LA SIMULACION DE LA LOCURA

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La diferencia es siempre cuestin de pocas
palabras,
dice agonizante, escribe Kafka tendido en
el lecho.
Ricardo
Piglia

Respiracin artifcial
En cierta ocasin, Lacan puso un ejemplo singularmente llamativo
para ilustrar la especfca operacin llamada de lectura. Lacan
interrogando a la psicosis se preguntaba !"u# es la lectura$ % !cmo
farnos de "ue se lee un sue&o correctamente$ El problema comienza
desde el momento en "ue 'a no nos famos del aspecto sentimental del
decir ' sostenemos "ue el sujeto se defne en la relacin entre dos
signifcantes.
(ecordemos el ejemplo dado por Lacan en ese entonces, o sea el
)* de abril de +,*-. .n funcionario tom un papel escrito "ue le estaba
destinado ' se dispona a leerlo mientras lo sostena frente a s dado
vuelta /como se dice 0patas para arriba12. 3on seriedad, este personaje
hizo lo "ue corresponda, o sea, articul lo necesario como para no
pasar un ridculo. Le', le' "ue el portador del documento estaba
acreditado. 4imulaba "ue lea, pero lea correctamente lo necesario.
En el polo opuesto est5 el caso de "uien sabe un te6to de
memoria, lo cual no acredita "ue se lo ha'a leido. 3omo vemos, el
primero simulando acredit al portador /#l mismo se acreditaba2,
mientras "ue del segundo no se podra dar cr#dito. Estos ejemplos, tan
sencillos en su apariencia, llevan a preguntarse acerca de la cuestin
de la lectura, en tanto e6periencia "ue comporta lo literal, a la letra, no
en tanto representara un ajuste con una verdad "ue 'a estara all,
como una realidad, sino como una variada gama de efectos de lectura,
"ue van desde leer lo ilegible, lo ausente, lo mutilado, lo evidente o en
la inversin de la posicin de una letra. 4i de lo "ue se tratara es el de
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Este artculo desarrolla el argumento principal de un trabao presentado en el colo!uio de la e"l"p" #Le suet
a$ec son secretaire%& en 'aris el () de octubre de ())("
tomar distancia de una lectura dominada por el sentido, entonces, !"u#
le' ese funcionario cuando haca "ue lea$
7esde este punto de partida plantearemos otorgarle un lugar al
hecho de la simulacin. 8frmaremos 9advertidos de la posibilidad de
tener "ue rectifcar la afrmacin: de "ue la simulacin ' el mimetismo,
cada una resulta ser una forma en "ue el sujeto se da a una
identifcacin "ue anude de cierta manera su posicin subjetiva.
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