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Bock, Gisela “La historia de las mujeres y la historia del género: Aspectos de un debate internacional”, Hisiria Social, 9 (ispa‘ia, Universidad de Valencia, Instituto de Historia Social, 1991) 55-77. ["Women's History and Gender History: Aspects of an International Debate”, Gender and History, V1 (3989) 7-30} La historia de las mujeres y la historia del género: Aspectos de un debate internacional” Hace sélo unos afos lk pregunta: ¢Existe una historia de las mujeres? distaba pues la historiografia tindicional ha excluido a las mujeres de la nera involuntaria, ora dejandolas fuesa de sus mucho de ser retdrica historia “universal” 0 “genera”, ona de m programas.’ Fntretanto, la pregunta ha hallado respuesta, en parte, porque se ba ampliado el campo de la investigacion y por el impacto, aunque todavia modesto, que han tenido la historia de lay mujeres y lis historiadoras en ef mbito de la profesion Algunas revistas de historia con amplantaciba en los Estados Unidos, Sutza, Italia, Suecia y Dinamarca se han attiesgado a da ¢l paso de dedicar algunos mimeros tanto a Ii historia de las mujeres como a una nueva generacién de historiadoras.? Asi hemos “ Publicado en Gender and History, vol. Iso | (Primavera 1989). ‘Cail, Dever, Ls Thoreo History of Women?, Oxtord, Oxfovd Univesity Press, 1975; Michell Perot ed. Une histoire des femmes et-lleposuble?, Pas, Feiions Rivages, 1984. Sogn Eduard Fusier, Geschichte der neuercn tistoviograpie, Munich, 1925, 1"«d 1911, Bacaccio habia “abandonado el campo dele historia fen general” porque habia escrito biogratias de mujeres, sl eontravio de Petarea que habia eserito biogalias de hombres, pp 6,7. 2 American Historical Review; 89/3, 1984; Schwszerische Zeitschrift fir Geschichte, 34/3, 1984; Quadesni Stovci 44, 1980; Histovik tdsskrf, 3, 1980 y 1, 1987; Den jysque Historiker, 18, 1980; Histrievidenshab, 21, 1980. Se puede seguir el desarollo de la investgacién en las bibliografias y las publicaciones de las fuentes: Jane Willamson, New Feminist Scholarship: A Guid to Bibliographies, Old. Westbury, Feminist ‘ress, 1979; Maureen Ritchee, Women's Studies: A’ Checklist of Bibliographies, Londres, Mansell. 1980: Hans Svessiup y Agnes Zahn-Hamack, bie Fravetage i Deotachland, 1790-1950: sachheh seordnete leratete Quellenkunde. Muni, 1934, reedicen, K.G Sau, 1984; Deutscher Akademikennnenbund, ed, Die Frauenfiage in Deutsland: Wiblioeraphie 1981-1880, compilado por tle Deivendai; Munich, 1.G Saver, 1982; Linda 8, Frey. Mush L. Frey, Joann Schneider, Women in Western European History: A Select Chionological, Geographical and Topical Bibliography fiom Antiguity © the Feneh Revolution, Brighton Harvester, 1982; Sara B. Pomeroy, Ross S. Kraeicr, Natalie Kampen, "Selected Bibliography on Women in Classical Anigaiy®,en Women in foe Ancient World: The Arthusa Papers, John Peradatt y J.P. Sullivan, cs, Albany, Suny Press 1984. pp. 315-72; V.F. illest y D,S. 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La biisqueda de wna historia de las mujetes ha estimulado la reflexién sobre lo que podsia significar dicha historia, sobre las implicaciones que tiene para el resto de la historiogratin y sobre la relacidn que deberfa tener con una verdadera historia general, con una historia en la que las mujeres, del mismo modo que los hombves, tengan un higat El cometido de “restituir las mujeres a kx historia” condujo pronto a otro: el de “restituir La histovia las mujeres”4 La experiencia de las mujeres y la experiencia femenina tienen una historia que, aunque no es independiente de la de los hombres, es, sin embargo, na historia propia: de las mujeres como mujeres. Y para exploratla, las jerarquias entre lo hist6ricamente importante y lo tivial tenian que ser trastrocadas. Por todo ello, lo que las mujeres han hecho, deberian hacer y quieren hacer esti siendo objeto de anilisis y rcevaluacin. «A pesar de que los resultados son maliples, heterogéneos y, a veces, controvertidos, Maité Albistur ha sefalado recientemente dos rasgos comunes: “No hay duda de que la trama de la histotia de las mujeres presenta la misma complejidad que la de los hombres. Peto podemos suponer que cl tiempo, tal como Jo vive la parte femenina de la humanidad, no teanscurte segin los mismos titmos ni es percibido de la misma manera que el de los hombres”.> Por una paste, la colezciones de documentos fundamentals se encuentran: Ema O. Hellerstein, Leslie P. Hume, y Karen M. Oien eds, Victorian Women. A Documentary Acciunt of Women’s Lives in {9th Century England, France and the United States, Standiford, Stanford University Press, 1981; Susan Croag Bell y Karen M. Offen, eds ‘Women, the Family and Freedom. The Debate in Documents, vol. I: 1780-1880, vol. I: 1880-1950, Stanford, Stanford Univesity Press, 1983; Duane R. Bogenschneier ed, The Gevrtson Collection of Womens History, 1543-1945: A Bibliographic Guide to the Microform Collection, 3 vols, Stanford, Carolina del Norte, Miciofilming Corparartion oF Ametit, 1983, > Kathiyn Kish Sklar, “American Female Historians in Context, 1770-1930%, en Feminist Studies, 3/12, 1975. pp. 171-84, Naulic Z. Davis, “Gender and Gemre: Women as Historical Writers, 1400-1820", en Beyond ther Sex’ Learned Women of the Barepeon Pasi, Policia H. Labalme, ed, Nueva York/Londies, New York Univesity Press. 1980, pp. 153-82; Bounie G. Smith, “Fhe Contribution of Women to Modern Historiography in Great Biitain, France and the United States, 1750-1940", en American Historical Review 489, 1984, pp. 709-32; de lo misma obra, “Seeing Mary Beard” en Feminit Studies 10/3, 1984, pp. 399-416, Joan Thicsk, e! prélogo de Women in English Society 1500-1800, Mary Prior, ed, LondkesiNueva York, Methuen, 1985, pp. 1-21: Karen Offen, “the Beginning Uf “Scientific” Womeits History in France 1830. 1846", en Proceedhngs of te 11th smmal Meeting of the Western Society for Prench History, 3-5 Novernber 1983, Lawrence/Kansas, Univecsity of Kansas, 1984. pp. 253-71 “ Joan Kelly-Gadoll, “The Socia! Refstion of the Sexes: Methodological Implications of Woman's History”, en Sings 1, 1976, pp. 809-24, esp. p. 809; reeditado en Joan Kelly, Women, History and Theory, ChicagorLondres, University of Chicago Press, 1984, * Maite Albistur, “Catalogue des Archives Maric-Louise Bouglé & la Bibliotheque de fa ville de Paris, mecanogretiado, p. 2. Interesantes visiones de conjunto sobre conclusiones y debates recientes son las de Natalie Zemow Davis, Women’s History” in Transition: The European Case”, en Feminist Studies 3234, 1976, pp. 83-103; Sheita Rkyna Johansson, ““Herstory’ as History: A New Field or Another Fad", en Liberating Women's itistory, Berenice A Carroll, ed., Urbana, University of Chicago Press, 1976, pp. 400- 30 Susen Carol Rogers, “Woman's Mle: A Critical Review of Anthrapologicn) Theory”, en Comporative — : oie Historia de las mujeres coincide con Ia de los hombres en tanto en cuanto que es ipual de tica y complicada, y no es lineal, ligica ni cohesiva. Pot la otra, es diferente de la de los hombres, y es precisamente esta difecencia lo que la hace merecedora de estudio, ln vex el contenido de la experiencia historien y In vuna diferencia que puede abarcar experiencia del tempo mismo. El hecho de que la historia de las mujeres tenga un caricter auténomo y sea dlisanta de la de los hombres, ao quiere decit ni que sex menos importante ni que Plante simplemente un problema “especial” o “especificomente femenino”? Sigaifia, més bien, que debemos seconocer que la historia general ha sido hasta el momento especifica del vaton, y que la historia de las mujeres debe considetarse tan general como {a del “otro” sexo, Peto es més, Ia diferencia entre In historia de los hombres y la de las mujeres no implica que esta Gltima sea idéntica para todas las mujeres; las mujetes no Gienen todas la misma histoxia, 1a conciencia de la alteridad, de la diferencia, de la desigualdad entre la historia femenina y In masculina ha venido a complementarse con luna conciencia y un estudio histérico de Ja alteridad, de las diferencias, y de las desigualdades entre las propias mujeres. Fin esta diteccién, la revista italiana de historia Ge las mujeres, Menoria, lestiné uno de sus ntimeros al tema “piccole e grandi diversiti” (Pequetias y grandes diferencias) y situaciones femeninas que han salido a la Juz ha s, de que la historia de las mujeres haya tenido que La diversidad de experienc sido consecuencia, entre otras co: Siuies in Sactety and History, 20, \9T8, pp. 1223-62; Leaner, Majority (wéase nota 12 mids abajo); Barbara Sicherman et al; Recent US. Scholarship un the History of Women A Report presented ai the XV {ternational Congress of Historical Sciences. Bucarest, Anjerican Historical Association, 1980, Jane Lewis, “Women Lost and Found: The Impact of Feminiam on Hislory en Men's Studies Modified: The Impact of Feminism in Academic Disciplines, Vale Spender, wd, Oxtord, Pergamon, 1981, pp. 58-72, Elisabedh For Genovese, Placing Women's History in History”. en New Left Review, 173, 1982, pp. 5-29, Olwen Hulton y Joan W. Seat, “Women in History” en, Past and Present, 10, 1983, pp. 125-57; Naney A. Heel, “lseyeond the Seareh for Sisterhood Ameriean Wornen's History inthe 19803", en Sucial History 10, 1985, pp. 299.321 duatith Allan, “Evidence and Silence: Feminism and the Limits of History”, en Feminist Chailenses, Carole Pateman y Elisabeth Gross, eds., Sydney, Allen and Unwin, 1986, pp. 173-89; Karin Hausen, eo, fvmen suchen ire Geschichte, Munich, Beck; Ute Preven. “Bewegung und Disziplin in der Fauengesshichte", en Geschichte und Gesellschaft 14, 1988, pp. 240-62; ediciones especiales dé Afemarta, 5. 1983, y Storia in Lombardia, 2, 1985, pp. 12542; Paola Di Cori, “Prospective e soggetitaclla storia delle denae™ ew Le ricerca delle donne, Twin, Rosenberg and Seer, 1987, pp. 96-111; Gianna Pomata, Comment ps, 112-25, Marina Addis Sab ef af, Storia detle danne-una seienca pasubite, Rona, Felina, 1886; Michelle Perrot, “Say Uhistoire des femmes en France", en Revue di Mord, 68230, 1981, pp. 560-79; Céile Dauphin et af, {“Calture et pouvoir des fenvmes: essui d"historiographie", en Annales ESC, 41, 1986, pp. 271-95, & Natalie Zemon Davis, “Women’s History as Women's Education”. en Natalie Zemon Davis y Joun W. Scott, Women's History ax Women's Education, Nohampton, Massichusets, Smith College, 1985. 9. 16, Hester Eisenstein y Alice Jardine. eds, The Fatwe of Diference, Bosion, G. K. Hall and Bernard Women's College, 1980, . XVIII; Kelly-Gadol, Social Retation, pp. 81012 ” Este modo de analizar lo reativo a fas mjeres como un “ease eo ciertos términos: "Yravenspeziiseh”, especialmente ferening” emmninite ete * Memoria: Rivisa di storia dele donne, 2, 981; véuse también Paola Di Cori, introduc. a Memoria, 1S, 1985: "Culture det feminism”. cial” se hace patente en e uso pertinay de a “specifiei? féminine”, “Ia “specsticite

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