho tenemos muchas p reguntas a las cuales
no tenemos una respuesta todavía. ¿Por qué unos se
mueren en el útero mientras que otros nacen vivos? ¿Por
qué algunos nacen sanos mientras que otros salen al mundo
con alguna discapacidad como la sordera o la ceguera? ¿Por
qué algunos nacen en familias ricas mientras que otros
nacen en familias tan pobres que no tienen nada de comer?
¿Por qué algunos nacen en la sociedad de clase alta
mientras que otros no? ¿Cómo es posible que dos personas
que han sido criadas en la misma familia, qu e hacen el
mismo trabajo y que piensan de la misma manera, tengan
vidas distintas, uno termina siendo pobre mientras el otro
rico? Y la cuestión más curiosa: ¿por qué nacemos como
seres humanos mientras que otros nacen como animales?

Estas diferencias físicas y sociológicas nos parecen


normales y a veces ni las tenemos en cuenta. Sin embargo,
si las analizamos profundamente, tiene que haber una razón
detrás de su existencia. Simplemente todavía no sabemos
dónde se hallan tales razones.

Si no conocemos el budismo, nunca sabremos las


respuestas a esas cuestiones. La enseñanza del budismo nos
permite conocer las causas originales de las diferencias y
nos hace entender la ley que rige el mundo: la Ley del
Karma.

Las diferencias encontradas en la vida


dependen del karma de cada individuo.

Todos somos seres humanos, pero variamos en el


grado de felicidad o de Dukkha (sufrimiento), lo cual indica
que existe el efecto del karma y sus consecuencias
derivan de nuestras vidas anteriores.

Un venerable monje comentó una vez sobre el karma:

“La palabra karma es neutral, es decir, no implica


algo malo ni bueno puesto que karma significa acción. Una
acción siempre lleva una consecuencia. ¿Por qué estamos
llenos? Pues, porque hemos comido. Si no comiéramos
tendríamos hambre.

En la física, existe la teoría que indica que la energía de


una acción es igual que la energía de su reacción. Isaac
Newton la descubrió y la llamó la Tercera Ley de
Movimiento. En el Dhamma, podemos decir que cualquier
acción que uno realiza tendrá su consecuencia.

Esta ley de la física fue descubierta por los científicos y


se la aceptaron hace unos 300 años. Pero Buda descubrió la
Ley del Karma y la enseñó al mundo hace más de 2 500
años, pero lo que descubrió fue aún más profundo.

Veamos el caso del aborto como ejemplo. Si lo vemos


desde un punto de vista convencional, pensaremos que el
niño abortado no tenía una opción. Es culpa de los padres
por no desear que su hijo nazca y entonces optan por el
aborto. Buda nos enseñó que no deberíam os ver las cosas
de manera tan superficial. Nos enseñó a ver más profundo y
a plantear cuestiones. De hecho en este mundo hay muchos
padres que están deseando y están preparados para tener
hijos. ¿Por qué entró el bebé en la matriz de una mujer que
decidió abortarle en vez de entrar en la vida de otra familia?

La razón es que el niño abortado tiene el karma de


haber matado a animales en su vida anterior. Cuando llegó
el tiempo de renacer, debido a la repercusión kármica de
‘matar’, fue concebido en el úte ro de la persona que también
tenía gusto por matar a los animales. La madre y el bebé
(feto) deben tener un karma equivalente para que el niño
pueda entrar en su útero. Si no, la concepción no tendría
lugar. En este caso, durante el embarazo, la madre se
sentirá mareada o tendrá ganas de matar animales. A veces
deseará comer sangre fresca para reducir su mareo,
pensando que ésta es la única solución.

En algunos casos la situación es aún peor. Cuando la


madre siente náuseas matinales, quiere eliminar al b ebé
(feto) inmediatamente con el aborto. Ésta es la
consecuencia de un karma más severo. La consecuencia de
una acción es mucho más complicada de lo que vemos. Por
ejemplo cuando hay un gran número de nacimientos de
personas con karma de ‘matar’, se podría crear una
repercusión colectiva, es decir, el gobierno de esa sociedad
quizás podría aprobar la ley del aborto libre.

Cuando una persona con mérito (con buen karma)


entra en el útero, ¿cómo afecta a la madre?

Buda explicó que cuando una persona con gra n mérito


entra en el útero, el poder de su mérito traerá la
prosperidad a esa familia. La madre espera con ganas el día
de ver a su hijo pronto. Ella va a hacer ofrendas y a pedir
tener a un hijo bondadoso. Igualmente cuando una persona
que viene de un reino agradable está preparada para
renacer, elegirá a la mejor madre y a la más generosa. Una
vez dentro de su útero, traerá buena fortuna a su madre y a
sí mismo.

El efecto del mérito de la persona es realmente


interesante. Si la madre experimenta náuseas matinales, no
se aliviarán hasta que ella haga algún mérito como ofrecer
comida a los monjes. Con este hecho su síntoma se curará
inmediatamente. Esto implica que el bebé (feto), en sus
anteriores vidas siempre hacía dāna (donación en la lengua
pali). La presencia del bebé influye para que ella haga
también dāna. Si la persona gustaba de recitar oraciones en
sus vidas anteriores, cuando su madre tenga náuseas, ella
orará para ser aliviada y esto por la influencia del be bé.
Cuando la madre canta y medita, el bebé estará contento.

Las diferencias físicas y sociológicas de las personas en


el mundo son el resultado de los karmas presentes y
pasados. Del pasado ya no podemos cambiar nada, pero sin
embargo tenemos toda la opo rtunidad en el presente de
construir un futuro mejor. Buda nos enseñó a no acumular
más malos karmas. El karma malo que cometimos hoy nos
va a perseguir y su consecuencia tendrá lugar en el futuro.
Evitando cometer malos karmas, aunque sea algo mínimo,
uno gozará solamente de beneficios.

El corazón del budismo es evitar cometer malas


acciones, realizar solamente buenas acciones y purificar la
mente para que sea pura y brillante. Hacer buenas acciones
es acumular buen karma, lo que nos hace más felices.
Algunas de las buenas acciones realizadas tendrán
consecuencias que se manifestarán en esta vida mientras
que el resto de las acciones sentarán las bases de la felicidad
en vidas futuras.

Los que hemos nacido en este mundo, debemos estar


satisfechos con las condiciones que tenemos. Tenemos que
intentar hacer más actos buenos y no dejarnos influir por
los malos pensamientos. No hay otra mejor técnica que la
meditación para mantener nuestra mente fuerte siempre.
Mientras más se medita más fortaleza se adquiere para
hacer buenos actos.

Cuando entendemos los efectos del karma, podremos


guiar nuestras vidas para seguir el camino correcto. Las
consecuencias del karma son reales y siempre sucederán. Si
realizamos buenos actos las consecuencias serán positivas.
Al contrario si cometemos malas acciones las consecuencias
serán negativas también. La enseñanza de Buda es real y ha
sido comprobada durantes más de dos mil años. Las
diferencias de la gente en el mundo nos confirman que las
consecuencias del karma existen. Es la razón por la cual
debemos pretender hacer solamente buenas acciones.

Buda nos enseñó que:

1] Todo no se acaba cuando morimos.


2] Si hacemos buenas acciones iremos al Cielo.
3] Si cometemos malas acciones iremos al Infierno.
4] Si eliminamos todo nuestro kilesa (impurezas
mentales) iremos al Nirvana.

Mientras continuemos en el ciclo de nacimiento y


renacimiento, debemos evitar las malas acciones y realizar
solamente las buenas. Debemos purificar nuestra mente
tanto como podamos. Los méritos adquir idos de las buenas
acciones nos llevarán a renacer en buenas condiciones
siendo ricos e inteligentes. Además naceremos en una
familia que valore las virtudes. También nos aportarán la
mejor oportunidad para el éxito en la vida presente y futura
hasta poder eliminar todo el kilesa.

Del mismo modo si las parejas quieren tener un hijo


digno, deben concentrarse en hacer buenas acciones, como
por ejemplo orar o meditar hasta que su mente quede clara
y brillante. Si las parejas son muy dignas podrán tener
también un hijo con mucha dignidad, el que traerá la
felicidad a la familia.
Capítulo 6

Educar a su hijo desde el


embarazo

Todos los padres desean que su hijo sea sano y bueno.


Sin embargo, muchos padres no comprenden que para
tener un buen hijo primero ellos tienen que comportarse
bien para convertirse en buenos padres y madres, incluso
antes de casarse. Esta preparación debe empezar antes que
el hijo nazca. De no ser así no podrán ser buen ejemplo para
su hijo. En consecuencia, el hijo no será tod o lo bueno como
que ellos esperan. Enton ces es bueno conocer el tema de
transferir buenos comportamientos al bebé en el
útero.
La transferencia de buenos comportamientos al bebé
según la enseñanza budista se debe hacer incluso antes que
el niño salga al mundo.

Para nacer como humano se requiere no solamente la


combinación del esperma del padre y el óvulo de la madre
sino también un espíritu conceptual. La vida se forma
solamente si el espíritu conceptual posee karma (bueno o
malo) similar al karma de lo s padres en el momento de la
concepción.

Por ejemplo, si los padres son sanos, buenos y


generosos habrá mucha posibilidad de tener también un
buen hijo.

Para tener un buen hijo los padres deben prepararse


antes del embarazo. Los padres tienen que compor tarse
bien (actuar, hablar y pensar bien). Deben eliminar todas
malas conductas, guardando los Cinco Preceptos hasta el
momento de la concepción.

Cuando la esposa se entera que está embarazada, ella


debe poner mucha atención a sus acciones: caminar, mover ,
comer (no picante, no alcohol, cuidado con los
medicamentos, etc.) incluso evitar malas emociones. Todo
esto influirá al niño.

Los chinos comprenden bien en esto. Hay un cuento


chino antiguo llamado “Educar al hijo desde el embarazo”
que se relata hasta el día de hoy.

“Durante el festival Cheng Meng (el homenaje a los


antepasados), mientras dos hermanas caminaban para
presentar sus respetos a la tumba de sus antepasados,
encontraron una bolsa de dinero caído en sobre el suelo. La
hermana menor dijo:
“Hermana, tenemos suerte, ésta es nuestra fortuna”.

La hermana mayor replicó, “Mi hermana, no podemos


guardar esta fortuna”.

“¿Por qué no?” la hermana menor preguntó.

La hermana mayor replicó, “Durante mis tres meses de


embarazo he enseñado siempre a mi hijo las buenas
virtudes. Le enseño que no podemos tomar como propias
las cosas que no son nuestras. Debemos esperar aquí un
rato para ver al verdadero dueño de esta fortuna ”.

En el mismo momento, había una chica que estaba


observando a las dos hermanas recogiendo la bolsa de
dinero. Se acercó y dijo, “¿Han visto una bolsa de dinero?

La hermana menor respondió: “Aquí está”.

La chica rápidamente dijo, “Éste es mi dinero que se


me ha caído. Por favor devuélvemelo; mi madre está
esperando comprar alcohol con este dinero”.

La hermana mayor preguntó, “¿Cuándo se te cayó?”

La chica no respondió nada y dijo, “No me hagas tantas


preguntas”.

En el mismo momento, vino otra chica llorando. Ella


preguntó con una voz temblorosa.

“Queridas señoritas, ¿han visto una bolsa de dinero


caída por aquí? Hace un rato la llevaba cuando pasaba por
aquí y se me cayó sin darme cuenta. Iba a comprar papel de
oro y plata con este dinero para usar en el funeral de mi
madre”.
Al escuchar la explicación de esa chica, la astuta
primera chica se largó de allí.

Las dos hermanas devolvieron la bolsa de dinero a la


secunda chica porque ella era la verdadera dueña. La chica
estaba muy agradecida a las dos hermanas.

Las dos hermanas continuaron caminando. La


hermana mayor dijo, “Her mana, has solucionado muy bien
el problema. Yo pensé devolver dinero in mediatamente a la
primera chica”.

La hermana mayor replicó, “Para ayudar a la gente,


tienes que ayudar hasta el final. Si empiezas a hacer algo
tienes que terminarlo. Si decidimos dar la bolsa de dinero a
la chica astuta, ¿no sería mejor no recoger la bolsa? Una vez
que la recogimos tenemos que buscar su verdadero dueño.
Quiero que mi hijo sea una buena persona entonces tengo
que educarle desde que esté en el útero ”.

La hermana menor inclinó la cabeza admirando a su


hermana mayor”.

Este cuento demuestra que para educar un hijo hay


que empezar desde el embarazo. Si la madre embarazada
continúa consumiendo alcohol, fumando y el marido la
apoya en estas malas acciones, el feto se acostum brará a lo
malo. Estos comportamientos dan mucha probabilidad de
tener un hijo discapacitado. Al contrario, si los padres hacen
que el bebé (feto) se acostumbre a las buenas virtudes,
tendrán un buen hijo.

Para educar al bebé para que sea una buena person a


los padres deben ofrecer buenas lecciones con buenos
comportamientos, incluso antes de la concepción. Esto
asegurará el nacimiento de un buen niño y garantizará que
ellos sean capaces de cuidarlo bien hasta el último
momento.
Parte II

Educar a sus hijos


Capítulo 7

Educar a los niños para que sean


inteligentes y virtuosos

Nuestro mundo parece cada vez más pequeño debido a


todos los medios de comunicación. Los cambios que
suceden por todo el mundo tienen efectos inmediatos sobre
nosotros, tanto social como económicamente. La fortaleza
de la familia, la sociedad y la nación dependen del
conocimiento, las capacidades y las virtudes que tienen los
padres para criar niños inteligentes y virtuosos.
Ningún padre puede desligarse de la importan te
responsabilidad de aprender formas de criar niños
inteligentes y virtuosos. Los niños inteligentes que no son
virtuosos no sobrevivirán, y tampoco sobrevivirán los niños
virtuosos que no son inteligentes. Los niños deben tener
estas dos cualidades para tener éxito y triunfar en el mundo.

En algunos casos, vemos que padres virtuosos tienen


hijos inteligentes, pero no saben cómo criarlos. Como
resultado, los niños son traviesos y los padres están
confundidos pues no saben dónde se equivocaron en la
crianza.

Cuatro tipos de familia


Para criar niños inteligentes y virtuosos, los padres
deben acatar estas dos pautas.

1. Los padres deben contar con el conocimiento


necesario para criar a los niños para que sean
inteligentes y virtuosos.

2. Los padres deben invertir tiempo para


enseñar a los niños para que sean inteligentes y
virtuosos.

Las familias son diferentes e interpretan e


implementan estas dos pautas a niveles diferentes. Hoy en
día existen cuatro tipos de familia.

Tipo I: Una familia que tiene tiempo pero


carece de conocimiento

Tipo II: Una familia que tiene conocimiento


pero carece de tiempo
Tipo III: Una familia que no tiene ni
conocimiento ni tiempo

Tipo IV: Una familia que tiene conocimiento y


tiempo

En los primeros tres tipos de familias, los niños


reciben muy poca capacitación moral. Algunos niños
provienen de familias adineradas, tienen todo lo que
quieren, pero reciben poca supervisión de los padres. Estos
niños tienen mayor probabilidad de no convertirse en
personas virtuosas.

Los niños de familias del tipo IV reciben conocimiento


y capacitación moral de manera continua de sus padres.
Dichos padres nunca dejan a sus hijos a la merced de la
naturaleza. Aunque puede ser que no sean ricos, sus hijos
tienen la capacidad de desarrollar un futuro sólido.

Conocimiento en la crianza de los niños

Existen unos principios budistas básicos sobre cómo


criar a niños para que sean inteligentes y se comporten
bien. Se puede encontrar estos principios en un libro que se
llama, “How to Raise the Children to Be Good People for the
Nation" ("Cómo criar niños para que sean buenas personas
para la nación”), escrito por The Moral Development
through Education Foundation (la Fundación de
Desarrollo Moral a través de la Educación ). Pedimos su
autorización para compartir sus enseñanzas en este libro. El
lector puede remitirse a ese libro en busca de más detalles.

Los padres potenciales pueden considerar tener hijos


si pueden abordar con claridad estas 4 preguntas:

1. ¿Cuáles son las buenas cualidades que deben tener


los niños?
2. ¿Cómo forman los niños buenos o malos hábitos?

3. ¿Cómo pueden los padres cultivar con éxito buenos


hábitos en sus niños?

4. ¿Cómo promover la virtud y la inteligencia en los


niños?

Los padres deben estar conscientes y deben ser


capaces de responder a estas cuatro preguntas antes de
tener hijos. Las respuestas vienen de las enseñanzas de
Buda:

¿Qué cualidades tienen los niños


buenos?
Los niños buenos deben tener tres características, las
cuales se derivan de las tres características supremas de
Buda:

1} Virtud, o no ser problemático


(La pureza absoluta de Buda)
2} Inteligencia, o no ser ignorante
(La sabiduría suprema de Buda)
3} Demostrar cariño hacia los demás
(La compasión suprema de Buda)

Cualquier niño que tiene estas tres características se


considera un Niño Bueno, por lo que este niño será un
buen receptor de los conocimientos de sus maestros y
parientes. Como la tierra rica y fértil que permite el buen
crecimiento de las plantas, éstas son las características
básicas a partir de las cuales pueden desarrollarse más
virtudes.
¿De dónde vienen los hábitos de los
niños?

Tras aprender que los niños buenos no deben ser


traviesos ni ignorantes ni despreocupados por los demás,
ahora la pregunta que se plantea para los padres es, ¿cómo
pueden los padres cultivar dichas características en sus
hijos?

Se establecen buenas cualidades en los niños


cultivando buenos hábitos.

Los hábitos son familiaridad, o el


comportamiento individual de cada persona, y se
logran con acciones como el habla y los
pensamientos repetidos. Estas actividades
repetitivas, influyen en lo bueno o malo que somos.

Si los padres permiten que sus hijos piensen, hablen y


actúen continuamente de u na manera no virtuosa, sin
percatarse por estas acciones, sus niños se van a
acostumbrar a cometer fechorías, lo cual cultiva malos
hábitos. En este caso es probable que los niños se
conviertan en malas personas.

Al contrario, si los padres enseñan a su s hijos a realizar


buenas acciones de manera repetida, sin importar el grado,
se van a acostumbrar a ello hasta que se convierta en un
hábito. Y los niños se convertirán en buenas personas en el
futuro.

La gente suele pensar, hablar y actuar en función de


tres cosas distintas:

1) Los Cuatro Requisitos, que son la vestimenta, los


alimentos, el alojamiento y la medicina
2) Nuestras tareas
3) Nuestra rutina diaria.

Los hábitos provienen de la manera en que utilizamos


los Cuatro Requisitos. Por eje mplo, tres niños que son
alimentados con rutinas distintas desarrollarán hábitos
diferentes:

El primer niño: la madre alimenta al niño


irregularmente. El niño llora cuando tiene hambre y no
se le alimenta a tiempo. Se irrita fácilmente y grita cuando
necesita atención. Por lo tanto, el niño desarrollará un
hábito de violencia y agresión para obtener lo que quiere.
Es como si los padres tuvieran que criar a un bebé tigre.

El segundo niño: la madre alimenta al niño


todo el tiempo. Aun cuando no tiene hambre, al niño se
le amamanta. Está obeso pero contento. Sin embargo, el
niño desarrollará un hábito de pereza e indolencia. En este
caso, es como si los padres tuvieran que criar a un bebé
cerdo.

El tercer niño: la madre alimenta al niño según


un horario. El niño desarrolla un hábito de puntualidad y
llegará a ser una persona sana, razonable y contenta que
sabe tomar buenas decisiones. Será fácil cuidar a dicho
niño. En este caso los padres tienen a un sabio que criar.

Los buenos y malos hábitos provienen de la repetición


de las maneras de pensar, hablar y actuar. En particular, se
trata de cómo las personas utilizan los cuatro requisitos, de
cómo trabajan y de cómo realizan sus actividades diarias.

Los padres pueden inculcar la virtud, la int eligencia, y


la compasión hacia los demás al enseñar a sus niños
respeto, disciplina y resistencia, con respecto al uso que
hagan de los cuatro requisitos, sus tareas y sus actividades
diarias. El niño, a su vez, desarrollará buenos hábitos (las
tres características ya mencionadas).

Educar a los niños para que sean


inteligentes

Los padres que quieren que sus niños sean inteligentes


pueden cultivar la sabiduría al enseñarles el respeto. El
respeto es un indicio del agradecimiento que uno
tiene por la virtud o el beneficio verdadero de una
persona o un objeto.

Se puede clasificar la sabiduría en dos categorías: la


sabiduría mundana y la sabiduría del Dhamma.

La sabiduría mundana es el conocimiento


adquirido a través de la educación. Es necesario
para ganarse la vida. Sin embargo, sin la moralidad
para guiar al conocimiento, puede ser que los niños se
aprovechen de ello. Por ejemplo, un farmacéutico puede
producir y traficar heroína en vez de llevar a cabo
investigaciones para descubrir nuevos medi camentos. La
sabiduría mundana tiene que existir junto con la sabiduría
del Dhamma.

La sabiduría del Dhamma es la sabiduría que


se emplea para decidir lo que es correcto o
incorrecto, bueno o malo, mérito o demérito,
adecuado e inadecuado. Los niños aprenden este tipo
de sabiduría de las enseñanzas budistas. En la práctica, los
padres deben enseñarles a respetar y a escuchar las palabras
de sabiduría y las experiencias de vida de los ancianos y
aprender sobre la gente y el mundo en constante cambio.

La sabiduría del Dhamma viene de siete fuentes.


Cuando uno respeta estas fuentes, uno ganará la sabiduría:
1] Respeto por Buda
2] Respeto por el Dhamma
3] Respeto por la Sangha (la comunidad
monástica)
4] Respeto por la educación
5] Respeto por la meditación
6] Respeto por la prudencia
7] Respeto por los saludos

Mientras los padres más enseñen a sus niños a


reconocer las virtudes de estas siete fuentes, más sabiduría
del Dhamma van a ganar.

Los niños son muy afortunados si tienen padres qu e


han estudiado el Dhamma de las siete fuentes de sabiduría y
están dispuestos a inculcar esta sabiduría en sus niños antes
de que se casen. Los padres tendrán niños sabios y los
niños tendrán padres capaces de enseñarles la sabiduría del
Dhamma. Las generaciones venideras serán virtuosas y
llevarán prosperidad a la familia.

Educar a los niños para que sean


virtuosos

Los niños virtuosos tienen padres quienes les han


enseñado a tener disciplina tanto en sus vidas mundanas
como en el Dhamma. La dis ciplina se enseña a los hijos en
conjunto con el uso de los cuatro requisitos, sus tareas y su
rutina diaria. Los padres deben dar un buen ejemplo a
través de su propio comportamiento.

Las 4 disciplinas mundanas son:

1} Disciplina con el habla


Para inculcar a un niño la disciplina en el habla los
padres deben hablar correctamente, es decir, de manera
cortés, veraz y con buenas intenciones. Los padres deben
señalarles las consecuencias negativas de decir mentiras;
pues las mentiras minan la calidad d e la mente y provoca el
olvido.

2} La disciplina con el tiempo


Enseñar a los niños a tener disciplina con el tiempo es
enseñarles a despertarse, comer y dormir a tiempo.

Despertarse a tiempo significa levantarse temprano


por la mañana para asegurar se que el niño no duerma
demasiado. En particular, si una niña se despierta tarde,
esto podría desintegrar su matrimonio más tarde en su vida.

Comer a tiempo significa que el niño debe comer


cuando tiene programada la hora de comer. Si el niño
padece de gastritis, es probable que presente síntomas el
resto de su vida, como dolores de estómago cada vez que
esté estresado.

Dormir a tiempo significa acostarse en las primeras


horas de la noche, es decir no muy tarde. Cuando los niños
duermen tarde, no van a querer levantarse temprano.
Cuando sus padres los despiertan, van a negociar para
poder dormir más y así comenzarán el día con una
discusión. Los niños van a convertirse una persona
engañosa.

3} Disciplina con el aseo personal


Los niños sucios no son bien aceptados por la
sociedad. Los padres tienen que enseñarles cómo mantener
su aseo personal, cómo bañarse usando menos agua y jabón
pero aún así saliendo limpios.

4} Disciplina con la organización


Los niños que carecen de la capacidad de organizarse
suelen tener conflictos cuando trabajan con los demás. No
pueden seguir pautas delineadas ni preparar o cumplir su
trabajo, lo cual ocasiona dificultades para lograr el éxito.
Las Disciplinas del Dhamma tienen sus raíces en
los Cinco Preceptos:

Los niños que no cumplen con los Cinco Preceptos


experimentarán problemas en la vida adulta y en su
matrimonio. Si la vida es desfavorable, puede que cometan
delitos en el futuro:

1) Si no cumplen con el Primer Precepto: No matar o


dañar la vida, puede que cometan un asesinato.

2) Si no cumplen con el Segundo Precepto: No robar,


puede que se involucren con la corrupción.

3) Si no cumplen con el Tercer Precepto: No tener


mala conducta sexual, puede que caigan en la prostitución.

4) Si no cumplen con el Cuarto Precepto: No mentir,


no hablar evasivamente o mofándose de otros o incluso
empleando palabras groseras, puede que cometan fraude.

5) Si no cumplen con el Quinto Precepto: No consumir


sustancias que embriagan, como el alcohol y las drogas, de
lo contrario van a precipitar los Caminos a la Perdición
(Apāyamukha) como jugar, consumir alcohol, ir de
parranda, etc.

Educar a los niños para que atiendan a


los demás

Para que los niños puedan demostrar preocupación


por los demás, hay que ense ñarles a cuidarse. Así, serán
capaces de ayudar a los demás. Con el fin de lograr esto, los
padres deben inculcar la entereza en los niños.
A primera vista, parece que es suficiente que los niños
sean virtuosos e inteligentes, pero la verdad es que no lo es.
Cuando uno nace como ser humano, uno también
debe ser beneficioso para los demás.

Supongamos que cultivemos un árbol frutal. Lo


cuidamos al regarlo, ararlo y abonarlo. Pasan tres años y
aún no rinde fruto, así que decidimos cortarlo.

En comparación, si los niños no ayudan a los demás,


nadie querrá ayudarlos cuando sean adultos. La vida les
será difícil, y serán pobres durante toda la vida. Cuando
necesiten ayuda nadie querrá ayudarlos, porque habrán
sido descuidados con los demás.

Los padres pueden enseñar a los niños a atender a los


demás, al enseñarles a ayudarse a sí mismos. Esto se
consigue al tener entereza a cuatro niveles:

1) La entereza en las dificultades físicas. Los


niños aprenderán a trabajar duro y no tendrán miedo al
trabajo duro y a las dificultades físicas.

2) La entereza en el dolor y el sufrimiento. Los


niños estarán conscientes de la necesidad de cuidar su
propia salud. No engañarán y nunca fingirán estar
enfermos con el fin de no asistir a la escuela.

3) La entereza en el conflicto. Los niños


aprenderán a jugar en equipo. No tendrán un complejo de
inferioridad ni de superioridad y no se considerarán igual a
los adultos. Conocerán su papel cuando se relacionen con
los demás.

4) La entereza en los est ímulos de las


impurezas mentales (kilesa). Los niños no se
convertirán en esclavos del alcohol y las drogas, la atracción
sexual, el dinero, las alabanzas y otros problemas. Estos
estímulos provocan graves problemas sociales.

Por ejemplo, la corrupción tiene su origen en los


padres que no enseñan a sus niños a aguantar los estímulos
de las impurezas mentales. Nunca les han enseñado dichos
verdaderos como, “la honestidad siempre satisface,
mientras que la deshonestidad sólo satisface por un
período corto”. Además, este tipo de padres alientan a
sus hijos a venerar el dinero, aunque el dinero no puede
comprar cosas como la pureza de la mente.

Cuando se enseña a los niños a valorar el dinero sobre


la virtud, llegan a querer sólo el dinero, poco importa si lo
obtienen por vías engañosas o corruptas. Esto ha impedido
que un país como Tailandia progrese, aunque cuenta con
más recursos naturales que muchos otros países.

Cómo las virtudes se traducen en


inteligencia para los niños

Tras leer el libro, “How to Raise the Children to Be


Good People for the Nation" (" Cómo criar a niños para que
sean buenas personas para la nación ”), uno puede
entender cómo las virtudes pueden llevar a la
inteligencia en los niños.

Todos los niños quieren ser buenos. A lo s niños se les


puede comparar a sábanas blancas y sus padres son los que
tiñen las sábanas. Si eligen el color correcto y aplican las
técnicas correctas, las sábanas serán hermosas. Pero si no
se las tiñe de manera correcta, se las podría considerar
dañadas e inútiles y luego tirarlas a la basura. Sin embargo,
criar a niños inteligentes es mucho más complicado que
teñir sábanas. Es muy difícil rectificar los errores.
La gente que rodea a los niños debe darles un buen
ejemplo:

1] Los padres deben dar buen ejemplo a los niños.


2] Los padres deben encontrarles amigos virtuosos.
3] Los padres deben ofrecerles buenos libros.
4] Los padres deben llevarles a un buen maestro.

Los padres pueden dar buen ejemplo a los niños en


estas áreas:

1} Ejemplo en el trabajo.
2} Ejemplo en el uso del tiempo.
3} Ejemplo en el uso de los Cuatro Requisitos.

Los padres que dan buen ejemplo tienen estas


características especiales:

1) La capacidad de controlar la calidad del


trabajo

Una persona que controla la calidad intenta


obtener mejores resultados en todo lo que hace.
Entiende muy bien lo que constituye la alta calidad y cómo
lograrla. Siempre trabaja lo mejor que puede; está
consciente de los obstáculos y los problemas y los evita.

Una persona que no respeta la educación o a los


demás, o quien busca defectos en otros, no será capaz de
obtener este nivel de sabiduría. Nadie querrá compartir
nada con él.

Sin embargo, si los niños aprenden el respeto en casa,


y ven buenos ejemplos en la gente de su entorno,
aprenderán a valorar el respeto. Aprenderán lo que es la
alta calidad, darán el enfoque adecuado al trabajo y serán
capaces de reconocer problemas potenciales. Serán muy
competentes y efectivos en el desempeño de su trabajo
como lo eran sus modelos de conducta.

2) La capacidad de manejar el tiempo

Una persona que maneja su tiempo puede


hacer un plan de trabajo. Sin importar el tipo de
trabajo, puede prever todos los pasos del trabajo, cómo
realizarlo, lo que se debe hacer primero, lo que deb e seguir,
cuánto debe durar cada paso y el tiempo necesario para
completar el proyecto.

Si una persona no se ha acostumbrado a manejar el


tiempo, no podrá cumplir sus deberes. Los que saben
manejar el tiempo saben su valor. El tiempo pasado nunca
se recupera. Cuando pasan las buenas oportunidades, sólo
queda en su lugar la vejez.

Los que no pueden manejar su tiempo se


acostumbrarán a hacer las cosas como quieran y no se
acostumbrarán a trabajar con una fecha límite. Sin la
disciplina para manejar s u tiempo, será difícil cumplir los
planes.

La gente que sabe manejar su tiempo se ha


acostumbrado y disciplinado a sí mismo antes, esa gente ha
aprendido cuánto tiempo se necesita para llevar a cabo una
rutina básica o un proyecto. Puede implementar un plan
paso a paso, calculando el tiempo requerido para cumplirlo
de manera precisa y se equivocan muy raras veces.

Por lo tanto, cuando los niños aprenden la disciplina


en casa y ven ejemplos de gente capaz de manejar su tiempo
de manera efectiva, se co nvertirán en personas que valoran
la disciplina y el buen manejo del tiempo. Esto es una
forma de inculcar en ellos el no ser egoístas y así podrán
seguir el buen ejemplo de sus modelos de conducta.
3) La capacidad de manejar un presupuesto.

Una persona que puede manejar un


presupuesto es capaz de planificar mejor los gastos
que darán el mayor rendimiento con recursos
mínimos.

Una persona que maneja un presupuesto sabe lo que


es necesario y lo que no es necesario. No despilfarra el
dinero. Esta persona primero evalúa si un gasto va a
beneficiar al grupo. Sabe que un presupuesto limitado
llevará a la mala calidad y presupuestar en exceso llevará al
despilfarro. Debe ser honesto y por su bien y el bien de sus
amigos no debe haber corrupción.

Las organizaciones que carecen de empleados capaces


de manejar un presupuesto tendrán problemas financieros
a causa de una planificación financiera poco clara y confusa.
Esto provocará contratiempos en la realización de
proyectos, pérdida de confianza en tre los empleados y
finalmente causará mala reputación.

Una persona es capaz de manejar un presupuesto


efectivamente si se le ha enseñado a soportar las
dificultades físicas, el dolor, el sufrimiento, el conflicto y los
estímulos de las impurezas mental es. Con esta resistencia,
sabe ser económico en su uso de los Cuatro Requisitos.

Al tener resistencia y modelos de conducta adecuados,


los niños serán inteligentes con respecto a los presupuestos
y seguirán el ejemplo de sus modelos de conducta de la
mejor manera posible.

Los niños pueden asimilar estas tres características de


las buenas personas en su entorno. Aprenderán las
aptitudes para manejar la calidad, el tiempo y los
presupuestos. Realizarán todo proyecto que se les asigne,
usando un mínimo tiempo y recursos, lo cual es un gran
atractivo en todos los ámbitos. Así la virtud se traduce en
inteligencia a través de los ejemplos de la gente que rodea a
los niños.

Conclusión
Los padres deben transmitir conocimiento,
capacidades y virtudes a sus hijos hasta que éstos
desarrollen la inteligencia y la virtud que les orientarán a
vivir sus vidas maravillosa y orgullosamente. Para que los
padres transmitan estas cualidades a sus hijos, ellos deben:

1) Mantenerse informados sobre lo que les po dría


ayudar en la crianza de sus hijos. Entenderán cómo los
niños piensan en la sociedad moderna y cuáles desafíos se
les enfrentan.

2) Mantener a sus niños alejados de la inmoralidad.


Los padres deben tomarse tiempo para enseñar a sus niños,
específicamente para enseñarles cómo usar los cuatro
requisitos, realizar sus deberes y cumplir su rutina diaria;
también deben pedir a los maestros, parientes y amigos a
que les protejan. Además, deberían darles el permiso de
advertir a los niños cuando cometan algún error.

Si los padres tienen estas dos cosas en cuenta,


entonces los niños se acostumbrarán a la virtud y no a lo
pernicioso. Los niños siempre contarán con gente en su
entorno que les puede demostrar las acciones, las palabras y
los pensamientos correctos. Cuando se conviertan en
adultos, serán inteligentes y virtuosos. Estas dos cualidades
les ayudarán a depender de ellos mismos y a vivir sus vidas
de una manera maravillosa.
Capítulo 8
Matar con la bondad:

Los padres que defienden a sus h ijos


incluso cuando se portan mal

“El amor de un padre puede hacer daño a los


hijos”. Esta frase podría surgir en contra de los
sentimientos de los padres, pero en realidad hay muchos
niños que se convierten en malos niños cuando sus padres
los defienden a pesar de que han hecho algo malo. Por lo
tanto, los padres o aquellos que quieren crear una familia en
el futuro tienen algunas cuestiones importantes que
considerar: ¿Cómo criamos hijos buenos y cómo evitamos
equivocarnos al querer a nuestros hijos de forma incorrecta,
dañándolos al defenderlos cuando cometen actos malos?
No se ponga a favor de sus hijos cuando
ellos han hecho algo malo
Es una equivocación muy grave si los padres se ponen
del lado de sus hijos cuando ellos se han portado mal o h an
hecho algo malo. Los niños creerán que es falso que
“cuando uno hace algo bien recibe una recompensa” y que
es correcto pensar que “cuando uno se porta mal recibirá
algo bueno”. Cuando estos niños crezcan harán cosas malas
continuamente. Su mal compo rtamiento producirá un
dolor interminable a la sociedad.
Los padres deben reconocer las consecuencias de dar
apoyo equivocado a sus hijos. No les demuestre a los niños
amor a través de mimarlos. Si ellos se equivocan, los padres
deben de disciplinarlos. Es mejor que los niños sufran un
poco ahora en vez de dejarles sufrir a lo largo de sus vidas.
Por lo tanto, si los padres no toman el lado de sus
hijos cuando estos se han equivocado, los niños aprenderán
que el hacer buenas obras definitivamente t endrá sus
buenas recompensas. Si ellos se portan mal, ellos tendrán
que sufrir las inevitables consecuencias desagradables.

Se deben entender los parámetros del


desarrollo de costumbres adecuadas
Los padres deben entender que hay dos métodos para
desarrollar las costumbres en los niños y de esa forma poder
inculcar virtudes en ellos.

El primer método es desarrollar los rasgos de


la personalidad basándose en la herencia.

El traslado de los rasgos de la personalidad debe


ocurrir desde el principio, an tes de la llegada del bebé. Para
que se logre la concepción, el niño debe tener una
combinación del karma bueno y malo que es comparable
con el de las personas que serán sus padres.

De modo que si los padres son saludables, buenas


personas y de buen corazón, hay una mayor probabilidad de
que en el vientre de la madre se conciba un buen niño. La
enseñanza del bebé debería comenzar antes del nacimiento,
y exige que los padres se mantengan sanos en cuerpo,
mente y en la manera de hablar. Deben eliminar t odos los
comportamientos malos y observar con diligencia los Cinco
Preceptos para prepararse para la concepción del niño.

Los nuevos padres deben comenzar a prepararse


mucho antes de llegar al matrimonio. Tan pronto como se
den cuenta de que la esposa está embarazada, deberían
intentar atender aún más a las necesidades del feto. Deben
ser más atentos con sus acciones ya sea al caminar, mover,
comer (especialmente lo picante), beber alcohol de todo
tipo, tomar medicamentos y hasta estar de mal humor. L os
padres tienen que asegurarse de que estas cosas no les
vayan a afectar ya que suelen tener una influencia sobre el
comportamiento del bebé.

El segundo método es desarrollar los rasgos de


la personalidad, los cuales son influidos por el
medioambiente o la disciplina.

Usted debería comenzar a enseñarle a su bebé desde el


momento en que él abre sus ojos al mundo por primera vez.
No piense que el bebé es demasiado joven para aprender.
Por ejemplo la hora de amamantar es una forma de
enseñarle al bebé sobre lo que es ser puntual. Cambiarle al
bebé el pañal inmediatamente cuando se moje puede crear
la costumbre del buen aseo personal. Por último, hablarle
al bebé con palabras dulces le animará a ser cortés.
No permita que sus niños continúen
cometiendo equivocaciones de modo que
éstas se conviertan en malas costumbres .
Un recién nacido es tan puro como una manta blanca.
Por eso, el bebé necesita algún modelo para formar sus
pensamientos, habla y acciones. Lo que llegue al bebé
primero, será lo que él tomará como su modelo. Por lo
tanto, si el bebé recibe influencias positivas, él tendrá la
oportunidad de hacer el bien. Con este conocimiento de lo
que es el bien se puede superar cualquier mala conducta
que pudiera ocurrir en los años futuros, permitiéndole
poder cuidarse a sí mismo.

Las primeras equivocaciones del bebé, las cuales son


obvias, se detectan fácilmente por los padres, incitándoles
inmediatamente a corregir este comportamiento. Sin
embargo, la ignorancia o la negligencia de los padres
pueden permitir que el bebé se acostumbre al
comportamiento, que más tarde podría convertirse en una
mala costumbre. El comportamiento se repite ya que
permanece desapercibido por los adultos y al final el buen
comportamiento puede verse afectado.

Ame a sus hijos de la manera correcta


La manera en que nosotros damos nuestro amor a
nuestros hijos no es nada más que impartir virtudes en ellos
para que de esa forma ellos crezcan como personas
orgullosas de sí mismas en este mundo.

Los elementos de la conducta moral que merecen


continuo énfasis son los siguientes:

1. La sabiduría –Enseñe a los niños a reconocer las


causas y los efectos de sus acciones. Enséñeles la
habilidad de analizar las cosas y de controlar su
carácter. Si los padres tienen éxito en esta tarea, los
niños cultivarán la sabiduría y la conciencia. Ellos no
se equivocarán entre el bien y el mal.
2. La disciplina –Siempre se les debe enseñar a los
niños a ser puntuales, limpios, honestos y a mantener
la pureza en su cuerpo, el hab la y la mente.
3. La bondad –Esto se puede lograr al enseñarles a los
niños a querer a los animales y a los árboles, a ser
corteses y amables y a saber perdonar.

Cuando se inculca estas virtudes a los niños desde una


edad temprana, ellos podrán absorber otras buenas virtudes
que sus padres y maestros les ofrecen.

Una vez que los padres se den cuenta de esto, si ellos


desean tener hijos excepcionales, primero deben educarse a
sí mismos antes de tener hijos. Deben adherirse
estrictamente a las siguient es tres virtudes: la sabiduría, la
disciplina y la bondad. Ya que de esta forma los padres
tendrán la oportunidad de concebir un hijo maravilloso.
Ellos servirán como buenos modelos de conducta para su
hijo y podrán evitar daños a sus hijos con el tipo d e amor
que les ofrecen.
Capítulo 9

Las cuatro funciones importantes que los


padres deben desempeñar para criar
buenos hijos

Todos los padres desean un futuro brillante para sus


hijos. Quieren criar hijos que se porten bien, que sean
respetuosos y que tengan valores morales, ya que su
conducta les ayudará a avanzar en la sociedad. Sin
embargo, para sentar las bases de su éxito, los padres deben
saber cuál es su papel en ese desarrollo. Al convertirse en
un buen modelo de conducta para sus hijos, los padres
deben entender la personalidad de sus hijos y estar
conscientes de cómo cambian sus actitudes y perspectivas
conforme cambian su edad y su entorno.
Cuando los hijos son menores, los padres representan
todo para ellos. Al crecer, los amigos influyen en su forma
de pensar y actuar. Durante la adolescencia, los padres se
vuelven menos importantes para ellos. Al llegar a edad
adulta, los hijos son independientes y tienen que depender
de su propia inteligencia y razonamiento. Es necesario que
los padres se ajusten a la perspectiva de sus hijos a lo largo
de su vida.

Además de ser buenos padres y desempeñar los


deberes propios de los padres, deben realizar las siguientes
funciones:

1. El papel de un maestro

Los padres deben enseñar a sus hijos a distinguir entre


lo bueno y lo malo, lo que deben y no deben hacer. Si su
hijo es demasiado joven para aprender sobre la causa y el
efecto, los padres deberán ser buenos modelos de conducta
para ellos. Esta tarea debe hacerse de forma delicada y con
un tono cariñoso. No les enseñe de mal genio. Se debe
recurrir al castigo sólo cuando sea necesario. Se debe
alentar al aseo personal cuando los niños todavía son muy
jóvenes, de manera que participen en ciertos quehaceres
como lavar la ropa y limpiar. Se les debe enseñar, desde
pequeños, cómo bañarse y comer de manera limpia. No
desatiendan estas lecciones ni las consideren
insignificantes.

Dado que los padres son los primeros maestros de sus


hijos, tienen que inculcarles lo que está bien, para crear las
bases del buen carácter en sus hijos. A medida que los
niños crezcan, esta base les ayudará a integrar el buen
comportamiento en sus hábitos diarios. Esto
automáticamente les desviará de conductas indebidas.

2. El papel de un ser angelical


Los padres necesitan tener una base sólida de
Dhamma para asumir este papel. Deben entrenar a sus
hijos a amar el mérito y tener miedo al pecado. Esto se
puede lograr al leerles el Jataka (las historias de las vidas
pasadas de Buda), asegurar que hagan sus cantos an tes de
acostarse y enseñarles cómo practicar dāna (generosidad)
de varias formas como dando limosnas a los monjes cada
mañana; pero sobre todo, se tienen que abstener de realizar
actos malos, basándose en el buen ejemplo de sus padres.

3. El papel de un brahmán

Los padres deben proveer bondad a su s hijos al


tratarlos con amor y cariño. Si los niños cometen errores,
los padres deben enseñarles sobre el bien, el mal y el
perdón. Cuando hagan actos buenos los padres deben
alabarlos y aplaudirlos. Los padres tienen que darles
educación y cuidarlos cuando estén enfermos. Cuando ya
son grandes y están listos para salir de casa y empezar su
propia vida, los padres deben aceptar su independencia
pero a la vez deben seguir aconsejándolos y dándoles
ánimo.

Sobre todo, los padres deben ser imparciales y no


apoyarlos si han hecho algo mal. Si los niños terminan
siendo infractores de la ley, hay que castigarlos, aún si esto
implica que terminen presos. Los padres tienen que aceptar
el castigo. No muestre su amor por sus hijos indebidamente
mintiendo por ellos. Los padres pueden hacer todo lo
posible para ayudarlos, pero no deben violar las leyes de un
país.

4. El papel de un arahat 1

Los padres deben practicar el más alto nivel de


moralidad posible para que sean respetados por la sociedad,
1
Ser completamente bondadoso y iluminado
como si fueran los arahats del hogar. Tienen que dar
buenos consejos a la familia, deben ser respetados por sus
hijos y nietos. Tienen que apoyar el cultivo de méritos y la
búsqueda de las Perfecciones, mantener la dignidad y
preservar el nombre de la familia. Por en de, todos los niños
en la familia los respetarán y escucharán. Los hijos tendrán
miedo de cometer actos malos tanto en frente de sus padres
como tras sus espaldas.

Una vez que los padres practiquen estos cuatro roles a


la perfección la vida familiar será dichosa. Habrá paz de
cuerpo y mente y esta paz podrá extenderse desde la familia
equilibrada hasta la sociedad y de ahí al país en general.
Capítulo 10

Cómo educar a nuestros hijos


para que sean buenas personas

En una sociedad saturada por los me dios de


comunicación, muchos padres temen que sus hijos
sucumban ante las malas influencias. ¿Cómo podemos
protegerlos de dichas malas influencias e inculcarles
conciencia y moralidad?

En realidad, la respuesta a esta pregunta puede ser


analizada desde muchos puntos de vista, pero nuestros
antepasados confiaron en estos cuatro sencillos factores
para educar a niños buenos.
1. Ser un buen modelo de conducta a seguir por parte
de los niños.
2. Encontrar buenos libros para que lean los niños.
3. Encontrar un buen maestro para que enseñe a los
niños.
4. Encontrar buenos amigos con los cuales los niños se
puedan relacionar.

Ser un buen modelo de conducta a seguir por parte


de los niños

El primer factor mencionado más arriba es el más


difícil de lograr, porque m uchos padres no se dan cuenta de
lo influyentes que son para sus niños. Pero antes de que
podamos comenzar a ser buenos modelos de conducta a
seguir, tenemos que hacer un balance de nuestras buenas
cualidades, para lo que Buda nos dio los Cinco Preceptos
como instrumento para medir la valía de un ser humano.
Sin embargo, en la sociedad actual muchas personas no
pueden cumplir con los Cinco Preceptos, entonces, ¿cómo
podemos ser buenos modelos de conducta a seguir para
nuestros niños?

Si los padres llegan a la conclusión de que sus niños no


son todo lo bueno que deberían ser, entonces deberían
reflexionar sobre el origen de su mal comportamiento,
porque los niños son como una cuenta en blanco y la
mayoría de ellos no sabe lo que es correcto. Cuando hablan
en forma descortés, es porque lo recuerdan de sus padres,
por lo que si los padres quieren educar a sus niños para que
sean buenas personas, deben crear una buena base moral
enseñándoles y cumpliendo los Cinco Preceptos,
convirtiéndose en buenos modelos de conducta a seguir.

Encontrar buenos libros para que los niños lean


Nuestros antepasados solían decir, “Si amas a tus
vacas, átalas; si amas a tus niños, dáles unas palmadas en el
trasero”. Pero hoy en día decimos, “Si amas tus vacas,
átalas, si amas a tus niños, dedícales tiempo”.

Como los niños leen libros, deberíamos ser muy


cuidadosos al seleccionarlos, ya sea que quieran leer
historietas o biología, deberíamos leer con ellos. Los juegos
de video son un problema hoy en día y las computadoras
desarrollan un carácter violento, frente a esto debemos
estar atentos y pasar tiempo con nuestros niños dándoles
amor y cariño.

Si pensamos que no tenemos suficiente tiempo,


entonces estamos viviendo sólo la mitad de nuestras vidas,
pues ellas no fueron hech as sólo para trabajar, debemos
tener tiempo para nosotros y para la familia. Debemos
reservar tiempo para ir a la librería con nuestros niños,
dejarlos seleccionar sus propios libros y observar su
comportamiento desde lejos. A veces tenemos que
proporcionarles información para ayudarlos en el proceso
de tomar decisiones y así, mientras crecen, las lecciones
entregadas los ayudarán a seleccionar sólo buenos libros.

Encontrar un buen maestro para que enseñe a los


niños

El tema de los maestros es sumament e importante,


porque son las influencias externas más poderosas que
promueven virtudes en los niños, por lo que a pesar de que
no estemos todo el día con los maestros en la escuela,
tenemos que poder formarnos un juicio sobre ellos. No es
necesario que nuestros niños asistan a una escuela de
renombre mundial; sólo necesitamos que estén en un
ambiente bueno y positivo. Además, ser el mejor alumno en
una clase no significa que el alumno se convertirá en la
persona más rica del mundo, pues el conocimiento de l os
libros debe ser aplicado.
Encontrar buenos amigos con los cuales los niños
se puedan relacionar

Algunos padres envían a sus niños al extranjero para


que completen su licenciatura, maestría o doctorado cuando
aún son muy jóvenes. Luego, cuando regre san a Tailandia,
ya no tienen fe en el budismo y en vez de ello, adquieren
ideas erróneas de los amigos con los que fueron a la escuela.
Así, cuando trabajan en un ambiente tailandés, hablan sin
respeto a las personas, lo que causa resentimiento. Ellos no
se dan cuenta de que el conocimiento de los libros de
estudio, por sí solo, no es suficiente para asegurar el éxito,
sino que uno debe aprender a respetar y a ser cortés con los
demás.

El Mangala Sutta (Treinta y Ocho Pasos para una


vida gloriosa), el cual nos enseña sobre el camino a la
felicidad en la vida) afirma claramente que usted no debería
relacionarse con necios, sino que usted sólo debería
vincularse con sabios. Es obvio que si nuestros niños se
relacionan con malas personas también pueden ser
influenciados a hacer cosas malas. Este comportamiento
equivocado, se hará más evidente cuando los niños ya no
vivan con nosotros, por lo que debemos poder reconocer las
señales y dar el consejo adecuado a tiempo. Las
reprimendas no deberían ser la primera y única reacción. La
crianza de los niños requiere que tengamos tácticas y
estrategias similares a las que se usan en los negocios,
considerando que estamos tratando de construir su
capacidad para elegir y relacionarse con buenas personas.

Para evitar que los niños hagan suyos malos


comportamientos, usted debe establecer un ambiente
basado en los cuatro factores mencionados anteriormente.
Al hacerlo, ellos llegarán a ser adultos que piensan, hablan y
actúan en forma virtuosa y que viven sus vidas con un
arraigado sentido de lo correcto e incorrecto.
Capítulo 11

La enseñanza de la moderación a
los niños para garantizar el futuro
de la familia

La futura seguridad económica de los niños puede ser


evaluada por su moderación, por lo que los padres
pueden cultivar un buen sentido del ahorro en sus niños
siendo mesurados.
Así, para que los niños desarrollen hábitos de ahorro,
los padres deben comenzar por lo siguiente, cuando ellos
todavía sean pequeños:

1. La enseñanza del valor del dinero a lo s


niños. Cuando los niños pidan dinero, los padres primero
deben preguntar qué harán con él y cuán necesario es. Si
carecen de una buena razón que justifique la solicitud, los
padres deberían negar el dinero y decirles la razón. Incluso
si los niños quedan descontentos, los padres no deben
flaquear. No les de dinero sólo para terminar con su propio
enojo o sus berrinches. No permita que los niños piensen
que es fácil ganar el dinero, pues deben aprender que éste
no cae del cielo y que cada dólar ha sido gan ado con
esfuerzo por sus padres. Sólo así los niños sabrán el valor
del dinero y lo usarán con prudencia.

2. Enseñe a los niños a no despilfarrar. Por


favor, no compre cosas lujosas o innecesarias para sus niños
y cuando deba comprar un artículo específi co para ellos, por
favor, compre la alternativa más barata que sea equivalente
a la más cara. Encuentre alguna forma para explicar a sus
niños que las cosas buenas no necesariamente son las que
cuestan más y enséñeles a saber el valor de sus pertenencias
y cómo usarlas de manera apropiada y mientras las tengan.
También les puede enseñar cómo reparar por sí mismos
artículos dañados para que puedan ser reutilizados.

3. Enseñe a los niños a hacer buen uso de su


tiempo libre. Enseñe a los niños a hacer las cosas por sí
mismos, lo cual más adelante desarrollará su sabiduría.
Especialmente con los juguetes, si usted deja que sus niños
fabriquen sus propios juguetes o que ensamblen sus partes,
entonces ellos aprenderán a ayudarse a sí mismos y estarán
orgullosos de su éxito, mientras desarrollan una mayor
agudeza mental. Además, los padres deberían enseñar a sus
niños a reducir sus gastos de mesada, con lo que los niños
podrían aprender a ahorrar su propio dinero y a ganar
dinero por sí mismos.

4. Enseñe a los niños a ahorrar dinero. Los


padres deberían conseguir una alcancía para que los niños
puedan ahorrar la mensualidad que les sobre y llevarlos al
banco para depositar en su cuenta el dinero recolectado.
También anímelos a depositar en el banco el dinero que se
les da en ocasiones especiales como los cumpleaños, año
nuevo, etcétera. Los padres deben enseñar a los niños a
ahorrar este dinero como parte de su fondo de educación.
No deje que los niños piensen que pueden conseguir dinero
fácilmente, de lo contrario no apreciarán el valor del dinero.

5. Elija para sus niños amigos que tengan


hábitos moderados. Los padres deberían encontrar una
forma de evitar que sus niños se relacionen con amigos que
derrochen dinero en artículos de lujo y que no sepan el va lor
de éste. Por el contrario, deberían familiarizarlos con niños
que ahorran dinero y ayudan a sus padres con los
quehaceres domésticos, pues ellos se influenciarán en
buena forma entre sí. El asunto más importante para los
padres es mantener alejados a s us niños de las malas
personas y de Apāyamukha (los Caminos a la Perdición),
que son los más grandes enemigos del ahorro.

6. Enseñe a los niños a cumplir los Ocho


Preceptos en los Días Sagrados Budistas 2 o en sus
días libres. Cuando los niños estén suficientemente
maduros, los padres deb erían llevarlos al templo y
enseñarles cómo cumplir los Ocho Preceptos. El estilo de
vida sencillo y el aceptar los preceptos les enseñará que
muchas cosas que parecen necesarias, en realidad no lo son,
como por ejemplo ir a ver una película o un espectácu lo,
usar lápiz labial y maquillaje, vestirse a la moda, etcétera.
Después de observar los Ocho Preceptos por un tiempo,
ellos mismos se darán cuenta de todas aquellas cosas son
2
Cuatro días al mes: día de luna llena, luna oscura, luna mediana creciente y decreciente
innecesarias. Pero para hacer realidad en los niños el
cumplimiento de los pre ceptos, los padres deben dar un
buen ejemplo practicando los preceptos junto a ellos. El
cumplimiento de estos ayudará a los niños a desarrollar la
moderación y los guiará al uso prudente de los Cuatro
Requisitos en la forma más efectiva.

Si cada familia sigue estas pautas, estará garantizando


su futura estabilidad económica. Los niños de estas familias
podrán administrar en forma prudente su herencia, si la
tienen, incluso sin herencia, podrán garantizar su
estabilidad económica porque se han tapado los agujeros en
sus bolsillos al no participar en ninguno de los Caminos a la
Perdición (Apāyamukha).
Capítulo 12

Querido Padre, por favor, no


permitas que me convierta en un
adicto a la televisión

Una de las preocupaciones que enfrentan los padres


hoy en día es no tener suficiente tiempo para pasar con sus
niños debido a que casi todo su tiempo disponible se usa
para ganarse la vida para mantener la familia. A veces, la
solución para esta falta de tiempo es permitir a sus niños
pasar más tiempo viendo t elevisión; ellos piensan que “no
hay nada malo con dejar que la televisión cuide a
los niños”.
Esta solución errónea de un problema tiene también
malas consecuencias, porque deja a los padres angustiados
por los cambios que se advierten en el comportami ento de
sus niños, los que están poniéndose cada vez más agresivos,
ofensivos, maliciosos y usan cada vez más blasfemias. Estos
cambios negativos en el comportamiento de sus niños dejan
a los padres sin tener idea sobre la causa de estos cambios.

A menudo es muy tarde cuando los padres por fin se


dan cuenta de que este comportamiento proviene de haber
dejado a sus niños ver programas de televisión inapropiados
cuando aún no eran suficientemente maduros para
discernir entre lo correcto y lo incorrecto, en tre lo bueno y
lo malo, entre lo apropiado y lo inapropiado; pues los niños
absorben el mal comportamiento que ven y lo adoptan
como propio. Muchos padres terminan sintiéndose
miserables cuando se dan cuenta que todo su esfuerzo en el
trabajo ha sido invalidado y además causó que sus hijos
pierdan la bondad, lo que pretendían era proveer a sus
niños con todo lo necesario.

Por lo tanto, para enfrentar esta situación y evitar que


suceda en sus propias familias, los padres deben considerar
lo siguiente:

1] Los padres deben tener siempre en mente que si no


pasan suficiente tiempo con sus niños, ellos pueden
desarrollar una pobre capacidad de juicio, ya que la mayoría
de los programas que ven en televisión gira alrededor del
tema del sexo. Los niños expues tos a dichos programas
pueden volverse más sexuales debido a que piensan que las
cosas que ven en televisión son como en la realidad.

2] Los padres deberían buscar programas de televisión


que sean educativos y asignar la cantidad apropiada de
tiempo para ver dichos programas. Será mejor aún si los
padres establecen reglas. Hay tres principios que pueden
minimizar las oportunidades de que los niños absorban
influencias poco sanas de la televisión.

Principio 1: El tiempo viendo televisión no


debe interferir con los deberes de la escuela ni con
los domésticos. Los padres no deben dejar que los niños
vean televisión cuando ellos quieran, sino que deben tener
establecido un tiempo para la tarea, para el repaso de
lecciones, para la lectura y para la ayuda c on las labores
domésticas. Los padres deben establecer horarios
apropiados y nunca permitir que los niños vean televisión
tarde en la noche, lo que resultará en que ellos no descansen
lo suficiente. Esta falta de descanso apropiado puede
resultar en el desarrollo de malos hábitos como levantarse
tarde, engaños y mentiras. Los niños que no duermen lo
suficiente, que no cumplen sus deberes, no quieren ir a la
escuela y mentirán a sus padres sobre no sentirse bien,
tener dolor de cabeza o de estómago en alguno s casos los
padres podrían creerse esas mentiras. Estos niños tratarán
de inventar más excusas para evitar ir a la escuela.

Principio 2: Los programas de televisión no


deben carecer de moralidad. Los programas que usted
permita que sus niños vean deben contener temas con ideas
y prácticas morales. No se deberían permitir los programas
de miedo, de terror, de carácter sexual, o aquellos que
tratan sobre revancha y asesinato.

Principio 3: Los programas de televisión deben


fomentar la moralidad. Los padres deberían ser quienes
decidan qué programas de televisión pueden ver sus niños.
Dichos programas deberían fomentar las virtudes y el
desarrollo intelectual, deben ser programas sobre
compartir, la bondad y la lealtad. Ellos pueden ver
programas sobre ciencia y tecnología o arte y cultura, los
que permiten a los niños aprender más sobre su país, su
cultura y sus orígenes. Este conocimiento servirá como la
base para la visión y prudencia en el futuro.

Para que los niños escuchen a sus padres es


importante que los padres sean buenos ejemplos, pues así
los niños obedecerán. Si los padres son adictos a la
televisión será un gran desafío evitar que sus niños también
se conviertan en adictos. Por lo tanto, entre las alternativas
de fomentar buenos hábitos en los niños y mirar sus
programas favoritos de televisión, los padres deberían elegir
como su prioridad lo mejor para los intereses de sus niños.
Capítulo 13

Niños adictos al Internet

Vivimos en la era de la información, por lo que l os


niños no sólo son adictos a la televisión, los videos y los
celulares, sino también al Internet. Debemos aceptar el
hecho de que este tipo de medios tiene tanto ventajas como
desventajas, dependiendo de cómo sea usado. Si no
sabemos cómo controlar esto, tanto niños como adultos,
podemos convertirnos en esclavos de estas cosas.
En cuanto a los adolescentes, mientras más prohíban
esto los padres, más interés despierta. Por lo tanto, los
padres deberían permitir el uso de estos medios, pero
indicando el momento y la cantidad de tiempo oportunos.
Los padres deberían establecer un horario de cuándo es el
momento para usar Internet, estudiar, cantar y rendir
homenaje al venerable Buda.

Los padres deben enseñar a los niños cuándo


usar Internet o ver televisión. La clave es no
permitir que los niños se duerman tarde. Si los
niños se duermen tarde no querrán levantarse en la
mañana, haciendo que los padres tengan que reprenderlos.
Esto puede resultar en un intercambio de palabras duras
temprano en la mañana, lo que puede acostumbrar a los
niños a discutir con sus padres y llevarlos ser engañosos y
mentirosos.

Enseñar a los niños cómo administrar su tiempo los


animará a destacarse en los estudios. Además, cuando
crezcan podrán administrar mejor su tiempo, serán más
racionales y no se portarán mal según sus estados de ánimo.

Enseñar a los niños a administrar su tiempo ha


ayudado a muchas familias a rectificar los problemas de
niños adictos a la televisión y al Internet.

Hubo un caso relacionado con la familia de una


querida y respetada profesora de inglés cuyo marido tuvo
que continuar sus estudios en el extranjero. Debido a que
ella y sus niños se quedaron en la casa, ella le pidió a su
hermano que viniera a quedarse y le ayudara a cuidar a sus
tres niños. Todos los niños parecían ser brillantes, pero no
les iba bien en la escuela y su hermano no podía entender la
razón, por lo que intentó determinar la causa. El descubrió
que todo era debido a que los niños se quedaban despiertos
hasta tarde viendo televisión y se l o dijo a su hermana.
Una vez determinada la causa, la profesora estableció
la regla de que todos los televisores de su casa deberían
estar apagados al las nueve de la noche, cuando las noticias
empezaran. Cuando se cumplió dicha regla, todos los niños
estaban en cama a las nueve, mejoró su salud y se
despertaron temprano en la mañana, entre las cuatro y
media y las cinco de la mañana. A esa hora se levantaron y
estudiaron hasta que era la hora de darse una ducha y
prepararse para ir a la escuela.

El semestre siguiente todos los hijos de la profesora


sacaron mejores calificaciones en la escuela. El mayor, que
antes ocupaba el puesto catorce en la clase, avanzó hasta el
cuarto. El segundo, que estaba ubicado en el puesto siete,
saltó al segundo. Y el h ijo menor, que era muy pequeño, se
mantuvo en primer lugar. El semestre siguiente, el segundo
y el mayor lograron el primer lugar en sus clases.

Cuando se graduaron de la escuela, los tres estaban


ubicados en el primer lugar en sus respectivas clases.

Establecer un horario para estudiar, dormir y


levantarse llevará a los niños a lograr mejores calificaciones
en la escuela y a tomar mejores decisiones en la vida. Es
cierto que muchos niños pueden saber lo que es correcto e
incorrecto, pero puede que no siempre sean capaces de
abstenerse de cometer acciones no adecuadas. Cuando
crezcan estos niños pueden causar muchos de los problemas
que vemos en la sociedad. Cuando eran jóvenes, nunca se
les enseñó a renunciar a las cosas que les gustaban para
hacer lo correcto, como dejar de ver televisión cuando era
hora de ir a la cama.

Las familias que tienen reglas sobre cómo deberían


pasar su tiempo los niños, podrán enseñarles a temprana
edad a tomar decisiones correctas y a no sucumbir ante los
deseos. Esta formación puede ser una base que les permita
tomar decisiones basadas en un sólido y buen
razonamiento, con principios sólidos, información correcta
y revisión sistemática y así serán inteligentes y virtuosos en
cualquier tipo de trabajo que desempeñen en e l futuro.
Capítulo 14

Una hija que se viste en forma


muy atrevida

Una vez vino al templo un representante del gobierno


para ver a un venerable monje y pedirle consejo sobre la
forma en que se visten las adolescentes hoy en día.

El representante sentía que hoy en día las adolescentes


se visten en una forma que revela demasiado de su cuerpo y
que esta tendencia coincide con un aumento en los
crímenes sexuales, situación que la policía no sabe cómo
encarar actualmente. El venerable monje dio su res puesta y
aquellos que estaban escuchando estuvieron de acuerdo en
que su solución era práctica y aplicable para toda familia
que tenga una hija joven. Las siguientes fueron sus
palabras:

“No estoy de acuerdo con que la ropa demasiado


provocativa de estas niñas sea totalmente culpa de la
industria de la moda. En cambio, echo la culpa a los padres
que descuidan de sus niños y a los maestros que no enseñan
apropiadamente a sus alumnos.

“Si miramos el problema claramente descubriremos


que sus orígenes datan de antes que estas niñas se
convirtieran en adolescentes y comenzaran a vestirse en
forma provocativa. Podemos seguir el rastro del problema
hasta cuando estas niñas todavía eran pequeñas, cuando
aún estaban en el jardín de infantes o en la escuela
primaria.

“Los padres y los maestros malinterpretaron que


motivar la creatividad e inculcar confianza requería que las
niñas bailaran y actuaran en el escenario. Así, con la
práctica de la coreografía de la danza las introdujeron a
desde pequeñas a la sensualid ad. Además, aparte de bailar,
antes de enviarlas al escenario, los maestros las maquillaron
y las vistieron con faldas cortas o ropa que era demasiado
reveladora. A continuación, los padres y los maestros
comentaron lo adorables que estaban estas niñas cua ndo las
vieron actuar. Aunque para ellos ésta fue una producción
exitosa, desafortunadamente la situación que crearon no
desapareció cuando terminó la presentación. Después de
que todos han animado a las niñas a vestir ropas
reveladoras, a presentar danzas sensuales y las han elogiado
por cómo se ven, no es de sorprenderse que las niñas no
escuchen cuando se les dice que deberían vestir en forma
más recatada. Están tan acostumbradas a usar ropas
reveladoras que ya no se sienten avergonzadas.
“Cuando se expone a las niñas a tan temprana edad a
actividades que promueven la sensualidad, ¿a quiénes
culpamos? Tenemos que culpar a los padres y a los
maestros que animaron este comportamiento. Por lo tanto,
si queremos corregir este problema, debemos enseñarles
buen comportamiento y cómo vestirse en forma apropiada
mientras aún son jóvenes.

“Buda dijo, ‘No vista en forma inapropiada’.

“Vestir en forma inapropiada significa usar la falda


sobre las pantorrillas y mostrar los hombros.

“En el pasado, desde cuan do eran niñas pequeñas, los


padres vestían a sus hijas con un sarong que llegaba hasta
más abajo de sus pantorrillas. Así sería natural que cuando
adultas estas mujeres se vistiesen adecuadamente. Sin
embargo, si las niñas son animadas a usar faldas corta s a
temprana edad, es poco probable que ellas se quieran cubrir
con una falda larga cuando sean mayores.
“Permitir que los niños pequeños se vistan en forma
inapropiada es lo que causa que los niños se hayan
convertido en objetos sexuales, además ha caus ado la
prostitución infantil, ambas cosas llevan a los Caminos de la
Perdición (Apāyamukha).

“Si queremos rectificar esta situación, primero


debemos entender los propósitos de vestir ropa.

1) Protegerse del calor y el frío.

2) Protegerse de elementos como la luz solar, viento y


lluvia, así como de insectos y animales pequeños.

3) Cubrir las partes del cuerpo que no deberían ser


expuestas.
“Si los padres enseñan a sus niños cuando son
pequeños el propósito real del uso de ropa, su mente no
estará fija en lo sensual. Además, debemos protegerlos más
aún enseñándoles a cantar y a m editar antes de ir a la cama.
Enséñeles a hacer una reverencia a los pies de sus padres
antes de ir a la cama. Si practicamos esto regularmente,
podremos rectificar el problema y criar a niños maravillosos
y sanos”.

La enseñanza de este venerable monje no s hace darnos


cuenta que el problema de que los niños se vistan en forma
que atrae la atención sexual sólo desaparecerá cuando los
padres les enseñen recato a los niños desde temprana edad.
Además, puede reducir y hasta eliminar los crímenes
sexuales contra los niños.
Parte III

Armonía en la familia
Capítulo 15

Crear armonía dentro de la


familia

Los niños de familias disfuncionales suelen mostrar


ciertas características como la desobediencia y otras
actitudes negativas. Esto no es agradab le. ¿Por qué se
derrumban las familias de estos niños y cada miembro de la
familia sigue su camino? Si no conocemos las causas reales,
esto podría ocurrirle también a nuestra propia familia.
Los niños actúan así cuando no se los educa
adecuadamente. Algun os vienen de buenas familias, pero se
escapan de casa cuando tienen problemas con sus
hermanos. Otros, con tan sólo doce o trece años podrían
intentan robar las pertenencias de sus hermanos.

La falta de unidad familiar es la verdadera causa


de estos problemas. Todo comienza cuando cada miembro
de la familia tiene un horario diferente lo que ocasiona una
falta de interacción entre ellos. A medida que se vuelven
más distantes, la familia podría desmoronarse. Sin
embargo, la causa principal del rápido deterio ro de una
familia es el no cenar juntos.

En una familia numerosa, los miembros que no cenan


juntos tienen más discusiones. Si un día la madre prepara
una cena deliciosa que le gusta a todo el mundo, todos
querrán comer más de lo normal. Se sientan a la me sa y
cenan juntos, el único problema que pueden tener es que no
alcance la comida para todos.

Sin embargo, si cada uno come a una hora distinta, es


probable que surjan problemas. Puede que para los últimos
en comer no haya la suficiente cantidad de comida . El hijo,
para quien no alcanzó la comida, podría sentirse ofendido y
rechazado, peor aún si ayudó en las labores de la casa.

A menudo, cuando se acerca la hora de la cena, los


niños que no ayudaron suelen andar por la cocina
halagando a su madre, dicié ndole que cocina muy rico.
Antes de sentarse a la mesa, estos mismos hijos empiezan a
probar y a tomar la mejor parte antes que el resto. Ellos
suelen ser los que más comen. Las madres adoran a estos
gorditos porque ellos saben convencerla con halagos.

Sin embargo, los niños diligentes que suelen trabajar


hasta después de la hora de cenar suelen ser los últimos en
comer. Son los que están más cansados, pero sólo consiguen
comer lo que sobra. A veces hasta terminan lavando los
platos. Todo esto los hiere. Cuanto más sucedan estas
situaciones, peor se sienten ellos. Las discusiones con sus
hermanos ocasionan peleas mayores. Si resulta que un
hermano rompe uno de los platos favoritos de la madre,
todos se enfadarán y esto ocasionará más peleas.

Los padres que no comprendan las verdaderas causas


de estos problemas se limitarán a calmar la situación, pero
esto no será una solución. Puede que a pesar de los intentos
de los padres el disgusto persista. Si se repiten estos
incidentes con regularidad, los padres po drían
malinterpretarlos y culpar al hijo que no comprenden. Éste
podría ponerse celoso de sus hermanos y podría decidir
escapar de casa en la primera oportunidad.

El no cenar juntos como una familia puede ser la causa


que lleve a la ruptura de la misma. L os padres pueden no
estar conscientes de este resentimiento y del conflicto. Este
problema está latente en la familia actual en la que todos
están ocupados con sus actividades y no tienen tiempo para
el resto. Nadie sabe qué podría llegar a molestar al otr o. Por
ello, una familia que no come unida es una familia que
está a punto de deshacerse.

La comida en familia permite a los miembros de la


misma manifestar sus preocupaciones y dar consejo a los
demás, porque después de comer las personas suelen estar
de mejor humor. Los padres pueden aprovechar esta
oportunidad para dar ejemplo de buenas costumbres y
modales a sus hijos.

Nuestros ancestros le dieron mucha importancia al


detalle de hacer al menos una comida al día en familia. El
desayuno es difícil por que todos van de prisa para
prepararse para el trabajo o el colegio. El almuerzo es poco
práctico porque todos están lejos de casa.
La cena es una comida importante que debería
reservarse para la familia. El perdérsela sería desacertado
porque después de la cena cada uno se dedica a lo suyo.
Algunos harán los deberes mientras que otros verán la
televisión. Si no se reserva el momento de la cena para
hablar o dejar claros ciertos temas, puede que los asuntos
no resueltos perduren y se conviertan en peleas .

Algunos hogares solucionan este problema


proporcionándole a cada miembro de la familia su propia
televisión. Por las noches, cada uno come por separado
viendo su televisión. Nadie necesitará hablar con los demás
porque todos estarán ocupados. En este entorno, no habrá
calor familiar.

Otra situación que conduce a la falta de unión en la


familia es el proceso de preparar la comida. Éste es un tema
que se discute en los matrimonios actuales. Si lo único que
hacen es pedir comida a domicilio, comer con los ojos
pegados al televisor y pensar que los personajes que
aparecen son mucho más atractivos que sus parejas, con
seguridad este matrimonio acabará.

Los matrimonios deberían considerar también la


posibilidad de ir a visitar a los suegros. ¿Solemos
acompañar a nuestra pareja o dejamos que vayan solos a
visitar a sus padres? Si van solos, prepárese para tener
problemas en su matrimonio.

Participar en actividades familiares ayuda a construir


un vínculo fuerte. Muchas familias desunidas
tomaron este tema muy a la ligera.

En conclusión, crear armonía dentro de la familia es


sencillo. Se comienza con una actividad en la que todos los
miembros de la familia puedan participar. La mejor y más
sencilla actividad es la cena. Durante la cena los miembros
de la familia deberían reunirse para hablar de diversos
temas, teniendo el Dhamma como guía. Hablen entre
ustedes razonadamente, aunque no compartan las mismas
opiniones. Hacer cosas juntos será beneficioso, al punto de
proporcionar calor y unidad a toda la fa milia.
Capítulo 16

¿Qué deben hacer los padres


cuando sus hijos no se llevan
bien?

A continuación se relata una historia real para los


padres que todavía no han empezado el proceso de
construir la armonía familiar.
Una vez había una familia con t res hijas. La mayor se
sentía muy deprimida porque hacía más de dos años que
sus dos hermanas no se hablaban. Habían peleado tanto
que llegaron al punto en que ya no querían ser hermanas.
La hermana mayor se sentía muy mal por tener que ver esta
fricción en su familia todos los días.

A veces, las dos hermanas se ignoraban, como si la otra


no existiera. Otras veces, parecía que iban a continuar
siendo enemigos por el resto de su vida. A menudo, la
hermana mayor se preguntaba, “ ¿Será demasiado tarde
para que ellas se reconcilien?” Sus padres ya se habían dado
por vencidos.

Al final, tomó la decisión de ir al templo para pedirle


consejo a un venerable monje. Le contó que sus dos
hermanas todavía estaban de edad escolar, pero que luego
cuando se graduaran y empiecen a ser más independientes,
habría poca posibilidad de una reconciliación. Se sentía tan
ansiosa y culpable por haber tenido que ver sus conflictos
diarios.

El venerable monje la escuchó explicar su proble ma


con simpatía, y respondió, “S us padres no deberían haber
dejado que el conflicto se aumentara hasta este nivel. Si esto
no se soluciona pronto, cuando terminen los estudios,
consigan empleo y empiecen su vida profesional,
ciertamente no harán caso a nadie ”.

“Me gustaría compartir con usted un ejemplo personal.


Tengo dos hermanas mayores. Cuando yo era joven, a veces
discutía con mis hermanas. Pero inmediatamente mi padre
tomaba control sobre la situación. Y dejábamos de discutir
pronto. Mi papá evitaba los conflictos entre sus hijos
de las siguientes maneras:

Técnica no. 1: Ejercer la autoridad


Cuando mi papá se enteraba de que habíamos peleado,
no nos decía mucho. Nos hacía acercarnos. Me señalaba a
mí, el menor, y me decía que cogiera una rama para que me
diera una paliza.

Cuando le daba la rama, me hacía una sola pregunta:

“¿Peleaste con tu hermana?”


“Sí papá,” respondía.
“Entonces ponte allí con los brazos cruzados ”.

Primero, le daba la rama a mi hermana para que me


pegara una vez por no respetar el hecho de que fuera mayor,
sin importar quién tenía la razón.

Segundo, me hacía preguntas acerca de lo que había


sucedido. Si yo tenía la culpa, m i padre me mandaba a
buscar otra rama. Esta vez, me daba una paliza por lo mal
que me había portado. Yo soñaba con que le dieran una
paliza a mi hermana, pero si ella tenía la culpa mi padre le
mandaba a ella a buscar otra rama. Y él le daba una paliza a
ella por haber maltratado a su hermano menor.

Sin importar quién tenía la culpa, yo recibía la primera


paliza por no haber respetado su edad. Por lo tanto, ¿por
qué querría yo entrar en peleas con mis hermanas? Esta
lección práctica nos unió en el amor mutuo.

Técnica no. 2: La responsabilidad de los


quehaceres

Debido a que nuestra familia tenía un a granja, mi papá


nos mandaba a trabajar los fines de semana. Nos hacía
arrancar las malas hierbas, limpiar los lotes, cavar la tierra o
preparar el lote para la siembra. Teníamos que terminar
antes de la cena, de lo contrario no podríamos comer. Por lo
tanto, cooperábamos y trabajábamos dur o para poder
completar las tareas juntos.
Debido a mi edad y a mi falta de madurez, a veces yo
me iba y no ayudaba a los demás.

¿Por qué?

En la mañana, tiraba piedras a los pájaros e iba a


pescar con mis amigos. Por la tarde, me entraba el pánico al
darme cuenta de que no había cumplido con los quehaceres.
¡Ay de mí! Si mis hermanas no alcanzaran a terminar, ¡no
cenaríamos! Entonces me apuraba a ayudarlas. Mientras
tanto, hacía todo lo posible para complacer a mis hermanas
para asegurarme de que no le digan a mi papá mis
travesuras. Aprendí a ser amable, educado y decir cosas
dulces, mientras trabajaba. Si no hubiera aprendido eso
habría enfrentado las siguientes consecuencias:

1) No se nos daba de cenar esa noche. Adicionalmente,


teníamos que completar las tareas por la noche bajo la luz
de una lámpara.

2) Si mis hermanas le contaban a mi papá sobre mis


travesuras, me castigaba sólo a mí. Entonces, me aseguraba
de convencer cortes y cálidamente a mis hermanas para que
ellas estuvieran contentas.

Simplemente, necesitábamos aceptar juntos las


responsabilidades. Si peleábamos, no terminaríamos, y
todos nos meteríamos en problemas. Por lo tanto
aprendimos a negociar y automáticamente llegamos a
tratarnos bien los unos a los otros.

El problema con sus hermanas es que no hay tareas


domésticas que hacer; viven con demasiada comodidad.
Para aprender una lección, tendrán que sufrir hambre de
vez en cuando; tendrán que luchar y después tendrán que
ayudarse y confiar la una de la otra. Demasiada comodidad
en la familia ha dado lugar a problemas entre los hijos.
En esta situación, el daño ya se ha hecho. Recomiendo
dejar el asunto a sus papas. Como la hermana mayor,
debería darles estos consejos a sus padres y ayudarles
cuando sea necesario:

1. Mantengan un presupuesto familiar estricto.

No dejen que haya demasiado dinero en la casa. No


den a las hermanas mucho dinero, así que tendrán que
ayudarse la una a la otra.

2. Ordenen que los quehaceres domésticos se


hagan juntos.

Aunque estén enojadas y s e preocuparán y tendrán que


comunicarse para completar la tarea. Con la comunicación,
disminuirá la tensión y los sentimientos negativos entre sí.
Este método da buenos resultados.

3. Se requiere disciplinar a los niños pequeños.

Si tienen buenas ideas, no tienen que tener miedo de


que sus hijos se huyan de casa. Los niños pequeños no se
atreverán. Un palo para castigar es todavía necesario para
mantener la disciplina. NO OBSTANTE, los padres deben
saber cómo y cuándo usarlo. Los padres deben decir a lo s
niños cuando les castiguen la razón del castigo. ¡El palo no
es para castigarles tan fuerte que se mueran de dolor!

Recomiendo que al principio los padres sigan los dos


primeros principios: Sus padres deberían reducir el dinero
que les dan a sus herman as y mandarlas a ayudar con los
quehaceres. Las niñas no dejarán que otros se aprovechen
de ellas. La ira que tienen no durará mucho. Cuando no les
quede más dinero, tendrán que ayudar en las tareas
domésticas.
Si tienen una persona que ayude en la casa, esta
persona puede seguir haciendo algunos quehaceres. Pero las
niñas deben hacer lo que les corresponda; ellas deben ser
responsables de sus tareas. Esto les dará a las hermanas la
oportunidad de hablar sobre cómo terminar más rápido con
los quehaceres. Esta técnica debe usarse cuando los hijos
son aún pequeños. Si los padres siguen mimando a sus
hijos, ellos llegarán a ser personas no gratas.

Después de escuchar los consejos del monje, la cara de


la hermana mayor cambió y se le veía una sonrisa de
esperanza. Fue a su casa para darle a la familia los consejos
que la mantendría unida.

Los padres que lean este cuento deben inculcarles en


sus hijos el sentido de unidad enseñándoles la importancia
de respetar la autoridad. Cuando lleguen a ser adultos, se
amarán y se cuidarán. Si se deprimen o se encuentran en
situaciones difíciles, sus hermanos los ayudarán. Cuando los
hijos comparten buenas intenciones, los padres pueden
dejar de preocuparse.
Capítulo 17

Cómo solucionar las peleas entre


vecinos

Un buen entorno desarrolla buenos hábitos a los niños.


Sin embargo, si nuestros vecinos pelean todos los días y
hasta con palabras fuertes, ¿qué pueden hacer los padres
para remediar la situación? Las discusiones pueden tener
un impacto negativo sobre nuestro s niños. Si los niños
presencian estas peleas de vecinos podrían llegar a hablar
de forma maleducada, hacer comentarios ofensivos y
podrían ser rechazados por la sociedad.
Hay dos formas de enfrentar esta situación.

1. Mudarnos

Los padres deberían cambiarse de casa; de lo


contrario tendrán que soportar las peleas. Los padres
pueden dar el buen ejemplo a sus hijos al hablar de forma
educada con los vecinos. Si los padres recurren a acciones
drásticas, éstas pueden dar paso peleas o injurias
personales. Comportarse de esta manera sólo creará más
problemas.

2. Responder con amabilidad

Si los padres son más jóvenes que los vecinos, deberían


intentar a ser más amables. Los vecinos podrían estar más
concientes y empezarían a discutir con más calma.

No obstante, si los padres son mayores que los vecinos


y ya han establecido una vida profesional y los demás
vecinos los respetan, deben hacer un acercamiento para
entablar un diálogo con los vecinos. Antes de hablar con
ellos, los padres deben ser amables y tener una buena
imagen ante ellos.

¿Qué se debe hacer para ganar la amistad y el


respeto?

1. Una persona agradable es generosa y


desinteresada.

Cuando uno comparte su dinero o sus


posesiones con otros, los demás lo aman y lo
agradecen. Aún nosot ros, cuando recibimos algo,
sentimos que la gente nos valora.
Si tenemos la capacidad de ayudar a otros, debemos
ofrecer nuestra asistencia.

Aún cuando no sabemos qué ofrecer, podemos dar


apoyo y ánimo a través de lo que decimos. Aún cuando no
tenemos nada bueno que decir, por lo menos podemos
sonreír.

Si los padres se comportan de manera apropiada con


los vecinos, ganarán su respeto y amistad. Entonces puede
llegar el momento en que los padres puedan reclamar a los
vecinos sobre su comportamiento.

Buda enseñó las Cuatro Bases de la Solidaridad Social


(Sańgahavatthu). Esto es el principio de ayudar a la
gente o de desarrollar una sociedad unida. Este
principio de Dhamma consiste en:

1) La generosidad ( Dāna) – Quiere decir el


compartir los bienes materiales.

2) Forma de hablar agradable (Piyavācā) – Se


refiere decir siempre la verdad de forma amable.

3) El conducto útil (Atthacariyā) – Significa


ayudar a otros, por ejemplo ayudar en el trabajo cuando
posible.

4) Trato igual e imparcial (Samānattatā) –


Quiere decir tratar amablemente a todo el mund o siempre.

Si los padres logran practicar las Cuatro Bases de la


Solidaridad Social, llegarán a ser expertos muy respetados.
Cuando surgen conflictos, ellos podrán dar consejos. La
manera en que los enfrenten depende del problema en
cuestión. Podrán encontrar la solución en equipo.
2. Los que advierten a otros acerca de su
comportamiento deben seguir los Preceptos.

Sólo los que siguen los Cinco Preceptos pueden


acercarse a otros para hablarles de su comportamiento.
Cuando verdaderamente vivimos según los Preceptos,
actuamos de manera educada y entendemos la ética,
seremos capaces de controlar y enfrentar una situación. Si a
los padres carecen de virtudes, no deberían aconsejar a
otros para que ellos corrijan su comportamiento.

Las personas deben ay udar a la comunidad en que


viven.

Una persona puede ganar el afecto y el respeto de los


demás de varias formas. La forma más eficaz es dar de
uno mismo. Cuando sus intenciones provienen de un
corazón puro, la gente le amará y le respetará como una
persona digna.

En el pasado se usó el siguiente método, siempre con


buenos resultados. Es muy fácil. En la mañana, coja una
escoba y barra toda la calle frente a su casa. Si no está en
casa, entonces la situación es otra. Sin embargo, intente
barrer por lo menos una vez a la semana. Si lo sigue
haciendo, los vecinos llegarán a conocerle. Posiblemente no
le amarán, pero tampoco le odiarán. Este tipo de
generosidad se llama generosidad con el uso del esfuerzo.

Antes había muchas formas de generosidad. Había un


método que todos practicaban, pero este método ya no se ve
mucho. Tradicionalmente, en frente de todas las casas,
había un cuenco de agua con una taza o un vaso. Si uno
pasaba por allí y tenía sed, podía saciarla tomando el agua
del vecino.

Un simple cuenco de agua adquiere valor, porque


convierte el agua en una muestra de amistad.
Entonces, si los padres practican la generosidad y
cumplen los Preceptos, son educados y practican la virtud,
sus hijos vivirán en un entorno maravilloso y la familia
jamás tendrá que mudarse.
Capítulo 18

Enseñar a los niños a cuidar de los


familiares que estén enfermos

Todos aquellos que hoy viven, algún día se irán de este


mundo. Pero antes de que lo abandonen, suelen enfermar y
hasta puede que pasen sus últimos días y aciendo en una
cama de hospital. Sus cuerpos y órganos van deteriorándose
poco a poco a medida que se van consumiendo por distintas
enfermedades. Esto es motivo de un inmenso dolor y
sufrimiento. Al mismo tiempo, las células del cuerpo
mueren lentamente, p erdiendo así su capacidad de
funcionamiento. Es por ello que el aprender a cuidar de las
personas queridas cuando están enfermas implica una
importancia crucial.
Cuidar de estas personas también nos enseñará a
cuidarlos a nivel mental cuando tengan que en frentarse al
dolor. Al enseñarles a nuestros hijos cómo cuidar de las
personas que sufren problemas de salud, podemos estar
seguros de que cuando estemos en nuestro lecho de muerte
ellos sabrán cuidar de nosotros.

¿Cómo debemos cuidar a nuestros seres q ueridos


cuando estén muy enfermos?

Hay dos elementos a tener en cuenta a la hora de


cuidar de los enfermos:

1. Cuidar de ellos físicamente


Tenemos que encontrar a los mejores médicos
que puedan tratarlos, dentro de nuestras posibilidades
y de lo que podamos costear.

2. Cuidar de ellos emocionalmente


Si a la persona le queda poco tiempo de vida, es
muy importante mantenerlo/a consciente. Su vida
después de la muerte, si está destinado a ir al cielo o a
los reinos desagradables, estará determinada por
aquello en lo que centró sus pensamientos.

Buda dijo,

“Una mente turbia antes de morir conducirá a


los reinos desagradables (Duggati). Una mente
despejada antes de morir conducirá a los reinos
agradables (Sugati)”.

¿Qué significa Sugati?

Sugati hace referencia a un reino feliz o agradable.


Después de abandonar este mundo, la persona volverá a
nacer como humano (Manussaloka: Tierra), como un ángel
(Devaloka: Cielo) o como un Brahmán ( Brahmaloka: Reino
celestial).

¿Qué significa Duggati?

Duggati hace referencia a un reino infeliz o


desagradable. Después de abandonar este mundo, la
persona volverá a nacer como un animal ( Derajchanpome:
Tierra), como un fantasma hambriento, como un demonio o
como una criatura del infierno ( Pretapume,
Asurakayapome, o Narokkapume: Infierno).

Sugati y Duggati son los destinos que les deparan a


aquellas personas que fallecen y el lugar en el que deben
enfrentar las consecuencias de sus acciones en la Tierra. El
destino final depende de si su estado mental en sus últimos
momentos de vida fue turbio o despejado. Los monjes
suelen llamar a esto “la Guerra de la Existencia”, es decir, la
precaria batalla entre ir al sugati o al duggati.

Independientemente del resultado del tratamiento,


“El cuidador debe preocuparse del estado mental
del paciente, de modo que su mente esté despejada
en todo momento. Esto le dará al paciente
esperanza y el valor suficiente como para luchar
contra la enfermedad”.

Hay distintos modos con los que el cuidador puede


ayudarle al paciente a ser valiente:

1) Manténgalo alejado de las preocupaciones.


No deje que se enteren de nada relacionado con daños en
sus propiedades, los problemas de sus hijos o cualquier otra
cosa que pudiera perturbarlo.

2) Transporte su mente a un estado de


felicidad, recordándole lo s méritos que ha
adquirido. Háblele de los actos meritorios que el paciente
ha realizado, tales como haberse ordenado monje, el haber
ofrecido las vestiduras de Kathina u otras vestiduras, el
haber apoyado a instituciones sociales o el haber ayudado a
otras personas.

3) Anímele a llevar a cabo nuevos méritos


dentro de sus posibilidades. Invítele a ser generoso
ofreciendo comida a los monjes todos los días. Si no puede
levantarse, invite a los monjes a recibir comida en su casa.
Si esto no le conviene, deje que el paciente se ponga un
propósito y pida un deseo con la ofrenda y ofrézcala usted a
nombre del paciente. Una vez que haya ofrecido comida,
dígaselo al paciente para que se alegre por ello.

4) Convénzalo para que cumpla estrictamente


los Cinco Preceptos. El paciente no debe matar ni
siquiera una hormiga o un mosquito.

5) Invítelo a meditar. Esto es muy importante.


Usted puede hacer que el paciente escuche cantos grabados
en un cassette o una grabación del Dhamma hecha por un
monje que sea respetado por el paciente. También puede
leerle al paciente libros del Dhamma. Si logra hacer esto
todos los días, el paciente puede llegar a tener mérito
suficiente como para curarse, ya que el poder de los
antiguos méritos aumenta los nuevos méritos que lleve a
cabo. Si el paciente no tiene más méritos y es hora de que
fallezca, éste irá a un reino agradable porque ha
mantenido la mente despejada antes de fallecer.

Llevar a un paciente a este estado requiere que el


cuidador esté inmerso en mérito y que haga resolu ciones
(con la ayuda del mérito que el paciente acumuló en el
pasado) para proteger al paciente de su enfermedad. Esto
ayudará a mejorar los resultados del tratamiento del
paciente.
En conclusión, el último segundo en la vida de un
paciente es muy importa nte, ya que es entonces cuando
podemos ayudarle a vencer la “Guerra de la Existencia”. La
victoria se logra teniendo una mente despejada antes de
abandonar este mundo. Esto es absolutamente necesario.

Por ello, cuando nuestros familiares estén enfermos,


deberíamos ser capaces de cuidarlos bien física y
psicológicamente, independientemente de nuestra cercanía
con ellos o de la gravedad de la enfermedad. Cuando
nuestros hijos sean los suficientemente grandes,
deberíamos enseñarles a cuidar su propia salud y a
comprender a sus familiares. El enseñarles a cuidar a los
demás les mostrará claramente que la verdad sobre la vida
es que todo el mundo muere. Además cuando sea la hora de
irnos, nos podrán ayudar a vencer la “Guerra de la
Existencia”.
Capítulo 19

El amor incondicional de los


padres

En el mundo en el que vivimos, regido por la


economía, no es fácil para muchos padres encontrar tiempo
para pasar con sus hijos. A veces los hijos son “educados”
por la televisión o por los videojuegos, mientras que su s
padres trabajan. Crecen prácticamente sin guía ni
instrucción por parte de sus padres, sin saber las causas ni
las consecuencias de las cosas, la diferencia entre el
comportamiento moral y el inmoral o sin saber tampoco
cómo controlar sus emociones. Al n o conocer el valor de
tener unos padres, a veces comienzan a despreciarlos. No
saben apreciar todas las dificultades y los sacrificios que sus
padres han tenido que soportar por ellos. Creen que
educarlos y darles todo lo que pidan es la obligación de sus
padres, por haberlos traído al mundo. Al final son los
padres los que sienten pena y decepción.

Si sus padres no son lo suficientemente ricos como


para satisfacer sus antojos, los menosprecian y les dirán
vagos. Se quejan porque la economía de sus padre s los
avergüenza. A veces, amenazan a sus padres o hacen
rabietas para conseguir lo que quieren. Estos niños están
acumulando mal karma incluso sin darse cuenta. Estos
problemas no sólo se dan en las familias de clase media o
pobre, sino también en las fam ilias ricas.

Luang Phaw habló una vez de un millonario del sur


que vino a verle con semblante deprimido, diciendo: “Por
favor, ayúdeme. Mi hijo es terrible. Nos obliga a comprarle
cosas y, cuando lo hacemos, ni siquiera les presta atención.
Si le decimos que no, nos insulta. Ya no sé qué hacer con él”.

Luang Phaw le aconsejó: “Como su hijo nunca ha


visitado el templo, no puedo aconsejarle mucho. Si le digo
que venga y que escuche un sermón en el templo o que
medite y purifique su alma para que pueda apre ciar por sí
mismo el valor de sus padres, se negará incluso si le
pagamos para que venga. Si es capaz de insultar a sus
propios padres, ¿por qué iba a escuchar a otra persona?”

“Hagámoslo de este modo. Antes de volver al sur, lleve


a su hijo al orfanato de la ciudad de Pakret, que está en la
provincia de Nonthaburi. Déle cualquier razón necesaria
para convencerlo de que vaya. Asegúrese de que da dāna,
ofreciendo comida a los huérfanos. Puede que este mérito le
haga darse cuenta de su suerte. Puede que esto hasta le
ayude a cambiar”.
Luang Phaw quería que su hijo fuera testigo de las
dificultades a las que tienen que enfrentarse los niños que
no tienen padres. Una vez que haya abierto los ojos y
después de haber visto a estos desafortunados niños, podría
cambiar y entonces querría y valoraría más a sus padres.

Me acuerdo de cuando era estudiante del último curso


en la universidad y mis amigos me invitaron a ayudarles a
llevar comida al orfanato de Pakret. Allí había unos 200 o
300 niños y sólo unos 20 cuidadores. Cuando llegamos al
orfanato, todos los niños corrieron hacia nosotros luchando
para que los cogiéramos. Llamaban a los recién llegado s
“papi” y a las recién llegadas “mami”, lo que nos hizo
sonrojar. A los niños les habían enseñado a llamar así a todo
el mundo porque no sabían quienes eran sus padres
verdaderos.

Tres o cuatro niños corrieron y nos abrazaron, como


monitos, diciéndonos que nunca habían sabido lo que era el
amor y la calidez en su vida. Corrían para agarrar tantos
juguetes y tanta comida como podían. Cuando les dimos los
postres, luchaban entre ellos por alcanzarlos y cuando les
repartimos muñecos, se peleaban por ellos.

Como no sabíamos cuántos niños había en el orfanato,


trajimos sólo 40 o 50 muñecos. Cuando los repartimos, se
peleaban por cada uno de ellos. Uno agarró el cuello, otro el
brazo, mientras otro alcanzó la pierna. En unos segundos, el
muñeco estaba hecho trizas y cada uno tenía una parte
distinta. Después todos siguieron peleando.
Cuando repartimos la ropa, los cuidadores cogieron la
ropa nueva para los niños que llevaban puesta la más vieja y
andrajosa. Los niños cuya ropa no estaba demasiado
desgastada, no recibieron ropa nueva. Se pusieron
envidiosos y empezaron a tirar de la ropa nueva que los
otros niños se acababan de poner. Finalmente, la ropa
nueva se rasgó y nadie se la pudo poner.
Lo que presenciamos nos entristeció y nos rompió el
corazón. Estos niños tenían una perspectiva de la vida
diferente a la nuestra. Cuando éramos pequeños, queríamos
tener muchos amigos de nuestra edad para pasarlo bien con
ellos. Nunca pensábamos que nuestros amigos pudieran
pelearse o robarnos la comida o los jugue tes porque todos
estábamos bien alimentados y abastecidos. Y, lo más
importante, nuestros padres y familiares nos daban amor y
calor. Veíamos el mundo desde un prisma positivo.

Sin embargo, estos huérfanos no podían ver las cosas


como nosotros. No veían a los cientos de niños alrededor de
ellos como amigos, sino más bien como rivales que
esperaban para pelearse por las cosas que ellos querían o
por el amor que necesitaban. La soledad que se veía en sus
ojos le rompía a uno el corazón.

Vamos a reflexionar sobre el modo en que los niños


exigen que sus padres satisfagan todas sus necesidades sin
importarles que puedan herir a sus padres con palabras
crueles. Recuerde que eso es equivalente a matarlos con las
palabras. Incluso cuando estos niños hieren a sus madres y
padres con palabras crueles, sus padres siguen
defendiéndolos. Les cuesta admitir que sus hijos no son
ángeles.

Por lo tanto, quiero terminar esta reflexión con todos


los niños que exigen constantemente a sus padres que
hagan cosas por ellos. H ay huérfanos que no tienen siquiera
una madre o un padre que los quiera o que los cuide. ¿Por
qué les pides a tus padres, que siempre te han querido,
cosas superficiales?
Parte IV

Los Caminos a la Perdición


Capítulo 20

Los niños que son adi ctos a los


Caminos a la Perdición
(Apāyamukha)

El amor que sienten por sus hijos hace que los padres
trabajen mucho para ganar dinero y así poder
proporcionarles comodidades como juguetes, ropa y una
educación. Trabajan además para que los hijos no se sientan
avergonzados por las señales de la pobreza. Aman a los hijos
ciegamente y esta ceguera hace que no puedan ver que al
dedicar todos sus esfuerzos al confort y crecimiento físico de
los niños desatienden el crecimiento emocional y espiritual,
que son igualmente importantes. Luego se sorprenden y se
entristecen cuando los hijos caen en el uso de las drogas y el
alcohol o se comportan de manera vergonzosa.

El comportamiento autodestructivo es tan perjudicial


para el futuro del niño como puede ser la falta de comida o
de estudios. Si se les permite seguir en los Caminos a la
Perdición, o sea, Apāyamukha, estos niños destruirán su
propio futuro.

1} Enseñar a sus hijos. Si los niños no han


desarrollado malos comportamientos, hay que enseñarles
sobre lo que está bien y lo que está m al, además de cómo
demostrar autodisciplina.

2} Tratar el problema inmediatamente. Si los


niños ya han desarrollado un comportamiento
autodestructivo, hay que enfrentarlo de forma inmediata y
decisiva.

Hay enseñanzas budistas sobre los papeles y las


responsabilidades de los padres. Para asegurar que sus
niños disfruten de un futuro brillante y que tengan éxito en
los ámbitos profesional y personal, los padres tienen que
cumplir con cinco criterios:

1) Enseñar a los hijos a abstenerse de las malas


acciones.
2) Enseñarles a realizar buenas acciones.
3) Proporcionarles una educación para que dispongan
de los conocimientos necesarios para hacer su carrera, y
para que aprendan a ser responsables.
4) Cuando sea el momento adecuado, ayudarles en el
proceso de elegir su pareja de por vida. Explícales las
responsabilidades que involucran la vida familiar y lo que
tienen que hacer para prepararse para ella.
5) Cuando sea el momento adecuado, legarles su
riqueza y sus activos para que puedan empezar a crear su
propio legado.

Es muy común que los niños tengan problemas más


tarde en la vida porque sus padres no cumplieron con estas
responsabilidades.

¿Por qué algunos niños se comportan mal?

Nuestros antepasados nos proporcionaron una


respuesta muy interesante a esta pregunta.

“Las destrezas paternales que observamos hoy en día


son motivo de preocupación. No podemos dejar de
preocuparnos por la incapacidad de los padres de enseñar a
sus hijos a no cometer malas acciones y sólo realizar las
buenas, ya que algunos padres ni siquiera pueden
diferenciar entre lo correcto y lo incorrecto, el bien y el mal,
el mérito y el pecado. Algunos hasta se comportan mal
delante de sus hijos, lo que es lo más espantoso”.

No dejar que solamente los profesores


enseñen.

Nuestros antepasados afirmaron:

“Algunos padres pueden diferenciar entre el bien y el


mal, pero no transmiten este conocimiento a sus hijos. Su
amor y su preocupación por sus hijos son tan grandes que
les sobreprotegen. Prohíben que los hijos salga n de la casa
sin darles explicaciones ”.

Los padres deberían reconocer que no pueden estar


siempre con sus hijos, quienes, de una u otra forma,
encontrarán la manera de ser independientes. En vez de
prohibir que hagan algo sin dar explicaciones, sería mej or
encontrar tiempo para enseñarles sobre el bien y el mal o lo
correcto y lo incorrecto, además deben dar las razones por
las cuales deberíamos o no hacer algo. Enseñarles y
animarles a realizar buenas acciones de forma regular.

Con respecto a la educa ción de los niños, la mayoría de


los padres apoya plenamente a sus hijos, pero algunos
tienen expectativas demasiado altas. Nuestros antepasados
nos proporcionaron el siguiente pensamiento:

“Algunos padres exigen que sus hijos asistan a escuelas


famosas y acreditadas en Tailandia, a pesar de los altos
costos. Solamente les interesa que sus hijos, una vez
matriculados, aprendan a ser inteligentes, dada la alta
calidad de los profesores.

Me gustaría recordarles que esta forma de pensar falla,


porque es muy difícil enseñar a los niños cómo distinguir
entre el bien y el mal, el mérito y el pecado. Son temas que
exigen explicaciones extensas, y sería mejor enseñar a los
niños por separado o en grupos de dos o tres. Los padres
tienen que enseñar de tal forma que el niño pueda asimilar
la información. No podemos esperar que los profesores de
la escuela enseñen todas esas cosas a los niños porque son
responsables de demasiados estudiantes”.

Cuando los niños están en casa, los padres deben de


centrarse primero en las enseñanzas de Buda sobre el
comportamiento moral antes de proseguir con otros temas
como la selección del esposo y la herencia familiar. Cuando
se ven ante las tentaciones como salir por la noche, el
alcohol y las drogas, los niños podrán actuar co n acierto y
decidir si deberían o no hacer algo.

Mantener a rayas a Apāyamukha

Si los niños ya son adictos a Apāyamukha, la única


manera de reformarlos es hablar con ellos sin recurrir a la
ira. Permita a los niños llegar a sus propias conclusiones
una vez que entienden que su preocupación se fundamenta
en el amor. A menudo los niños deciden hacer cosas sin
entender porqué se equivocan. A veces ni siquiera se dan
cuenta de que estaban preocupando o lastimando a sus
padres.

Hay tres temas que son de extrema importancia y que


los padres deben de tratar con sus hijos.

1) Enseñarles que el dinero es el resultado de


mucho trabajo.

Los padres pueden explicar que salir por la noche e ir


de juerga con los amigos es una pérdida del dinero ganado
con el sudor de la frente. Hay que trabajar mucho para
satisfacer necesidades como comida, alojamiento y ropa,
además que los padres se esfuerzan para crear una herencia
para sus hijos. Desperdiciar este dinero en algunas horas de
diversión es como permitir que el futuro se evapore en el
aire. Explíqueles que no toda la gente sale a los bares o toma
alcohol. De hecho, hay muchas personas que se dedican a
otras actividades más dignas, por ejemplo ofrecen sus
servicios para ayudar a la gente sin hogar o para leer a los
ciegos. Éstas ciertamente satisfacen mucho más que salir
todas las noches.

2) La presión del grupo puede influir en el


comportamiento.

Los padres también pueden explicar que los jóvenes


tienden a hacer cosas insensatas. No tienen la experiencia
de vida ni el razonamiento sobre lo que está bien y lo que
está mal. Quieren probar cosas negativas como las drogas y
el alcohol a pesar que conocen las consecuencias legales y
muchas veces sin entender las morales. Explíqueles que
salir todas las noches con amigos así, puede llevar a que una
buena persona caiga en tentacione s que no puede resistir.
3) Un estilo de vida peligroso tiene
consecuencias reales .

Los padres también pueden explicar los riesgos de un


estilo de vida peligroso. Pasar tiempo con borrachos o
emborracharse puede conllevar muchas consecuencias
terribles: participación en una reyerta, arresto, contraer el
VIH u otra enfermedad, hasta pueden terminar con heridas
o asesinados. Explique que sus hijos son el tesoro más
precioso que tiene, y que perderlos es su pesadilla más
aterradora. Todos los padres qu ieren que sus hijos sean los
mejores, que desarrollen plenamente su potencial y que
lleguen a ser alguien admirado por los miembros de la
comunidad. Quieren ver que sus hijos se asocien con buenas
personas cuyo ejemplo les inspire y les ayude a mejorar.

Si los padres hablan de estos temas con sus hijos de


manera cariñosa y racional aun antes de que surjan
problemas, los niños entenderán la inmensidad del amor
que sienten. Esto puede ser el punto de partida para que
piensen y actúen con más responsabilida d y para que
puedan diferenciar los buenos amigos de los malos. Tal vez
encontrarán actividades más constructivas para mantenerse
ocupados.

Las familias que ya están en crisis todavía pueden


encontrar soluciones eficaces si recuerdan que el amor que
sienten los padres por los hijos no es suficiente. Debe de
estar acompañado por la razón y el entendimiento. Con
mucho esfuerzo los padres pueden reformar a los niños
traviesos y éstos pueden recuperar a los padres honrados.
Capítulo 21

El marido mujeriego y alcohólico

Un marido que no es fiel y que bebe en exceso puede


hacer que la familia quede deshecha. ¿Cómo salvar un
matrimonio de un individuo así? Luang Phaw nos
proporcionó una respuesta interesante a esta pregunta.
Cómo elegir a su pareja de por vida

Luang Phaw explicó que antes de elegir a nuestra


pareja de por vida, deberíamos observar a las parejas
casadas y analizar su experiencia. Veremos que antes de
casarse, las dos personas que forman la pareja estaban
seguras de que habían ele gido a la pareja que más les
convenía. Imaginaban que una vez casados, su vida estaría
llena de felicidad, que todos los conflictos serían fácilmente
resueltos y de poca importancia y que nunca se
abandonarían. Sin embargo, después de vivir juntos un
tiempo, el encaprichamiento inicial se desvaneció y a veces
veían a su pareja comportarse de la peor manera posible.
No importa si los conflictos causados por este lado de la
pareja son menores o mayores; siempre habrá asuntos que
hay que tratar dentro del matr imonio. Al final, la realidad
borra la felicidad mágica que habían anticipado.

Buda nos dio los criterios para elegir la persona


correcta como nuestra pareja de por vida. Él o ella deben:

1) Entender la Ley del Karma y confiar en ella


2) Cumplir con los Preceptos
3) Tener voluntad de ayudar a los demás
4) Tener la sabiduría de diferenciar entre el bien y el
mal

Estas cuatro cualidades son imprescindibles para


desarrollar una base sólida para la vida y por lo tanto hay
que buscarlas en su pareja también.

Hacer frente al marido adúltero

En el libro Good Question Good Answer (Buena


Pregunta Buena Respuesta ) Luang Phaw ofrece soluciones
para problemas relacionados con la familia y dijo lo
siguiente con respecto el marido adúltero:
Hay dos factores principales que pueden llevar a que
un hombre sea adúltero.

1) Un marido infiel puede serlo por hábito .

Es muy difícil cambiar este tipo de hombre , y en este


caso lo que la esposa realmente puede hacer es tener
paciencia y explicarlo como una co nsecuencia de haber
elegido como marido a alguien así. En esta instancia sólo
puede controlar su propio comportamiento. Sería mejor
actuar con dignidad y no responder con el mismo tipo de
engaño.

Es difícil cambiar un marido adúltero. La esposa debe


seguir cumpliendo con sus responsabilidades lo mejor que
pueda y tratar de resolver valientemente los problemas que
puedan surgir. La esposa debe tratar de hacer todo lo
posible para que esta situación no afecte a la familia y debe
también intentar preservar la unidad familiar. Continúe
realizando buenas acciones por su propia cuenta hasta que
su esposo note su bondad, caiga en cuenta de que su
comportamiento es malo y se sienta agradecido; entonces
tal vez deje de actuar de esa forma . Aunque esto podría
tardar muchos años realmente es lo único que podemos
hacer.

2) Un marido puede ser infiel porque f alta algo


en la relación con su mujer.

La falta de algo en la relación no justifica las acciones


de infidelidad; sin embargo, puede ser un factor que influye
en ellas. En este caso, aunque es muy difícil, la esposa tiene
que analizar sus acciones y su comportamiento para ver si
podrían haber influido en las acciones del esposo,
examinando si ha cumplido bien con sus responsabilidades
matrimoniales. Para buscar sus propias deficiencias,
primero es imprescindible tranquilizar la mente. N o hay
mejor manera de alcanzar la claridad de la mente que
meditar todos los días. Nosotros vemos enormes los
defectos más pequeños de los demás, pero ni siquiera
podemos reconocer nuestros propios grandes y vergonzosos
defectos. Sin embargo, cuando cerramos los ojos para
meditar, solamente podemos vernos a nosotros mismos.
Lentamente empezaremos a ver nuestros defecto s. Mientras
más tranquila esté nuestra mente, más pod remos ver y
empezaremos a entender nuestros propios defectos y
sabremos cómo podremos quitárnoslos.

Me gustaría advertirle a la mujer que tiene u n marido


adúltero que no recurra a la magia negra o el
comportamiento vengativo solamente para fastidiarle . Estos
actos no son la solución y solamente intensificarán el
rencor.

Hacer frente a un marido alcohólico

Luang Phaw también dio algunas recomendaciones


con respecto a esta situación:

Si una mujer se encuentra casada con un hombre


alcohólico tendrá que analiz ar y aceptar que esto podría
deberse a sus decisiones erróneas previas.

La primera mala elección que hizo fue casarse en vez


de quedarse soltera.

La segunda fue casarse con un hombre que bebía en


exceso.

Tener un padre y marido alcohólico en el ho gar es muy


perjudicial para los niños ya que verán un comportamiento
borracho y escandaloso y ellos también se volverán
agresivos. Aprenderán de su ejemplo y posiblemente se
volverán alcohólicos también. La mujer debe corregir esta
tendencia en sus niños lo más rápidamente posible.
La vida de casada no es fácil. Si toma decisiones
erróneas desde el principio tendrá que enfrentar las
consecuencias durante el resto de su vida.

Las mujeres solteras no debe n olvidar que es difícil


encontrar a un hombre fi el que no tome alcohol y por lo
tanto sería mejor quedarse soltera. Es la elección más
inteligente.

Según la Ley del Karma, tener un esposo alcohólico es


un indicio de que en una vida pasada estaba de acuerdo con
el uso del alcohol y que no disuadía a otros de tomarlo, sino
que servía refrigerios ricos para acompañar las bebidas, lo
que les animaba a tomar aun más. Este karma la llevó a
usted a casarse con un alcohólico.

Si usted se encuentra en esta difícil situación es muy


importante mantenerse animada. Siga yendo al templo,
practicando dana y acumulando méritos. Si tiene hijos,
llévelos al templo y haga que esto sea parte de su vida desde
la niñez. Cante y medite con ellos. Mantenga su disciplina y
la de ellos también.

Nos disculpamos si el lecto r siente que Luang Phaw


habla muy francamente sobre algo que podría estar
ocurriendo en su vida. Incluimos las enseñanzas aquí
porque deseamos ilustrar para los solteros una situación
que puede ocurrir en la vida de casados. Así podrán
acercarse al matrimonio con los ojos bien abiertos y
seleccionar a su pareja con mucho cuidado.
Capítulo 22

Los Caminos a la Perdición

Muchos licenciados jóvenes trabajan de manera


diligente y centrada cuando empiezan su primer empleo.
Algunos días hasta trabajan hora s extras con la esperanza
de recibir una mayor remuneración al final del mes. Sin
embargo, después de trabajar muchos años, en vez de tener
una situación económica mejorada, solamente han logrado
acumular deudas. Aunque trabajan mucho, terminan
viviendo al día. ¿Cómo es posible que algunas personas
despilfarren su propia riqueza?
Muchas personas que ven a sus amigos en apuros
económicos no saben qué decir, puesto que el tema del
dinero es muy delicado. Aunque están preocupados, no
saben cómo ayudarles.

Yo mismo me he encontrado con este problema y me


he sentido desesperado, lo cual me llevó a consultar mis
apuntes sobre las enseñanzas de Luang Phaw.

Luang Phaw dijo que cuando tenía alrededor de 30


años y todavía no se había ordenado, él mismo pasaba
apuros económicos. Aunque ganaba bastante, gastaba
mucho más. Como no podía arreglar su situación, pidió
consejos a su madre, quien podía ayudarle. Ella le dijo,
“Hijo mío, la cantidad de dinero que ganas no es
importante, sino la cantidad que ahorras. En este mundo,
hay muchas personas que ganan mucho pero se quedan con
poco o nada. A la vez, hay muchas que ganan menos pero
han ahorrado mucho más".

Siguió diciendo, “Ganar mucho y quedarse con poco es


como usar una canasta de bambú para recoger agua.
Cuando la canasta está sumergida, se llena de agua, pero
una vez que la subes no tendrás agua, solamente tendrás
una canasta mojada. Sin embargo, ganar un poco y ahorrar
mucho es como usar un cuenco o la cáscara de un coco para
el agua. Aunque son pequeños, no dejan pasar el agua”.

Si alguien gana mucho pero toma alcohol, es como si


su recipiente perdiera agua. El juego es otro tipo de agujero
en el recipiente, como lo es salir a bares, clubes u otros
lugares a los cuales uno sabe que no debería ir. A todo s
estos “agujeros” les podemos llamar Apāyamukha, o los
Caminos a la Perdición.

Muchas veces hemos aprendido sobre los Caminos a la


Perdición, pero nunca hemos puesto en práctica los
principios para evitarlos en nuestra vida diaria. Cuando
sufrimos, culpamos a la sociedad o a los demás.

Aquel día Luang Phaw recibió muchos buenos consejos


de su madre y logró cambiar su comportamiento. Llegó a
ser más prudente con su dinero y nunca más se endeudó.

**************************************

Luang Phaw entró al tempo por primera vez cuando un


amigo le invitó a meditar. En aquella época, estaba metido
en un conflicto con su jefe. La noche anterior de ir al
templo, bebió mucho y por la mañana tenía resaca. Cuando
llegó al templo, sus amigos le pidieron participar en la
ceremonia de oferta de vestiduras, el mérito de la cual le
ayudaría en el trabajo.

Luang Phaw tenía fresco en la mente el conflicto con su


jefe y, sintiéndose un poco mareado, respondió, “¡Mérito!
No veo que ayude a nadie. Y o hago méritos y aún así tengo
problemas con mi jefe".

Khun Yay (Khun Yay Ajan Up asika Chandra


Khonnokyoong) se enteró de esta conversación y pidió a
Luang Phaw reunirse con ella. Le dijo, “Hijo mío, ¿dijiste
que los méritos no te pueden ayudar con nada ? En un año,
¿cuántos méritos haces?"

Él respondió, “Dono 100 o 200 baht por mes, así que a


lo largo de un año serían 2 000 o 2 500 baht”.

Khun Yay juntó las manos y dijo, “Muy bien. Por favor,
sigue así". Luang Phaw pensó que la conversación había
terminado, pero Khun Yay siguió con sus preguntas.

“Hijo mío, ¿fumas?”


“Sí, fumo”.

“¿Cuánto gastas en cigarrillos cada año?”

En aquel entonces Luang Phaw fumaba cigarrillos que


le costaban seis baht por cajetilla y fumaba entre una y
media y dos cajetillas por día. Contestó, "alrededor de 3 000
o 4 000 baht por año".

Khun Yay le siguió preguntando. “¿Bebes?”

“Sí, bebo”.

“En un año, ¿cuánto gastas bebiendo con tus amigos?”

“Khun Yay, si multiplicas la cantidad de dinero que


gasto en cigarrillos por dos o tres, sería unos 12 000 baht
por alcohol”.

“¿Sales a clubes con tus amigos?”

“Sí, salgo”.

“En un año, ¿cuánto gastas saliendo a clubes?"

“Supongo que dos o tres veces la cantidad que gasto en


alcohol".

“Hijo mío, todos los años aport as unos 2 000 o 2 500


baht al hacer méritos, pero a la vez gastas 100 000 baht
fumando, tomando y saliendo. Sin embargo, te quejas de
que el mérito no te ayuda. Si murieras ahora mismo y no
descendieras al infierno, tendrías suerte. Te graduaste de
universidades de Tailandia y del ultramar y ¿aun así no
puedes entender tu propia situación?”
Tras recibir los reproches de Khun Yay, Luang Phaw se
recuperó de su resaca y se sentó quieto durante un rato.

Luego explicó, “Este momento fue el empujón que me


ayudó a dejar de tomar. Aunque Khun Yay solamente
pronunció algunas palabritas me hizo querer ir a casa y
romper todas las botellas de alcohol que tenía. Desde
entonces nunca he tomado alcohol".

Una vez que dejó de beber, instó a sus amigos a dejarlo


también. Les dijo, "en los cumpleaños por lo general no
pensamos en nuestras madres, sino que pensamos en lo que
vamos a beber. Esta vez, cuando llegue nuestro cumpleaños,
deberíamos agradecer a nuestras madres por habernos dado
la vida y no vamos a desperdici ar nuestro dinero bebiendo
con los amigos".

Siguió, “si no nos apuramos para dejar los Camino a la


Perdición seremos como una espina para la sociedad. Nos
endeudaremos más y atraeremos solamente malos socios.

Si dejamos de fumar, beber y jugar, nuestr as


compañías inmorales desaparecerán. Las buenas personas
querrán ser nuestro amigo. La degeneración social
disminuirá y nuestro propio estado económico será más
seguro.

Decidí ir al templo y estudiar en serio el Dhamma en


vez de fumar y beber. No perdí tiempo intentando disminuir
mis vicios poco a poco sino que los dejé de una vez por
todas aquel día”.

“Si no hubiera tenido en mi vida a las personas que


más respeto, es decir, a mi madre y a Khun Yay, para
mostrarme mis errores, hoy no estaría aquí hab lando de
estas preocupaciones. Vayan y pregunten a sus amigos si se
están endeudando porque han desperdiciado en los
Caminos a la Perdición el dinero que ganaron con el sudor
de su frente".

Gastar su dinero en Apāyamukha es como comprar


problemas para su vida. No solamente destruirá sus
finanzas sino, eventualmente, también su carrera y toda su
vida. Si se da cuenta de la insensatez de su comportamiento,
tiene que intentar cambiarlo. Decida hoy abandonar por
completo los Caminos a la Perdición, porque si no elige
ayudarse a sí mismo, nadie más podrá ayudarle.
Capítulo 23

Porqué es pecado solicitar los


servicios de una prostituta

Hoy en día el número de personas con SIDA está


subiendo. Una de las causas d e este aumento es que la
mayoría de los jóvenes creen que no es moralmente malo el
solicitar los servicios de una prostituta, porque piensan que
cuando el sexo es de mutuo consentimiento, no es mala
conducta. Uno de los pensamientos equivocados más
comunes es “¿qué hay de malo en solicitar los
servicios de una prostituta? ”
Las enseñanzas del budismo muestran claramente que
la cuestión de contratar una prostituta es algo malo, no se
decide bajo los preceptos ( sīla) sino que forma parte de los
Caminos a la Perdición (Apāyamukha).

“Apayā” significa una forma de deterioro, desastre o


algo que no conduce a la prosperidad.

“Mukha” significa cara, forma o puerta de entrada.

Por lo tanto, Apāyamukha significa una puerta de


entrada al deterioro, el desast re y los daños.

Cualquier hombre, sea soltero o casado, que solicite los


servicios de una prostituta, no importan las circunstancias,
se mancha con el deterioro, el desastre y los daños. Desde
este momento las personas a su alrededor sospecharán de él
sin importar lo que haga.

1) ¿Tiene SIDA? La mayoría de las personas saben


que siempre que una persona tenga relaciones con
prostitutas, inevitablemente contrae enfermedades de
transmisión sexual y SIDA. Además, él siempre se
preguntará a sí mismo si ha contraído SIDA.

2) Las buenas personas considerarán al hombre como


alguien que deshonra a las mujeres.

3) El hombre cultiva el vicio de pensar con


desprecio sobre las mujeres, y una vez casado, mirará a su
mujer con la misma actitud.

4) Es una pérdida innecesaria de dinero.


Podemos decir que este hombre gasta dinero para
comprarse el deterioro, el desastre y los daños. Le
beneficiaría más dar el dinero a su madre para que ella
pueda hacer más méritos.
Por lo tanto, los monjes nos recuerdan:

“Si está a punto de gastar dinero para contratar una


prostituta, por favor, piense en su madre y en todo lo que ha
tenido que aguantar para criarlo. Ahora que sus hijos
pueden mantenerse, deberían darle a ella dinero para hacer
más méritos que le acompaña rán en las vidas futuras. Hay
madres que gastan todos sus ahorros criando a sus hijos y
se quedan sin tiempo para acumular más méritos para ellas
mismas”.

Luang Phaw nos recuerda que mientras sigamos


enseñando y educando a los demás, podemos esperar que la
cantidad de violaciones, asesinatos y mala conducta sexual
disminuya de manera significativa. Además, la prostitución
y el SIDA se eliminarán de Tailandia y del mundo ya que
actualmente éstos van en aumento. El pueblo de Tailandia
acumulará mucho mérito .
Capítulo 24

El apostar nunca hizo millonario a


nadie

Aún antes del silbato inicial en un partido de futbol,


dinero prestado, sueldos, la pensión escolar y los prestámos
de muchas personas, ya han sido apostados. Ésta es una
típica imagen de lo que ocurre fuera del campo de futbol y
tiene un tremendo efecto en toda la familia.

Se estima que, en un día normal, el dinero que circula


en las apuestas durante un partido de futbol es alrededor de
varios millones. Ésta es una cifra extremadamente alta para
un país en desarrollo como lo es Tailandia.

Los corredores de apuestas rebosan de alegría cuando


ven las cifras y la cantidad de dinero que van a recibir. Sin
embargo, para esos que trabajan y ganan un salario de una
manera honesta, este estilo de vi da es considerado frío e
inconsciente ya que los corredores de apuestas están
ganando el dinero de gente que no sabe como utilizarlo.

Estas personas pobres que lo han perdido todo por


apostar, acudirán a los corredores de apuestas para solicitar
préstamos. Si no pueden reunir el dinero para pagar su
deuda, recurrirán a actividades criminales, corrupción y
prostitución para así poder saldar lo que deben.

La idea de trabajar en una profesión honorable


desaparece de su mente, mientras se sumergen cada vez
más en la adicción de las apuestas. Esta adicción es difícil de
vencer porque el único fin es recuperar el dinero perdido.

Tenemos que considerar la mejor terapia para ayudar a


aquellos que sufren de esta adicción, para así conseguir
mejores resultados. Existen cuatro pautas que debemos
tener en cuenta:

1) No debemos involucrarnos en el mundo de las


apuestas.

2) Debemos evitar que nuestros hijos se hagan


apostadores, explicándoles el peligro y el daño que causa el
apostar.

3) No debemos promover o cre ar un ambiente


propicio para las apuestas en nuestro hogar, en el trabajo o
en la escuela.
4) Debemos explicarles a nuestros seres queridos la
destrucción que ha causado el apostar y cómo esta actividad
nunca ha hecho a millonario a nadie.

¿Porqué los apostadores no son millonarios? Es por


que ellos ya destruyeron su verdadero valor interior.

1) El apostar destruye la calidad humana


propia.

La calidad humana depende del nivel de honestidad. El


instante en que nos vemos involucrados en apuestas, el
engaño automáticamente aparece y se pierde la honestidad.
Si no hemos hecho trampa al apostar, comprendamos que
es por que no hemos tenido oportunidad.

2) El apostar destruye la propia sabiduría.

Los apostadores que han perdido su dinero percibirán


éste como un ser supremo que les puede dar lo que sea. Se
olvidan que hay varias cosas que el dinero no puede
comprar. En cuanto tengan dinero, lo gastarán en cosas que
no valen la pena, ya que no saben cuan rápido va el dinero
de unas manos a otras o cuando lo per derán apostando. Se
vuelven derrochadores y olvidan o dejan de conocer el
verdadero calor del dinero, lo ven como un pedazo de papel.
Una vez que lo gastan, ellos ansían tener más y más dinero
por el resto de sus vidas. Y entonces en vez de usar su
inteligencia de una manera beneficiosa y positiva, la usan
para planear formas de engañar a los demás y conseguir
dinero.

3) El apostar nos hace desperdiciar el tiempo.

Cuando los apostadores empiezan a apostar se olvidan


de todo. Aún cuando ganan, ellos s e olvidan de todo,
pierden la noción del tiempo. Cuando pierden, ellos se
esforzarán aún mas en encontrar formas de recuperar su
dinero. No dejarán el juego hasta que recuperen lo perdido,
a menos que se vean forzados por el hecho de que ya
perdieron todo su dinero. Cuando ganan, nunca es
suficiente. Los días pasarán, pueden hasta perder su trabajo
u otros asuntos importantes sin siquiera darse cuenta.

4) El apostar destruye nuestra salud.

Cuando el juego empieza, los apostadores dejan de


lado las horas de sueño y descanso, no van al baño a tiempo,
comen día y noche a deshoras. Como resultado su salud se
ve comprometida y las enfermedades estarán a la orden del
día.

Como puede ver, el apostar destruye todo, incluso la


cualidad de ser humano. Incluso cuando ganan, los
apostadores, no gastan su dinero en algo beneficioso o
positivo, que pueda traer beneficio a largo plazo. De esta
manera, nunca se volverán millonarios y no encontrarán
seguridad y estabilidad en la vida.

El apostar, sin importar en qué forma, es una fuente de


destrucción e irresponsabilidad. Es mejor nunca verse
envuelto en esta actividad.

Por lo tanto, especialmente durante la frenética


temporada del fútbol, debemos cuidarnos y cuidar a
nuestros seres queridos de verse relacionados c on las
apuestas. Esto requiere un esfuerzo grupal para explicar los
efectos nocivos del apostar. Empecemos entonces a difundir
esta información. Con cada pitazo del árbitro, podemos
mantener a nuestros hijos a salvo y lejos de convertirse en
esclavos de las apuestas.
Capítulo 25

Los niños que quieren que los


padres dejen de beber alcohol

Puede que muchas familias hayan tenido que


enfrentarse al problema cotidiano de ver a sus padres
borrachos y agresivos. Una vez que está borracho, el padre
grita a los vecinos, pelea con su mujer y golpea a sus niños.
Esta situación encoleriza a la casa entera. Sin embargo,
gracias al amor y agradecimiento que los niños se sienten
por el padre, ellos quieren encontrar una solución para
ayudarlo a que deje de bebe r alcohol. Desafortunadamente,
los niños no suelen saber qué hacer. Por lo tanto, me
gustaría recomendar un método que había utilizado y que
me funcionó y que se puede utilizar como una guía práctica
con el fin de llevar a los padres en la dirección adecua da.

Había un alumno que se dirigió a Luang Phaw. Él


buscaba consejos para ayudar a su padre a dejar de beber
alcohol porque cada vez que su padre estaba borracho, se
ponía agresivo y gritaba a los vecinos. Este comportamiento
hacía que el alumno y su mad re se sintieran avergonzados y
les diera miedo salir a la calle. También, provocaba que los
vecinos les menospreciaran y que fueran antipáticos. Estas
preocupaciones los hicieron ir a buscar el asesoramiento de
Luang Phaw, a quien respetaba como a su propi o padre. Le
dio el siguiente consejo para aliviar la angustia del alumno:

“Es una pena que tu padre sea adicto al alcohol. Sería


más fácil hablar de este asunto si fuera otra persona y no tu
padre. Incluso cuando acabas de informarle de tu
preocupación, probablemente te diría que no deberías
decirle eso y que te crió desde la niñez cuando tus pies eran
tan pequeños como conchas.

Luang Phaw tuvo la misma experiencia. A pesar de ser


Bhikkhu y de haber enseñado a un gran número de
personas a dejar de beber y fumar, todavía me costó cuando
se trataba de mi propia familia. Llegaba a casa y decía,
“Padre, deje de beber alcohol, por favor, para que mejore su
salud. Puede usar el tiempo para escuchar al Dhamma y
para meditar.” Cada vez que le mencioné este tema, s iempre
me dio una respuesta negativa, pero no dejé de insistir.

Durante esta época, mi padre tenía setenta años. Yo


quería que cantara, meditara y purificara su mente y
esperaba que se fuera adquiriendo los méritos que podía
hacia el final de su vida para que llevara estos méritos
consigo a sus vidas futuras.

Cuando intenté convencerle de dejar de beber y de que


viniera al templo para hacer mérito, contestó: “¡Qué buena
idea! Si empiezo a meditar hoy y a beber al mismo tiempo,
tal vez sea más clara la me ditación.”

¿Cómo iba a responder yo si mi padre respondió así? Si


le hubiera hablado de manera muy severa, habría tenido
mal karma porque era mi padre. Pero si no le advertía, no lo
estaría compensando por haberme dado la vida. Hice
grandes esfuerzos por muchos años antes de encontrar una
solución.

Por fin, tuve que recurrir a la ingeniosidad para


resolver este problema. Empecé a decirle a mi madre que no
le comprara alcohol. Dado que no era capaz de intimidar a
mi madre, mi padre recurrió a mi hermana. E ntonces, pedí
que mi hermana no le comprara alcohol. Cuando mi padre
no pudo pedir a los hijos, recurrió a los nietos. Entonces les
dije a los nietos que no le compraran alcohol al abuelo.
Cuando los nietos no hicieron lo que quería el abuelo, se
quejaba y los regañaba. Les dije a los nietos que aguantaran
por el bien de su abuelo.

Como último recurso, mi padre obligó a los bisnietos,


los cuales tenían siete y ochos años, para que le compraran
alcohol. Yo tuve que guiar y enseñarlos, utilizando varios
métodos.

El proceso fue como cortar un árbol. No podemos


cortar la raíz principal sino que primero tenemos que cortar
el origen de las ramas. Con el tiempo, la principal se va a
morir, a medida que se cortan y se eliminan las fuentes de
nutrientes.
Al final, mi padre fue capaz de dejar de beber porque
nadie le compraba alcohol y la tienda estaba demasiado
lejos para ir a comprarlo solo. Éramos muy afortunados. Mi
padre murió a los 86 años. Dejó de beber completamente a
los 80 años, así que quedó libre del al cohol solamente seis
años antes de morir.

Si quieres ayudar a tu padre a dejar de beber, deberías


pacientemente buscar un método adecuado para él. No
deberías tirar la toalla, ni por un día, así encontrarás una
solución”.

Queridos lectores respetables, a hora que han leído


hasta esta parte, deberían darse cuenta de que es una tarea
difícil para los niños que quieren ayudar a sus padres a
dejar de beber. Cuando se trata de enseñar a los adultos,
tenemos que hacer que éstos piensen. Para evitar la
vergüenza, nos hace falta utilizar la sabiduría con el fin de
encontrar una solución adecuada según su personalidad.
Tenemos que perseverar para alejarlos de los reinos
desagradables (Apāyabhumi).

Incluso Buda, una vez iluminado, no llegó


inmediatamente a la ciud ad de Kapilavatthu para dar la
charla de Dhamma a su padre. Se dio cuenta de que si lo
hubiera hecho, su padre no lo habría escuchado. En cambio,
después de su Iluminación, Buda primero fue a enseñar a la
gente del pueblo de Magadha. Esperaba que su reputa ción
creciera y que esta noticia llegara a su padre y que los demás
hablaran de su bondad. Una vez que creció su reputación, se
sentía más seguro de que su padre confiaría en él.

Aun así, Buda tuvo que hacer un milagro, dando


vueltas, andando en el aire l ibre y provocando una poderosa
lluvia de Bokarapotta. Las personas que querían mojarse lo
hicieron, y los que no querían mojarse, no lo hicieron. Fue
un fuerte temporal de lluvias.
Después que su padre y la familia real vieran el
milagro, dejaron de ser t ercos, manifestaron su respeto al
rendir homenaje a Buda. Escucharon y creyeron en su
Dhamma, y algunos finalmente alcanzaron la Iluminación.

La moraleja del cuento de Buda es que para que los


niños tengan éxito en ayudar a sus padres a dejar de beber
alcohol, ellos mismos tienen que ser saludables y tienen que
ser modelos de conducta que la gente puede respetar. Que
tu padre reconozca que eres inteligente y competente para
que no te desprecie. Entonces, busca un enfoque apropiado
que él respete y que sea adecuado para él. Si tienes éxito,
obtendrás un mérito tremendo por haberle ayudado.
Capítulo 26

El tipo de padre que los hijos


odian

A veces cuando un padre es adicto a los Caminos a la


Perdición y no puede ser el líder del hogar, las
responsabilidades le recaen en la madre. Si esta situación
se repite con frecuencia en la familia, el hijo sentirá que su
padre se está aprovechando de su madre. A veces este
sentimiento es tan feroz que los niños comienzan a odiar a
su padre. Si la familia se está e nfrentando a este problema,
¿cuál sería la forma correcta para que los niños rectifiquen
la situación?
Hubo una vez un niño que vino a ver a Luang Phaw,
para consultarle sobre su padre.

“Luang Phaw, siento que mi padre se está


aprovechando injustamen te de mi madre. A él no le
importan sus hijos y sólo cuida de sí mismo. Solamente se
preocupa por su propio bienestar. En tiempos difíciles, él
deja que nuestra madre gane dinero para cuidarnos. Él se
queda en casa coqueteando con la sirvienta. ¿Si yo odio a
mi padre, recibiré la retribución kármica? ”

Luang Phaw le dio este consejo al niño:

“Para comenzar, está mal que tu padre no se preocupe


por sus responsabilidades. Además, el buscar comodidad
solamente para sí mismo y coquetear con la sirvie nta
quiebra el precepto del adulterio. Él está acumulando un
tremendo y mal karma por sí solo.

Los problemas que él está experimentado con tu


madre son asunto de ellos.

Luang Phaw quiere recordarte que cuando mires a tu


padre y madre, consideres est o: antes de que algo nazca,
es necesario que tenga un prototipo.

Por ejemplo si tenemos un pedazo de arcilla y un


molde para hacer una taza, obtendremos una taza cuando
pongamos la arcilla en el molde. Si tenemos el molde para
un cuenco, conseguiremos un cuenco. Si tenemos un molde
con la imagen de Buda, cuando pongamos la arcilla en el
molde conseguiremos una imagen de Buda a quien
podemos rendirle homenaje. Si este mismo pedazo de
arcilla se utiliza con moldes distintos, tendrá un
valor distinto. Si no tenemos ningún molde, esa arcilla
solamente será un pedazo de arcilla sin ningún valor
adicional.
Si la gente ha de nacer, ellos necesitan tener un
prototipo. Si el prototipo de los padres es el de una
vaca o un búfalo, el hijo tendrá que nacer vaca o
búfalo. Si el prototipo es un mono, el hijo tendrá
que ser un mono. Si el prototipo de los padres es
un ser humano, el hijo tendrá que ser humano
también.

Hazte una pregunta: ¿Si alguien que es listo a causa de


sus méritos de una vida anterior, fuera a nacer en el vientre
de un mono y llorara como un mono al nacer, cuánto podría
hacer?

O pregúntate en cual situación preferirías estar: Nacer


ser humano con padres que no te cuidan, resultando que
crezcas en un orfanato; o nacer mono, pero bien cu idado
hasta que seas grande. ¿Cuál situación es preferible?

¿Te gustaría nacer mono? No gustaríamos nacer así,


ya que los atributos que poseen los seres humanos, son los
más adecuados para la acumulación de todos los tipos de
méritos. Podremos ofrecer donaciones [dana], observar los
preceptos [sīla] y practicar la meditación [ bhāvanā].
Somos capaces de hacer todas esas cosas. Cuando
poseemos los atributos de un animal, no somos capaces de
realizar acciones que producen mérito, ni poseemos la
habilidad del pensamiento que tiene un ser humano.

Si tuvieras los atributos de un mono e hicieras sonidos


como un mono y vivieras en un bosque, no podrías hacer
ninguna acción buena. Solamente podrías ser tan listo
como un mono y tendrías que ser un líder de los monos
dirigiendo a tu grupo mientras se c olumpian de rama en
rama. No podrías hacer mucho.

¿Si tú fueras listo, pero con los atributos de una


tortuga que camina despacio, que podrías hacer? Si fueras
inteligente, por lo menos serías la tortuga más inteligente
del mundo. Sin embargo, seguirí as siendo sólo una tortuga.

Puesto que naciste un ser humano, ya sea si tus padres


te cuidan o no, debes agradecerles por darte un prototipo de
un ser humano. El criarte es una bondad extra que recibiste
como algo adicional. Más aún si te dejaron una herencia
con un valor de diez, veinte o cien millones de baht, esto
sería un mérito adicional. El hecho de que tus padres te
dieron un prototipo de lo que es ser un ser humano va más
allá de cualquier cosa que tú podrías hacer para pagárselos.
Por lo tanto, no odies o lastimes a tus padres, porque esto
significaría un karma negativo”.

Después de escuchar a Luang Phaw hablar de este


tema, pensamos en lo que le habría sucedido a este niño y a
su familia si no hubiese consultado con Luang Phaw.

No beba alcohol para que pueda ser un modelo


ejemplar para los niños. Hacer que estén
orgullosos de usted es algo que cada padre deber de
esforzarse por lograr porque cada niño espera
tener un padre que sea una buena persona, no un
alcohólico.
Parte V

La verdad sobre la vida


Capítulo 27

Papá, ¿por qué nacimos?

Un día había un funeral del tatarabuelo de una familia.


Después de que los invitados hubieran salido, el hijo
preguntó a su padre,

“Papá, si todo el mundo tiene que morir como


nuestro tatarabuelo, entonces ¿para qué
nacemos?”
El padre quien había aprendido el budismo, respondió
a su querido hijo,

“Hijo mío, en el fondo todas las personas, ricas o


pobres, reyes o ciudadanos, tienen la misma pregunta, ¿por
qué nacemos? y ¿cuál es nuestro propósito de la vida?
Antes yo también tenía dudas sobre ello ”.

Esta pregunta me ha inspirado a aprender en serio el


budismo, lo que me ha hecho entender mejor la vida:

1. La muerte no es el final. Tenemos que seguir


renaciendo incesantemen te hasta que no hayamos
eliminado todas nuestras impurezas mentales.

2. Todas las acciones tanto buenas como malas


tienen consecuencias. Pueden manifestarse en esta vida
o en la próxima vida. Hemos visto que algunas personas son
guapas y otras no. Algun os son inteligentes mientras que
otros no. Todos estos factores son el producto de su karma.

3. El infierno y el paraíso existen. El infierno es


el castigo para aquellos que hayan realizado malas acciones
mientras que el paraíso es el hogar para los que hayan
hecho acciones virtuosas.

“Y si miramos atentamente en los nacimientos de


todos los seres, veremos que son diferentes. Algunos nacen
del útero, otras especies nacen del huevo y hay aquellos
que nacen de la mugrienta agua. Todavía hay seres que
no los vemos pero hemos oído hablar de su existencia: seres
celestiales e infernales. Ellos nacen adultos y sin padres,
este proceso se llama nacimiento automático y
espontáneo.

“El conocimiento de estos tres principios lo he


aprendido del Budismo. Me inspira n a mejorar mi vida,
elevar mi moralidad y acumular mérito. Espero que en el
futuro cuando mis méritos sean completos y las impurezas
mentales queden eliminadas, yo siga a Buda hacia
Nirvana.

“Después de conocer estos principios, la


primera cosa que se me ocurrió fue cómo
protegerme a mísmo, a mis padres, a tu madre y a
todos mis hijos de las malas acciones. Y además
quería asegurar que los abuelos fueran al paraíso.
Una vez que tuve la meta puesta, empecé a examinarme.
Mientras trabajaba para soportar t odos los miembros de la
familia, busqué la manera de ganar méritos al mismo
tiempo. Encontré que en el budismo hay Dhamma
especialmente para laicos llamado Dhamma para Profanos
(Gharāvās-dhamma). Contienen cuatro virtudes:

1. Veracidad (Sacca)

“Esta primera virtud me enseñó a ser sincero y


honesto. Hoy en día mucha gente dice mentiras para ocultar
su culpa. Tú no debes hacer así. Tienes que ser responsable
de tus obligaciones y tu profesión, cumplir las promesas y
ser honesto con toda la gente. Sobre todo tienes que ser
sincero ante los principios morales como los Cinco
Preceptos. Así serás persona de confianza para
todos. Podrás andar con todo el orgullo de tu vida.
Y esto es lo que he hecho.

2. Auto-desarrollo (Dama)

“La segunda virtud es la intención constante de


mejorarse. Empecé a desarrollarme profesionalmente. Pasé
de ser una persona que no sabía nada a alguien que adquiría
conocimiento y habilidad hasta poder tener mi propio
negocio. Sé manejar el trabajo, la gente y sigo bien la
evolución en el mundo. Soy capaz de controlarme para no
cometer malas acciones; no digo mentiras, no fumo, no soy
infiel con tu madre. Estos valores adquiridos me
conducen a la sabiduría.

3. Entereza mental y resistencia física (Khanti)

“La capacidad mental y física de resistir es la tercera


virtud. No importa cuál sea el tipo de problemas, yo era
capaz de aguantar por ejemplo el cansancio, el dolor o el
desprecio. Aunque lo más difícil era tentación también yo
era capaz de resistirla. Un monje una vez dijo que quien es
capaz de resistir estas cosas, será una persona realmente
fuerte, carismática y exitosa. Así es como he adquirido mi
fortuna.

4. Eliminación de emociones negativas y


tacañería (Cāga)
“La cuarta virtud nos enseña a eliminar malos
humores y tacañería. Siempre mantengo el buen humor y
estoy dispuesto a ayudar a la gente. Esta cualidad me hace
ser querido por mis familiares, vecinos, socios y amigos.
Entonces cuando empecé mi propio negocio, ellos estaban
siempre dispuestos de ayudarme y a protegerme. Así es
como he conseguido buenos amigos.

“Gracias a estas virtudes puedo tener una vida


completa tanto profesional como familiarmente. Soy capaz
de cuidar bien de mi familia; de mi espo sa, de los hijos y de
los abuelos. Cuando los tatarabuelos estaban vivos, siempre
les preparaba comidas para ofrecer a los monjes. Hice esto
para garantizarles un destino celestial. Ahora están muertos
pero seguiré dedicándoles méritos continuamente hasta que
ya no pueda.

“Y si intentas desarrollarte moralmente como he hecho


a lo largo de mi vida, seguramente no tendrás dudas del
propósito de la vida. Vivimos en este mundo para cerrar la
puerta del infierno, para mejorarse a sí mismo y para
realizar buenos hechos hasta que podamos eliminar todas
las impurezas mentales y finalmente ir a Nirvana”.

Después de finalizar este capítulo, ¿qué le va a


decir usted a su hijo?
Capítulo 28

Los jóvenes y Buda

En los últimos años, una nueva generación de jóvenes


ha empezado a tener duda de que por qué los budistas
consideran a Buda como su último refugio a pesar de que
Buda era un hombre normal. Para aclarar esta duda, había
una interesante explicación de un venerable monje, quien la
hacía de forma simple para fac ilitar la compresión de los
jóvenes.
Un budista verdadero tiene que ser una persona de
lógica. No se cree fácilmente. Entonces a la hora de elegir
quién debe ser su maestro tiene que conocer su historia al
menos en los siguientes puntos:

1. El maestro debe tener una historia clara, no


ambigua. Debe haber la prueba histórica de su vida y no
debe quedar nada omitido ni ser poco fidedigno.

2. El maestro debe ser extremadamente sabio,


excepcionalmente virtuoso y el mejor conocedor de
la realidad de la v ida, que se conoce como la
Iluminación, por sus propios esfuerzos. Y que no se
trate de un transcriptor de otro.

3. Todas sus enseñanzas, cuando son


practicadas, son beneficiosas y dan felicidad a
todos aquellos que las practiquen.

Basado en este criterio, se verá por qué los budistas han


tomado a Buda como su mejor refugio.

1. La vida de Buda está documentada. La


biografía de Buda y de sus padres se encuentra
escrita históricamente. Era un príncipe de un estado
que todavía figura en los mapas moder nos.

2. Buda se dedicó a buscar la verdad de la vida


hasta que lograr la Iluminación. Todas sus enseñanzas
se derivan de su Iluminación. No se atribuyó su
conocimiento a otro ser poderoso n i lo recibió desde el cielo.
Buda dijo firmemente que alcanzó la Iluminación por sí
mismo. Además nunca forzó a nadie a creer en sus
enseñanzas.

3. Todos los Dhammas de Buda son verdades


universales y son atemporales. Si una persona practica
el Dhamma ciertamente esa persona se beneficiará de ello.
Al contrario, si una persona comete acciones no
recomendadas o malas sufrirá sus consecuencias. Su
Enseñanza es atemporal, es decir, se mantiene la misma
lógica en el pasado, presente o futuro. No está sujeta al paso
del tiempo.

Deseando que la humanidad se beneficiase de su


Dhamma, Buda había dedicado grandes esfuerzos,
soportando por ejemplo el esfuerzo físico extremo y
tentativas de asesinato, los cuales no afectaban su
determinación. No pensaba solamente en su logro
personal. Cuando les ofrecieron objetos de valor, in sistió
que el mérito derivado de la práctica del Dhamma era
mayor que el mérito derivado del ofrecimiento de las cosas.
Esto demuestra su ilimitada compasión.

Aquellos que practican su Dhamma concientemente,


sean monjes o laicos, podrán eliminar sus impu rezas
mentales y alcanzar el Nirvana, como él. Esto es la
prueba de que su enseñanza es correcta,
beneficiosa y accesible para personas de todas las
creencias. Quien lo practica va a obtener el mismo
beneficio que Él ha obtenido. Hay millones de personas q ue
han experimentado esos beneficios.

Sabiendo que él era un hombre normal, los budistas


toman a Buda como su último refugio sin reservas, por su
extrema sabiduría, su conocimiento sobre cómo eliminar las
impurezas mentales, su estado puro hasta ser capaz de
alcanzar el Nirvana y su ilimitada compasión para
demostrar cómo ha logrado la Iluminación. Siguen su
enseñanza sin ninguna duda esperando que un día puedan
eliminar todas las impurezas mentales y sigan a Buda hacia
Nirvana.
Capítulo 29

¿Es cierto que las buenas acciones


siempre traen consigo buenos
resultados?

Cuando alguien se enfrenta a una situación que


considera injusta, esta persona empezará a pensar “no es
cierto que las buenas acciones siempre conlleven resultados
favorables; las malas acc iones también causan buenos
resultados”. La falacia de esta idea proviene de creer que las
buenas acciones crean resultados inmediatos y de la opinión
limitada de alguien que se recompensa por su mala
conducta. A primera vista, puede que esta persona se
beneficie de los frutos de sus malas acciones. Pero si nos
fijamos bien, se preocupa de que alguien la acose o de que la
policía la arreste. Su gratificación es temporal y su temor
siempre queda.

Es importante enseñar a nuestros hijos cuando son


jóvenes que creer que las buenas acciones siempre
producen resultados favorables y que las malas acciones
producen resultados desfavorables. De lo contrario van a
dudar de este principio y tal vez piensen que hacer el bien es
solamente para los tontos, algo que repit en algunos adultos.

Sin embargo, el primer paso para lograr este objetivo


es convencer a los padres de que las buenas acciones
siempre conllevan buenos resultados y viceversa. El
siguiente episodio debería aclarar este principio.

Un laico preguntó a un v enerable monje: “Muy


venerable mío, ¿es cierto que las buenas acciones
siempre causan buenos resultados? He visto a
muchos amigos que hacen e l bien, pero nunca reciben
nada”.

El venerable monje contestó, “No pierdas el tiempo


dudando esta Ley del Karma. El Iluminado tuvo pruebas de
esto hace mil años. Pero todavía hay muchos jóvenes,
incluso tú, que dudan porque todos son precipitados. Es que
esperan ver los resultados inmediatamente y se olvidan del
sentido común.

Así que, déjame darte un ejemplo. Si ho y sembramos


un semillero de banano, ¿podemos esperar comer plátanos
de este semillero hoy? No, tenemos que esperar casi un año
mientras esperamos, tenemos que regarlo, cultivar la tierra
y cuidarlo muy bien. Si no, después de un año, es posible
que comamos plátanos descarnados.

Y si me preguntas, si sacamos provecho mientras


esperamos, la respuesta es sí. Una vez que hemos plantado
el retoño, podemos tener la satisfacción de saber que lo
hemos hecho a la hora adecuada. Podemos tener hojas de
plátano para envolver postres y flores de plátano para
comer con aliños. Y todavía tenemos que esperar un año
entero para la fruta.

La primera etapa de buenas acciones :


Una vez que hemos hecho algo bueno aunque lo vean o
no, lo que conseguimos primero es la autosatis facción.

La segunda etapa de buenas acciones :


Cuando seguimos con las buenas acciones, la segunda
cosa que conseguimos es el desarrollo de una personalidad
recta, la que es comparable a tener hojas de plátano para
envolver postres.

La tercera etapa de bu enas acciones:


Cuando seguimos haciendo las buenas acciones
durante meses o años, los frutos de las buenas acciones
empezarán a generar la fortuna y éxito. Veremos que la vida
se hace agradable y nuestros esfuerzos son provechosos.
Nos sentimos bien con no sotros mismos; esto es
comparable a disfrutar de las flores de plátano.

La cuarta etapa de buenas acciones :


Si seguimos repitiendo las buenas acciones, en breve la
sociedad nos tendrá gran estima.

Cuando plantamos el retoño de plátano, pasará por lo


menos un año antes de que podamos disfrutar de la fruta.
De igual modo, hay que esperar antes de que se reconozcan
nuestras buenas acciones, así que no podemos ser
precipitados.

La mayoría de la gente piensa que sus buenas acciones


rinden inmediatamente, entr etanto intenta dar ofrendas a
los espíritus para que desaparezcan los malos resultados. Y
cuando otra persona ha hecho algo malo, lo que le afecta
adversamente, espera que los culpables sean castigados
inmediatamente.

En realidad estas personas impaciente s esperan que


sus buenas acciones den fruta rápidamente. O sea, si éstas
dan, esperan ser recompensadas al instante y van a ser
felices. Por el contrario, cuando mienten y se les caen los
dientes instantáneamente, pensarán que esto es injusto.
Esperar solamente la llegada de buenos resultados es
solamente humano. Pero cuando no les vienen
instantáneamente, van a empezar a dudar la Ley del Karma.

Entonces, de hoy en adelante, no deberías ser


precipitado y solamente anticipar los resultados favorables.
Deberías ser imparcial. Pero para lograr esta ha zaña,
tendrás que meditar mucho ”.

De lo que ha dicho el venerable monje, vemos que


tenemos que seguir adelante con las buenas acciones. Es
decir, tienen que ser las acciones adecuadas y apropiadas,
desempeñadas al máximo e implementadas en la manera
correcta. Así podemos darles el ejemplo a nuestros hijos
para que crean con firmeza que las buenas acciones siempre
producen buenos resultados y viceversa.
Capítulo 30

Cómo las buenas acciones pueden


producir buenos resultados

Siempre ha sido difícil ayudar a los seres humanos a


resistir la tentación de cometer malas acciones y hacer
buenas acciones sin reservas y sin las esperanzas de recibir
recompensa o reconocimiento. Si los padres pueden
enseñar a los hijos a ser buenas personas, entonces no
tendrán preocupaciones porque sus hijos siempre van a
andar por el camino correcto y no van a causar problemas ni
a ellos mismos ni a los demás.
Sin embargo, es difícil enseñar a los niños a disfrutar
de las buenas acciones y detestar las malas porque les
cuesta resistir la tentación. Aparte, es imposible que los
padres vigilen a sus hijos todo el tiempo. Llega un punto en
el que los hijos tienen que gobernarse a sí mismos.

Pero para poder controlar su propio comportami ento,


ellos tienen que comprender totalmente la Ley del Karma.
Entonces, cuando se presenta la oportunidad de cometer
malas acciones y no hay nadie vigilando, van a poder
controlar sus impulsos. Y cuando surgen las ocasiones para
cometer buenas acciones, v an a hacerlas rápidamente y no
les va a importar si alguien les hace elogios o no.

Cómo enseñar a los niños la Ley del Karma

Dado que el conocimiento del escritor sobre este tema


es limitado, he encontrado un libro escrito por un venerable
monje y ésta es su explicación:

“Si me preguntan si es difícil convencer a alguien a


valorar la Ley del Karma, tendré que decir que no, no es
difícil, siempre que entiendan la esencia de esta ley.

En primer lugar, si preguntan a alguien si está


seguro que las buenas acciones siempre conllevan
buenos resultados, la mayoría dirá que no.

Empecé a estudiar el budismo antes de ser ordenado


hace cuatro o cinco años atrás. Pero hasta ese momento, no
estaba seguro que las buenas acciones siempre producían
buenos resultados. Por lo tanto, no podía controlarme. La
mayoría de las personas que dudan de esta ley no se dan
cuenta de que existen dos conjuntos de condiciones,
concretamente:

1. Las condiciones dentro de sí mismo


2. Las condiciones fuera de sí mismo

Las condiciones de aden tro

Las condiciones dentro de uno mismo tienen tres partes:

1. Conocer el objetivo
Su esfuerzo tiene que ser correcto. En realidad,
antes de entregarse a cualquier trabajo, uno tiene
que saber cuál es el objetivo de la tarea.

Y mientras lo hace, uno tiene que hacer esfuerzos para


lograrlo. Esta teoría es similar a lavar ropa. En general, la
ropa tiene más manchas en el cuello y en los puños.
Entonces, si uno friega la camisa entera y no friega en estas
zonas, ¿está realmente limpia la camisa? La respuesta es
no, dado que no se dirige el esfuerzo a los lugares
apropiados y no se alcanza el objetivo, dejando al final una
camisa sucia.

No alcanzar este objetivo es como una persona que es


ágil pero ignorante. Éste puede trabajar con ganas, pero sus
esfuerzos no logran mucho y a veces sus esfuerzos causan
más problemas. Para alcanzar esta meta, uno tiene que ser
totalmente consciente y entender el objetivo antes de
comprometerse.

2. Hacer un gran esfuerzo para conseguir la


meta

Uno tiene que hacer un gran es fuerzo en


cualquier tarea para obtener un resultado de
primera calidad. Saber el objetivo de una tarea no es
suficiente para garantizar la calidad de tal esfuerzo. Si una
persona no sigue adelante con el esfuerzo incondicional,
puede que lleve a cabo el ob jetivo, pero la calidad es mala.
Si regresamos al ejemplo de lavar ropa, sabemos que
tendremos que prestar atención al cuello y los puños y
también sabemos que tendremos que fregar 30 veces para
quitar las manchas. Desafortunadamente, si paramos a la
décima vez, hemos disminuido la mancha, pero la camisa
todavía está sucia. Se puede aplicar esta regla a cualquier
tarea. Actuar con la meta correcta, pero no al máximo,
solamente provocará un resultado mediocre.

La incapacidad de esforzarse al máximo es como una


persona inteligente, pero perezosa. Ésta sabe cual es el
objetivo y sabe de sobra cómo lograrlo. Pero a mitad de
camino, se va a perder la motivación y utilizará atajos. Por
lo tanto, saber el objetivo y perseguirlo con ganas son las
únicas maneras de obtener el mejor resultado posible. Uno
no debería ser vago ni dejar las cosas para más tarde ni
desanimarse debido a los obstáculos.

3. La tercera condición es recordar no


comprometerse tanto.

Actuar con mucho esfuerzo para lograr el


objetivo correcto no garantiza el éxito. Una persona
también debe de aplicar el grado apropiado de
esfuerzo. Es decir, no hacer mucho o muy poco
para que el esfuerzo no haga daño.

Si regresamos de nuevo al ejemplo de lavar ropa,


podemos fregar en las zonas correctas, per o en vez de fregar
30 veces, nos pasamos y fregamos cien veces, es posible que
hagamos agujeros en la camisa.

Otro ejemplo es cómo las personas exigen el máximo


rendimiento de sí mismas: trabajan mucho sin descansar
hasta que su salud está en ruinas. Adem ás, trabajan con
fondos prestados. Su trabajo les causa dolor de manera
física y económica.
Por consiguiente, para lograr el resultado adecuado,
tenemos que cumplir con tres requisitos: saber el objetivo,
hacer el esfuerzo apropiado y entender las limitac iones.

Las condiciones de afuera

Aun cuando hemos podido centrarnos en la meta,


esforzarnos totalmente y quedarnos dentro de las
limitaciones, todavía existen dos condiciones que pueden
influenciar el resultado. Son las siguientes:

1. El tiempo

Si plantamos un semillero de plátano hoy, ¿podemos


esperar comer el plátano mañana? Naturalmente no. Pero si
lo plantamos ayer y no hay plátano para comer hoy ¿quiere
decir que se malogra el esfuerzo? No, significa que es
posible que dé fruta algún día.

Después de tres o cuatro meses, aunque no haya


plátanos para comer, habrá hojas de plátano que podremos
usar para envolver. Después de ocho o nueve meses, todavía
no hay plátano para comer, pero habrá flores de plátano
para comer con aliños. Después de regar y cultiv ar la tierra
durante un año podremos disfrutar de los plátanos. Una
planta de plátano es una de las plantas que se puede cultivar
con facilidad y todavía tienen que pasar doce meses antes de
que podamos disfrutar del rendimiento. Igualmente, el
resultado favorable de las buenas acciones necesita tiempo
para cristalizarse. Entonces, cuando alguien se queja de que
se ha perseguido la meta correcta, se ha esforzado al
máximo y se ha quedado dentro de los límites y todavía no
ha visto los frutos de sus buenas a cciones, alguien tiene que
decirle que tenga paciencia.

2. La localidad
Tome, por ejemplo, el bananero que crece al lado de
una jarra grande de agua a diferencia de uno que crece en
una zona seca. El que está al lado de la jarra recibirá el agua
cada mañana cuando el granjero se levanta y se lava la cara
con agua. Después de las comidas, cuando se friegan los
platos, el bananero recibe el agua. Cuando alguien se baña,
o cuando la empleada doméstica friega la ropa o cuando se
echa el agua en la tierra al lado de la jarra, se beneficia el
árbol. Crece más rápido que los demás porque está cerca de
la fuente de agua.

Es igual cuando llevamos a cabo las buenas acciones.


Si la localidad favorece el resultado, se hará realidad más
rápido de lo que se haría en una l ocalidad menos favorable.

Pero tenemos que actuar con cautela; deberíamos


conocer la mentalidad de la gente que está a
nuestro alrededor. Al principio, puede que nos dé apoyo
moral. Pero si avanzamos tanto y tan rápido, es posible que
se pongan hostiles e intenten desmotivarnos.

Así que, cuando hacemos algo meritorio, tenemos que


prestar atención al tiempo y a la localidad y ajustar nuestras
acciones según las condiciones. Si creemos firmemente en
la Ley del Karma, podemos controlarnos y no vamos a hacer
malas acciones incluso cuando nadie nos vigila y vamos a
emprender buenas acciones con ganas en cualquier
momento.

¿Por qué algunas personas dudan que las buenas


acciones produzcan buenos resultados?

Sabemos que cuando alguien hace una buena acción


cumpliendo con los requisitos, esto dará buenos resultados,
lo que le animará a realizar más buenas acciones. Por el
contrario, si la persona hace algo malo incluso cuando
cumple con los tres requisitos, es seguro que recibirá malos
resultados.
Si nos fijamos bien, nos damos cuenta que muchas
veces no consideramos las malas acciones que hemos
cometido en el pasado y por eso cuando hacemos las buenas
acciones, a veces los resultados son malos. De igual modo, a
veces vemos a alguien que está haciendo algo malo, pero
recibe beneficios extraordinarios. Parece que se recompensa
el comportamiento malo. Dado que los resultados no son
inmediatos, algunas personas empiezan a dudar la eficacia y
la efectividad de la Ley del Karma. Se puede engañar a
cualquier persona para que piense que las buenas acciones
no traen consigo buenos resultados. En ciertos casos puede
que abandonen el buen comportamiento totalmente. Pero
tarde o temprano, las acciones inmorales van a salir a la luz
y habrá castigos, en esta vida o en la próx ima. La Ley del
Karma es universal.

Los requisitos para el ascenso

Cuando se considera un ascenso, se puede creer que el


objetivo es correcto y esforzarse al máximo manteniéndose
dentro de los límites.

Por ejemplo, un banquero recibió notas anónimas


hostiles por parte de sus subordinados. La razón de los
ataques fue que los subordinados recibieron varios
ascensos: algunos recibieron un aumento, algunos dos y
algunos tres.

Es una reacción muy humana. Si ninguno de ellos


hubiera recibido un ascenso, no ha bría problema. El
antagonismo y la envidia solamente surgen cuando los
premios son diferentes. Por lo tanto, hay que tener pautas
claras para este tipo de situación.

Cuando se le pidió explicaciones por la junta que


otorgó los asensos, el banquero pidió consejo al venerable
monje quien sugirió que debería explicarse así:
Una persona en particular no recibió un ascenso
porque perdió el objetivo. Podría haber trabajado con ganas
pero no alcanzó nada. El éxito de una empresa no proviene
solamente del trabajo duro. Además, perder la meta de
cualquier tarea puede ocasionar una crisis monetaria para
la empresa.

Es posible que otro empleado hubiera dado en el clavo,


pero no terminó en clavar. Este tipo de persona no hizo
nada malo, pero su desempeño no produjo ningún
rendimiento. Puede que se haya avanzado un poquito, pero
se jactó de haber avanzado mucho más. Por lo tanto, si
tenemos este tipo de persona como subordinado,
deberíamos estar listos para comprobar sus logros actuales.
Incluso me pasó a mí alguna ve z.

Si una persona ha cumplido con los tres requisitos, se


merece un doble ascenso. Pero la persona que solamente
se ha centrado en una meta, pero no fue capaz de llevarla a
cabo, solamente se merece un ascenso.

La persona que perdió la meta totalmente, no se


merece nada y déjele saber que tiene suerte de seguir en su
puesto.

Los que han trabajado duro pero causaron más daño


en vez de crear el bien, deberíamos decirles que trabajen
menos y que piensen más.

Según lo dicho, tendría que modificar sus esfue rzos


para encajar en distintas circunstancias y en breve
descubrirá que la Ley del Karma es absoluta y la acción
correcta, sólida y no exagerada, conllevará buenos
resultados en el momento más adecuado y oportuno”.
Conclusión

Estas enseñanzas del vener able monje deberían aclarar


la esencia de la Ley del Karma para los padres, y permitirles
así transmitir el conocimiento a sus hijos para que éstos
sean rectos estén donde estén .
Capítulo 31

Un criterio completo al momento


de dar

Hoy en día, la mayoría de las personas se inclina a


creer en la ciencia antes que nada. Sin embargo, la ciencia
sólo puede constatar lo que nuestros ojos ven. Hay tantas
cosas que nuestros ojos no ven y cuya existencia no es
comprobada por la ciencia.
Por ejemplo nuestra m ente y corazón físico son dos
entidades diferentes. Cuando nos sentimos tristes o
contentos, estos sentimientos no son de nuestro corazón
físico, sino de nuestro corazón etéreo. La ciencia aún no
puede describir donde está ubicado nuestro corazón etéreo
o a qué se parece. Nosotros no sabemos de donde vienen
nuestros sentimientos; sólo sabemos que están ahí.

El corazón físico es un órgano vital. En estos tiempos,


hay doctores que pueden detener los latidos del corazón
mientras operan a un paciente con probl emas cardiacos y
son capaces de reiniciar los latidos una vez terminada la
operación. Si el corazón físico y el etéreo fueran lo mismo, el
paciente moriría. Esto prueba que el corazón físico y el
corazón etéreo son dos cosas diferentes.

En el Tipitaka 3, Buda habló de un sinnúmero de temas


que eran desconocidos para la ciencia de esa época. Hace
miles de años él dijo que había más de un universo; en
realidad hay un número infinito de universos . Los
científicos sólo pudieron descubrir este hecho unos pocos
cientos de años atrás.

Buda también había explorado el concepto de los


méritos. Y hubiera sido lamentable que hubiésemos
rechazado esta idea rotundamente. Nosotros deberíamos
aprender esto con una mentalidad abierta ya que afecta
directamente a nuestras vi das. Nosotros no lo podemos ver,
pero podemos sentirlo dentro de nosotros. Deberíamos
apoyar el budismo y estudiar el Tipitaka para aumentar
nuestro conocimiento, para no ser etiquetados como
budistas sólo de nombre.

Basado en esta creencia, el escritor t iene fe en los


meritos y los deméritos. Los resultados desfavorables son la
consecuencia de malas acciones. Ésta es la Ley del Karma.
En tiempos difíciles nosotros podemos buscar ayuda no en
3
El Canon Budista
la ciencia, ni en la economía, ni en la política, pero sí en el
karma positivo para que nos ayude.

En el capítulo, “The Correct Way to Gain Merits”(


La manera correcta de ganar méritos) del libro Good
Question, Good Answer (Buena pregunta, buena
respuesta) escrito por el Venerable
Phrabhavanaviriyakhun , el asunto del mérito se discute en
detalle así:

“Buda dijo que hubieron tres métodos para ganar


meritos, a través de actos de generosidad, adherencia
a los preceptos y la meditación.

1. Generosidad. Es el compartir cosas útiles con


personas que se lo merecen. Sin embargo , no debería
hacerse en nuestro detrimento. Por lo general, los
budistas son generosos con los monjes y las personas
virtuosas.
2. Adherencia a los preceptos. Esto significa
mantener bajo control nuestras acciones y lo que
decimos para no herir a otros o a no sotros mismos.
Deberíamos cumplir por lo menos los Cinco
Preceptos. Cuando se de la oportunidad, como por
ejemplo el día anterior al día festivo de los budistas o
ese mismo día, además durante los retiros donde los
budistas pueden decidir seguir los Ocho Preceptos
cada día de la semana con regularidad.
3. Meditación. Ésta es una manera de purificar la
mente. Estudie el Dhamma y cante para calmar y
purificar la mente cada noche antes de dormir, de
veinte minutos a una hora.

Algunas personas establecen rutinas para asegurarse


que acumulan estos tres meritos:
- En la mañana, no comeré antes de haber
hecho el mérito de dar.
- Hoy, no voy a dejar la casa antes de haber
cumplido los preceptos.
- En la noche, no iré a la cama antes de
haber recitado los mantras y de haber
meditado.

Si una persona puede seguir esta rutina


consistentemente, podrá estar seguro que su vida nunca
caerá en la desesperanza. El futuro será brillante. Estas
tres rutinas llevarán gradualmente a la
purificación de la mente a un nivel más alto. Si
nuestra mente es clara y brillante, nos sentiremos
llenos de vida. El tener pensamientos felices nos hará
pensar, hablar y actuar correctamente.

En cuanto al primer paso para ganar meritos, yo


sugiero practicar primero la generosidad.

Buda estableció que para alcanzar el máximo mérito,


el dar debe contener los siguientes cuatro criterios:

1. Virtud del objeto. El objeto a darse debe ser


obtenido de forma legítima y moralmente apropiado, mas
no a través de medios fraudulentos.

2. La recta intenció n. El objetivo de dar es el de


deshacerse de la avaricia, del egoísmo y de la codicia. No
está hecho para ganar riquezas, renombre o
reconocimiento. El verdadero propósito es el de compartir
y ganar mérito. Ganar mérito no es codicia; en realidad
reemplaza a la codicia con generosidad.

3. El concienzudo donante. El donante debe al


menos acatar los Cinco Preceptos. Es importante que él
esté conforme y alegre antes, durante y después del
ofrecimiento y no sentirse arrepentido.
4. El virtuoso destinatario . Si el destinatario es
un monje iluminado, el mérito será enorme e instantáneo;
los efectos de este mérito se darán durante la vida actual.
Pero si el monje destinatario no está iluminado, él debería
estar siguiendo esa meta. Pero si es un laico, él debería ser
alguien que se adhiere a los preceptos.

Adicionalmente al criterio de dar, Buda también


proveyó de algunos ejemplos.

Algunos ejemplos o ilustraciones que Él impartió a los


monjes confirman que el resultado del dar depende de
cuatro criterios y que su efectividad depende de cómo se
cumple cada criterio en cada instancia. Mientras más
virtuoso el destinatario, más mérito se acumulará como
resultado. Si el destinatario tiene como único pensamiento
esforzarse hacia la Iluminación, el beneficio a la p ersona
generosa será inmenso e inmediato. Quiero que lea el
Tipitaka, el Suttentapitaka, como por ejemplo el
Kuttakanikaya Vimaanvattuu, para ver si mi observación
es correcta”.

Esta sección de Good Question Good Answer (Buena


Pregunta, Buena Repuesta) por Venerable
Phrabhavanaviriyakhun, como se lo citó en este capítulo,
da una visión y aliento a los lectores para que hagan mérito
y para que cultiven este hábito en sus hijos, mientras estos
sean jóvenes. En las horas finales de nuestras vidas, no
importa que tan educados seamos o cuánto dinero
tengamos, sólo nuestros méritos espirituales nos pueden
ayudar.

El mérito no está a la venta. Si lo quiere, tiene


que obtenerlo por sí mismo mediante sus propias
acciones.
Capítulo 32

Enseñar a los hijos a vivir b ajo los


Cinco Preceptos

No es una exageración decir que enseñar a los hijos a


acatar los Cinco Preceptos es la responsabilidad más
importante en la vida de los padres, éstos se lo deben a sus
hijos y a la sociedad. En este sentido, ellos son los que
determinan el futuro de sus hijos y del país. ¿Por qué este
asunto es tan importante?
Memorizar los Cinco Preceptos pero no acatarlos

Los budistas son capaces de recitar los Cinco


Preceptos, pero al preguntarles el significado de la
palabra, “precepto”, la mayoría de ellos no lo sabe. Si los
adultos no pueden contestar estas preguntas, ¿Cómo
podemos esperar que las generaciones más jóvenes vean la
importancia de observar los preceptos? Esta desafortunada
situación ha generado que más personas rechacen l os
preceptos hasta convertir la ignorancia en una norma. Si
una persona vive con esos preceptos, es considerado un
extraño. Esto ha reducido aún más el número de personas
que estudian los Cinco Preceptos, el legado moral que han
dejado nuestros ancestros.

Debido a que no han recibido guía alguna de los Cinco


Preceptos en sus hogares, los jóvenes están más vulnerables
a caer en las tentaciones que encuentran en la sociedad.
Esto ha dado como resultado problemas de
comportamiento tales como peleas, prosti tución, estafa, uso
de drogas ilegales y muchos más. La causa de estos males
sociales ha sido la ignorancia de los preceptos. Los padres
están listos para señalar, castigar a sus hijos y culpar a la
sociedad o a la televisión y llegar a la conclusión que l a cura
viene de otra fuente.

Aún cuando estos jóvenes hayan sido rehabilitados y


enviados a sus hogares desde la correccional juvenil, todavía
no han sido instruidos sobre los Cinco Preceptos. Por lo
tanto, los jóvenes reincidirán en el mismo ciclo de mal
comportamiento y hasta en actividades criminales. Ellos
crecerán para convertirse en personas problemáticas y en
amenazas para la sociedad.

Si fallamos en descubrir la raíz del problema, es decir,


fallar en la cultivación del concepto de los Cinco Precep tos
en los niños, entonces ¿cómo podemos romper el ciclo de
angustia social?
Los Cincos Preceptos que los padres deben conocer

Enseñar a los hijos a cumplir con los Cinco Preceptos


es la responsabilidad más importante de los padres para
ayudar a contrarrestar la descomposición social. Sin
embargo, antes de ser capaces de hacerlo, ellos deben saber:

1. ¿Qué es un precepto?
2. ¿Qué tienen que ver los Cinco Preceptos con la
naturaleza humana?
3. ¿Por qué el incumplimiento de los Cinco
Preceptos aleja a una persona d e la naturaleza
humana?

La comprensión de estos tres puntos permitirá a los


padres inculcar los Cincos Preceptos a sus hijos.

¿Qué es un precepto?

La palabra precepto significa naturaleza y todo


tiene su propia naturaleza. La lluvia cae durante la
temporada de lluvias, de lo contrario no es natural. El
caballo siempre permanece de pie, aún mientras duerme. Si
se recuesta en el suelo significa que está enfermo y por ende
no se encuentra en su estado natural. En conclusión, el
verdadero significado de la palabra precepto es
preservar la naturaleza del ser humano en sí
mismo y evitar causarse problemas a sí mismo o a
los demás.

¿Cuál es la naturaleza de los seres humanos?

La naturaleza de los seres humanos consiste de cinco


características.

1. Por naturaleza, el ser humano no matará.


Aquel ser humano que quita una vida se ha desviado
de la naturaleza humana y se ha convertido en un ser con
naturaleza animal, como los tigres, osos o cocodrilos que
necesitan matar para sobrevivir. Por ende, el Primer
Precepto recuerda al ser humano que no debe
matar para poder conservar su naturaleza.

2. Por naturaleza, el ser humano no robará.

Robar comida o pelear por ella son características de la


naturaleza animal, pero los humanos no tienen esa
necesidad, pues somos capaces de producir nuestros
propios alimentos y ofrecer algo a cambio de los mismos.
Es así que el Segundo Precepto nos recuerda no
robar, actuar de manera corrupta o cometer fraude
para poder conservar nuestra naturaleza.

3. Por naturaleza, el ser hum ano no cometerá


adulterio.

Los animales, quienes por naturaleza son incapaces de


controlarse y sentirse satisfechos con una sola pareja,
buscarán aparearse cada año con la pareja de alguien más.
Algunos animales inclusive luchan hasta la muerte por
satisfacer este instinto durante la temporada de
apareamiento. Pero esta actitud no constituye parte de la
naturaleza humana. Al no estar gobernado únicamente por
instintos, el ser humano puede estar satisfecho con una sola
pareja. De ahí que el Tercer Precepto nos advierte no
cometer adulterio para poder conservar nuestra
naturaleza.

4. Por naturaleza, el ser humano no mentirá.

Las personas siempre deben decir la verdad, ser


honestos y sinceros con los demás. Por ende, el Cuarto
Precepto nos recuerda que no de bemos mentir.
5. Por naturaleza, el ser humano no consumirá
sustancias intoxicantes .

Muchos animales poseen una mayor fortaleza física


que los humanos, pero no son capaces de encauzar esta
fortaleza hacia metas significativas debido a que carecen de
conciencia y por eso actúan de acuerdo a sus instintos. Por
ejemplo, los animales no se preocupan por cuidar de sus
padres. Pero los seres humanos tienen esa conciencia que se
evidencia en sus sentimientos de gratitud y amor hacia sus
padres.

La conciencia es perenne; ella puede soportar hambre,


fatiga y enfermedad. Pero sustancias intoxicantes como el
alcohol y las drogas pueden mermar todas estas cualidades.
Una persona intoxicada es capaz de cometer actos terribles,
incluso de atacar, herir o matar a sus p adres; aquella
persona es falaz y está más cerca a ser un animal que un ser
humano. El Quinto Precepto nos advierte no
consumir sustancias intoxicantes.

Los Cinco Preceptos son:


1. No matará.
2. No robará.
3. No cometerá adulterio; será fiel a su pareja.
4. No mentirá, pronunciará profanidades, dirá cosas
sin sentido, ni usará palabras hostiles.
5. No consumirá sustancias intoxicantes tales como
drogas adictivas y alcohol.

Estos preceptos son indispensables para mantener la


paz en la Tierra.

Cuando se hace caso omiso a estos preceptos

Los Cinco Preceptos han estado aquí desde antes del


propio nacimiento de Buda, quien, a través del poder
incomparable de Su Iluminación, descubrió la existencia de
los Preceptos y nos transmitió este conocimiento. Dichos
preceptos también pueden ser utilizados para cuantificar el
comportamiento humano, de la siguiente manera:

Si se obedecen los Cinco Preceptos, entonces se es


100% humano.

Si únicamente se logran obedecer cuatro preceptos,


entonces se es 80% humano y 20% an imal.

Si únicamente se logra obedecer tres preceptos,


entonces se es 60% humano y 40% animal.

Si únicamente se logra obedecer dos preceptos,


entonces se es 40% humano y 60% animal.

Si únicamente se logra obedecer un precepto, entonces


se es 20% humano y 80% animal.

Si no se siguen ninguno de los preceptos, esa persona


ya no es un ser humano; únicamente existe en forma
humana, pero no tendrá paz ni felicidad. Existe sólo para
generar problemas para sí mismo y para la sociedad. Por
desgracia, en la actual idad es común encontrar cada vez
más personas que no cumplen con los Cinco Preceptos,
razón por la cual esto se ha vuelto aceptable. Esta falta de
código moral ha convertido a un país pacífico en uno
violento, fraudulento y lleno de adulterio y aunque los
ciudadanos de este país estén atemorizados y descontentos
nadie puede hacer nada para remediarlo.

Si los padres no se preocupan por enseñarles a sus


hijos a vivir su vida de acuerdo a los Cinco Preceptos, no se
puede esperar que la sociedad progrese ni qu e dichos niños
crezcan para convertirse en adultos responsables. Educar
a los niños a vivir cada día de acuerdo a las
enseñanzas de los Cinco Preceptos es la mayor
responsabilidad que los padres poseen para
proveerles de un futuro mejor, además de ser
esencial para alcanzar la paz, felicidad y
prosperidad de la sociedad en su conjunto.
Capítulo 33

Hacer que los Cinco Preceptos


sean fáciles de entender para los
niños

Una vez tuve la oportunidad de observar a un


venerable monje simplificando los Prece ptos para los niños.
El escritor estaba impresionado con el método y le gustaría
compartir esta información con los padres a forma de pauta.
Fue enseñado en forma de diálogo entre el profesor y los
niños:
El origen de los Cinco Preceptos

“Hoy, yo, como un venerable, les voy a enseñar un


aspecto fundamental y muy importante de nuestras vidas:
los Cinco Preceptos.

Nadie sabe el origen de los Cinco Preceptos. Han


existido mucho antes del nacimiento de Buda y Él dijo que
todos debían cumplirlos.

¿Ustedes saben qué son los Cinco Preceptos?

1. No matará.
2. No robará.
3. No cometerá adulterio.
4. No mentirá.
5. No consumirá drogas.

Les voy a explicar a ustedes como aparecieron los


Cinco Preceptos. Con suerte cuando crezcan y empiecen a
molestarse ya sea por pequeños o grandes problemas esta
enseñanza puede ayudarles a controlar su temperamento.

¿Cómo apareció el Primer Precepto, no matará?

El venerable monje: ¿A quien aman más que a nadie?

Los niños: A mi madre y a mi padre, señor.

El venerable monje: ¿Hay al guien a quien amen más que a


sus padres?

Los niños: Sí, a mí mismo, señor.


El venerable monje: Sí, correcto, todos nos amamos más
que a nadie. ¿Y las aves de corral? ¿Ellos también se aman a
sí mismos?

Los niños: Sí, señor.

El venerable monje: ¿Están seguros?

Los niños: Sí, señor.

El venerable monje: ¿Cómo pueden estar tan seguros?


¿Acaso ellos les dijeron eso?

Los niños: No, no lo hicieron.

El venerable monje: ¿Entonces cómo saben que se aman a sí


mismos?

Los niños: Porque cuando uno los persigu e, ellos corren por
sus vidas.

El venerable monje: Así es, los animales son iguales a


nosotros. Cuando alguien los amenaza, ellos correrán por
sus preciadas vidas. Aunque no lo puedan decir, nosotros
nos podemos dar cuenta. Pero y los otros animales así c omo
los cerdos y los gatos, ¿ellos también aman sus vidas?

Los niños: Sí, señor.

El venerable monje: Nosotros amamos nuestras vidas, al


igual que lo hacen los animales, ya sean pájaros, cerdos o
gatos. No hay nadie, ni siquiera animal que no se ame a sí
mismo. Al reconocer este hecho, es como se originó el
Primer Precepto, que nadie debe quitar la vida de ninguna
otra criatura, ni siquiera la de los animales.
¿Como apareció el Segundo Precepto, no robará?

El venerable monje: Ahora quiero que piensen e n lo que


necesitamos para vivir.

Los niños: Aire, comida y agua, señor, y también medicina,


ropa y una casa. También necesitamos de dinero para vivir.

El venerable monje: Tienen razón. Aunque todos ustedes


estén en la escuela, sus padres tienen que prove erles:
1. Ropa
2. Comida
3. Refugio
4. Medicina

En la terminología budista, estos se llaman los Cuatro


Requisitos, los cuales todo ser humano necesita.

A pesar de estas cosas, tenemos muebles, zapatos, y


muchas cosas más que necesitamos para tener una vida a
gusto. Si alguien nos quitará estas cosas, ¿podríamos ser
capaces de sobrevivir?

Los niños: No, no podemos.

El venerable monje: Correcto. No nos tienen que matar,


pero si nos roban o nos quitan estas cosas que nos
pertenecen, entonces tampoco podríamos sobrevi vir. Así es
como el Segundo Precepto apareció, es porque necesitamos
de estas posesiones para sobrevivir.

¿Cómo apareció el Tercer Precepto, no cometerá el


adulterio?

Si otras personas no nos quitan nuestra vida ni


nuestras posesiones, podemos vivir u na vida feliz. Sin
embargo, si nos quitan lo que más amamos, es decir,
nuestros esposos y esposas, nuestros hijos e hijas, vamos a
sufrir una tristeza muy grande. Ésta es la idea del Tercer
Precepto, que nadie debe quitarle a nadie la vida de un ser
amado, por eso es que no debemos cometer adulterio.

¿Cómo apareció el Cuarto Precepto, no mentirá?

Piensen en todas esas personas a quienes aman, sus


padres, sus amigos, sus hermanos y hermanas, su profesor e
imagínense que descubren que ellos no son honesto s con
ustedes. Su reacción sería que ya no los quisieran más.

El venerable monje: ¿Ustedes tienen hermanos?

Los niños: Si, tengo.

El venerable monje: Si se enteraran que él les mintió, ¿se


molestarían con él?

Los niños: Si lo haría.

El venerable monje: ¿Si se enteraran que les mintió, se


enojarían con él?

Los niños: Sí nos enojaríamos.

El venerable monje: Y si ustedes le mintieran a él, ¿creen


que se enojaría?

Los niños: Si se enojaría.

El venerable monje: ¿Alguna vez le han mentido a su


hermano?

Los niños: Si, si les hemos mentido.


El venerable monje: Recuerden esto, si le mienten a alguien,
esta persona los amará menos cada vez y viceversa. A nadie
le gusta la deshonestidad, así que no deberían mentirle a
nadie. Es así como el Cuarto Precepto s e originó.

¿Como se originó el Quinto Precepto, no consumirá


intoxicantes?

Buda nos dio estos principios para considerar:

1. Aquellos que no matan criaturas vivientes, sean estos


animales pequeños, grandes u otros seres humanos, se
han ganado el mérito e xtraordinario de brindar
seguridad a todos los seres vivos.

2. Aquellos que no roban se han ganado el mérito


extraordinario de brindar seguridad a la propiedad.

3. Aquellos que no cometen adulterio se han ganado el


mérito extraordinario de brindar seguridad a sus
cónyuges.

4. Y aquellos que no mienten ya se han ganado el mérito


extraordinario de brindar sinceridad.

Así que cuando acatamos estos primeros cuatro


preceptos nos ganamos méritos considerables en cuatro
maneras diferentes. Pero cuando se trata del Qu into
Precepto todos deben prestar más atención para
comprender la lógica detrás de éste.

Cuando una persona no les quita la vida a otros, ni roba,


comete adulterio o miente, entonces debe tener la
conciencia para abstenerse de estos comportamiento s. Sin
su carácter, esta persona no sería capaz de evitar cometer
estos pecados.
Nuestra conciencia puede ser muy fuerte, pero
desafortunadamente también se puede debilitar. Por
ejemplo, un estudiante rendirá un examen el día siguiente;
de pronto se siente abrumado con fiebre. Al tomar una
medicina logra sentirse un poco mejor y por lo tanto es
capaz de levantarse y terminar de estudiar para su examen.
La conciencia del estudiante es fuerte .

Sin embargo, tratándose de la misma persona, la


conciencia inquebrantable puede romperse si el estudiante
consumiera intoxicantes como licores, cerveza, anfetaminas
y otros. Ya que los intoxicantes pueden destruir nuestra
conciencia y llevarnos a cometer pecados, necesitamos el
Quinto Precepto para mantener nuestra conciencia y
nuestra dedicación a los otros Cuatro Preceptos intactas.

Déjenme darles otro ejemplo: un niño de


aproximadamente su edad tiene un padre que es capaz de
matar a los pollos y patos de la granja cuando está ebrio. En
ocasiones, el padre golpe a a su hijo y usa lenguaje ofensivo.
Pero cuando está sobrio es un buen padre. Entonces quiero
que recuerden esto, no consuman alcohol o drogas cuando
crezcan.

¿Cómo se mantienen intactos los Cinco Preceptos?

Cuando era estudiante empecé a educarme y a


examinar los Cinco Preceptos. Así es como lo hacía:

Antes de que me ordenara, yo solía llevar una imagen


de Buda colgada del cuello. Cada mañana antes de ir a la
escuela, yo tomaba al Buda en mis manos y le mostraba mis
respetos cantándole:

“Namo tassa bhakavato arahato samma


sambuddhassa” tres veces.
Y de ahí pensaba en mis promesas con la imagen de
Buda.

1. Hoy no mataré.
2. Hoy no robaré.
3. Hoy no cometeré adulterio.
4. Hoy no mentiré.
5. Hoy no consumiré alcohol o usaré drogas.

Una vez que hacía esto, podía irme a la escuela. Al


principio era capaz de observar los Cinco Preceptos por un
día, pero a veces no podía. Sin embargo, después de un año
y medio era capaz de observar los Cinco Preceptos todos los
días. Cuando fui capaz de acatar los Cinco Preceptos po r
seis años seguidos, me ordené. ¿Creen ustedes que lo
pueden hacer también? Yo creo que sí.

Conclusión

Déjenme repasar los Cinco Preceptos una vez más


con ustedes.

¿Por qué no deberíamos matar? Porque todas las


personas aman sus vidas.

¿Por qué no deberíamos robar? Porque todas las


personas necesitan posesiones para vivir cómodas. Si ciertas
cosas se nos quitaran, no seríamos capaces de sobrevivir. Y
si lográramos vivir, nuestras vidas estarían llenas de
privaciones.

¿Por qué no deberíamos comet er adulterio? Porque


todas las personas aman a su familia y amigos.

¿Por qué no deberíamos mentir? Porque todas las


personas aman la honestidad y la veracidad.
¿Por qué no deberíamos consumir intoxicantes?
Porque estos destruyen la conciencia. Sin nu estra
conciencia, nosotros seríamos capaces de violar los otros
Cuatro Preceptos. Por lo tanto, si quieren crecer y ser
buenas personas, deben acatar los Cinco Preceptos”.

El escritor espera que esta explicación sea de ayuda


para que los padres enseñen a sus hijos a examinar los
Cinco Preceptos, para que estos crezcan y se conviertan en
buenas personas. El logro del que nos debemos sentir
más orgullosos es el de criar a nuestros hijos para
que sean adultos correctos.
Capítulo 34

Inspirar la afición por la


meditación en los hijos

La meditación es la manera más efectiva de entrenar a


la mente para enfocarse. Esta práctica ayuda a fortalecer la
mente para que no se distraiga. Los niños que tienen una
buena formación ética, pero que les falta instruc ción sobre
la meditación, son propensos a caer en la tentación porque
carecen de esa fortificación adicional.
Los padres deberían empezar a inspirar en los niños el
gusto por la meditación desde una edad muy temprana.
Cuando tienen la mente enfocada, pu eden aceptar consejos
con facilidad. La ética que los padres inculquen en ellos
florecerá y ellos podrán lidiar con la incertidumbre con
claridad.

Sin embargo, algunos padres creen que se debería


permitir que los niños piensen libremente y que no se deb e
empezar a entrenarlos para meditar con tan sólo dos o tres
años de edad porque esto es demasiado restrictivo. Con
respecto a esto, un venerable monje explica cómo la
meditación afecta a los niños pequeños:

“Primero, permítanme preguntarles lo siguiente ; ¿hay


alguna persona en este mundo que no quiera ser buena
persona? No, nadie. Incluso un ladrón quiere ser bueno,
pero desafortunadamente, él cree que robar es una
actividad buena. Una persona tiene que entender la
diferencia entre lo bueno y lo malo. Si n esta noción, la
sociedad sería un caos.

“Todos los padres desean que sus hijos se conviertan


en buenas personas, pero dejarlos hacer lo que quieran y
esperar que se conviertan en buenas personas por sí solos
no es la manera correcta. Los padres tienen que dar buen
ejemplo mientras les enseñan a los hijos, por ejemplo, a
hablar con educación, a demostrar humildad y enseñarles a
hacer reverencias a los pies de sus padres y abuelos.

“Al principio, es posible que los niños no entiendan


por qué tienen que demostrar respeto, pero por lo menos
estarán observando buenos modales. Y cuando tengan edad
para comprenderlo, deberíamos explicarles por qué deben
respetar a sus padres, abuelos y maestros. Si no les
enseñamos a hacer reverencias a los pies de sus pad res
cuando son jóvenes, es muy probable que no lo hagan
cuando sean mayores. Puede que sepan que es algo bueno,
pero les dará demasiada vergüenza hacerlo. Algunos de los
adultos que nunca aprendieron a hacer una reverencia a los
pies de sus padres se senti rán muy incómodos al hacerlo y
hasta a los padres les dará mucha vergüenza que sus niños
lo hagan, sólo porque no están acostumbrados a ello.

“Inclinarse es una señal de respeto que significa que


estamos conscientes de la bondad de las personas ante las
cuales nos inclinamos. Y tiene que ser un respeto muy
profundo, tan profundo que simplemente no podemos estar
parados sin demostrar el respeto que sentimos hacia ellos.
Una vez reconocida la bondad de esas personas, tenemos
que observarlas e imitarlas.

“Si desde una edad temprana no nos han mostrado


cómo hacer reverencias, nos convertiremos en personas
muy egoístas. Algunas personas presumidas no pueden
reconocer la virtud de los demás.

“Hoy en día vemos que muchas personas tienen esta


actitud negativa y siempre buscan los defectos de los demás;
los alumnos hacia los maestros y viceversa, los superiores
hacia los empleados de menor rango y entre los compañeros
de trabajo. El sentido de comunidad y armonía se deteriora.
La única manera de dar marcha atr ás en esta tendencia es
enseñar el respeto y ver las virtudes de los demás.

“Por lo tanto, si queremos que los niños se conviertan


en buenos ciudadanos, hay que empezar el proceso desde
muy temprano. En cuanto aprendan a hablar, sólo se les
debería enseñar buenas palabras. Llévelos al templo y
déjelos aprender a meditar visualizando la imagen de Buda.
Cuando crezcan, podemos estar seguros que nuestros hijos
al enfrentarse a problemas, se mantendrán con calma y
tranquilidad.

“¿Puede una persona cambiars e a través de la


meditación? Cuando abrimos los ojos, vemos a otras
personas, pero no a nosotros mismos. Si queremos vernos a
nosotros mismos, tenemos que cerrar los ojos.

“Si sabemos meditar y somos capaces de calmar la


mente, sabremos lo que es bueno y malo. En vez de
malgastar el tiempo criticando a los demás, nos
analizaremos e intentaremos mejorar nuestras propias
deficiencias y mejorar así nuestras vidas”.

La enseñanza del venerable monje respalda la noción


de que enseñar a los niños a meditar des de una edad
temprana les permitirá enfocar y entrenar la mente. No
vacilarán ante las tentaciones sino que se mantendrán
firmes sobre la base sólida de la moral y esto gracias a la
orientación que han recibido de sus padres.

Durante las vacaciones de ver ano, enséñeles a meditar


en un campamento de verano de Dhamma que se ofrece en
varios templos. Sentar una base de sólida moralidad
durante la niñez les beneficiará a lo largo de su vida.
Capítulo 35

Ser ordenado para honrar a sus


padres es meritorio

En esta época en que las tentaciones están más


presentes que nunca y la presión para ganarse la vida es
constante, es muy raro encontrar alguna familia que ordene
a su hijo monje budista, al menos durante la Cuaresma
Budista 4. Sus padres deben haber acu mulado una gran
virtud, hecho que no se da muy a menudo ya que el primer
requisito es la buena voluntad del hijo. La ordenación no se
realiza a cambio de un coche nuevo o de una ganancia
económica.

4
Retiro anual budista durante la temporada de lluvias
El anhelo de ver a su hijo vestido con la túnica color
azafrán

El escritor está observando un cartel colocado por la


sociedad budista que invita a los estudiantes a que sean
ordenados durante sus vacaciones de verano. El cartel
muestra una madre de unos sesenta años que lleva una
pequeña corona de flores en la s manos y la expresión de su
cara desborda alegría. Su hijo, vestido con una túnica blanca
de novicio, se inclina a sus pies como muestra del gran amor
y respeto que siente por ella, pidiendo permiso simbólico
para ser ordenado.

El pie de foto dice: “Ord énese mientras su madre siga


viva para poder demostrarle toda su gratitud”.

Toda madre que vea este cartel deseará que su hijo se


ordene al menos una vez y todo hijo que lo vea sentirá la
motivación de ordenarse.

El escritor se ha ordenado durante much as Cuaresmas


Budistas y puedo atestiguar que la alegría de la ordenación
no tiene límite. He aprendido que podemos ser felices sin
posesiones mundanas. Un metro cuadrado para sentarse y
estar de pie y dos metros cuadrados para dormir pueden
hacer más feliz que un millón de baht. Este tipo de felicidad
no se puede comprar.

Además, obtuve un doble beneficio. Al principio, mi


ordenación era para mostrar mi gratitud hacia mis padres.
Por suerte, descubrí el sentido de la vida.

Los obstáculos hacia la ordena ción

Ordenarse y dar a los padres la oportunidad de


alegrarse de los méritos no es algo que ocurra fácilmente. La
ordenación no es algo que uno pueda llevar a cabo cada vez
que quiera, sino que requiere una acumulación de méritos
durante la vida de una persona, así como cumplir con los
requisitos establecidos en la sección referente a la disciplina
del Tipitaka.

Por desgracia, mi padre falleció cuando yo era


pequeño, así que no llegó a ver a su hijo con la túnica color
azafrán. Yo sufrí dos incidentes que casi me quitaron la vida
antes que a mi padre. La primera vez fue cuando tenía poco
más de diez años. Estaba soñando despierto e
imaginándome que era un guerrero con mi espada en una
película china de artes marciales, cuando el gorro que
llevaba puesto me impidió ver una motocicleta que venía
hacia mí. Por suerte, la motocicleta venía muy despacio. Me
golpeó, pero pude levantarme e irme caminando con
heridas leves. Ese fue mi primer tropezón con la
muerte.

La segunda vez fue cuando me dio una apendic itis por


la noche. Mi madre y mi abuela me llevaron al hospital. Sin
embargo, el médico no me diagnosticó correctamente. Si
hubiera tenido alguna infección interna, mi familia habría
tenido que estar organizando mi funeral. Estuve sufriendo
durante quince horas mientras el médico me puso un
tratamiento para un dolor de estómago común. En cuanto
se dio cuenta de que tenía apendicitis, me operaron
inmediatamente.

Cuando desperté de la anestesia a la mañana siguiente


estando todavía aturdido, vi a otro enfe rmo en la cama
contigua que había sufrido el mismo problema. Pero su caso
debía haber sido mucho peor que el mío porque todavía
tenía tubos para eliminar toxinas. Me sentí afortunado.
Cuando me di la vuelta, vi la cara de dos señoras mayores
con expresión de gran alivio. Entonces pensé: “mi madre y
mi abuela deben haber pasado toda la noche aquí
cuidándome”.
Justo entonces sentí que aquellas dos mujeres debían
quererme mucho. Eran las únicas que me querían con
todo su corazón, era un amor desinteresado qu e no
esperaba nada a cambio. Me pregunté si yo había hecho
algo para devolverles ese amor.

Y la respuesta fue: “muy poco”. Justo entonces me di


cuenta de que no debía hacer nada que pudiera hacerles
daño si podía evitarlo.

Estas dos situaciones me infl uenciaron bastante a la


hora de ordenarme. Quería que mi madre y mi abuela me
vieran vestido con la túnica color azafrán. Quería darles la
posibilidad de acumular méritos y quería que no tuvieran
que preocuparse más por mí ya que me educarían en el
Dhamma.

Caminamos hacia nuestra tumba

Decidí ordenarme en cuanto terminé la universidad.


Cuando pensaba en la vida, todo me parecía impredecible.
Podíamos ver a alguien por la mañana y esa misma noche,
podría haber muerto.

He visto a padres organizar funera les para sus hijos y


abuelos para sus nietos. No debería ser así y yo desde luego
no querría que esto me ocurriera a mí, pero como la vida es
tan impredecible, mi prioridad fue la ordenación. Además,
la salud de mi madre se estaba deteriorando, mi abuela s e
estaba volviendo senil y si retrasaba más mi ordenación, las
dos podrían estar demasiado débiles como para
presenciarlo. Tenía que hacerlo lo antes posible.

Entonces, cambié de decisión. Cuando me gradué, me


ofrecieron un buen empleo, la cantidad de tr abajo me
consumía y mis deseos de ordenarme quedaron de lado.
Debieron ser mis méritos del pasado los que vinieron a
ayudarme durante un día, ya que entonces, el venerable
monje que conocía mis anteriores intenciones de
ordenarme vino a guiarme.

Lo primero que me dijo fue: ¿Qué te parece si te


ordenas durante la próxima Cuaresma Budista?

Dudé por un momento, pero al final respondí:


“Todavía tengo muchos trabajos que entregar, no creo que
pueda irme ahora”.

Como se esperaba mi respuesta, replicó: “Si mueres


hoy, tus jefes no se preocuparán lo bastante como
para dedicarte ningún mérito”.

Su respuesta fue como una luz en la oscuridad. Me hizo


pensar que si moría hoy mi madre y mi abuela serían las
únicas que se preocuparían lo suficiente como para
compartir sus méritos conmigo. Cuando esta idea pasó por
mi cabeza, inmediatamente decidí ordenarme
durante la Cuaresma Budista.

Méritos de la Ordenación

Tras mi ordenación, aprendí que los tailandeses creían


que a través de la ordenación se devuelve la deu da personal
de gratitud a los padres. Pero todavía quedan algunos
tailandeses que no piensan lo mismo. ¿Cómo puede un hijo
recompensar a sus padres cuando ha estado llevando a cabo
tareas virtuosas él mismo mientras sus padres estaban en
casa? Más bien parece que los hubiera abandonado. Alguien
le hizo la misma pregunta al venerable monje y ésta fue su
respuesta:

“Todo el mundo tiene sus propias creencias, pero antes


de creer en algo, hay que ver la lógica que hay detrás. En el
budismo, creemos que “todo aquel que lleve a cabo
buenas acciones recibirá buenos resultados y
viceversa. Recogemos lo que sembramos”.
“Cuando un hijo se ordena, recibirá el mérito por
intentar purificarse según las enseñanzas de Buda. Los
padres reciben un mérito distinto: prime ro, recibirán
mérito por apoyar la ordenación de su hijo. En segundo
lugar, una vez que su hijo sea monje y deje de ser motivo de
preocupación para ellos, irán al templo a ofrecer comida, no
sólo para su hijo, sino también para los demás monjes.
Como consecuencia, ganarán mérito por su generosidad.
En tercer lugar, algunos padres, por preocupación por sus
hijos, pasarán más tiempo en el templo. De ese modo,
escucharán las enseñanzas de Buda y conocerán mejor lo
que está bien y lo que está mal. Al elevar su s criterios
morales, ganarán más mérito. Por último, mientras estén en
el templo verán cómo otras personas siguen los preceptos y
meditan. Si siguen su ejemplo, ellos también ganarán
mérito.

“No hay duda que los padres ganarán un mérito de una


naturaleza diferente a la de su hijo. Sin embargo, el mérito
no llega automáticamente si sólo se sientan y están ociosos.
Hay monjes que tienen que ir a la casa de sus padres para
convencerles de que sigan los preceptos. Sólo si siguen el
ejemplo de su hijo ganarán mérito”.

Me impresionó mucho su explicación, que demostraba


que la ordenación de un hijo hace que sus padres vayan al
templo y practiquen sus virtudes, y además insta a los
monjes a que convenzan a sus padres para que acumulen
méritos.

La Ordenación de los seres queridos

En la actualidad, la mayoría de los hombres suelen irse


lejos de sus padres para lograr sus objetivos en la vida. Si
esto continúa así, será poco probable que se ordenen para
honrar a sus padres o madres. Para evitar esto,
deberíamos ser ordenados para honrar a nuestros
padres incondicionalmente, para que su amor
absoluto por nosotros sea recíproco.

Si nos fijamos en la vida de la gente, veremos que


hemos trabajado mucho para los demás y que algunas
personas han trabajado incluso má s de lo que nosotros
hemos trabajado nunca por nuestros padres. Si somos
capaces de ofrecer todo eso a los demás ¿por qué no somos
capaces de darles más a nuestros propios padres?

Este verano será el momento ideal para hacerlo. Tal y


como dijo un sabio d iscípulo budista: “Todo hombre
debería ser un intelectual en asuntos seculares y un
sabio del budismo. De este modo su vida no se
desperdiciaría”.
Parte VI

El final de la vida
Capítulo 36

El valor de la vida

Aunque somos conscientes de que no viviremos mil


años a veces nos dejamos llevar por la corriente de placeres
mundanos que son la causa de nuestro sufrimiento. A veces
hacemos cosas de las que después nos arrepentimos. Como
todo el mundo cuenta los días de vida que le quedan, mucha
gente se habrá preguntado: “ ¿cómo se vive la vida al
máximo y cómo se vive cada minuto siendo
plenamente consciente?
Un monje muy respetado tenía una respuesta muy
clara a esta pregunta. Él siempre les recordaba a los
profanos que venían a su templo, para hac er méritos, que
tenemos que prepararnos para enfrentar a las situaciones
que la vida nos depara.

“Aunque no nos gusten las dificultades pero sí la


felicidad, no hay forma de evitar el sufrimiento en nuestra
vida porque la vida es una mezcla de sufrimient o y felicidad.
Para ello, debemos prepararnos para el
sufrimiento inevitable teniendo una mente fuerte.

“Los seres humanos nacen con formas innatas de


sufrimiento entre las que están la vejez, la enfermedad y la
muerte. Todos los días y en diferentes gra dos estas formas
de sufrimiento tienen efectos adversos en nuestras vidas.

“En lugar de darse cuenta y estar conscientes de este


sufrimiento, los humanos se ciegan más aún prestando
atención a otras cosas triviales. Por ejemplo, una persona se
preocupará más por cumplir deseos como el de tener mujer
e hijos, esperando que esto lo haga feliz.

“Otros individuos cercanos a esa persona que tengan


esos deseos sufren los mismos problemas innatos como la
vejez, la enfermedad y la muerte. De este modo, esa per sona
al casarse, en lugar de ser feliz, carga sola con el sufrimiento
natural de sus seres queridos, incluido el sufrimiento
causado por tener que separarse de ellos al final.

“Si uno está casado o tiene hijos no es necesario


explicar las dificultades qu e se producen junto con sus
responsabilidades. Incluso si se queda soltero, al tener que
ganarse la vida y cuidar de sus padres, casi no queda tiempo
para uno mismo. Cuando uno se casa, hay que cumplir con
el rol de cónyuge y de padre o madre de los hijos. Cada rol
conlleva muchísimo trabajo. Por ello, la vida familiar está
llena de preocupaciones y de apegos.
“Si es inteligente y elocuente puede que encuentre la
felicidad en el matrimonio. Pero uno no puede librarse del
sufrimiento cuando llega la muert e. La separación de los
seres queridos es inevitable y trae consigo mucho dolor. Si
se quiere tener una vida feliz, hay que aprender a
ser tolerante y a no cargar con un sufrimiento
innecesario.

“Algunos pensarán que esta enseñanza está basada en


un punto de vista pesimista, pero la verdad es que es una
enseñanza realista que pretende mostrar cómo
afrontar situaciones vitales.

“Buda fue capaz de superar todos estos


sufrimientos. Él mismo enseñó que se puede sobrellevar
el sufrimiento inesperado si uno s e prepara mentalmente
para enfrentarse a la vejez, a la enfermedad y a la muerte.
Esta preparación se refleja normalmente en los siguientes
aspectos:

1. Conocer el propósito de la vida: Saber que no


nacimos sólo para disfrutar la vida. De hecho, nacimos para
perseguir las Perfecciones, para cultivar el mérito y de este
modo librarnos de los sufrimientos del samsara (el ciclo de
la vida y la muerte) siguiendo los pasos de Buda para
alcanzar el Nirvana.

2. Auto-realización: Este aspecto se refleja en el


hecho de aceptar que la muerte es algo natural. Después de
morir, aún no nos hemos ido. No sabemos cuándo vamos a
morir. Antes o después nos separaremos de todos nuestros
seres queridos y nuestras pertenencias más preciadas.

¿Cómo puede la gente pensar en la muerte?

1. Pensar en la muerte desde un punto de vista


erróneo: Pensar que la muerte es inevitable y
simplemente esperarla sin cultivar ningún mérito ni nada
bueno es perder una vida humana valiosa.

2. Pensar en la muerte desde un punto de vista


acertado: La muerte es inevitable, por lo tanto, antes de
morir, hay que sacar el máximo partido a la existencia física
mediante el cultivo del máximo número de buenas acciones
para que el mérito adquirido de esas acciones pueda llevarse
a la próxima vida.

Toda vida acaba en la muerte. Sin embargo, la muerte


no puede ser el propósito de la vida, ya que el propósito de
la vida es el cultivo del mérito y la purificación personal de
las impurezas mentales para alcanzar el Nirvana. Dado que
todavía existen estas impurezas, nunca se deben dejar de
lado las buenas acciones hasta que llegue el último día. Ésta
es la mejor recomendación que podemos ofrecer.

La reflexión diaria sobre la muerte y la separación de


los seres queridos y las pertenencias valiosas ayuda a
desarrollar la conciencia y el progreso en la meditación.
Alguien que reflexiona vivirá con prudencia y preparación;
tenderá a no apegarse a las cosas animadas o inanimadas,
centrándose sólo en realizar buenas acciones; no tendrá
miedo de las dificultade s; se dará cuenta que la muerte
acecha y que está más cercana que nunca, es como una
sombra que lo ha seguido desde que nació y está lista para
atacar en momentos de debilidad.

3. Cultivar todo el mérito posible: El objetivo de


la vida es vivirla con un propósito o un significado. Hacer
algo que no puede trasladarse a la próxima vida no se
considera realmente beneficioso.

Buda se dio cuenta que lo único que nos seguirá


cuando muramos será el resultado de nuestras acciones. Por
eso, dijo: “Somos propietarios de nuestras acciones,
somos herederos de nuestro karma, sean cuales
sean nuestras acciones, ya sean bondadosas o
malvadas, recibiremos las consecuencias”.

Además, nos enseñó tres principios que guían cómo


vivir nuestras vidas y sacar lo mejor de e llas:

1. Evitar los actos malvados: Deshágase de las


pasadas malas costumbres y evite comenzar nuevas que
puedan aumentar consecuencias adversas, hasta el punto
que puedan llevarnos a reinos desafortunados o hacernos
perder el camino hacia los reinos ce lestiales y al Nirvana.

2. Hacer buenas acciones hasta el máximo


grado posible: Intente poner en práctica las buenas
acciones que nunca ha realizado y esfuércese más en las que
ya ha realizado para así ganarse el paso al reino celestial y al
Nirvana mientras cierra la entrada al infierno.

3. Purifique su mente: Mantenga siempre su mente


brillante y clara, mientras inhale y exhale. Si alguien inhala
y no exhala, la vida de esa persona llegará a su fin. La
muerte no avisa. Por eso, todo el mundo debería p repararse
para la muerte manteniendo siempre la mente clara.

La claridad u oscuridad de la mente nos abrirá


la puerta del cielo o la del infierno,
respectivamente.

Una mente brillante y clara resultante de la recolección


de buenas acciones del pasado l e llevará a la felicidad. La
fuerza de los efectos kármicos buenos, que se basan en las
buenas acciones que uno ha hecho sobre la tierra, abrirá la
entrada al reino de los cielos con tesoros celestiales.

Por otro lado, una mente oscura resultante de la


recolección de acciones malvadas en el pasado llevará al
reino desafortunado. La fuerza de los efectos kármicos
malos conducirá a experiencias dolorosas que corresponden
a las acciones de esa persona en su existencia actual.

Estos principios tienen catego rías y se describen en las


enseñanzas budistas como las Diez Bases de las
Acciones Meritorias (Puññakiriyā-vatthu), éstas se
enumeran a continuación:

1. Generosidad (Dānamaya)
Adquisición de mérito mediante la donación al
receptor adecuado

2. Disciplina moral (Sīlamaya)


La observación del comportamiento moral a través de
la represión de las palabras y de los actos, sin causarle
a los demás confusión

3. Práctica de la meditación (Bhāvanāmaya)


Desarrollo mental a través de la meditación

4. Humildad (Apacāyanamaya)
Actitud reverencial y humildad para con otras
personas virtuosas

5. Ayuda a los demás (Veyyāvaccamaya)


Ayudar a los demás sin quebrantar la ley, la tradición o
la moral

6. Transferencia del mérito (Pattidānamaya)


Compartir el mérito con los demás

7. Alegrarse del mérito (Pattānumodanāmaya )


Alegrarse del mérito logrado por los demás

8. Escuchar los sermones del Dhamma


(Dhammassavanamaya )
Escuchar las doctrinas o las buenas enseñanzas
9. Dar sermones del Dhamma
(Dhammadesanāmaya )
Proclamar la doctrina o enseñar la verda d

10. Formar la opinión correcta (Ditthujukamma)


Reforzar la opinión propia o formar puntos de vista
correctos

“En resumen, estas diez acciones meritorias pueden


categorizarse fácilmente en tres grupos principales: la
generosidad (dāna), la disciplina moral (sīla) y la
práctica de la meditación (bhāvanā).

“Quien entiende el propósito de la vida, suele


contemplar la realidad de la muerte y hace un esfuerzo por
sembrar buenos actos, verá el mundo desde la perspectiva
acertada. No habrá sufrimientos m undanos que puedan
alterar su mente y además será capaz de encontrar la
felicidad tanto en esta vida como en la próxima”.

Todas estas enseñanzas proporcionadas por el


venerable monje nos recuerdan que deberíamos llevar
nuestras vidas con cuidado, tener como objetivo la siembra
de buenas acciones, evitar el mal comportamiento y
purificar nuestras mentes cada día de modo que nuestras
vidas se llenen de valores.

Espero que este mensaje del venerable monje,


expresado a través de este libro, ayude a muchas personas
para que se preparen para responder a conciencia cualquier
tipo de sufrimiento que la vida les pueda ocasionar. El valor
de la vida de una persona depende de cómo pase por mundo
para poder obtener así el paso al Nirvana.
Capítulo 37

Los últimos momentos en la vida


de un padre

Un día una mujer vino a pedir consejo a un venerable


monje para saber cómo cuidar de su padre que estaba
muriendo; los budistas consideran este acto como un
cometido importante de cada hijo agradecido. Por lo tanto
este conocimiento debe ser aprendido por todos aquellos
que deben pagar una deuda de gratitud a sus padres.
La mujer dijo, “Cuando tenía 10 años, mis padres se
divorciaron, y mi madre cuidó de mí. Ella es una budista
fiel que cree en la Ley de Causa y Efecto. Ella ofrece comida
a los monjes cada mañana. Mi padre nunca me ha visitado,
y a pesar de saber donde vive, nunca lo he visitado, sólo lo
he llamado algunas veces.

“Recientemente, él se enfermó gravemente y fue


ingresado a un hospital. El méd ico ha dicho que tiene
cáncer y es probable que no tenga mucho tiempo para
seguir viviendo. Mi padre no tiene fe en el budismo.
¿Cómo puedo ayudarle a lidiar con su sufrimiento? ¿Si
hago actos de mérito a su nombre, mientras aún
esté vivo, este mérito po dría ayudar a que mi padre
se recupere?

El monje le respondió, “Antes de cuidar a un padre o a


una madre que se está muriendo, no importa cuál sea la
enfermedad, usted debe de entender algo muy importante.
El estado mental en el que se encuentra determin ará el
destino de su vida en el más allá. Así que debe tratar que
esta persona no se preocupe por nada.

Buda dijo una vez que ‘una mente nublada


conduce a un reino desagradable’.

“Durante los últimos meses de la vida de su


padre, trate de ayudarle a desarrollar una mente
bastante despejada. El hacer actos de mérito es la mejor
forma de despejar la mente.

“¿Qué sucederá si mi padre no tiene fe en el


budismo y yo hago actos meritorios en su nombre;
será él quien reciba el mérito? ”

“La respuesta es que él recibirá los frutos del mérito


sólo cuando él se regocije en el mérito que usted reciba. La
cantidad de mérito que él reciba será un poco menor de lo
que recibiría si él hiciera los actos por sí mismo.

“Si una persona no cree en la Ley de Causa y Efecto, en


el momento de su muerte cuando esté desprovisto a causa
de sus malos actos, en ese último instante de la vida, él
sentirá un gran sufrimiento.

“Como hija, usted debe estar cerca de su padre.


Cuando se presente la oportunidad hable con su padre
sobre el Dhamma; llévele flores, velas e inciensos para
rendir homenaje a Buda tres veces al día. Al principio
quizás rechace su propuesta, pero sea paciente y siga
hablando, dígale que rece todos los días o cuanto pueda.

“Si su condición no le permite sentarse, él puede


hacerlo acostado. Cuando él estaba fuerte quizás dudaba de
lo que usted le decía, pero al final cuando no aguante el
dolor y usted le aconseje refugiarse en las Tres Joyas 5, él
podrá considerar su consejo.

“Algo adicional que usted puede hacer es preparar la


comida de ofrenda (arroz, frutas o flores) para que él se las
ofrezca a los monjes. Sería aún mejor si usted invitara a los
monjes para que lo visiten en su lecho y para que reciban su
comida. Si esto no es posible usted puede ofrecer comida a
los monjes en algún otro lugar y decírselo después a su
padre para que se regocije en los actos de mérito.

“Al seguir este consejo, él sufrirá menos, especialmente


si le queda un poco de su propio mérito para creerle. Él
estará más tranquilo en su lucha contra el dolor. Pero si él
rechaza sus intentos usted no puede hacer nada más que
esperar a su próxima vida para pagarle la deuda de
agradecimiento.

5
Buda, Dhamma y Sangha: los tres refugios de los budista s
“Hace varios años yo conocí a alguien que se ocupaba
de cuidar un templo. Él padecía de diabetes y le tuvieron
que amputar una parte de su cuerpo. Todos los días
después de la operación a las dos de la tarde él sufría un
dolor tan agudo en sus heridas que nada le aliviaba el dolor.

“A causa de que él creía en el budis mo y en la Ley del


Karma, lo visité y le di grabaciones de cantos y meditación.
Después de desayunar yo le decía que descansara. Yo ponía
la cinta y él cantaba con la cinta hasta pasadas las dos de la
tarde, de esa forma se olvidaba completamente del dol or.
Hicimos esto todos los días hasta que sanó la herida.

“Esto nos hace recordar que debemos aprender a


cantar y hacerlo a menudo. Para que cuando suframos de
alguna enfermedad podamos utilizar el canto para combatir
cualquier dolor. Cuando la ment e esté centrada en el canto
se olvidará de los dolores. Se ha probado que este método
tiene éxito.

“Su decisión de cuidar a su padre enfermo es correcta.


A pesar de que él los ignoró a usted y a su madre, usted
debe saber que los padres son las perso nas a quienes les
debemos agradecimiento.

1. Nuestros padres sirven como molde físico.


Ellos nos dan la forma física de ser humano, la cual es
apropiada para realizar actos de mérito. A pesar de
que no nos criaron, aún les debemos nuestro
agradecimiento, y si nos crían como buenos padres que
son, les debemos una cantidad enorme de
agradecimiento.

2. Nuestros padres siempre nos perdonan sin


guardar ningún resentimiento. Los padres nos
castigan cuando hemos hecho actos inaceptables, pero
lo hacen debido a su gran amor y preocupación. Les
duele en el alma cuando nos tienen que pegar como si
les hubieran cortado el corazón con un cuchillo. Ellos
son nuestros mejores amigos y podemos confiar en
ellos por completo.

3. Nuestro agradecimiento a nuestros padres va


más allá de lo que podemos dar. A menudo
debemos meditar sobre nuestro agradecimiento a los
padres.

Éstas son las formas en las cuales los hijos pueden


agradecer a sus padres:

1. Cuidar de ellos en su vejez

2. Llevar el apellido de la familia con orgull o

3. Utilizar la riqueza de la familia de forma responsable

4. Continuar los actos de ayuda social que sus padres han


realizado

5. Darles inspiración para creer en las Tres Joyas,


alimentándoles para ser generosos y para mantener su
moralidad, persuadiéndoles a escuchar las lecciones
espirituales y enseñándoles a meditar. Todo esto les
puede ayudar a seguir el camino al Nirvana.

“Aún cuando sus padres hayan fallecido, su deber


como buen hijo o hija no desparece. Aparte de hacerse
responsable de los arreglo s fúnebres adecuados, un hijo o
una hija agradecidos realizarán buenos hechos
regularmente y de esa forma traspasarán los méritos
ganados a sus difuntos padres.”

Espero que hayan aprendido de este capítulo que


mientras usted cría a sus hijos para que sean buenas
personas no se les debe olvidar querer a sus propios padres
y abuelos. Al hacer esto usted les está demostrando a sus
hijos cómo cuidar de ustedes cuando lleguen a la vejez,
especialmente en los últimos momentos de su vida. De esta
forma ellos sabrán cómo abrir la mente de sus padres, para
favorecer el camino a un destino agradable de acuerdo con
el budismo. Al final todo se le regresará a usted.
Capítulo 38

Padres, merecedores de nuestro


respeto

En 1999 las estadísticas en Tailandia in dicaban que


hubo un incremento en el número de ancianos desatendidos
de 300000 por año mientras que los asilos de la tercera
edad en Tailandia sólo tienen una capacidad para atender a
200 ancianos por año. Esto es porque los hijos adultos de
estas personas están cansados de sus padres ancianos y de
atenderlos. La creciente tendencia de ubicar ancianos en
asilos es una gran decepción.
Según las enseñanzas budistas los padres deben ser
reverenciados como los Arahantas 6 de la familia. Son los
primeros profesores de sus hijos. Hay un dicho tailandés
que sostiene que a los pies de los padres es donde
encontraremos las puertas de los reinos celestiales. Los
niños tailandeses expresan su respeto y gratitud hacia los
padres postrándose a sus pies en reverenci a.
Adicionalmente, en su vejez los padres deben ser atendidos
por sus hijos. Sin embargo, hoy en día, los padres ancianos
que han sido desatendidos por sus hijos se han convertido
en un gran problema para la sociedad tailandesa donde el
budismo es la religión más común.

Nuestros antepasados nos han enseñado que el éxito


de una persona depende del buen trato que de a sus padres
a quienes les debe gratitud. A causa de que la bondad de los
padres es incomparable, si una persona no los acepta y
aprecia, entonces ésta persona no será caritativa
con los demás tampoco . Todo aquel que descuide a sus
padres, encontrará las puertas de los reinos celestiales
cerradas.

Nuestros ancestros nos recuerdan la importancia del


siguiente tema: cuando éramos niños no podía mos valernos
por nosotros mismos. Si nuestros padres se hubieran
cansado de nosotros y nos hubieran dejado en un depósito
de basura en el camino, no habríamos podido sobrevivir.
De haber sobrevivido, habríamos sido huérfanos sin hogar,
ni alimento, sin futuro alguno. Por ello nuestra deuda de
gratitud por su ayuda y por aceptarnos en su familia, es
inmensa. Su bondad va más allá de lo que nosotros alguna
vez podamos dar. Piensen por un momento: algunas veces
pasaron hambre y se sacrificaron por nosotr os, para que
tuviéramos alimento. Lucharon de todas las formas
imaginables para criarnos hasta llegar a ser adultos. Por

6
Los seres iluminados y completamente bondadosos
esta razón, debemos pagar nuestra deuda de gratitud de la
mejor manera posible.

La posibilidad anterior, nos hace pensar que algún d ía


envejeceremos y seremos abuelos, por supuesto, nos
volveremos seniles y vulnerables. Podríamos depender de
nuestros hijos para cada movimiento, incluso para ir al
baño. Nuestros cuerpos físicos estarán desgastados y esto
causará incomodidad en nosotro s y nuestros hijos. Sin la
gratitud y amor verdadero de nuestros hijos, nosotros
podríamos quedarnos desatendidos. Sin embargo, hay
quienes sólo cuidan de sus padres o abuelos en espera de
una herencia. ¿Cómo podemos prevenir este
problema de ingratitud hacia quienes merecen
nuestro respeto?

Con gran visión y sabiduría, nuestros ancestros tenían


criterios claros para resolver este problema.
Principalmente, los padres deben asignarles a sus hijos la
tarea de ayudar con el cuidado de sus abuelos desde
pequeños. Como resultado serán testigos de las acciones de
sus padres. Más adelante en su vida, tratarán a sus padres
de la misma manera en que trataron a sus abuelos.

Lo que también es importante, para inculcar


efectivamente la gratitud en los niños es que los padres
permitan a sus hijos participar del cuidado de sus abuelos.
Incluso, deben exaltar las virtudes de los abuelos ante sus
hijos, tanto en presencia de ellos como a puerta cerrada.
Mediante un buen ejemplo, los niños verán y aprenderán de
los actos de sus padres y entonces sabrán que una persona
agradecida debe tratar a sus padres de esa manera.

Al contrario, aquellos que cuidan de sus padres pero a


la vez se quejan y maldicen, o peor abusan de ellos directa o
indirectamente, tendrán hijos qu e graben mentalmente
estos actos y los repitan. La verdad es ésta: lo que damos
recibimos. Cuando ellos lleguen a la ancianidad, sus hijos
los tratarán de la misma manera que ellos lo hicieron con
sus propios padres. Tendrán los mismos sentimientos que
tenían sus padres ancianos, esto es dolor por no ser amados,
por ser una carga para la familia, por sentir que no
pertenecen a ésta e incluso sentirse inferiores a los
empleados de casa. Estas sensaciones negativas herirán su
corazón ya que ellos dieron e se mal ejemplo a sus propios
hijos.

Por lo tanto, como padres, si se quiere ser tratado bien


por sus hijos durante la vejez, usted debe empezar por
cuidar a los suyos. Al mismo tiempo, debe entrenar a sus
hijos a ser buenos ayudantes. Un día, cuando est os sean
adultos, cuidarán bien de usted también. Usted no se
sentirá afectado o dolido por nada ni por nadie ya que sus
hijos comprenderán bien la gratitud que les deben.

De alguna manera, debemos prepararnos para


envejecer. El no hacerlo nos traería pro blemas en el futuro
porque no seríamos capaces de adaptarnos cuando nuestro
cuerpo físico se debilite. Además, podríamos sentirnos
presionados debido a nuestra falta de preparación para
lidiar con estos problemas.

A continuación mostramos un esquema que n os


enseña cómo prepararnos para ser padres que merecen ser
reverenciados por nuestros hijos. Primero, debemos saber
que hay dos clases de ancianos.

El primer tipo de ancianos es denominado


“personas no fructíferas”, personas sin valor.

Este tipo de personas nunca ha tenido éxito al realizar


buenas acciones a lo largo de su vida. Por ejemplo, raras
veces han ofrecido limosna a los monjes, no han cumplido
con los principios, ni han meditado, estudiado el Dhamma o
cantado. Parece que diariamente han lleva do vidas inútiles.
Estas personas pueden llegar a ser molestas porque no
entienden las causas y los efectos o los principios del juicio.
Sus hijos no quieren pasar tiempo con ellos porque sólo
causan problemas a la familia, problemas como la
enemistad entre una suegra y su nuera. Sus hijos raramente
reciben alguna virtuosa sabiduría de su parte. En
consecuencia, serán abandonados porque nunca enseñaron
a sus hijos a ser personas agradecidas.

El segundo tipo de ancianos es denominado


“personas fructíferas ,” filántropos o altruistas.

A lo largo de su vida, estas personas han logrado


ganarse el sustento de forma diligente y están muy bien
preparadas para vivir su vejez dependiendo sólo de ellos
mismos, sin ayuda de los demás. Su comportamiento y
hábitos están bien adaptados; ellos saben que no serán una
carga para sus hijos. En cuanto a la religión, ellos han
estudiado a conciencia los principios budistas siendo
generosos, observando los preceptos y practicando la
meditación. Además, siempre han enseñado a sus hijos cuál
es la forma correcta de entender el significado de la vida.

Buda llamó a estos ancianos “aquellos que


merecen ser venerados por sus hijos” . Una familia
que tenga un miembro como éste, poseerá felicidad como si
tuviera un “merecedor en la familia”.

Estos ancianos siempre han seguido los principios de


una vida simple:

1) Esforzarse por ofrecer limosna. Esto significa


que estas personas siempre cultivan mérito ofreciendo
comida a los monjes cada mañana para acumular
provisiones para la siguiente vida.

2) Esforzarse por seguir los Cinco Preceptos a


diario. Esto es especialmente cierto en el Cuarto
Precepto, no mentir, el cual siempre debemos seguir. En
la víspera y durante los Días Sagrados Budistas, se
observarán los Ocho Preceptos 7. El hacerlo les ayuda a
llevar su vida de manera más simple.

3) Esforzarse por meditar frecuentemente.


Meditarán en la mañana, después del almuerzo y antes de
dormir para así mantener su mente purificada y radiante.

Estos ancianos se han comportado bien y han sido un


buen ejemplo para sus hijos. En sus momentos libres ellos
les han inculcado valores morales, les han contado cuentos
sobre el Dhamma y sobre sus propias experiencias de vida,
las cuales fueron indispensables para el aprendizaje de los
niños pequeños. Estos buenos ejemplos han permanecido
en la mente de sus hijos y han tenido un impacto en ellos,
permitiéndoles llevar una vida virtuosa.

Además, estos ancianos nunca interferirán en la vida


de sus familias políticas, son adultos capaces de sobrellevar
la responsabilidad en una familia y de resolver los
problemas por sí mismos y no necesitan que sus suegros los
ayuden a reconciliarse. Finalmente, estos adultos tomarán
su lugar y se convertirán en los siguientes pilares para la
familia.

Más tarde, cuando la vida de estos ancianos llegue a su


fin, sus posesiones serán legadas a sus hijos y les permitirán
administrar sus fortunas. Estarán bien preparados para su
propio funeral con suficientes ahorros acumulados y
realizarán sus últimos actos meritorios antes de su descanso
eterno. Después de que las propiedades hayan sido
divididas, una cantidad será asignada a los hijos para que
cuiden de sus familias. Estos ancianos llevan sus vidas de
forma responsable todos los días. Cuando llegue el últim o
día de su vida, ellos verán su pasado y se sentirán orgullosos

7
Abstenerse de matar, de tomar lo que no nos pertenece, de la falta de castidad, de levantar
falso testimonio, de comer a destiempo, del entretenimiento y de los cosméticos; y abstenerse
de dormir sobre grandes y lujosos sofás y colchones.
de lo que han logrado, ya que son “merecedores de la
reverencia de sus hijos”.

De esta manera, se puede deducir que el segundo tipo


de ancianos no estará solo durante los últimos días de su
vida porque ellos son afectuosos, serán venerados por sus
hijos y merecedores de la dedicación de los otros. Será obvio
que la sabiduría, la virtud, los conocimientos y la habilidad
de estos ancianos continuarán con su vida. Podemos
mejorar nuestro futuro escogiendo seguir el ejemplo del
segundo tipo de ancianos, “personas fructíferas”. Esto
significa que debemos estar bien preparados antes de llegar
a la tercera edad. Así, desde este momento
deberíamos estar motivados para convertirnos en
aquellos que son merecedores de la reverencia de
sus hijos.
Capítulo 39

Dar la bendición a nuestros hijos

Cuando alcanzamos una edad avanzada, el darle la


bendición a nuestros hijos se convierte en una tarea
importante que debe estar entre nuestras múltiples
obligaciones. Sin embargo, dichas bendiciones serán
veneradas sólo si lo hacemos en forma moderada y acorde
con nuestra edad y calificación. Nos será de gran beneficio
estudiar los criterios que nuestros ancestros siguieron para
darles la bendición a sus hij os, cómo les inculcaron
obediencia y cómo los criaron para que fueran buenos
ciudadanos. Sus principios nos guían claramente y pueden
ser adaptados a nuestra situación cuando seamos adultos.
¿Qué es una bendición?

En el idioma pali, la bendición es llamada vara.

Vara significa progreso y felicidad.

Una bendición es el acto de dar lo mejor de


uno.

Por tanto, cuando alguien mayor les da la


bendición a sus descendientes, está deseando lo
mejor para ellos.

El significado de la bendición

Puede que muchos no sepan que el bendecir a


nuestros hijos ha sido una tradición de la cultura
tailandesa desde la antigüedad. Es una rutina que se
practica en cada hogar antes de la hora de dormir. Los
padres llevan a sus hijos para que les presenten su respeto a
los abuelos cada noche. A continuación los abuelos
resumían a sus nietos las buenas acciones que habían
realizado ese día; al hacer esto, les inculcan valores morales
a los niños y éstos aprenden de las virtudes de los abuelos.
Dichos actos transferían buenas acciones y virtudes de
modo que los niños aprendían a creer en la Ley del Karma.

En el pasado la sociedad tailandesa vivía en forma más


pacífica. Tenía menos problemas que la sociedad actual
puesto que en la mayoría de hogares se practicaba esta
rutina familiar nocturna, la cual propiciaba un ambiente de
armonía.

Los ancianos representan el corazón de toda la


familia. Si sus voces no están presentes para hablar
del Dhamma, dar palabras de ánimo o cautela,
parecería que el corazón de la familia deja de
funcionar. Al mismo tiempo, la familia no se mantendrá
unida. Esto produciría situaciones de conflicto, soledad,
depresión y desaliento en la familia. La calidez familiar se
desvanecería paulatinamente hasta desaparecer.
Eventualmente, lo único que se escu charía dentro del hogar
serían obscenidades, discusiones y el ruido producido por la
ingesta de bebidas alcohólicas y por los juegos de azar.

Una familia que entiende la importancia de una


bendición diaria dada por los ancianos hará que sus niños
sepan rendir el homenaje correspondiente y pidan ser
bendecidos por sus padres y abuelos cada noche antes de
irse a dormir. Si los abuelos ya hayan fallecido, los padres
pueden enseñarles a los niños a presentar sus respetos ante
el retrato de los abuelos. Y ello s desempeñarían el papel de
los abuelos al mencionar sus propias virtudes y buenas
acciones de modo que sean un buen modelo a seguir para
sus hijos.

En la actualidad, tal rutina ya no se practica en los


hogares tailandeses; ello ha dado pie a problemas c omo el
aumento de la tasa de divorcios, el descuido de los
familiares de edad avanzada, etc. Adicionalmente, algunos
problemas son causados por parejas que se separan de sus
respectivas familias para conformar su propio núcleo
familiar donde los únicos mie mbros que mantienen la
unidad familiar son los padres y los hijos. Como
consecuencia, los niños no reciben la bendición de los
abuelos. Si los padres, no caen en cuenta de esta situación
negativa y no toman el papel de los abuelos frente a sus
niños, entonces se generarán conflictos. Algunos casos son
aún peores ya que todos los miembros de la familia viven
bajo el mismo techo pero cada uno se preocupa sólo de sus
propios asuntos. Esto mina la relación entre los padres y los
hijos, al ignorar la raíz del pr oblema.

Si usted es parte del núcleo de una familia que no ha


practicado esta tradición, este tema deben discutirlo como
padres de familia. Usted debe hacerse preguntas a sí mismo
tales como, “¿desea que cada miembro de su familia viva
por su lado o desea transformar a su familia con la
honorable tradición tailandesa que puede brindarle la
unidad familiar?”

Cuando sus padres viven lejos de su familia, usted


debe desempeñar su rol. La recomendación es que la madre
haga que los niños le presenten su homen aje y le pidan una
bendición primero a su padre, por ser la cabeza de la
familia; y luego se debe hacer lo mismo con la madre. El
realizar esta práctica antes de la hora de dormir promueve
calidez familiar. Esto le garantiza que la unidad familiar se
mantendrá. Cuando usted alcance edades avanzadas, sus
hijos adultos no lo abandonarán puesto que usted les
enseñó a ser agradecidos desde la niñez. Ellos estarán
familiarizados con la presentación del homenaje y el pedido
de la bendición por parte de los padres . Y aunque ya sean
adultos, ellos le seguirán presentando sus respetos a usted y
a sus abuelos. Ellos saben que usted ha sido un buen guía
puesto que siempre les transmitió enseñanzas valiosas.

¿Cómo se crea lo mejor en uno mismo?

El lector puede ahora entender el significado y alcance


de una “bendición”. Ahora arribamos a la interesante
pregunta de cómo una persona puede desarrollar
sus mejores cualidades.

De acuerdo a los principios del budismo, la “mente”


humana tiene características que la diferenc ian del resto de
seres vivientes en este mundo. Estas características son:

1) La mente se puede formar para que alcance una


calidad superior.
2) La mente puede liberarse de todo mal.
3) La mente puede acumular pureza.
De acuerdo con estas características, si la mente
humana acumula sólo buenas acciones, se llenará de gozo y
será poderosa. De lo contrario, si acumula sólo malas
acciones, se llenará de oscuridad y de maldad. Debido a que
todo individuo está constantemente acumulando buenas y
malas acciones, la ment e no es completamente pura o mala.
Si fuera enteramente pura, la persona pasaría su otra vida
en un reino celestial u obtendría la Iluminación y accedería
al Nirvana. Si la mente fuera totalmente oscura, la persona
después de muerta se iría al reino del in fierno.

Debido a que hemos realizado buenas y malas acciones


a lo largo de nuestra vida, nosotros mismos debemos
corregirnos eliminando las malas acciones y tratando de
llevar a cabo la mayor cantidad de buenas acciones que
podamos en esta vida.

La incapacidad de desarrollar lo mejor en nosotros


mismos tiene sus raíces en tres grandes grupos de razones
que en forma general se llaman impurezas mentales
(kilesa). Éstas son:

1) Codicia o deseo; egoísmo, codicia interminable


y avaricia

Esto se refiere a un adulto que es codicioso y desea lo


que tienen los demás o un niño que es egoísta y roba cosas
ajenas.

2) Ira u odio; desagrado, o incluso en extremos,


alguien que se ofende fácilmente y que causa
destrucción

Esto se refiere a adultos que se irritan o mole stan con


facilidad o a niños que tienen mal carácter.
3) Ignorancia o falsas ilusiones; confundir una
opinión errónea con una correcta y viceversa;
confundir el bien con el mal y viceversa. Esta
ignorancia provoca que usted tenga
pensamientos, palabras y c onducta negativos.

Esto se refiere a un adulto que es parcial, celoso y que


le gusta decir chismes de los demás o a un niño que
consume drogas, estupefacientes o desarrolla una adicción
por los químicos de las pinturas.

Estos tres tipos de impurezas me ntales impiden que


usted desarrolle lo mejor de sí mismo. A más impurezas
mentales acumuladas, menos cualidades nobles que usted
puede ganar. En consecuencia, nadie querrá relacionarse
con una persona así, ni siquiera se preocuparán por ella si
se llegara a enfermar.

Por el contrario, aquellos que alguna vez fueron


egoístas, irascibles o celosos y que después invirtieron su
conducta mejorándose a sí mismos, serán portadores de
pensamientos, palabras y acciones positivas. Cuando hay
buenas acciones acumula das, los malos hábitos se vuelven
positivos y ellos crearán más cosas buenas en sí mismos. No
sólo los adultos sino los niños también pueden lograr esto,
sólo se necesita determinación y práctica a conciencia.

La forma de crear lo mejor en uno mismo

Buda enseñó que se logra crear lo mejor en uno mismo


al eliminar la codicia, la ira y la ignorancia mediante la
acumulación de méritos. Los elementos para alcanzar esto
son:

1) Eliminar la codicia mediante actos


frecuentes de generosidad.
Podemos hallar bueno s ejemplos en nuestros
ancestros. En otros tiempos, nuestros ancestros se
levantaban antes del amanecer y despertaban al resto de la
familia para preparar la comida que se les daba de limosna
a los monjes. Toda la familia tenía que levantarse y
contribuir. Cuando los monjes venían por la comida, los
abuelos mostraban a los niños cómo servir la comida en los
tazones que traían los monjes.

Después de la ofrenda, los abuelos enseñaban a los


niños que para dedicar el mérito a los familiares fallecidos
había que verter el agua de la dedicación. Al hacer esto, a los
niños se les inculcaba el agradecimiento y la compasión.

En las familias que vivían lejos del templo y que no se


encontraban en la ruta de recolección de comida de los
monjes, los abuelos les pedía n a sus descendientes que
prepararan comida para ofrecerles a los monjes y ellos
llevaban la ofrenda hasta el templo. Si no les era posible
recorrer ese trayecto debido a alguna enfermedad, los niños
irían en su lugar. Antes de salir de casa los abuelos re unían
a sus descendientes para pronunciar una resolución o
deseo.

Nuestros ancestros querían que sus hijos conocieran la


generosidad, en vez de que tuvieran sus mentes obnubiladas
o llenas de codicia. El despertarse temprano en la mañana
para realizar una buena acción o un acto positivo refresca la
mente. La vida es corta y está llena de incertidumbre. Por
ello, todos en la familia deberían comenzar su día con una
mente radiante que piense sólo en ayudar a los demás a
realizar buenas acciones tales como ofrecer comida a los
monjes en las mañanas.

Podemos ver que hoy en día esto es diferente. La


mayoría se levanta pensando en qué hacer para avanzar en
sus carreras, cómo pueden sobrepasar a los demás. Algunos
piensan en engañar todo el tiempo. Algunos siem pre se
despiertan tarde, incapaces de mantener el ritmo de los
demás. Además de haberse levantado tarde estas personas
no hacen ni una sola buena acción en todo el día.

Cuando ocurren situaciones así, toda la familia se ve


afectada. Cuando un miembro sac a ventaja de los demás en
el trabajo, puede que haga lo mismo en su propia casa. Esta
situación se agrava cuando los miembros de la familia
pelean por propiedades o dinero. Esto causa el deterioro de
lo mejor de la familia y con esto los problemas sólo pue den
aumentar.

Como nuestros ancestros entendían perfectamente


este hecho, ellos marcaron el paso para que sus
descendientes ofrecieran comida a los monjes cada mañana.
Esta buena acción da inicio al día. Los niños que aprenden a
dar y a apoyar a otros no muestran ni codicia, ni celos, ni
sacan provecho de otros; su mente estará positiva y radiante
desde la primera luz del día. A través de todo esto, la codicia
será completamente eliminada. Mediante la generosidad, se
puede sacar lo mejor de sí mismo.

2) Eliminar la ira mediante el cumplimiento de


los preceptos en forma regular.

Cuando los abuelos se levantaban al amanecer antes de


preparar la comida para limosna, tenían la rutina matutina
de reunir a la familia y a los empleados de la casa para
recitar el canto de la mañana. Después del canto, seguía el
pedido de los Cinco Preceptos 8 frente a la imagen de Buda,
como su representante.

Si algún miembro de la familia se despertaba diez


minutos tarde y perdía el canto matutino, los abuelos no
proseguían; en vez de eso, cada uno hacía la petición de los
Cinco Preceptos mientras esperaban que los monjes
8
No matar seres vivientes, no robar, no cometer adulterio, no decir mentiras, no consumir
alcohol o estupefacientes en forma consciente.
llegaran por la comida. Inmediatamente después de dar la
ofrenda, todos dedicarían los méritos recién alcanzados, a
través de la ofrenda brindada y la intención de cumplir los
preceptos, a sus ancestros. Luego todos juntos recitaban el
canto matutino. Con esto, se puede apreciar que los abuelos
trataban de inculcar el bien en la familia, impidiendo que
las impurezas mentales prosperen.

La familia sabía de la int ención de cumplir los Cinco


Preceptos a diario como una forma de desarrollar la moral.
Se prometían a ellos mismos que no quebrantarían dichos
preceptos a lo largo de todo el día. Más aún, no serían
ignorantes, ni coquetearían o causarían problemas a los
demás. Aunque algunos conflictos son inevitables, sin
importar qué tan seria fuera la situación, ellos se
controlarían de la mejor forma posible y tratarían de llegar
a un acuerdo razonable. Los descendientes que aprenden
bien esto desde la niñez no caerán en ninguna tentación (los
Caminos a la Perdición). Si cumplen con los Cinco
Preceptos vivirán su vida en paz.

Por el contrario, la sociedad actual está llena de


violencia. Cuando uno es objeto de una ofensa,
instantáneamente reacciona de manera hostil. E l mal
carácter está siempre a la orden y busca vengarse de los
demás en todo momento, promoviendo una situación de
odio interminable.

Con su sabiduría y visión, nuestros ancestros


anticiparon estos hechos y sus causas y efectos. Al
enseñarles a tener con trol de sí mismos desde niños, los
abuelos les inculcan la generosidad a través de las ofrendas
a los monjes y el cumplimiento diario de los Cinco
Preceptos. Estas saludables prácticas se traducen en una
base moral y disciplina para los niños. Cuando ellos logran
abstenerse de aprovecharse de ellos mismos y de los demás,
cumpliendo los preceptos, se puede implantar lo mejor de
ellos en sí mismos.
3) Eliminar la ignorancia mediante la práctica
de la meditación en forma regular.

Al tiempo que nuestros ancestr os estudiaban y


practicaban el Dhamma, ellos sabían que la mente humana
puede ser fácilmente atrapada por las cinco formas de deseo
sensual: imágenes visuales, alimentos apetitosos, esencias
aromáticas, sonidos melodiosos y objetos suaves al tacto.
Por ejemplo, cuando usted ve a alguien de aspecto
agradable o una imagen atractiva, prueba comida apetitosa,
huele una esencia aromática, oye sonidos melodiosos y toca
objetos suaves, usted sentirá el deseo de poseerlo.

Al dejarse atrapar por lo percibido por l os ojos, la


nariz, la lengua, el cuerpo y la mente, usted podría
fácilmente confundir lo malo con lo bueno y convencerse de
hacer malas acciones. Cuando aparezcan las consecuencias
usted se sentirá miserable.

El acostumbrarnos a estar conscientes impedirá que


nuestra mente sea atrapada por algunas de esas
percepciones.

Estar consciente es estar atento a lo que usted


hace en este momento y ser capaz de diferenciar y
de emitir un juicio sobre qué es correcto o
incorrecto, bueno o malo, saludable o no sal udable,
apropiado o inapropiado. El estar conscientes nos
protege de ser imprudentes.

Nuestros ancestros estuvieron muy al tanto de estas


verdades, por ello se acostumbraron a estar conscientes
desde su juventud. Ellos creyeron y siguieron las
enseñanzas de Buda en las que el templo es la
fuente de conocimiento moral para la gente.
Buda les enseñó que podían estar conscientes
mediante una práctica llamada meditación.

La meditación es el método para eliminar una


opinión errónea haciendo que la mente se detenga
hasta que se despeje y esté pura y radiante,
permitiendo que usted se afirme en el camino
correcto.

Nuestros ancestros se acostumbraron a estar


conscientes antes de casarse y continuaron con esta práctica
como parte de su rutina aún siendo ya may ores. Estas tres
prácticas son:

1) Estudiar el Dhamma todos los días.


2) Enseñar el Dhamma a su familia todos los
días.
3) Practicar la meditación todas las noches.

Al estudiar el Dhamma todos los días, nuestros


ancestros recordaban las enseñanzas de Buda que ha blaban
de nunca dejar de hacer méritos. Puesto que todos
moriremos algún día, lo único que podremos llevar con
nosotros a la otra vida serán los méritos saludables y los
pecados no saludables. En el transcurso de la vida, con una
mayor cantidad de buenas a cciones, los problemas se
pueden reducir y ello trae consigo la felicidad. De lo
contrario, si una persona acumula más malas acciones, no
sólo tendrá muchos problemas sino que también será
infeliz.

Al enseñar el Dhamma a su familia todos los


días, nuestros ancestros podían repasar los principios
morales. Cuando a los niños se les enseñaba la moral, ellos
seguían el Dhamma. Asimismo, ellos disfrutaban del tiempo
que pasaban con los abuelos ya que éstos incentivaban las
buenas acciones. A la vez, los abuelo s, considerados "los
Perfectos” de la familia, gozaban del respeto de los niños.
La práctica de la meditación todas las noches
equivalía al hábito de mantenerse consciente. Cuando la
meditación se hacía a diario, las mentes se acostumbraban a
la paz y a estar despejadas y rara vez estaban nubladas.
Cuando su mente estaba en paz, difícilmente caían en la
trampa de los canales de los cinco deseos sensuales.
Resistían todo tipo de tentaciones o acciones dañinas.

Por esta razón, ellos se mantenían conscient es y no


caían en las tentaciones. Ellos tenían la agudeza para
entender a la gente y sus impurezas mentales y saber cómo
desechar estas últimas. Ellos eran una fuente de sabiduría
para su familia. Cualquiera que tuviera el deseo de obtener
todo ese conocimiento nunca fue defraudado; sólo tenían
que acercarse a los abuelos y hablar con ellos.

En conclusión, nuestros ancestros lograron crear lo


mejor en sí mismos mediante la eliminación de la codicia,
ira e ignorancia a través de actos de generosidad, el
cumplimiento de los preceptos y la práctica de la
meditación. Debido a que siguieron las enseñanzas de Buda,
fueron respetuosos, cariñosos y buenos modelos a seguir
para su familia.

Sabiendo cómo nuestros ancestros


aprendieron a desarrollar lo mejor en sí mismos,
podemos estar seguros de que nunca se les
abandonó y fueron siempre objeto de respeto y
vistos como “los Perfectos” en la familia.

¿Cómo lo mejor de su forma de ser hace que


una bendición sea sagrada?

Cuando nos acercamos a personas virtuosas de edad


avanzada y nos dan su bendición, nos preguntamos por qué
eso implica algo sagrado. Nos preguntamos, “¿Qué tiene
que ver lo sagrado de una bendición con las
mejores cualidades que tiene la persona que brinda
la bendición?”

Un venerable monje respo ndió con la siguiente


explicación diciendo, “Lo sagrado de una bendición”
depende de “cuán honesto es el que brinda la
bendición con respecto a sus virtudes”.

Si él que da la bendición es honesto con


respecto a sus virtudes, sus bendiciones serán muy
poderosas. Sin embargo, si quien da la bendición
no es honesto con respecto a sus virtudes, sus
bendiciones serán menos poderosas.

Presentó ejemplos que fueron registrados en los


tiempos de Buda, especialmente la historia del Venerable
Angulimala (Ahimsaka) que está vívidamente descrita en
el Canon Budista. El venerable monje ilustró:

"El Venerable Angulimala, antes de ordenarse, había


sido un asesino en serie. Había asesinado casi mil personas.
La última persona o la número mil sería su madre. Sin
embargo, Buda había previsto esto, así que no le permitió
cometer tan terrible acto. Cuando el Venerable Angulimala
lo vio, también pensó en matarlo a Él. Entonces Buda trató
de hacerlo entrar en razón mostrándole la maldad de tal
acción que albergaba en su mente . Le dio un sermón
especial estando al lado del camino. Al final, el Venerable
Angulimala se arrepintió y le pidió a Buda que lo ordenara
como monje. Cuando se hizo monje, practicó el Dhamma a
conciencia en su templo.

“Debido a que había sido un reconoci do asesino en el


pasado, durante sus primeras rondas matutinas para pedir
comida como monje, solía regresar con las manos vacías
pues los pobladores sabían que había cometido asesinatos.
Algunos se alejaban de él. Algunos lo apedreaban hasta
dejarlo todo ensangrentado.

“Un día, mientras se encontraba en su ronda para


pedir comida, se encontró con una mujer embarazada que
estaba a punto para dar a luz. Tan pronto como ella lo
reconoció, se sintió abrumada por el miedo y trató de huir
de él hasta que se cay ó, sin éxito trató una y otra vez de
levantarse. Finalmente, se cansó y se lo quedó mirando con
temor, como si estuviera muriendo frente a él.

“El Venerable Angulimala realmente quería ayudarla,


pero, ¿qué podía hacer él en tal situación? Al final, él le dio
una bendición basándose en la honestidad con respecto a
sus virtudes:

“Desde mi noble nacimiento al ordenarme en


el templo de Buda, nunca he pensado en sacar
provecho o hacer daño a ningún ser viviente. Con
esta verdad, que puedas tú dar a luz a tu bebe sin
peligro”.

“Después de esta poderosa bendición, la mujer dio a


luz a su bebé en forma fácil y sin peligro. Debido a que este
evento ocurrió antes de que el Venerable Angulimala
obtuviera la cualidad de Arahat (el Perfecto), se puede
deducir que el poder de la honestidad con respecto a sus
virtudes produjo una bendición sagrada.

"Por lo tanto, la forma correcta de dar una


bendición depende de la honestidad que tenga con
respecto a sus virtudes la persona que la brinda.

“Por ejemplo, si estamos seguros de nuestra integridad


como personas generosas, podemos darle una bendición de
esta forma:
“Con la certeza con que he ofrecido la comida a
los monjes a lo largo del año, que goces tú de
abundantes provisiones. Basándome en la verdad
de ofrecer mis posesiones para ayudar a los
monjes, que goce usted también de riqueza”.

El punto de vista del venerable monje

Después de la clara explicación, el venerable monje


compartió su creencia de que:

“Aquellos que se hacen abuelos o que son individuos


respetados deben estar preparados para dar una bendición
poderosa, si se presentara el caso. No los defraudemos
dándoles una bendición que suene a frase hecha la que
simplemente estamos repitiendo.

“Si aún no hemos ofrecido comida a los monjes,


debemos comenzar ahora porque esta buena acción puede
eliminar nuestra avaricia. Si nos irritamos con facilidad, el
cumplir los preceptos al pie de la letra puede eliminar el mal
humor y la terquedad. Aquellos que siguen siendo tercos
deberían estudiar el Dhamma y practi car la meditación con
regularidad para que desarrollen lo mejor de sí mismos.

“Sin embargo, si hemos practicado la generosidad,


cumplido los preceptos y practicado la meditación con
regularidad, podemos apoyarnos en estas buenas acciones
para crear nuestra bendición sagrada. Por ejemplo, usted
puede decir, “Que tú recibas los méritos que he logrado y
que alcances la prosperidad, buena salud y sabiduría”.

“No es tarde para que los individuos mayores, con


pocas buenas acciones acumuladas, puedan desarroll ar
virtudes mediante el canto del “Itipiso” 108 veces o el
meditar toda la noche. Cuando los niños pidan sus
bendiciones la mañana siguiente, tendremos al menos
algunas buenas acciones. Hacer esto durante una noche es
preferible a no tener nada con qué ben decirlos. Pero
después, debemos seguir haciéndolo a diario en forma
regular. Al final, sus vidas se verán inundadas con lo mejor”.

Después de estudiar este tema, los lectores sabrán


cómo prepararse para la última etapa de la vida. Es como
imaginarnos que ya somos viejos para poder desarrollarnos.
Porque cuando seamos mayores será difícil cambiar los
malos hábitos; por ello debemos mejorar y eliminar la
codicia, la ira y la ignorancia de nuestra mente. Cuando
llegue la última etapa de nuestra vida, estarem os
preparados para ser una persona digna de respeto para
nuestros descendientes.

Seremos una fuente de sabiduría que ellos


estudiarán y utilizarán como guía.
Capítulo 40

Autoformación en la prudencia
mediante la práctica de la
austeridad (Dhūtanga)9

La vida está llena de incertidumbres y peligros que


acechan a aquellos que viven con imprudencia. Buda una
vez dijo, “Una persona imprudente es como una
persona muerta”. La práctica de la austeridad es una de
las vías para capacitarnos para ser más cuida dosos.

Quizás muchos no sean conscientes de que en el


transcurso de los 45 años de la propagación del Dhamma de
Buda, se nos ha brindado un total de 84 000 enseñanzas.

9
La práctica de eliminación de impure zas mentales
Todas ellas se pueden resumir en una palabra, prudencia.
Antes de entrar al Nirvana, É l utilizó esta palabra en Su
sermón final a Sus discípulos:

“Bhikkhus 10, mis obligaciones que eran de beneficio y


de apoyo para ustedes han sido completadas. Ahora quisiera
recordarles que la naturaleza de toda criatura viviente es la
temporalidad y la degeneración. Por lo tanto, ustedes deben
continuar desempeñando sus obligaciones con prudencia”.

Cuando somos cuidadosos en nuestro accionar,


podemos fácilmente formarnos para ser rectos y virtuosos.
Cuando somos imprudentes, habrá una alta probabilidad d e
tener una mala conducta física, verbal y mental. En
consecuencia, nuestras propias virtudes disminuirán
automáticamente.

Una persona cuidadosa debe prepararse a sí misma


para estar consciente en todo momento. Como seres
humanos, nuestra vida es limitad a. Debemos sacarle el
máximo provecho mediante la acumulación diligente de
buenas acciones. El formarnos para ser cuidadosos es
formarnos para estar constantemente inmersos en méritos.
El lector se preguntará, ¿por qué?

En el budismo, cada individuo real iza buenas y malas


acciones a lo largo de su vida. Sin embargo, la manifestación
de su repercusión kármica será función de su estado mental.
Por ejemplo, si su estado mental es de pura maldad, es
decir, piensa y actúa maliciosamente, sus malas acciones del
presente le abrirán las puertas a malas repercusiones
kármicas del pasado, como el haber matado animales, para
aumentar sus malas acciones actuales y que ambas
corrientes sigan su curso juntas. Por consiguiente, la
duración de su vida terrenal será corta debido a la
repercusión kármica de su pasado y su presente.
Adicionalmente, él enfrentará miserias inesperadas y tal vez
10
Monjes budistas
perderá oportunidades de acumular méritos mediante el
desempeño de buenas acciones.

Por el contrario, si su estado mental está lleno de


méritos, él es amable con los demás o piensa en la
generosidad, en el cumplimiento de los preceptos y en la
meditación, sus buenas acciones del presente le abrirán las
puertas a su buena repercusión kármica del pasado, como la
generosidad, para que trab aje conjuntamente con la
repercusión kármica de sus acciones del presente. Como
resultado, él será más afortunado en esta vida.

Buda comprendió la verdad acerca de la creación de


méritos, que puede ser subdividido en tres períodos
dependiendo del estado de la mente: antes, durante y
después del acto de generosidad. Antes del acto de
generosidad, usted puede acumular mérito
manteniendo un estado mental feliz; durante el
acto de generosidad, éste debe estar despejado y
alegre; después del acto de generosida d, usted debe
recordar dicho acto frecuentemente. Usted puede
acumular méritos mediante la generosidad, el
cumplimiento de los preceptos y la práctica de la
meditación.

¿Cómo puede su mente estar llena de mérito?

Según nuestros ancestros, una de las for mas de lograr


un estado mental lleno de mérito es mediante la práctica
de la austeridad de tres a siete días , que incluyen la
práctica de la generosidad, el cumplimiento de los Ocho
Preceptos y la meditación. Aquellos que desean realizar esta
práctica deben quedarse en un templo. El alojamiento
puede depender de las condiciones geográficas donde se
encuentren ubicados los templos y su capacidad para
acomodar a los visitantes. Las viviendas pueden presentar
ambientes abiertos o cerrados, tales como una peque ña
habitación individual, una casa o incluso una sombrilla
grande a modo de refugio para cada uno instalada al aire
libre en los exteriores.

Puede que algunos duden que las prácticas de


austeridad puedan ayudar a moldear su mente para que se
esté inmersa en mérito o para que el ser cuidadosos se
convierta en su hábito. La respuesta la ofrece el mismo
venerable monje de los capítulos previos.

Él les dijo a los estudiantes que vinieron a practicar la


austeridad en su templo:

“Al practicar la austeridad viviendo bajo una sombrilla


grande en medio del campo se sigue el ejemplo de la
disciplina de los monjes. Buda había establecido reglas para
la práctica de la austeridad debido a estos dos importantes
puntos:

1) La gente en este mundo siente de la misma


manera. Por ejemplo, aunque algunos sean muy
felices ahora, ellos sienten que hay gente que goza aún
de mucha más felicidad que ellos. Por el contrario,
cuando ellos son tan sólo un poco infelices,
sienten que su infelicidad es muy superior a la
de cualquier otra persona en el mundo.

2) La gente no sabe diferenciar entre necesitar


algo y querer algo.

“Como no podemos diferenciar en nuestra vida


cotidiana los problemas, graves de los que no lo son, el
impacto es enorme para la comunidad mundial porque la
gente no diferencia el necesitar del querer.

“Literalmente, necesitar significa la falta de algo


requerido o necesario; por ejemplo, las cuatro necesidades
humanas básicas: alimento, vivienda, vestimenta y
medicinas. Estas necesidades son básicas en nuestra vid a
cotidiana.

“Querer significa el deseo de tener, la voluntad


de tener. Todo lo que sobrepasa las necesidades humanas
básicas hacen referencia a lo que la gente quisiera para
llevar una vida más cómoda. Comúnmente, cuando una
persona desea algo, piensa q ue debe tenerlo porque es
esencial para él.

“Un ejemplo más claro es cuando una persona tiene un


ropero repleto; pero piensa que quiere comprar más de lo
que está de moda. Esto indica que sólo lo quiere, cuando en
realidad no lo necesita.

“Otro ejemplo notable es cuánta mercadería de regalo


se ofrece a los consumidores, algunos compran un artículo
sólo por el regalo que lo acompaña. Eventualmente, llegan a
acumular todo tipo de artículos innecesarios que dejan
regados por toda la casa. Puesto que usted gasta más de lo
debido, al final termina con una cantidad de dinero
insuficiente para cuidar de la familia y se quejan de que no
hay un equilibrio entre sus ingresos y los gastos”.

“Para poder diferenciar entre necesitar y querer,


nuestros ancestros se f ormaron practicando la austeridad
en cada Día Sagrado Budista. Muchos monjes que son
maestros dicen que si se quiere experimentar tal práctica,
puede ir a un templo y vivir bajo una sombrilla grande por
unas cuantas noches. Luego usted entenderá claramente lo
que realmente necesita o quiere en su vida. Con el poco
espacio que hay bajo esta sombrilla grande, con mosquitero,
usted trae consigo sólo lo que de verdad necesita y no lo que
quisiera. Además, si usted pone más cosas en ese reducido
perímetro bajo la sombrilla, quedará muy poco espacio para
poder dormir bien”.
“Luego, el requerimiento de vestirse sólo con ropa
blanca para la práctica de la austeridad es para que usted
tome conciencia y esté atento. Al estar vestido de blanco,
usted tiene que ser cuidadoso al caminar, al comer, incluso
al dormir puesto que se ensucia con facilidad; entretanto,
usted desarrolla la conciencia. Eventualmente, usted será
capaz de contener el hábito de querer.

“Para hacer que usted sea cuidadoso en su vida, debe


comenzar con los tres principios clave del budismo: evitar
malas acciones, realizar buenas acciones y purificar la
mente. Si usted puede completar estos principios, el camino
al Nirvana estará abierto para usted.

"Aún cuando usted los haya practicado al máximo en


esta vida y no haya logrado alcanzar dicho nivel, debe usted
seguir intentándolo. Finalmente, llegará el día, el año o
algún momento en la otra vida cuando usted será la
encarnación de todas las Diez Perfecciones y alcanzará la
cualidad de Arahat (el Pe rfecto), siguiendo a Buda hacia el
Nirvana”.

En base a las enseñanzas del venerable monje, se


puede concluir que cuando uno practica la austeridad de
tres a siete días, uno puede formarse a sí mismo para estar
atento y para que la mente esté inmersa en m érito. Dicha
práctica, además de servir de escape del caos, puede
propiciar un ambiente de paz tanto físico como mental. Al
hacer esto, uno puede acumular méritos en el mundo
religioso. Aún cuando se regrese al mundo secular, uno
trabajará con una mente fr esca, feliz y virtuosa. La persona
desempeñará su oficio a conciencia y con cuidado. Si se
presentaran problemas, éstos serían tratados a conciencia.
Cada vez que usted practique la austeridad, podrá notar la
diferencia y los beneficios que resultan de ell o. Finalmente,
los problemas que uno tuvo en su vida terminarán y serán
reemplazados por más prosperidad porque que su mente
despejada y poderosa está inmersa en méritos.
Imagine que los 60 millones de personas que practican
el budismo en Tailandia se fo rmaran a sí mismas para
prestar atención mediante la práctica de la austeridad, los
problemas en nuestro país se reducirían de la noche a la
mañana. Por lo tanto, el estado mental de todos estaría más
despejado. Si cada templo que existe en el país ofrecie ra
programas para que la gente pueda practicar la austeridad,
se terminarían los problemas en Tailandia. Cuando uno
practica la austeridad en el templo, podemos estar seguros
de que dicha práctica será trasladada también al hogar.
Meditar a diario en casa se haría un hábito. Al final, no
habría más problemas en su vida.

Ésta es la forma de vida que nuestros ancestros


tailandeses heredaron mucho tiempo atrás. No obstante,
cómo esta herencia se recupere y se mantenga depende de
una verdad fundamental: nosot ros debemos ser los
primeros en ponerla en práctica como ejemplo. Más
adelante, podemos invitar a otros a unirse a esta práctica.

Considerando esto como algo de valor, me gustaría


invitarlo a usted y a su familia a practicar la austeridad en
cualquier centro o templo budista de su comunidad. Desde
ya me alegro por sus méritos.
Parte VII

Una sociedad budista


Capítulo 41

Templos abandonados
y templos prósperos

En octubre de 1998, un evento budista importante


ocurrió en Tailandia: se publicar on unos artículos sobre el
Templo Dhammakaya. Recuerdo que cuando la economía
tailandesa estaba debilitándose, el Templo Dhammakaya
estaba siendo atacado simultáneamente por varios medios
de comunicación. Muchos críticos predijeron que este gran
Templo, con un área de más de 3 200 000 metros
cuadrados 11 o aproximadamente 1 000 acres, pronto sería

11
Medida de terreno que en Tailandia corresponde a 1 600 rai.
vaciado. Estaban seguros que sería el más grande de los
templos abandonados en Tailandia.

Muchos, por supuesto, estuvieron atentos a las noticias


sobre el Templo. Luego de dos años, el resultado no fue el
esperado; increíblemente el Templo, logró sobrevivir.
Muchos dijeron que si el gobierno hubiese tenido que pasar
por una situación idéntica a la del Dhammakaya, durante el
mismo período de tiempo, el gobierno habrí a colapsado en
tan sólo unos meses. El parlamento seguramente habría
sido disuelto y se habría convocado a nuevas elecciones.

Sin embargo, durante los ataques despiadados de los


medios de comunicación, muchos siguieron recibiendo
folletos con invitacione s del Templo Dhammakaya para
asistir a sus ceremonias celebradas durante las festividades
budistas. Después de estos eventos, el Templo informó que
un gran número de personas, casi 100 000, participó en
cada ceremonia. Aunque los medios de comunicación
hicieron correr el rumor de que el Templo sobornó a las
personas para ir a los eventos, yo estoy en desacuerdo.
Tomando en consideración tal situación, no veo cómo el
Templo habría podido entregar tanto dinero a los casi 100
000 participantes de cada ceremoni a budista. Si se
hubieran pagado los sobornos, el Templo habría quebrado
inmediatamente. Algo muy importante que vale recalcar es
que algunos de los miembros del Templo están en la cima
de la lista de los hombres y mujeres de negocio más
importantes en Tailandia. Habría sido imposible contratar a
estas personas para que vinieran al Templo. Podemos
concluir entonces que los medios de comunicación crearon
su propia versión de la verdad.

Mientras seguían las noticias sobre el Templo


Dhammakaya, también prest é atención a las noticias sobre
la gran cantidad de templos abandonados en Tailandia. En
esos años, un estudio indicó que había alrededor de 8 000
templos abandonados, equivalentes a casi un tercio del total
de templos, unos 30 000 alrededor del país. Si s e
combinara el área de todos estos templos, el resultado sería
aproximadamente 50 000 acres. Esto hace surgir una
pregunta obvia "¿Por qué fueron abandonados estos
templos?"

Los templos pueden ser clasificados como viejos o


nuevos. Los aproximadamente 30 000 templos viejos
fueron fundados por nuestros ancestros cuando la
población tailandesa tenía alrededor de diez millones de
personas. Por lógica, ¿cuántos templos nuevos fueron
construidos en los últimos treinta años? La realidad es que
los templos viejos están siendo abandonados,
mientras que el número de templos nuevos no ha
aumentado.

En realidad, la situación de los templos abandonados


no ha acabado. Ha habido una cantidad creciente de
informes sobre tierras de templos siendo convertidas en
empresas con fines de lucro. Tales transgresiones
contradicen gravemente los principios y las prácticas
budistas.

En vez de mantener los templos de los ancestros de


nuestro país, algunas personas se aprovechan de la
situación aumentando la cantidad de templos ab andonados.
Más importante aún, nuestros ancestros los construyeron
con la fe y la esperanza de que las futuras generaciones
estudiaran el budismo para entender correctamente las
realidades de la vida. Por eso, si nuestros ancestros
estuvieran vivos aún, no podríamos imaginarnos cómo se
sentirían sobre nuestra falta de consideración por los
templos que construyeron.

El gran número de templos viejos


abandonados me hicieron pensar: ¿cuánto tiempo
más sobrevivirá el budismo en Tailandia? La
situación de los templos abandonados y los intentos
corruptos de grupos poderosos de usar las tierras de los
templos para lucrarse, hicieron que me interesara sobre la
supervivencia del Templo Dhammakaya. Estoy bastante
preocupado por la situación de este Templo. Es un mila gro
que haya podido esquivar tal crisis y los interminables
ataques que ya tienen más de dos años. Aunque parezca
increíble, el Templo se mantuvo en pie a pesar de la presión
social y el clima poco favorable; ambas situaciones fueron
incitadas por los medi os de comunicación. La mayoría de
las personas sólo ha creído o ha escuchado un punto de
vista presentado en las noticias, sin conocer toda la verdad.

¿Cómo logró el Templo Dhammakaya evitar


convertirse en el mayor templo abandonado en
Tailandia?

Los seguidores del templo practican los principios


budistas fundamentales para protegerse de cualquier daño y
fue por eso que el Templo pudo evitar la tragedia del
abandono. Estos principios budistas son la clave para
explicar el abandono de templos en Tailandi a. El Templo
Dhammakaya fue fundado por los discípulos del Gran Abad
Luang Phaw Wat Paknam, el venerable
Phramongkolthepmuni. Ahora por fin entiendo y concluyo
12

que la respuesta es: venerar profundamente sus


enseñanzas.

Un monje, discípulo de Luang Phaw Wat Paknam, me


dijo que cuando el Gran Abad aún vivía, les enseñó a sus
seguidores a construir un templo utilizando las "Tres
Fórmulas Sagradas". Luego, el venerable Luang Phaw
Dhammajayo, el Abad actual del Templo Dhammakaya,
siguió la sabiduría de este gran maestro y pudo construir el
Templo con éxito. Mientras les enseñaba a sus monjes las

12
Redescubridor de la Meditación Dhammakaya. Redescubrió la técnica para meditar que era
originalmente la técnica más corriente para la práctica del budismo. Este conocimiento había
desaparecido 500 años después de que Buda pasara al Nirvana.
mismas fórmulas sagradas, también fue necesario que
pusiera el ejemplo trabajando junto a ellos.

1) La primera fórmula sagrada es la limpieza.

Luang Phaw Wat Pakn am explicó que "cuando un


templo está limpio, las personas que vienen a cultivar
mérito por voluntad propia pueden asegurarse de que cada
centavo de sus donaciones será gastado apropiadamente".

"Inicialmente, los donantes quizás hayan planeado dar


10 baht, menos de 1 dólar estadounidense, antes de venir al
templo. Sin embargo, al llegar, ven que cada rincón parece
estar limpio y cómodo para meditar, pasear, o relajarse
hasta el punto de poder quedarse dormidos en el salón del
templo. Esta muestra de limpi eza y comodidad puede
cambiar el monto de sus donaciones, aumentando de 10 a
100 baht. Si tenían pensado donar 100 baht, entonces
aumentarían el monto de manera exponencial. Por ende, la
limpieza es el atributo más atrayente de un
templo".

"Cuando un visitante llega al templo ¿a dónde se dirige


primero? ¡Al baño, por supuesto! Al entrar al templo,
muchos preguntan '¿dónde está el baño?' No preguntan
'¿dónde está el Abad?' o '¿dónde puedo encontrar al monje
experto en el idioma pali?' Por eso es importan te mantener
los baños y otras instalaciones del templo impecables. De
hecho, todo aquél que venga al templo también debería
hacerse responsable de su limpieza".

"No miren con desdén los aparatos de limpieza como


la escoba, el paño o el basurero como si f ueran objetos
inmundos. Si reflexionamos cuidadosamente sobre estos
objetos, descubriremos que son en realidad 'ángeles de la
limpieza'. Por ejemplo, cuando barremos el piso con una
escoba, ésta es poderosa, como si estuviera acumulando
tesoros o donaciones para el templo. Tal como
mencionamos anteriormente, la limpieza es el atributo más
atrayente de un templo, así que estos poderosos aparatos de
limpieza, o 'ángeles de la limpieza', pueden ayudar a
aumentar las contribuciones para apoyar el budismo".

"Luang Phaw Wat Paknam también dijo que los


templos sucios, con santuarios y residencias monásticas
desordenadas, harán que se vayan los donantes que
mantienen estos edificios cada vez que vienen a hacer
mérito. Los donantes pensarán que para el templo, la
manutención de sus instalaciones no es importante. En el
futuro, cuando el templo pida contribuciones para construir
otro edificio o algo más, los donantes quizás pregunten 'si
no son capaces de mantener limpias las instalaciones
antiguas, ¿cómo mantendrán limpias las nuevas?' Por
supuesto, el templo caería en desgracia ".

"Si el templo mantiene sus áreas limpias en todo


momento, si cada rincón está impecable y cómodo para
meditar, pasear e incluso tomar siestas, existe una gran
posibilidad de que las perso nas se sientan inspiradas a
hacerle propuestas al abad, '¿ Luang Phaw, desea construir
otro edificio? Aunque no tengo dinero, puedo instar a mis
amigos a hacerle donaciones" .

La limpieza puede convencer a los laicos a que se


conviertan en contribuyentes d el templo y lleven una vida
de virtud perpetua. De esta manera, los monjes y los monjes
novicios ya no tendrán que hacer sus rondas para pedir
limosnas; podrán pasar la mayor parte de su tiempo
estudiando la teoría del budismo y meditando. Así,
beneficiarían a las personas comunes impartiendo su
sabiduría.

Cuando los laicos hacen contribuciones, el templo no


debería quedarse con el dinero por mucho tiempo; debería
comenzar inmediatamente el proyecto por el cual las
personas hicieron donaciones. El templo debe hacer buen
uso de las contribuciones lo más pronto posible, es
imprescindible que cumpla sus compromisos. Por ejemplo,
si se había planeado construir un Salón para el Dhamma o
un alojamiento para monjes dentro de poco, entonces estos
planes deberían llevarse a cabo. En resumen, el templo debe
producir resultados lo antes posible.

Por lo tanto, la primera fórmula sagrada es la


limpieza; en otras palabras "la fórmula sagrada para
obtener tesoros" de Luang Phaw Wat Paknam.

2) La segunda fórmula sagrad a es perseverar con


la enseñanza.

Luang Phaw Wat Paknam explicó que aquellos que


creen en el budismo y que tienen la determinación de
fundar y ayudar al templo, deben perseverar en sus estudios
y enseñanzas del Dhamma. Los laicos ofrendan comida a los
monjes diariamente en el templo; si los monjes no les
enseñan el Dhamma a cambio, creerán que no han obtenido
nada de sus visitas al templo. Sería aún peor si los monjes
dieran por hecho que se les harán ofrendas y las aceptaran
sin dar nada a cambio. Esto h aría que muchos se
preguntaran por qué están en el templo.

Es fácil encontrar un tema apropiado para enseñar. Se


pueden descubrir pistas en los rostros de las personas.
Usualmente, una persona tiene diferentes problemas en su
vida y muchas veces, el sufr imiento se refleja en su cara. Los
monjes entonces deben escoger un tema adecuado del
Dhamma para enseñarle a esa persona hasta que lo
entienda y pueda resolver sus propios problemas. El monje
debe inculcar el tema apropiado del Dhamma en la mente
del oyente para acabar con su miseria, tal y como cuando se
cura una infección con el medicamento correcto.

Cuando se inculca a alguien las enseñanzas de Buda


éste desarrolla fe y buena voluntad para ayudar a los monjes
y novicios en el templo. Esta persona pod rá considerar su
contribución al templo como una "riqueza terrenal"
mientras que en realidad, lo que recibe a cambio es mucho
más que eso: se le entregan " riquezas nobles" (enseñanzas
del Dhamma) con las cuales podrá aplacar el sufrimiento
que sentirá en su vida. Esta "riqueza noble" de las
enseñanzas del Dhamma es inigualable.

Por lo tanto, la segunda fórmula sagrada de la


perseverancia con la enseñanza se llama "la
fórmula sagrada para la movilización" de Luang
Phaw Wat Paknam.

3) La tercera fórmula s agrada es la frecuencia con


que se practica la meditación.

Luang Phaw Wat Paknam explicó que el propósito de


la ordenación es el alcanzar el Nirvana. 13 El Nirvana se
obtiene meditando frecuentemente.

También agregó que la esencia de todas las enseñanzas


de Buda pone énfasis en la meditación. Por ende, los monjes
deben practicar la meditación con regularidad y con
frecuencia para eliminar sus impurezas mentales. La única
manera de lograr esto es identificando las impurezas
mentales y los monjes sólo puede n identificarlas si son
capaces de ver dentro de su propia mente; sólo podrán ver
su mente si practican la meditación hasta que su mente
llegue a un nivel profundo de paz y se vuelva tan brillante
que su mente vea a través de la luminosidad.

La mayoría de las personas de este mundo no pueden


ver su propia mente porque no meditan. Como resultado
son presa fácil de sus impurezas mentales, lo cual puede
traer caos interminable al mundo. Cuando las personas ven
el esfuerzo de los monjes para meditar, se sentir án
inspirados a hacer lo mismo.
13
La extinción de todas las impurezas mentales y el sufrimiento. La felicidad suprema.
Cuando las personas vienen a hacer mérito, los monjes
deben enseñarles el Dhamma, y cómo practicar la
meditación. Una vez que su mente haya sido purificada y
esté tranquila, la luz surgirá naturalmente. La claridad en la
mente aumentará y traerá pensamientos puros. Las
personas podrán ver claramente los métodos sanos para
hacer más mérito.

Por lo tanto, la tercera fórmula sagrada es la


frecuencia con que se practica la meditación o "la
fórmula sagrada del éxito" de Luang Phaw Wat
Paknam.

Después de conversar con el monje, entendí


claramente cómo el Templo Dhammakaya pudo evitar tal
crisis. Todos los templos que pongan en práctica estas Tres
Fórmulas Sagradas de Luang Phaw Wat Paknam, no serán
abandonados. De esta manera, má s personas irán a hacer
mérito y estudiarán el Dhamma en esos templos.

Lo que pude concluir de mi investigación sobre el


Templo Dhammakaya es que los hombres budistas en edad
de jubilarse deberían pensar en convertirse en monjes para
ayuda a revivir los templos abandonados. Pueden aplicar su
experiencia de vida y sus conexiones sociales para
beneficiar el budismo, restaurando los templos
abandonados o apoyando los nuevos. Posteriormente,
deberían administrar el templo con las Tres Fórmulas
Sagradas de Luang Phaw Wat Paknam. Al final, los templos
prosperarán una vez más. Los templos en Tailandia no
entrarán en decadencia y el budismo se prolongará.
Capítulo 42

Cómo resolver la crisis del


budismo

Durante los últimos veinte años, cada vez que se acerca


la importante ceremonia budista llamada Kathina 14, las
noticias en los medios de comunicación sobre monjes que
han violado la disciplina monástica predominan. Estas
noticias causan que muchas personas pierdan su fe en el
budismo y que se generalice la creenc ia que los monjes no
merecen su reverencia. Además, esto tiene un gran impacto
sobre los más de 300 000 monjes y novicios en todo el país.
14
Ceremonia anual de ofrenda de vestiduras en el mes después del fin del Retiro Budista
(temporada de lluvias)
Cuando la gente pierde su fe en el budismo, no enseña
a sus hijos a presentarles sus respetos a los monjes. No
muestran interés en el estudio de las enseñanzas de Buda y
dejan de hacer méritos. Se paralizan todas las actividades
en el templo, los eventos y las ceremonias. Disminuye el
número de budistas. Sin embargo, es una noticia entre
bastidores que esta situación la provocan unos cuantos
escritores, ansiosos por ocasionar un deterioro en el
budismo. Cuando escuchamos malas noticias sobre
los monjes, como budistas, ¿cómo debemos verlas
de manera correcta y qué debemos hacer para
preservar el budismo?

Cuando hay publicaciones sobre monjes que violan la


disciplina monástica y que no merecen el respeto de la
gente, los adultos deben enseñar sus hijos a analizar estos
temas en la forma correcta:

1) Cuando los medios publican artículos sobre


monjes que infringen su d isciplina monacal, no
debemos precipitarnos y creerlo. Debemos usar
nuestra sabiduría basada en la razón. De hecho,
estos monjes tienen que pasar por un proceso
judicial realizado por la Sangha. No debemos
involucrarnos. La Sangha castigará a los monje s
conforme a la disciplina monástica.

Un venerable monje dijo una vez: “El budismo es


como un gran lago; quien lo alcanza y se baña en el estará
limpio. Sin embargo, el que lo alcanza y no se baña
permanecerá sucio. Tal como convertirse en un monje en e l
budismo, cualquier monje que practica la meditación
intencionalmente pensará, hablará y actuará de manera
pura. Cualquier monje que no practica la meditación
permanecerá impuro”.
Buda estableció la disciplina monástica y los laicos
deben confiar en la S angha para tratar estos casos.
Normalmente, un monje observa 227 preceptos y un laico
guarda sólo cinco preceptos. Aunque el monje desobedeció
la disciplina monástica, con o sin su conocimiento, el
venerable monje a cargo del templo es responsable de su
interrogatorio. Dicho monje examinará todas las pruebas e
interrogará a todos los testigos. Es incorrecto que los laicos
juzguen independientemente a un monje según sus propios
sentimientos.

Si un monje efectivamente viola la disciplina monacal


y sus acciones son tan graves que justifican que se despoje
de sus vestiduras, entonces tiene que hacerlo y salir del
templo. Sin embargo, si sus acciones no son tan severas y
son el resultado de su propio descuido, entonces se le da
una posibilidad para corregirs e. Si un monje no sólo viola la
disciplina monástica sino que también la ley tanto la Sangha
como el poder judicial tienen la responsabilidad de llevarle
a la justicia.

En resumen, si un monje quebranta la disciplina


monástica, es erróneo que los laicos lo juzguen solos. Es
también equívoco que la prensa publique las noticias
basadas en sus propios intereses. Deben recordar que la
Sangha tiene jurisdicción sobre un monje. Cuando se le
sentencia la gente no debe criticar, ni comentar la sentencia.
En caso de hacerlo, se le considera un acto pernicioso en el
budismo, aun si la gente no lo sabía.

2) Cuando se publican noticias negativas sobre


los monjes, no generalicen y piensen que todos
los monjes de Tailandia son problemáticos.

Nadie puede detener a l a prensa de la publicación de


noticias negativas sobre los monjes que violan la disciplina
monástica. Su trabajo es divulgar las noticias a la sociedad.
Sin embargo, si un periódico sólo publica las noticias
negativas sobre los monjes, y no sobre otros m onjes que han
dedicado toda su vida a desempeñar actos buenos, se
considera una información muy sesgada de su parte.

Muchas personas no se detienen a pensar en cómo ha


sobrevivido el budismo hasta el día de hoy. Sin los muchos
monjes virtuosos que han prolongado el budismo, éste ya
hubiera desaparecido de Tailandia. Aunque los monjes
desempeñan un papel verdadero en la sociedad de hoy, los
medios de comunicación continúan ignorando este hecho y
casi nunca informan sobre sus actos benévolos. Los actos
negativos de los monjes parecen salir con más frecuencia en
sus artículos.

La continua aparición de noticias negativas sobre los


monjes, opacan las pocas noticias positivas que se publican.
Por lo tanto, muchas personas no entienden bien y
terminan concluyendo que la mayoría de los monjes se
dedica a la mala conducta. Cada vez que la prensa
emprende un ataque contra los monjes, en la que parte de la
información es falsa, el público cree y se convence con estos
datos. Es más, se desprecia a los monjes com o si fueran una
carga para la sociedad, además se busca cualquier error o
defecto en ellos. La falta de publicación de artículos sobre
los cientos de miles de monjes que desempeñan actos
buenos, ha causado que la fe de la gente en el budismo
disminuya.

Aquí tenemos los testimonios de ciertos venerables


monjes que han dedicado sus vidas al beneficio del budismo
y de la sociedad y quienes han sido afectados por las
noticias:

“Hoy en día, es muy difícil que los monjes enseñen a la


sociedad. A los medios de comunicación les parecen
equivocados nuestros esfuerzos para enseñar la moralidad y
la dignidad humana. ¿Por qué es malo enseñar? Desde la
perspectiva de los medios, nuestro enfoque no es lo
suficientemente bueno. Cuando los monjes tratan de
aconsejar a la sociedad, se nos condenan diciendo que no es
nuestro deber y que no debemos involucrarnos. Sin
embargo, cuando permanecemos callados dentro de
nuestros templos mientras ocurre un problema social, ellos
nos critican de nuevo diciendo que no somos di gnos de la
sociedad. Los medios condenan a los monjes de cualquier
modo”.

Después de escuchar a estos venerables monjes,


nosotros debemos analizar con profundidad las noticias que
oímos. Es muy importante distinguir entre las acciones de
una sola persona y las de la comunidad monástica en su
totalidad. Se puede resumir esta situación con el siguiente
dicho: una manzana podrida echa un ciento a perder. Si la
gente piensa de esta forma, puede hacer daño al budismo
sin saberlo. Ésta, por cierto, no es la naturaleza de un
budista. Los budistas tienen que considerar todos
los aspectos, tal como dijo Buda: “No crea en algo
sin analizar todos sus aspectos primero”.

3) Alguien que tenga éxito con el Dhamma no


debe criticar a los monjes, sino que debe apoyar
la difusión del Dhamma al máximo.

Con respecto a este punto, quisiera compartir un


ejemplo que dio un venerable monje durante un discurso a
un grupo de estudiantes universitarios.

Hubo un laico que había leído bastantes noticias


negativas sobre los monjes y generalizaba diciendo que
todos eran problemáticos. Por eso expresó su preocupación
cuando conoció al venerable monje, y dijo:

“Hoy en día, los monjes no se comportan bien


y no merecen mi reverencia. Así que, quiero
presentarle mis respetos solamente a Buda y al
Dhamma. Mi pregunta es: “¿p uedo no presentarle
mis respetos a la Sangha?”

Su pregunta era delicada, difícil de responder y tenía


un posible impacto amplio en la comunidad monástica. Si
el venerable monje no le daba la respuesta correcta,
posiblemente toda la clase con quien hablaba perdería su fe
en toda la comunidad monástica.

No obstante, el venerable monje bien respetado sólo le


sonrió y contestó con calma. “Quien respete al
Dhamma tiene que ser una persona que no le gusta
criticar a los demás y que le gusta descubrir las
virtudes y bondades de otros”.

“Pregunta si puede dejar de presentarle sus respetos a


los monjes, pero continuar respetando a Buda y al
Dhamma. La respuesta es, “No”. Cuando se queja diciendo
que los monjes son problemáticos, esto muestra que usted
tiene el hábito de criticar a los demás. Esto indica que a
todo le encuentra defectos, que no es capaz de observar y
que llega a conclusiones fácilmente”.

“Hay casi 300 000 monjes en este país. ¿Cuántos


conoce usted? Yo diría unos 1 000 como mucho. De ser
cierta su apreciación de que todos se han dedicado a la mala
conducta, ¿qué pasa con los casi 300 000 restantes? ¿Qué
piensa usted sobre ellos?”

“Usted tiene el hábito de encontrar los defectos de los


demás; nunca va a conocer buenos monjes en esta vida. Ha
cerrado su mente al punto que no puede ver nada bueno.
Pienso que debería aprender a ver desde otra perspectiva”.

“¿Por qué no ve a un templo como si estuviera


examinando una escuela laica o un instituto? Enc ontrará
que las personas en la escuela se dividen en dos grupos:
1. El estudiante quien busca el conocimiento.

2.El maestro quien imparte su conocimiento.

“Los estudiantes buscan el saber de las escuelas, las


universidades y los institutos. ¿Cree que en alg ún momento
se habrían comportado mal cuando eran estudiantes? Claro
que sí. ¿Nosotros, como adultos, tomamos en serio sus
percances? No creemos que hayan venido a la escuela para
aprender y por lo tanto deberíamos perdonar su
imprudencia y mala conducta . Ahora bien, si un maestro se
comporta de manera poco apropiada, los estudiantes creen
que debería ser castigado. Sin embargo hay también dos
tipos de monjes en un templo:

1. Un monje estudiante.

“Los monjes estudiantes vienen al templo para


aprender. Algunos se ordenaron hace dos días, otros se han
ordenado hace dos meses mientras que otros aún se han
ordenado hace años. Sin duda, están todavía aprendiendo y
son nuevos a la disciplina monástica. Como resultado, a
veces se comportan inadecuadamente per o sin querer. Esto
es común y probable para cualquier monje estudiante.
Piense por un momento: ¿deberíamos encontrarles defectos
a todos?

2.Un monje maestro.

“Hay más de 100 000 monjes profesores que viven en


los templos por todo el país. Es obvio que s in los monjes
maestros para impartir su conocimiento a los demás y para
mantener el budismo durante la época de nuestros
antepasados, el budismo podría ya no existir”.

“Se nota que todos los monjes maestros con mucho


conocimiento y buena conducta están mu y ocupados con
sus tareas. No es su naturaleza promover públicamente sus
propias bondades. Algunos de estos monjes practican el
Dhamma piadosamente. Algunos moran en los bosques y
aparecen en las aldeas de vez en cuando. Algunos residen
en las ciudades para entrenarse a sí mismos y a sus
estudiantes. Nunca promueven sus bondades a los medios
de comunicación porque ellos son puros y morales. Esto se
ilustra en un proverbio tailandés: Ningún sonido sale al
agitar una botella llena de agua. Esta frase s ignifica que una
persona repleta de virtud y bondad nunca será presumida”.

“En las escuelas laicas, podemos distinguir entre los


maestros y estudiantes por su edad y su ropa. Sin embargo,
en los templos todos llevan el mismo uniforme de mantos
de color azafrán y es muy difícil distinguir entre los monjes
maestros y monjes estudiantes. Por lo tanto como ha visto
como mucho a mil monjes comportarse mal llega a la
apresurada conclusión de que no debe prestarles sus
respetos. Debe pensarlo bien y preguntars e: “¿hago lo
correcto?”

“La próxima vez que haga una donación a la Sangha,


cuando no sabe quien es un monje maestro, ni un monje
estudiante y cuando tampoco sepa los niveles de virtud de
los monjes, debería pensar de esta manera. Debería pensar
que está dando limosnas para reabastecer la energía, para el
estudio del Dhamma y la práctica de meditación a los
monjes que no quiebran seriamente la disciplina monacal.
En el futuro, cuando se reúna con un monje quien usted
sabe que es un maestro, debería hacer donaciones
intencionales lo mejor que pueda. Tanto el que recibe como
el que ofrece recibirán plenos efectos meritorios”.

“Cuando se sepa de monjes que tengan moralidad y


buena conducta, aunque vivan lejos, debería hacer lo
posible para ir a visitarlos. Se cumplirá su deseo porque
ellos representan su mejor fuente de mérito. Si éste no es el
caso, debería tener paciencia y continuar con diligencia su
estudio del Dhamma y su práctica de la meditación”.
“Debería abrir la mente sin limitaciones y algún dí a
encontrará un monje que le entienda o que usted desee
formar parte de su fuente de mérito. No se apure a rendir
homenaje solamente a Buda y al Dhamma. Ha de
completar el triángulo y rendir homenaje a las Tres Joyas.
Si lo hace, será capaz de alcanzar nada menos que los reinos
celestiales en esta y en la otra vida, hasta que llegue al
Nirvana”.

Este ejemplo, tal como el venerable monje lo expresó,


trata el tercer asunto. Yo respeto mucho a este venerable
monje por su inteligencia, capacidad y en parti cular por su
aptitud para invertir la crisis en la fe budista.

Las circunstancias negativas que resultan de


leer las noticias sin la debida atención

Si los padres no les enseñan a sus hijos a analizar


exhaustivamente la verdad en los artículos sobre los
monjes, los niños podrían creerlos sin pensar. Esto podría
causar que ellos y nosotros perdamos las oportunidades
para cultivar mérito. Cuando ellos generalizan demasiado
que todos los monjes no son morales, se formarán
opiniones sin un análisis profund o y terminarán aceptando
noticias sesgadas. Inclusive podrían perder interés en el
estudio del Dhamma, lo cual resultará en una falta de
entendimiento sobre la vida. No entenderán que tienen que
acatar ciertas leyes que gobiernan el mundo y nuestras
vidas. Se enseña este conocimiento en el budismo y esto le
permite al estudiante seguir por el camino correcto en la
vida.

La regla que gobierna este mundo es la Ley del


Karma. Ésta significa que “un buen acto genera un buen
resultado y un mal acto genera u n mal resultado.” Las
consecuencias de un buen acto se llaman “los frutos del
mérito” y las consecuencias de un acto malo se llaman “la
repercusión kármica”. Básicamente, cada persona es
responsable de sus propias acciones. Los frutos del mérito y
la repercusión kármica no responden a ninguna creencia
personal, sino que responden a las reglas que gobiernan
este mundo.

La regla que gobierna la vida es la Ley de las


Tres Características de la Existencia (tilakkhana),
que consiste de la impermanencia ( aniccata), el sufrimiento
(dukkhata) y el Yo irreal (anattata). Esta verdad es
intrínseca a todos los seres en este mundo.

Buda descubrió las verdades de la Ley del Karma y las


Tres Características de la Existencia. Además, él encontró
cómo la comprensión d e estas leyes representa la forma de
liberarse del sufrimiento.

Cuando los niños leen las noticias sin la debida


atención, serán ignorantes de las enseñanzas de Buda y
tendrán también ideas falsas sobre los monjes. Además,
podrían llegar a hacer caso o miso de la verdad de la Ley del
Karma. Cuando la falta de comprensión llegue a este nivel,
aun cuando sus padres o abuelos deseen con todo el corazón
hacer el mérito, nosotros podemos estar seguros de que sus
hijos no estarán dispuestos a apoyarlos. El p eor de los casos
es cuando los niños obstruyen el deseo de otras personas de
realizar buenos actos. Piensan que hacer méritos es un
desperdicio y dar limosnas a los monjes alienta la
indolencia Esta misma forma de pensar la utilizan aquellas
personas que no creen en la Ley del Karma.

Es muy difícil persuadir a la prensa para que aumente


su cobertura noticiera sobre los monjes que han dedicado
toda su vida al mejoramiento de la sociedad. Como padres,
debemos enseñarles y hacer que nuestros hijos evalúen
cuidadosamente y diferencien entre lo que está bien y lo que
está mal antes de llegar a una conclusión sobre los monjes.
No tomen una decisión apresurada. Si nuestros hijos siguen
estos criterios, como padres, tendremos la garantía de que
su apoyo nos permitirá hacer méritos durante nuestros
últimos días. A la vez, los monjes y los novicios recibirán
apoyo y podrán pasar su tiempo desarrollando sus virtudes
beneficiando a la sociedad. Podremos estar seguros que el
budismo será fuerte y estable en Taila ndia por muchos años
más.
Capítulo 43

Buda – Un modelo de sabiduría

Habiendo experimentado mucho en la vida,


entendemos claramente el significado de las vicisitudes.
Nadie merece la suerte o el infortunio a lo largo de la vida;
la vida está llena de felicidad y de dolor. Debemos tener esto
en mente: cuando uno está feliz, no se debe exagerar, pues
esta felicidad puede causar dolor otros. Cuando uno está
triste, uno no debe sumirse en su dolor, sino que debe de
tener el valor de hacer frente a sus pr oblemas y
solucionarlos.

Debemos buscar el refugio en nuestra propia sabiduría


cuando sentimos dolor y felicidad. Podemos apreciar que la
sabiduría suprema y pura de Buda sobre cómo conducir
nuestra propia vida no se puede comparar con ninguna otra
teoría que nos enseñe cómo conducir nuestra vida de una
forma correcta. Es la mejor práctica para hacer frente a las
vicisitudes en nuestras vidas. Su sabiduría puede
verdaderamente ser un modelo noble para otras enseñanzas
en este mundo, tanto para los budist as como para los no
budistas.

Causas de las vicisitudes de la vida

Mucha gente desconoce las causas de las vicisitudes de


la vida. Algunos creen que están determinadas por la
astrología. Algunos también creen que son causadas por un
dios. Y otros creen que ocurren debido a su propio intelecto
y competencia.

Sin embargo, Buda descubrió la verdad sobre la ley


inevitable de la causa y del efecto, que en el budismo es la
Ley del Karma. Él enseñó que quienquiera que realice una
mala o buena acción recib irá las consecuencias de sus
acciones.

Así, Buda nos enseña que cuando encontremos


dificultades, debemos analizarlas cuidadosamente de tres
maneras:

1) Dependiendo de lo causado por nuestro


incumplimiento de los preceptos en el curso de la vida
actual.

2) Dependiendo de lo causado por nuestro


incumplimiento de los preceptos en el transcurso de
nuestras vidas anteriores.

3) Dependiendo de lo causado por nuestro propio


descuido.
Estas tres razones son los orígenes de los problemas de
nuestra vida, ya sea que lo recordemos o no.

Por estas razones, cuando surge algún problema serio,


Buda nos enseña a no crearnos a nosotros mismos más
problemas. Debemos sólo observar los preceptos tan
puramente como sea posible.

Si conducimos nuestras vidas en e l mundo secular,


debemos cumplir los Cinco Preceptos. Los monjes deben
seguir estrictamente los 227 Preceptos. Las monjas, así
como las personas que se residen en los templos para
ayudar con las tareas budistas, deben observar
estrictamente los Ocho Precep tos. El cumplimiento de estos
preceptos evitará que creemos nuevos problemas.

Buda enseñó estos preceptos de modo que pudiéramos


conocer los estándares de la moralidad. Si no seguimos Sus
enseñanzas, es posible que siempre estemos enfrentando
problemas. Podemos solucionar un problema, pero no
podemos prevenir que ocurra el próximo. Son
interminables. Cuando tengamos un problema, debemos
rápidamente solucionarlo cumpliendo con los Cinco
Preceptos al pie de la letra y así será más fácil enfrentarlos.

Después, podemos solucionar los problemas que se


presenten según las diferentes circunstancias, mirando los
principios budistas para la solución.

Por ejemplo, si el problema gira entorno a la


abundancia o a un problema monetario éste puede ser
solucionado con generosidad.
Los malentendidos pueden ser solucionados
mejorándose uno mismo, enseñándonos humildad y
modestia. Puede haber momentos en los que se requiera
una disculpa. Algunas dificultades son causadas por nuestro
propio descuido, quizá dañando otras posesiones, este
problema puede resolverse con una compensación
económica al propietario.

Sin embargo, cuando ocurre un problema, debemos


ponerle fin. El primer paso es inmovilizar nuestra mente
practicando la meditación hasta que la mente se
encuentre concentrada.

La meditación puede ayudarnos a considerar


claramente el problema. Si no estamos seguros de cómo
ocurrió el problema, no debemos sacar conclusiones sobre
su resolución. Debemos estar tranquilos mientras buscamos
una solución. Algunos problem as no pueden ser
solucionados inmediatamente y requieren nuestra
paciencia.

La solución de Buda

Hay un canto que oigo a los monjes cantar cada


domingo cuando voy al templo. Cuando los visitantes del
templo hacen sus ofrendas a los monjes, ellos los ben dicen
como respuesta, con dos o tres cánticos. Hay uno que
comienza con la palabra en lengua pali "Bahuń”, que
simplemente se llama el Canto del Bahuń”. El Canto del
Bahuń recita las maneras correctas de resolver problemas
según lo enseñado por Buda. El Canto se divide en ocho
partes, a pesar de que hay siete maneras. Cuando Buda
enfrentó problemas serios, los resolvió uno por uno
sucesivamente.

1) Cuando Buda enfrentó al “Gran Māra” (el Mal) y a sus


tropas que intentaban evitar que llegara a ser iluminad o,
resolvió este problema recordando la fuerza de sus Treinta
Perfecciones, las “30 Pāramī” 15 en pali. En este caso,
específicamente nombró la “ Pāramī de la Generosidad” o la

15
Las perfecciones espirituales a las que Buda se dedicó durante 20 Asańkheyya (incontables
tiempos) y 100 000 kappa (los grandes ciclos del mundo)
Perfección de la Generosidad, que se acumuló a través de
sus infinitos ciclos de renacer y a través de la cual propaga
su bondad a todos los seres. Al final, derrotó al “Gran
Māra”. De igual manera, si encontramos inmensas
dificultades podemos tratarlas con generosidad.

2) Cuando Buda se enfrentó con el Gigante Alavakā, un


demonio que se encolerizaba fácilmente, conquistó su
cólera con entereza (khanti). Aguantó lo que le exigió el
gigante y éste sucumbió ante la entereza de Buda,
moderando enormemente su terquedad y su dureza hacia
Él. El gigante pensó que aunque a Buda le molestaba
mucho, Buda había sido paciente con él. El gigante
desarrolló entonces simpatía hacia el maestro e inició una
conversación con Buda.

Así, cuando hacemos frente a una persona


enojada la mejor solución es ser resistentes .

3) Cuando Buda se enfrentó con un furio so elefante,


similar a una persona frenética, Su solución fue propagar la
benevolencia. Al poco tiempo, cuando la gente recibe y es
movida por la benevolencia, su corazón se expandirá y será
capaz de perdonar y entender al prójimo.

4) Cuando Buda hizo fren te a Angulimāla, un asesino que


pretendía destruirle, Su solución fue hacer que se rindiera
combinando sus poderes sobrenaturales y un sermón
apropiado con la situación, con el fin de hacer que
Angulimāla creyera en Sus enseñanzas.

En nuestro caso, no tenemo s poderes sobrenaturales


como Buda, pero en cualquier caso si hacemos frente a un
asesino, podemos depender de la policía y de la ley.

5) En una ocasión, Buda fue acusado en público. Ese día,


mientras Él enseñaba Dhamma a sus discípulos, una bella
mujer llamada Savatthi, se paró en medio de un gran
número de gente en la sala de Dhamma y le dijo a Buda que
estaba embarazada de él. Ella dijo “Maestro Buda, usted
enseña a los demás pero no a nuestro descendiente en mi
matriz, ¿Qué debo hacer? ¡Estoy a pu nto de dar a luz!” La
solución de Buda a esta situación fue continuar estando en
calma y en silencio.

Éste es un buen ejemplo para otros monjes venerables


y adultos respetados que hacen frente a situaciones
similares. En algunas situaciones el silencio es la mejor
solución y sólo el tiempo les dará la razón. De hecho hay dos
temas con los que tenemos que ser cautelosos: la conducta
sexual y el dinero.

Concerniente a la conducta sexual, cuando los monjes


venerables o adultos son acusados por otra persona, el 90%
de la gente creerá en tales acusaciones sin pensar. Como
resultado, el silencio es la mejor solución y el tiempo dirá.
La verdad pronto será revelada a la gente.

Con respecto al dinero, cuando los monjes son


falsamente acusados en asuntos financ ieros, a menudo es
difícil saber cómo disputar tales alegaciones. Si un
respetado adulto es incorrectamente acusado de corrupción,
también es difícil discutir tal cuestión. De acuerdo con los
principios budistas, no hay lucha ni huida del enemigo; el
silencio restante es lo más seguro. El silencio en estos casos
no significa culpabilidad o rendición. Significa que uno está
esperando el momento apropiado para declarar su
inocencia. Para elaborar:

“No luchar” significa no acusar al otro.

“No huir del enemigo” significa no rendirse y no


conformarse con la acusación.
La persona acusada debe continuar realizando
buenas acciones tanto como pueda. La disciplina estricta
ayudará a protegerle y al final la situación mejorará.

6) Cuando Buda hizo frente a un experto en un debate, Él


usó Su sabiduría para resolver este problema. Cada una
de Sus palabras poseía la verdad, la corrección y la razón.

7) En una ocasión, el venerable Moggallana, 16 uno de los


representantes de Buda, reprimió a la gran serpien te
llamada Nandopānanda. Nandopānanda poseía una
Visión Incorrecta y era sumamente venenosa. Así, el
venerable Moggallana utilizó poderes sobrenaturales para
derrotar a la obstinada serpiente.

8) Cuando Buda encontró un ser que poseía Visión


Incorrecta, tal como un brahmán, Él usó un alto nivel de
sabiduría budista con el fin de igualar el nivel del
brahmán y poder persuadir al brahmán para que aceptara
una Visión Correcta.

“Hacemos frente a obstáculos menos exigentes que los


que Buda encontró en Su vida. Aún enfrentándonos a
nuestros obstáculos, deberíamos seguir los pasos de Buda.
Debemos primero escudriñar nuestra capacidad de observar
los preceptos y mejorarnos. Cuando nos conducimos bien,
todo lo bueno nos seguirá".

Recuerda, no importa cuán serios sean nuestros


problemas, debemos ser pacientes y solucionarlos. La
mayor parte de nuestros problemas fueron causados por
malas acciones en el pasado.

Debemos recordar que cuanto más oscuro llega a ser el


cielo, más temprano llegará el amanecer. Debemos mirar
16
Uno de los dos principales discípulos de Buda que sobresalió al resto por sus energías
psíquicas.
a Buda como un modelo de conducta cada vez que
nos desalientan. Estaremos inspirados para ganar la
fuerza, la paciencia, el conocimiento y la sabiduría
necesarios para solucionar problemas de la manera
correcta. Al final, estaremos libres de la recompensa
kármica a la que ahora nos enfrentamos.
Capítulo 44

Aportar con una imagen de Buda 17


– El Cuerpo de la Iluminación

Donar una imagen de Buda para uno mismo o su


familia fue una de las tradiciones favoritas de nuestros
ancestros. La gente más rica viajaba por todo el país con el
propósito de contribuir con imágenes de Buda para los
diferentes templos. Entendían que de esta forma, ganarían
méritos.
17
Este capítulo se basa en una tradición de la sociedad budista en Tailandia : los budistas
tailandeses creen que la contribución o la donación para la construcción de una estatua o
imagen de Buda es una forma de acumular gran mérito y una forma de preservar el budismo
para su pueblo.
Hoy en día, mucha gente no entiende la verdadera
razón que se esconde tras esta tradición. Com o resultado,
no apoyan las prácticas de sus abuelos. Por esta razón,
lamentablemente los ancianos pierden una gran
oportunidad para realizar un mérito significativo al final de
su vida. Como budistas, debemos examinar este hecho de
modo que no perdamos la oportunidad de hacerlo también.
Debemos entender claramente la importancia de contribuir
con una imagen de Buda de modo que no estemos apoyando
a nuestros abuelos a realizar gran mérito.

Quisiera aprovechar la oportunidad de compartir con


usted las ventajas que resultan de realizar actos de mérito.

Los antepasados de nuestro país tendían a donar


imágenes de Buda porque veneraban la gran compasión de
Buda hacia todos los seres. Ésta sería una buena forma de
demostrarle gratitud.

En la historia budista, existen personas determinadas


a convertirse en un Buda (un Iluminado) en el futuro, para
liberar a la gente del sufrimiento; este tipo de personas casi
no existen en este mundo. Este tipo de persona se llama un
Bodhisatta. 18

Los Bodhisattas dedicaron su vida a las perfecciones


espirituales y borraron exitosamente sus manchas, pero
aparecían con muy poca frecuencia. Algunos alcanzaron sus
metas y otros se dieron por vencidos a lo largo de la vida.

Para conseguir la Cualidad de Buda, un Bodhisatta


debe dedicar su vida a la virtud. En el transcurso de su vida
deberá conocer a un Buda que le asegurará su futura
Cualidad de Buda y le informará de cuánto tiempo requerirá
para lograr la Iluminación como un Buda.

18
Aspirante a ser un Buda.
El Bodhisatta, que recibe la confirmación de su futura
Cualidad de Buda por un Buda, es llamado Niyata-
Bodhisatta, que significa una persona que definitivamente
obtendrá la Iluminación y llegará a ser un Buda en el futuro.
Después de haber sido informado por un Buda, el Niyata-
Bodhisatta debe continuar persiguiendo las perfecciones
durante al menos cuatro A sańkheyya (tiempo infinito) más
100,000 kappa (el ciclo del nacimiento y muerte en el
mundo). Esto significa que él debe continuar en el ciclo de
la existencia por una cantidad de tiempo indefinida para
lograr la Cualidad de Buda. Conforme se aproxima a es ta
hazaña, los obstáculos son cada vez más difíciles,
requiriendo la dedicación por entero de su ser, para
eliminar sus impurezas y aumentar su divinidad. Puesto que
esto es extremadamente difícil, Buda dio una vez la
siguiente analogía: El número de veces que él donó sus ojos
para ayudar a otros con el fin de llegar a la Iluminación es
mayor que todas las estrellas en el firmamento.

Dedicar la vida entera de una persona a alcanzar la


Iluminación es difícil debido a que este es un proceso muy
largo. Tras la Iluminación, Él pasará el resto de sus días
propagando Su conocimiento de la verdad (Dhamma) a
todo el mundo. Los que sigan sus enseñanzas y practiquen
el Dhamma diligentemente podrán lograr la Iluminación y
alcanzar el Nirvana.

Así, la gente que nace durante la vida de un Buda y con


éxito logra la Iluminación es muy afortunada.

Quienes no nacen durante la vida de un Buda deben


buscar refugio en las enseñanzas del Buda, inconscientes de
su apariencia.

Nuestros antepasados, que experimentaban y logr aban


altos niveles de meditación, poseían visión y sabiduría.
Decidieron reconstruir la im agen del Buda desde dentro (el
Cuerpo de la Iluminación) como una estatua de Buda. La
herencia que nos pasaron enriquece nuestro conocimiento
sobre la excelente apari encia de Buda, aumentando nuestra
fe en Él. Este acto de contribuir a fundir una estatua de
Buda es favorable para muchos budistas de todo el mundo.

Debido a que nuestros antepasados podían ver


constantemente el Dhamma interior, su capacidad de
duplicar la imagen de Buda sin defectos originó que quienes
vieron la imagen llegaron a ser alegres y tener fe en él. Esto
los inspiró a realizar hechos virtuosos y practicar
meditación para lograr el Nirvana como Él.

Así, la imagen del Buda con la que una person a


contribuye ayuda a librar a la gente de sus impurezas,
codicias y deseos y la motiva para mejorar el mundo en el
cual vivimos.

Quien aporte una imagen de Buda gana los siguientes


tipos de mérito:

1) El contribuidor desarrolla aún más la moralidad y la


virtud.

2) Debido a que la contribución autoriza a otros individuos


a realizar buenas acciones, el contribuidor será
venerado por humanos y seres celestiales en cada área
que visite.

3) Incluso si el contribuidor ha fallecido y la gente todavía


busca refugio en la imagen aportada de Buda, el mérito
continuará fluyendo causando que otros le veneren en
sus futuras vidas.

4) Sin importar el número de renacimientos, si el


contribuidor tiene malos pensamientos sin intención de
tenerlos, habla o comete acciones malas o experimenta
problemas en la vida con el recuerdo simple de la
imagen de Buda que donó, toda la no virtud será
eludida.

5) Sin importar cuantas veces nazca uno, nacerá siempre


en una tierra donde el budismo prospere y sin esfuerzo
logrará el Dhammakaya - el Cuerpo de la Iluminación.

6) Mientras que aún está en samsāra (el ciclo de la


muerte y del nacimiento), ganará riqueza fácilmente.
Cualquier sustento que tenga, ya sea comerciante u
oficial del gobierno, será apoyado y bendecido para ser
próspero si contribuye con una imagen de Buda. En su
vida final en samsāra, sin esfuerzo obtendrá la
Iluminación.

Esto es sólo un resumen de todas las ventajas que el


contribuidor ganará. Éstos son tan sólo los frutos de los
méritos que se pueden entender fácilmente. Si el lector
practica la meditación y estudia la biograf ía de Buda, verá
las ventajas innumerables en contribuir para una imagen de
Buda. Ahora entendemos porqué nuestros antepasados se
centraron en esta contribución moral.

Mi propia abuela entendía las ventajas de contribuir


con una imagen de Buda, de tal forma que donó más de
veinte imágenes y las dedicó a cada uno de su familia y a los
seres queridos ya difuntos, invitando a sus parientes a hacer
lo mismo. Sé que este gran mérito que ella alcanzó en su
vejez le asegurará un futuro digno. Cuando ella muera ,
podrá depender del mérito que ganó, sin esperar que otros
le dediquen méritos tras su fallecimiento.

Quisiera invitar a quien no haya contribuido todavía


con una imagen de Buda para hacerlo por su propia
voluntad. Será mejor que usted contribuya con u na imagen
hoy que más adelante. En la sociedad de hoy, mucha gente
ha perdido el hábito de realizar buenas acciones.
Consecuentemente, sus niños tampoco se darán cuenta del
propósito de realizar buenas acciones. Contribuir con una
imagen de Buda es uno d e los hechos más nobles que
proporciona ventajas tanto a quienes aportan la imagen
como a la sociedad. Si pierden esta gran oportunidad,
dejarán pasar los beneficios de los que pueden depender en
la otra vida. Debemos contribuir con una imagen de Buda
para nuestro propio beneficio. Cuando nos acerquemos al
final de nuestra vida, lo haremos de una manera pacífica
porque estaremos seguros que este gran mérito nos
abrazará en la próxima vida.
Glosario

Arahat
Ser completamente bondadoso e i luminado

Baht
Moneda tailandesa

Bodhisatta
Aspirante a ser un Buda

Caminos a la Perdición (Apāyamukha)


Las causas de la ruina:
Consumir sustancias intoxicantes
Irse de juerga por las noches
Perder el tiempo en los espectáculos
Hacer apuestas
Relacionarse con malas personas
Ser perezoso

Cinco Preceptos
Abstenerse de matar
Abstenerse de robar
Abstenerse de cometer adulterio
Abstenerse de mentir
Abstenerse de consumir sustancias intoxicantes

Cuaresma Budista
Retiro anual budista durante la temporada de lluvias

Cuatro Bases de la Solidaridad Social


(Sańgahavatthu)
Esto se refiere a los principios de ayuda y del desarrollo de una
sociedad unida:
Generosidad (Dāna)
Forma de hablar agradable (Piyavācā)
El conducto útil (Atthacariy ā)
Trato igual e imparcial (Samānattatā)
Cuatro Requisitos
Las cosas necesarias para vivir:
Comida
Vestimenta
Medicina
Alojamiento

Dhamma para Profanos (Gharāvās-dhamma)


Los principios morales básicos para personas laicas:
Veracidad (Sacca)
Autocontrol (Dama)
Entereza (Khanti)
Sacrificio (Cāga)

Días Sagrados Budistas


Cuatro días al mes: día de luna llena, luna oscura, luna mediana
creciente y decreciente; los budistas los consideran días
importantes para dedicarse a la vida espiritual, es decir, durante
esos días se practica la meditación y se observan los Cinco
Preceptos o los Ocho Preceptos más estrictamente de lo habitual.

Dhamma
Sánscrito: dharma.
Verdades de la vida; Ley Natural; las E nseñanzas de Buda
resumidas en las Cuatro Nobles Verdades (ariya-sacca)

Dhūtanga
La práctica de la eliminación de impurezas mentales; consiste
normalmente en quedarse aislado en un templo, en los bosques o en
un campo abierto durante un tiempo para practicar la meditación.
Es un retiro tradicional en el budismo.

Diez Bases de las Acciones Meritorias (Puññakiriyā-


vatthu)
Las acciones que generan méritos para sus autores:
Generosidad (Dānamaya)
Disciplina moral (Sīlamaya)
Práctica de la meditación (Bh āvanāmaya)
Humildad (Apacāyanamaya)
Ayuda a los demás (Veyy āvaccamaya)
Transferencia del mérito (Pattidānamaya)
Alegrarse del mérito (Pattānumodanāmaya)
Escuchar los sermones del Dhamma ( Dhammadesanāmaya)
Dar sermones del Dhamma (Dhammadesanāmaya)
Formar la opinión correcta (Ditthujukamma)

Impurezas mentales (kilesa)


Impurezas, cualidades perjudiciales que contaminan la mente:
Codicia (o deseo) – egoísmo, codicia interminable y avaricia
Ira (u odio) – desagrado, o llevado al extremo, alguien que se
ofende fácilmente y que causa destrucción
Ignorancia (o falsas ilusiones) – confundir una opinión errónea
con una correcta y viceversa; confundir el bien con el mal, y el mal
con el bien. Esta ignorancia provoca que uno tenga pensamientos,
palabras y conducta negativas.

Jataka
Las historias de las vidas pasadas de Buda

Karma
Pali: kamma. Acción física, verbal o mental

Kathina
Ceremonia anual de ofrenda de túnicas nuevas para los monjes en
el mes después del fin del Retiro Budista (temporada de lluvias)

Ley del Karma


La Ley de Causa y Efecto, es decir, todas las acciones tanto buenas
como malas conllevan consecuencias

Luang Phaw
Un tratamiento que se usa para llamar a los monjes mayores y
venerables en Tailandia

Mangala Sutta
Treinta y Ocho Pasos para una vida gloriosa, por ejemplo no
asociarse con malas personas, asociarse con buena s personas,
venerar a las personas virtuosas, etcétera

Nirvana
Pali: Nibbāna
La extinción de todas las impurezas mentales y el sufrimiento; la
felicidad suprema
Samsāra
Ciclo incesante de la muerte y del nacimiento

Tipitaka
El Canon Budista

Tres Características de la Existencia (las)


Las características verdaderas de todas las cosas en el mundo
La no permanencia (aniccatā): significa que nada es
permanente. No podemos mantenernos en la misma condición
física ni mental. Las personas cambian constanteme nte con el
transcurso del tiempo. No éramos ayer como somos hoy.
El sufrimiento (dukkhatā): significa el estado de sufrir. Esto no
se refiere solamente a las penas o los dolores sino también a la
insatisfacción derivada de la incapacidad de mantenerse en l a
misma condición puesto que las incertidumbres y los cambios
siempre surgen y al final del cambio algo disminuye. Nuestro
mundo también se encuentra en un estado de cambio continúo;
algún día llegará a su fin y desaparecerá.
Yo irreal (anattatā): se refiere a que nosotros no somos dueños
absolutos de nuestro cuerpo, es decir, no todo está bajo nuestro
control; por ejemplo, no podemos evitar la vejez, la enfermedad ni
la muerte. Si dividimos nuestro cuerpo a nivel de los componentes
básicos, encontraremos sangre, huesos, tendones, piel, y otros
órganos que lo componen. El cuerpo no es el yo real, sino algo
temporal que se descompone con el tiempo.

Tres Joyas (las)


Buda, Dhamma y Sangha: los tres refugios de los budistas

Upasika
Laica budista

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