H. MATAMOROS, TAMAULIPAS, A 4 DE NOVIEMBRE DEL 2008
POR: KARLA CITTLALIC ACEVEDO HERNANDEZ
INTRODUCCION
La moral, ¿cuántas veces no se habla de ella? En el
pasado la IGLESIA era la que educaba, después paso a ser una obligación de los padres de familia y en estos tiempos es de los maestros. La pelotita ha pasado de generación en generación, la cuestión es ¿En quién radica la autoridad moral? ¿Cómo debe ser el comportamiento moral? ¿Qué era lo molicie?
DESARROLLO
Como siempre, nadie quiere saber nada de nada, hoy tú,
no mejor tú, la pelotita bota y bota y nadie se quiere hacer responsable, la autoridad moral es algo que todos debemos ejercer, en casa los papas son los primeros que enseñan, pero después de que aprendemos es obligación de cada persona actuar moralmente, en la escuela nos desarrollamos, seguimos aprendiendo y al igual es responsabilidad nuestra actuar, en la comunidad se puede decir que no existe un icono de autoridad moral, tal vez los sacerdotes o pastores pero ellos no están siempre a un lado de nosotros diciéndonos qué hacer o cómo actuar. Es una obligación o una responsabilidad que recae en cada persona que pertenece a una sociedad, como se ha dicho, eres libre de hacer y actuar como quieres.
Desde siempre se ha tomado la moral como los
mandamientos de Dios, si haces algo malo para la iglesia estas actuando inmoralmente. Aunque actuar moralmente es no romper las normas estipuladas por otras personas para vivir en sociedad, no podemos ir por la vida desnudos, porque es contra las reglas, contra la moral, entonces con esto digo que actuar moralmente es actuar de forma que la sociedad lo marca. La molicie es según Paul Veyne “actuar, pensar o ser como mujer” lo cual es un poco malo para la sociedad, el hablar o caminar afeminadamente, eso era la molicie, algo que solo la mujer tiene, algo que solo la mujer debe de ser. “amar demasiado a una mujer o hacer muchas veces el amor es afeminado” eso también era parte de la molicie, aunque en estos tiempos ha cambiado el concepto.
CONCLUSION
Actuar moralmente, ser una persona moral, no una
molicie, tener la obligación de actuar de acuerdo a las reglas sociales, es algo que como persona moral, debo adquirir.
BIBLIOGRAFIA
Veyne Paul (1997, “La autoridad moral”, “Sabiduría
popular” y la “Molicie” en Historia de la vida privada. Imperio Romano y Antigüedad tardía, t. l. Philippe Aries y Georges Duby, Francisco Gutiérrez Pérez (trad), Marid Taurus, pp. 174- 178