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La relevancia del concepto ‘sistema

regional de innovación’ para la


formulación de la política de innovación
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El concepto de «sistemas regionales de innovación» está consolidado en el discurso académico


sobre innovación y desarrollo económico y en la práctica de las políticas públicas de apoyo y pro-
moción de la innovación. Como ocurre con el enfoque de los sistemas de innovación en general, el
uso del concepto ha trascendido su finalidad analítica inicial, generalizándose su uso en la formu-
lación de políticas. El presente artículo identifica una serie de riesgos asociados con la utilización
normativa del término «sistema regional de innovación» y propone la hipótesis de que una mejor
comprensión la función desempeñada por las regiones en la formulación y ejecución de políticas
puede traducirse en una utilización mucho más cuidadosa y matizada de este concepto.

Berrikuntzako eskualde-sistemen kontzeptua sendotzen ari da berrikuntzari eta garapen ekonomia-


ri buruzko diskurtso akademikoan eta sustatzeko politika publikoen arloan. Berrikuntza-sistemen
ikuspenarekin oro har gertatzen den bezala, kontzeptuaren erabilerak gainditu egin du hasierako
azterketa-xedea, eta orokortu egin da sistema horien politiken formulazioan. Artikulu honek berri-
kuntzako eskualde-sistema arau-kontzeptu gisa erabiltzeari lotutako zenbait arrisku identifikatzen
ditu, eta honako hipotesi hau proposatzen du: eskualdeek politiken formulazioan eta aplikazioan
betetzen duten eginkizuna hobeto ulertzeak kontzeptu horren erabilera arduratsuagoa eta ñabartua-
goa eragin dezan.

The concept of regional innovation systems is being consolidated in the economic development and
innovation context both in the academic world and in the innovation promotion and support of state
policies. As it happens with the innovation systems approach in general, the use of the concept has
gone beyond its initial analytical purpose, and its use has been generalized in order to inspire the
policies creation. The present paper identifies a number of risks related to the use of the term ‘regional
innovation system’ as a normative concept and suggests the hypothesis that a better understanding
of the role played by the regions in the policies creation and application may be translated into a more
careful and clarified use of such concept.

Ekonomiaz N.o 70, 1.er cuatrimestre, 2009


Elvira Uyarra
Kieron Flanagan*
Manchester Institute of Innovation Research

ÍNDICE

1. Introducción 151
2. Consideraciones analíticas
3. ‘Sistema regional de innovación’: ¿Un concepto ambiguo ‘fuzzy’?
4. ‘Sistema regional de innovación’ como concepto normativo
5. Las regiones como ‘espacios’ de política
6. Estudio de caso: el noroeste de Inglaterra
7. Conclusiones
Referencias bibliográficas

Palabras clave: sistema regional de innovación, gobernanza regional multinivel, enfoque sistémico.
Keywords: innovation policy, multilevel regional governance, systemic approach.

N.º de clasificación JEL: O18, R12, O32

1. INTRODUCCIÓN plo Doloreux, 2002; Doloreux y Parto, 2005;


Navarro, 2007)2. Con el tiempo, los estudios
Cada vez con mayor frecuencia, las re- empíricos descriptivos de «sistemas» han
giones son el centro del interés analítico y proliferado hasta incluir una creciente varie-
político en los estudios de la innovación. En dad de casos, al tiempo que las implicacio-
concreto, la noción de «sistema regional de nes del concepto se han interpretado cada
innovación (SRI) ha adquirido importancia vez más como principios de aplicación ge-
creciente como herramienta conceptual y neral a todo tipo de regiones. Pese a que la
analítica y componente del discurso político complejidad de las formas y de la formula-
regional1. No obstante, diversos autores han ción de políticas, caracterizado por la mul-
identificado ambigüedades y cuestiones no tiplicidad de niveles y de actores, no hace
resueltas en este concepto (véase, por ejem- sino aumentar, el enfoque de SRI subraya

* Una versión previa de este artículo se presentó en 2 Es importante destacar que las aproximaciones

el seminario Changing business systems and systems de «sistemas de innovación» no están formadas por
of innovation el 23 de enero de 2009 en la Universi- una teoría integral, que proponga las relaciones cau-
dad de Manchester (Manchester Business of school). sales entre las variables, un conjunto de supuestos
Los autores desean agradecer a los organizadores y e hipótesis y de sus consecuencias lógicas, sino que
los participantes en el seminario por sus comentarios se trata más bien de un marco conceptual (Edquist,
y sugerencias. 2005). Los distintos autores se muestran en desa-
1 Prueba de ello es, por ejemplo, el gran número cuerdo sobre si el término ha sido objeto de una teo-
de regiones que participan en el programa RIS/RITTS rización insuficiente, que precisa un mayor rigor, o si
financiado por la Comisión Europea y en iniciativas si- debe continuar siendo un concepto empírico-inducti-
milares. vo no excesivamente generalizado (Edquist, 2005).

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que en dicho nivel regional se dispone de re- sistemas regionales de innovación. En el


sortes suficientes y adecuados para las polí- tercer y cuarto apartado se describe una
ticas y estrategias de innovación. amplia variedad de contextos regionales y
cómo las conclusiones extraídas se utilizan
A nuestro juicio, conviene desligar de-
cada vez en mayor medida para conformar
terminadas hipótesis analíticas de las pro-
las agendas políticas regionales. A conti-
posiciones normativas que de ellas se pue-
nuación, profundizamos en determinados
dan derivar, sobre todo en relación con las
problemas derivados del uso del término
posibilidades que las regiones tienen de
como concepto normativo. En el quinto
influir en la innovación en sus territorios.
apartado tratamos de aclarar la función de
Nuestro objetivo en este artículo no es pro-
las regiones como espacios para la formu-
poner nuevos avances en la conceptuali-
lación y ejecución de políticas. Este aspec-
zación de los SRI, sino profundizar en los
to se analiza también en el último apartado
riesgos de la conversión de un concepto
del artículo con el ejemplo de la región del
ambiguo en una herramienta para la políti-
noroeste de Inglaterra.
ca, sobre todo en muy diversos contextos
regionales. Tampoco es nuestra intención
sostener que el concepto carece de toda
utilidad para la elaboración de políticas re- 2. CONSIDERACIONES ANALÍTICAS
gionales y de innovación. Sin embargo, sí
argumentaremos que una mejor compren- No existe una definición sencilla y acep-
sión del alcance y las limitaciones del con- tada universalmente del término SRI. Según
cepto debe ser el punto de partida para Asheim y Gertler (2005, p. 299) «el siste-
cualquier desarrollo tanto teórico como ma regional de innovación puede entender-
prescriptivo. Proponemos así considerar la se como la infraestructura institucional que
región como un «espacio», o una serie de apoya a la innovación en la estructura pro-
espacios, en el que tiene repercusión una ductiva de una región». De forma similar,
serie de políticas. Estudiamos el caso de Cooke y Schienstock (2000; pp. 273-274)
la región del noroeste de Inglaterra3 (Nor- definen un SRI como un «conjunto geo-
thwest England) como ejemplo de la inte- gráficamente definido y apoyado institu-
rrelación entre los distintos niveles de la cionalmente de redes de innovación que
organización política y su impacto en la re- mantienen una fuerte interacción para la
gión, así como para subrayar los posibles mejora de los resultados de la innovación
conflictos e interacciones entre los funda- de las empresas de la región». Expresán-
mentos, los objetivos y las repercusiones dolo de forma distinta, se considera que un
de las políticas. SRI comprende una estructura de produc-
ción regional (el «subsistema de explotación
El presente artículo aborda, en primer
del conocimiento») y una infraestructura de
lugar, consideraciones analíticas de los
apoyo regional (el «subsistema de genera-
ción de conocimiento») (Cooke, 2001).
3 La región noroccidental de Inglaterra es un ejem-

plo de las interacciones de los distintos niveles, ya Este planteamiento tiene en una serie de
que la evolución de su política regional es el producto fundamentos. El interés por los SRI coin-
de la confluencia de una política nacional de ciencia
basada en la excelencia y aplicada como motor del
cide en el tiempo con lo que se ha venido
crecimiento regional (Perry, 2007). en llamar el «redescubrimiento» de la eco-
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nomía regional (Storper, 1997), que se ha temas nacionales de innovación conside-


centrado en investigar la relación entre la ran que la innovación es sistémica y que
proximidad geográfica y la innovación y la surge de procesos de aprendizaje inte-
influencia que ejercen las capacidades en- ractivos entre empresas y otras organiza-
dógenas locales en la naturaleza y los resul- ciones (como universidades, servicios de
tados de los procesos de innovación regio- apoyo a empresas, centros de investiga-
nal. Se considera que cuanto mayores sean ción, etc.) según su propia dinámica. Las
el grado de complejidad e incertidumbre de aproximaciones de SRI consideran que las
una actividad y mayor el componente «tá- regiones son una unidad significativa, si no 153
cito» del conocimiento empleado, más ne- la más significativa, de análisis para el es-
cesaria será la proximidad geográfica para tudio de la innovación, sobre todo cuando
su realización (Pellegrin, 2007). Según este poseen estructuras administrativas propias
planteamiento, la proximidad representa para apoyar la innovación. Tal y como lo
un factor importante para lograr una trans- explican Cooke et al., algunas de las «ca-
misión eficaz del conocimiento (Maskell y racterísticas básicas que caracterizan a un
Malmberg, 1999; Gertler, 2003). Asimismo, Estado pueden tener en ocasiones carác-
los enfoques del «nuevo regionalismo» (Lo- ter distintivo en determinadas regiones»
vering, 1999) o de los «modelos de innova- (1997; p. 479). Howells (1999) considera
ción territorial» (Moulaert y Sekia, 1999) ha- que centrarse en sistemas regionales está
cen hincapié en otra serie de factores de justificado cuando existe una significativa
naturaleza social e institucional que inciden gobernanza regional de la innovación, un
en el desarrollo regional. Más concretamen- alto grado de especialización industrial re-
te, resaltan la importancia de las «relaciones gional y patrones político-geográficos cen-
de interdependencia no comerciales», es tro/periferia fuertemente establecidos.
decir, relaciones no económicas basadas
en la confianza, en el capital social y en nor- Posiblemente debido a esta mezcla de
mas y valores compartidos (Morgan, 1997; enfoques teóricos, las aproximaciones de
Storper, 1997), y la capacidad o «densidad» SRI se caracterizan por una cierta ambigüe-
institucional (Amin y Thrift, 1995), que da dad conceptual (Uyarra, 2009), especial-
soporte e integra la vida económica de em- mente en relación con la identificación de
presas y mercados. los principales componentes del sistema,
las relaciones entre ellos, las características
Los enfoques de SRI están también es-
territoriales de los sistemas y la medición
trechamente relacionados con una litera-
de los resultados de los mismos (Doloreux y
tura más general sobre sistemas de in-
Parto, 2005; Carlsson et al., 2002). Incluso
novación (Lundvall, 1992; Nelson, 1993;
el contenido de los términos clave para su
Freeman, 1995; Edquist, 1997), que, a su
definición, a saber, región, sistema de inno-
vez, tiene sus orígenes en la economía
vación e instituciones, (Cooke et al., 1997)
institucional y evolutiva 4 (Edquist 1997;
continúan sin ser plenamente aceptado en-
Cooke et al., 1997). Las teorías sobre sis-
tre las diferentes corrientes de pensamiento
(Doloreux y Parto, 2005; Navarro, 2007). La
4 En este sentido, algunos autores sugieren que el
literatura existente muestra de igual modo
elemento evolutivo de los SRI podría explicitarse en
mayor medida (Lambooy y Boschma, 2001; Iammari-
dificultades para conciliar los enfoques mi-
no, 2005; Uyarra, 2009 ). cro, de abajo arriba (bottom-up), con los
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macro, de arriba abajo (top-down), de los ción, no suele hacerse una distinción clara
procesos de innovación y aprendizaje de entre los actores del sistema y las funcio-
ámbito local y de la influencia de las es- nes que éstos desempeñan. Sin embargo,
tructuras de apoyo institucionales y de go- para poder generar estudios comparativos
bernanza, respectivamente (Howells, 1999, que sean relevantes para la articulación
2005; Lammarino, 2005). A continuación de políticas de innovación, es importan-
analizaremos brevemente cada uno de es- te reconocer que distintos tipos de acto-
tos factores. res pueden desempeñar funciones simi-
lares en sistemas nacionales o regionales
En primer lugar, conviene destacar la distintos (Flanagan et al., 2008), y pueden
falta de coherencia y coincidencia en lo re- cambiar con el transcurso del tiempo (y,
lativo a los componentes clave de los sis- por lo tanto, los mismos actores pueden
temas, así como en la definición de las desempeñar funciones diferentes en dis-
instituciones (Parto, 2005). Como señala tintos contextos y a lo largo del tiempo).
Edquist (1997), ningún teórico de los sis- Otros críticos detectan un sesgo produc-
temas de innovación ha podido establecer tivista en algunos estudios, el cual tiende
claramente qué debe incluirse (o excluir- a reducir los resultados económicos de un
se) en el análisis de un sistema de innova- sistema regional a la capacidad competiti-
ción. Algunas descripciones de sistemas va y de innovación de las empresas locali-
tienden a excluir actores y funciones rele- zadas en la región (Lovering, 2001; Oinas,
vantes para la innovación, a la vez que se 2002; Lawton-Smith et al., 2003; Bristow,
incluyen elementos de dudosa relevancia 2005). Bristow (2005) llama la atención
o utilidad explicativa. La literatura mues- sobre la problemática relación causal que
tra una tendencia a centrarse en un pano- se establece entre la productividad de las
rama estático de actores e instituciones, empresas de una región y la prosperidad
sin debatir más que en contadas ocasio- regional. En primer lugar, la productividad
nes su aparición, evolución, reestructura- depende de la estructura y especializa-
ción o incluso su desaparición. Con fre- ción industrial de la región y de la «división
cuencia se nos presentan descripciones o espacial del trabajo» (Fotherhill, 2005). En
comparaciones meramente enumerativas segundo lugar, es muy posible que el cre-
de los componentes de los sistemas re- cimiento de la renta atraiga la inversión de
gionales (Nauwelaers y Reid, 1995) —pese empresas productivas, impulsando así la
a que se reconoce que los contextos insti-
productividad, y no al contrario.
tucionales están determinados en su ma-
yoría por factores históricos y específicos Definir la «región» como unidad significa-
de cada país—. Por otra parte el enfoque tiva de análisis continúa generando contro-
tiende a centrarse bastante más en los ac- versia (Keating, 1998). El SRI proporciona
tores e instituciones intraregionales que una definición muy imprecisa de región: no
en las funciones, relaciones y rendimiento está claro si las unidades territoriales clave
de los mismos, es decir, en las caracterís- son (o podrían ser) ciudades, áreas metro-
ticas que hacen que un sistema (de múl- politanas, localidades, regiones NUTS 2, etc.
tiples agentes) constituya un verdadero (Doloreux, 2002). Cooke et al. (1997, p. 480)
«sistema» y no un conjunto heterogéneo. definen una región como «un territorio me-
Asimismo en los estudios sobre innova- nor que el Estado al que pertenece y que
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posee una cohesión y una capacidad de go- los marcos de referencia y de acción para
bernanza supralocales significativos, que la la institucionalización y el desarrollo del sis-
diferencian del Estado y de otras regiones». tema se definan en términos locales.
Este punto de vista tiende a asumir una cla-
Por último, mientras que normalmente se
ra delimitación y límites regionales, patrones
presta atención a los aspectos territoriales-
de interacción regionalizados, uniformidad
relacionales de las redes de transmisión de
interna y proximidad cultural o social (Uyarra,
conocimientos para la innovación, se sue-
2007), lo que ha llevado a algunos autores a
len dejar de lado cuestiones relativas a la
destacar el riesgo de que se infravaloren (o in- 155
estructura, el funcionamiento y los resulta-
cluso se pasen por alto) tanto las tensiones y
dos de estas redes (Oerlemans et al., 2007;
la diversidad que pueda existir dentro de las
Frenken et al., 2007). Recientemente se ha
regiones como la influencia de las redes ex- utilizado la idea de la «variedad relaciona-
traregionales de transmisión del conocimiento da» para destacar la necesidad de que es-
(Bunnell y Coe, 2001; Mckinnon et al., 2002; tas redes aprovechen las complementarie-
Oinas, 2002; Bathelt et al., 2004). La signi- dades y los efectos de desbordamiento de
ficatividad de las interacciones sistémicas las bases de conocimiento y las competen-
endógenas frente a las redes globales (exó- cias regionales (Asheim et al., 2007).
genas) de conocimiento dependerá de dis-
tintos factores, incluida la estructura indus-
trial de la región (Breschi y Malerba, 1997),
la base de conocimientos dominante en las 3. ‘SISTEMAS REGIONALES DE
actividades de innovación (Moodysson et al., INNOVACIÓN’: ¿UN CONCEPTO
2008), la influencia relativa de las empresas AMBIGUO ‘FUZZY’?
con orientación global (exportadora) y local
(Cantwell y Iammarino, 2003) y del grado en Markusen (2003) define un «concepto
que la región pueda ser considerada como ambiguo» (fuzzy) como aquel «que propone
un espacio económico homogéneo (Staber, como principio una entidad, un fenómeno o
1996; Bristow, 2005). Otros tipos de proxi- un proceso que posee dos o más significa-
midad (organizacional, cognitiva, social e dos alternativos y que, por lo tanto, no pue-
institucional) también pueden intervenir y ac- de identificarse ni aplicarse de forma fiable»
tuar, como mínimo, como sustitutos parcia- (p. 702). Dejando a un lado los problemas
les de la proximidad geográfica (Boschma, de validación conceptual, el uso generaliza-
do de conceptos ambiguos está relaciona-
2005; Amin y Cohendet, 1999).
do, a juicio de Markusen, con una tenden-
Respondiendo a estas críticas, Cooke cia a prestar mayor atención a los procesos
(2005) aboga por una acepción «relacional» y flujos en detrimento de una mayor com-
del término regional en lugar de una cerra- prensión de la estructura, la agencia, las re-
da, sugiriendo que la región es «un nexo de laciones causa-efecto y los resultados de
procesos» (Cooke y Morgan, 1998). Has- los fenómenos estudiados. La noción SRI
sink (2005) argumenta en la misma línea puede considerarse por tanto un concepto
que el uso de los términos «sistemas loca- ambiguo en tanto en cuanto coexisten múl-
les» o «sistemas regionales» no debe signi- tiples interpretaciones del mismo. Según
ficar que los actores y las redes del sistema Doloreux y Parto (2005), la literatura con-
sean predominantemente locales, sino que tinúa siendo incapaz de abordar la cues-
Elvira Uyarra, Kieron Flanagan

tión fundamental de cómo cuando exami- jar en la descripción de un SRI. Una lectu-
namos un sistema regional de innovación ra estricta de la literatura sugeriría incluso
lo podemos identificar como tal. No exis- que las únicas tres regiones que podrían
te por lo tanto un consenso sobre la defi- considerarse verdaderos SRI serían Silicon
nición de SRI y, lo que es más importante, Valley, Emilia-Romagna y Baden-Württem-
sobre si el concepto es aplicable a todos berg (Doloreux y Parto, 2005).
los casos o sólo a un número limitado de
La literatura más reciente tiende a pre-
regiones (Uyarra, 2009). Este último deba-
sumir que todas las regiones tienen siste-
te refleja una controversia similar en la lite-
mas de innovación de alguna clase, que,
ratura sobre sistemas nacionales de inno-
no obstante, difieren en sus característi-
vación. Al analizar la literatura, Sharif (2006)
cas y resultados (Bunnell y Coe, 2001),
encuentra diversas interpretaciones: hay
por ejemplo, las existentes entre regiones
quienes afirman que todos los países tienen
más adelantadas, regiones periféricas, an-
su propio sistema de innovación, con inde-
tiguas zonas industriales, etc5. (Asheim e
pendencia de su eficacia y de su nivel de
Isaksen, 2002; Doloreux, 2002, Tödtling y
desarrollo, mientras que otros autores se
Trippl, 2005). Como consecuencia de ello,
muestran más prudentes a la hora de apli-
se han desarrollado nuevas caracterizacio-
car el concepto, por ejemplo, a los países
nes y tipologías, en un intento de reflejar,
en desarrollo.
por ejemplo, distintos niveles de evolución
o «problemas» en el desarrollo económi-
De forma similar, los primeros estudios
co regional (Tödtling y Trippl, 2005), mo-
de casos de SRI se centraban en casos
delos de gobernanza regional (Brazyck et
ejemplares o «ideales», regiones caracteri-
al., 1998), tipos de innovación empresa-
zadas por la presencia de instituciones de
rial (Cooke, 1998) y de organización insti-
I+D fuertemente arraigadas, organizacio-
tucional (Asheim e Isaksen, 2002). Estos
nes de formación profesional y otros orga-
autores distinguen entre los SRI arraiga-
nismos locales que colaboraban en proce-
dos territorialmente (como es el caso de
sos de innovación empresarial (Asheim y
Emilia-Romagna), sistemas de innovación
Gertler, 2005), mientras que se afirmaba
establecidos como redes regionales (habi-
que otras regiones no tenían las carac-
tuales en regiones alemanas, austriacas y
terísticas de un «sistema» (Riba y Leydes-
de los países nórdicos) (Asheim y Gertler,
dorff, 2001; Sanz et al., 2001). Cooke
2005) y sistemas nacionales de innovación
(2001) sostiene que la existencia de un SRI
regionalizados (característicos de deter-
es un caso especial, un acontecimiento
minados clusters de laboratorios de I+D y
poco común. Evangelista et al. (2002), en
grandes empresas o laboratorios de inves-
su estudio de regiones italianas, concluyen
tigación). Cooke (1998) propone una tipo-
también que es muy poco frecuente en-
logía similar de SRI «de base» (grassroots),
contrar los componentes necesarios para
SRI «en red» y SRI «dirigistas». Sus traba-
identificar un sistema regional de innova-
jos recientes sobre la influencia de marcos
ción. El proyecto REGIS financiado por
la Comisión Europea (Cooke et al., 2000)
5 El análisis exhaustivo de los estudios de sistemas
identificó tan solo cuatro regiones de un
regionales de innovación y sus métodos trasciende el
total de 11 —Gales, Baden-Württemberg, alcance del presente artículo (véase, por ejemplo, Na-
el País Vasco y Estiria— que podrían enca- varro, 2007; Doloreux, 2002).
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institucionales en sectores de tecnología SRI, explícitos o implícitos, como aplica-


avanzada como la biotecnología, han lle- ciones de las políticas».
vado a Cooke (2003) a introducir una nue-
va diferenciación entre el concepto tra- Es posible que el contaste entre la afir-
dicional de SRI, o SRI institucional, y los mación de Markusen de que los concep-
sistemas de innovación de carácter em- tos ambiguos permanecen distantes de la
prendedor (entrepreneurial). Esta evolución política y la influencia real del concepto SRI
apunta a la aparición de una noción más en los discursos y las políticas de apoyo a
inclusiva y todavía en proceso de amplia- la innovación regional (Power y Malmberg, 157
ción de lo que constituye un sistema re- 2008) no sea tal. Majone (1989) sugiere que
gional de innovación los encargados de la formulación de políti-
cas utilizan la teoría de forma selectiva para
justificar sus decisiones que, de hecho, es-
4. ‘SISTEMAS REGIONALES tán influenciadas por normas, creencias,
DE INNOVACIÓN’ COMO objetivos y presiones muy distintas de las
CONCEPTO NORMATIVO que se dan en la comunidad académica. Tal
y como hemos afirmado en otras ocasio-
Markusen (1999, p. 873) razona que nes, no se puede establecer una correspon-
«los conceptos ambiguos son más tole- dencia clara e inequívoca entre las teorías
rables en la medida en que menos espe- académicas y la teoría y práctica política
ramos que sirvan como orientación para (Laranja et al., 1998), y normalmente los res-
medidas prácticas» y sugiere, por tanto, ponsables de la formulación de políticas es-
que una consecuencia de su ambigüe- cogen a su gusto aquellos elementos de las
dad es su escasa utilidad para la formu- ideas académicas que les resultan atracti-
lación de políticas. ¿Cómo se explica en- vos. Según De Bruijn y Lagendijk (2005), es
tonces, dada su ambigüedad conceptual, este uso selectivo de un discurso amplio so-
que los SRI hayan adquirido tal influencia bre innovación y desarrollo regional, y no el
en el discurso de la política económica re- uso de un concepto de SRI común, lo que
gional? Desde luego, si las ideas utilizadas explica el atractivo que la aproximación de
para inspirar las políticas no están claras, SRI ha tenido en la elaboración de políticas.
es evidente que las políticas derivadas de En su análisis sobre el empleo de la teoría
ellas también adolecen del mismo defecto. de sistemas nacionales de innovación en la
La literatura sobre SRI se inspira en múl- formulación de políticas en Finlandia, Mietti-
tiples aproximaciones conceptuales que nen (2002) sugiere que el concepto consti-
responden a distintos paradigmas episte- tuye un «objeto frontera» (boundary object),
mológicos y metodológicos, que utilizan que permite el acuerdo parcial entre grupos
niveles y unidades de análisis diferentes políticos y académicos en el uso de un tér-
y que se centran en factores explicativos mino, al tiempo que posibilita que los parti-
distintos (Uyarra, 2009). Como conse- cipantes de distintos colectivos mantengan
cuencia, de la literatura no emana un fun- sus culturas originales. Bristow (2005) des-
damento normativo claro, sino una mezcla taca también la fuerza del discurso de la li-
variopinta (Doloreux, 2002). Como señalan teratura del nuevo regionalismo, que atrae
De Bruijn y Lagendijk (2005; p. 1155), «pa- tanto al mundo empresarial como a las éli-
rece que hay tantos «modelos ideales de tes políticas nacionales y regionales, sobre
Elvira Uyarra, Kieron Flanagan

todo a aquellas que abogan por un mayor ma, los SRI se convierten en «hechos pro-
autogobierno. Este discurso ofrece una for- bados», en entidades obvias y tangibles
mulación de política relativamente estruc- que dejan de ponerse en duda, mientras que
turada y la posibilidad de construir un con- otras interpretaciones alternativas del de-
junto de indicadores susceptibles de medir sarrollo económico y la innovación se dejan
resultados, objetivos e impactos. Así, ayuda de lado (Miettinen, 2002).
a que las regiones se conviertan en agen-
tes legítimos de la gobernanza económica» La connotación normativa de parte de la
(Bristow, 2005, p. 209) literatura también parece haber contribuido
a la aceptación del término en el ámbito
A la influencia del concepto SRI en el dis-
político. Morgan (2004) considera que es
curso político contribuye también la aparición
posible que exista una tendencia por parte
de la denominada «industria del desarrollo
de algunos autores a reducir excesivamen-
económico regional» (Lagendijk y Cornford,
te los niveles de abstracción para la mejor
2000). Ésta comprende una amplia variedad
asimilación de su mensaje por parte de los
de actores con grandes intereses, como
encargados de la formulación de políticas
agencias de desarrollo, centros de transfe-
(véase también Lovering, 1999). Power y
rencia tecnológica, entidades de formación y
Malmberg (2008) llaman la atención so-
otros servicios a la innovación, y empresas
bre la convergencia de diversos argumen-
de consultoría, favorecidos por el crecimien-
tos «del mundo real» y «académicos» para
to y la aplicación de fondos estructurales de
conformar discursos híbridos sobre re-
la UE y financiación nacional y regional, y
giones y desarrollo económico. Lagendi-
centrados en la tarea de mejorar la posición
jk (2001) observa un giro en la comunidad
competitiva de regiones6. A juicio de estos
académica, que de elaborar estudios fun-
autores, la forma en que estas organizacio-
damentalmente descriptivos y analíticos
nes se crean, se financian e interactúan (a
ha pasado a desarrollar enfoques implíci-
través de conferencias, seminarios, progra-
tamente prescriptivos y estratégicos. Este
mas conjuntos, redes, etc.) da lugar a un
giro hacia enfoques estratégicos y pres-
proceso de convergencia o «isomorfismo
criptivos lleva el mensaje implícito de que
institucional» (lo cual no deja de resultar pa-
la región puede cambiar su propio destino
radójico dado el énfasis en el desarrollo de
mediante políticas «sistémicas» especiali-
capacidades regionales únicas y singulares),
zadas. Se promueve una política regional
que contribuye a la rápida divulgación de las
«institucional» asociativa y basada en re-
ideas y del conocimiento dentro de esta co-
des, que permite la adopción de «medi-
munidad (Lagendijk y Cornford, 2000). Este
das políticas específicas de la región, a lar-
proceso de difusión y reproducción del co-
go plazo y basadas en múltiples actores»
nocimiento ha dado lugar a la transforma-
(Amin, 1999, p. 366), la promoción de re-
ción de determinadas ideas sobre innova-
des de asociación y clusters, la legitima-
ción e innovación regional en «hechos» que
ción de formas de gobernanza de inter-
se dan por supuesto, sin tener en cuenta
mediación y la función del sector público
sus raíces empíricas originales. De esta for-
como promotor y facilitador del desarrollo.
El uso del concepto de sistema (regional)
6 Actores que representan, por otra parte, los orga-

nismos de «intermediación» que el discurso SRI con-


de innovación en sí mismo implica la rea-
sidera tan importantes. lización de un juicio de valor sobre la cali-
La relevancia del concepto ‘sistema regional de innovación’ para la formulación de la política de innovación

dad de los componentes, las instituciones, nar los actores que pueden infl uir en el
las interacciones y las políticas (Sharif, desarrollo futuro de las regiones en un
2006), un mecanismo o una estructura de contexto evolutivo (Lambooy y Boschma,
funcionamiento que se puede alimentar o 2001). Esta idea coincide con el dilema
apoyar. La ausencia de una distinción en- sugerido por David (1987) de la existencia
tre conclusiones analíticas y propuestas de una «estrecha» ventana de oportuni-
normativas es un problema común en los dad, es decir, un periodo de tiempo breve
estudios de política de innovación en ge- en el que los encargados de la formula-
neral y, sin duda alguna, tanto los estudios ción de políticas pueden ser capaces de 159
teóricos como las políticas salen perdien- influir en un sistema económico dinámico.
do con la incapacidad de los académicos En otras palabras, es importante evaluar
de trazar una línea clara de separación en- con claridad las posibilidades que tienen
tre ambas. Según Markusen, la investiga- los responsables de la formulación de po-
ción regional debe implicar supuestos nor- líticas en los diversos niveles de la admi-
mativos, pero la posición normativa, sea nistración de influir en la innovación en la
cual sea, debe explicarse claramente. Este región en cuestión. Al centrarse en polí-
sesgo normativo es especialmente proble- ticas de innovación concebidas y aplica-
mático cuando las conclusiones extraídas das en el ámbito regional, las aproxima-
de los estudios empíricos en regiones con ciones teóricas de SRI corren el riesgo
configuraciones sociales, económicas y de sobrevalorar el margen de maniobra
políticas específicas se traducen después real que muchas regiones tienen, al tiem-
en prescripciones generales para el de- po que infravaloran el papel y la influencia
sarrollo regional (Storper, 1997; De Bruijn y de los responsables políticos nacionales y
Lagendijk, 2005). supranacionales a la hora de determinar
el alcance y los recursos de la gobernan-
Estas posiciones normativas transmiten za regional (Gertler, 1997; Lovering, 1999;
la impresión de que la dirección y promo- MacLeod, 2001; Bunnel y Coe, 2001).
ción a escala regional de los SRI no pre-
senta problemas, depositando una enor- Al suponer que las políticas regionales
me confianza en la capacidad de creación de innovación influyen en la configuración
de redes y en las estructuras institucio- de los sistemas regionales de innovación,
nales de las regiones para garantizar la con frecuencia se da por supuesto que los
competitividad regional. Se tienen poco cambios en los sistemas regionales de in-
en cuenta los límites de la acción política novación se explican por la acción de la
en general, por no hablar de los de la ac- política regional de innovación, que po-
ción política a escala regional. Sin embar- demos evaluar los resultados de las polí-
go, la capacidad de los encargados de la ticas regionales por medio de indicadores
formulación de políticas para influir y diri- económicos y de innovación regionales
gir la evolución de las economías es con que midan los resultados o la «eficiencia»
frecuencia muy limitada (Moreau, 2004). del sistema regional de innovación (Zaba-
Lambooy y Boschma (2001) consideran la-Iturriagagoitia et al., 2007). Sin embar-
que, aunque los responsables políticos go, en la mayoría de los casos el análisis
desempeñan una función, existe una di- y la selección de casos de buenas prácti-
fi cultad insalvable a la hora de determi- cas se lleva a cabo basándose en regiones
Elvira Uyarra, Kieron Flanagan

en cuyo desarrollo ha tenido poco (o nada) ladas a otros niveles y en otras áreas políti-
que ver la política de innovación regional cas o coordinadas con dichos otros niveles
(Uyarra, 2009). Por otro lado, dado lo que u otras áreas. Perry y May (2007) describen
Borrás (2008) denomina «la ampliación y un conjunto de funciones que una región
profundización de la política de innovación puede desempeñar en un contexto de go-
y la aparición paralela de nuevos actores bernanza multinivel. Las regiones pueden
estatales y no estatales que interactúan considerarse áreas o «escenarios» en los
en varios niveles de gobernanza», la ges- que se desarrollan y aplican políticas defini-
tión del conjunto de políticas de innovación das en el ámbito nacional y en las que la re-
dentro de un espacio regional concreto pa- gión sólo participa pasivamente. Asimismo,
rece ir más allá de las medidas exclusiva- pueden desempeñar un papel en la fijación
mente regionales. Lograr la coordinación de las prioridades y los objetivos definidos a
de este conjunto de políticas, en el que las escala nacional. Las regiones también pue-
interacciones tienden a traspasar los ám- den actuar como socios en la definición y el
bitos de política y niveles de gobernanza establecimiento de prioridades nacionales
tradicionales, es un reto extremadamente en el ámbito de la ciencia y la innovación,
complicado. así como en la cofinanciación de las infra-
estructuras científicas nacionales. Por últi-
En este apartado hemos sostenido que mo, las regiones pueden actuar, en mayor
la influencia de la noción de SRI como con- o menor medida, como entes independien-
cepto normativo ha favorecido la difusión tes en la formulación de políticas, dedican-
y adopción de un punto de vista excesiva- do una significativa cantidad de sus propios
mente simplista, no sólo en relación con la recursos7 para financiar inversiones o pro-
presencia de un sistema en todas las regio- yectos científicos relevantes para la región.
nes, sino también con la hipótesis de que Este papel incluye la fijación independiente
estos sistemas pueden ser modelados en de la agenda y las prioridades de interven-
gran medida por la intervención de las po- ción y la creación de instituciones y meca-
líticas regionales. Además, si bien se ha nismos de coordinación de los actores de
elaborado un buen número de tipologías política. Mientras que, en los dos primeros
a fin de describir las distintas dinámicas y papeles, las regiones son sobre todo re-
los distintos componentes de los sistemas, ceptores pasivos de la política nacional, en
existen pocas herramientas que describan los dos últimos las autoridades regionales
la interrelación entre los actores regionales asumen una función más activa o indepen-
y las políticas a distintos niveles. En el epí- diente en la formulación de políticas.
grafe siguiente tratamos de subsanar esa
Fritsch y Stephan (2005) señalan que el
deficiencia
papel activo de las regiones en la política de
innovación no es una cuestión de «sí o no»,
sino que lo que hay que analizar es el grado
5. LAS REGIONES COMO
y el modo, es decir: ¿qué se está regionali-
‘ESPACIOS’ DE POLÍTICA
zando (los objetivos, el diseño, la ejecución,
Ya hemos argumentado que es probable
7 Aunque estos recursos «propios» proceden con
que los patrones regionales de innovación frecuencia de instancias más altas de gobernanza y
se vean influenciados por políticas formu- suelen conllevar compromisos políticos.
La relevancia del concepto ‘sistema regional de innovación’ para la formulación de la política de innovación

la financiación de las políticas)? ¿Cómo? es decir, los efectos territoriales no forman


¿Hasta qué punto? Aquí conviene hacer parte de sus objetivos explícitos. Sin em-
una advertencia adicional: las regiones pue- bargo, los efectos territoriales de esas polí-
den no ser únicamente «escenarios» de la ticas pueden ser más significativos que los
instrumentalización de las políticas nacio- de las políticas que buscan promover explí-
nales, sino también los beneficiarios o per- citamente el desarrollo económico regional.
judicados involuntarios de las políticas es- Estas políticas pueden tener distinta reper-
tablecidas en otros niveles de gobernanza, cusión dentro de una misma región y en-
efectos que con frecuencia determinan la tre unas regiones y otras (Stenberg, 1996). 161
dirección y el alcance de las propias estra- Esta premisa no es aplicable únicamente
tegias regionales posteriores. Además, las a la política científica y de innovación, sino
diferentes funciones no tienen por qué ser también a políticas sectoriales como las de
excluyentes: las regiones pueden desem- defensa, energía o salud.
peñar simultáneamente varios de los pa-
peles descritos por Perry y May en relación Las regiones (o subregiones) pueden ser
con distintos elementos de la política ge- también «espacios objetivo» a los que es-
neral de innovación. Las regiones pueden tán destinadas políticas nacionales y su-
ser simultáneamente escenarios pasivos de pranacionales y pueden ser objeto de dis-
algunas políticas fijadas a otros niveles, al criminación positiva con el fin de fomentar
tiempo que son codiseñadores de determi- su desarrollo. Las políticas nacionales y su-
nadas políticas que afectan a su territorio y pranacionales de desarrollo regional, rege-
actores independientes en el caso de otro neración y cohesión territorial establecen
conjunto distinto de políticas. objetivos y umbrales de desarrollo con arre-
glo a los cuales un territorio concreto reci-
Partiendo de la aproximación teórica de be ayuda financiera para alcanzar dichos
Perry y May, podemos considerar la región objetivos. Los territorios convertidos así en
como un territorio compuesto por múltiples objetivos reciben una financiación signifi-
«espacios» que se superponen, en los que cativamente mayor que otras regiones. Sin
se aprecian los efectos de las políticas. En embargo, las ayudas no siempre tienen una
primer lugar, podemos identificar regiones incidencia real y los efectos de esa desig-
como espacios de movilización de recur- nación como objetivo de una política pue-
sos, de fijación de prioridades, de creación den ser insuficientes para contrarrestar la
institucional, de coordinación de políticas incidencia de otras políticas y dinámicas
y de gobernanza, así como de aprendiza- nacionales. Existe otro tipo más de actua-
je institucional, de inteligencia estratégi- ción que conforma nuestro cuarto y último
ca y de formación de capacidad para lo- escenario: el que utiliza deliberadamente
grar los objetivos de desarrollo de la región. espacios regionales como plataformas es-
Esto puede incluir un conjunto de políticas tratégicas para llevar a cabo políticas que
más amplio o más reducido y distintos ni- contribuyan al crecimiento nacional gene-
veles de descentralización. Las regiones ral. Algunas políticas precisan una platafor-
son también espacios en los que se dejan ma o espacio apropiado para su puesta en
sentir los efectos de políticas a otros nive- práctica. Los gobiernos nacionales pueden
les de gobernanza. Las políticas tecnológi- elegir una ubicación concreta para una po-
cas tradicionales suelen ser «aespaciales», lítica piloto o experimental o pueden po-
Elvira Uyarra, Kieron Flanagan

ner en marcha una competición entre re- do destacadas bolsas de pobreza. Aproxi-
giones para decidir cuál es el mejor lugar madamente el 70% de la población activa
para aplicar una política concreta y con- trabaja en el sector servicios, en conso-
ceder una financiación específica (como el nancia con las cifras nacionales. Liverpool
concurso BioRegio en Alemania o los «Po- también ha perdido buena parte de su te-
les de Competitivité» en Francia) o simple- jido industrial y en la actualidad disfruta de
mente una «etiqueta» (como las «science una recuperación económica, más bien
cities» del Reino Unido). Las autoridades re- modesta.
gionales pueden desempeñar una función
importante en la gestión y puesta en fun- En los últimos años, en el Reino Unido
cionamiento de la política (puede vender- se ha producido una creciente descentrali-
se eficazmente como una política regional), zación de la política económica en favor
pero la incidencia real que se trata de lograr de regiones subnacionales. El Reino Unido
es una contribución a los objetivos de cre- está formado por nueve regiones de Ingla-
cimiento de la economía nacional. terra, a las hay que sumar Escocia, Gales
e Irlanda del Norte. Estas últimas cuentan
con administraciones propias y poder le-
6. ESTUDIO DE CASO: gislativo que se desarrolla en los parlamen-
EL NOROESTE DE INGLATERRA tos regionales y tienen transferidas las
competencias relativas a las políticas de
El caso del noroeste de Inglaterra ilustra desarrollo económico. Algunas competen-
las múltiples dinámicas políticas que afec- cias relativas a la promoción económica se
tan a un territorio concreto y las posterio- han transferido también a las regiones de
res estrategias e iniciativas que los actores Inglaterra, aunque sin transferencia políti-
regionales ponen en práctica para com- ca (con la excepción de Londres y su zona
plementar o compensar sus efectos. Con metropolitana —Greater London—, que
6,8 millones de habitantes, el noroeste de cuenta con un sistema propio). Las Agen-
Inglaterra (región NUTS I) es la tercera re- cias de Desarrollo Regional (ADR) inglesas,
gión más poblada del Reino Unido, des- creadas formalmente en abril de 1999, son
pués de la región sudoriental y de Londres responsables de la promoción del desarro-
(el 11,4% de la población del Reino Uni- llo económico y la regeneración de sus re-
do vive en el noroeste). La región del no- giones. La introducción de un «fondo úni-
roeste de Inglaterra está dividida en cinco co» de financiación en 2002 dio a las ADR
subregiones (regiones NUTS II): Cheshire, una sustancial flexibilidad de financiación
Cumbria, Greater Manchester, Merseysi- para responder a las prioridades regiona-
de y Lancashire. Manchester y Liverpool les. La fórmula por la que se fija la financia-
son las dos ciudades más importantes de ción de las ADR prima a las tres regiones
la región. Como muchas otras ciudades del norte debido a su mayor nivel de po-
industriales, Manchester se ha visto afec- breza, lo que se traduce en recursos públi-
tada por el declive de las industrias tradi- cos discrecionales adicionales para estas
cionales y ha sufrido una primera reestruc- regiones. Las ADR también pueden movili-
turación económica de gran profundidad y, zar fuentes adicionales de financiación en
más recientemente, un cierto renacimiento estas regiones, como los Fondos Estructu-
urbano, aunque la ciudad continúa tenien- rales de la UE, que incrementan conside-
La relevancia del concepto ‘sistema regional de innovación’ para la formulación de la política de innovación

rablemente los presupuestos de las ADR tintas regiones» (HM Treasury, 2007). Este
(OCDE, 2008). objetivo está vinculado a una agenda más
amplia del Ministerio de Economía, que as-
En el tiempo transcurrido desde su crea- pira a mejorar la productividad de todas
ción, las políticas regionales de las ADR las zonas del Reino Unido, centrándose en
han adquirido un carácter más estratégi- cinco áreas o motores prioritarios: la inver-
co, siguiendo los enfoques de crecimiento sión, la capacitación y el capital humano, la
endógeno basado en la innovación. Estos innovación, la competitividad y la empresa.
enfoques se materializan en las Estrate- Por lo tanto, el interés de las políticas por 163
gias Económicas Regionales lideradas por la innovación regional está vinculado con el
las ADR, centradas en las prioridades de objetivo político nacional de elevar los nive-
desarrollo de la región. Con el tiempo, las les de productividad.
ADR han adquirido más responsabilidades
en el ámbito de la promoción del desarro- Así, la descentralización se justifica por
llo económico y la innovación. Después del el deseo de incrementar la calidad y la efi-
fallido intento de establecer parlamentos re- ciencia en la prestación de servicios pú-
gionales en las regiones inglesas en 2004, blicos y de alcanzar el desarrollo econó-
recientes informes gubernamentales (HM mico y reducir las diferencias regionales
Treasury, BERR y DCLG, 2007), parecen mediante la labor de las regiones partien-
sugerir de nuevo la conveniencia de trans- do de fortalezas autóctonas. La relevancia
ferir más responsabilidades políticas y de fi- política de las regiones puede considerar-
nanciación del centro a las ADR, junto con se una prueba de la aparición de un sis-
el desarrollo de un conjunto más coherente tema «minimalista» de gobernanza multi-
de instituciones encargadas de la formula- nivel en la política de ciencia e innovación
ción de políticas a escala regional y local, y inglesa (Perry, 2007). Aunque los gobier-
la integración de las actuales estrategias re- nos regionales y locales pueden elaborar
gionales en una única estrategia que vincu- políticas de desarrollo económico, deben
le el crecimiento económico con la planifi- hacerlo en el marco de los parámetros fi-
cación territorial. jados por el gobierno central, un modelo
que Corry y Stoker han denominado «cen-
Pese a la progresiva transferencia de tralismo dirigista» (2002). Todo esto ha lle-
competencias y al desarrollo de un mo- vado a la OCDE a concluir en un recien-
delo de «fondo único» que permite a las
te estudio que «continúa existiendo cierta
ADR actuar con mayor discrecionalidad
ambigüedad sobre si el nivel regional se
en lo referente a las prioridades de gasto,
considera un socio en el ámbito de la for-
las agencias trabajan dentro de un mar-
mulación y aplicación de políticas o sim-
co nacional de objetivos formales, los ob-
plemente un área de aplicación y desarro-
jetivos del Acuerdo de Servicios Públicos
llo de políticas públicas diseñadas desde
(PSA targets) El objetivo más importante
el centro» (p. 137).
que afecta a la política regional es el objeti-
vo del Gobierno de «mejorar los resultados Al mismo tiempo, ha salido a la pales-
económicos de todas las regiones inglesas tra un nuevo planteamiento de los deba-
y reducir las diferencias existentes entre las tes sobre transferencias de competencias
tasas de crecimiento económico de las dis- y descentralización de las políticas y la go-
Elvira Uyarra, Kieron Flanagan

bernanza de la innovación a las «ciudades gión (Flanagan et al., 2007). En la región del
región» (Harding et al., 2006). Una recien- noroeste de Inglaterra se lleva a cabo una
te manifestación de la agenda sobre «ciu- notable labor de I+D en grandes empresas
dades región» es la denominación Science farmacéuticas tradicionales, a la que ahora
City («Ciudad de Ciencia»), una iniciativa del se ha unido un creciente sector de ciencias
Gobierno central que ha concedido esa eti- biológicas. El motor para la conservación
queta a algunas ciudades del Reino Unido de una significativa presencia de la I+D en
(incluido Manchester8 en la región del no- estos sectores ha sido el Servicio Nacional
roeste de Inglaterra). Sin embargo, la racio- de Salud que se ha destacado como clien-
nalidad de este planteamiento no es tanto te único de productos farmacéuticos (y úni-
la transferencia de políticas sino la conse- co socio en las pruebas clínicas realizadas
cución de objetivos económicos nacionales en el Reino Unido de nuevos productos far-
de crecimiento y productividad (Harding et macéuticos). Por lo tanto, la política sani-
al., 2006). El informe sobre el estado de las taria nacional ha desempeñado la función
ciudades de 2006 (DCLG, 2006) aboga por adicional de política industrial para el sector
el refuerzo de las economías de las ciuda- farmacéutico. El destacado cluster de de-
des como «principal propulsor de la política fensa y aeroespacial de la región también
económica nacional» y se centra especial- se beneficia del elevado gasto que tradicio-
mente en el papel de las ciudades región nalmente hace el Reino Unido en I+D en el
como motor de la economía nacional. ámbito de la defensa y la seguridad. Por úl-
timo, la región del noroeste de Inglaterra es,
Sin embargo, los esfuerzos destinados
de facto, la base de operaciones de la in-
a promover el potencial endógeno de las
dustria nuclear del Reino Unido.
regiones a través de políticas regionales
de innovación formuladas en el marco de
La política regional de innovación tiene
la estrategia económica regional, unidos a
poco margen de maniobra para influir direc-
la capacidad de la región para movilizar fi-
tamente en las políticas que afectan a estos
nanciación nacional o comunitaria adicio-
sectores, cuya fuerte implantación en la re-
nal, pueden no ser suficientes para con-
gión eleva por sí sola el gasto del sector pri-
trarrestar las repercusiones en la región de
vado en I+D en la región a niveles superiores
otras políticas o estructuras de asignación
a la media nacional (aunque, al mismo tiem-
de financiación neutrales territorialmente o
po, el gasto del sector público es inferior al
«aespaciales». Éstas incluyen no sólo po-
promedio nacional, ya que tiende a centrar-
líticas nacionales de ciencia, sino también
se en el denominado «Triángulo dorado» que
políticas ajenas al ámbito de la innovación,
forman Oxford, Cambridge y Londres). En
como las políticas de sanidad, energía y
ausencia de estos mecanismos para influir
defensa, que tienen gran influencia en las
en la innovación de los sectores farmacéu-
empresas mas intensivas en I+D de la re-
tico, energético y aerospacial, la actuación
política regional acaba por centrarse en la
8 Manchester Science City se pone en práctica
actuación de grupos de interés regionales
como uno de los programas de otra organización y, cuando ésta no existe, en acciones regio-
de desarrollo económico e innovación, Manchester nales compensatorias. Los efectos de las
Knowledge Capital, cuya finalidad es promover el de-
sarrollo económico basado en el conocimiento en la
políticas sobre estos tres importantes sec-
ciudad región de Manchester y su área metropolitana. tores consumidores de I+D constituyen una
La relevancia del concepto ‘sistema regional de innovación’ para la formulación de la política de innovación

importante preocupación para la región no- (OECD, 2008, p. 154), en lugar de conside-
roccidental de Inglaterra y esta «vulnerabili- rarlos como entidades que deben su origen
dad» a los cambios económicos y políticos y que todavía están impulsadas por políti-
exteriores es, de una forma muy real, una cas nacionales. Reconocer las repercusio-
importante inquietud que impulsa la políti- nes territoriales de las políticas nacionales
ca regional de innovación. La imagen que es el primer paso para concebir estrategias
nos presenta el caso del noroeste de Ingla- más realistas, coherentes y mejor coordina-
terra es, por tanto, una imagen compleja das en todos los niveles. Comprender los
y dependiente de múltiples niveles y acto- distintos resortes de intervención en la diná- 165
res, en la que las nuevas políticas regionales mica regional de innovación y en qué nive-
de innovación desempeñan, en el mejor de les de gobernanza y en qué ámbitos de po-
los casos, una función compensatoria o de líticas residen debe ser clave para identificar
apoyo de las decisiones tomadas a distintos oportunidades para influir en las decisiones
niveles de gobernanza, por distintas razo- y aprobar medidas políticas más realistas y
nes y en distintos momentos. mejor orientadas.

La teoría de los SRI ha creado una im-


presión generalizada no sólo de que las 7. CONCLUSIONES
actuaciones a escala regional pueden, en
principio, mejorar el carácter sistémico de El concepto de «sistemas regionales de
la innovación regional, sino de que, en la innovación» está consolidado en el discur-
práctica, en el ámbito regional existan su- so sobre innovación y desarrollo económi-
ficientes resortes y los resortes clave para co tanto en el mundo académico como en
llevarla a cabo. Incluso con mayores facul- la práctica de las políticas públicas en este
tades y recursos, es muy improbable que ámbito. Como ocurre con la noción de sis-
los encargados de la formulación de políti- temas de innovación en general, el uso de
cas regionales de la región del noroeste de este concepto se ha expandido significati-
Inglaterra puedan esperar influir en los sec- vamente, trascendiendo su inicial finalidad
tores responsables de la intensa actividad analítica, la de contribuir a comprender los
de I+D de la región descritos anteriormente, factores que podrían explicar las diferencias
estando los tres impulsados en gran me- observadas en estudios comparativos de
dida por decisiones políticas tomadas en desarrollo regional. Como consecuencia de
otros ámbitos y a otros niveles de gobierno. la particular evolución del concepto y de las
No deja de sorprender, por tanto, que el in- múltiples influencias teóricas subyacentes,
forme de 2008 de la OCDE sobre la innova- no existe una aproximación teórica preva-
ción en el norte de Inglaterra no mencione leciente, sino una serie de nociones relacio-
la influencia de las políticas nacionales de nadas, pero distintas y, en algunos casos,
sanidad, defensa o energía en la creación contradictorias. A nuestro juicio, el enfo-
de clusters de innovación ni en los resulta- que de los SRI ha adquirido la condición
dos económicos de la región. La causali- de concepto ambiguo (fuzzy) en el sentido
dad se invierte incluso al denominar a los propuesto por Markusen. Al contrario que
clusters de estos sectores «ejemplos de ac- Markusen, los autores reconocemos que
tivos regionales que pueden ser relevantes los conceptos ambiguos pueden resultar
en el contexto de las políticas nacionales» atractivos a los responsables de la formu-
Elvira Uyarra, Kieron Flanagan

lación de políticas y señalamos que el con- Las funciones que las regiones desem-
cepto «sistema regional de innovación» pa- peñan como espacios idóneos para con-
rece actuar como un útil objeto frontera que cebir y aplicar políticas nacionales y re-
relaciona el discurso académico y político. gionales, así como la complejidad del
No obstante, aceptamos que basar las po- conjunto de políticas en múltiples ámbitos
líticas en conceptos ambiguos es peligro- y niveles que actúa en estos espacios,
so y sostenemos que convendría mejorar la es una realidad que difícilmente se pue-
comunicación entre los avances teóricos y de encerrar en el concepto de sistema,
la práctica de la política de innovación. como algo cerrado y claramente delimi-
tado. No es nuestra intención rechazar la
La utilización del término «sistema regio- utilidad y relevancia de los estudios empí-
nal de innovación» implica la existencia de ricos de SRI a la hora de comprender los
un sistema, ya sea de reciente aparición, factores económicos, institucionales y so-
operativo o inoperativo, y concede auto- ciales regionales que inciden en la confi-
máticamente importancia a determinados guración de los sistemas de innovación.
concepciones. La utilización metafórica del Sin embargo, las características específi-
«sistema» puede fomentar una visión de las cas de cada contexto regional hacen muy
economías regionales como sistemas más difícil extraer y aplicar enseñanzas polí-
o menos cerrados. Al mismo tiempo, es ticas de una jurisdicción en otra, por lo
preciso adoptar expectativas más realistas que debemos tener especial cuidado so-
sobre la acción política a la vista de la exis- bre qué lecciones extraemos, para la apli-
tencia de fuertes limitaciones, tales como cación de políticas, de casos en los que
la complejidad y las relaciones de interde- el éxito no se debió fundamentalmente a
pendencia de las políticas, la multiplicidad una política regional deliberada. También
de niveles de gobernanza, las asimetrías en este caso será clave un enfoque di-
de información, la racionalidad limitada en námico, ya que las enseñanzas que po-
la toma de decisiones y las restricciones de demos aprender girarán seguramente en
recursos y capacidades (por no hablar de la torno a sendas de desarrollo, y no a polí-
influencia de intereses políticos). ticas actualmente en aplicación.
La relevancia del concepto ‘sistema regional de innovación’ para la formulación de la política de innovación

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