LA CONFRONTACION NO ES
PEDAGOGICA SINO POLITICA
Conferencia de prensa
En fos afios 60 y 70 prims ia discusién de fos
grandes temas, entre elfos fa libertad y la autode-
terminacién de los pueblos, Las dictaduras posteria-
res cortaron de cuajo ese debate. g~Debemos volver
Sobre esos temas?
Son las paradojas de la historia. Por un lado, da la
sensacion de que todo aquelio se olvidd, que qued6 su-
perado, y por otro, nos invita a volver sobre el tema. Ha-
ce poco, en Brasil hicimes un listado de los problemas
que mi generacién tuvo que enfrentar y hubo jévenes de
22-23 afios que constataron que algunos de esos pro-
blemas eran las mismos que tenian que enfrentar hoy, El
tema es que los problernas no se dan en el aire, se dan
en [a historia, cambian con la historia, de manera que
las respuestas que podemos dar a esos problemas no sen
las mismas, En otras palabras: cambiando ef tiempo his-
torico, aun cuando la problemética puede sequir siendo
la misma, las formas de lucha no son necesariamente las
mismas. Uno de los temas pendientes sigue siendo el res-
peto por fa integridad humana. De manera que las gene-
raciones pueden cambiar, puede cambiar la sensibilidad,
lo que no cambia es la necesidad de buscar nuevos
saPAULO FREIRE
caminos de lucha. De modo que cuando parecia que
la cuestion de la integridad del ser humano se acababa,
este tema vuelve, y no tengo dudas de que en los diez
9 quince afios por venir {a preocupacién por el ser toma~
ra aun mayor fuerza. Yo ya no estaré, y ustedes, u otros
como ustedes, harén preguntas parecidas a otro Paulo
Freire, y diran: el viejo Freire tenia raz6n: la pelea por el
hombre y la mujer buscando su ser, 5u desarrollo pleno,
va a seguir acompanandonos,
En los paises subdesarrofados fa educacién esta en
crisis. ¢Comeo afrontar esta crisis?
En primer lugar creo que la crisis de la educacion no
és privativa de los paises subdesarrollados. En segundo
lugar, creo que la crisis no es propia de la educacién sine
que es la crisis de la sociedad toda, es la crisis del sis-
tema socioeconémico en el cual estamos insertos que
necesariamente se refleja en la educaci6n. Por mi parte,
no tengo duda de que la confrontacién no es
pedagégica sino politica. No es peleando pedagdgi-
camente que voy a cambiar la pedagogia. No son los
filsofos de la educacién los que cambian la pedagog/a,
son {os pofiticos bajo nuestra presién los que van a ha-
cerlo, si presionamos. La educacién es una practica emi+
nentemente polftica. De alll la imposibilidad de imple-
mentar una pedagogla neutfa. En el fondo, no hay nadaEL GRITO MANSO
neutro, Para mi, esta es una pelea politica. ¥ uno de los
problemas que debemos afrontar hoy es como comuni-
carnos con las grandes mayorfas que ahora se encuen-
tran divididas en minorias y que no se perciben a si mis-
mas como mayorias. Hay que reinventar los caminos de
la comunicacién, de la intercomunicacién. Coincidiendo
con Habermas, no tengo duda de que la cuestién de
la comunicacién es esencial en este fin de siglo.
Y¥ no es posible pensar el tema de la comunicacion sin
aftontar, por ejemplo, el tema de la inteligibilidad del
mundo. Es justamente la posibilidad de inteligir el
mundo la que permite comunicarlo, Para nosotros,
como educadores, la cuesti6n a afrontar es cémo traba-
jar fa comunicabilidad, come transformarla en comuni-
cacién. Tarea eminentemente politica. Soy optimista.
Repito lo que para mf es una certeza: cambiar es dificil
pero posible,